Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Por siempre y para siempre por Milk

[Reviews - 1]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Espero les guste es el primer MinJun que escribo

la verdad es el primer fic de SS501 que escribo jejejej^^

 

Por siempre y para siempre

 

Desperté y como siempre feliz por tenerte acurrucado en mí pecho, abrazándome fuertemente. Moví tus cabellos, me acerque a ti y besé tu frente. Te removiste bajo las sabanas un poco, levantaste la cabeza aun con los ojos cerrados. Tenías una sonrisa en tus labios y abriste los ojos levemente por la molestia de los rayos de sol.

 

No dejabas de sonreír mientras me mirabas, me acerque más a ti y bese tus dulces y deliciosos labios. Esos labios que solo me pertenecían a mí, porque soy el único que probara tus labios, el único que lo degustara.

 

“Jung Min, ¿Qué hora es? Debo ir al trabajo temprano el día de hoy” Dijiste parándote rápidamente preocupado por llegar tarde a tu propia empresa. Cogí tu brazo y te jale hacia a mi haciendo que cayeras a la cama nuevamente.

 

“Kim hyung Jun. Sin beso de buenos días no te dejo ir a ningún lugar” Dije sonriendo y señalándote mis labios para que me beses. Aun después de 6 años de novios sigues sonrojándote, eres realmente hermoso.

 

“Aish... Caballo babo!” Te quejaste pero aun así me besaste tiernamente y te fuiste a bañar. Con pereza me levante y fui a preparar el desayuno. Yo también debía llegar a mi empresa temprano, hoy tenía una reunión importante.

 

 

Es extraño pensar como cuando nos conocimos fue en una reunión de mi padre. Estabas tú todo tímido jugando con tu perrita en una esquina de la casa. Al verte fui corriendo hacia ti, éramos niños por lo que pasamos todo el día jugando.  Cuando el tiempo paso y nos hicimos adolecentes empezamos a notar el gran amor que nos teníamos.

 

Fui difícil al inicio, ni uno de los dos quería reconocer lo que sentíamos. Ni uno de los dos quiso dar el primer paso. Si no fuera porque nuestros tres amigos nos jugaron una broma encerrándonos en aquel almacén de la empresa de tu papa, tal vez ahora no estaríamos juntos.

 

Esa noche que pasamos encerrados, tome valor y te dije lo que sentía. Recuerdo como si fuera ayer. Estábamos parados con solo la luna como luz que pasaba atreves de la ventana que quedaba en lo alto de aquel lugar. Algunas cajas vacías que ocupaban el gran lugar.

 

Estabas nervioso, mayormente eras travieso y parábamos peleando pero esa noche, en ese almacén estabas callado, inquieto, moviéndote de un lugar a otro. Golpeabas la puerta desesperado pidiendo a Kyu Jong que se apiade de nosotros y nos abran la puerta. Pero nada ocurrió, seguíamos encerrados.

 

Antes de que nos encerraran pude escuchar a Hyun Joong reír y un leve susurro de Young Saeng diciéndome que aprovechara el momento. Ellos, por más que había tratado de ocultarlo, sabían de mi amor por ti que creció con los años. Recuerdo que estaba sudando y nervioso como nunca antes.

 

Tome valor y me acerque a ti, cogí tus hombros. Quería decirte que te amaba pero las palabras no salían y por impulso solo te besé. Te quedaste congelado con los ojos abiertos por la impresión.  Me empujaste y me insultaste pensando que jugaba contigo. Traté de acercarme a ti nuevamente pero ahora te explicaría el por qué de mis actos. Cuando estuve cerca de ti note que estabas llorando. Te abrace fuertemente y te dije cuanto te amaba. Te lo susurré, te lo grité, te hice entender que mi amor era verdadero y sincero.

 

Esperaba que me vuelvas a empujar o me pegaras, pues lo dos éramos hombres y mejores amigos, teníamos una hermosa relación más conocida como Tom & Jerry. Así nos llamaban nuestros mejores amigos.

