Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Promise me... por BlackMoral_Inc

[Reviews - 4]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Un divague~ eue

Te veo entrar a nuestro departamento, moviéndote con suma lentitud, como si el tan solo respirar te pesara demasiado. Te tomas más del tiempo necesario en cerrar la puerta.

 

Estás muy serio y sabes que odio verte así. Sonríe, amor; amo cuando lo haces porque me transmites alegría y seguridad. Esa es una de las cosas que más me gusta de ti y una de las razones que me hicieron enamorarme perdidamente; me haces sentir como si todo fuese posible cuando estoy contigo. ¿Te sientes así también cuando estamos juntos?

 

Ahh, Aki-chan, nuestra vida había sido maravillosa.

 

 

Te veo caminar acompasadamente hacia la pequeña salita, ahí donde solíamos pasar las tardes jugando videojuegos, peleando y perdiendo el tiempo.

 

Sigues muy serio y ya comienzo a preocuparme.

 

Inhalas con profundidad mientras empuñas tus manos. Tu expresión de seriedad cambia a una de dolor. ¿Qué te duele, amor?

 

Espera un momento… ¿Estás llorando, Aki-chan? ¡No! Por favor, Aki, todo menos eso. No…no me gusta que llores.

 

 

Observas la sala, repasando cada rincón con la mirada, incluso la esquina donde estoy parado, viéndote. Me mantengo en silencio a pesar de que quisiera decirte tantas cosas. Qué irónico ¿no? las personas siempre callamos cosas importantes, pero luego queremos decirlas cuando ya es muy tarde.

 

 

Tus lágrimas caen una por una con mayor rapidez y en mayor cantidad; tu seño se frunce y te llevas una mano a la cara para secar la humedad de tus mejillas.

 

Hay tanto silencio aquí y lo odio. Éste lugar siempre se mantuvo alegre porque yo hablaba demasiado y tú reías a cada rato, amaba eso. En cambio, hay silencio, tanto que es casi palpable; es una quietud densa que incomoda, que casi duele.

 

Me estoy sintiendo mal por ti.

 

— Aki-chan… - Te llamo y no puedes oírme. Comienzas a sollozar. –Aki… - Te llamo otra vez.

 

Camino despacio hacia ti. ¿Puedes sentirme? Estoy aquí, amor, contigo. Mírame, por favor. Quiero abrazarte, consolarte diciendo que todo estará bien, que nada malo pasará; lograr tranquilizarte como tú me tranquilizabas, decirte que no te sientas mal, no voy a irme.

 

Akira, mírame. Estaré a tu lado cuando quieras hablar, reír o llorar…como ahora.

 

 

Me acerco un poco más, pero tú te alejas. Vas hacia nuestra habitación y te sigo. Miras hacia todos lados, como si buscaras algo.

 

De pronto te paras frente al buró, te miras al espejo y comienzas a tallarte los ojos con brusquedad. ¿Estás enojado, Aki?

 

— No tenías derecho… - Por fin te oigo hablar. No sabes como deseaba oír tu voz, aunque esta vez suena rígida. – No tenías derecho a dejarme…no debiste irte. Eras un mentiroso, dijiste que estaríamos juntos siempre… ¡Me mentiste! ¡Me mentiste, maldita sea! – Alzas la voz y me asusto. Nunca me ha gustado verte enojado, gritas y dices cosas feas.

 

Empiezas a tirar las cosas que hay sobre el buró. Las botellitas de mis perfumes salen volando y se hacen añicos al golpearse con la pared. Esas cosas que compartíamos día a día ahora las tiras como si fueran lo peor del mundo. Azotas contra el piso todos aquellos artículos que te pedía me compraras por vanidad, porque siempre quise verme bien para ti.

 

Puedo notar tu enojo, tu rabia, tu decepción…y me duele. Estás enojado conmigo porque no cumplí una de mis promesas y te entiendo, no es tu culpa, amor. Pero yo no quería faltar a mi palabra, Aki-chan, yo no quería dejarte solo.

 

— ¡Te odio! – Gritas y me aprieto las orejas con las manos para no oírte, mientras, cierro los ojos. - ¡Te odio, Takanori…te odio!

 

No, no me grites, no me odies. Por lo que más quieras, Aki, no me odies. Escúchame por favor, me duele que digas esas cosas.

 

— ¡Me dejaste solo!

 

— ¡Ya, ya basta! – Grito también, no puedo seguir escuchando más. Cállate, por favor.

 

Pero tú no puedes escucharme.

 

Otra vez estás llorando. Te pasas las manos por el cabello, jalándotelo con desesperación.

 

Tu enojo es tanto que golpeas el espejo con los puños. Los trozos de vidrio salen disparados por todos lados.

 

¡Eres un tonto, Akira Suzuki! ¡¿Ya viste tus manos?! ¡Estás sangrando! No quiero que te hagas daño por mi culpa.

 

Caes de rodillas al piso, tapando tu rostro con ambas manos. Tu llanto me parte el corazón, Aki. Sé que estás sufriendo por mí y me siento tan culpable. Soy una mala persona; yo, que te amo tanto, no debería hacerte sentir así.

