Exhausto callo encima del cuerpo de su ahora esposo y con cuidado a su lado se recostó, sonrió al verle el rostro todo sudado después de hacer tan maravilloso acto de amor, tan bello que parecía irreal. Le dio un leve beso y acaricio suavemente su cabello.
Tapo ambos cuerpos con la manta y con una sonrisa ambos se despidieron diciendo lo mucho que se aman, y se dispusieron a dormir, sin embargo el pelinegro solo se acostó, porque ahora estaba queriendo recordar como empezó esta historia de amor tan hermosa para ambos, y la recordaba como si hubiera sido ayer…
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Un nuevo año comenzaba, el mismo instituto... nuevo curso, nuevas materias, nuevos y viejos compañeros. Ya a sus 17 años esperaba poder enamorarse, y ser obviamente correspondido, tener nuevas experiencias y momentos inolvidables eso quería nada mas ni nada menos.
Kim Jong-Woon, también llamado Yesung era un estudiante del último año. Buen cantante, una vos preciosa poseía, su familia y amigos más cercanos lo sabían. Raro, si él era raro, todo el instituto lo sabia, y aunque algunos al principios lo trataban mal e ignoraban, con el tiempo se dieron cuenta que, aunque era una persona muchas veces incomprensible también era una persona muy buena y cariñosa. Fue recién en 9º que conoció a sus primeros y verdaderos amigos; Kim Ryeo Wook, su mejor amigo, y también casi hermano, unos años menor. Un chico muy simpático y amable. Park Jung-soo; conocido como LeeTeuk quien ya no se encuentra en el instituto, porque al hacer mayor ya iba a la facultad, y también una persona muy buena, de corazón blando, aunque también tenia sus momento y a Kim Young-woon, también conocido como Kang-In una persona bastante ruda por fuera, porque por dentro no era lo mismo, y ahora novio de LeeTeuk, también, menor a Yesung.
Ahora se dirigía hacia su instituto. Eran las 07:00 de la mañana, y caminaba así la parada del autobús, vestía de negro, todo de negro; pantalones medio ajustados, remera de manga larga con cuello y un tapado largo (que le llevaba por las rodillas) llevaba sus queridos articulares negros y su celular, e iba escuchando su canción favorita. Ya en la parada se sentó a esperar, y al cabo de unos minutos su querido amigo Ryeowook apareció, hablaron un largo rato de lo que hicieron las ultimas semanas. Vieron llegar al autobús y subieron a este, después de pararlo. No tardaron mucho en llegar al instituto, y ya eran las 07:30, así que corrieron hasta la gran puerta de este, y entraron antes que se cerraran, como siempre…o como la mayor parte del tiempo, Yesung llego unos minutos tarde, ya que él no se iría sin su amigo. Llego al aula, la cual era compartida por los últimos tres grados, ósea compartiendo el aula con dos de sus amigos; Ryeowook y kang-in. Yesung como de costumbre se sentó con su mejor amigo, y Kang-in solo, desde que Leeteuk se fue, ya no se sentaba con nadie. La primera clase fue de música; en la cual realmente no hacían mucho, todos estaban concentrados en escuchar una canción de “Mozart” cuando un ruido proveniente de la puerta se escucho, y de allí se le vio entrar al director.
Desde donde nuestro protagonista estaba se podía ver a un chico bastante serio esperando, con cara de pocos amigos. El profesor y el director estuvieron hablando hasta que la vos del director se escucho.
–Atención, hoy tendrán a un nuevo compañero, si es el primer día de clase y no es necesario que yo venga – rio –pero es necesario decirles esto; el esta un año adelantado, pues el debería estar en 4º año, sin embargo, por su gran inteligencia se le ah adelantado dos años, aparte de que en estos últimos años ha estado fuera del país y no sabe como funciona las cosas acá, por favor no sean malos, y ayúdelo si es necesario. – Sonrió – Por favor, pasa y preséntate –
Todas las miradas del salón fueron posada del chico que entraba, y no era para menos aquel chico era muy guapo; su cara era perfecta, sus ojos negros, el pelo marrón claro medio largo. Vestía un pantalón azul y una remera de manga larga negra, y una campera de cuero negra. Su mirada era, como ya fue dicho de pocos amigos.
Haciendo una reverencia antes todos se presento – Hola, mi nombre es Cho KyuHyun. Por favor cuiden de mí. Pero les abierto una cosa…no se metan mucho en mi vida, es realmente molesto – dijo simplemente dejando a todos sorprendidos, menos al director.
Ya.. – hablo el señor Lee (director) – No seas malo Kyu, sabes que eso es irrespetuoso…jajaja pero solo por esta ves te dejare, después de todo eres querido sobrino, ve ya a sentarte – paso su mirada por todo el salón buscando un asiento libre, y lo encontró – Allí – le apunto, al lado de Kang-in el cual se molesto un poco, pero no dijo nada, el nuevo asintió con la cabeza y fue hasta allí, no sin antes ver a un chico de cabello negro y ojos hipnotízate que le llamo la atención, el cual se sorprendió un poco al darse cuenta de la mirada del menor, y sin evitarlo se sonrojo brevemente.
[NOTA: El asiento de Kang-in esta atrás de la mesa que compartían yeye y Ryeowook]
Durante la clase KyuHyun no pudo despegar la vista de su compañero, si, aquel chico de apariencia emo y con aura rara de apariencia asesina le cautivo. Claro que el no seria quien lo digiera, no señor ese chico caería a su pies, quiera o no, ahora o después pero lo hará. Las clases siguieron su curso con normalidad. Yesung sintió que lo observaban muy fijamente, tanto que ya le causaba miedo. En ningún momento se atrevió a mirar, sabía quien era, y con solo eso se podía ruborizar. Si mirara, seguramente terminaría siendo un tomate andante, la burla del curso y en esos momentos era lo que menos quería, debía prestar atención a la clase.
