Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Cita por lezti akira

[Reviews - 11]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del fanfic:

Los personajes le pertenecen a Masashi Kishimoto. Y yo no lucro con ellos.

Advertencias: Un Naruto demente y un Sasuke... bueno, es él y mejor lean.

Notas del capitulo:

No sé que tengo, pero este salio después de Ático.

No me maten, solo es algo extraño igual que mi otro fic.

Disfruten.

Ninmei

 

Caminaba tranquilamente, el sol en lo alto del cielo y las pocas nubes brindando una refrescante sombra. Amo esta clase de días. Donde todo parece perfecto, sacado de algún buen libro de fantasía. Y justamente intentaba recrear una historia fantástica y romántica. El campus de la universidad puede ser realmente extenso cuando de buscar a alguien se trata, o cuando se te hace tarde para una clase y sientes que los malditos edificios caminan alejándose de ti. Como sea, hoy es viernes y estoy seguro de saber dónde se encuentra mi príncipe azul.

Hoy hay entrenamiento para todos los miembros del club de karate, y mi príncipe es el campeón actual, así que si o si él debe estar en el gimnasio practicando junto a todos los demás.

El pasto bajo mis pies amortigua el sonido que provoco, resulto ser bastante sigiloso pues nadie ha notado que ya estoy en la entrada del lugar, escuchando los gritos o palabras extrañas que pronuncian. Me recargo contra la puerta, esperare hasta que salga.

Sé que mi príncipe tiene fama de rompecorazones y de ser un maldito insensible cuando se trata de rechazar a cuanta chica se le acerca. De ahí que por todo el instituto de Kuroi Tsubasa se corra el rumor de que Sasuke Uchiha es gay. Espero que ese rumor sea cierto, a veces lo dudo, eh visto como llega una fea chica rubia por el a la salida. Es realmente fea, no tiene pechos, ni una cintura marcada, se cubre medio rostro con un flequillo rubio que debe ser teñido, es un dorado bastante bonito como para ser natural, y su cabello largo siempre peinado en media coleta ¿acaso no se da cuenta de que dista mucho de ser alguien digna de Sasuke? La detesto. Pero, hoy será diferente. El aceptara tener una cita conmigo, traigo chocolates y flores conmigo ¡No hay manera de que se niegue! Además yo también soy rubio, y soy natural.

Escucho el sonido de más risas, mas gritos y de entre todos los sonidos distingo la voz de ese otro. Gaara es considerado el único amigo de Sasuke, yo sé que ese pelirrojo con tendencias suicidas u homicidas también quiere llevárselo a la cama. Pero él tampoco es digno. Solo yo.

¿Por qué la gente busca acercarse a Sasuke? Él es guapísimo, tiene un rostro angelical y contradictoriamente glacial, una piel tersa que muchas mujeres envidiarían, un cuerpo realmente tentador, y los ojos más negros y enigmáticos que yo haya visto. No tiene comparación. Es perfecto… o casi. Quizás a tanta blancura le falte un poco de carmín. Sí. Es un color muy bonito, tan vivo, reluciente, magnético, abrasador. ¿Cómo se vería Sasuke bañado de rojo? ¿Sería a un más encantador? ¿Al contemplarlo podría llegar a la conclusión de la vida? ¿De mi existir? ¿Sería el vivo retrato del amor?

La clase ha terminado. Ellos van a salir y yo tengo que esperar solo unos minutos más. Si el acepta salir conmigo, lo llevare al parque, este fin de semana tendrá un magnifico clima, soleado, sin nubes, tan cálido.

Todos los miembros del club salen, se ríen, se abrazan, se empujan y parlotean, ignorándome como de costumbre. Y Sasuke sale al último, acompañado de Gaara, estúpido pelirrojo ¡Lárgate!

 

—Hola — las tímidas palabras salen de mi boca a trompicones — Sasuke, me gustaría hablar contigo unos minutos.

Sasuke se gira, me mira de arriba abajo, analizándome desdeñosamente ¿no le gusta lo que traigo puesto? Porque soy rubio y hombre. Soy mejor que esa estúpida que viene por el a la salida. Gaara me mira directamente a los ojos, él también tiene unos bonitos orbes. Tan verdes, tan tristes y serios. Si, Gaara también es lindo, patológicamente lindo. Aunque claro, no le gana a Sasuke.

