Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

JUNJOU REBEL -EN EDICION- por ravenK

[Reviews - 531]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Gracias por sus comentarios chicas; en verdad se aprecia que sigan este fic :D me alegran la semana... ahora, seguramente este capitulo les gustará a mas de una... quienes extrañan a cierto castañito y al terrorista jr:

CAPITULO 63: INCOMODOS MOMENTOS

¡Yoh! ¡A calentar!- chasqueó la lengua levantándose de la banca abanicándose con su mano; hacía bastante calor y ahora iba a provocar que sudara sin quererlo… le hacía enojar, pero él se había metido en esto y ahora no podía salirse.

¡Vamos, muévete que no tenemos todo el día!- el líder de su equipo le apuraba el paso a la vez que corría otra vuelta por el diamante, Yuusei respiró hondo y siguió el paso de sus demás compañeros.

Si, había ingresado al equipo de baseball de la facultad; la razón de esto fue porque en primer lugar, era el que tenía cupo –natación y boxeo se habían llenado muy rápido- y segundo, Tetsuo y Kazuo habían demostrado algo de talento para eso.

¡Vamos Yuusei!- los susodichos le dieron alcance rápido, hace apenas dos semanas habían entrado al equipo y estos dos se sentía como peces en el agua, era un deporte tranquilo y el entrenador era bastante condescendiente considerado con sus horarios de clases, sin embargo el capitán era algo estricto, lo normal.

El problema era que Yuusei se negaba a entender que él era el jefe.

 

¡Yoh! Alarga los pasos, no saltes- le indicaba el capitán, Yuusei se frenó en seco y se dio la vuelta, el otro que no se esperaba eso se detuvo de pronto por sus rápidos reflejos:

¡¿Qué te pasa?!-

¡Ya deja de mandarme! Eres insoportable Matsuo- el chico en cuestión era de la misma altura que Yuusei, de cabello castaño y algo fornido; le miró frunciendo el seño:

Te mando porque no haces las cosas bien, y con que sigas con esa actitud te quedarás en la banca en el primer juego-

No me importa…- el capitán suspiró y reparó en que los demás chicos observaban la discusión.

Nada te cuesta salirte y lo sabes… si no eres apto para trabajar en equipo, no sé qué haces aquí-

Yuusei se fue dándole la espalda, visiblemente molesto, el capitán solo suspiró y reparó en los otros:

A seguir, nada pasó aquí… ¡Muévanse!- y los chicos reaccionaron rápidamente, volviendo a correr.

 

 

 

Sin cambiarse, se dirigió a la cafetería; aún estaba bastante sudado y presentía que olía mal pero no le importó, el tenía sed y quería algo endemoniadamente frío sin más.

El tendero le extendió una botella de agua y acto seguido se sentó en una silla, el reloj indicaba que faltaba menos de media hora para que iniciaran las clases.

Aún hay tiempo…- se pegó la botella a la frente, el frío se sentía tan bien al contacto con su piel.

“no sé qué haces aquí”- esa pregunta ya la había escuchado antes, dos ocasiones para ser precisos, Matsuo se la había dicho al ingresar como parte del currículo y la segunda, en la primera muestra de apatía hacia el equipo; y ahora una tercera vez… Yuusei sabía la respuesta, pero no la entenderían.

“Kaori también está haciéndolo”- nunca lo había visto entrenar, ni viceversa, pero cada quien se sorprendió por el otro por obvias razones.

Mientras el menor ingreso a la primera lista puesta, con sobrados motivos de alegría cuando logró convencer a sus padres que no sería algo riesgoso, Yuusei lo hizo una semana tarde en su campus; porque quería estar en su misma situación; ver si podía compartir ese gusto en común.

Pero no estaba completamente apasionado por ello. Aún le costaba entender algunos tecnicismos y preguntarle al capitán solo le haría ver como un estúpido, así que se había encerrado en su ego ignorante.

Sin embargo, la versión para Kaori era otra, cada vez que hablaban o llegaban a tocar ese tema, Kaori era el que relataba sus entrenamientos, como volvía a ponerse en forma y los nuevos amigos que había hecho, en fin, se sentía en su ambiente, mientras Yuusei lo escuchaba complacido y algo culpable por no poder compartir su dicha.

Así que estaba estancado y justo en momentos como este, no sabía qué hacer… si lo hablaba con Kaori diría el motivo y el joven se sentiría incomodo… y él no quería provocar eso. No les tenía la suficiente confianza a Tetsuo y Kazuo. Y el entrenador menos. Eso le dejaba solo con una persona, la única persona que podría orientarlo un poco.

 

-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-

 

¡Eso es todo, muchachos, buen trabajo!- una voz alegre, suave y femenina les dio aquella orden, los chicos detuvieron cualesquier actividad que estuvieran haciendo, ya sea correr o brincar, el lanzador detuvo su proyectil y el bateador bajó su instrumento; a la orden de aquella voz todos se reunieron en las bancas, pues su entrenadora tenía un aviso importante.

Los chicos del equipo de baseball de la facultad de administración tenían como entrenador a una mujer; para ser francos, la única mujer que se conocía entrenaba en la universidad Mitsuhashi a un equipo varonil, sin embargo, Hibiki-sensei era diestra en su campo, razón por la cual llevaba en buenas posiciones a sus equipos, y este año no sería la excepción.

Bueno chicos, como saben el sábado comienza la temporada intrauniversitaria; necesito de todos sus ánimos y esfuerzo; tenemos que empezar con el pie derecho desde el primer juego- la sonrisa animada y la mirada decidida les dieron confianza a sus chicos; todos la querían y respetaban, pues los años que llevaban entrenando con ella sirvió para fomentar el afecto.

 

Solo espero que los novatos aguanten nuestro paso- comento uno de los muchachos, el sonido de risas no tardó en hacerse presente, la entrenadora negó con la cabeza:

Si no lo hicieran, no los hubiese admitido, Tachibana- reprendió- Pero eso sí, siempre hay que dar el cien ¿o no muchachos?- una exclamación casi general se dejo oír; la entrenadora miró de soslayo a los novatos, cinco en total:

Muchachos, no sean tímidos… pasaremos una temporada juntos hay que disfrutarlo- entre los cinco chicos, uno asintió contagiándose del aplomo de sus compañeros:

¡Esa es la actitud, Asahina!-

Entrenadora, ¿contra qué equipo jugaremos?- preguntó alguien en la multitud, la mujer le contestó:

Contra Físico-química- la seriedad se apropió del rostro de todos los jugadores; pero Hibiki no permitiría que sus chicos dudaran:

No hay que caer en desánimos, solo porque nos sacaron de la final en el semestre anterior-

Pero esos chicos son de cuidado… además todos son de séptimo semestre en adelante…-

Escuche que este año hay novatos también- agregó otro, de inmediato la confianza perdida pareció regresar al saber que estarían en iguales condiciones; Hibiki los dejó hablar en lo que ella registraba algo en sus notas, sin embargo de reojo pudo ver como cierto castaño se quedaba callado:

¿Asahina, sucede algo? No me digas que les temes a los de Físico…-

AH... no… no entrenadora…- Kaori compuso una sonrisa cubriendo cualquier rastro de sorpresa.