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Los días pasaron, los meses también. KyuHyun y Yesung se llevaron bien de apoco se formo una gran amistad, aunque ambos ocultaban sus obvios sentimientos, ¿porque? Un viejo dicho dice “que el amor es ciego” y en su caso era así, tan ciegos, que ninguno podía darse cuenta que el otro sentía lo mismo, de lo enamorados que ambos se encontraban.
Casi un año, si desde aquel día que se conocieron fueron exactamente 11 meses, era noviembre, Kyu y yeye se dirigirían hacia el parque donde sus amigos ya deberían estar. Kyu fue a buscar a su querido amigo a su casa, de ahí se tomaron un colectivo en donde la practica fue normal, pero rara, como de costumbre; videojuegos, libros, música y tortugas… Se sonreían uno al otro, típica sonrisa de enamorados. La gente se daba cuando los miraban, sonrieron, ambos jóvenes que encontraron a su gran amor en esta vida, pensaban al pasar, pero no todos, algunos solo los miraban con burla, ignorancia, y asco. Claro que ellos ni enterados estaban, solo tenían ojos y oídos para el otro. Llegaron al parque, y como siempre llegaban tarde…los ojos de Ryeowook se le notaba la molestia, su hyung nuevamente se tardaba en llegar, un suspiro por parte del menor se escucho, seguida de una gran risa de parte de todos los presentes. Los recién llegados solo lo veían con molestia, ¿y ahora que pasaba? HeeChul, el hermano mayor de Kyu al ver las caras de ambos sonrió.
—Desde hace cuanto salen, eh?—se burló— no me lo habían dicho…
Aquellos dos, el centro de atención siguieron sin darse cuenta y un molesto HeeChul volvió a hablar:
— ¡Que porque andan de la mano! — Los recién llegados lentamente, ambos sonrojados se miraron las manos ¡y era cierto! ¿Como era posible? Y no solo estaban agarrados… ¡también tenían los dedos entrelazados!, rápidamente se soltaron, y se pidieron disculpas, los demás estaban que no se lo creían, ni así eran capaces de darse cuenta. Ellos…si que eran distraídos, quizás demasiado…o ¿solo era miedo?
El día trascurrió lentamente para ellos, después de todo, casi, casi dejan al descubrimiento sus sentimientos, y eso no podía pasar, no, no querían perder esta valiosa amistad. Y más para Kyu, ya que por cierto, le costó bastante que sus dos guardaespaldas; Wookie y Kang In lo dejaran ser amigo del emo, pues esto dos no querían que le hicieran daño. LeeTeuk, por el contrario, al verlos juntos noto que se gustaban, y por esa misma razón le acepto. Tanto SungMin como Ryeowook se pusieron de acuerdo en molestarlos, wookie se podía bien dulce con Yesung, y este no hacia mas que seguirle el juego, sin darse cuenta obviamente, cosa que ponía al podre magnae celoso, muy celoso. Y lo mimos pasaba en viceversa. HeeChul solo podía mas interesante todo, gritando como el loco que era una y otra vez “yewook” “Kyumin” “ya deben un beso” “vallan a un hotel a camelados” y cosas por el estilo, que sacaba grandes carcajadas al resto de los presentes.
Después de la llegada de Kyu nuevos compañeros llegaron, Eunhyuk, DongHae, SungMin y Singdong los cuales enseguida se hicieron amigos.
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Un año de amistad ya, un año guardando todos sus sentimientos… un año que casi se convertirían en dos, en unos tres meses. Era octubre, el mes preferido para el grupo de amigos que se había creado. Si, en octubre, mas exactamente el 15 aquellos chicos habían propuesto la idea de crear su propio grupo denominándolo “Super Junior” y no eras que sean arrogantes ni nada de eso, el nombre venia por que cada uno de ellos tenia un talento distinto.
Faltaba una semana para la fiesta, en la que festejarían el a verse conocido, y enamorado. Porque en ese mismo grupo habían por lo menos 5 parejas; KangTeuk, SiBum, HanChul, Eunhae, y Singni (singdong y nani)
KyuHyun estaba en su casa, mas exactamente encerrado en el cuarto de su hermano mayor, pues si HeeChul se canso de esperar que su hermanito hiciera algo, quizás no sea la forma en la que esto tendría que pasar, pero…cuando tiempo mas tenia que soportar que esto dos actuaran como estúpidos cobardes, no lo podía soportar mas.
—Mira Kyu, sé que no es fácil decirte a tu amigo “hola yeye vine a decirte que te amo”. No lo es, pero… ¿enserio no te has dado cuenta que ese chico esta a tus pies? —pregunto realmente sorprendido de que su hermano el inteligente se despiste de esa forma — Yo te lo diré de una forma fácil para tu cerebro hermanito, o haces algo en esta semana, o lo perderás para siempre, y quien sabe…quizás la persona que te lo robe no sea una buena. Quien sabe lo que pueda pasar…anímate de una vez, y díselo — se dirigió a la puerta y la abrió — Ahora vete que tengo que cambiarme — El otro solo se limito a obedecer.
Ahora mas que nunca tendría que pensar, su hermano podía ser un imbécil muchas veces, pero jamás de los jamases le haría una broma sobre algo así. Tenía exactamente seis días para pensar, seis días para averiguar si es cierto.
