-No quiero que te vallas…-dijo al tiempo que tiernas lagrimas comenzaban a brotar de sus bellos ojos, azules como el cielo mismo, los cuales comenzaban a enrojecer por las gotitas saladas que rodaban por sus mejillas.
-Te prometo que volveré.-le sonrió Tenma al tiempo que limpiaba las lagrimas del rostro de su amigo.-y cuando regrese, seré un caballero y podrás terminar mi retrato.
Alone dejo que su amigo secara sus lagrimas, al tiempo que se esforzaba por sonreír y miraba fugazmente el cuadro que el mismo pintó, aun incompleto, pues no lograba encontrar un color que le pareciera tan hermoso como los ojos de su castaño amigo.
-Bien.-sonrió Alone de manera más sincera.
Ambos se quedaron mirándose a los ojos, sonriéndose con la mirada, sabiendo que, pesé a que se separarían por mucho tiempo, se volverían a ver en algún momento.
Pasaron los minutos y Tenma no despegaban la mirada, pues sabia que seria la última vez en mucho tiempo que vería esos hermosos ojos azules, tan puros y azules que reflejaban la inocencia y ternura del rubio.
Por su parte, Alone no apartaba su vista de los ojos de Tenma por que le encantaban sus ojos, esos ojos castaños que, al iluminarse por el fuego o la luz del sol, se tornaban en rojo, un rojo que le parecía el más hermoso que jamás hubiera visto.
-El verdadero rojo…-susurro Alone.- Tenma, ¡son tus ojos! El color de tus ojos… ese es el verdadero rojo.
-¿El verdadero rojo?
-Si… ese es un verdadero color… me gustan mucho tus ojos.-sonrió al tiempo que cerraba sus ojos y ladeaba su cabeza con una expresión tierna.
Tenma revolvió los cabellos de Alone de manera divertida, mientras ambos reían.
De repente, el semblante de Alone cambio a uno completamente triste.
-Alone ¿Qué tienes?-pregunto un preocupado Tenma.
-Es que… ¿Qué pasara si no regresas?
-¡Claro que regresare!-dijo entre divertido y tierno.-mira, muéstrame tu mano derecha…
El nombrado hizo lo que se le indico, y extendió su mano, Tenma la sostuvo y arremango su túnica, dejando ver una linda pulsera echa de flores.
-¿Lo vez?-dijo al tiempo que ensañaba su mano izquierda, mostrando una pulsera idéntica.-tu y yo siempre vamos a estar juntos…-sonrió-lo hemos estado desde el principio y ahora nos separaremos solo por un tiempo.
Tenma acaricio la mejilla de Alone, y beso su frente.
Desde siempre, Tenma había protegido a Alone de todo y todos, era su mejor amigo, su hermano, su familia. Era todo lo que tenia, y por ello siempre era muy dulce con el, sabia lo frágil y sensible que podía llegar a ser, por lo que siempre lo trataba con mucha ternura.
-Tenma, te quiero mucho.- sollozo el tierno muchacho al tiempo que se abrazaba al cuello del nombrado-¿de verdad tienes que irte?
-Si, lo siento, pero regresare ¿si?-dijo mientras hacia que le soltara el cuello y tomaba sus mejillas para limpiar las lagrimas y poder mirarle a los ojos.-sabes, a mi también me gustan mucho tus ojos… son azules, son tan puros y hermosos como tu…
Ante lo dicho por Tenma, las mejillas de Alone tomaron un delicado sonrojo.
-Gra…gracias Tenma.-sonrió colocando sus manos sobre las del castaño, tratando así de retirarlas.
Sin embargo, Tenma no aparto sus manos del rostro de Alone, si no que acerco su rostro al del joven rubio lentamente, cuando Alone sintió que estaba demasiado cerca, cerro sus ojos con fuerza, pensando en que recibiría un beso, pero sintió otra cosa.
-Alone… no quiero asustarte, pero creo que tienes fiebre.-susurró poco después de haber juntado su frente con la de el nombrado.- además, estas algo rojo…-sonrió de manera animada.
Alone pareció no escucharle, y desvió la mirada algo avergonzado, y también ligeramente molesto, por que la verdad era que se había quedado con las ganas. Así se quedo un momento hasta que decidió que el realmente quería un beso de Tenma, tal vez por el echo de que se iría el lo deseaba para recordarlo además de cómo a un amigo y hermano, como la persona que le dio su primer beso. Luego de debatirse un rato, decidió que lo mejor seria solo darle un beso en la mejilla. Plan que se vio afectado debido a que Tenma se movió antes de que sus labios tocaran su mejilla, terminando en un tierno y accidental beso en los labios.