 

Pero nunca llegaron los golpes que esperaba todo lo contrario, tus brazos se aferraron mas a mí, tu llanto se incremento. Me miraste fijamente y rosaste tus labios con los míos. Me contaste todo lo que tu corazón sentía por mí y eso me hizo el hombre más feliz del mundo.

 

Esa noche no solo nos declaramos si no que nos dejamos llevar por el deseo. Aquel deseo que habíamos tenido desde años antes. No había podido contralar mis manos y estas habían recorrido tu cuerpo entero. Mis labios bajaban por tu cuello degustando todo a su paso y marcando dejando leves huellas de lo que pasaría esa noche.

 

Nos dejamos llevar por el amor, y caímos al piso deseando poder unirnos. Tus prendas salieron de tu cuerpo gracias a la habilidad de mis manos. Estabas sonrojado mirándome tímidamente. La tenue luz que nos daba la luna hacia que tu blanquecina piel resaltase, avivando el fuego en mi interior.

 

Se deshice de mis prendas, los dos desnudos abrazándonos, besándonos y amándonos. Mis manos recorriendo tu cuerpo con destreza conociendo cada detalle de tu anatomía. Baje levente mis manos por tu abdomen hasta llegar a tu entrepierna que debido a las caricias se encontraba despierta.

 

Gemiste al sentirme masturbándote, al sentir por primera vez mis caricias. Tu cuerpo se estremecía, me mirabas con tanto amor que sentía que derretías mi interior. Mi nombre salía de tus labios melodiosamente. Mi mano siguió su camino dejando tu miembro para dirigirse a tu entrada, masajee tu interior con mis dedos sacándote jadeos, gruñidos y gemidos. Tus piernas se abrieron invitándome a entrar.

 

Coloque mi hombría en tu entrada, estremeciéndome por ese contacto. Mi corazón saltaba de alegría por que sabría lo que venía, nuestra unión. Lentamente entre en ti, esa estreches me envolvió, el calor me sedujo haciendo que no pueda esperar mucho tiempo y empezara el vaivén.

 

Tus manos me jalaron hacia ti para abrazarnos. Pude sentir los latidos de tu corazón golpear contra los míos. Tus piernas me rodearon y fui aun más profundo dentro de ti. El calor nos envolvió junto con una capa de sudor. Nuestros labios no dejaban de acariciarse y nuestros cabellos se pegaban a nuestras frentes.

Junto con un te amo y nuestros nombres llegamos al mejor orgasmo de nuestras vidas. Abrazándonos disfrutando de nuestro amor. Desde esa noche fuimos  novios, amantes, mejores amigos y convivientes.

 

 

“CABALLOOO TONTOOO, DESPIERTAAA” Escuche que gritabas sacándome de mi mundo de pensamientos. Ya estabas cambiado y yo con la cafetera en la mano.

 

“¿Hace cuanto tiempo estas perdido en tus pensamientos? Te estuve llamando desde hace rato. Apúrate, cámbiate ya es tarde” Dijiste quitándome la cafetera de mis manos para servir tu el desayuno que yo no logre hacer.

 

“Estuve recordando la vez que nos confesamos y nos entregamos” Dije saliendo de la cocina para ir al baño a tomar una ducha. Pero igual note el sonrojo en tu rostro cuando escuchaste mis palabras.

 

Salimos de nuestra casa tú tenias que ir a tu Productora, eras fundador de unas de las más importantes en Corea; tenias varios grupos famosos bajo tu mando, mientras yo me dirigía a mi junta directiva pues era el presidente de una de las cadenas más importantes e influyentes de tiendas departamentales.

 

Éramos felices con nuestros logros y con nuestro amor. Pero no con la relación de nuestros padres, los cuales no sabían de nuestro amor. Nuestros padres eran rivales pues los dos tenían empresas de prensa. Cada uno manejaba uno de los periódicos con más prestigio en el país y siempre tenían disputas por cual era el mejor.