 

Yo  no quería, Aki. Te juro que no quería faltar a mi promesa; yo quería pasar más tiempo juntos.

 

 

 

Me agacho a tu lado y acaricio tu cabello. Ya no llores, por favor. Estoy aquí, mírame.

 

— Estás muerto. – Te oigo decir. Apenas te entiendo debido a tu llanto amargo.

 

Es verdad, estoy muerto, pero eso no significa que no esté cerca de ti.

 

¿Recuerdas aquella vez cuando caminábamos bajo los árboles de cerezo? Yo te dije que, si algún día no pudiésemos vernos más, tuvieses siempre presente que yo estaría a tu lado, siempre y cuando pensaras en mí. Y así será siempre, Aki-chan.

 

Hoy he venido a despedirme porque la noche que morí no estabas conmigo y no pude decirte adiós. Pero, mientras mi respiración se entrecortaba y miraba el cielo negro, yo pensaba en ti. Pensé en ti hasta el último soplo de mi vida.

 

 

No estés triste, amor. Yo estoy bien y quiero que lo estés también. No estés enojado ni pelees con la vida. No odies al pobre ingrato que perdió el control de su auto y me golpeo con éste; y, por favor, no me odies, yo no quería dejarte.

 

Vamos, sonríe, amor. Eres una gran persona y seguramente encontrarás alguien digno de ti; no te preocupes, no voy a enojarme si quieres rehacer tu vida con alguien más, al contrario. Te deseo todo lo mejor por haber hecho mis últimos años maravillosos y felices.

 

Quiero pedirte perdón por todas las veces que te hice enojar, por las que me comporté como un niño caprichoso; por todas las veces que te ofendí y dije cosas que te hirieron.

 

Fuiste un gran compañero en ese viaje llamado vida, pero ahora que me he quedado a la mitad del camino, quiero que continúes por tu cuenta…por los dos, hasta que olvides el dolor que te embarga ahora.

 

 

 

Por favor, Aki…ya no llores. Levántate y camina, aún tienes mucho que vivir y eres fuerte. No te detengas por mí.

 

— Taka… - Te oigo nombrarme.

 

—Aquí…aquí estoy, amor. – Te digo. Levantas tu rostro enrojecido y empapado. Me coloco frente a ti y veo fijamente tus ojos, tus bonitos ojos oscuros. ¿Puedes sentirme?

 

Estiro un brazo para alcanzar a acariciar tu mejilla y secar de ella tus lágrimas. Tus hombros tiemblan ligeramente, tus labios están entreabiertos, jalando el aire rápidamente.

 

— Te amo…te amo tanto. – Dices en susurros. Yo también te amo, Aki, pero pronto tendrás que olvidarlo porque te hace daño; ya no podemos estar juntos como antes y tienes que entenderlo.

 

 

Desvías la mirada hacia la ventana. La noche ya se hizo presente.

 

Tu celular comienza a sonar, pero lo ignoras y te levantas con pesadez. Caminas hacia la cama y te acuestas en el lugar que yo solía ocupar cada noche. Abrazas mi almohada y aspiras el aroma impregnado en ella.

 

La sangre en tus manos ha comenzado a secarse y tus sollozos son menos audibles, pero tus lágrimas no cesan.

 

Me siento a tu lado y acaricio tu cabello, así como solías hacerlo conmigo cuando yo no podía dormir. Me cuidabas hasta que el sueño me vencía y ahora yo lo haré contigo. Me quedaré aquí a verte dormir, velaré tu sueño para que duermas tranquilo y descanses bien, no quiero que vayas a enfermar.

 

 

Pronto caes dormido. Aún abrazas la almohada y a veces dices mi nombre.

 

Las horas pasan rápido para mí y tengo que irme pronto, pero antes quiero que me prometas algo, amor. Promete que serás feliz, que vas a sonreír siempre y no dejarás que mi recuerdo detenga tu presente. Promete que serás feliz y yo podré irme tranquilo.

 

Me inclino a darte un beso y me pongo de pie.

 

Se está haciendo tarde, la claridad ya se asoma por las persianas de la ventana y seguramente pronto despertarás.

 

Es hora de marcharme. Solo quería despedirme y verte una vez más.

 

Cuando despiertes, recuerda que debes sonreír siempre porque yo estaré observándote todo el tiempo.

 

Promete que serás feliz y yo prometo estar a tu lado toda una vida.

 

 

Recuérdame como la persona que te amó hasta el final de sus días y permanece siendo la persona de la que me enamoré.

Hasta siempre, amor.

 

 

Notas finales:




Bien, este es un oneshot en el que no puse nada de empeño xD De pronto me hallaba escribiendolo y ya~
¿Merece review? uwú

_____

Aprovecho este espacio para avisar que quité el fic "Love, gimme love" porque, como ya había mencionado antes, entré a la escuela. Mi horario está un poco desordenado todavía y no tendré tiempo para actualizar el fic, ya que está un poco largo. Pienso continuarlo y en cuanto me establezca con lo de la escuela y tal, comenzaré a subirlo de nuevo. Una disculpa a quienes lo leían.


Gracias por leer :)


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).