Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Antología de OneShots por Agnes-San

[Reviews - 247]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Ultimo Shot, apenas acabo de terminarlo :D

realmente no tenía idea de como se llamaría así que es un titulo muy pata xDD

va dedicado con todo mi cariño y afecto a Juli-chan que siempre me ha dado su apoyo incondicional :D gracias Juli :)

 

A leer, perdon por las faltas.

Confusiones


 


Jonghyun siempre fue mi ejemplo a seguir, él era guapo, hacia mucho ejercicio y tenía lindas chicas rondándolo, por algún tiempo quise ser como él, eso solo fue hasta que comencé a ver a los chicos más que a las chicas, cuando empecé a sentir atracción por Jong; Mamá siempre decía que él no era un buen ejemplo, y yo siempre me pregunte el por qué.


—    Jonghyun —suspiré una vez más, él era tan guapo, sus músculos anchos, sus hombros varoniles, su cintura angosta, todo en él me parecía sumamente atractivo; odiaba a la zorra de su novia (Yoona) por ser una maldita suertuda.


Ya era de noche y yo no había terminado mi tarea por estar pensando en la única persona que jamás sería mía. Un hematoma muy grande se extendió por todo el cielo haciendo que las personas encendieran las lámparas, o lo que hiciera un poco de luz artificial.


Voltee a la ventana pensado en que haría Jonghyun en este momento; ¿Y habría cenado? ¿Andaría de juerga con algunos de sus amigos? Quizá solo estaba cogiendo con su noviecita estúpida.


Las luces de un auto cegaron un poco mis retinas, maldije por lo bajo a la dueña de ese auto que se aproximaba hasta mi casa, el auto de Yoona, y claro que si ella venía, también lo haría Jonghyun por lo tanto me apresure a bajar. Masculle un par de impropios a Yoona solo por ser una maldita.


Peiné mi cabello con los dedos, y me di una última mirada al espejo antes de emprender mi marcha hacía donde estaba mi tío, mi único tío, él más sexy y guapo, el más maravilloso.


Jonghyun no venía con la zorra, solo era ella y unos lagrimones muy grandes que surcaban sus mejillas llenas de maquillaje, llenas del rímel corrido por las lagrimas que desechaba.


—    Sabias que tarde o temprano sucedería — hablo mi madre tomándola en brazos.


—    Pero no creí que fuera tan rápido. Él ya n me quiere, ya se busco otra. —habló ella y yo me llene de felicidad pero a la vez también me enojo, no porque la dejara si no porque no sabía que otra zorra sería, al menos a esta ya la conocía las mañas.


Mamá me miro un momento y me indico con la mano que subiera y le hice caso solo por no aguantar los alaridos de Yoona.


Seguro mamá iría a dejarla a casa de sus padres y no llegaría hasta más tarde, eso si los papá de Yoona la dejaban regresar, esperaba que si por que no quería que se quedara en mi casa por miedo a contagiarme su bajo nivel.


Y tal como lo había previsto, luego escuche el auto de mamá saliendo. Siempre ella tenía que hacerla de niñera de la estúpida zorra de Yoona, solo por que la niña no se sabía cuidar sola.


Me eche en la cama esperando a que el sueño me llenara, me contara historias dulces en un país inexistente y estuve a punto de quedarme dormido cuando escuche algo más.


—    ¡Yoona! —gritó la voz de Jonghyun.


Estúpido de seguro estaba tomado, con mucho pesar y antes de que armara un escándalo por encontrara s su noviecita me asome a la ventana.


—    Yoona no está aquí. —le avise.


Maldito Jonghyun aun y todo borracho se miraba tan guapo.


—    Kibummie, ábreme bonito  —habló dulce haciendo alarde de su estupidez, pero aunque sabía que no estaba en sus cinco sentidos aun así me alegre porque me llamara Kibummie y me dijera bonito.


No lo dude ni siquiera un minuto cuando ya estaba abriendo la puerta, y jamás se me ocurrió quitarme la pijama, y ponerme algo mejor, algo más presentable; estúpido Kibum.


—    Hola. —sonrió estúpido, dejando salir aire con olor a alcohol.


—    Yoona no está aquí. —volví a decir y él solo me despeino los cabellos, sabía lo mal que me caía eso y aun así lo seguía haciendo.


—    ¿Y tu mamá? — cuestionó.


—    No está. —advertí molesto porque me despeinara.


—    Te pintaste el cabello. —dijo como si nunca se hubiese dado cuenta, estúpido Jong, si por él me decolore el cabello, por que supe que le gustaban rubias de grandes pechos y pompas.