 

El día transcurrió y nos volvimos a encontrar, en nuestra casa. Cenamos y conversamos que era el momento adecuado de decirles a nuestros padres lo que ocurría entre nosotros dos. Por lo que decidimos aprovecharíamos el día de mañana para cada uno ir a su respectiva casa. Cada uno hablaría con su padre para decirle de nuestro amor.

 

Nos fuimos a la cama, a dormir abrazados. Estabas asustado por el día de mañana, no sabias como ibas  a enfrentar a tu padre. Sentí como te aferrabas mas a mí, colocando tu cabeza en mi pecho como si te estuvieras refugiando.

 

“No te preocupes baby, nada pasara, todo estará bien. Nadie podrá separarnos” Dije abrazándote fuertemente tratando de darte seguridad y fuerza para lo que vendría el día de mañana. Así acurrucados nos quedamos dormidos.

 

Después de una mañana ajetreada y despedidnos dulcemente cada uno partió a su casa. Desde lejos te di fuerzas pues parecía que las necesitabas. Además eres una persona sensible y temes la reacción de tu padre.

 

Llegue a la casa de mi padre, hoy era el día. Hoy le diría que te amo con locura. Entre a su oficina, estaba trabajando pero lo interrumpí.

 

“Padre. He venido a habar contigo de algo muy importante” Dije sin rodeos. Vi como se levanto y me miro seriamente.

 

“¿Por fin sentaste cabeza y piensas heredar la empresa? ¿Piensas casarte? Si no es nada de eso no me interesa oírte” dijo dándome la espalda y viendo atreves de la ventana.

 

“Bueno… podría ser casarme, solo que no está permitido” Mi padre volteo a verme no entendiendo que decía. Cruzo sus manos en su espalda esperando a que continuara hablando.

 

“Estoy enamorado y vivo con un hombre. Tu lo conoces es Kim Hyun Jun” Dije mirando fijamente a mi padre. El cual su rostro cambio a uno de asombro a enojo en solo segundos. Cogió lo primero que tuvo a la mano y me lo lanzo, por suerte lo esquive.

 

“¡COMO TE ATREVES! ES IMPERDONABLE QUE AMES A UN HOMBRE Y PARA COLMO TENIA QUE SER ÉL. EL HIJO DE MI PEOR ENEMIGO. ESTO ES IMPERDONABLE PARK JUNG MIN” Grito como nunca antes me había gritado. La ira invadía su ser. Se acercó a mí y me abofeteo. Me dolió no solo físicamente si no también el corazón. Ya imaginaba que no aceptaría esta relación pero aun así había guardado un rayo de esperanza que acaba de ser pisoteado.

 

“ALEJATE DE EL AHORA MISMO. MI HIJO NO VA A SER UN HOMOSEXUL. MI HIJO NO VA A SER EL HASME REIR DE LA SOCIEDAD” Dijo gritando nuevamente. Yo aun mantenía mi postura seria y trataba de parecer indiferente a sus palabras por más que me dolieran.

 

El iba a hablar de nuevo pero mi celular sonó y vi que en la pantalla eras tú. Me asuste, de repente habías sufrido igual que yo; tú no eres de soportar tanto dolor. Contesté y mi corazón se comprimió al escuchar tu voz.

 

“Jung Min… mi papa… OLVIDATE DE ÉL DE UNA MALDITA VEZ…. Jung Min no me quiero alejar de ti…. Jung…Min…” Escuche tu voz llorosa y el grito de tu padre molesto. La llamada se corto escuchando tu voz perderse en la lejanía. Me asuste, esto no puede estar pasando.

 

Mi padre se acerco a mí y cogió mi hombro. No quería que me vaya y menos detrás de ti. Me solté como pude y salí corriendo de esa oficina que no pensaba volver jamás. Pero antes de salir dándole la espalda a mi padre le dije

 

“Ni creas que nos separaras. No lo permitiré. Juro que nunca lo dejare hagas lo que hagas” Salí corriendo sin siquiera ver su reacción. No sabía qué hacer estaba desesperado. Tenía que encontrarte de una vez.

