Inequívoco
El chico inspiró profundamente intentando llenarse de un valor que sentía inexistente en él. Nunca mas volvía a apostar con sus amigos, se ajustó la chaqueta a su cuerpo y acomodó su bufanda alrededor de su cuello. El frio volviendo su aliento en un espeso vaho.
La campanilla de la puerta anuncio su llegada mientras su cuerpo se llenaba del calor que aquel lugar proporcionaba y su nariz se inundaba del delicioso olor a café que llenaba el aire. Vio como unos ojos se posaban sobre él y no pudo evitar sonrojarse.
-¡Bienvenido!- escuchó aquella masculina voz con tono tranquilo y cálido. Jaejoong dio una pequeña reverencia e intentó llegar hasta una mesa, allí un chico de cabello anaranjado le sonrió y amablemente le preguntó que deseaba ordenar. Jaejoong pidió un frapuccino.
Sus ojos vagaban entre los recodos del lugar, nunca antes había entrado, siempre pasaba por fuera. Era pequeño pero lindo, las mesas estaban limpias y los tonos claros del lugar lo iluminaban armoniosamente. Había mas personas en otras mesas que conversaban amenamente y Jaejoong comenzó a ponerse nervioso, no debía olvidar porque se encontraba allí. El chico pelirrojo llego luego de unos minutos con su café.
Levantó la taza sintiendo como su calidez traspasaba la fría temperatura de sus manos y lentamente comenzó a beber el liquido, quería demorar el momento lo mas que pudiera. Inevitablemente sus ojos se dirigieron a la caja donde aquel chico que fuese el primero en saludarlo se encontraba. Era alto, moreno y esbelto a pesar de que su cabello era de un rubio acaramelado. Jaejoong sonrió al saber que él no era el único que se teñía el cabello.
Sorbió un poco mas de su taza hasta que el contenido en su interior se acabó. Volvió a respirar profundo y caminó hasta la caja registradora.
-Buenas tardes- saludo cordialmente intentando no sonar como un robot. El chico le sonrió mostrando una perfecta hilera de blancos dientes y Jaejoong se sintió mas nervioso.- Yo…- las palabras murieron en su boca y sintió como se quedaba de piedra
-¿Quieres pagar lo que comiste?- inquirió el muchacho confundido al ver la turbación del otro. Jaejoong sacudió la cabeza
-¡No! Quiero decir si, pero además me gustaría pedirte un favor- habló rápidamente antes de que el valor se escapara de su cuerpo. El chico le prestó atención- ¿Te gustaría salir conmigo? Confesarse
El chico sonrió, deslumbrando de nuevo a Jaejoong con su dentadura.
-No- murmuró suavemente antes de volver relajar su rostro en una mueca serena- Serian 5 wons- dijo estirando la mano para recibir el dinero del café.
Jaejoong jamás se había sentido tan patético como en ese momento, sentía su cara arder debido a la vergüenza y como un autómata pago lo que aquel chico le había dicho, para luego salir corriendo de allí olvidando su cambio.
******************************
-¿Y bien, como te fue?- pregunto un chico de cabello azabache mientras caminaba con Jaejoong por la nevada calle.
-Realmente no quiero hablar del tema- murmuro desanimado. Ya habían pasado dos días y aún no podía olvidar la horrible sensación de rechazo que había sentido cuando aquel chico dijo: “No”
Yoochun lo miro confundido pero luego de hilar sus pensamientos se dio cuenta.
-Oh, ya veo. Te dijo que no… bueno Jae no puedes pedir que todos los chicos lindos sean gays- le consoló palmeándole el hombro. Jaejoong se molestó-
-¡Tu y Hyun Joong fueron los que me dijeron que fuera a hablar con él! ¡Yo no quería ir!- grito exasperado. Yoochun tan solo lo miró
-Pero Jae, era obvio que ese chico te gustaba, siempre que pasábamos por fuera de aquel café tus ojos no se despegaban de él. Además vele el lado positivo, ya lo hiciste, ahora da vuelta la hoja y sigue tu vida.
