Y así como el peligro recorre mis días
Te perseguiré a ti, correrás porque temerás de mí,
Pero seguirás deseando que no me aleje de ti
Porque me amas… y no puedes vivir sin mi
- Entonces…. ¿Quién eres realmente? ¿Has estado engañándome todo este tiempo?
- Soy el mismo de siempre
- No sé si creerte Kris o Yi Fan? Con quien te identifico ahora - acerque mi mano para tocarlo – aclara quien eres realmente y que hiciste con mi Yi fan…- susurro apuntándome con su arma…
- Jugar con armas es peligroso
- Muéstrame que tan peligroso es …
Tao sonreía ampliamente mientras devoraba el plato frente a él, sonreí al verlo la elegante camisa que tenia se adhería a sus pectorales dejándome una perfecta vista ya que su saco negro se abría de forma exquisita, aquella cadena que tenia con una argolla guindada se escapo de debajo de su camisa y resplandecía contra los reflejos de la luz
- Gege… ¿quieres tallarines? – lo mire sonriendo mientras acercaba el cubierto a mi boca recibiendo gustoso el alimento, Tao se relamió los labios y una sensación de querer arrancarle los labios a besos se apodero de mi, deje mi vista fija en el
- ¿Porque me miras así?- susurro Tao limpiándose la boca con la servilleta de tela, sonrió de nuevo mirándome con aquellos ojos encantadores y esas bolsas sensuales que tenia debajo, a pesar de llevar 4 años en nuestra relación para mi tenerlo cerca era como si fuese el primer día, sentía los nervios y aquella sensación de necesitarlo más que a mi vida, no podía estar sin él, Tao era el aire que necesitaban mis pulmones, aquella esencia que le agrega la perfección a mi vida
- ¿No puedo mirarte?- sentencie tomando un bocado de la langosta, Tao enarco una ceja de manera burlona
- No me vas a decir- negué apartado mi vista de la suya cuando sentí la leve presión en mi entre pierna di un brinco algo brusco haciendo que mis rodillas chocaran contra la mesa y el tenedor callera con un repiqueteo en el plato, mire con mis ojos abiertos a Tao quien sonreía con malicia
- Tao…- ejerció más presión mientras gruñía
- Paso algo Yi fan Gege- puso sus codos en la mesa apoyando su rostro angelical entre sus manos, su pie acaricio mi pierna para luego apretar mas
- Estate quieto…- apreté mis dientes como podía
- No quiero … sabes que soy muy curioso Gege-más presión mientras sentía algo crecer en mi pantalón
- Tao… maldito niño …- subí la servilleta de tela hasta mi boca ahogando un gemido en ella mientras Tao sonreía de medio lado apreciándome con un brillo singular en sus ojos juguetones- Tao basta aquí no…- si no fuese porque estábamos en uno de los restaurantes más caros de china ya mi panda estuviese rogando por su vida, pero al menos agradecía el hecho de que las personas que habían no notasen nuestra presencia, agradecí tener la mesa algo separada iluminada solo un poco por el brillo que lanzaban aquellas lámparas elegantes en el techo del lugar, y sobre todo agradecía el mantel que llegaba hacia el suelo tapando la escena juguetona que se desarrollaba bajo la mesa… apretó mas y me obligue a morder mi mano, mire su rostro… basta no mas jueguitos- ¡nos vamos!- tire la servilleta en la mesa y tome a Tao del brazo tirando de el
- Pero Gege el postre – deje el dinero en la mesa
- Puedes comer todo el postre que quieras en casa…- si tao, te ibas a arrepentir de todo deja que lleguemos a casa, me obligue a salir por la parte trasera para no caminar con aquel problema en mi pantalón atrayendo las miradas de media sociedad influyente e importante en China.