Por otro lado, Yesung estaba de una forma muy parecida a la de kyu, solo que a este nadie le dijo nada, él ya estaba harto de ocultar esto, se sentía peor día a día, ganas de gritar que lo amaba lo llenaba, unas ganas de declararse, por lo menos inténtalo. Una vez lo intento, y fallo, por Min ese conejo rosado que prácticamente es su sombra. No hay día que Min no este con Kyu, con SU Kyu, momento Su Kyu…si, suyo solo suyo. Sonrió como tonto al pensar en SU KyuHyun. Yesung estaba dispuesto a demostrar sus sentimientos, quizá…solo quizás se arrepienta en un futuro, pero nada cambiaria ¿o si? Desde hoy martes 11 de octubre, el Kim Jong Wook aunque solo fuera una sonrisa, le haría notar este amor, en el que cayó hacia más de un año.
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Cuando KyuHyun llego a la puerta de la casa de su amigo, se sintió nervioso, como la primera vez que fue. Tan nervioso le ponía, pero ahora mas que nunca, debería averiguar si sus sentimientos eran o no correspondidos. Intento ponerse lo mas hermoso que pudo, claro que no exageraría con un esmoquin eso ya seria demasiado, hasta para el. Unos jeans negros bien apretados, una camisa blanca con el primer botón sin abotonar dejando ver una cadena, la cadena que le regalo su hyung para su cumpleaños. Y una campera la cual no se cerraba. Así mismo salió prácticamente había volando a la puerta de la casa de aquel amante de tortugas.
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Torpemente se despertó cayendo de su cama, se golpeo la cabeza con su mesa de luz, cuando se paro se acarició suavemente la parte lastimada, y como si su vida dependiera de eso miro la hora en su despertador, el cual por lo visto no sonó, corrió como si la tortuga gigante de su pesadillas quisiera comerlo. Se ducho, seco y cambio, estuvo mas de diez minutos viéndose en el espejo; llevaba un pantalón de jeans azul, su camisa negra, la pulsera que le regalo su niño, de juegos, cada cuadradito tenía una imagen diferente y por lo que dijo el mangae eran los personajes de cada videojuego que existía. Salió corriendo apenas escucho sanar su timbre, pero antes de abrir sonrió lo mas que pudo y le saludo. Dios valla sorpresa que se topó, su kyu estaba tan…hermosamente sexy antes sus ojos que sin darse cuenta sonrió aun mas. Y aquel niño razón de aquella sonrisa sonrió también, porque su hyung, si era verdad que correspondía a sus sentimientos se había puesto hermoso para que lo viera, lo ponía Super feliz.
—Buenos Días Yesung — saludo alegremente — ¿Listo para irnos? — decía mientras se acercaba a saludar al mayor y agarrarlo de la mano.
Ahora empezaba el juego. Hora de arriesgarse…
Yesung se sentía nerviosa, tener su manita con la de KyuHyun…le hacía sentir bien, pero los nervios le comían el cerebro. Su cara se fue volviendo roja y a KyuHyun le parecía tan lindo. De pronto yeye de quien sabe donde saco una gran valentía, y entrelazo sus dedos con los del menor. En el camino ninguno hablo, solo silencio, un agradable silencio que les dejaba poder disfrutar a su gusto el toque de sus dedos con los del otro.
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Los días fueron pasando, ya era viernes 14 de octubre, la fiesta está a un día, y KyuHyun por suerte ha descubierto que su hermano nunca le mintió, su hyung sentía lo mismo, lo deseaba tanto como el otro a él. Ambos querían unirse en un beso profundo e irse a donde valla el otro, sin importar nada mas que ellos, claro que siempre juntos, juntos toda la eternidad si es necesario decir. Los amigos de los jóvenes estaban sorprendidos, los tontos enamorados, como ellos le decían a sus espalda estaban cada día mas juntos, más de lo normal, y juraban que se coqueteaban estuvieran ellos presentes o no. En cada oportunidad que tenían iba donde se encontrara HeeChul con su novio, pobre de ellos casi siempre interrumpiendo algo… y no hace falta decir lo histérico que se ponía, a veces pensaban que ese chino era sordo.
—Ya les dije unas 1223465657567 veces que no he hecho nada, mas que la pura verdad; que si no intentaba, que si no se declaraba y eso lo perdería por cualquier tipo, que quien sabe que le hubiera hecho.
—Es que no puedo creer que con solo decir eso — apunto hacia una banca — ¡ahora sean así de a camelados! Con todo lo que hicimos…
—Ya dejen a ese par de tortuga lentas y vallan a comprar algo, ¡tengo hambre! — se quejo la diva.
— ¿Y nosotros porque? — Pregunto Siwon — que valla tu novio
— ¿y porque Hangeng? ¡Si fueron ustedes quienes interrumpieron nuestro momento!
—Ya…—Singdong se puso en medio de ambos y miro al Sibum — Ustedes irán —Sonrió al ver las expresiones de sus compañeros — Nani y yo tenemos que ver al profesor, Ryeowook tiene que ir a ayudar al profe de música, SungMin no sabemos donde esta… y el KangTeuk, ya saben— dijo — solo ustedes están disponibles. Además fue idea de Kimbu venir a decirle por 232432452532 que hiso con ese par — volvieron su vista hacia el yehyun.
Al otro lado del patio de la escuela se encontraba el famoso “par de tortugas” como ahora lo llamaban. Disfrutando de la cercanía del otro, ambos enamorados sonrientes recostados ahora, en el pasto contando cosas, como de costumbre eran raras.
—Y entonces Nyashuki big — (la tortuga gigante del sueño de yeye) decía el moviendo sus manitas en el aire — Me fue a buscar y me baño, aah después no sé cómo llegue a una casita, no era la mía…era —lo miro de reojo y se sonrojo — la tuya —susurro, y aun así escucho — y ella me decía algo raro como “fgjiwndsldnied susncisvnwe fdjf isejownc” —KyuHyun escucho y rio — y nos dejó solo…ahí etto…yo….— se quedó callado, nervioso.
