Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Mi desastrosa vida. por Zombie Gamer

[Reviews - 12]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Hola gente, he aqui la segunda entrega. Está algo corta, pues ultimamente estou ocupada y no encuentro mucho tiempo para escribir... así que hice un hueco en mi ajustada agenda xD y escribi este capítulo, espero lo disfruten tanto como yo.


 

-          Amor de mi vida, pedacito de cielo, abridme la puerta que me estoy meando. – hablo Zoey desde afuera con mucho “cariño”, aporreando la puerta con vehemencia pues creía imposible que su vejiga aguantara un segundo más.

 

Pero Shawn está demasiado cansado y deprimido como para levantarse de su cómodo sillón individual y dejar de lado su tazón lleno de palomitas, además no paso mucho tiempo para que Zoey hiciera uso de su bestialidad o fuerza bruta, dejando la puerta en el piso.

-          No pienso limpiar eso… - comento el pelinegro sin inmutarse a pesar de la invasión privada que había efectuado la pelirroja descaradamente.

-          Uff… un poco más y exploto. – dijo aliviada Zoey después de salir del baño. - ¿y tú que tal? No me respondes las llamadas ya empezaba a creer que te habías suicidado o algo por el estilo.

-          Pues ya ves, estoy entero.

-          Aja, excepto tu corazón. Lo que tú necesitas es echarte un polvo y problema solucionado.

-          No creo que ese método funcione esta vez…

-          ¿En serio? conmigo siempre funciona. – ronroneo sugerente.

-          Deja de acosarme, no voy a acostarme contigo ni aunque este hasta la coronilla de LSD.

-          Pff… tú te lo pierdes. -  suspiro resignada, ¿qué había esperado después de todo? desde que entro a la pubertad sus revolucionadas hormonas le exigían entregarse de forma carnal a ese pedazo de moreno, sin embargo sus encantos femeninos no levantaban ni el pe… quiero decir, no causaban ninguna reacción física que no fueran arcadas. ¿Tan malo es que un gay tenga sexo con una mujer necesitada?

-          Zoey… oye… ¿hola? llamando a tierra ¿hay alguien ahí?

-          Perdona pero es que de la nada me vino una pregunta existencial.

-          No creo querer escucharla.

-          ¿A los gays se les para cuando se ven en el espejo?

-          ¿No crees que es sexista?

-          No me cambies el tema.

-          Como sea… a fin de cuentas se puede saber ¿a qué haz venido? estaba muy bien ahogándome en mis propias lágrimas.

-          ¡Es exactamente por eso que estoy aquí! – Zoey repentinamente se mostro entusiasta, pues se había encaramado a la mesa y con el puño en alto exclamo al cielo sin quitar la vista del techo, a saber que era lo interesante que veía en el además de las manchas de humedad. – He preparado algo especial para ti.

-          Sabes, sinceramente sé que me arrepentiré por preguntar pero la curiosidad gana, así que… ¿qué haz preparado? – pregunto dubitativo.

-          Citas a ciegas baby.

-          ¡Qué! ¡Tú estás loca!

-          ¡Oye que tenga esquizofrenia, bipolaridad y trastorno obsesivo-compulsivo no quiere decir que este loca!

-          No te estás ayudando chica…

-          El punto es que ya me canse de verte en ese deplorable estado, estás peor que mi prima Viviana cuando su novio la dejó en el baile de graduación por el travesti del club de radio.

-          Si lo que buscas es animarme te aviso que no lo estás consiguiendo.

-          ¿Qué tienes que perder? si te quedas aquí lo único que harás será ver el maratón de dos horas seguidas de Glee.

-          ¡Oye! ¡esos inadaptados tienen potencial artístico!

Zoey rodo los ojos un poco fastidiada por la terquedad de su amigo, pero ella no se rendiría tan fácilmente, utilizaría sus sutiles métodos de persuasión y dado que enseñar un pecho no sirve con homosexuales se tuvo que conformar con la extorsión, que se le da muy bien.

-          Así que aunque me hinque de rodillas no darás tu brazo a torcer ¿no?

-          La oferta suena tentadora pero no está vez.

-          Bueno no quería hacer esto pero no me dejas opción. – suspiro y aguardo unos momentos en silencio para agregar suspenso al ambiente. –  Entonces tendré que llamar a tu madre y decirle que sus “misteriosos gastos” se deben a que cierto pelinegro robo su tarjeta de crédito para comprar pornografía gay vintage.

-          No te atreverías… - dijo Shawn lo más amenazador que pudo pero en su voz había un dejo de preocupación que Zoey no paso por desapercibido.

-          Créeme… soy capaz de hacerlo me conoces mejor que nadie.

Shawn trago duro, sintiendo su propia saliva bajar por su garganta con tortuosa lentitud. ¡Por supuesto qué sabe lo que esa maniática punk es capaz de hacer! y no quería ni imaginarse el escandalo que armaría su progenitora al enterarse con que fines morbosos fue usada su tarjeta de crédito. Estaba acorralado, no veía ninguna vía de escape, por desgracia la pelirroja se había salido con la suya.

-          Está bien… pero no esperes que actué adorable.

-          ¡SÍ! ¡Te aseguro que lo disfrutaras! ¡Y no te pongas ropa de mal gusto, no queremos que tu cita se lastime la vista cada vez que te mire!

-          ¡Qué te jodan!

-          ¡Si lo haces tú no hay problema!

Shawn se encerró en su habitación, mirando de un lado a otro las diferentes prendas de su closet, se decidido por unos vaqueros azul oscuro un poco ajustados, lo suficiente como para poder apreciar sus torneadas y bien definidas piernas, una camisa negra manga larga que se arremango hasta los codos y un par de botas desgastadas.

-          No estás mal guapo, con esas pintas no solamente atraerás la atención de tus citas.

-          ¿Citas? – pregunto extrañado.

-          Sobre eso… olvide decirte que conocerás a varios tíos que yo personalmente seleccione. Solo… s-solo quiero que estés feliz y olvides a Jordan, alias: capullo, me gustas más cuando estás enojado conmigo o cuando te ríes por mis estupideces. – confeso la pelirroja más roja que un tomate. ¿Entienden la rima? Porque es roja… como un tomate. En fin, como la narradora está creando una situación incomoda dejare que los chichos hablen.

-          Vaya ¿todo eso lo hiciste por mí? – la pelirroja asintió medio avergonzada. – eres la mejor.

Y después de ese cumplido se abrazó a Zoey, en una muestra de afecto sincero, apretando a la pelirroja contra su pecho.

-          Deja de estrujarme las nalgas, pervertida.

-          Lo siento me deje llevar.

Salieron emocionados e igualmente nerviosos, quizás… solo quizás alguna de las citas de Shawn será el afortunado de ocupar ese lugar vacío en su corazón.  

 


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).