Lo arroje a la cama abriendo su camisa de tal manera que los botones salieron disparados por todos lados, Tao se burlo
- Gege era nueva- baje mis labios lamiendo sus pezones rosas
- Era…- susurre mientras mordía y sentía la espalda de Tao arquearse moviéndose incomodo debajo de mi, tire de su saco dejándolo en el suelo, baje mis manos desesperado mientras me entretenía dejando marcas en su cuello, desate su correa y baje su pantalón lo suficiente, la respiración de ambos se volvió agitada, como no volverse de esa manera si hace un mes no estábamos juntos y eso ya era demasiado para mi, necesitaba sentir a Tao, tome su quijada con fuerza alzándola besándolo con pudor dejando que nuestras lenguas se debatieran con seducción, Tao jadeo cuando apreté sus glúteos y alce sus piernas hasta mis hombros, quite mi pantalón rápidamente mientras dirigía mis dígitos para preparar a mi panda
- ¡NO KRIS, HAZLO DE UNA VEZ NO AGUANTO MAS!- gimió aferrándose a las sabanas
- Pero… te dolerá – jadee mientras veía su rostro desesperado se mordía los labios con impaciencia, hecho su cabeza hacia atrás
- JODER HAZLO DE UNA VEZ – me acerque a él mientras lo besaba situándome a punto de entrar, cuando… mi teléfono sonó- ¡¡EISH!!- grito eufórico Tao empujándome molesto, lo mire preocupado mientras me levantaba y me colocaba el pantalón, salía de la habitación escuchando el celular de Tao sonar también
- ¿Hola?
- ¿Señor Kris? – una voz firme llamo mi atención
- Si…- mire a mi alrededor para asegurarme de que no me seguía Sali al balcón mirando la luna alzarse en el firmamento – ¿qué pasa?
- Nuevo trabajo- suspire mientras peinaba mi flequillo
- Luhan te dije que hoy no podía- la voz del ciervo se escucho lastimera
- ¡Lo siento GEGE ENSERIO PERO SABES COMO ES EL JEFE XIUMIN! – lo raro era escucharlo tan varonil para luego saber que su imitación barata terminaba con voz de niño de 15 años
- Ya vale no te pongas así, ¿en cuántos minutos?
- 20 minutos, todo está en la biblioteca principal sector 5 en la sección de historia antigua- asentí mientras abría la puerta y me colocaba el saco, Tao estaba cubriendo su cintura con la sabana mirándome con un puchero cruzando sus brazos y enarcando sus cejas aparentando estar enfadado – lo siento tengo que irme- susurre dándole un beso en la frente
- Pero Yi Fan… cumplimos 4 años hoy … - susurro lastimado, me partió el corazón
- Juro no demorarme solo espérame ¿si? Te juro que lo recompensare todo- me acerque besándolo en los labios camine rápidamente para salir de la habitación
- Gege… - voltee mirando a Tao – ¿porque tu trabajo es tan entrada la noche?- su tono serio me dejo helado
- Tu sabes que … Luhan no puede con el bar por si solo- Tao me miro confuso
- Yi fan… - volví a voltear- Wo ai ni- susurro rosado sonreí y me acerque para darle un beso
- Te juro que hoy te entretengo toda la noche y madrugada- Tao se tapo con la almohada
- Ve…vete…vete- sonreí saliendo del departamento
Saque la carpeta roja, aquella que habían acomodado en la sección de historia antigua, me aleje un poco abriéndola era la foto de un hombre llamado Frederick, edad 50 años tiene 2 hijas mayores de edad y tiene 3 esposas regadas por toda Asia, debería atenderlo antes de las 12 y ya eran las 10, me apresure alistando todo saliendo de aquel lugar, vistiéndome como debería sin dejar de lado la máscara que tenia escondida entre la gruesa chaqueta de cuero negro.
