“No entiendo porque cada vez que te tengo cerca de mi no puedo reaccionar, solo con mirarte a los ojos se me nubla la mente, se que somos amigos, pero lo que siento por ti no siento que sea solo amistad” Pero que estoy pensando eres mi mejor amigo solo eso -dijo golpeándose la frente-
- Sanada, te encuentras bien? -Pregunto un poco preocupado un chico de cabellos azules-
- S-si, si, tranquilo Yukimura -Contesto el moreno volviendo la vista al libro que tenia al frente- En que estábamos?
- Bueno, se supone que me estabas ayudando con el trabajo de química -Seiichi hablo con un tono inocente- Pero si no quieres ayudarme lo hago yo solito, y tú te puedes ir a casa- Levantándose de la mesa y acostándose en la cama-
“Genichiroh concéntrate no te distraigas con tonterías, pero es imposible, como quisiera besar esos labios” -Sanada se acerco lenta y silenciosamente hasta la cama del Buchou y se quedo observándolo, Seiichi tenía los ojos cerrados y respiraba tranquilamente, tenia los labios entreabiertos, y el moreno no aguanto la tentación, se fue acercando mas, pero tropezó y cayó al suelo, Seiichi se levanto rápidamente y observo a Sanada tendido en el piso- Que te paso Sanada, seguro te encuentras bien? -Seiichi ayudo a Sanada a levantarse-
- Ehh, creo que mejor me voy a mi casa, te prometo que terminamos el trabajo mañana, adiós -Sanada salió casi corriendo de la habitación-
-Al llegar a su casa, se fue a su habitación y se tumbo en la cama- “Que es lo que me pasa? Porque no puedo estar cerca de Yukimura sin que me pasen cosas raras? Porque pienso cosas insanas cada vez que lo veo, es decir, Yukimura es mi amigo de toda la vida y también es hombre, no creo que uno pueda enamorarse de su mejor amigo, es imposible” -Sanada siguió pensando un poco más en su Buchou- “Pero es que es tan puro, tan delicado, esos hermosos ojos, y esos labios que tanto me gustaría besar, su piel tan blanca como la nieve, Yukimura es simplemente perfecto”- Pero que cosas dices Genichiroh -Dándose palmadas en las mejillas- Mejor tratare de dormir, mañana tengo que ayudarlo con el trabajo
-A la mañana siguiente Sanada se despertó un poco exaltado- Esto es grave -viendo hacia su amiguito que se encontraba muy despierto- Porque yo tengo que soñar cosas así -Sanada se dirigió al baño y se metió en la regadera con el agua fría, estuvo un rato largo hasta que su problemita cedió, se arreglo y salió rumbo a la escuela-
-Como era costumbre Sanada llego muy temprano a la escuela, el salón estaba vacío, entro y se sentó en una de las mesas del fondo y se recostó a pensar- “Genichiroh, tienes que calmarte hoy volverás a estar a solas con él y tienes que estar en calma”
- Sanada, llegaste temprano como siempre- Sanada levanto la mirada y no pudo evitar encontrarse tan cera de aquellos profundos ojos azules, e inmediatamente volteo la mirada a otro lado- Q-que haces aquí, te pueden llamar la atención si te ven -Seiichi se sentó en la mesa, agarro al moreno por la corbata, se acerco lo mas que pudo al rostro de Sanada y le hablo seductoramente- Te espero con ansias en mi casa, tenemos algo pendiente por hacer -Luego se levanto y salió del aula, dejando a Sanada, sonrojado y confundido- “Yukimura estaba coqueteándome?” -Sanada no pudo evitar sonrojarse al recordar a Seiichi tan cerca de él-