—Dale yeye ya viene la partes mas buena ¿no? — Le animo a seguir — quiero escuchar…—le hico un aegyo que sabía de sobra que funcionaba con el mayor.
—Esta bien Kyu, como tu quieras —empezó a jugar con sus dedos lleno de nervios — Tu te acercaste a mí, y…y y me besaste — se sonrojo a mas no poder.
— Hmm~ ¿eso hice? — pregunto mientras su cabeza le gritaba que aprovechara el momento y lo besase, y entonces acepto la petición se acercó un poco a su hyung — Yesung…—lo llamo suavemente y este volteo a verlo para darse cuenta de la poca distancia que separaba a sus labios, el aliento y la respiración de ambos se mezclaron todo era perfecto hasta que...
— ¡Yesuuuuung-ssi! — la voz de LeeTeuk se escucho y ambos sobresaltados se levantaron y miraron con asombro, o quizás no como ese chico alto y delgado corría haca ellos a máxima velocidad, una sobre humana.
Cuando estaba llegando paro de pronto, de cierta manera fue cómico para los dos espectadores, se avergüenzo un poco, pues cuenta se dio de que algo importante interrumpió, sin embargo, ahora tenia que hacer unas cosas y no podía perder tiempo, se acercó a los dos mas chicos y tomo a Yesung de la mano para luego irse corriendo, dejando a un KyuHyun confundido, triste y enojado.
Llevaba corriendo un rato, hasta llegar a una heladería, su favorita “TsukiYuki” en donde una vez cada semana se junta todo el grupo a disfrutar un momento mas juntos, entre risas, lagrimas y sonrisas. Compraron dos helados de cono, y se sentaron. LeeTeuk no le había dicho porque lo “secuestro” de su querido amigo, en un momento tan…esperado por ambos.
—Suspiro—
— ¡Ya sé que te interrumpí en un momento importante! —Le dijo, el otro solo lo miraba — es que necesito tu ayuda, ¿viste que yo estudio para ser fotógrafo? Bueno, necesitaría que tu y tu amigo sean una pareja, necesito una sesión de fotos para un trabajo— sonrió de la misma forma de siempre.
—Porque tú nunca le pides a Kang-In ustedes ya son pareja, ¿no?
— Si, pero no puedo. Recuerda tonto, yo soy quien debe sacar las fotos
Yesung se quedo un rato pensativo, pues el mayor tenía razón. Termino su helado y contesto —Si, te ayudare— estaba por decirte que KyuHyun no lo aceptaría, cuando justo detrás de él se encontró con Wookie quien solo se limito a salud con una reverencia.
—Oooh Buenos días Wookie — saludaron ambos a la vez.
—Buenos días hyungs— sonrió dulcemente como de costumbre.
El recién llegado se quedó hablando con Yesung mientras Leeteuk estaba en su propio mundo…imaginando cosas realmente raras, cuando de pronto una gran idea se le ocurrió, una malvada idea. La cual quizás ayudara al par de tortugas.
—No necesito la ayuda de Kyu, solo la de ustedes Yewook — ambos mencionados lo miraron, yeyé sorprendido y a la vez desilusionado, Wookie solo confundido — Ustedes serán la pareja feliz que me ayudara— dijo con risa, la cual yeyé fue el único sin comprender el porqué.
— ¿Leeteuk no acababas de decirme a Kyu y a mí que nos querías como pareja para el trabajo? — pregunto.
—Aaah si…pero… no creo que sea fácil hacerlo aceptar, y a provechando que tu —mirando a Ryeowook— estas, me facilitas las cosas.
Yesung suspiro, porque aunque al principio se negaba a ayudar de esta manera, ahora esta triste porque no lo haría con su querido amigo…
~POV Kyu~
No puedo creer que casi, ¡casi beso a Yesung! Tan cerca estaba…maldito hyung, me la pagaras por haberme hecho perder tan oportunidad. Tal y como vino se fue, me lo arrebato de una forma bastante chistosa hasta yo me hubiera reído, si no fuera porque interrumpió el momento mas importante de mi joven vida.
¿Cuándo fue que llegue aquí? — me pregunte mentalmente volviendo mi vista hacia donde se encontraba el amor de mi vida y el hyung que lo secuestro…
~POV Vickychan~
El pequeño castaño oculto entre dos arboles cerca de la cafetería observaba atentamente cada movimiento de aquellas personas, mas se molesto cuando apareció su hyung, Ryeowook. Y como si fuera posible por arte de magia, pudo saber, que la cara triste de su yeye, y la sonrisa de Leeteuk, y la cara juguetona de Ryeo solo podía significaba que el yewook aparecería en acción. Más molesto ese día no podía estar, y más al no saber por qué tenia una tan mala libra, algo malo sucedería…
Cuando finalmente LeeTeuk, Ryeowook y Yesung salieron, kyunie sonrió felizmente y salió corriendo, si es que se podría decir eso porque cualquiera que lo viera pensaría que es un ser sobrenatural. Llego hasta donde se encontraba, y tal y como lo hiso el secuestrador, agarro del brazo a su querido amor, y se lo llevo como si fuera el mismísimo fin del mundo. Claro, no hace falta decir lo sorprendido que estaba Yesung, y lo sonrojado que se encontraba ante tal situación. Pero por supuesto, como era de esperarse, Kyu pensó que seria porque su amigo estaba enojado por su actitud, así que lo soltó y se sentaron en unas bancas que había por allí.
— ¿Y bueno, me contaras que ah pasado? — pregunto KyuHyun nervioso, pues acaba de recordar lo sucedido antes de que se fuera.