La luna se alzaba en firmamento causando envidia a cualquier estrella, por no poder brillar como ella, por ser opacada, 10:30… no había pertenecido mucho a este trabajo pero gracias a mi difunto padre me quede de por vida en estos asuntos, no había problema al meterme con hombres o mujeres mayores, no tocaba embarazadas, bebes o niños y lo mejor era que ya sabían mi forma de trabajar por lo cual no me dejaban cosas como esas, entre saludando con una sonrisa falsa acomodado mi nuevo cabello negro que recién me habían tinturado, parpadee para recordar que tenia los lentes de color azules, apreté mi caminar pensando en el chico que esperaba por mí, debo hacer esto rápido sin tacto alguno como solía hacer, me encontré con uno de los camareros paseando por uno de los pasillos lo tome del cuello de la camisa y le propine un puñetazo que lo dejo inconsciente, me cambie y retome su tarea llevando la bandeja de comida a la habitación
- Toca tres veces- susurro la voz de Luhan por el micrófono diminuto escondido en mi oído, obedecí viendo a un hombre alto y corpulento, entre como si nada, el hombre cerró la puerta, grave error- desaste de su guarda espalda primero el resto es pan comido
- He dicho que quería la cena servida a temperatura media, esto está caliente no sirven para nada- arrojo los platos al suelo – ¿que no sabes hacer tu trabajo? – alzo su mano para abofetearme, oh no nadie toca mi cara, saque el arma apuntando en su frente viéndolo confuso mientras comenzaba a temblar- tu…
- Yo…el, todos somos iguales- el hombre pareció soltar un gruñido de frustración – será mejor que en tu otra vida trates mejor a tus sirvientes o que te alejes de cosas que no te incumben
- No, espera pago lo que sea no me mates puedo irme lejos de aquí- sonreí
- Lo lamento después de todo lo que has hecho de igual manera no mereces vivir- apreté el gatillo no se escucho disparo alguno por el silenciador, sostuve el cuerpo antes de que cayera al suelo y dejara manchas tape la herida con algún trapo para no dejar rastro alguno- Luhan dile a Chen que es su turno voy por el más importante
- Debes apresurarte Kris o el regresara y jodera todo- asentí escondiendo el cuerpo y saliendo de la habitación, recorriendo los espacios con menos iluminación regresando a mi habitual vestimenta junto a mi mascara, una sencilla con rasgos en los ojos y figuras abstractas, resople al correr por las escaleras dirigiéndome hacia la azotea donde estaba- no hay movimientos al parecer no vendrá- mi respiración chocaba contra las paredes de la máscara regresando el cálido aire a mi rostro golpeando trayéndome a la realidad, sigiloso Kris nadie puede escucharte ni verte, cargue el arma y lo necesario para abrir la puerta y divisarlo estaba acomodado viendo la ciudad apoyado al barandal fumando un tabaco de espaldas a mí, tenía que hacerlo rápido no podía dejar que el viniese y arruinase mi trabajo de nuevo como siempre lo hacía, aparecía con su típica mascara mitad negra y mitad blanca delgado y prepotente, sus víctimas a veces eran las mías, no se sabía quién robaba a quien, pero me frustraba y me llenaba de ira cuando ganaba y asesinaba él acabando con mi recado jodiendolo todo, agregándoles más horas a mi trabajo, si bien cada vez que veía ese cuerpo torneado y delgado aparecerse, brillante bajo la luna me entraban ganas de luchar y dejarle entender quien mandaba y que no tocase lo que era mío, por su culpa terminaba herido o yo alcanzaba a herirlo a él, era una guerra constante entre ambos, si supiese quien es, si viese su rostro podría jurar que lo mataría.
Sali apuntando mi arma hacia aquel cuerpo con ropa elegante, sentía mi respiración cosquillear mi rostro por la calidez, concentración iba a apretar el gatillo cuando el hombre se desplomo en el suelo con una herida abierta en la cabeza por una bala, apreté mi mandíbula apunto de patear y matar cualquier cosa me di la vuelta, de pie en una de las barandas como si no fuese lo suficientemente delgada para dejarlo caer hacia el otro lado y matarlo en segundos pensé y me relamí los labios en lo tentador que sonaba esa idea, esta vez no lo dejaría con vida era mi víctima, mi maldita víctima y posiblemente me quedaría más tiempo por su culpa trabajare de mas y Tao se molestaría conmigo, apunte su cuerpo a punto de disparar pero en un parpadeo caí rodando por el suelo, sentí el dolor de mi cuerpo levantándome viendo aquella figura odiosa, me llene de ira el hombre aquella mascara ocultando su rostro aquella figura preparada para pelear y acabar, como yo estaba, de hoy no pasaría nadie jodia mi día con Tao, nadie.