Buenos días Sanada -Saludo Renji que acababa de entrar al salón- Ehh… B-Buenos días, Yanagi -Acomodándose en su puesto- Te encuentras bien? -Pregunto el castaño sentándose al lado de Sanada- Si, tranquilo no es nada -Tratando de parecer calmado- Esta bien, otra cosa, Yukimura me dijo que les avisara que hoy no hay practicas en el club, al parecer tiene unos asuntos que arreglar, pero no me dijo que era, está muy misterioso hoy -Sanada se quedo estático como piedra- Sanada, seguro te sientes bien, porque mejor no vamos a la enfermería
- No, no tranquilo estoy en perfectas condiciones -Las clases comenzaron de maravilla, pero a medida que se acercaba la hora de salida el moreno se ponía cada vez más nervioso, hasta que sonó la campana que indicaba que se habían acabado las actividades del día- Sanada, quieres que nos vayamos juntos a casa? -Pregunto Renji llamando la atención del moreno que estaba sumido en sus pensamientos- Ehh… No, tranquilo, yo todavía no me voy a casa, puedes irte tu -Renji salió del aula, y Sanada se quedo pensando en lo que le había dicho Seiichi temprano- “Cálmate Genichiroh, seguro lo malinterpretaste, Yukimura solo se refirió al trabajo, mas nada” mejor me voy, a Seiichi no le gusta que lo hagan esperar -Sanada recogió sus cosas y salió a esperar a su Buchou, pero Seiichi no se encontraba por ahí- Sanada-fukubuchou!! -a lo lejos alguien lo llamo, volteo y se encontró con un chico de cabellos rojos, acompañado de otros dos- Bunta, Nioh, Akaya, que hacen aun por aquí, deberían irse a sus casas
- Ya nos íbamos, solo que lo vimos por aquí y bueno, vinimos a saludar, espera a alguien? -Pregunto Bunta haciendo una bombita con su chicle- Si, estaba esperando a Yukimura, pero no sé porque tarda tanto?
- Yukimura-buchou se fue hace rato, dijo que tenía unas cosas que hacer, y por eso no iba a haber practicas en el club, así que me temo que lo dejaron plantado, jajaja -Se burlo Nioh y luego comenzó a caminar seguido de los otros dos- Adiós Sanada-fukubuchou, espero y encuentre a la novia fugitiva, jajaja -“Ese Nioh, mañana en la práctica me la va a pagar, ahora mejor me voy o llegare tarde para ayudar a Yukimura” -Sanada comenzó a caminar en dirección a casa del buchou, pero parece que nada estaba de su lado, porque llego más rápido de lo normal- Bien, ya estás aquí, cálmate -Se acerco a la entrada y toco el timbre- Si, quien es? -Pregunto Yukimura desde adentro- S-soy yo Sanada -Sanada estaba sudando frio, e intentaba calmarse- Esta abierto entra, ahorita bajo me estoy cambiando, espérame en la sala -Sanada entro a la casa, y se dio cuenta de que no había nadie, y se puso aun más nervioso, iba a estar a “SOLAS” con Seiichi, ahora sí que no iba a poder controlarse, junto todo su autocontrol y se sentó a esperar a Seiichi- “Ya sabes Genichiroh, no te distraigas con él, concéntrate en el trabajo así terminamos más rápido y puedes volver a casa” -A los pocos minutos, Seiichi apareció y Sanada no pudo evitar sonrojarse levemente, no todos los días se veía a Seiichi vistiendo así, llevaba unos shorts de jean negros un “poco” cortos, un suéter tejido color celeste que le quedaba un poco grande y largo en las mangas, unas medias también celeste más arriba de la rodilla y el cabello recogido con unos ganchitos, pero a decir verdad no se veía nada mal- Perdón por la tardanza, quieres algo?
