1° capitulo
"El joven de marionetas"
Era una tarde comun en la mansion de la familia Sabaku, habia gritos por parte de Kankuro y de su padre. Pero detras de aquellos gritos se escondia un gran deseo.
-¡ya te dije padre, ya no deseo vivir mas aqui, te pido que me envies lejos de este pais! Enviame lejos y comprame una pequeña casa retirada de la cuidad, conseguire un trabajo y te pagare la casa tan pronto consiga dinero, yo me ocupare de conseguir una escuela y de valerme por mi mismo! Solo firmame unos paleles donde me autorices a ser mi propio tutor asi no te molestare cuando intenten obligarte a ir a aburridas juntas escolares.
-no es tan facil Kankuro, aun tengo que hablar con el director de tu colegio para comenzar los tramites de tu traslado, son muchos papeles, y ademas
-no le des importancia, ya hice los movimientos en el colegio, ya tengo mis papeles en mi cuarto y ademas ya se a que escuela deseo ir, solo tengo que ir y presentar un examen de admisión cuando lo pase entregare mis paleles y estare inscrito en cuando mi tutor este presente ya que no seria correcto decir que estas muerto, por eso te pido que firmes estos papeles y yo sere mi propio tutor, claro esta, te mandare mis calificaciones para que en mi escuela piensen que estas al tanto de mi, lo unico que quiero es que no tengas que viajar, porque pienso tener una vida mas sencilla, fuera de los lujos con los que he vivido hasta ahora, no me avergüenzo de la familia pero no quiero seguir con esta vida...
-Kankuro desde hace unas semanas has estado actuando extraño, siempre me amenazas que te vas a ir y no regresar aunque siempre terminas volviendo, sin embargo te conosco, y esta vez tienes una mirada distinta... has sufrido una traicion, ¡y es por eso que no puedes salir huyendo, pensaran que eres cobarde asi que debes arreglar tus problemas!
-no se como te diste cuenta pero asi es, no deseo hablar de eso, solo te digo que ese problema ya lo arregle antes de mi pasado viaje a japón, el nombre de la familia no se vera afectado, ya no quiero esta vida es por eso que deseo un nuevo comienzo. Tan solo esta vez... confia en mi...
-... de acuerdo y bien dime donde quieres vivir, no te cobrare la casa sera un regalo adelantado de tu cumpleaños, aun falta mucho pero al fin estas madurando, despues de tu partida mandare tus cosas por correo espero y te lleguen y te mandare dinero quincenalmente .
-muy bien padre los gastos de envio y mi boleto yo lo pagare, pero aqui esta la casa que deseo, se encuentra un poco lejos del instituto pero es agradable, solo falta hacer el pago.
-Kankuro a este instituto...
-lo se, pero pasare el examen, no soy idiota solo soy distraido ya lo veras padre.
-no me decepciones.
Kankuro subio corriendo a su cuarto, tomo su ropa y una marioneta a quien llamaba cuervo, los metio a su maleta, se baño y tomo una torta de la cosina, y se dirigio al recibidor donde lo esperaban los sirvientes de la casa junto a su padre y hermanos.
-hasta luego padre, espero y llegues a visitarme, solo que quisiera que cuando lo hagas me avises y tambien que no llegues a la escuela en una limosina, me gustaria que aparentaras ser un padre normal...
-¿Kankuro de verdad te iras?
- si. Temari, Gaara cuidense.
-joven Kankuro el auto esta afuera lo llevare hasta el aeropuerto.
-no es necesario ya le marque a un taxi y me esta esperando afuera.
-parece que Kankuro decidio independizarse, me pregunto cuando decidiras madurar Temari, por cierto hijos esta vez sus apuestas acerca de cuanto tiempo tardara en regresar seran inutiles, esta vez el no volvera en unas cuantas semanas...
Kankuro se dirigio solo al aereopuerto, compro su boleto y subio al avion, por algun motivo se sentia libre, por algun motivo sentia que su vida cambiaria y que por fin tendria una vida normal alejada de su familia y ademas...
-al fin vere de nuevo esa sonrisa... me pregunto por que me gusto tanto si nisiquiera puedo verle los ojos con esos lentes oscuros... quiza... jajaja quiza decidi hacer todo esto solo para conocer a ese joven...