Su cuerpo voló con una pierna en alto, subí mis brazos tapando su golpe sosteniendo su pierna para golpearla y poder partir o romper pero dio otra vuelta y su rodilla impacto en mi estomago, retrocedí viendo el arma caer lejos de mí, la rabia consumió mi cuerpo ya era suficiente, me troné los dedos viéndolo, se preparo de nuevo recibí sus puñetazos y el los míos debatiendo entre peleas asesinas un todo o un nada, o el desaparecía o yo lo hacía pero lo único que me llevaba a hacerlo era la ira que me cegaba, Tao lloraba porque le hacía falta en las noches cuando mi trabajo se prolongaba y era por su culpa, por su maldita culpa fue que casi acaba con mi relación, propine otro puñetazo calvándolo en su abdomen lo sostuve apunto de golpearlo, un quejido salió de sus labios y me quede helado, esa voz… el chico me empujo y me golpeo con fuerza en la cara quebrando la máscara, estaba ido, porque se me parece… porque…
Un brillo singular llamo mi atención, corrí mi cuerpo a un lado pero el cuchillo alcanzo a aruñar mi brazo pasando sobre la gruesa tela y la camisa vi la sangre brotar, volvió a atacar y a dar en el mismo punto, solté un quejido y me aleje un poco más, no podía seguir estaba distraído tenía que acabar con esto ya o el acabaría conmigo, corrí hasta alcanzar el arma, pero piso mi mano con fuerza, alce mi pierna y le di en toda la cara quebrando la máscara que tenia, se corrió hacia atrás mientras mi mano se alistaba para disparar, su máscara se rompió, y como si fuese cámara lenta cayó al suelo quebrándose en pedazos dejando su rostro a la luz de la luna y sus ojos sedientos de sangre, me quede helado apuntándole sintiendo mi corazón apretarse… esto debe ser una broma no puede ser posible… no …
- Anda dispara y acaba conmigo ¿no es lo que quieres?- hablo de manera ruda, era una imagen diferente
- Ta…
- ¿Qué dices?- arrugo el ceño apretando el cuchillo en su mano, la ira inundo mi cuerpo
- Tao….- susurre, el chico se quedo mirándome extrañado entrecerrando sus ojos buscando ver algo a través de al mascara y las pequeñas grietas, luego miro mi hombro y abrió sus ojos de manera brusca delatándome por el tatuaje que llevaba, me quite la máscara dejándola caer al suelo
- Yi….Fan- gimió mirándome con algo de miedo… las sirenas resonaron mientras no dejaba de mirarlo… Tao me ha engañado todo este tiempo.
Entre a la casa después de escabullirme de la policía pelee con Luhan diciéndole que se metiera su siguiente misión por…. donde se le diera la gana, cerré la puerta con un portazo duro
- ¡TAO!- grite viendo la casa a oscuras patee uno de los muebles mientras arrojaba mi bolso partiendo un florero – ¡TAO!- grite mas fuerte mirando cada espacio de la casa con rabia intentado encontrar si quiera algo que me dijera que estaba ahí, ¿por qué no me lo dijo?, prácticamente estoy odiando a quien amo.