 

Cogí mi auto y fui a buscarte a tu casa. No me dejaron entrar como era de saberse. Unos guardaespaldas se acercaron me empujaban para que no te buscara. Decidí irme o eso hacerles creer.

 

Conocía perfectamente donde estaba tu habitación por lo que decidí entrar por la puerta trasera de esa gran mansión. Era increíble la seguridad que había ahí dentro. Definitivamente tu padre no te quería dejar ir, no quería que estés a mi lado.

 

“¡Déjenme salir! ¡Jung Min! ¡Maldita sea déjenme ir con Jung Min! ¡Padre te odio!” Pude escuchar tus gritos,  había dos hombres custodiando tu puerta. Me acerque a ellos y los golpee. Uno me sujeto y el otro empezó a darme golpes pero las ganas de verte hacían que contestara.

 

Me defendí como pude. Los hombres quedaron inconscientes en el piso y empecé a buscar la llave. Al encontrarla abrí desesperado la puerta. Tú estabas llorando y al verme te lanzaste a mis brazos para llorar más fuerte.

 

“Te dije que nunca nadie nos separaría” Dije abrazándote, y tomando tu mano para poder salir de esa casa en la que no éramos bienvenidos. Nos perseguían pero seguíamos corriendo por el jardín.

 

Llegamos a mi auto y pudimos escapar. Sabíamos que de ahora en adelante nada sería fácil. Que tendríamos que estar cuidándonos de nuestros propios padres. Tú aun llorabas al llegar a nuestra casa. Te sostuve entre mis manos y te bese cálidamente.

 

“Gracias por estar a mi lado y no abandonarme” Dijiste sollozando, aferrándote a mí. Tus ojos se cerraban poco a poco, estabas cansado de tanto llorar.

“Nunca te voy a dejar solo Jun” Susurre cuando te dormiste entre mis brazos. Te lleve a la cama y me recosté al lado tuyo.

 

 

Ha pasado un mes desde que les confesamos nuestra relación a nuestros padres. Hemos tenido problemas en el trabajo y en nuestra vida diaria, haciendo de todo para que no nos separen.

 

Hoy es nuestro aniversario, y he pensado que como regalo sería bueno irnos a vivir a Francia. Al menos por un tiempo. Mientras trabajabas me tome el día libre pues hoy nos iríamos aun que tu aun no sabias nada.

 

Prepare las maletas y las coloque en el maletero de mi auto. Compre los boletos y los puse en el bolcillo de mi saco. Hice una reservación en un hermoso y elegante restaurante. Todo sería perfecto el día de hoy.

 

Hoy cumplíamos 7 años juntos como novios, por lo que decidí comprar dos anillos. Es verdad que no podemos casarnos pero para nosotros será como sí lo estuviéramos. Los anillos eran hermosos.

 

Llego la noche y estaba esperando sentado en la mesa de ese restaurante que llegaras. Al entrar estabas hermoso con ese traje gris y esa camisa rosa. Sonreíste al verme y te sentaste al frente mío.  

 

Te serví el champagne. Nuestros platos llegaron y empezamos a comer mientras conversábamos amenamente. Tu mano se deslizo por la mesa sigilosamente para sostener la mía.  Tus labios dijeron un silencioso te amo. Y en mi rostro apareció una sonrisa. Nos quedamos mirando por varios minutos. Nuestras manos unidas se acariciaban y decían en ese lugar público cuanto nos amábamos.

 

“Feliz aniversario Jung Min” Dijiste sonriendo mostrándome una cajita, la cogí y solté el moño que tenia al abrirla encontré una corbata.

 

“¿Es en serio? Baby ¿Una corbata?” Dije con ironía sosteniendo la corbata en mis manos. Tu solo reías sin parar.

 

“Sabes se dice que cuando le regalas una corbata a tu pareja es por qué quieres atarla a tu lado por siempre” Dijiste sonriendo y sonrojándote. Tomaste la copa de champagne y quisiste brindar.

