Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Esto es más difícil de lo que parece por amudoki

[Reviews - 41]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

jo jo jo! aqui les dejo un nuevo capitulo~ y en este...HAY LEMON LEMON LEMONADA!!!

bueno me dejo de pegos y os dejo el cap que seguro quereis ver el lemon!

disfrutad~

¿Te quieres casar conmigo?-Preguntaba Kyoya a la vez que abría la cajita y le dejaba ver un anillo de oro blanco con un diamante naranja en forma de lágrima.

Tsuna se quedó en silencio, mirando a su pareja de arriba a abajo y después al anillo. Mientras, el moreno empezaba a impacientarse al no ver ninguna respuesta por parte del castaño. Tras unos minutos de tensión el ojimiel por fin reaccionó. Su semblante era serio y no denotaba ni una pizca de alegría. Levantó la mano y le cruzó la cara de una cachetada dejando al mayor en estado de shock.

-Esto era por hacer que casi me de un paro cardíaco.-Declaró a la vez que se sobaba la mano. Le había pegado todo lo fuerte que le permitía su cuerpo en ese momento.-Y esto...-Se lanzó sobre Kyoya abrazando lo por el cuello y tumbando lo en la cama quedando el castaño encima.-Como respuesta.-Lo besó apasionadamente sorprendiendo en primer momento al mayor pero que en seguida reaccionó y le devolvió el beso. Se besaban como si no hubiese mañana, sacando a relucir los siete meses que habían pasado sin hacerlo.

El moreno agarró al castaño por la cintura pegando lo más a él y rodó sobre la cama para quedar sobre el ojimiel. En un momento en el que el menor intento coger aire el mayor aprovechó e introdujo su lengua en la boca de este sacando le un pequeño gemido. Kyoya bajó una de sus manos de la cintura hasta las piernas y comenzó a acariciarlas haciendo suspirar a Tsuna. Este a su vez empezó a desabrochar la camisa de su pareja a la vez que recorría su pecho. Finalmente le sacó el chaleco y la camisa dejando lo desnudo de cintura para arriba. El moreno tampoco se quedó tras ya que le quitó la bata que llevaba dejando lo en boxer. Acercó su boca a los rosados pezones del menor engullendo los como si fuesen la fruta mas deliciosa del mundo.

-Mnn...-Gemía el menor al notar la lengua y los labios de su pareja sobre su piel.

El moreno, al que ya no le quedaba mucha paciencia por haberse pasado siete meses sin sexo, no se demoró mucho en dirigir su mano al miembro del castaño sacando le un fuerte gemido que fue acallado rápidamente por los labios del mayor.

-Tsuna...Hikari esta dormida. La vas a despertar.-Decía mientras se separaba y miraba un momento a la cuna como esperando escuchar un llanto. Este solo asintió e intentó mantener al mínimo sus gemidos.

Kyoya frotaba el miembro del menor sobre el boxer sacando le unos gemidos que eran ahogados por la mano de este. Finalmente le sacó la ropa interior dejando ver una erección que salia de entre las piernas del castaño. El moreno sin demorarse mucho acerco su boca al miembro del ojimiel depositando un beso en la punta que hizo lo estremecer. A continuación comenzó a lamerlo de arriba a abajo como si de un helado se tratase. Por último lo engullo por completo haciendo que la espalda del menor se arquease a causa del placer. En ese momento llamaron a la puerta.

-Sawada-san.-Se escuchaba una voz femenina desde el otro lado de la puerta.-Vengo a por la bebe para hacerle unas pruebas.-Decía la mujer aun desde afuera.

En ese momento el pánico cubrió el rostro de Tsuna convirtiendo lo en una mueca de terror. Kyoya reaccionó rápido. Cogió su camisa y se metió en el baño para evitar que la enfermera lo viese. A su vez el castaño que ya había reaccionado se puso la bata rápidamente y se metió en la cama tapando se hasta el cuello.

-Con permiso.-La mujer entró a la habitación y se acercó a la cuna para ver que la bebe dormí. La cogió en brazos con cuidado de que no se despertara y comenzase a llorar.-Sawada-san. ¿Le ocurre algo?-Preguntaba la enfermera al ver al ojimiel con todo el rostro sonrojado y la respiración entrecortada.

-No...Nada.-Decía con esfuerzo reprimiendo los jadeos que le provocaba el haberse parado justo antes del orgasmo.

-Esta bien...-La enfermera ya se iba cuando algo la detuvo.-Perdone. ¿No había venido su pareja?-Preguntaba curiosa de no verlo en la habitación.

-¿Eh?-Decía el castaño confuso por la repentina pregunta.

-Si. Ese chico moreno tan guapa de ojos grises.-Comentaba la enfermera recordando al chico que había vito entrar a la habitación hace una hora.

-Ah...Si...Ha ido...¡A por un café!-Exclamaba intentado disimular la respuesta improvisada que acababa de dar.