—    Si hace más de dos meses que me lo he estado decolorando. —vocifere totalmente enojado pro que en todo ese tiempo no se detuviera a verme ni un maldito segundo.


—    Te miras bonito así. — acomodo una mecha de cabello detrás de mi oído y fue en el momento que repare que estaba más alto que él a pesar de ser menor.


Idiota estúpido de Jonghyun siempre me sacaba de quicio y luego simplemente con un par de palabras bonitas me llenada de ilusión una vez más, aunque él ya tenía a dos zorras que se le entregaban.


—    Si quieres espera a mamá, pero yo me voy a dormir. —no sabía que decir por qué estaba muy avergonzado frente a él, así que solo subí las escaleras corriendo y me interne en la habitación, saltando a la cama, cobijándome.


Había dicho que me veía bonito, aunque no estuviera sobrio eso era mucho para mí, jamás me decía nada, solo me veía un momento y luego desviaba la vista cuando sus ojos se posaban con los míos.


—    Me quedare a dormir contigo. —dijo su voz totalmente cerca, siquiera lo había escuchado acercarse. Me sorprendió de verdad —Di que si sobrinito bonito.


—    No, hueles a alcohol. — me excuse, quería tenerlo cerca pero seguro que si lo tenía tan cerca ms hormonas saldrían disparadas y él me tacharía de pervertido.


A pesar de todas las escusas que le puse se empeño en dormir en mi habitación, a veces él era como un niño inmaduro, que por más que le dices “no” siempre te lleva la contra diciendo “si”.


Se acostó detrás de mí para mi mala suerte, aunque me gustaba sentir su calor, su perfume varonil opacado por el olor del licor que había ingerido, paso una de sus manos alrededor de mi cintura, lo cual hizo que mis vellos se erizaran, respire profundo tratando de no hacer mucho caso a mi adolescencia estúpida.


—    Hueles rico —suspiró en mi cuello, aventándome una ráfaga de aliento caliente, pegando la punta de la nariz contra la piel de mi cuello.


—    Ah~… No hagas eso, y tú hueles horrible. —aclare separándome un poquito de él, pegándome más a la pared.


—    ¿Cuándo dejaras tu mal carácter Bummie? Deberías regresar a los tiempos donde nada te molestaba y siempre sonreías. —torcí la boca un poco.


—    Ya no soy un niño.  —hablé molesto,  porque seguro él seguía viéndome como tal.


—    Eso lo empecé a notar hace tiempo —dijo como si estuviera en sus cinco sentidos.


—    Estúpido puppy, ya duérmete; mañana despertaras con resaca —él sonrió ante mi comentario me pegó más contra su cuerpo.


Me encantaba la fuerza de esos brazos, me encantaba que sus pectorales se pegaran a mi espalda, por un momento quise quedarme ahí para siempre, aunque eso no podía ser porque él siempre sería mi tío, y yo su sobrino, él único.


Cerré los ojos con toda la intención de quedarme dormido lo más rápido posible, bostecé ruidoso para que él supiera que estaba muriendo del sueño aunque eso no era del todo cierto.


—    Duerme Bummie — susurró en mi oído haciéndome estremecer.


 


xXx


 


Algo me hacía cosquillas en el cuello, solo abrí los ojos cuando algo mordió un pedazo de mi carne, cuando un dolor suculento llego hasta mi cerebro, sentía todo tan frio contra mi piel, tenía calor, mucho calor, solo deseaba que eso húmedo me recorriera todo, que me lamiera todo y sacara el calor de dentro de mi organismo.


—    Qué lindo eres. —susurró en mi oído su voz grave, su voz ronca, bonita, rasposa y con aliento a alcohol.


—    No hagas eso. —le pedí con las pocas fuerzas que tenía aun. —Estás borracho.


—    Y tú eres muy tentador — mordió un poco más la piel de mi cuello, me mordí los labios para que no saliera una queja de mi garganta.


Su mano derecha viajo hasta debajo de mi pijama, su solo tacto me hacía estremecer y cerrar los ojos con fuerza tratando de aguantar un poco, apretó uno de mis pezones y entonces me di cuenta que podían ser tan sensibles.


—    No…No lo hagas, m-me duele. —acuse la queja que apenas salía de mi garganta, una excusa muy pobre para mi gusto, una que lo hizo sonreír sínicamente, y apretar más fuerte.