- A ti -Susurro Sanada- Dijiste algo? No escuche? -Haciendo el inocente- Eh, si, un poco de agua estaría bien -Sanada no podía quitarle la vista de encima a Seiichi, el cual solo se estaba haciendo el desentendido, pero su plan había funcionado a la perfección- Aquí tienes tu agua -Dijo entregándole el vaso- Y donde están todos? -Seiichi se sentó en la mesita del centro para quedar de frente a Sanada- Yami tenía una presentación en la escuela y fueron a verla, yo no fui porque tengo cosas más importantes que hacer contigo -Esto último lo dijo con un tono más seductor- Si claro, tenemos que terminar el trabajo, donde están los libros, ah aquí están -Dijo agarrando los libros y sentándose en el suelo, tratando de no prestarle mucha atención a Seiichi, pero fue imposible- Sanada~, yo no entiendo nada, la química no es lo mío- Seiichi se sentó cerquita de Sanada, y se recostó en el hombro de este- T-tranquilo, acomódate que yo tratare de explicarte de un modo sencillo -Seiichi se sentó de frente a Sanada, y este trataba de esquivar cualquier contacto visual- Sanada~, no me dijiste como me veo -Seiichi poso delante de Sanada- O es que no te gusto? -ladeo la cabeza y se coloco un dedo sobre los labios- Te ves bien -Respondió Sanada sin quitar la vista del libro- Que antipático eres -Seiichi se sentó en el mueble, cruzo los brazos e hizo pucherito- Esto es aburrido, mejor hagamos travesuras y cosas malas -Sanada no pudo evitar incomodarse ante tal comentario, pero recobro su compostura- Yukimura, primero terminemos el trabajo
- Pero es que es muy aburrido, además necesito saber algo -levantándose del mueble y colocándose justo en frente de Sanada- Porque últimamente no quieres ni mirarme a la cara, siempre que quiero acercarme a ti me esquivas -Seiichi cambio su expresión a una más triste- Genichiroh, nos conocemos desde que éramos unos niños, te conozco bien y sé que algo te pasa, si es que ya no quieres estar conmigo te entiendo -Seiichi trataba de contener el llanto- Si es que te cansaste de ser mi amigo o de cómo te trato, lo entenderé, pero no me ignores como si fuera un extraño, porque tú eres muy importante para mí, y me duele mucho lo que me estás haciendo -Sanada no cabía en su asombro, no podía reaccionar, quería decirle a Seiichi todo lo que sentía por él, y el porqué lo evadía, pero simplemente no podía- Genichiroh, por lo menos quiero que sepas una última cosa de mi, y luego puedes irte, desde que nos conocimos supe que íbamos a estar juntos por siempre, en ese momento era muy pequeño y pensé que solo eras un simple amiguito, pero luego con el paso del tiempo supe, o bueno pensé que eras la persona con la cual iba a pasar el resto de mi vida, no sé qué pensaras de mi, ya que los dos somos hombres, pero no me importa lo que piensen, porque lo que yo sé, es que te amo Genichiroh Sanada, y nada podrá cambiar lo que siento por ti… -Seiichi se levanto tratando de ocultar sus lagrimas y se dirigió a las escaleras, pero cuando iba a subir algo se lo impidió, Sanada lo agarro por la muñeca y lo atrajo hacia él, lo abrazo por la cintura y lo beso-
-Seiichi no podía creer que Sanada lo estuviera besando, pero luego cerró los ojos y correspondió el beso, fue un beso un poco torpe, pero lleno de amor, hasta que tuvieron que separarse por falta de oxigeno, Sanada acaricio la mejilla del peli azul y lo miro a los ojos- Seiichi, no pienses ni por un solo instante que ya no te quiero, todo lo contrario, últimamente no podía dejar de pensarte, pero preferí ignorarte por miedo al rechazo, a que luego me tuvieras asco por enamorarme de ti, y luego no pudiera volver a ver esos ojos que tanto me encantan, escuchar tu dulce voz, y volver a ver tu hermosa sonrisa, moriría si me quitaran esas cosas, sin ti no tengo razones para vivir, yo también te amo demasiado, y no quiero perderte nunca, espero que me perdones por hacerte sufrir todos estos días, no sabía el daño que te estaba causando, pero quisiera seguir a tu lado por el resto de nuestras vidas, si me lo permites, quisieras ser mi novio? -Seiichi volvió a besar al moreno el cual le correspondió inmediatamente, hasta que tuvieron que separarse- Geni, gracias, claro que quiero, me has hecho inmensamente feliz, no sabes por cuánto tiempo he soñado con este momento y al fin se hizo realidad -Seiichi comenzó a besar a Sanada, pero ahora con más pasión, Sanada se tumbo en las escaleras y sentó a Seiichi sobre él, comenzando a acariciar la espalda del más bajo-