Más vale, no quiero que uno de mis bateadores se distraiga-

No lo haré, sensei…-

 

 

-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-

Estaba a una cuadra del edificio donde vivía Misaki cuando le llegó un mensaje de uno de sus compañeros:

Yuusei, el entrenador nos citó a todo el equipo a primera hora mañana. No faltes- el pelinegro frunció el seño y cerró el móvil; de solo recordar el mal rato que pasó hace poco hizo que su humor volviera a caer; estaba al borde de renunciar al equipo si no fuera por su orgullo y vanidad lo hubiera hecho; negó con la cabeza y apretó el paso, necesitaba aclarar sus pensamientos con alguien que lo comprendiera.

Llegó a la puerta del edificio y llamó por el intercomunicador, fue Akihiko quien respondió:

Hola, Usami-san… ¿esta Misaki-chichi?-

Yuusei, el no se encuentra de momento; fue a la editorial y creo que tardará… ocupabas algo?- la desilusión marcó su rostro un segundo; pero luego volvió en sí:

No… en realidad no es importante… bueno, gracias-

Nos vemos- tras un suspiro regresó lo andado, no tenía ganas de asistir a la universidad a pesar de que tenía dos clases más, estaba muy enojado y frustrado que decidió regresar a casa.

 

Cuando finalmente llegó encontró a su padre en medio de la sala con varias cajas, Yuusei dejó la mochila en algún lugar libre y le preguntó extrañado:

¿Qué haces?-

Ordeno… mañana pintaré el estudio y por eso saqué todo…- Yuusei hojeó una carpeta sin interés; Shinobu le preguntó retirando la carpeta que sostenía y poniéndola en otro lugar:

¿No tienes clases más tarde?- no era una pregunta en sí, era una afirmación, Yuusei suspiró:

No tenía ganas de ir…- Shinobu frunció el seño negando con la cabeza a la vez que recogía otra carpeta.

Si vas a empezar a saltarte las clases…- antes de completar su amenaza, Yuusei le interrumpió:

Solo lo hice hoy… no tienes que exagerar- Shinobu se extraño ante la actitud enfadada de su hijo, suavizo su semblante:

¿paso algo?- Yuusei le miró con duda, meditando sobre si comunicarle sus dudas o solo mentir, sin embargo el mismo enfado le hizo hablar:

Es que no quiero estar en el equipo… el capitán es un idiota y no encuentro el mínimo interés en eso…- refunfuñó cruzándose de brazos.

Entonces salte…- le contestó cortante, Yuusei le miró incrédulo:

¿Ves? Por eso no me gusta hablar… es que eres tan… tan…- ni uno, ni el otro, no lograban comunicarse adecuadamente; Shinobu se quedó en su sitio, obviando la situación:

Si algo no te gusta, no lo hagas… así de simple-

Ahh papa…no es nada, olvídalo- chasqueó los dientes y se dio la vuelta; estaba enfadado y frustrado por no conseguir la respuesta que deseaba; Shinobu frunció el seño negando con la cabeza; no entendía el razonamiento de su muchacho; para él era obvia aquella respuesta.

Como sea…- decidió no pensar más en el asunto, cuando a aquel se le bajara el humor quizás podrían hablar adecuadamente.

 

El resto de la tarde se la pasó ordenando todas las carpetas y archivos de los casos en que había trabajado o está en proceso; era una tarea monumental que le estaba costando un gran esfuerzo; para colmo de males el aire acondicionado estaba fallando y decidió apagarlo y prender un ventilador; cuidando que ningún papel fuera a volarse, apenas si le daba aire.

Demonios…- se pasó una mano por su cabello, algo húmedo debido al sudor, cuando escuchó la puerta de la entrada abrirse:

Llegué- Shinobu rápidamente vio el reloj en la pared; casi se cae de espaldas al descubrir que eran ya las nueve de la noche y el no había preparado la cena, Miyagi leyó su expresión:

Supuse que lo habías olvidado… por eso traje comida rápida- alzó una bolsa; Shinobu suspiro negando con la cabeza:

Lo siento Miyagi, he estado todo el día con esto-

Descuida, pero aun así debes descansar…- se acercó al rubio y besó su frente- Y bañarte no estaría mal…- como respuesta el ojigris golpeo levemente su hombro y tomó la bolsa:

Bueno, vamos a comer que muero de hambre…-

Oh no, no…- Miyagi le detuvo a mitad de camino casi haciéndole caer sobre la pila de cajas:

¡Qué te pasa!-

Primero tienes que ducharte, apestas-

¡Oye!-

Anda… vamos- a pesar de sus reclamos, el rubio se dejó llevar, cuando finalmente entraron a la ducha el abogado le retuvo de la camisa susurrándole al oído con voz sensual:

Me bañaré si te bañas conmigo…-

 

 

 

 

 

El agua estaba helada; hace algún tiempo se había enfriado; Después de la sesión de sexo en la bañera, Miyagi acariciaba el hombro húmedo de su esposo mientras besaba su cabeza, Shinobu suspiro recostándose más en el pecho de Miyagi reparando la vista en la puerta:

Más vale que tu hijo este dormido… mira que la puerta no tiene seguro- Miyagi desvió su mirada para verificarlo, sonrió:

Tranquilo… duerme como un tronco igual que tu…-

Yo no duermo como tronco…- el profesor solo se rió:

¿Qué no? Vaya, si ustedes son iguales... de tal palo tal astilla…-

Lo dirás por ti… que de mí no sacó casi nada… hum…- Shinobu se cruzó de brazos, recordó la conversación de la tarde y era obvio que no podían ni comunicarse adecuadamente:

Pero que dices… Shinobu, Yuusei es igual a ti en cuanto a carácter se refiere… ¿Por qué crees que no se llevan bien?- el rubio dejo su rabieta unos segundos, se giró un poco confundido:

Bueno… no nos llevamos muy bien; pero tampoco estamos tan distanciados…-

Eso es verdad… pero ¿cuántas veces no han llegado a terminar una conversación sin la ayuda del silencio?- Shinobu se quedó meditándolo algunos instantes… era verdad que habían tenido una charla cuando Yuusei admitía sus sentimientos por Kaori pero de ahí en más o incluso antes, no se había dado ese acercamiento.

Mínimo una o dos veces… ¿verdad?- el rubio asintió convenciéndose.