 

“Por nosotros” Susurraste cuando nuestras copas se juntaron. Vi como el líquido rozaba tus labios y quise ser yo quien tocara esos rosados labios con los míos.

“yo también tengo un regalo para ti” Dije sonriendo coquetamente inquietándote, sabía que te gustaban las sorpresas. Te estabas inquietando. Metí mi mano a mi bolsillo y saque esa cajita con los anillos dentro. Baje mi cabeza para verlos, abrí la cajita y lucían hermosos ya deseaba que los vieras.

 

Levante mi rostro y tu cara tenía una expresión de sorpresa y temor. No entendía que pasaba y antes de que pueda voltear una mano toco mi hombro. Levante la vista, era mi padre. Me sorprendí y me pare sobresaltado.

 

“Aléjate de él” Escuche la voz de tu padre detrás del mío. Pero no se dirigía a mí sino a ti. Saliste de tu asombro y te paraste derramando el champagne haciendo que la copa se cayera al piso. Toda la gente nos miraba y nuestros padres querían disimular.

 

“No me alejare de él, lo amo” Escuche tu voz, temblorosa pero decisiva, detrás mío. Tu padre avergonzado por los murmullos de la gente intento acercarse a ti pero puse mi brazo delante de ti bloqueándole el camino para no dejar que te toque.

 

“Que crees que estás haciendo Jung Min, déjate de juegos y tonterías. ¿No ves la vergüenza que nos estás haciendo pasar?” Dijo mi padre tratando de sonar sereno pero se notaba la rabia en su voz.

 

“Y ustedes no entienden que nosotros nos amamos” Dije casi gritando y los cuchicheos en el restaurant aumentaron. Nuestros padres se vieron y se hicieron señas cosa que nos sorprendió. Cogiste mi hombro no sabiendo que pensar o hacer. Yo estaba igual de asustado que tú, no quería que interfieran en nuestra vida y nuestro amo, no quería que nos separasen.

 

Llegaron unos hombres a los cuales reconocí a dos. Eran los que custodiaban tu puerta aquella vez que te saque de tu casa. Nos querían separar a la fuerza. Me di cuenta que aun tenia la pequeña caja de compromiso en mi mano por lo que lo guarde y tome tu mano.

 

“Vámonos Jun, corramos” Dije jalándote y corriendo fuera del restaurant. La escena era extraña tu y yo corriendo fuera de ese restaurant por el estacionamiento con hombres persiguiéndonos. Llegue a mi auto y entramos rápidamente.

 

Un ruido estridente invadió el estacionamiento, fueron las llantas de mi auto contra el pavimento al salir a toda prisa. Vi por el retrovisor como los hombres dejaban de correr. Pensé que ya todo había pasado pero después de unas horas manejando unos autos nos perseguían.

 

“Nos están siguiendo Jung Min, quieren acabar con nuestro amor.  Esto no está bien… y si...” Decías desesperado y triste. Tu cabeza volteada para ver por la luna trasera a los autos que nos perseguían.

 

“No digas tonterías Hyung Jun. Todo va a salir bien. Nunca lograran separarnos. No te preocupes todo saldrá bien” Mis palabras trataban de darte fuerza. Manejaba a toda velocidad, no podía permitir que nos separen. Viré a la derecha rápidamente para tratar de despistarlos pero aun seguían persiguiéndonos.

“¡Jung Min están cerca!” Gritaste para que acelerara. Y eso hice pero aun así dos autos nos alcanzaron tenia uno a cada lado. Empezaban a golpearnos para hacer que bajemos la velocidad, para que paráramos, pero no seguía conduciendo intentando salir de esa situación.

 

Gire nuevamente pero un carro nos chocó, no pude controlar el timón. Perdí estabilidad. El carro empezó a dar vueltas, y un dolor intenso apoderó mi cuerpo. Escuche tus gritos adoloridos haciendo que me desesperase aun más. El carro por fin se estabilizo, estábamos de cabeza.