—Ooh…Nada, solo que Teuk Hyung necesita ayuda con un trabajo que debe hacer — Yesung intento sonreír, pero se sentía un poco incomodo. Yesung al ver la cara de su compañero se dio cuenta que con eso solo no se satisfacía, suspiro— Necesita que…el yewook — se sonrojo al decirlo, pues vergüenza le daba tener a su mangae ahí — como pareja, ah de sacar unas cuantas fotos.
— ¿Solo para eso? — pregunto con duda, pues el bien sabia que tanto su hermano HeeChul, como Leeteuk siempre intentaban que él se le declarara al mayor, es seguro que haya una razón mas para todo aquello pensaba Kyu. — Te ah secuestrado, en un momento importante…para nada — Susurro sonrojándose al recordar la cercanía de yeye.
— Bueno, en realidad…te lo iba a pedir a ti… — Kyu lo miro atentamente — pero digo que era mejor Ryeowook, que por cierto apareció repentinamente, porque tu no aceptarías.
~Pensamientos de evil mangae~ No, no me lo puedo creer, solo…. ¡aaah! pero a mi me gustaría haber sido la pareja de sección de fotos de mi hyung, no, maldigo mi personalidad, y maldigo a LeeTeuk hyung, y a Ryeowook por aparecer. Maldigo a todos… no es justo... ~Fin (?~
—Eeh…¿Kyu? — Pregunto suavemente yeye al ver que el menor no estaba prestándole atención — ¿Kyu? Vamos escúchame… ¡Kyu! — le agarro de las mejillas, sonrojándose — Vamos, ¡hey! El pequeño mangae al sentir la respiración de su hyung tan cerca de su mejilla, sentir la piel suave de su yeye…empezó a soñar despierto, sintiéndose que soñaba, sujeto las manos de su hyung, las cuales seguían en su cara, las acaricio suavemente, sintiéndose bien… y viendo como el adorable rostro de su acompañante se sonrojaba. De pronto, como si de verdad fuera un sueño, todo absolutamente todo desapareció, solo ellos estaban ahí, viviendo lo que tanto esperaban. Sus corazones estaban como locos, sus cabezas de paseo se fueron, su cuerpo solo reaccionaba, y su corazón, loco, gritaba. Ambos, sin ser consientes de nada, ambos niños inocentes, se acercaban lentamente, sin perder de vista los ojos del otro, un brillo de felicidad se podía ver. Con tan solo un toque, un toquecito de los labios ajenos, se sintieron a morir. Torpemente, se besaron, pues si bien habían soñado con ese momento, también era su primer beso, y ambos con los ojos cerrados, ignorando al mundo, ignorando donde se encontraban se besaron, suavemente.
Pero como si fuera por arte de magia, siempre algo debe pasar. Y si, LeeTeuk y Ryeowook, quienes le siguieron después de ver como el menor se llevaba a su amigo lo siguieron, claro que los otros dos ni cuenta se daban, pues estaban bien concentrados en el otro. Ellos fueron testigos de que por primera vez, después de un año, por fin había señal de algo. Pero para la mala suerte de los presentes, había que interrumpir, pues bien sabían, que por tan lentos y tontos eran, serian capaces de irse a otro país, continente con tal de no pasar una vergüenzas como esa. Aunque, estos ya se den cuenta de lo que sienten, era mutuo. Al ver como el yehyun se separaba, caminaron hasta ellos, sin perder de vista la mirada de ambos; sorprendidos, felices, nerviosos y confundidos. Y cuando nuevamente, LeeTeuk agarro a Yesung y se lo llevo, todo sonrojado, tanto por lo que había ocurrido como por que se lo llevaban. Y ni que decir sobre Kyu, él estaba desconcertado y de muy mal humor, pues…otra vez le habían molestado…
— La voz de LeeTeuk se escucho mientras corría lejos de Kyu seguido de Wookie— ¡Vamos a la sección de fotos! No te preocupes, te lo regresaremos salvo y salvo. — y desaparecieron al doblar la esquina.
Después de maldecir unos 10 minutos, despertó de su sueño. Se paro y fue corriendo en la misma dirección en la que los vio desaparecer, de cierta forma muy cómica. Paso a paso que daba le preguntaba a la gente que tranquilamente pasaba.
—Disculpe — paro a un hombre mayor en la calle — ¿Usted no ah visto pasar a tres chicos corriendo? Uno con una cabezota y manos pequeñas, vestido de negro, pelo del mismo color y unas zapatillas del grises. A un joven de 21 años, alto, rubio de vista alegre y juguetón, vestido de blanco. ¿Y a un niño bajito de pelo rojizo? —digo rápidamente
El mayor pareció pensativo unos momentos, con su mano derecha se sostenía el mentón y la mirada sin punto fijo, lentamente sacudió la cabeza.
—Lo siento joven, pero no es visto a sus amigos.
—No se preocupes, igualmente gracias por la ayuda. Y disculpe las molestias — hiso un reverencia respetuosa.
—Suerte chico — dijo aquel señor antes de retomar su camino, y desaparecer de la vista del menor.
— Gracias…— y sigo corriendo hasta llegar a un heladería, y escucho algo que le llamo la atención. En el mismo lugar había tres chicas, no parecían de aquí, pensó. Mas bien, les pareció de América, de los del Sur… para el, eran bonitas, si. Pero nadie más bello que su amigo.
Se sentó, por cosas del destino en la mesa junto al grupo de chicas. Pues, tampoco era la gran cosa, a el no le interesaba…hasta que, escucho una descripción que parecía de su amigo. Sin que se dieran cuenta, que no fue un difícil, se acercó. Y escuchó más atentamente. Si, para el ese tipo del que hablaban era su yeye, sin embargo se enojo al ver que las mujerzuelas esas, estaban babeando.
