Apovechó ese ínfimo momento para acariciar su pequeña y delicada mano. Sabía que estaba mal, el dueño de aquella mano era un hombre,infantil y aniñado pero hombre, él también lo era pero le daba igual...lo amaba, lo amaba con locura casi rozando la obsesión pero le daba igual.
El pequeño de pelo anaranjado no lo sabía, no sabía los sentimientos de su hyung, de su líder. Lo que más le preocupaba a Doojoon era que él se enterase de sus sentimientos,que le rechazase y le mirase mal por ser "distinto" o "diferente" eso sería peor que dejarle morir desangrado, o que le atravesases con miles y millones de agujas, sin duda prefería morir de cualquiera de esas maneras y más, que su pequeño ángel lo rechazase.
Puede ser que Yoseob tenga 22 años ya muy cumplidos pero, era cierto, que entre ser traineer de la companía y que era muy inocente para esa clase de relaciones nunca tuvo novia, por lo menos conocida...Ese era otro temor del líder. ¿Y si "su pequeño" tenía algo parecido a una novia o si estaba enamorado de alguna mujer? Ser mujer era algo que se escapaba de sus posibilidades, era la otra cara de la moneda.
Doojoon estaba entre la espada y la pared, es decir, o el problema era no poder decir nada para no asustar al pequeño pero, la espada le empezaba a perforar el corazón.
El mayor le estaba dando grandes caricias cargadas de ternura y complicidad.
Complicidad con los sueños de Yoseob, que, según su cara eran hermosos y alejados de una realidad triste. Doojoon repartió mas caricias por el brazo del pequeño hasta que decidió seguir un camino por el brazo izquierdo de este hasta su mejilla, pasando con su sensible cuello, recibiendo a cambio un estremecimiento y un suspiró como recompensa. El mayor creó unos dibujos en el moflete del que dormía.
Entonces pasó, algo que hizo latir el corazón del moreno, algo que le pareció imposible.
Yoseob pronunció calmadamente su nombre "Doojoon..." fue mas bien un suspiro largo, fue como si el pequeño,en sueños, demandase la presencia del líder.
Este sintió paliceder y desvanecer sintiéndose pequeño más y más pequeño .·pensaba que Yoseob le había pillado justo cuando llevaba medio año mirando y cuidando al visual maknae como si una obra de arte se tratase.
Después se dió cuenta de que el chico teñido no le había descubierto sino que le necesitaba, lo llamaba en sueños y el mayor se aventuro a hablar "estoy aquí, siempre lo estaré para ti...porque...porque te quiero" Doojoon observó la reacción del menor. En ese momento la esperanza le sonrió, su pequeño Yoseobbie le correspondía "hyung...yo...también" esas palabras se marcaron a fuego en su mente,las recordaría para siempre pero, ¿Cómo podría mirarle a la cara sin sentir ganas de devorarlo, sin decirle que era la persona mas feliz gracias a él? La siguiente mañana se le antojaba difícil, muy difícil. Doojoon miró el reloj que marcaba las 3 de la mañana solo le quedaban 4 horas de sueño, o menos debido a los nervios, pero eso daba igual merecía la pena ya que su alma se liberó del peso de la conciencia.El líder aprovechando el profundo sueño del menor, le beso. Fue un beso casto y lleno de ternura, que no resultó ser tan secreto como él pensaba...