Sabes… lo que más me causa gracia de esta situación… es precisamente eso, que cuando niño era una mini copia de ti… recuerdo que cuando tenía un problema el te lo consultaba pero finalmente yo era el que tenía que ayudarle ya que tú eras muy directo… igual que con Misaki cuando fue creciendo…-

Debo admitir que tienes razón- reflexionó luego de unos segundos- De hecho, esta tarde pasó algo así… el dijo que quería dejar el equipo porque no le interesa… ya estaba molesto antes pero ahora explotó o algo así… en realidad no le tomé mucha importancia…-

¿Explotó? Eso si es raro… normalmente solo se va en silencio-

Si… algo así… pero de cualquier manera, si no le gusta que lo deje, no entiendo porque se complica tanto…-

Porque será que me recuerda a alguien…- comentó Miyagi de manera casual; Shinobu le miró entrecerrando los ojos- ¿Qué quieres decir?-

Nada, nada…- el mayor solo lo abrazó hundiendo su cara en su cuello y otorgándole pequeños besos en la zona; Shinobu alzó la cabeza permitiéndole ahondar el contacto.

No eres demasiado viejo para hacer estas cosas… Miyagi…- preguntó el rubio en un momento, cuando el mayor comenzó a tocarlo en sus puntos débiles, el mayor le susurró al oído:

SI estoy viejo, pero no significa que deje de desearte, además conoces el viejo dicho del vino, “entre más viejo, mejor”…-

Pero ya lo hicimos una vez…-

El viejo será otro entonces- el rubio gruñó inteligiblemente; sin embargo, pronto sus molestias fueron cambiadas por placer, ya que cierta zona de su anatomía comenzaba a endurecerse.

Tienes razón…- comento en medio de un suspiro cuando Miyagi acarició su miembro por debajo del agua-

¿En qué?- preguntó el otro frotándose contra él.

El vino…- Miyagi solo afirmó su agarre, sacándole un gemido de placer- Obviamente-

 

 

 

Escuchó algo de ruido en la sala, como algo cayéndose; Shinobu se levantó al instante temiendo que alguien fuese a robar; Miyagi a su lado dormía plácidamente luego de la sesión maratónica en el baño; no quería despertarlo aún, se puso un par de shorts y una playera y fue a investigar:

Se asomó por el pasillo y pudo respirar aliviado al saber que era su hijo quien había hecho ese ruido:

¿Qué haces?- preguntó dejándose ver, el pelinegro colocó las carpetas que había derribado de nuevo en su lugar- Buscaba mi mochila, la olvide en la tarde y tengo tarea-

Oh… lo siento por el desastre…-

Descuida…- al parecer, su charla terminaría ahí, pues Yuusei en seguida divisó la susodicha; sin embargo, Shinobu retomó la palabra:

Sobre lo de esta tarde…-

¿Eh?-

Lamento si mi respuesta no te ayudó… creo que debí ser más específico…- se quedó meditando unos instantes, Yuusei se quedó en silencio:

¿Por qué estas en el equipo, Yuusei?- la voz de Shinobu sonaba comprensiva, Yuusei se encontró a si mismo más relajado que antes y después de un suspiro, respondió:

Es por Kaori… el juega en el equipo de su facultad y… me gustaría compartir algo en común con él… pero no me apasiona tanto como debería… incluso es molesto o no se…en realidad no se cómo debería actuar…- Shinobu suspiro una vez más y comenzó a caminar removiendo algunos papeles:

Ahora entiendo porque Miyagi dice que nos parecemos…-

¿Eh?-

No es nada… solo pensando en voz alta…- le sonrió- pero volviendo al punto… Yuusei, no deberías hacer algo que no te guste… si no es de tu agrado el equipo o los deportes en sí, no deberías forzarte…-

Pero…-

Además, estoy seguro que Kaori no le gustaría que lo hicieras, aún si es por un motivo noble… como he visto a ese muchacho, el te quiere como eres, no por lo que intentas ser… ¿crees que le guste la actitud que estas tomando?-

No… en realidad no…- su mente se despejó al pensar en esta probabilidad; era verdad, Kaori lo quería como era, si viera ese patético intento de igualarse, seguramente lo haría sentir mal y hacerle parecer un tonto arrogante… justo lo que era antes de que lo conociera.

 

Shinobu le vio sumirse en sus pensamientos y sonrió para sí; sabía que su hijo tomaría la decisión correcta tarde o temprano, después de todo el no solía equivocarse demasiado en estas… algo tan familiar en él.

 

Me iré a dormir… procura descansar y cuidado con las cajas…- cuando se dio la vuelta y comenzó a caminar de regreso a su pieza, escuchó al otro murmurar:

Gracias- el rubio solo asintió sin voltearse, alegrándose internamente por su pequeña acción de guía.

 

 

 

 

Al día siguiente, en la hora del entrenamiento, estaba resuelto a hablar con el capitán acerca de su deserción, pero sin más lo vio llegar y lo detuvo con una mano:

El sábado inicia la temporada, jugaremos contra…-

Matsuo, quiero renunciar al equipo…- el capitán se quedó estático al escucharle pronunciar aquello, pero la mirada decidida de su jugador le hizo suspirar; llevó sus manos a la cadera y le miró interrogante:

¿Estás seguro? Si es por lo de ayer…-

Estoy seguro… creo que no seré un buen compañero… en realidad no comparto tanto la afición como ustedes- Matsuo le miró fijamente algunos segundos, después de un suspiro negó con la cabeza:

No te dejaré…-

¿Qué?- Yuusei estaba actuando con total serenidad y presteza, a fin de llevar las cosas de buena manera, pero ahora no entendía nada y su paciencia se estaba mermando.

Lo que oíste… te necesito este sábado… después de eso, puedes renunciar si quieres…-

Pero…- Matsuo se dio la vuelta, Yuusei le siguio aún sin comprender:

¡Matsuo!-

Yuusei, somos un equipo y ya los registré a todos para el próximo partido, si uno de ustedes deserta se cancela nuestro juego-

¡Eso es ridículo, por eso somos muchos!-

Pero es el primero, además no te dejaré ir tan fácil… irás o yo mismo me encargaré de que el capitán te cancele todos los retardos que has tenido en clases- Yuusei solo cerró los puños en señal de impotencia, si hacía eso seguro se lleva un buen acumulado de castigos en las clases, con una mueca aceptó a regañadientes:

El sábado en el campo a las nueve… ¿está claro?-

Lo que digas-

Matsuo se perdió entre el conglomerado del alumnado, Toshi se quedó en medio de la plaza; suspiró, que mas daba dos días más de soportar todo esto, ya luego podría renunciar sin mayores compromisos.