-Ah, idiota- chilló Jaejoong adelantando el paso y llegando a la otra esquina antes que su amigo
********************************
El día había estado horriblemente frio, y lluvioso. Jaejoong solo quería llegar a su casa luego de un largo día en la universidad y dormir. Como siempre, pasó por fuera de aquel café después de todo era el único camino para llegar a su casa… pero se detuvo frente a la puerta. ¿Entrar o no entrar? Se moría por un café, y no era tan tarde…
“No”
Oh, claro el estaría allí y probablemente haría como si nada hubiera pasado. O quizás le hubiera contado lo ocurrido a aquel mesero pelirrojo y a todos sus amigos sobre su cruel y triste rechazo. Retrocedió un paso alejándose de la puerta. Ya demasiada vergüenza había pasado como para volver a entrar a aquel lugar.
-¡Changmin, espera!- el grito de aquella voz tan conocida hizo que Jaejoong se paralizara. Volteo lentamente y vio como el chico que lo rechazo salía corriendo detrás de otro un poco mas alto que él.
-¡¿Qué?! ¡¿Qué mierda quieres de mi Jung Yunho?! ¡Por mi esta bien, es tu vida has lo que quieras con ella! ¡Pero ten presente que es estúpido que lo sigas queriendo cuando fue un bastardo contigo! ¡Deja de creer que esto es como esos estúpidos mangas! ¡Él no te ama! ¡Si te amara él jamás…- la voz de aquel chico que respondía al nombre de Changmin se detuvo al toparse con la mirada de Jaejoong. Y este no supo donde esconderse- Disculpa ¿se te perdió algo?- el tono amenazante de aquel sujeto hizo que Jaejoong se disculpara atropelladamente
-¡L-lo lamento n-no quise escuchar nada, yo solo pasaba por aquí!- dio una gran reverencia y salió lo mas rápido que pudo de allí sintiendo un amargo sabor en la boca al tener como ultimo recuerdo los llorosos ojos de aquel que ahora sabia, se llamaba Jung Yunho.
************************************
-¡Ósea que si es gay!- grito Yoochun luego de que Jaejoong le narrara su descubrimiento.
-¿Por qué te oyes tan feliz?- inquirió Kim confundido, sin dejar de pensar en la deprimente mirada de Yunho.
-Porque eso significa que tienes oportunidades con él- respondió como si fuera lo más obvio del mundo.
-Por si lo no recuerdas él me rechazo, Yoochun. Además se veía muy afectado por las palabras de aquel chico, aun esta enamorado de aquella persona que tanto daño le hizo… espera ¿No me habías dicho que lo olvidara y siguiera con mi vida?
-Si, pero piensa ¿Crees que fue casualidad que escucharas aquella conversación? ¡Es destino Jae! ¡D-E-S-T-I-N-O! – Yoochun deletreo la palabra como si fuera un retardado y Jae le dio un golpecito en la cabeza.
-Deberías dejar de leer tantas novelas románticas
***********************************
Jaejoong era un masoquista e idiota, estaba científicamente comprobado.
¡¿Qué demonios hacia de nuevo en aquella cafetería?! Antes de que se hubiera dado cuenta el mesero pelirrojo lo había visto afuera congelado de frio y lo había invitado a pasar, a pesar de sus objeciones. Y ahora allí estaba, sentado en una mesa con los nervios a flor de piel.
Llegó a saltar de su silla cuando escuchó un portazo y una voz que se le hacia familiar
-¡Tae, dame pastel! ¡Estoy muerto de hambre!- Jaejoong se volteó para mirar al maleducado que entraba de esa forma y se topó con aquel chico de nombre Changmin.
-Oh, pero si es el chico que escucha conversaciones ajenas- farfulló con molestia el chico alto mientras se sacaba su abrigo y se sentaba en una mesa
-¡Yo no escucho conversaciones ajenas! Fue una coincidencia…yo.