—    Me gusta cuando te quejas. —habló en mi oído, maldita costumbre que tenía.


Lo cierto era que me gustaba tanto tener sus manos rondando mi cuerpo, tan ásperas raspando mi piel, tocándome lascivamente, aunque no fuera consciente, y luego me viera con asco o peor.


—    Quéjate para mí. — llevo una de sus manos hasta mi entrepierna y apretó con fuerza.


—    AHg~ no lo hagas… — me lleve las manos al rostro para que su mirada no viera mi rostro, para no exponerme a él.


Sus manos seguían acariciando mi cuerpo como siempre lo había soñado o mejor, a veces lo odiaba sin embargo eso también es parte del amor, aunque en ese momento era en lo último que pensaba, solo quería disfrutar de sus manos, de su lengua, de sus caricias llenas de lujuria.


—    ¡Ya llegue Kibum! —gritó mamá y Jonghyun simplemente pareció no escuchar nada mientras que a mí la sangre se me congelo.


—    Espera… —susurré empujándolo lejos de mí, algo que lo molestó. —mamá llego, idiota. — de nuevo lo alejé de mí y a regañadientes a cedió a salirse de encima de mí.


Mamá solo hecho una miradita dentro de mi cuarto viendo al idiota de Jonghyun acostado junto a mí, sin embargo solo movió la cabeza en señal de negación y se marchó.


 


xXx


 


Jonghyun se levantó antes que yo, pues cuando desperté no estaba dormido en la cama conmigo y de alguna manera me sentí triste; me bañe en silencio recordando sus manos recorriendo mi cuerpo, diciéndome que le gustaba que me quejara son embargo él estaba en estado de ebriedad por lo tanto seguro que me confundió con alguna de las zorras con las que se acuesta.


Mi miré en el espejo de medio cuerpo, mi pecho seguía tan plano como siempre y nunca iba a tener dos bordos, dos senos como las chicas, las raíces ya se notaban negras por lo tanto siempre sería solo un teñido más en el mundo, mis clavículas eran en exceso prominentes y eso me molestaba porque me hacían lucir enfermo, mis ojos sin maquillaje no eran tan bonitos, castaños comunes, sin nada de especial; ¿y si usaba lentillas? ¿Se notarían más?


Al final solo le robe un delineador del bolso a mamá y medio enmarque mis ojos para que no lucieran tan feos, había un par de marcas en mi cuello que seguro mamá me preguntaría por ellas, claro a cualquiera le llamarían la atención.


Baje a desayunar por que ya era tarde y había quedado con Minho y Taemin de ir a casa de Tae a festejar su cumpleaños justo a su mamá y su hermano mayor, aunque este último nunca estaba.


Al final el imbécil de mi tío aun estaba en casa, solo que ni siquiera se dignaba a verme, eso me molesto por supuesto y yo tampoco le dirigí la palabra.


—    Mamá ya me tengo que ir, vuelvo en la tarde. — le avise y ella solo asintió con la cabeza y le dirigió a Jonghyun una mirada que yo tan bien conocía y que significaba “tenemos que hablar”


—    Si, Minho llamó dijo que te esperaba en el parque, y que le contestes el celular. — dijo ella antes de verme salir.


—    ¿Quién es Minho? —preguntó Jonghyun y la respuesta no al escuche por que ya estaba afuera.


 


xXx


 


Yoona solo quedó como amiga de mi mamá y durante ese tiempo me di cuenta que ella no era tan mala, al contrario era muy amable, aunque se incomodaba aun cuando mencionábamos a Jonghyun.


—    Creciste mucho Kibummie. — habló ella y yo solo sonreí.


Minho estaba como estúpido mirándola, claro ella era muy bonita y aunque al principio siempre la odie por ser novia de Jong, las personas cambian de parecer.


—    Él es Minho. — lo presente y él muy imbécil solo sonrió.


—    Soy su novio. —bromeo estúpidamente, y ella rio comprendiendo la broma luego de que yo le codeara las costillas.


Mamá bajo por las escaleras y Jong la seguía, fue entonces cuando el ambiente se tenso un poco, sin contar con la mirada asesina de mi tío sobre Minho y él coqueteando con su ex novia.


—    Creo que Minho y yo ya nos vamos, antes de que él empiece a decir más tonterías.


—    Yo también ya me debo ir. — habló Yoona, siguiéndonos.


De alguna manera el estúpido de Minho me había dejado de lado, y ahora solo hacía mal trió junto a ellos, que reían y hablaban de sus vidas, hasta que por fin pude desviarme hasta la casa de Taemin.