Ah... Olvidé preguntarle contra qué equipo vamos…- reflexionó- Bueno… seguramente no sea gran rival…- con ese pensamiento se dirigió a las clases que tenía, el único consuelo que le quedaba era que no habría entrenamiento durante esos dos días ya que la mayoría del equipo estaría ocupado por el horario de laboratorio que llevaban, el cual no habían acomodado hasta estas fechas.

 

Dos días de descanso, sería fácil.

 

 

-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-

Yuusei miró su celular por tercera vez  y suspiró mirándolo con tristeza, el nombre de su novio resaltaba en la llamada la cual paso a perdida después de cuatro tonos.

El sol estaba despejado en aquella mañana de sábado; un clima propicio para dar inicio a la temporada de los equipos de baseball en la universidad Mitsuhashi; con tres primeros encuentros que se desarrollarán en algunos campos de las facultades que la integran, uno de ellos era donde ahora Yuusei se encontraba sentado en las bancas del mismo, en espera de la orden del capitán para mandarlo a calentar, dicha orden no tardó en llegar:

¡Yoh!- el chico se levantó y guardó su móvil en la mochila, no había hablado con Kaori desde hace algunos días, todo para evitar que su mal humor debido a su estadía obligada saliera a la luz, aún no le decía de aquella incomodidad y pensaba decírselo tranquilamente después de que se viera libre.

 

 

¡Vamos muchachos!- una voz femenina seguida de algunas exclamaciones de júbilo se escucharon en el otro extremo del campo, acto seguido, una turba de jóvenes uniformados de azul y gris se abría paso, era el equipo rival.

 

Hum… son unos niños apenas- se mofó uno de sus compañeros, todos habían detenido su calentamiento para observar a los recién llegados, Yuusei también se habia detenido:

¿Quiénes son?- preguntó en voz baja, pero uno de sus amigos le escuchó:

¿No sabes? Jugaremos contra los de administración…- su rostro mostró estupefacción; al instante dio algunos pasos al frente y forzaba su vista hacia el alumnado, pero no lo encontraba.

“¿No habrá venido?”- Yuusei no encontraba un orden lógico en sus pensamientos, apenas si se acaba de enterar que iba a jugar contra su novio y el susodicho no estaba presente, o no lo veía, sin embargo antes de realizar algún otro movimiento, el capitán y el entrenador fueron a entrevistarse con  los lideres del otro equipo:

Hibiki-sensei es muy bonita- dijo uno de los de su equipo – Me pregunto si le gustarán más chicos- Oh calla Touma… asi como la vez de bonita es muy exigente… no por nada tienen buenas posiciones- Seh lo que digas- Yuusei ya no prestó atención al dialogo de sus compañeros, pues el capitán en seguida les llamó a todos para darles las instrucciones de juego, Yoh apenas registró que le tocaba jugar en la primera base, al menos eso había entendido.

 

¡A jugar!- un aplomo general le devolvió al equipo, pues aún seguía distraído, daba gracias que Matsuo apenas le había notado.

 

 

El equipo visitante le tocó ser el primero en batear según las normas de juego; en el diamante los dieciocho jugadores activos estaban dispersos en sus posiciones; las tribunas no estaban tan llenas debido a que era el inicio y a una hora tan temprana, conforme transcurriera le tiempo, seguramente incrementaría el publico.

 

Yuusei solo tenía que estar al pendiente de quien bateaba, el lanzador era el capitán el cual tenía un brazo que bien le había valido el puesto, y tan rígido como era, eliminó a 2 de los tres bateadores permitidos en su turno del equipo contrario en menos de diez minutos… quería imponer la supremacía de su equipo desde los primeros minutos.

 

Vaya, Matsuo es demasiado estricto… no va a permitir que nos divirtamos un poco…- oyó quejarse a uno de sus compañeros cercanos.

Pero es que apenas son unos mocosos… si no me equivoco el que viene ahora es una chica, Matsuo la hará pedazos- Yuusei se dio la vuelta alerta en su posición, sin embargo se quedó de piedra al ver a la “chica”.

Su cuerpo esbelto y grácil; el uniforme algo holgado pero se veía tan bien en él… nunca lo había visto uniformado y podía maldecirse por no haberlo hecho, se estaba perdiendo de un maravilloso espectáculo…

El azul definitivamente era su color; las franjas grises a los lados de las piernas solo resaltaban más su cuerpo, incluso parecía más alto…

Sin contemplaciones, Matsuo lanzó la pelota la cual apenas registró, había llegado a la manopla del cátcher.

Parpadeó dos veces; concentrándose en el juego.

Strike 1- escuchó la instrucción del umpire.

De nuevo, el bateador se colocaba en posición y una vez más la bola llegó al cátcher; los aplomos de sus compañeros le daban ánimos, pero a la vez le ponían nervioso:

 

“Vamos Kaori” - Yuusei se encontró a si mismo rogar por que Kaori bateara; sorprendiéndose, además comenzaba a odiar a Matsuo- si se podía mas- por impedirle la acción.

 

Strike 2- Estaba a punto de abandonar su posición para arremeter contra su capitán, pero se contuvo al saber que eso sería inútil… así como avergonzaría a su novio.

 

Un strike más y será eliminado…- murmuró con preocupación; en la zona de lanzamiento, Matsuo se disponía a lanzar su última bola; la lanzó y cual no fue la sorpresa general cuando el bateador la golpeó lanzándola a la zona del jardín derecho.

Kaori se quedó dos segundos pasmado, cuando escuchó a la entrenadora indicarle que corriera tiro el bate y se dirigió a la primera base...

Lo veía correr hacia él, pero perecía que no lo había visto, escuchó que su compañero le gritaba que se diera la vuelta y el así lo hizo, solo para ver cómo le lanzaban la pelota para marcarlo.

Sin embargo la bola cayó a unos metros lejos de él y corrió para alcanzarla, pero al regresarse, Kaori ya estaba en safe.

 

El aplomo de su equipo; los vítores y exclamaciones de júbilo por ese pequeño triunfo no se hicieron esperar, Yuusei arrodillado por recoger la bola solo se quedó quieto, entre sorprendido, incrédulo y cautivado.

Kaori no traía sus lentes, por lo tanto dedujo que traía contactos; su cabello castaño se asomaba bajo el casco, lo cual le hacía ver adorablemente lindo… a ojos de Yuusei claro esta y si omitía la mirada entre sorprendida y molesta de él.

Sabía que le esperaba un largo, largo juego.

 

 

-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-

 

¿’Porque no me dijiste que jugaban contra nosotros?- murmuró Yuusei bastante cerca de él, Kaori le respondió sin verle, cuidando si su compañero le pegaba a la bola:

Tu no contestas mis llamadas y hace una semana no nos vemos…y no te estoy reclamando nada- refutó con molestia; cuando Yuusei estaba a punto de contra atacar, se escuchó el sonido del bate golpeando la bola,  Kaori se esfumó en menos de un segundo mientras la bola salía disparada hacia el jardín izquierdo.