-Hola, buenos días para ti también. Idiota insensible ¿Es muy difícil saludar antes de pedir comida?- el mesero pelirrojo frunció el ceño y sus mejillas se inflaron. Jaejoong pensó que aunque sonaba enojado, su actitud no intimidaba mucho.
Changmin sonrió y se levanto de un salto tomando de la cintura a aquel pelirrojo. Jaejoong se sintió nervioso al ver esa intima escena
-Buenos días, Taemin- murmuro con burla para luego besar los labios de aquel chico. Jaejoong casi se muere a tragándose con su propia saliva.
El pelirrojo empujo con sus brazos a Changmin y lo fulminó con la mirada
-Me encanta lo poco romántico que eres Changmin, es por eso que te amo- a pesar del tono sarcástico en sus palabras Jaejoong sintió un leve deje de cariño en la oración. Cuando los ojos de Taemin se toparon con los estupefactos de Jaejoong sus mejillas se sonrojaron
-¡Oh, olvide que estabas aquí! ¡Perdóname, en seguida traigo tu café!
-No es necesario yo, ya me iba- pero su frase no fue oída por el pelirrojo que ya se había perdido camino a la cocina.
El tenso ambiente se notó cuando el chico alto lo miró despectivamente.
-No se porque mi novio prefirió darte un café a ti antes que a mi… ¿Quién eres?- inquirió con molestia. Jaejoong lo miro sin saber muy bien que decir.
-Soy un cliente- fue lo único que se le ocurrió responder. Changmin lo miro con fastidio antes de apoyar su mano sobre la mesa y sacar un libro de su mochila para comenzar a leer. Jaejoong se sintió ofendido al verse ignorado.
Un sonido parecido al ringtone de un celular comenzó a sonar y Jaejoong se apresuró a responder.
-Yoochun, estoy por llegar…. Si, no te preocupes… Ok, nos vemos allá. Bye- Jaejoong guardo su celular y ordeno sus cosas, dispuesto a irse
-No dejaras a Taemin con las manos estiradas, no es cortes- murmuro Changmin sin despegar su mirada del libro que leía con interés.
-Lo se pero realmente me tengo que ir- rebusco en sus bolsillos, buscando su billetera- aquí esta el dinero, dile que lo lamento y se lo agradezco.
Jaejoong desapareció por la puerta, mientras Changmin esbozaba una sonrisa.
-Ya puedes dejar de esconderte Yunho, ya se fue- farfullo con arrogancia mientras ahogaba una carcajada. El moreno apareció debajo del mesón principal con las mejillas sonrojadas e intentando disimular su infantil gesto.-Eres un idiota- se burlo- Creo que hace tantos años que no se te declaraban que ahora no sabes como manejar una situación así… es un chico lindo, un poco estúpido pero lindo ¿Por qué le dijiste que no?
Yunho se rasco la cabeza nervioso y aun con las mejillas sonrojadas.
-Ni siquiera lo conozco, además me pone demasiado nervioso…- murmuró apenado. Changmin río con más ganas.-Es demasiado lindo para mí.
-Oh vamos, feo no eres Yunho. Además para mi ambos son igual de tarados, deberías intentarlo
Yunho suspiró
-No lo se… -se perdió en sus pensamientos antes de asimilar el insulto- ¡Eh! ¿A quien le dices tarado, niñato?
************************************
Jaejoong detestaba las ideas descarriadas de Yoochun. Y este era en definitiva las mas grande que había tenido hasta ahora.
-Oh, enserio… si, a mi también me a pasado- su amigo le sonrió con coquetería a aquel hombre que tenia sentado delante suyo mientras Jaejoong intentaba parecer casual sin mucho resultado.
-Y tú Jaejoong ¿Jamás te ha sucedido?- pregunto el acompañante del amigo de Yoochun. Jaejoong no contestó, demasiado perdido en sus pensamientos. Una patada en su rodilla provocó en él un pequeño sobresalto y que en el proceso volteara el vaso con agua sobre el hombre que hace poco le había dirigido la palabra.