 


xXx


 


Mamá me pregunto varias veces la elación que tenía con Minho, estúpido Minho me iba a pagar muy cara su bromita de mal gusto, en cuanto a Jonghyun ya no regreso a la casa dentro de un tiempo, tiempo en el que no hice más que extrañarlo más de lo que ya lo hacía, añoraba escuchar su voz aunque siempre lejana, sus “Bummie” aunque me estresara que me llamara así.


Solo a veces me gustaba imaginar sus manos sobre mi justo como la noche en que llego apestando a alcohol, cuando su relación con Yoona se fue a la mierda, aun me alegraba por eso, y aunque él jamás lo confirmó era obvio que tenía a alguien más, me molestaba cuando llegaba a mi casa oliendo a perfume barato de mujer barata y estúpida, me molestaba saber que alguien más ya había puesto sus labios en la anatomía de mi puppy.


Por momentos me reclamaba por haber nacido chico, por no tener dos senos, aunque eso me molestaba sabía que jamás los tendría por lo tanto dejaría de querer ser lo más parecido a la chica de los sueños de Jong, porque jamás la alcanzaría, porque esa chica era inexistente.


Me volví a teñir el cabello color chocolate, ya no lo quería rubio, lo corte un poco más y si empecé a usar lentillas, pero solo porque yo deseaba usarlas, mamá si se dio cuenta del delineador y al final me lo regalo de mala manera por que según ella era su favorito.


Me gustaba mi nueva apariencia, y Minho solo tenía ojos para su novia Yoona, aunque ella era como tres años más grande que él, pero ambos se llevaban de maravilla  y eso era lo que contaba.


Llegue de la escuela y mamá me había dejado un mensaje que no regresaría hasta tarde porque después de su trabajo debía asistir  a un compromiso, el clima cálido no era mi favorito pro agradecía que mi casa fuera fresca y no dejara entrar tanto el calor de afuera.


Suspire con cansancio y encendí la televisión, generalmente solo me sentaba en la Laptop y visitaba alguno que otro sitio, a veces de música, a veces películas, algunas otras me encontraba viendo uno que otro video porno que me calentaba de más y luego iba a desahogarme con la ilusión de un Jonghyun imaginario, pero ese día solo quería sentarme a ver algún programa de variedades, reírme de las estupideces que gente estúpida realizaba para las cámaras, luego comer algo prefabricado y meterme a bañar una vez que me aburriera.


Alguien golpeo la puerta, voltee los ojos con exageración, no quería pararme e ir a abrir. AL final lo hice.


—    ¿No está tu mamá Bummie? — preguntó viéndome con esos ojos de cachorro que tanto me gustaban y que me hacían flaquear.


—    No. — respondí.


—    Bueno creo que regreso más tarde. —habló él, y quiso emprender su marcha.


—    La puedes esperar aquí, de todas maneras si te vas y luego regresas gastaras más dinero que no tienes. —él volteo a verme y en silencio me hizo caso y entró.


Me senté junto a él, solo para ver a un señor haciendo algo estúpido, cosa que me saco una carcajada y solo se me quedo viendo extraño así que comprendía que probablemente debería dejar de reír con las idioteces.


—    ¿Quieres comer? —pregunté y él solo me miró confundido.


—    No… recién comí algo. —habló él dirigiendo su mirar al televisor.


Él era tan guapo que no me hubiese molestado verlo toda una eternidad, me encantaba como se miraba su perfil algo extraño pero agraciado, su piel tostada, y su cuello; pero la sangre me hirvió cuando note una ligera marca sobresaliendo del cuello de su camisa, un chupeton que segura la zorra con la que estaba se lo había hecho.


—    Valla, parece que anoche las vampiras andaban sueltas. —argumente irónico y molesto a la vez, esperando que él no se diera cuenta de mi molestia y mis lagrimas a punto de brotar.


Sus ojos me miraron un par de minutos, fue en ese momento en el que me di cuenta que no aguantaría mucho reteniendo mis lágrimas así que opte por la huída. Trague duro antes de hablar.


—    Puedes esperar a mamá, yo iré a dormir un rato. —señalé en dirección de la escalera y estoy seguro que siguió con la vista, la sentía sobre mí.


Me encerré y corrí directo al baño, no quería llorara porque de todas manera Jonghyun nunca sería mío y aun así me dolía no ser yo el que le hacía esas marcas, me dolía horrible porque yo lo amaba desde hacía ya tantísimo tiempo, él era mi todo, con él había tenido mi primer sueño húmedo, con él había jugado, había estado en sus piernas sentado (cuando era niño) lo amaba simplemente, sin excusas ni explicaciones.