Apreté mi mandíbula escuchando solo silencio resultando mucho más frustrante, quería romper no quería hacerle daño a Tao pero ahora no pensaba en nada, no pensaba en mi herida ni mucho menos en relajarme, se que tuvo que haber llegado aquí tiene que estar aquí – ¡SAL DE DONDE ESTES! ¡ZI TAO!- le propine un puñetazo a la mesa recorriéndole una corriente dolorosa a mi brazo herido, entonces Tao salió de la habitación mirándome con desprecio- que ironía trae tu mirada- le sentencie con rabia
- Que ironía que estés bravo conmigo- susurro mirándome distante con frialdad, mi respiración se volvió brusca
- ¿Qué haces en esa empresa? ¿Por qué? … ¡acaso no te conformas con lo que tienes, con lo que te doy!- Tao sonrió- ¡responde! ¡Qué quieres que te dé para que dejes eso! ¡Pídeme todos los Gucci que quieras!- no evite sentir temor por él, era mi Tao no podía soportar la idea de que le hicieran daño, recordé las escenas en las que peleaba con él, una en especial que me dejo a la deriva a punto de matarme a mí mismo – Tao… te dispare… aquella vez, te herí- el chico rodo los ojos- ¡por eso te fuiste una semana por eso!- me acerque tomándolo por los hombros estrellándolo inconscientemente contra la pared- ¡deja de reír y habla que estoy perdiendo la paciencia!
- Y ¿qué pasa si la pierdes? ¿me apuntaras con tu pistola?
- Eres mi prometido- le susurre
- Lo hiciste una vez
- No sabias quien eras
- No hace falta el ver en tu mirada que me odias- apreté sus hombros
- Porque no dijiste nada
- Porque tu no dijiste nada…- lo mire extrañado- el bar… ¿creías que me iba a creer ese cuento? – Tao estaba molesto…muy molesto.- ¡ME CREES IDIOTA!- me grito- ¡¿ME VES LA CARA DE IMBECIL QUE PUEDES CALLARME CON REGALOS, SALIDAS A CENAR O ESTANDO CONMIGO TODA LA NOCHE?!- me empujo dejándome aturdido – ¡CREES QUE SOY DE ESOS! ¡DIME FAN DIME!
- Tu…
- ¡LO SABIA , SI SABIA QUE TRABAJABAS EN UNA MALDITA EMPRESA DE ESAS, ME METI PORQUE QUERIA DETENERTE O BUSCAR EL ATRACTIVO DE LO QUE HACIAS PERO NO TE ENCONTRABA Y TERMINE TRABAJANDO EN UNA POR OBLIGACION!- sus gritos hacían que las venas en su cuello saltaran, tenia los puños apretados
- Si sabias que estaba en esos trabajos ¿porque me seguiste? ¿Porque solo no hablaste de eso?- mi voz salió tosca provocando que Tao me mirara con mas frialdad
- Te conozco lo suficiente para saber que no me dirías nada y negarías todo por mi supuesta seguridad
- ¡ERES LO QUE MAS QUIERO ME PREOCUPO POR TI!
- ¡DESAPARECIAS POR NOCHES Y HASTA DIAS COMO CREIAS QUE ME SENTIA YO!- el pecho de Tao subía y bajaba desesperado por un intento de buscar aire, el aire que no existía a su alrededor, el aire que se había ido dejándolo solo, como yo lo había dejado- ¡TE NECESITABA Y NO ESTABAS! ¡PODIAS CONFORMARTE CON UN MALDITO EMPLEO DE JEFE EN LA EMPRESA DE TU MADRE PERO TENIAS QUE TOMAR LO MAS ARRIESGADO YI FAN! ¡NADIE TE OBLIGO TU QUISISTE! – se sostuvo el pecho – ¡PASABA LAS NOCHES PENSANDO QUE TENIAS A ALGUIEN MAS QUE NO ERA LO SUFICIENTE PARA TI POR ESO ME ENTREGABA SIN DECIR NADA!