Muchas preguntas se movian en su mente como las hojas cuando un fuerte viento sopla las copas de los arboles, todas ellas alrededor de ese joven de lentes oscuros, aquel joven quien lo habia cautivado, aquel joven, por el cual habia decidido tener un cambio. El vuelo habia llegado a su destino y un soñoliento Kankuro se despertaba sin ganas de devantarse del aciento, se dirigio a recoger su maleta, tan pronto como la tuvo saco de ella la marioneta que alli habia metido y la llevo del braso mientras se dirigia a la salida dispuesto a buscar un taxi que lo llevara hasta su nueva casa, pero al salir pudo reconocer unos lentes oscuros que alli lo esperaban.
-asi que compraste la casa, me pregunto con que dinero, si tu dices que eres pobre...
-esta bien, esa casa la compro mi padre como un regalo adelantado, yo nunca suelo pedirle que me compre algo pero esta vez fue decicion suya, ademas ya te habia pagado la mitad del precio con el dinero de mi trabajo.
-tu solo eres un niño mimado, que intenta independizarse, sin embargo no lo lograras
-por que lo aseguras si no me conoces!
-demuestra que estoy equivocado, y ahora sube al auto.
-lo hare mi dulce Shino... te demostrare que estas equivocado y que he cambiado
-um ¿has dicho algo? Olvidalo no quiero que digas nada y deja ya de hablar con ese titere pareces retrasado.
-cuervo no es un titere... ¡¡¡asi que respetalo!!!
-¿si no es un titere que es?
-es mi unco amigo.
El camino a casa se torno incomodo, la respuesta de Kankuro habia incomodado a Shino, sin embargo este sabia que el habia sido sincero con su respuesta al ver la tristeza en aquellos ojos...
-Kankuro, acaso la vida de un rico es tan miserable como para que una marioneta sea tu unica amiga...
-no se si en todas sea igual. Pero en la mia, cuervo y mis marionetas son mi unica compañia...
-comprendo, pero me temo que no puedo entender tu tristeza ...
-no pretendo que entiendas mi tristeza, tampoco que sientas mi dolor... (" lo que quiero de ti... es ver tu mirada")
-¿por qué me miras de esa manera?
-por que desearia que leyeras mis pensamientos- se dibujo una sonrisa en los labios del moreno, una sonrisa que causo algo mas que tranquilidad... las mejillas del otro chico se sonrojaron al verla puesto que las sonrisas acostumbradas del marionetista solan ser diferentes a la que le estaba regalando en ese momento- eto... ¿pasa algo Shino? ¡te has puesto rojo!
-e-estoy bien- dijo recobrando la compostura
-¿en serio? ¿estas enfermo?
-ya te dije que estoy bien. Por cierto a que escuela piensas entrar o es que acaso dejaras de estudiar
-mmm... Shino ¿en que instituto estudias?
-en el instituto Konoha, pero no me has respondido la pregunta
-lo suponia, bueno sera una sorpresa la respuesta ¿te parece?
-no me parece, respondeme la pregunta.
-sera mañana, ire a presentar examen, si lo apruebo bien entrare al instituto que deseo y asi podre decirtelo, mientras tanto no dire nada.
-mas te vale que cumplas, por cierto, ¿a que hora es el examen?
-a las 9 de la mañana, solo que no conosco muy bien como llegar en bicicleta, ¿crees que tu padre me llevaria?
-me parece que si, pero sera mejor que le preguntes a el, ¿me dejarias llevarte?
-¿tanto te preocupo?
-claro que no, simplemente quiero saber a que instituto deseas entrar ya que no me has respondido la pregunta
-y no lo hare, sera sorpresa, aunque estoy seguro de pasar no soy tan idiota como mi padre cree...
-¿tu padre?
-el me considera un bueno para nada que sobornaba a los maestros para conseguir buenas calificaciones, sin embargo era con mi propio esfuerzo... es por eso que te pido que no digas nada sobre mi, aunque no conoces mucho, si conoces mi desendencia... y no quiero ipocritas a mi lado
-¿odias a tu padre?
-no. Odio a los perros detras de mi apellido-su voz se torno melancolica y fria, habia rencor en sus palabras- es por eso que solo tu padre y tu saben quien soy, despues hablare con la directora.
-entonces el instituto a donde vas no saben de tu dinero, entonces ¿quien eres para ellos?
-un joven que entro con beca aun colegio de ricos y que ha venido a Japón a buscar una mejor vida, despues de todo, mis padres son originarios de este pais, y sobre la beca... eso no es mentira.
-y cuando piensas decirle a la directora?
-despues de aprobar, le contare quien soy a cambio de que solo ella lo sepa... he venido a buscar un cambio y ademas...
-.... ademas que?
-no es nada, quiza algun dia me atreva a decirtelo
Shino se quedo pensando por aquella respuesta, y cuando se disponia a preguntar Kankuro lo saco de sus pensamientos.