—    Bummie, ¿estás bien? —Cuestiono su voz detrás de la puerta.


Aclare mi garganta y me trague las lagrimas limpiando las que ya habían salido.


—    Estoy en el baño. — hable molesto, tratando de fingir la voz al menos.


—    Mentiroso, sal, yo puedo limpiar tus lagrimas. —habló desde afuera y yo me quede callado; ¿Como sabía que estaba llorando?


—    ¿Cómo lo sabes? —cuestione bajito, inaudible.


—    Te conozco un poco más de lo que te imaginas. — dijo él como si hubiera escuchado mi pregunta.


Limpié unas de mis lágrimas estúpidas y sin sentido, según el espejo, mi nariz estaba roja así que de nada me servía negarlo, mucho menos cuando mis ojos se hinchaban horriblemente. Abrí lentamente debatiéndome entre dejarlo verme así o no.


—    ¿Por qué lloras bummie? —preguntó socarronamente, haciendo su voz inocente, esa que usaba cuando era niño y me encontraba en la misma situación porque mamá me había negado algún dulce.


—    Porque un idiota ya se encontró otra persona. —dije sin rodeos, yendo al grano.


—    ¿Ese idiota es Minho? —pregunto serio limpiando mi rostro, una acción dulce y muy dolorosa al mismo tiempo.


—    No, es otro idiota. — hablé esperando que lo entendiera.


—    Oh, y ¿ese idiota me conoce? — cuestiono y yo asentí con la cabeza.


Su rostro se acerco un poco, igual que su cuerpo, era pequeño y tan musculado, tan varonil. Sus labios se depositaron en los míos, eso era el sueño más hermoso que nunca tuve, se sentían tan cálidos, tan suaves, tan ricos.


—    Te amo Jonghyun. —susurre sobre sus labios con los ojos cerrados, para no verlo marcharse una vez que lo dijera, sin embargo él solo procedió con nuestro beso idiota.


 


xXx


 


—    Ya mero llega mamá. —me queje y él solo continuo estrujando mis piernas, mordiendo mi cuello, haciendo que me quejara para su deleite.


—    No importa, vas a ser mío. — levantó mi polera y coló sus manos, apretaba mis pezones con fuerza y eso me gustaba mucho, me gustaba que fuera tosco.


Me bajo el pantalón con mucha prisa, mamá llegaría en cualquier momento pero sinceramente solo quería que él continuara, que me besara, que apretara mi miembro contra el suyo, sentirme dueño de su cuerpo.


—    Esa noche, ¿después de esto seguiremos igual que antes? —pregunte inseguro y temeroso de su respuesta.


—    No, ya te dije que también te amo así que ahora que se que sientes lo mismo y ese Minho no es nada tuyo, creo que no te dejare ir, sobrinito bonito. 


—    Pero y ¿mamá? Y ¿tu novia? —cuando mencione lo último, él detuvo toda caricia.


—    No tengo novia, y no quiero una, quiero a un chico que es un niño inmaduro, idiota, caprichoso, que ama la ropa cara y tiene unos ojos muy bonitos aunque use lentillas. — habló besando mi boca.


Mi cuerpo se estremeció y me colgué a su cuello aunque yo lo sobrepasara en altura, por fin había conseguido al hombre que me hacía sentir un océano en el estomago, o miles y miles de mariposas revoloteando de un lado al otro.


—    ¡Kibum ya llegue! —grito la voz de mamá y Jonghyun cerró los ojos con fastidio, mientras yo me encogí de hombros.


—    Más tarde, lo terminamos. —subí mi pantalón y fui a recibir a mi progenitora, quiñándole un ojo y sonriendo.


—    ¿Sabías que eres un coqueto? — dijo él pegándome a su cuerpo, estrujando mis glúteos.


Definitivamente ninguno de los dos nos quedaríamos con las ganas, y yo era feliz luego de saber que Jonghyun era un celoso y odiaba a Minho y sus bromitas de mal gusto, pero luego me ocuparía de regañar a Minho y crear tantas confuciones..


 


 


 


 

Notas finales:

 Es el final de está antología y creo que seguire estar por aquí muy pronto con una segunda parte, "antología de Oneshots 2" ok no, se escucha muy normal, mal titulo, le buscare otro xDD

gracias por haber leido los shots :D

 

 


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).