- Ha… que…
- ¡ESTABA CONTIGO A PESAR DE QUE ESTABA AGOTADO Y NO QUERIA, PERO SOLO LO HACIA PORQUE QUERIA VERTE FELIZ! PORQUE PENSE QUE TE PERDIA E INTENTABA DESESPERADO TRAERTE DE NUEVO- sus ojos se llenaron de lagrimas – pensé que te alejabas y no ibas a volver por mi Yi Fan- me sentía adolorido, entonces Tao entro en ese mundo por mí, mi Tao arriesgándose solo por traerme de nuevo a sus brazos, era un estúpido, un estúpido …
- Tao…- me acerque para tocarlo pero me palmeo la mano lejos de su cuerpo con rabia mientras pasaba su mano detrás de su cintura- Entonces…. ¿Quién eres realmente? ¿Has estado engañándome todo este tiempo?
- Soy el mismo de siempre
- No sé si creerte ¿Kris o Yi Fan? Con quien te identifico ahora - acerque mi mano para tocarlo – aclara quien eres realmente y que hiciste con mi Yi fan…- susurro apuntándome con su arma…
- Jugar con armas es peligroso
- Muéstrame que tan peligroso es … - su mano no temblaba la sostenía como todo un profesional, tome el arma apuntando a mi cabeza
- Coma- apunte el arma en mi corazón- muerte segura- a mi estomago- perforarme un órgano, desangramiento- se quedo mirándome a los ojos, lo amaba no quería alejarlo me deje llevar por el maldito deseo de hacer algo peligroso, me interne en ese mundo sin medir consecuencias sin pensar en que alguien me esperaba en casa con una argolla de matrimonio guindándole en el cuello a punto de estar en su dedo. – entonces a donde dispararas- apretó el arma con fuerza sus nudillos se volvieron blancos- ¿acabaras conmigo? ¿Me odiaras por siempre?
- Yo no soy un asesino- sonreí ante sus palabras
- Lo eres, igual que yo… dos almas en el mismo camino Tao- susurre mirándole dolido las lagrimas se deslizaban en sus mejillas tostadas, quería rodearlo y jurarle que no lo dejaría de nuevo, el arma cayó al suelo mientras Tao se desplomaba
- Eres lo único que tenia, sabes que mis padres no están con vida, perderte seria retomar lo que ocurrió con ellos, no soy fuerte Kris…- mi corazón se encogió- no soy quien quiero ser…- alce su cabeza entre mis manos limpiando sus lagrimas me acerque a su rostro, quería demostrarle que lo amaba, que daría todo por él y para él, me acerque para besarlo pero alejo su rostro – no seré fácil hoy…- sentencio
- Entonces serás difícil- me miro con rabia
- No seas suave – lo mire extrañado – no quiero suavidad hoy, me desquitare y querrás no haber escogido ese camino- sonreí con sorna
- Entonces ¿estoy perdonado?
- No…- se alzo y me tomo de la corbata que tenia arrastrándome con fuerza al cuarto me tiro en la cama y se poso sobre mí con rabia arranco mi ropa me quito la corbata amarrándola en mis ojos
- Ta…- comenzó a morder mi cuello con fuerza mientras gritaba de dolor- ¡AH ESPERA!- bajo mordiendo mi pezón arañándolo y enterrando sus dientes como si no fuese el dolor suficiente- ¡AH TAO!- araño con fuerza mi abdomen cuando sus manos desataron mi pantalón sentí el ardor en mi piel, me mordí los labios me lo merezco esto y mucho mas… desquítate mi pequeño, juega como quieras- comenzó a masturbar con su boca arañe las sabanas la negrura de la corbata me enfurecía quería verlo, ver su sudor recorrer su cuerpo, ver su perfecta musculatura, sus mejillas sonrosadas y su cabello húmedo
- Déjame verte
- No…- gemí descontrolado cuando aumento la embestida de sus labios me mordió un poco dejándome gritar, apretó con fuerza haciendo todo con brutalidad
- Me voy…a- al decir eso me libere con un suspiro amplio Tao no me dejo tomar aire se poso sobre mi devorando mis labios, acaricie su espalda