-Oh...ya veo.-Le enfermera se dio la vuelta para salir de la habitación pero antes de salir pudo vislumbrar un boxer y un chaleco como el que llevaba Kyoya bajo la cama. La enfermera al entender lo que pasaba rió por lo bajo y se apresuro a decir.-Volveré con la niña dentro una de hora y media.-Salió de la sala haciendo suspirar de alivio a Tsuna pero se volvió a tensar al sentir la puerta abrirse de nuevo.-Por cierto...Las paredes de todas la habitaciones están insonorizadas haga me el favor de decirle a su pareja que salga del baño.-Y diciendo esto se fue dejando a la pareja un tanto sorprendida y apenada al ser descubiertos.

-Nos pillaron.-Decía el moreno mientras salia del baño con una sonrisa divertida.

-E...Eso parece.-Respondía el castaño completamente sonrojado y excitado.

Kyoya se dirigió a la puerta y puso el cierre par evitar algún tipo de nueva interrupción. Después se encaminó a la cama y subió a ella con movimientos felinos. Se acercó al ojimiel y le sacó la bata y la manta que lo cubrían dejando ver su palpitante y mojada erección.

-Lo debes estar pasando mal.-Decía el moreno mientras pellizcaba uno de los pezones del menor.-Nos paramos a la mitad.-Terminaba de decir mientras sonreía sádicamente.

-Kyoya...Por favor...-Gemía el menor mientras sentía espasmos por todo su cuerpo por culpa de la excitación.

-Esta bien.-El mayor no sabía como era capaz de controlarse ante tentadora escena de tener a Tsuna suplicando por sus caricias.-Pero a cambio tu también me tienes que dar servicio.-Sentenciaba mientras se desabrochaba el vaquero y se bajaba el boxer dejando ver su enorme miembro erecto.

-¿Eh? Ky...Kyoya...Yo...-El menor parecía algo renuente a la idea de darle una felación al moreno.

-No me iras a decir que no quieres ¿verdad Tsuna?-Preguntaba mientras lo miraba penetrántemente.-por que si es así ten por seguro que deberás terminar tu solito.-Estaba siendo un poco cruel pero de alguna forma tenía que pagarle el tenerlo tanto tiempo sin hacer el amor. Vale el sabía que sonaba repetitivo decirlo tanto pero para Hibari Kyoya el pasarse siete meses, SIETE, sin sexo, era el calvario más grande del mundo que solo pasaría por el bien de Tsuna.

-Urg...Eres un demonio.-Decía con un puchero en la cara y entre jadeos.

-Seré un demonio pero soy TÚ demonio. Además, aun siendo un demonio, te enamoraste perdídamente de mi.-Reía el moreno al ver el sonrojo de su linda pareja ante sus palabras.

-Idiota.-Murmuraba por lo bajo el ojimiel mientras se acerba a la erección del moreno y comenzaba a tratarla.

Primero la masturbó suavemente con la mano. A continuación acercó su boca y lamió la punta haciendo estremecer al moreno. Después metió el miembro en su boca todo lo que pudo dando le una felación en toda regla a Kyoya. Este de vez en cuando dejaba salir un que otro gemido ronco. Viendo que pronto llegaría al orgasmo decidió tomar cartas en el asunto. Ensalivó cuatro de sus dedos y se inclino lo suficiente para llegar a introducir un dedo en la entrada del menor. El castaño gimió fuerte al notar como un dedo era introducido en la entrada dejando desatendida su labor. El moreno al notar esto agarro al ojimiel de la nuca y lo instó a seguir con su trabajo mientras este introducía un segundo dígito en el menor. Lo preparó concienzudamente dilatando lo más de lo normal ya que llevaban mucho tiempo sin hacerlo y no quería hacerle daño. Ya llevaba cuatro dedos y Tsuna gemía como loco. El mayor sacó sus dedos y posicionó su miembro en la entrada del menor comenzando a penetrar lo lentamente para intentar no dañar lo. El menor iba a soltar un fuerte alarido al sentir la intrusión pero lo aguanto no queriendo preocupar a Kyoya. Cuando estuvo completamente dentro se quedó quieto unos momentos tras los que empezó a embestir al ojimiel lentamente. Las respiraciones y el ritmo cardíaco se iban acelerando al compás de las estocadas del moreno que eran cada vez más rápidas y profundas a la vez que certeras convirtiendo el cuerpo del castaño en un instrumento de la lujiria.

-Ah...Mng...Kyoya...Ah...ahí...Mnn...más fuerte.-Suplicaba Tsuna perdido en el placer. Se sentía tan bien. El ojimiel se encontraba igual o más frustrado que el propio Kyoya pero este no lo demostraba dado que si lo hacía era seguro que el moreno acabaría convenciendo lo para hacerlo o le acabaría dando, otra vez, algún tipo de afrodisíaco disfrazado.