 

 

La tarde transcurrió con rapidez para algunos y lentitud para otros; el sol de la tarde comenzaba a provocar efectos en los jugadores, por suerte el juego estaba a punto de acabar; ahora mismo estaban en la novena entrada; ahora le correspondía a su equipo el turno en el bate; matsuo se colocó en posición y Yuusei observaba desde la banca el final del juego, Kaori cubría la zona del jardín izquierdo… el pelinegro se extrañó de eso, pues Kaori era un buen bateador, ya había cubierto dos carreras tomando bases.

Entrenador… ¿es correcto que un bateador también sea jardinero?- el entrenador aún sin distraerse del juego le respondió:

A veces puede ser una buena estrategia… para eso se ocupa que el jugador en sí sea muy capaz, es decir, rápido, con un buen brazo y precisión… ¿Qué te extraña?-

El jardinero izquierdo… fue el primer chico que bateó la pelota de Matsuo- el entrenador dirigió su vista al joven, el cual estaba en alerta por la pelota que estaba próxima a lanzarse, en vista de que el bateador era diestro, había grandes probabilidades que la bola se dirigiera a su campo.

Pues ha jugado bastante bien… Hibiki-sensei tiene esa peculiaridad… entrena a todos sus jugadores en todas las posiciones para ver en cual esta más apto, así como en el caso de cubrir alguno cuando se ocupara…- Yuusei se quedó en silencio, comprendiendo la información; después de algunos segundos, en el campo de juego la pelota fue bateada y como era de esperar se dirigió al jardín izquierdo.

 

Yuusei no veía cuantas bases iba ganando su capitán solo veía como Kaori corría hacia la dirección aproximada de la pelota, en un momento dio un salto espectacular que por breves segundos le hizo tambalearse, sin embargo logró lanzar la pelota hacia el compañero en base, sin embargo al mismo tiempo Matsuo se barrió en esta.

 

¡Fue safe!-

¡Out!-

¡Safe!-

 

Estaba a punto de armarse una discusión mayor de no ser por el umpire el cual concedió el safe al equipo; con esto, los Quimico-Fisicos completaban las nueve carreras y ganaban el encuentro.

 

La celebración no se hizo esperar, el entrenador y el resto de los muchachos en las bancas salieron a celebrarlo y festejar al capitán; mientras los chicos del equipo contrario regresaban a su lugar en las bancas con los animos decaídos.

Una vez todos reunidos, la entrenadora les aplaudió con alegría:

Siete carreras completas… nada mal para nuestro primer encuentro muchachos… ya verán que en el siguiente juego nos irá mejor… ellos ya saben de lo que somos capaces así como nosotros...-

Pero perdimos…-

¿Perdimos? No… yo lo veo como un aprendizaje… además no esperaba que ganaran el primer juego… estaremos bien, confíen en mí- normalmente, un entrenador les hubiera regañado o despotricar su incompetencia… pero Hibiki-san era diferente, les provocaba ese instinto maternal que les hacía sentir bien…

Los muchachos más grandes fueron los primeros en recuperar el aplomo, pues su entrenadora tenía razón:

¡Es verdad! Además fue como un calentamiento… ¡esto solo es el inicio equipo!- de poco a poco los chicos mostraron rostros satisfechos por un juego bien hecho y la pena inicial se habia esfumado, en eso uno de los chicos comentó:

Además este año tenemos excelentes compañeros… sino mira como estuvo Asahina-kun en el campo, jaja no vieron la cara de Matsuo-san cuando bateó su pelota?- el aludido se sonrojó un poco al verse aplomado, la entrenadora despeinó sus cabellos.

Jugaste excelente, Kaori-

G-gracias Hibiki-sensei-

El entrenador del otro equipo la llamó, seguramente para ultimar detalles del encuentro, mientras tanto los chicos seguían conversando sobre el juego, Kaori se alejo un poco de ellos mientras observaba a los chicos del otro equipo seguir su celebración; en un momento trató de divisar a Yuusei pero no logró encontrarlo, sin embargo una voz le llamó:

¡Hey!- el capitán del otro equipo se acercaba por detrás de él, Kaori se giró para encararlo.

Hola-

Hola…- saludó amablemente

Eres nuevo en el equipo verdad? Jugaste muy bien hoy- Kaori se sorprendió un poco al saberse notado por el capitán; pero no se dejó notar:

S-si… ingresé este semestre… y gracias… tu también jugaste muy bien… este…-

Soy Matsuo… Inugawa Matsuo…-

Asahina Kaori…-

¿Kaori?- la reacción típica a todos los que escuchaban su nombre, Kaori negó con la cabeza sonreído:

Larga historia… pero de cualquier manera… fue un buen juego…-

Ya lo creo que si…- se quedaron en silencio, sin agregar algo mas, Matsuo sonreía un poco cohibido ante el muchacho, solo le habia visto de lejos e incluso llegó a confundirlo con una chica, pero de cerca era bastante atractivo…

Y… ehm… ¿estudias en economía y administración? O solo juegas ahí…-

Estudio ahí… apenas voy en 1 semestre-

Ohh eres un novato… vaya, bueno amigo… cuando quieras alguna guía por mi facultad, tu solo pregunta por mi…- le hizo un guiño que a Kaori le pareció gracioso y negó en broma:

Aja… ya se… y ehm…- quería agregar algo más, por mera cortesía, pero escuchó que otra persona le llamaba:

¡Kaori!- Yuusei corría hacia él, el entrenador le había retenido bastante tiempo preguntándole acerca de su decisión de abandonar el equipo, Yuusei estaba explicándole la situación sin embargo a mitad de esta pudo ver como su novio y Matsuo platicaban en el campo… no era que le molestara –detestaba al susodicho- pero la sonrisa que le dedicaba encendieron sus alarmas.

Se excusó con el entrenador, tomó su mochila y fue a interrumpirlos:

Yuusei…-

¿Se conocen?- preguntó el capitán un tanto sorprendido, Kaori asintió y Yuusei se interpuso tomando del brazo a Kaori:

Es mi novio…- el aludido sintió arder sus mejillas, seguramente estaba más rojo que un tomate, Matsuo no pudo disimular su sorpresa e incredulidad, pensar que ese joven tan adorable tuviera por novio a un amargado como aquel… o eso había visto en Yuusei.

Oh… ya… vaya casualidad… le estaba diciendo a Kaori que había jugado bastante bien… quizás debería darte un par de consejos para mejorar, ehh Yoh…- ahora le hablaba con tanta familiaridad… pensó Yuusei sintiendo una rabia en su interior, Kaori solo se rió nerviosamente, Matsuo agregó segundos después:

Entonces… ¿ya decidiste que hacer?-

No es de tu incumbencia…- el capitán se extrañó un poco, Yuusei no razonó a que se refería o solo quería hacerle entender que los dejara en paz.