- No me toques- sentencio con frialdad apreté mis puños, era una tortura necesitaba sentir su tersa piel apretarlo y agarrar con fuerza sus caderas, besarlo acariciando su cabello
- No hagas esto Tao…
- No me toques- repitió la sangre broto de mi labio por su mordida- arrepiéntete Yi fan y ruega por mi perdón- entonces escuche como el susurrar de sus prendas caían apartándose de su cuerpo quería ser yo quien remplazara sus manos, la ropa sonaba de cierta manera delirante volviéndome loco, pronto quedamos sin nada, Tao sobre mi se movió dejando mi miembro adolorido me mordí los labios me tomaba llevándome a su entrada pero sin dejarme continuar, rugí de dolor, quería tenerlo ya estaba impaciente
- ¡TAO! – grite exasperado, lamio mi cuello y luego mi abdomen
- Que pasa
- ¡JODER HAZLO DE UNA BUENA VEZ!- pero se negó acaricio mi miembro y al punto de llegarme se detenía dejándome más adolorido, se paso por mi oído, sus caricias eran seductoras y pasionales quería devorarlo pero no podía…
- Solo debes decir algo- gemí de frustración
- Que…que es…
- Pide perdón y di que dejaras el trabajo- se refregó de nuevo mientras el dolor y el placer aumentaba
- Lo… siento me retirare…
- No te escucho – gimió Tao en mi oído haciendo que me colocara mas erecto, más doloroso
- Perdona no quería dejarte solo…- mi voz salió como un quejido- Tao atiéndeme… no puedo me duele- Tao se burlo por lo bajo, me quito la corbata dejando mi vista nublada mareándome pero no pude parpadear bien cuando ya estaba amarrado a la cama solo de manos mirando a Tao sentado frente a mi
- Acepto tus disculpas pero quiero seguir viéndote sufrir- me mordí los labios impacientes
- Que quieres, ya es suficiente me estas matando
- No Wu Yi Fan yo no he acabado- se acomodo un poco mordiéndose los labios mientras inclinaba la cabeza hacia atrás dejando ver su piel perlada por el sudor brillando bajo la luz de la luna que decoraba su cuerpo de manera infernal y exquisita, sentí celos de ese brillo que lo acariciaba y de las gotas que se deslizaban por su pecho y su frente, me lamí los labios extasiado, entonces mi vista se nublo cuando llevo la mano a su miembro y comenzó a atenderse, su cuerpo tembló y los músculos de sus brazos sobresalieron me quede boquiabierto apreciando la velocidad de su mano mientras su cuerpo se arqueaba de manera exquisita formando unas ondas sensuales, abrió sus labios rojos e hinchados y comenzó a gritar y gemir
- ¡Hmm KRIS!- gimió con fuerza, utilizando mi apodo el cual se había enterado hace poco, me mordí los labios con fuerza apretando mis puños jalando inconscientemente dándome cuenta de mi estado, Joder… esto sería peor, los movimientos de Tao resultaron mas obscenos y sensuales tiraba de las sabanas mientras gemía con fuerza- ah ah así Kris… mas- susurraba con los ojos cerrados dejando que las sombras de sus pestañas danzaran sobre sus mejillas, me retorcí conteniendo mi dolor –¡ AH KRIS MAS!- grito, un gemido se escapo de mis labios mientras su otra mano comenzaba a prepararse, su rostro se torno algo dolido pero demasiado gustoso, preferiría que me amarraran debajo del mar o que me asesinaran de manera lenta a esto… no podía soportar semejante vista
- Por favor Tao…tao…amor- gemí al verlo internar mas sus dígitos llevándolos a su interior, eso debería hacerlo yo, se revolcó mientras comenzaba a gemir más fuerte y mover sus dedos se arrojo acostándose sobre la cama abriendo las piernas alzando sus caderas, mi erección dolía horrores peor que la vez anterior- ah ah ah si …si Kris si – gemía con fuerza Tao mientras se mordía los labios y se jalaba un poco los cabellos de manera delicada- continua… ah- la circulación de mis manos se detuvo por obligarme a tirar tantas veces, Tao me observo