Por supuesto no se fue sin antes hacer algo. Se le acerco sexualmente a la chica más pequeña de estatura, pero más pervertida.
— ¡Hey! Tu, si tu…— la chica le miraba — no te acerques a ese chico — ella se sorprendió, y al mismo tiempo se sonrojo — No, es que es homosexual. Antes que digas algo, yo también, y…somos una pareja feliz, así que niña pervertida y babosa, si te acercas a el — se acercó lo suficiente para incomodarla — te la veras conmigo, tus amiguitas también. Que te quede claro.
Y se estaba por ir, ¿pero…a donde? El no sabia donde estaba, ¿quesería mejor hacer? Preguntarles a ellas, si, seria lo mas fácil.
Camino hasta ellas, claro que estas se dieron cuenta, y las dos mayores se pusieron en guardia, Kyu quiso reír antes esto. Pero no puede arriesgarse.
Después de un rato, nuevamente se encontraba corriendo por la ciudad. Pues, aunque había constado que le digieran terminaron aceptando.
En el camino, pensó formas de que, bueno… de que yeye no posara como pareja de wookie. No es que no le agradara, es su amigo…pero siempre emparejaban y lo siguen asiendo a esos dos. Y eso, realmente no es algo que le gustara.
Obviamente por celos, el compartió muchas cosas con el. Muchos momentos, secretos y años de amistad.
Siguió corriendo hacia el parque, uno de los mas lindos lujares que poseía corea; un buen lujar como para sacar fotos, un hermoso paisaje.
Ya casi llegaba, le faltaba unas cuadras, cuando doblo hacia la izquierda, sonrió. Le pareció tan lindo como venia vestido, un traje todo negro, el color que mas le favorecía y luego miro hacia donde estaba su pequeño amigo, este estaba de blanco, con un ramo de flores azules.
Ahí había algo que no le gustaba para nada, a lo lejos se di cuenta de que había una pequeña capilla…
— ¡Oh no! —Casi grita— Ya entiendo todo…
Se escondió lo mejor que pudo, sin embargo LeeTeuk lo vio y como siempre, sonrió. El solo se sonrojo un poco.
Veía todo, estaba seguro de que el, estaba siguiendo algún plan de HeeChul, estaba seguro. No es que a el le gustaran esos planes locos, pero…pensaba que si con eso era capaz de tomar valor, un alto valor para decir todo lo que quería, seria lo mejor.
El veía todo desde una banca, ya no le importo que lo vieran. Cuando Yesung se di cuenta de su presencia se avergüenzo de que lo viera, y unos nervioso terribles se apoderaron de el.
Ya unas 25 fotos había sacado el mejor de los tres, unas en el suelo lleno de pélalos; Yeye estaba acostado junto a Wookie y ambos sonreían, había sombra por el árbol que ahí estaba, un cerezo grande y hermoso.
Después otra, donde yeye fingía dormir sobre las piernas de su amigo mientras este le acariciaba el cabello.
Y así siguieron, hasta que… que LeeTeuk digo algo que a Kyu y Yeye le molestaron.
—Bien chicos, ahora vamos a la capilla — sonrió y guardo la cámara — ¿eh? Que esperan, ¡vamos! — digo y camino hacia el lujar, seguido de por el pequeño, y por el par de tortuga.
Cuando llegaron les hiso posar; Yeye y Ryeo se encontraban en el altar sostenidos de las manos, y Teuk como de costumbre con una idea brillante, les dio un anillo, el cual era lentamente hacia el dedo corazón del menor. Claro, la cosa no era fácil para el pobre peli negro, estaba haciendo semejante cosa bajo la atenta mirada de su amor. Y la risa que soltaba su Hyung, no ayudaba en nada.
Por otro lado, KyuHyun tampoco la pasaba bien, esta conteniéndose. Pues si no lo hacia, podía jurar que mataba a su amigo y su hyung. Sus manos estaban hechas puño y estas estaban, ligeramente, temblando. Y su labio inferior era fuertemente mordido por sus propios labios. Nunca, pero nunca estuvo tan celoso en su vida. Por supuesto, esto era notado por sus dos amigos.
Cuantas fotos había sacado ya, ni idea tenia…pero se podía decir que el aquella pequeña capilla las fotos fueron como unas 100 mas o menos, quizás mas.
Todo iba bien hasta que al genio se le ocurrió una gran idea. Los tres pequeños vieron atentamente como el mayor tomaba su teléfono, claro que iban a escuchar, pero… se fue lejos, dejándolos solos. No fue mucho tiempo, apenas 3 minutos, pero para ellos, con el ambiente tenso, fueron como 3 años.
Entro sonriendo seguido de una canasta enorme de pétalos de rosa; blanca, roja, azul & negra. Se la dio a mangae, este la miro, y frunció el ceño, ¿Qué quería?
—Tómalas y tíralas hacia la feliz pareja —dijo
—No — le lanzo una mirada de odio.
—Vamos Kyu-ah ayúdame también — hiso un adorable y molesto puchero.
Después de unos segundos observando aquello solo le quedo aceptar.
— ¡Bien! — le dio una palmada en la espalda.
El pequeño mangae se dispuso hacer lo que le pidieron, los pétalos caían rápidamente, y se lo digo a su hyung, pero este solo sonrió y le digo que no se preocupara.
Diferentes poses, diferentes miradas, diferentes ramos, todo diferente ante la atenta mirada de Kyu.
—Oh bueno…. — digo el mayor de pronto — ahora, no se enojen, pero falta la parte mas importante en una boda —cuando vio que ninguno se percataba lo digo — ¡El beso! ¿sois tontos? —rio.