-¡¡¡señor Aburame!!!
-¿ya llegamos?... el camino se hizo corto.
-señor Aburame, cuanto tiempo sin verlo, ¿como ha estado? - dijo al salir del auto cargando su marioneta dejando a Shino pensando en el auto.
-estoy bien joven Kankuro, me tome la molestia de limpiar un poco su casa, por cierto, ¿a qué hora debera ir a presentar su examen?
- a las 9, ¿me podria llevar, es que me pierdo en bicicleta... jejeje?
-claro, y descuide, no le dire nada a mi hijo
-¡pero padre!... TU! ya te habias puesto de acuerdo con papa
-lo siento, por cierto, señor aburame, hableme con confianza, es que "joven" incomoda un poco jaja
-como quieras Kankuro, baja tu maleta y entremos a comer, espero y ustedes no se hallan peleado durante el camino
-claro que no, solo le estaba contando mi tragica vida jajaja
-siempre con buen humor, al parecer nunca cambiaras
-(este sujeto... ¿acaso me estaba mintiendo respecto a su padre y tambien sobre lo del muñeco?, o acaso sabe como finjir la tristeza de sus ojos) ya voy padre
La noche llego a las tierras de los aburame, esta familia tenia grandes terrenos aunque eran personas sencillas que vivian en un mismo lugar con sus familias, raros eran aquellos que decidian irse a vivir a otro lugar despues de casarse, asi que Kankuro era la unica persona que se encontraba viviendo alli, sin haberse comprometido con algun miembro del clan, a pesar de eso todos aceptaban esa desicion ya que Shibi confiaba en aquel joven, y este no parecia tener malas intenciones.
-Shino acompaña a Kankuo hasta su casa, esta oscuro y no tiene ninguna lampara.
-si padre, andando
-no es necesario no quiero molestar a Shino asi que solo presteme la lampara y se la devolvere mañana
-no quieres que te acompañe?
-no quiero molestarte
-no me importa, vamos ire a dejarte
-deacuerdo. Que descanse senor Aburame
Al salir de la casa Kankuro se dio cuenta de la oscuridad que habia, esa noche no habia luna y las estrellas no brillaban demasiado, ademas de que no habia luz en el camino hacia su casa, aunque podia distinguirla a lo lejos, agradecio que Shino le acompañara.
-bueno, llegamos. Toma la lampara y entra, me voy.
-no espera, encendere las luces y te regresare la lampara esta muy oscuro
-como quieras
-wow... la casa se ve mas grande, parece que solo necesitaba limpieza - la casa era sencilla tenia una sala que ocupaba una cuarta parte de la casa, un cuarto cerrado, a un lado juntos la cosina y el comedor, en el segundo piso habia dos habitaciones, un baño y una pequeña terraza desde donde se podia ver el mar, ya que esta se encontraba a pocos metros de este - sera muy tranquilo vivir aqui, estrañare los gritos de mis hermanos, en fin ellos no lo haran. Toma Shino.
-¿quieres mucho a tus hermanos?
-si, aunque siempre estuvimos un poco distanciados ya que cada quien estaba en su mundo. Lamento que me hallas escuchado decirlo...
-entonces deja de hablar en voz alta
-lo siento, es que no me avergüenza que me esuches...
-gracias por la confianza, descansa- El cuerpo de Shino se dio la vuelta sin percatarse de que que Kankuro queria decirle algo sin embargo, este no se detuvo a sus palabras.
-Shino, muchas gracias por escucharme y creer en mi...
Shino alcanzo a oir aquellas palabras y cuando se giro, la puerta ya estaba cerrada, aunque podia verlo a travez de la ventana ya que estas no tenian cortinas, sintio la necesidad de hablar con el, pero se contuvo al recordar que tenia un examen mañana y que el tenia que ir a la escuela, asi que, se dio la vuelta en direccion a su casa. Al llegar subio a su recamara y se recosto en su cama, giro su vista hacia la ventana y se percato que las luces de Kankuro estaban encendidas, se acerco a la ventana y lo miro recargado en el barandal de la terraza, estaba sin camisa solo con unos pantalones, al tratar de enfocarlo mas se dio cuenta que este parecia estar perdido en sus pensamientos mirando el mar oscuro.
-que sera lo que escondes... que te causa tanto dolor y odio... Kankuro si tan solo pudiera quitar esa tristeza de tus ojos... Kankuro...
Poco a poco sus ojos calleron en un profundo sueño con el nombre de aquel marionetista en sus labios, sin darse cuenta que ya se habia metido en sus pensamientos.
-dulces sueños mi dulce Shino...