- ¿Quieres estar aquí?- pregunto mientras sentía las lagrimas en los ojos, me dolía horriblemente y verlo de aquella manera me llenaba de frustración, se levanto hasta mi rostro – conmigo no juegues- susurro antes de besarme con furia le devolví el beso adorando su sensualidad todo de él… me desato y… todo paso demasiado rápido, Tao se burlo cuando lo tire sobre la cama y me pose sobre el entrando sin permiso, suspirando aliviado por la calidez, Tao gimoteo
- Dime cariño… que extrañabas esto- le susurre a su oído mientras movía mis caderas con desenfreno duro y fuerte, Tao gritaba y aruñaba mi espalda dejándome marcas lleno de placer, apreté sus piernas levantándolo un poco dejándolo apoyado de sus rodillas y manos alzando su cadera y siguiendo con lo nuestro bese su espalda mientras Tao bajaba la cabeza y gemía con fuerza llenando la habitación de sonidos obscenos por el choque de los cuerpos y los gemidos como acompañamiento, apreté su cadera y gemí en su oído haciendo que gruñera de satisfacción y sonriera, tome su cabello acariciándolo para luego jalarlo un poco junto a la embestida, Tao grito rogando por mas, obedecí sin decir nada, dando todo lo que mi cuerpo enérgico podía dar… todo mío, solo mío.
- Cada vez parece nuestra primera vez- susurro Tao acalorado, acaricie su cabello su cabeza reposaba en mi pecho
- ¿Por qué?
- Me siento nervioso y ansioso, siento miedo porque duela y por ser inexperto- sonreí mientras dibujaba corazones en su espalda
- Entonces espero que sea así toda la vida- Tao se acurruco mas a mi soltando un suspiro largo
- ¿No regresaras?- mire el techo
- Eres más importante que cualquier cosa no quiero perderte, no lo haré me encargare en otras cosas, pero tú también debes dejarlo- asintió contento besando mi pecho
- La boda es una semana – murmuro- quiero ir a Venecia ¿te parece?- alzo su cabeza, estaba rosado y parecía nervioso, sonreí
- Me gusta… es romántico- acaricie su mejilla y le di un beso mirando sus ojos profundos, como la primera vez que te conociera causas ese efecto en mi de ponerme nervioso y ansioso por tenerte a mi lado, Tao es el aire que necesitaban mis pulmones, aire que a veces es peligroso de respirar pero que a pesar de eso me llena de vida que me deja respirar atándome solo a algo, a él como único recurso
- Me gusta- lo observe confuso
- ¿El qué? – le pregunte
- Tu cabello negro, te ves más sensual puedo admitir que se me hizo difícil verte amarrado y no hacerte ciertas cosas- sonreí dándole la vuelta…
- Vamos panda tenemos tiempo de sobra apenas son las 5:00 am – Tao sonrió acariciando mi rostro – muéstrame eso que quieras hacerme- soltó una risita tierna colocándose rosado mientras me abrazaba acariciando la herida que me dejo en el brazo
- ¿Duele?
- No…
- Será como la cicatriz, recordare el día en que conocí a Kris, en que te recupere y en que nos amamos de nuevo siendo nosotros mismos, sin mascaras de por medio- lo apreté
Como si fueses la luz que me guía te necesito aquí
No importa si traes la enfermedad o el peligro contigo
Yo te curare y sanare para que vivas a mi lado, no necesitaras
Mascaras porque se quien se esconde tras de ti.
Y así como el peligro recorre nuestros días
Te perseguiré a ti, correrás porque temerás de mí,
Pero seguirás deseando que no me aleje de ti
Porque me amas… y no puedes vivir sin mí.
- No más mascaras…
- No mas mascaras- repitió Tao besándome
Somos dos almas guidas por el mismo camino Tao, dos almas conducidas al mismo infierno.