¿El beso?, en ambas cabeza de las tortuguitas había palabras insultantes hacia la persona que se encontraba ahí, sonriendo.
Si bien el primer beso ya lo dio yeye, el…no quería besar a su mejor amigo, no señor. El no quería, y menos delante de su pequeño, porque después de todo, de cierta manera, ya sabían que eran correspondidos, por lo cual había una posibilidad de que el…llegara a ser mas que un amigo. Aquello no era bueno, porque… ¿y si KyuHyun consideraba que el ya no lo quería? No podía…no quería y se lo hiso saber.
— Hyung, pero yo…no quiero besarlo — dijo sonrojándose.
—Vamos, es solo un besito —Insistió.
Unos 20 minutos entre si y no se llevo a cabo, y el mangae no quería seguir allí. Así que decidió irse, aunque no muy lejos, solo salió de la capilla.
Yesung, termino aceptando, ¿de que forma? No se sabe, es un misterio. Solo algo es seguro, cuando el mayor quería algo, daba miedo.
Afuera, un triste mangae se encontraba vagando. Decidiendo que hacer; entrar o no entrar. Pensó en llamar a la policía, pero…no vendrían por algo así, ¿verdad?
Decidió, después de todo, entrar y detener todo. De una u otra forma.
Corrió a toda velocidad hacia allí. Abrió la puerta de una patada, a paso feroz entro hasta la pareja que allí estaban por besarse, y como si fuera un boda, el grito fuertemente — ¡Deténganse! — Sus tres hyung’s lo miraron, LeeTeuk sonriendo, Ryeowook medio sorprendido pero felizmente sonriente, y su hyung, Yesung lo miro sorprendido, confundido y avergonzado por todo lo que sucedía a su alrededor.
KyuHyun fue hasta su hyung, se puso enfrente, claro quitando a wookie de una forma nada amable, y sin que él lo sepa, todo estaba siendo grabado.
Le cogió de la mano, como anteriormente lo había hecho el otro, las apretó un poco. Suspiro y con una dulce sonrisa le digo todo aquello que guardo hace un año.
— Kim Jong-Woon, yo…desde que te conocí me has gustado y mucho. Déjame decirte el porque te amo. Amo cada cosa de ti, tus sonrisas, tus rarezas, tu voz…que es hermosa, tu mirada, esos ojos que desde el primer día que te vi me han atrapado. Te amo tal y como eres, no hay ninguna sola cosa que odie de ti, cada cosilla de ti me ah enamorado día tras día, y tu dulzura e inocencia. Por ser diferente. Eres…una persona realmente especial, a la que amo con locura, y no es mentira, es la pura verdad. Te amor mi Jong-Wook
Dijo todo lo que había callado, de una forma bastante rápida, pero entendible para los demás, los cuales estaban mas que sorprendidos porque realmente no esperaban que se declaraba en estas circunstancias. Solo Yesung estaba en shock y muy sonrojado, también nervioso.
—Cho Gyu-Hyun, yo…también confieso que te amo. Cada cosa de ti, sean buenas o no, me has enamorado desde el primer día. Cada cosa de ti, es hermosa para mí. Tu forma de ser conmigo, es dulce. Tus sonrisas arrogantes, tu inteligencia, tus adiciones, todo absolutamente todo, me ah enamorado de ti. Día a día, me has dado mas razones de amarte. Si me es permitido decirte, te amo mi pequeño KyuHyun. Ahora y por siempre.
Muchas cosas pasaban por la cabeza de la pareja de tortuga, muchos sentimientos.
Sus amigos lo miraban con sonrisas realmente grandes, pero esto ni enterados estaban, solo ellos existían. El mundo solo eran ellos y nadie más.
Todo esto estaba pasando a la historia del grupo de amigos, como prueba estaba el video que en esos momentos estaba siendo grabado.
Lentamente ambos protagonistas se acercaban al otro, del mismo modo sus ojos se cerraban y sus brazos se posaban en el cuello y cintura de su ahora, pareja.
Se besaban como la primera vez, un beso dulce y lleno de amor que claramente hacia que sus corazones se agitaran al igual que su respiración, sus cerebros desaparecieron, solo estaban sus almas amándose como desde el primer día, con solo una diferencia, que podía demostrarles a todos que realmente se amaban.
El beso nunca perdió el cariño que ellos querían hacer llegar al otro, continua siendo suave y dulce hasta que ultimo segundo, que por desgracia para ambos llegaron rápidamente, ya prácticamente no podían respirar y fue así como se separaron del otro.
Se miraron y lo que vieron fue el brillo del amor que rebosaba ambos.
Seguían en la misma posición que antes, después de unos segundos de verse se fueron separando, ambos sonrojados recordando al fin, que allí también estaban dos de sus amigos.
Estos dos que veían todo aun cuando estaban sorprendidos no dejaron de sonreír, estaban felices después de todo. Por fin el par de tortugas se daban cuenta de sus sentimientos, o quizás ya lo sabían y por miedo de perderse no quisieron arriesgarse.
Al mes siguiente…
Después de pedirles a sus dos amigos allí presentes que guardaran lo que paso en secreto, la pareja se puso de acuerdo en como decirlo. Porque después de todo…aun estaban nerviosos.
La relación no iba a más que besos, quizás un mordidita en los labios del otro y nada más. Se decían cada cinco minutos lo tanto que se amaban, siempre y cuando solo se encontraban.
Habían planeado una pequeña fiesta en el departamento de Yesung, aunque nadie sabía que en realidad vivían juntos. Desde que supieron que su amigo se mudo querían conocer el lugar pero este, por obvias razones no lo dejaron. Claro que sus amigos más de una vez intentaron seguirlo…
Eran las siete y media de la tarde y la pareja estaba en la sala (con todo ya preparado) besándose como si el mundo se acabara.