— ¿Se puede saber que quieres? — Sasuke suena enojado. Oh, ha visto las flores y los chocolates, puede ser que no haya sido mi mejor elección, o quizás las rosas no le gustan y es alérgico al chocolate, podría ser.

—Quiero invitarte a salir conmigo este sábado — pronuncio por fin.

Sasuke me mira incrédulo y segundos después su ceño se frunce, casi conjuntamente al tiempo que me lanza un fuerte golpe que desgraciadamente yo no logro esquivar. Termino en el suelo, eh soltado las rosas y Sasuke las pisotea, ahora el suelo es rojo también y contrasta muy bien con el negro de su tenis. Sus bellos ojos se han pintado de carmín, ¡Es sublime! Lo miro embelesado, el pronuncia más palabras, unos cuantos insultos masticados y un par de golpes más. Adiós chocolates, adiós flores. Hola carmín.

Entonces, cuando presiento que va a volver a pegarme, él se inclina y me toma bruscamente de la camisa. Un rosa pálido, igual que el de las rosas en capullo se instala en sus altos pómulos, un rojo se vería mejor. Acerca mi rostro al suyo, su respiración agitada, sus ojos brillando, tantos cambios tan sutiles y preciosos.

—No quiero que vuelvas a cercarte a mí. — me suelta y avienta. Se levanta, acomoda un poco sus ropas y después añade — Vuelve a intentarlo cuando este muriendo, quizás te diga que sí.

Él se aleja. Mi mente procesa sus últimas palabras, eso significa que aún tengo oportunidad de salir con él. Aunque esperar a que este agonizando me llevara tiempo, podrían ser muchísimos años, y yo quiero mi cita para mañana o el domingo estaría bien. Tendré que adelantar ese proceso si quiero mi cita. Lo hare.

 

 

 

Es sábado y el clima sigue siendo perfecto para mi cita. Me eh levantado temprano y alistado meticulosamente. Guarde todo lo necesario para una tarde armoniosa y romántica en una mochila. Me coloco la sudadera y después la mochila. Salgo repasando mi plan, porque no debe tener fallas y ciertamente soy un poco despistado, podría olvidar algo y arruinar todo, Sasuke no me lo perdonaría. No, todo tiene que ser tan perfecto como él.

Y mientras mi autobús avanza por las calles lo veo. Ahí, en el parque Yasei, pero no está solo, esa rubia estúpida le acompaña. Me levanto tan rápido como puedo y corro a la parte trasera del bus para bajarme. Corro en dirección de Sasuke, donde lo vi. Ahí sigue, está caminando relajadamente y la tonta rubia gesticula exageradamente. Los celos hierven en mí.

Me descuelgo la mochila y tomo lo más apropiado para alejar a Sasuke de esa puta. La doblo con cuidado y la guardo en la bolsa de mi sudadera. Vuelvo a encaminarme hacia ellos, justo a un paso de Sasuke saco mi pequeña navaja plateada, adelantándola. El movimiento es rápido y fuerte, la carne es tan débil y no se resiste verdaderamente al filo, ha entrado. Ahora el rojo mancha un costado de Sasuke. Lo medio abrazo y jalo hacia mí, la rubia me mira incrédulo, parece que no se ha dado cuenta de lo que eh hecho y yo remuevo la navaja, haciendo a Sasuke callar, no intenta empujarme siquiera ¿estará bien?

—Lo siento — le digo a la rubia — hoy tiene una cita conmigo.

