Titulo del fic: Vainilla, fresa y chocolate
Parejas: KyuMin
Tipo: Yaoi
Género: romántico, drabble
Rating: PG
Advertencias: Ninguna
Descripción: ¿que pensara Kyuhyun de estos sabores?
Vainilla, fresa y chocolate
Vainilla, ese color de tu piel, el aroma de tu cabello, el sabor de tus labios. Nunca creí que llegara a gustarme, nunca fue de los sabores que agradaran a mi paladar. No le veía sentido a como mucha gente se afanaba en crear y crear más productos de ese sabor. Para mí, era el último de los que podía escoger en cualquier ocasión, hasta que te tuve entre mis brazos y te probé, ahora es uno de mis sabores favoritos.
Fresa, el color que te representa, el tono que adquieren tus labios cuando te beso, tonalidad que pinta tus mejillas cuando estas en el paroxismo del placer, momento en el que somos uno. Dulce y agrio a la vez, tal como nuestro amor. Ahora es una fruta mundialmente reconocida, podría decirse que es una de las reinas en cuanto a repostería se trata, sin embargo, eso no le quita que su existencia se dio de forma salvaje. Ese pequeño detalle es totalmente como tú, tierno pero salvaje, muy opuesta tu personalidad.
Chocolate, en realidad es mi sabor favorito de todos. Una creación de los dioses americanos hacia el mundo, utilizado no solo en repostería, solido, liquido, cremoso, duro, blando, dulce, amargo. Tantas formas en que se puede disfrutar. Dicen que comiendo chocolate puedes olvidar un poco la soledad debido a su sabor, pero también sirve como afrodisiaco. En invierno te calienta, en forma de bebida humeante, en verano te ayuda a soportar el calor en forma de helado. El eterno regalo de los enamorados, de las reconciliaciones, los cumpleaños, siempre puedes recibir una sonrisa si obsequias chocolate. Claro, excepto aquella vez que estabas a dieta y me los aventaste a la cara.
Vainilla, fresa y chocolate, tres colores, tres sabores.
Te veo sobre la cama durmiendo. Tu apacible rostro, no puedo dejar de verte, dejar de amarte. De repente se me ha antojado un dulce con esos tres sabores. Salgo del cuarto, y me dirijo a la cocina, tardo mucho buscando lo que necesitaba, pero es que lo mio no es ese lugar y cuando entro me parece una tierra desconocida, donde las ollas y sartenes se burlan de mi, y el contenido del refrigerador habla a mis espaldas.
Regreso al cuarto, sigues ahí, los parpados cerrados, los labios entreabiertos, tu pecho subiendo y bajando al ritmo de tu respiración, tan bello como siempre.
Vainilla, tu nívea piel desnuda, recubierta por el sudor que expide tu cuerpo. Fresa, el color de tu rostro mientras mi boca te otorga placer. Chocolate, ese dulce líquido café que esparcí por tu cuerpo y que ahora limpio con mi boca. Tres sabores, tres colores, si, pero ninguno se compara al delicioso sabor de Sungmin cuando se corre en mi boca, ese exclusivo y único sabor que solo yo, Cho Kyuhyun, he probado y seguiré probando hasta la eternidad.