Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

All about me por 3ngel

[Reviews - 1]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del fanfic:

Minkey. 

Notas del capitulo:

Los capítulos son cortitos, así como también el fic. :3

Pero espero lo disfruten <3 

Dejen hartos comentarios!

-     ¿Por qué dudas ahora? – decía enojado, frustrado, confuso

-     Porque quiero hacer las cosas bien, porque siento que me falta todavía, porque tengo miedo…

            De pronto sólo podía ver como la boca del alto se movía;  no escuchaba más. Quizás los  “yo, yo, yo” ya lo habían cansado; quizás sus dudas se le habían pegado. “¿En qué momento dejé de ser yo para refugiarme en un personaje? “. Suspiró  y asintió con su cabeza, como tantas otras ocasiones lo había hecho, dio la vuelta saliendo de aquella casa, de aquel momento.

            Caminaba sin un rumbo fijo, el cielo comenzaba a oscurecer. Hace un tiempo, le gustaba disfrutar de su soledad, pero todo cambia…. Y para él, había comenzado en el mismo instante que lo conoció, uno de los momentos más hermosos de su vida. Jamás había sentido tanta conexión con una persona: pensaban lo mismo, seguía sus bromas, disfrutaban de un habla tan ameno y cómplice que muchos envidiaban. De pronto, y sin darse cuenta, comenzó a necesitarlo de una manera inexplicable: lo podía esperar por horas y su corazón latía con fuerzas cuando sabía algo de él. Suspiró, sonriendo melancólico ante esos recuerdos, quería y necesitaba que volvieran. 

-          Estúpido Minho… - susurro y puso sus audífonos en sus oídos, prendió su iPod, paró en la vereda de aquella calle tan concurrida y sintió como la música comenzaba a llenar cada espacio de su ser, sonrío de manera inconsciente al no sentirse tan perdido, volvió a caminar.

En un principio, estaba feliz de hacer todas las cosas por el otro, pero luego, el alto comenzó a pensar sólo en él….en algún momento del trayecto, ya no había más un “Kibum” para Minho: Kibum esperaba a Minho, Kibum escuchaba a Minho, Kibum aconsejaba a Minho, Kibum daba fuerzas a Minho, Kibum…todo; Minho pensaba en Minho.

Siempre supo que en algo tan hermoso como el amor, había un brecha tan mínima que podía arruinar todo, podía oscurecer todo. Él no quería eso, no quería perder alguien tan preciado, tan hermoso… sólo… el otro se había perdido entre dudas y egoísmos.

Miro al cielo y sintió como una lágrima comenzaba a recorrer su mejilla, aquel atardecer era tan hermoso, estaba totalmente a la par con todo el remolino de sentimientos que sentía en esos momentos: por una parte se mostraba el sol y el cielo de color rojizo, por otra parte estaban aquellas nubes oscuras. “¿Hacía dónde estamos llendo, Minho?”

Caminando podía sentir como los minutos iban pasando lentamente como cada respiro de él que en cada segundo se hacía más lento, más pesado.  Sin darse cuenta, y con la misma canción reproducida cientos de veces, llegó a la playa.

Minho pensaba saber todo de él, pero eso era tan mentira. Él tenía miedo, miedo de comenzar a rechazarlo, miedo de que si Minho no se daba cuenta de lo egoísta que estaba haciendo, lo terminara dañando cada vez más.

“Quiero ir…”

“Siento que…”

“Pienso que…”

“Necesito que…”

“Haré…”

En cuál de todas esas oraciones que a menudo escuchaba del otro estaba un “¿Y tú, Kibum?”, ninguna. Cuantas veces lo escucho sintiendo morirse por dentro, con ganas de tomarlo fuerte y decirle que lo escuchara, que tan sólo escuchara un momento lo que él quería decir…

-          ¿Me estás escuchando Minho? – dijo mientras otra lágrima rodaba por su mejilla – Tengo miedo… estoy perdido… - sacó los audífonos de su oído sin apagar el iPod, no quería dejar de escuchar esa canción – Estoy cansado… - comenzó a llorar lentamente – Quiero que mi mente deje de procesar cada pensamiento, quiero ser yo nuevamente…ese Kibum seguro, que hacía todo lo que decidía… – agacho su cabeza, sacando su chaqueta –

Esa noche, el mar se encontraba tranquilo, el sonido de las olas le recordaban a aquella canción que había escuchado todo este trayecto. En su mente pequeños pasajes de una vida comenzaban a aparecer cuál gotas de lluvia: Momentos en familia, momentos de amor, momentos y más momentos.