Se separaron únicamente cuando escucharon el timbre. Cuando entraron y vieron a KyuHyun ya ahí les sorprendió, el menor siempre llegaba tarde, cuando se trataba de algunos de los demás era capas de llegaran de dos a tres horas mas tarde, cuando se trataba de SU hyung era mas puntual… solo una media hora mas tarde.
Sabían que ellos estaban raros últimamente, pero nadie, salvo LeeTeuk y Ryeowook, sabían el porqué.
Rápidamente cada uno tomo asiento en la mesa. LeeTeuk con Kang In, HeeChul con Hangeng, Singdong con Nani, Eunhyuk con DongHae, y por ultimo lo que les sorprendió, fue que tanto Kyu como Yeye no le permitieron a Wookie y a SungMin sentase a su lado.
Muchas veces se habían negado, pero esta ves de una forma mas… ¿Cómo decirlo? ¿Desesperados?
Cuando terminaron de comer Yesung les dijo a sus amigos que vallan a la sala, claro primero dirigiéndole una mirada al menor de todo para que lo siguiera.
En el cuarto que compartía la pareja, una vez que se prepararon y no se sentían tan k nerviosos llamaron a LeeTeuk que estaba en la sala con los otros y le informaron que podía poner el video…
Mientras escuchaban las risas de sus compañeros sonrojados se dirigían hacia la sala…
El primero en verlos fue HeeChul, que casi voló hacia su hermanito y lo abrazo fuertemente.
—Por fin pedazo de tortuga~ — le dijo prácticamente llorando.
—Muy bien cuñado — le dijo Hangeng en un coreano medio raro
Todos juntos empezaron a festejar que el querido par de tortugas lentas sean por fin pareja, entre gritos y risas.
Como siempre, Hee hacia su trabajo avergonzado a la pareja, pidiéndoles que se besaran. Estos medios nerviosos aceptaron y se besaron suavemente en un pequeño beso, los presentes solo le aplaudieron y estos sonriéndose sonrojados.
Así pasaron una agradable noche entre amigos, festejando hasta desmayarse en el departamento de yehyun, cosa que a esto no les gusto, pero eran sus amigos no se podían enojar y menos al aceptar todas sus cosas.
—Te amo mi amor — le digo el pequeño al mayor abrazándolo desde la cintura.
—Y yo te amo a ti mi vida— le dijo el mayor posando sus brazos por detrás de la nuca del menor y besándolo suavemente.
Cuatro años mas tarde…
El grupo de amigos creció...les contare un poco, ¿ quien?
El grupo seguía junto, cada uno dedicado a distintas cosas. Leeteuk ahora es un fotógrafo muy famoso por su buen trabajo, Kang In era un gran maestro de artes marciales, el KangTeuk se caso hace dos años. HeeChul diseñador de ropa famoso mundialmente, Hangeng que trabajaba con su esposo encargándose de las joyas. Yesung es un veterinario exitoso, Singdong es un comediante de primera y muchas veces participó con alguno que otros de sus amigos en la radio. SungMin es un empresario a cargo de una compañía de muñecos muy famosa. DongHae y Eunhyuk son los mejores bailarines de Corea del Sur, Siwon es un actor junto a Kibum, su querido esposo y también modelo, de HeeChul. Ryeowook se dedico a escribir, componer canciones, y muchas veces a cocinar para evento importantes. Al final, al poco tiempo del que yehyun se mostrara el Minwook apareció, ahora ambos están comprometidos. Henry y Zhou Min, quienes son los dos nuevos amigos se conocieron en la facultad. Estos son pareja desde hace un tiempo largo, antes que entraran a la universidad, y estudiaban lo mismo, son compositores reconocidos junto a Wookie, quien los presento a este par antes los otros.
¿Que paso con Yesung y Kyuhyun? Pues ahora…están dando un paso mas como pareja, si, se están casando.
En una pequeña pero linda capilla, donde años atrás se declararon, ahora una feliz pareja se casaba. Ambos con traje: yeye usaba uno de color blanco y un toque de dorado, y Kyu uno totalmente negro con una camisa azul.
— ¿Y usted señor Cho KyuHyun, acepta al joven Kim Jong Wook como su legitimó esposo? ¿Para cuidarlo ante cualquier enfermedad? ¿Para amarlo y respetarlo hasta que la muerte los separe?—digo el cura.
—Si, acepto…hasta que la muerte se nos separe estaré con el— sonrió feliz colocando con cuidado el anillo en el dedo de su hyung.
— ¿Y usted señor Kim Jong Wook, acepta al joven Cho KyuHyun como su legitimó esposo? ¿Para cuidarlo ante cualquier enfermedad? ¿Para amarlo y respetarlo hasta que la muerte los separe? — Volvió a pregunta.
—Si, acepto. Pasare el resto de mi vida con el — le devolvió la sonrisa. Pasando el pequeño anillo al dedo de su amado, casi, esposo.
El papa sonrió — Sin más que decirse, yo los declaro marido y marido. Puede besar al novio —rio levemente al ver que ambos se sonrojaban.
Tomando el control de la situación el menor despacio agarro la mano libre del mayor (quien sostenía un ramo de flores) enredo sus dedos a los ajenos y con gentileza paso su largo brazo por la cintura del otro sonriendo. Yesung ante esto se sonrojo más, y con cuidado de que no se le caiga el ramo, paso el brazo por el cuello del otro rosando los dulces labios del amor de su vida. De fondo se escuchaba los gritos y aplauso de sus familiares y amigos, también compañeros de trabajo.
Fin~