-¡Oh, lo lamento mucho!- agarró una servilleta en un intento por secar la corbata de aquel hombre.
-No es nada, con su permiso iré al baño- ambos hombres se levantaron y fueron juntos al lavabo. Jaejoong quiso estrellar su cabeza sobre la mesa y de paso golpear a Yoochun por golpearlo.
-Vamos Jae, te conseguí esta cita para que te distrajeras- le regañó el moreno.
-No es cierto, solo me trajiste porque el chico al que te intentas ligar te pidió una cita doble y no tienes mas amigos que invitar ya que Hyun Joong esta en Japón.
-Que aguafiestas eres…- murmullo Yoochun con el ceño fruncido.
Luego de dos horas de incomodidad, la cita se dio por finalizada. Ambos hombres se ofrecieron a llevarlos a sus respectivos hogares, Yoochun aceptó de inmediato pero Jaejoong se negó, no era una chica como para necesitar ese servicio. Pero su cita siguió insistiendo aun cuando Yoochun con su pareja ya se habían ido.
-En serio muchísimas gracias pero…- las palabras de Jaejoong se detuvieron al divisar como al otro lado de la vereda Yunho venia caminando con un chico de cabello rubio platinado. Por un instante cruzaron sus miradas.
Yunho paso a centímetros del brazo de Jaejoong sin decir nada, como el par de extraños que eran.
Abruptamente Jaejoong sintió que el corazón se le encogía y cuando su cita volvió a insistir en llevarlo a su casa, no tuvo fuerzas para negarse.
********************************
Dos meses ya habían pasado desde que Jaejoong no pisara la cafetería. No había cambiado mucho, aun le seguía gustando Yunho pero se había dado por vencido. Él lo intento pero el chico se negó ¿Qué más podía hacer? Además siempre vendrían mas chicos adelante, incluso puede que mas apuestos incluso.
Yoochun lo había llamado para presentarle a su nuevo novio de turno y a pesar de que Jaejoong ya se había rendido con que su amigo encontrará una pareja estable se armó de una sonrisa y se vistió presentable para presentarse como el mejor amigo de ese lunático. El frio del invierno aun no se iba dejando un manto blanco sobre los lugares que su nívea mano tocaba y Jaejoong debió ser cuidadoso de no caer sobre el piso. El parque estaba lleno de personas y al moreno le costó un par de minutos encontrar a su amigo entre la multitud.
-¡Yoochun!- saludó levantando la mano. Su amigo le devolvió el gesto y se apresuró donde él tomado de la mano de un chico rubio platinado… muy parecido al chico con el que Yunho…
Oh, vaya…
-Jae, tardaste. Bien, Kim Jaejoong él es Kim Junsu mi novio. Junsu, él es mi mejor amigo- ambos sonrieron y se dieron la mano. Por algún extraño motivo a Jaejoong no le gustó recordar aquel encuentro hace dos meses, y se sintió nervioso, pero probablemente aquel chico ni se acordaría de él, es decir ¿Por qué debería…
-¡Oh, ya se porque tu rostro me es familiar! ¿No fuiste tu el que fue rechazado por Yunho?- Ouch, eso había dolido. Jaejoong compuso una sonrisa y maldijo su suerte.
Si, él fue el rechazado
-Disculpa mi comentario, es solo que recuerdo que justamente estábamos hablando de ti con Yunho cuando te vimos con un chico en la calle. Una lastima que ya tengas novio, Yunho me estaba comentando aquel día que estaba comenzando a arrepentirse de haberte dicho que no…
¿Eh?
¿Había escuchado bien?
¡¿QUÉ?!
Jaejoong sonrío tétricamente
-Junsu ¿te molestaría mucho quedarte sin novio? – él chico lo miró sin comprender hasta que Yoochun salió corriendo siendo perseguido por Jaejoong.
-¡Ven acá ratón del demonio, todo por tus ideas estúpidas!