Obligo a Sasuke a seguirme, removiendo el arma, siento la sangre caliente mojar mi mano. Se siente tan bien. Nos adentramos al parque, no hay mucha gente, es sábado y es temprano. Sasuke sigue sin hablar, ¿lo abre dejado tan sorprendido? Sigue caminando, yo voy guiándolo. Conozco este parque muy bien, me gustaba venir a jugar aquí cuando aún estaban mis padres, pero ellos se fueron y ya tampoco regrese. La pista de corredores está en el centro, nosotros la pasamos, Sasuke ahora avanza más lento, se ve más pálido. Quito mi brazo de su costado herido, y tomo su mano para jalarlo más rápido. Los arboles comienzan a volverse más altos, mas lúgubres, nos acercamos a una laguna artificial que fue construida hace seis años. Es lo último que hay, todo es calma, quietud, el sol cálido se refleja en las aguas profundas y azules. Llegar nos ha tomado más de lo previsto, hubiera sido más rápido si Sasuke no fuera tan lento.

Oh, Sasuke. Esta tan pálido y lívido, respira rápido. Aún hay vida en sus ojos, aún tiene un pulso fuerte, su corazón late. Volverá a decirme que no.

Me retiro la mochila, dejándola con cuidado sobre el pasto, Sasuke se sienta, ha de estar mareado o ansioso, no lo sé, pero no dice nada. ¿Por qué no habla?

Extiendo mi mano pero él la aleja de un manotazo, me mira con ¿odio? ¡Claro, aun no está agonizando, aun no me quiere! Retomo mi pequeña navaja y sus ojos tiemblan. El intenta levantarse pero cae, no puede, ¿Por qué no dice nada? Para eso tiene lengua…

Me abalanzo sobre él, Sasuke es fuerte así que no me sorprende que aun en su estado pueda abatirme, pero no ha salido bien parado. Sus manos sangran, su rostro se descompone en una mueca de horror. Abre la boca, mueve los labios, pero no dice nada ¿Por qué no habla? ¡Está desesperándome! Mi mano se cierne sobre él, la navaja se clava en su antebrazo, porque lo ha usado para defenderse, ¿Por qué no grita? ¡Quiero escucharlo! Corro el arma hacia el codo, la sangre brota escandalosamente, es tan roja, esta tan cálida, es tan brillante. Su preciosa vida. ¡La vida es roja! Y sobre su piel blanca luce aún más magnifica. Me gustaría verlo totalmente rojo.

Su rostro, quiero verlo así, pero no me atrevería a rasgar tan bella faz, sería un pecado. Sus ojos tiemblan, igual que sus labios, sigue sin decir nada. ¡Sus ojos! Si, los quiero. Acerco mi mano al derecho, el intenta retroceder, aunque esta recostado sobre el pasto, y sus manos sangran, y aun cuando el brazo derecho esta tan lastimado. Pero no puede, ahora soy más fuerte y solo quiero que él tenga una cita conmigo, y que sea hermoso, por supuesto. No puede hacer nada para evitar que la punta del arma entre a su órbita, ¡y sigue sin gritar!, un ojo sale, aunque me ha costado muchísimo trabajo, Sasuke aún se remueve. La sangre empieza a bañar sus mejillas.

Oh, dioses, creo que llegar el orgasmo con esto. Sasuke es tan sensual, tan hermoso, tan prohibido y perfecto… más ahora que la vida lo acaricia, que la calidez de su existencia se evapora en el frio del ambiente.

—Sasuke ¿te gustaría tener una cita, aquí, conmigo?

—Por supuesto

Pero ahora Sasuke ya no se mueve. Me pregunto si Gaara querrá salir conmigo. Quizás el sí hable, además tiene bonitos ojos y seguramente se verá igual de bien que Sasuke cuando este conmigo.

 

Notas finales:

Si, Naruto estaba demente. O muy obssesionado con tener una cita con Sasuke.

La rubia que iba por Sasuke a la escuela es Deidara, (amo el SasuDei, pero en esta historia pueden imaginar que era su cuñado).

Sasuke si hablo, si grito. Es solo que Naruto solo deseaba escuchar el que aceptaba salir con él, por eso no oye absolutamente nada de lo demás.

Pobre Sasuke, pero vamos, el fic es un intento drogado de horror.

Nos leemos en: Blood, Leyendas Urbanas, Only mine, Blue Eyes, ¡Viva los novios! (mi unico intento de comedia), Cosas de chicos.

Se cuidan y cualquier duda, queja, sugerencia, y demás favor de un review.

 


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).