El castaño sentía que se estaba perdiendo a si mismo entre tanto placer. El sentir al moreno penetrando lo con fiereza y pasión lo volvía loco. Por su parte el mayor estaba que no cabía de gozo al poder, al fin, hacerle el amor al menor. Este aceleró las estocadas a un ritmo frenético que hizo que los dos se sumergieran en el mayor de los placeres carnales. Todas las envestidas del moreno llegaban a dar al punto sensible del ojimiel haciendo lo gemir de una manera inimaginable. Gracias al cielo, las paredes eran insonoras que si no ya todo el hospital estaría enterado de su situación. El moreno dio unas últimas estocadas y se corrió en el interior de Tsuna haciendo que al sentir el liquido caliente en su interior se corriera también. Se quedaron unos minutos echados en la cama intentado normalizar su respiración y tras eso Kyoya salió del interior del castaño sacando le un leve gemido. Después se quedaron mirando se fijamente a los ojos y se besaron apasionadamente. A continuación el ojimiel se separó y miró con una sonrisa angelical al moreno.

-Si...Acepto casarme contigo.-Dijo finalmente mientras se abrazaba al mayor reposando su cabeza en el pecho del moreno. Este a su vez depositó un beso en la frente del menor.

-¿Lo sabes?-Preguntaba el mayor mirando a su pareja entre sus brazos.

-¿El qué?-Preguntaba confundido ante la repentina pregunta del moreno.

-Que os quiero a ti y a Hikari más que a mi propia vida.-Respondía dulcemente el moreno mientras le acaricias el cabello al castaño.

 

 

///EXTRA///

 

Tras la candente sesión de sexo Tsuna se quedó un rato dormido, rato que pasó Kyoya viendo como el castaño dormía. Le parecía realmente tierno el verlo tan tranquilo, con esa carita de ángel. A veces ni el mismo podía comprender como ese muchachito lindo y tímido se podía llegar a convertir en ese joven sexy y desvergonzado con solo algunas caricias. Pero esa era otra de sus tantas facetas que le encantaban al moreno del menor. Y si, tenia muchísimas facetas. La tímida, la alegre, la hiperactiva, la maternal, etc. En definitiva, de podría decir que, era un hombre de mil caras. Kyoya salió de sus cavilaciones al notar como el castaño se removía entre sus brazos. Este se estirazó levemente y se talló sus ojos para intentar desperezarse, cosa que consiguió levemente. Mientras se estirazaba notó un peso extra de su mano y se dispuso a ver que era. Al mirar vio el anillo de compromiso que le había regalado el moreno.

-Es realmente lindo.-Comentaba Tsuna embelesado con la belleza del diamante naranja.

-No tanto como tú.-Le respondía cariñoso, raro en el moreno ya que no era del tipo empalagoso, el mayor.

-Idiota.-Decía sonrojado el castaño mirando hacia otro lado.

-Por cierto Tsuna.-Decía Kyoya atrayendo la atención del castaño.-Creo que tenemos un problema.-Comentaba preocupado haciendo que el ojimiel se tensase.-No hemos utilizado condón.-Decía mientras comenzaba a ponerse pálido. No es que no le agradase eso de la paternidad, pero era demasiado pronto como para tener el segundo.

Por su parte el castaño se relajó y empezó a reír se descontroládamente lo que molesto un poco al moreno pero que este calmó besando lo en la comisura de los labio.

-Je, je, je, no te preocupes. Los donceles tras dar a luz solemos tener un periodo de entre un mes medio o dos meses en los que no somos fértiles.- Explicaba sonriente Tsuna.

-Con que no eres fértil eh...-Tras decir eso se lanzó sobre el castaño y comenzó a masturbar de nuevo su miembro.

-¿Eh? ¿¡Qu...Qué ha...haces!?-Preguntaba mientras comenzaba a excitarse por las caricias.

-Hay que aprovechar.-Decía sonriente.-Además todavía falta media hora para que regrese la enfermera.-Con estas palabras a Tsuna le quedó claro que iba a tener un segundo round.

-NOOOO.....

Por otra parte, al otro lado de la puerta, se encontraba la enfermera que se había llevado a Hikari con esta en brazos, espiando con un portatil conectado inalambricamente a una de las cámaras de seguridad con un grupo de siete u ocho enfermeras más.

-KYAAAAAAAA~.-Gritaban mientras observaban la escena de sexo entre los dos chicos y tenian un derrame nasal.

-¡Esto es demasiado bueno!-Gritaba la enfermera que se llevó a Hikari.-Pienso darles media hora más solo para poder seguir viendo esto~

 

CONTINUARA...

Notas finales:

MUAJAJAJAJAJAJAJAJA que tal? les gusto? si les gusto (o no) dejenme reviews plis!!!

ademas que hice el esfuerzo de no tardar demasiado TT^TT merezco un review no? nos leemos!!


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).