-¡Yo solo quería ayudar, que iba a saber yo que él se iba a arrepentir!
-¡Ahh, ven ratón, ven!
A Junsu la escena se le hizo de lo mas graciosa, Jaejoong le había simpatizado. Hubiera hecho una linda pareja con Yunho
***************************************
-Entiendo, entonces ese chico no era tu novio- comentó Junsu mientras los tres estaban sentados en los columpios de la plaza.
-Si, realmente lo había conocido ese día
-Ufff, pues eso es un alivio- Junsu sonrío- Últimamente Yunho a estado muy tenso, luego de que Changmin le dijera lo idiota que había sido por dejarte ir, recapacito mucho sobre eso. Y ahora prácticamente cruza los dedos para que te vuelvas a aparecer en la cafetería.
-Gracias por el dato pero creo que ya es demasiado tarde, además solo le pedí una salida… no es como si después de eso nos fuéramos a enamorar
-Puede ser pero el amor es raro. Conozco a Yoochun hace poco tiempo pero lo quiero mucho y aunque fue un poco precipitado hacernos novios, no me arrepiento de haberlo hecho. El tiempo es muy preciado y Yunho ya ha desperdiciado 2 meses…
********************************
Una mata de cabellos rojos corría de derecha a izquierda sirviendo pedidos en la cafetería mientras su novio estaba sentado mirándolo divertido
-¡Changmin deja de reírte como idiota y ayúdame con los pedidos!- gritó Taemin al borde del colapso. Changmin reprimió una carcajada
-Pero Tae, yo no trabajo aquí, además eres lo suficiente eficiente como para hacerlo por tu propia cuenta. ¡Hwaiting!- el pelirrojo apretó sus puños para no lanzarle una bandeja a la cabeza de su novio.
Yunho sonrió ante la escena. Esos dos nunca cambiarían, se querían de una extraña manera pero se notaba que Changmin daría lo que fuera por Taemin y viceversa. Después de todo, ya llevaban 2 años de relación. El moreno suspiró… si no se equivocaba si el jamás hubiera terminado su relación anterior habría cumplido 4 años de noviazgo. Pero el futuro es incierto y a pesar de que Yunho sufrió mucho aquella perdida y aún sentía ese vacío en su corazón… la herida ya estaba comenzando a sanar. Después de todo él no había sido culpable de nada, que el idiota lo hubiera engañado con otro era problema de él.
Y ya era tiempo de superarlo.
Yunho tomo un mandil y se lo amarró a la cintura, preparado para ayudar a Taemin antes de que este colapsara.
*************************
-Junsu no creo que sea una buena idea- Jaejoong intentaba zafarse del agarre del chico, pero a pesar de su delicada figura el rubio poseía bastante fuerza. Y Yoochun no componía una ayuda.
-No tiene nada de malo. Yunho no muerde- ya estaban a una calle de llegar a la cafetería y Jaejoong intentó por todos los medios huir pero ninguna excusa era lo suficientemente buena para Junsu.
Soló el sonido de la campana le dio a Jaejoong el aviso de su entrada. Cuando abrió los ojos (no supo en que momento los cerró) la primera imagen que captó fue la de Yunho sirviendo café.
-¡Hola chicos!- fue el alegre saludo de Junsu. Taemin y Changmin fueron los primeros en responder el gesto para que luego Yunho levantara la vista y se topará con Jaejoong, dejando caer la bandeja que tenia en sus manos.
-¡Lo- lo lamento mucho!- Yunho se disculpó con los clientes mientras recogía los desperdicios del suelo. Jaejoong no supo que decir o hacer
**************************************
Esto debía ser una broma…
Yunho suspiró y se sentó en el frio suelo del almacén donde guardaban los ingredientes. Necesitaba respirar, y calmarse. Aquel chico lo ponía demasiado nervioso, y a pesar de que la había prometido a Changmin que cuando se volvieran a ver le pediría una cita, no había podido. Las palabras se le habían trabado y había terminado botando el plato que tenia en sus manos.