Una ola de escalofríos recorrió su cuerpo al tocar por vez primera el mar. Sonrío, disfrutando de aquella carga eléctrica que le comunicaba que continuaba con vida. Y siguió caminando, cada vez el agua iba a abrazando más su cuerpo, aquel frío líquido le daba consuelo, lo acurrucaba cuál madre a su hijo. Se hundió, por completo, sintiendo su cuerpo tan ligero, con sus ojos cerrados mientras movía sus brazos lentamente abrazándose a si mismo. Su cuerpo comenzaba a pedir oxígeno, pero él no quería salir, necesitaba esa paz que estaba sintiendo en esos minutos.

¿Qué estoy haciendo? ¿Hacia dónde tengo que ir?¿Qué es lo que más quiero en la vida? Minho…

Salió tomando una gran bocanada de aire y comenzó a caminar fuera del mar rápido, corriendo. Pero esta vez no estaba arrancando de su vida, no estaba arrancando de los problemas, iba directo a enfrentarlos.

Tomó sus cosas y siguió corriendo, sintiendo como el frío de la noche lo acompañaba en toda su trayectoria. Tomó su celular y llamó.

-          ¿Hola? – respondía aquella voz ronca que tanto conocía.

-          Estúpido. – dijo sin más.

-          ¿Qué? – se notaba la sorpresa en aquella pregunta.

-          ¿Estás en casa?

-          Si…

-          No te vayas.

Colgó y paró el primer taxi que encontró. En el trayecto iba tan sumergido en sus pensamientos que no se dio cuenta que no traía dinero con él. Sonrió sintiéndose tonto al haberlo olvidado. A los minutos llegó a casa, volvió a llamar al alto para que saliera.

-          ¿Qué te pasó? – le preguntó preocupado al verlo todo empapado

-          Paga. Te espero adentro. – Sonrió entrando rápido a la casa, fue hacia la habitación que compartían y se cambió con algo cómodo. Volvió a la sala de estar, sentándose en el sillón grande que tenían esperando al otro.

Estaba contento, estaba en paz. Había tocado fondo, y ahora tenía todas las ganas de volver a comenzar. Pero tenía que ser como correspondía, primero volviendo a ser él mismo.

-          ¡¿Qué te pasa?!

-          Sonrió al escucharlo y se paró – Se acabó Minho – le dijo sonriendo y él otro sólo quedó paralizado.

-          De qué hablas…

-          Se acabó, me harté de tu egoísmo. ¿Sabes? Te amo…te amo como jamás pensé amar a alguien en mi vida, pero no puedo más. Desde ya hace un tiempo te haz vuelto un egoísta y me cansé. – Le dijo tan seguro que se sintió orgulloso de si mismo.

-          No…no – se acercó el alto tomándolo de los hombros – no….yo…Kibum no me dejes… - podía ver en sus ojos la preocupación.

-          ¿Para qué quedarme? Tú sólo hablas de tu carrera, de tus cosas, Minho….¿Haz pensado en mí? – Lo miro –

-          ¡Claro que si!

-          No… claro que no… Siempre he estado para todo, y no me arrepiento, te he amado tanto que he puesto todo a tu disposición, y tú también haz puesto todo pero para ti. Date cuenta de eso… cuando vuelvas a amarme, a necesitarme no para tu beneficio, sino para el de ambos…me buscas. Yo te amo…te estaré esperando mientras aprendo a volver a vivir como el Kibum seguro que fui. – Sonrío, salió de esa sala y fue a la habitación.

Estaba seguro que un “Lo siento” no quería escuchar, sólo quería que él se diera cuenta de una buena vez por todas, que él era una persona, tal cuál como Minho lo era,  que tenía necesidades, que quería ser feliz al lado de la persona que ama, tener una relación de a dos, no una relación para uno.

Terminó de alistar sus cosas y salió de aquella casa, no sin antes acercarse al alto y darle un beso dulce, como a él tanto le gustaba. No era una despedida… era un hasta pronto.

Notas finales:

Capítulo 1 listo! 

De hecho tengo hasta el dos :3

Pero esperaré por algunos review <3

 


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).