¿No es de mi incumbencia? Yo creo que si porque estas en MI equipo… ¿te saldrás o no? Te di de plazo hasta hoy para tu respuesta…- Yuusei se quedó inmóvil pensando en mil maneras de matar al castaño fornido que tenía enfrente por delatarlo frente a su novio que le miraba sumamente sorprendido:

¿Te saldrás del equipo? ¿Por qué?- Matsuo se extraño por su desconcierto, pero no le tomó importancia, aún así esperaba respuesta:

Yoh-

No…- le respondió a Kaori mirándole fijamente y luego cambiar el enfoque al capitán- Creo que… empiezo a tomarle gusto a esto… si aún me requiere en el equipo… capitán- la última palabra era ironía en toda sentido, Matsuo sonrió de medio lado suspirando- De acuerdo… ya sabes las reglas… no hace falta repetirlas, ¿verdad?-

Créeme que no… ahora… nos vamos- se dio la vuelta sin esperar respuesta tomando a Kaori de la mano, el chico se dejó llevar algunos metros antes de protestar:

¡Hey! Tengo que ir con mi equipo y despedirme-

Vamos a casa…-

¿A cuál? Yuusei suéltame…- después de algunos pasos más, le soltó, Kaori se dirigió entonces con su entrenadora y se despidió de los chicos, acto seguido recogió su maletín y alcanzó a Yuusei, quien no se había movido de ahí.

Te ayudo con eso-

En realidad no es muy pesado…- se excusó cargando su maleta de entrenamiento, Yuusei no insistió y ambos quedaron en silencio.

 

 

 

 

Cuando ya estaban en el camino, Kaori se animó a hablar:

Entonces… ¿Por qué querías salirte del equipo?- Yuusei tardó algunos segundos en responder y tras un hondo suspiro le dijo mirándole fijamente:

Por ti… -

¿Eh?-

Por ti decidí entrar… en realidad no es algo que llame mi interés… pero… quería ocupar mí tiempo en algo… y al ver que te divertías, pensé en compartir tu diversión…- Kaori le escuchaba atentamente, sonriendo con dulzura:

Sabes que eres realmente tonto y lindo al mismo tiempo?- le pregunto con ironía, Yuusei hizo una mueca de extrañeza:

Si… porque solo un tonto hace lo que no le gusta como tú y tiene un motivo tan… ¿dulce?... Oh Yuusei…- el pelinegro compuso una débil sonrisa, por un momento olvidó el enfado que tenía por la escena de antes y solo se concentró en el dulce rostro de su novio, mirándole con cariño.

De cualquier manera… estaré en el equipo… ya di mi palabra-

Pienso que es algo duro… al menos para ti… así que si ocupas algo y te puedo ayudar, no seas terco y dímelo… ¿quieres?- Yuusei asintió reconociendo que tenía razón, tal vez pueda ayudarlo a entender ciertos tecnicismos del juego.

Por cierto…- agregó luego de un silencio- Jugaste muy bien hoy… no pensé que fueras tan bueno-

¿Es un halago?-

Por supuesto…-

Gracias… en realidad, estaba bastante nervioso… tu equipo jugó bastante bien-

¿Solo mi equipo?- se ofendió burlonamente- ¿Yo te hago un cumplido y tú me respondes en general?-

Solo soy honesto… tu equipo jugó bien…-

¿Y yo?-

…- Kaori no respondió sino que se limitó a sonreír, Yuusei entrecerró los ojos.

Bueno… no eres muy hábil en la recepción… quizás debas batear o ser pitcher…-

Jaja… muy gracioso- se hizo el ofendido, Kaori no pudo evitar reír con burla; y es que, si había algo en lo que el gran Yoh Yuusei no podía concebir este tipo de histrionismos era en la ofensa a su persona. Por supuesto a Kaori no le importaba un bledo y lo hacía, después de todo tenía era él.

 

 

Lo acompañó hasta su casa y al saber que era ya media tarde, el hambre hizo su aparición, Kaori le invitó a comer algo y Yuusei aceptó:

¿Tus papas?-

Seguramente en la editorial… están en fin de ciclo y tienen que cuidar los departamentos… a que ningún editor colapse por estrés o algo así…- respondió mientras removía las cosas en el refrigerador - ¿Quieres lonches? No dejaron nada preparado… a menos que quieras esperar a que haga sopa miso-

Un par de lonches está bien, gracias…- se abanicó con su mano, en protesta por el calor que sentía, eso sumado al sudor que del juego; Kaori lo advirtió:

Cielos… es verdad, ¿no te gustaría darte un baño? Seguro te refrescará- Yuusei asintió con agrado, una ducha fresca no sonaba tan mal… y entonces algo se encendió en su mente:

Ejem… Kaori… ¿tú no te quisieras refrescar también?- el aludido captó inmediatamente la propuesta, con una mirada fulminante se negó.

No me gustaría hacerlo en la ducha… es incomodo- se cruzó de brazos, en señal de protesta; Yuusei se acercó a él abrazándolo:

Vamos… solo dije “refrescar” tú eres el que supone cosas…-

No confío en que… en cuanto se me caiga el jabón y me agache tú…- Yuusei se rió con ganas al escuchar ese mito, una broma típica entre los baños compartidos:

Te lo prometo… no haré nada que no quieras… ¿Qué dices?-besó su nariz como incentivo; el chico le miró fijamente y luego ablandó la mirada- Esta bien-

 

 

Sabía que era una promesa difícil de cumplir; por eso ambos acordaron en mutuo silencio bañarse con la ropa interior puesta, pues querían evitar cualquier impulso… o al menos Yuusei, el cual aún estaba condicionado a no apresurarse; a pesar de haberlo hecho en medio de un salón de clases en su fiesta de graduación… pero bueno, eso solo habia sido un “premio”.

 

Te ayudo…- aún así, quería deleitarse por la blanca y húmeda espalda que veía era tallada por las manos de su querer, en un momento y sin darle oportunidad de replicar tomó la esponja y comenzó a tallar con suavidad, Kaori suspiró ante el gesto.

 

¿Te gusta?-

Si…- admitió, pues no podría negarlo, solo esperaba que Yuusei no notara el sonrojo en sus mejillas, por desgracia un ligero estremecimiento le delató pues Yuusei coenzo a tallar en una zona más abajo por encima de su trasero.

Yuusei…-

Que?- al parecer, lo había hecho a propósito, pero no se arrepentía, el solo quería disfrutar el momento, Kaori se removió un poco pero Yuusei le encerró entre sus brazos impidiéndole escapar:

Shh te vas a caer, aquí es muy resbaloso-

Es tu culpa… dijiste que no harías nada que no quisiera…-

Y no querías que te tallara la espalda?-

Solo la espalda! No el…- Yuusei decidió silenciarlo con un beso, sabía exactamente que Kaori estaba nervioso e igual de ansioso que él, pero no lo admitiría abiertamente, la excitación de estar en ese lugar y tan cerca en tales condiciones… simplemente era imposible resistirse.