Escondió su cabeza entre sus piernas, sintiéndose deprimido…
-¡Eh! ¿Dónde quieres que guarde esto…?- la puerta del almacén fue abierta y antes de que Yunho pudiera levantar la vista se escuchó un fuerte portazo y un chillido. Y sus miradas volvieron a encontrarse en una incomoda situación.
Y por la expresión de pánico del moreno Yunho pudo jurar que habían cerrado la puerta con llave. Solo él sabía la clase de retorcidos amigos que poseía.
-H-hola- fue el único murmullo que se escuchó por parte de aquel chico. Yunho se sonrojó violentamente y bajó la mirada.
-H-ola- su saludó también fue nervioso. Ninguno supo que decir, a pesar de que sus cerebros trabajaban a toda maquina intentando crear una frase o algo que le permitiera establecer un dialogo.
Hasta que Yunho cayó en la cuenta de que no conocía el nombre de aquel chico. E incluso ahora que lo pensaba, jamás se habían presentado formalmente.
Se armó de valor y se levanto del piso quedando unos centímetros mas arriba que el chico moreno. Estiró una de sus manos.
-Mi nombre es Jung Yunho- De acuerdo quizás no fue su idea mas brillante. El chico estrechó su mano.
-Kim Jaejoong- murmuró avergonzado.
************************************
-¿Crees que ya se hayan besado?- pregunto Yoochun mientras tenia su oreja pegada a la puerta del almacén. Junsu río.
-No Chun, no todos son tan rápidos como tu o Changmin- el moreno río ante aquella frase y besó cortamente a su novio en los labios. Taemin se sonrojó
-Oye, me haces sonar como alguien fácil- farfulló avergonzado. Changmin lo abrazó por los hombros.
-Ah, creo que no hay mucho avance entre esos dos. Como dije son un par de idiotas- comentó Changmin.- Así que mientras esperamos que algo pase, cuéntanos Junsu ¿como conociste a Yoochun?
********************************************
En el silencio del almacén Yunho comenzó a mirar a Jaejoong con detenimiento. Nunca lo había mirado por más de un minuto y se halló perdido en esa piel blanca, labios rojos y cabello negro. Logrando así que se pusiera más nervioso. Yunho nunca había sido bueno conquistando personas, la única relación que había tenido había iniciado por el interés de su pareja.
Jaejoong por su parte también había aprovechado el momento para mirar a Yunho. Y ahora estando mas cerca de él podía notar pequeños detalles, como aquel lunar sobre el labio que poseía o la forma en que los músculos debajo de su pollera se marcaban con cada movimientos que este hacia.
Era su imaginación o ¿estaba haciendo más calor?
-Lo lamento- Jaejoong miró a Yunho sin comprender.- Fui demasiado descortés al rechazarte de esa manera…
-Está bien, lo entiendo. No era lo que deseabas después de todo- respondió Jaejoong con una triste sonrisa. Yunho estuvo a punto de responder, de decirle que no había sido culpa de él.
-¡Oigan ustedes dos, me estoy haciendo viejo aquí! ¡Yunho podrías decirle de una buena vez a este idiota que de verdad te gusta y que te pone nervioso y toda esa mierda cursi! ¡Tengo hambre y Taemin no me traerá ningún pastel hasta que entre ustedes dos pase algo así que DISELO AHORA!- la gutural voz de Changmin se dejó oír por todo el lugar antes de escuchar un fuerte ruido.
-¡Maldito insensible lo arruinaste todo!- y la voz de Taemin también se dejó oír.
Un silencio abrumador atravesó el lugar antes de que las carcajadas de Jaejoong lo destruyeran. Yunho miró con curiosidad a aquel joven que tan atractivo se veía con su mano cubriendo su boca en un gestó mas que encantador. Y colmado de aquella gracia no pudo más que unirse al bello sonido de la risa de aquel que había logrado cautivarlo.