- Tadaima, hay alguien en casa? -Pregunto una voz gruesa desde el recibidor- S-si papá ya voy -Seiichi se levanto rápidamente y se acomodo la ropa, al igual que Sanada y fueron a recibir a la familia del buchou- Buenas noches, perdonen la molestia -Saludo el moreno haciendo una pequeña reverencia- Genichiroh, que bueno tenerte en casa, sabes que no es molestia, tu eres como otro hijo para mí -El padre de Seiichi le dio unas palmaditas en el hombro a Sanada- Seii-nii-chan -Seiichi cargo a su hermanita que había entrado corriendo- Oh, hola Genichiroh, veo que Seiichi se divirtió bastante, jejeje -La abuela del peli azul comenzó a reír- Abuela!! Mamá!! -Se quejaron Seiichi y su madre a la vez- Mas respeto con el joven Genichiroh, el solo vino a ayudar a Seiichi, disculpa por favor -La señora hizo una reverencia en señal de disculpa- Tranquila, no tiene porque disculparse, no es nada
- Mami, papi, Geni-nii-chan se puede quedar a cenar con nosotros? -Pregunto la niña pasándose de los brazos de Seiichi a los del moreno- No lo sé, por nosotros no hay problema pero Genichiroh tiene que regresar a su casa ya se está haciendo tarde -Yami vio a Sanada y lo abrazo- Geni-nii-chan, te puedes quedar? -El moreno vio a Seiichi- Si claro, además tengo que ayudar a tu hermano a terminar un trabajo, no se puede quedar así -La pequeña se bajo de los brazos de Sanada- Sii!! Yupi!! Ahora me voy a cambiar y luego juegan conmigo -Y luego de eso subió corriendo a su habitación- Sanada y yo vamos afuera mientras esta lista la cena
-Sanada se acostó en el pasto y Seiichi se acostó al lado de él reposando su cabeza sobre el hombro del moreno, y acariciándole el pecho- Sanada, crees que debería decirle a mis padres, mi abuela si sabe, pero mis padres no saben nada, y me da miedo decirles -Sanada lo acerco mas a él y comenzó a acariciarle el cabello- Lo correcto sería que les dijeras tu, y no que se enteren de otra manera, además no creo que tus padres te vayan a odiar, ellos te aman demasiado, así que yo te recomiendo que les digas la verdad -Sanada beso tiernamente a Seiichi, y luego se quedaron observando las estrellas, hasta que llego Yami y se pusieron a jugar con ella, hasta que la cena estuvo lista-
-Durante la cena, hablaron de cualquier cosa, cuando terminaron de comer, Yami subió a su habitación a jugar un rato más, y los demás fueron al living a conversar- Mamá, Papá, tengo algo muy importante que quiero decirles -Seiichi se levanto y se paro frente a sus padres- Yo se lo conté a mi abuela porque tenía miedo de decírselo a ustedes, pero ya no quiero seguir guardando el secreto, perdónenme si les falle como el hijo mayor de la familia, perdón padre, pero antes quiero que sepan que los sigo queriendo igual, mi amor por ustedes siempre será el mismo, si se los digo es porque es lo que soy, y no puedo cambiar el hecho de que yo soy… soy homosexual, y Sanada es mi novio -Seiichi no pudo evitar que unas lágrimas se le escaparan- Hijo, no tienes porque llorar, no has hecho nada malo, jamás podríamos odiarte, eres nuestro hijo y tu felicidad es lo que más deseamos, y si tu felicidad está al lado de Genichiroh, entonces te apoyaremos y les damos nuestra bendición -La madre de Seiichi los abrazo a ambos y luego el padre se acerco a Sanada- Te felicito, hijo, no cualquiera tiene mi consentimiento para estar con mis hijos, solo te digo que si de verdad lo amas se lo demuestres, y no lo lastimes, porque él es un gran tesoro para mi, y te lo estoy entregando a ti para que lo cuides y lo protejas, así que no me defraudes -Luego de esas palabras los abrazo y felicito- Una última cosa, usen protección, no quiero bebés tan pronto, jajaja -La abuela de Seiichi comenzó a reírse- ABUELAA!! No digas esas cosas, además yo soy hombre, no puedo quedar embarazo, es imposible -Seiichi no pudo evitar ponerse rojo como un tomate, lo que hizo que la abuela se riera mas fuerte-