 

Los besos subieron de intensidad y pronto Yuusei acorralaba a Kaori en las frías baldosas de la pared, el menor sentía en extremo helado pero su pecho comenzaba a arder y la parte inferior de su cuerpo a endurecerse… en un momento en el que interrumpieron su beso para tomar aire, Kaori replicó:

Yuusei… b-basta…-

…- pero el chico no le respondió, sino que volvió a besarlo, sus manos viajaron furtivamente a la ropa interior y comenzó a tocarlo.

Ahh…-

Te gusta… solo déjate llevar, Kaori… confía en mi- susurró con voz profunda en su oído, Kaori cerró los ojos sintiendo una oleada de placer y deseo recorrerle cada palmo de su cuerpo… en verdad lo quería, lo necesitaba…

En el momento en que se había rendido finalmente, algo se encendió en su cabeza; a pesar del torrente de emociones que lo embargaban, Kaori penso con claridad:

¡Espera!- intentó separarlo abruptamente de su pecho, el cual estaba siendo atendido por su hábil boca.

¿Qué pasa?- preguntó el mayor un poco desconcertado.

No podemos hacerlo aquí…- Yuusei le miró extrañado, pero luego sonrió de medio lado:

Entiendo…- acto seguido cerró lasl laves del agua y salió de la ducha comenzó a secarse superficialmente, Kaori quien aún trataba de regular su respiración, le observaba extrañado, pero no tuvo tiempo de preguntar nada ya que el chico regresó hacia él y lo cargó sin contemplacioens.

¡HEY!-

Vamos a la cama…- debido a la sorpresa, el chico se aferró a su cuello como lapa; en cuanto escuchó decirle aquello el sonrojo y nerviosismo anterior volvieron a tomarlo desprevenido:

N-no me refería a eso… Y-yuusei… espera…- el mayor comenzó a besarlo otra vez en medio de sus protestas, ahogando unos cuantos “no” él pensaba que era parte del juego pero Kaori comenzaba a alarmarse de verdad, en su mente no dejaba de resonar aquella charla que tuvo con Harada-sensei después de que le confirmaran los análisis que se había sacado:

¿Y bien Harada-sensei? ¿Qué dicen los resultados- el rostro del galeno tenía un semblante tranquilo, como era habitual en él- Asahina-kun… tus resultados arrojan que, efectivamente… eres un hombre fértil- el chico no pudo disimular su sorpresa, a pesar de que estaba preparado para algo así.

Como sabes, los hijos de hombres como tú, tienen una gran probabilidad de serlo; tú mismo la conoces… en este momento tienes 19 años, en tu organismo a penas se está despertando esta capacidad…-

¿Tendré algún síntoma, doctor? Pregunto para saber y no asustarme o a mis padres…- agregó una risilla nerviosa, el médico negó con la cabeza:

Tranquilo, no es nada grave… de hecho, el proceso de “fertilidad” en un hombre es muy parecido al primer periodo de una mujer…- Kaori se extrañó, a pesar de haber investigado algo, no pudo evitar preguntarse en que se distinguían estas diferencias, y así se lo hizo saber al médico:

No tendrás menstruación si es lo que te preocupa… en realidad, no son muchos cambios solo es el hecho de que estás en función de poder concebir…-

Doctor… pero que es lo que hay de diferente entre los sexos… es decir, es una mutación o…-

Es un tipo de evolución, digámosle así… porque hasta la fecha no se ha dado una causa exacta al porqué, pero si la hemos estudiado… en algunos hombres como tú, como tu padre, como tu amigo… tienen una anomalía nada grave en su estructura cromosomatica; esta anomalía es algo así- el doctor comenzó a dibujar en una hoja la estructura de los crosomosomas del hombre- presenta una pequeña desviación… la base del ser humano es esta… el ADN y sus cromosomas, entre los hombres y las mujeres se distingue por XX y XY, esta anomalía se presenta como una desviación entre el espacio de la “Y” , como si fuera un tridente… ¿lo ves? Es muy pequeño y casi no se nota…- siguió dibujando en el papel conforme explicaba, Kaori lo observaba atentamente- es apenas minúsculo; pero en base a esto el cromosoma sexual presenta un cambio en su estructura posterior, de alguna manera esos cambios hicieron a ciertos hombres fértiles… y el hecho de que sea algo mínimo no cambió por completo el resto del esquema…ya que no cumple con las funciones a las que fue dedicadas el género femenino… una hipótesis del porqué haya sido precisamente el hecho de concebir una de estas consecuencias quizás sea porque es un gen hereditario, necesita trasmitirse para su subsistencia y mutación… aunque todavía no está comprobado…-

 

¿Entonces… si llego a tener un hijo… también será fértil?-

En realidad ahí se repite el padrón de probabilidad del que hablábamos anteriormente… solo un 85% de los hombres hijos de varones fértiles puede llegar a ser considerados dentro del grupo, el otro 15% no obtuvo ese gen-

Ya veo… entonces el único método para saber si los hombres somos así  es por medio de análisis de sangre-

Hasta el momento si, aún no se establece un perfil concreto ya que a pesar de que la mayoría de los casos son jóvenes bajos y delgados, los hay altos y robustos…en realidad aún falta mucho por descubrir en este campo…-

 

Kaori se quedó en silencio, preocupado por la poca información contundente que había encontrado en sus desvelos por internet y lo que el doctor le decía, el médico comprendió su silencio:

 

No debes preocuparte por tu amigo, Kaori… mira, te lo pondré de manera fácil… si el tiene esa capacidad es porque su cuerpo está preparado para ello, los hay casos difíciles, no lo niego pero Kusama-kun es fuerte y hasta ahora todo va bien… no debes preocuparte, ¿de acuerdo?- Kaori sonrió comenzando a tranquilizarse, después de un suspiro recordó su propia situación:

Doctor… este… sobre… ehm… ¿c-como debería cuidarme? Y-ya sabe… de…- el galeno rió ante el tartamudeo del joven, con amabilidad le respondió:

No debe avergonzarte, es natural que te preguntes eso… pues como te digo, no hay un método preventivo para ti como los anticonceptivos o DIU porque es un estado que se rige por tiempo; de los 20 o antes hasta los cuarenta… hasta ahora no se ha establecido en que periodos eres fértil o no, así que es un cuidado constante… lo único que recomendamos es el uso del condón…- Kaori asintió totalmente avergonzado, el hecho de que le pidiera a Yuusei –en un momento dado- el uso del preservativo seguramente les hará tener un momento de incomodidad…

 

 

Y ese momento, era ahora…

Yuusei… h-hay algo que debes saber…- resignándose a contar “la verdad” al menos en lo que se refiere a sus análisis; así como evitar estar en la misma situación que su amigo… no era porque no quisiera, solo que no estaba listo, además no se sentía lo suficientemente fuerte como él.