 

Voltee a verte tenias el rostro lleno de sangre. Y por cómo me mirabas imagino que yo también estaba envuelto en sangre. Tus lágrimas salían mientras un calor nos envolvía. La parte trasera del auto había empezado a incendiarse. Ninguno de los dos tenía mucha fuerza.

 

“Jung Min... te amo” dijiste con pocas fuerzas mientras llorabas.

 

“Yo también te amo” Te dije levantando con dificultad mi brazo para acariciarte.

 

“Nos llegaron a separar…” Hablaste tan tristemente que me desgarro el corazón.

 

“Te dije que nunca nos separarían, aun estamos juntos…” Dije moviendo mi mano y soportando el dolor. Cogí la cajita que se encontraba en mi bolcillo. Estaba bañada en sangre pero por dentro estaba intacta.

 

“Kim Hyung Jun… ¿Quieres casarte conmigo?” Tus ojos derramaron mas lagrimas y con gemidos de dolor y todas tus fuerzas levantaste tu mano. Deje la cajita en el piso pues estábamos atrapados los dos en nuestros asientos de cabeza en el auto. Cogí los anillos y limpie la sangre de tu mano. Te puse el anillo y sonreíste. Luego te di el otro anillo y con dificultad lograste ponérmelo.

 

Hasta ese momento no había escuchado los pasos de las personas que intentaban sacarnos y el llanto y gritos desgarradores que nuestros padres daban pidiendo que ayudasen a sus hijos. Pero no le tome importancia, ni a eso ni al las llamas que se acercaban a nosotros. Solo me dedique a verte, a ver cómo me mirabas con tanto amor.

 

“Ahora si estaremos juntos siempre” dijiste sonriendo, con tus últimas fuerzas, cerrando tus ojos pesadamente para nunca más volverlos a abrir.

Las lágrimas inundaron mis ojos haciendo mi vista más borrosa de lo que ya estaba. Las fuerzas también me abandonaban, mi cuerpo se hacía pesado y los sentidos se esfumaba, y antes de seguirte en ese sueño profundo de nunca despertar, me acerque lo mas que pude a ti y tratando de ignorar el dolor bese tu frente susurrando

 

“Sí. Siempre estaremos juntos. Por siempre y para siempre.”

~~~

Noticias diario The Royal:

Lamento informar que hoy en la madrugada fallecieron dos importantes empresarios de nuestro país en un fatídico accidente automovilístico. El joven Park Jung Min, presidente y fundador de “The Style” cadena de tiendas departamentales y el joven Kim Hyung Jun, presidente y fundador de “KHJ Entertainment” que ha producido los mejores grupos que han llegado a tener fama internacional.

Hasta el momento el Señor Park. Y el Señor Kim. Dueños de los diarios “The Time” y “The World” respectivamente, no han querido salir a dar declaraciones por el reciente fallecimiento de sus hijos. Pero es algo comprensible que estos hombres no quieran hablar a la prensa, comprendemos el dolor que deben estar sintiendo al perder a los únicos familiares que les quedaban. Recordemos que hace varios años atrás el Seños Park perdió a su esposa por una grave enfermedad y el Señor Kim perdió a su esposa por asalto a mano armada.

Pero esto no es todo, lo que hace que la historia se vuelva un poco más trágica y nos haga tener conciencia y tolerancia sobre lo que nos rodea es el hecho, que al parecer que el joven Jung Min y el joven Hyung Jun eran amantes. La policía pudo encontrar anillos de boda en los cuerpos y una maleta en el auto junto con unos boletos para ir de viaje a Paris.

En la escena de este accidente se encontraban los padres por lo que podemos presumir que los jóvenes estaban teniendo una huida de amor. Escapando de los murmullos de la sociedad y los estándares de sus padres.

Por eso estén donde estén, desde acá les deseo puedan vivir su amor. Porque aun después de muertos podemos saber que sus almas estarán unidas y que descansaran en paz.

Periodista
Milk

 

FIN

 

 

Notas finales:

Espero les haya gustado

Si T__T ellos mueren T___T

pero aun asi se fueron juntos al mas alla T__T

Byeee^^


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).