Cuando Junsu abrió la puerta del almacén no pudo evitar que una sonrisa se formara en su rostro al ver a Yunho y a Jaejoong riendo y mirándose divertidos, con las mejillas sonrojadas. Porque era obvio que esos dos terminarían juntos…
Luego del desastroso plan, Yunho invitó a todos a tomar café y pastel, lo cual Changmin agradeció profundamente. Se conocieron un poco mas, Yoochun y Jaejoong se presentaron como correspondía, y Junsu esclareció como había conocido a Yunho y a Changmin. Y a pesar de que a primera instancia Taemin se negó a contar su historia con Changmin al final termino cediendo al comentar que su historia no había sido muy diferente a la de Jaejoong.
A pesar de que no se conocían desde hace mucho, cualquiera persona que hubiera sido ajena a la escena hubiera apostado que todos ellos eran amigos desde hace años. Porque la conversación era amena y las miradas cálidas… oh, y por supuesto los suspiros escondidos también se dejaban entrever.
La noche se cernió mas rápido de lo esperado y uno a uno comenzaron a abandonar el local. A excepción de Jaejoong que se ofreció a quedarse a limpiar los platos con Taemin y Yunho.
-¡Tae, Tae tenemos que irnos!- gritó Changmin desde la entrada. Taemin gruño e hizo oídos sordos, pero los gritos de su novio volvieron con mayor intensidad siendo más difíciles de ignorar. El pelirrojo arrojó con ímpetu los platos logrando que Jaejoong se asustara. Pero antes de que el chico pudiera gritarle a su novio este apareció por la puerta y lo tomó por la cintura para luego acarrearlo en sus hombros como una carga. Taemin comenzó a gritar y patalear pero Changmin solo reía por la situación despidiéndose con la mano de Yunho y Jaejoong.
Y de nuevo ellos dos quedaron solos, solo que esta vez la situación era más liviana.
-Tienes unos grandes amigos- murmuro Jae, encargándose de secar los cubiertos. Yunho lo miró de reojo mientras enjuagaba los platos. Sonrío
-Lo se… Sin ellos yo jamás seria la persona que soy ahora- Yunho hizo una pausa, indeciso de contarle mas a Jaejoong de su vida personal pero cuando vio la sinceridad en la mirada ajena las palabras salieron fácilmente de su boca- Sin ellos yo jamás hubiera superado el termino de mi relación con WooHan
-Debiste quererlo mucho…
-Creo… creo que llegue a amarlo- el rubio sonrió con tristeza- pero ya vez, el sentimiento no era mutuo. A Changmin le costó meses darme a entender que yo no había tenido la culpa del quiebre, pero no fue fácil, siempre me pregunté: “¿En que fallé? ¿Qué me faltó darle? ¿Qué lo llevo a engañarme con otro?”
-No te conozco mucho Yunho, pero lo poco que he visto de ti… es que eres un hombre cálido, sincero y que si alguna vez te enamoraste puedo asegurar que en ese momento diste todo de ti. Tú eres especial, si él no supo valorarlo, no es problema tuyo…
Yunho sonrío, porque el también había pensado eso, exactamente las mismas palabras. Movió un poco las manos y mojó con intención a Jaejoong. Este chilló sorprendido y se alejó un poco.
-¡Yunho!
-Opps…- sonrió burlón
Jaejoong tomó un poco de agua y lo rocío en el rostro de Yunho. Ambos sonrieron y como los chicos que eran comenzaron una guerra de agua, corriendo y esquivando los ataques del contrario entre risas. A pesar de que el piso estaba mas que mojado y Yunho estaba consiente de que al día siguiente Taemin lo regañaría en ese momento no le importó, en ese momento solo le interesaba ver aquellos mechones negros pegados en la frente de Jaejoong junto a ese hermosa sonrisa de la cual había quedado prendado.