¿Qué cosa?- preguntó deteniendo todo acto lujurioso, se quedó encima del chico, sosteniéndose saber sus brazos en espera de que hablara:

Veras… eghm… Yuusei…- volteaba a todos los rincones de su cuarto, había comprado una caja de condones para ver cómo funcionaban, ya que en su vida había visto uno que no fuera en los libros de texto; pronto divisó el cajón donde los había guardado.

¿Qué pasa?-

Este… ¿puedes sacar lo que está adentro del cajón de mi escritorio?- Yuusei se extrañó un poco pero decidió hacerle caso, al abrirlo y tomar la caja se sorprendió por su contenido:

¿Condones? ¿Y porque tienes algo así?- preguntó exaltado, Kaori se golpeó la frente:

Son para ti…-

¿Qué?- ahora no entendía nada… ¿Por qué había comprado condones si eran hombres? ¿Para él? Bueno…era el que iba arriba pero ese no era el punto…

Kaori… somos hombres… y estoy sano, por si lo dudas- ahora se sentía ofendido y el aludido se extrañó; pero recordó que otra función tenían los “globitos”.

Oh damn… no… no es eso…-

Entonces… Kaori, ¿quisieras explicarte de una buena vez?- comenzaba a desesperarse, el menor se sentó en la cama mirándole con seriedad:

Soy fértil…-

 

-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-

 

¿Fértil? ¿A qué te refieres?- Kaori rodó los ojos, ¿era posible que no entendiera? Pero haciendo acoplo de toda su paciencia comenzó a explicarse:

Eso quiere decir que… p-puedo quedar… ya sabes...-

¿Embarazado?- Yuusei no cabía en sí de su sorpresa e incredulidad, ¿en verdad podía ser cierto?

No entiendo… c-como… ¿Cómo está eso?- Yuusei  dejo la caja encima del escritorio y se acercó a su novio, sentándose en la cama- ¿Quién te dijo eso?-

¿R-recuerdas cuando fui al doctor porque no me sentía bien del estomago?- tras su asentimiento, el joven continuó- Fue porque… bueno, comencé a buscar en internet este tipo de casos y encontré algunos datos alarmantes… el doctor me examinó y solo diagnosticó que tenía colitis… por los nervios del ingreso y así… pero igual me mando a hacer pruebas para ver si también podía serlo… y hace unos días fui por mi resultado…-

Y entonces…-

Efectivamente… s-soy un hombre, pero puedo concebir como mis padres y los tuyos…- Yuusei se quedó algunos momentos en silencio, procesando la información, cuando ya iba analizando bien los puntos le preguntó:

¿Estás seguro?-

Absolutamente… mis resultados arrojaron que yo pertenecía a este grupo… en realidad, si me lo esperaba…- pasaron algunos segundos de silencio, Kaori le había extendido la hoja de resultados dejando qu Yuusei los examinara; al terminar le devolvió la hoja y se quedó en silencio mirando al frente; Kaori esperaba algún comentario, pero el chico no decía nada, sus pensamientos comenzaron a dispararse entre los “y si” quizás Yuusei no se sentiría a gusto con el sabiendo eso… quizás el no esperaba que el chico resultara alguien así, ciertamente, desde que comenzaron a salir, Kaori se había imaginado toda una vida con el hombre de sus sueños… el cual estaba sentado justo al lado suyo pero tal vez el chico piense diferente… se sintió mal:

L-lo siento…- escuchó estas palabras con un dejo de tristeza, Yoh salió de sus pensamientos mirándolo extrañado:

¿Qué sientes? ¿Qué pasa?-

Es que… te quedas callado… no dices nada y…- una pequeña lagrima se deslizo por su mejilla- Tal vez… te haya decepcionado… pero es mejor saberlo antes… ¿no crees? Entenderé si no… si no…- no podía siquiera imaginarlo, una vida sin Yuusei era inconcebible, el mayor lo atrajo enseguida a sus brazos, tranquilizándolo:

Lo siento… es que todo esto es tan sorprendente…-

¿No te molesta?- Kaori se separó estupefacto; Yuusei le sonrió con sinceridad:

¿Por qué habría de hacerlo? Si en un futuro seguimos juntos, nos casamos nada me llenaría más de dicha que tener hijos contigo…-

Pero…-

Shh… yo no te veo menos increíble de lo que ya eres… además te recuerdo que soy hijo de dos hombres también, así que no soy quien para negarlo...- Kaori sonrió en medio de las lagrimas que había dejado salir, Yuusei le besó en los labios con suavidad y limpió las gotitas con las yemas de sus dedos.

Entonces… ¿usamos el condón? ¿O prefieres arriesgarte?- Kaori enrojeció furiosamente y lo golpeó en el pecho en señal de protesta- ¡Póntelo!- Yuusei solo le besó con languidez antes de pararse de nuevo de la cama y traer la cajita de su lugar.

Notas finales:

Que puedo decir? se nota k yuusei es hijo de shinobu :D jajajaja ahora... una pequeña nota:


Ejem... como que vengo repitiendo esto hace ¿diez? capitulos... pero el fic esta "terminando" según yo, quería terminarlo en el sesenta y pum... la razón de esto, es que estaba concentrando demasiado la atención en los protagonistas, cosa que debe ser... pero si ya les cree trama y sentido a lso demás personajes, porque no enfocarme en ellos tambien? He pensado mucho en eso y no hizo falta más que un empuje para decidirme a seguirle como lo tenía planeado.

Este es el fic más largo y estoy segura que será el mas largo que escribiré... al menos por ahora :D en verdad me esta costando demasiado, porque en cada capitulo me pregunto si llegará a ser hartante... y supongo que un poco, no me voy a convencer de lo contrario.
Asi que, esta historia seguirá a pesar de todo, aunque al final solo quede un lector, quiero realizarla como la tengo visionada...
No la estoy alargando... solo desarrollando; aunque a fin de cuentas sea la misma cantaleta.
La razón de ello, es que una serie muy especial me enseñó el valor de una buena historia... cargada de dramatismo y alegrías... quiero realizar esta en todos esos aspectos.

Asi que, ahí estan mis motivos para no verse un final aún.. pero de que va a haber final, va a haber final, sesenta y pico de capitulos no seran en vano.
Solo les pido paciencia. Gracias x su atención :D

 

Cualquier comentario, duda, sugerencia, petición, reclamo, tomate o santo dorado (please!) favor de dejarla en un comentario :D Thank you!!


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).