Ese día había sido perfecto, había acompañado a Seung Hyun a comprarse un muñeco de colección, incluso lo había ayudado a elegir y lo mejor de todo, es que podía estar a su lado todo el día. No le importaba si era su mejor amigo, solo deseaba acompañarle aunque fuese esa relación de amistad. Con tan solo estar a su lado se conformaba.
Llevaba demasiado tiempo queriéndole, mirándole desde lejos, siguiendo sus pasos cada vez que podía y sacándole una sonrisa cuando lo necesitaba, sí, verlo sonreír era lo mejor que podía ver.
Él era tan perfecto, su pelo azulado incluso se le veía perfecto de ese color, su cuerpo era hermoso de pies a cabeza y cada parte de él era perfecta, no necesitaba cambiar nada, todo él era maravilloso. Estaba pensando en conquistarlo, llevaba tiempo acompañándole a todos lados y dándole luces de lo que sentía, quería estar más seguro antes de declararse.
Sintió la puerta de su habitación cerrarse y miró en esa dirección sentándose en su cama mientras dejaba de lado sus pensamientos.
-H-hyung… -el más pequeño de grupo entró a la habitación algo preocupado.
-Seungri… ¿qué pasa? –Dijo algo preocupado ya que el menor traía una cara de afligido- siéntate. –le hizo un gesto para que se sentara al lado de él en la cama.
-E-esto… sólo quería pedirte un favor… -comenzó a hablar el menor
-¿Qué es? Sabes que haré cualquier cosa que me pidas –Le dio una sonrisa para que el menor se relajara.
-Eres el único en quien más confío y el único que me puede ayudar con algo así…
-Si puedo ayudarte entonces dime que es, sabes que estaré dispuesto a hacerlo, por eso soy tu hyung –respondió Ji mientras le daba una palmada en la espalda.
-Bueno… no te alteres con lo que diré, ya sé que es algo extraño, pero… -hizo una pausa, era como si incluso se le estuviera declarando a él- a mí… a mí me gusta mucho Seung Hyun…
Los ojos de Ji no podían estar más abiertos que en ese momento, sentía como una punzada en el estómago se le clavaba… ya sabía que era lo que quería el Maknae y no sabía qué hacer. Amaba tanto a Seung Hyun… ¿era capaz de entregar a la persona que tanto amaba a las manos de otra sólo por amistad?
-No pongas esa cara, ya sé que no es lo acostumbrado… -dijo mientras miraba el suelo el menor- pero de verdad me gusta, Ji… ayúdame. Tú le conoces mejor que nadie, sabes lo que le gusta o lo que no, sabes qué tipo de personas le agradan… ayúdame Ji, de verdad me gusta mucho.
Ji no podía despegar su mirada de la pared, era imposible lo que acababa de escuchar, no sabía que hacer… no quería fallar como amigo, pero de verdad amaba a Seung, esto era peor de lo que pensaba. Después de todo, nunca supo lo que Seung sentía, él nunca notó algo en su cara que le diera luces de que lo quería también… quizás, sólo quizás… Seungri podría conquistarlo… de todas formas mientras Seung Hyun fuera feliz, él lo sería también.
-Está bien… -respondió Ji mientras intentaba sonreírle de manera familiar
-¡Muchísimas gracias, hyung! Sabía que entenderías –le dijo mientras le daba un abrazo para luego soltarlo y mirarlo- dime, ¿qué debo hacer para ganar su confianza primero?
-P-pues… sólo sé tú… -dijo mientras bajaba su mirada- hazle sentir que puede confiar en ti, no necesitas nada concreto para eso… -sentía que le incomodaba mucho el nudo en la garganta
De repente la puerta de la habitación se abrió dejando ver a un preocupado Seung Hyun parado en su puerta.
-Perdón que los interrumpa, pero… -se detuvo para mirar al Maknae quien estaba algo… ¿nervioso? Y a Ji algo… ¿preocupado? Ninguno de los dos lo miraba, Ji solo miraba el piso y el Maknae la pared, algo estaba sucediendo… ¿podría ser que al Maknae le gustaba Ji y se le estaba declarando? No, eso no podía ser… no dejaría que se declarara-. Esto… Ji, necesito tu ayuda con algo.
Ji subió la cabeza y sonrió de lado, tenía una punzada en el estómago, pero se sentía feliz de que se hyung lo eligiera para algo. Antes de poder responder el Maknae le dio un codazo, dando a entender que esta era su oportunidad para acercársele.
-H-hyung… -comenzó el Maknae- creo que Ji Yong hyung está ocupado ahora, yo puedo ayudarte…
-Oh, lo siento ji… no sabía que tenía cosas que hacer –Ji siempre le decía que sí a todo… cuando necesitaba algo era el primero en llegar, algo definitivamente sucedía… ahora estaba algo enojado, el rubio prefería hacer cualquier cosa antes que estar con él, claramente no estaba ocupado. Ji no fue capaz de decir algo, si lo decía era capaz de llorar ahí mismo-. No es gran cosa Maknae, solo algo pequeño… de todas formas puedes acompañarme- dicho eso el menor asintió rápidamente dándole una sonrisa mientras Seung Hyun salía de la habitación.
Antes de salir, Seungri se dio la vuelta y le dedicó un “gracias” y una sonrisa a su hyung para luego cerrar la puerta y dejar a Ji sentado mirando fijamente la pared mientras una lágrima recorría su rostro.