Durante un momento Jaejoong trastabillo y Yunho al ver aquella acción se acercó para evitar alguna caída provocando que ambos quedaran a pocos centímetros, sintiendo la humedad de la ropa ajena. Se miraron a los ojos, sonrojados y con la respiración agitada. Y aunque el momento fue mágico y propicio para un acercamiento mas intimo, ninguno se movió un ápice, tan solo disfrutaron de verse reflejados en la mirada del contrario para luego separarse entre risas ocultas.
-Gracias…- murmuró Jaejoong. Yunho sonrió.
El rubio comenzó a apagar las luces de la cafetería mientras Jaejoong esperaba en la entrada intentando secar un poco su ropa. Y cuando tan solo quedaba encendida la luz de la entrada Yunho apareció.
-Jaejoong creo que se me quedaron la llaves en al lado de la caja registradora ¿Podrías buscarlas por mi mientras saco la basura? – pidió Yunho con los ojos brillantes. Jaejoong asintió y rebuscó en el lugar indicado. El chico mas alto salió del local y un segundo después volvió a entrar dejando al moreno confundido.
-Yunho ¿Qué…?
-Buenas noches. Me gustaría pedirte un favor- Jaejoong quedó aun mas perplejo al darse cuenta que esas habían sido las mismas palabras que el había dicho cuando fue rechazado por el rubio- ¿Saldrías conmigo?
Jaejoong tardó un par de segundos en asimilar las palabras dichas por Yunho. Y cuando lo hizo su corazón salto bruscamente dentro de su pecho.
Las ironías de la vida…
-Por supuesto… - respondió con una sonrisa. – Ay, Yunho ¿Tanto te costaba decirme que si la primera vez?
-¿Qué puedo decir? – Yunho se encogió de hombros- Me gusta complicar las cosas.
Ambos tomaron sus pertenencias, abrigándose del frio del exterior a pesar de que la humedad aun estaba presente en sus vestimentas. Yunho cerró la puerta del local y cuando se volteó Jaejoong le mostró un gesto de lo más dulce.
-Bien, tú decides cuando
-Mmmm… ¿Qué te parece mañana en la estación a las 17:00 hrs? Por lo demás tú solo espera-
-Perfecto. Entonces nos vemos mañana- Jaejoong se acercó a Yunho, un tanto inseguro sobre como despedirse apropiadamente después de todo mañana tendrían una cita pero ¿Eso que significaba? Así que al final solo optó por un corto abrazo que se le hizo demasiado insignificante. El moreno se volteó mientras se acomodaba su gorro y antes de que pudiera avanzar 10 pasos la voz de Yunho le sorprendió.
-Jae! Olvidas algo- se volteó dispuesto a disculparse por su despiste cuando la mano del rubio lo tomo del brazo y lo llevo al calor de su cuerpo. Sus labios se juntaron y a causa de la sorpresa Jaejoong no cerró sus ojos viendo la expresión de calma que el rubio había compuesto. Al cabo de unos segundos comenzó a responder, afianzando su agarre al poner sus brazos alrededor del cuello del más alto dándole así confianza para que el otro lo tomara de la cintura.
Cuando se separaron ambos tenían las mejillas rojas y el frio les acariciaba el rostro mientras los envolvía en una nube de vaho.
-Bien. Mañana a las 17:00 hrs- murmuro un tanto aturdido. Yunho asintió
Jaejoong ya iba en la siguiente calle cuando no logró contener su entusiasmo y pegó un gritó que asustó a un chico que pasaba a su lado. ¡Dios solo sabe cuando había ansiado ese beso! Contuvo sus ganas de llamar a Yoochun y contarle lo sucedido.
Había tardado tanto… pero Jaejoong sabía que si no hubiera sido rechazado en primera instancia, ese beso no hubiera significado lo que para él significo en el día de hoy. No hubiera podido conocer tan bien al risueño de Junsu, al glotón de Changmin y al amable Taemin.
Porque quizás, después de todo Yoochun había tenido razón, el destino es algo que no puedes manejar. Aunque si retrasar…
Y Jaejoong sonrío, consiente de que mañana seria el mejor día de su vida…
The End (?)