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Seigaku academy por La_Oscura_Reina_Angel

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Capítulo 7: Salida, encuentros y casualidades

 

Chotaro Otoori se quejó cuando chocó con alguien y los paquetes que llevaba en sus manos cayeron.

 

-¿Estas bien? -Chotaro levantó sus ojos marrones encontrándose frente a él, al alfa castaño de ojos negros de la academia Seigaku.

 

-Shishido-sama -lo reconoció aceptando la mano que este le daba para ayudarle a levantarse.

 

-¿Chotaro Otoori, verdad? -preguntó Shishido después de ayudarle a levantarse fingiendo desinterés por que en realidad tenía muy claro el nombre del chico que le había ganado a él y a Oishi. El peli plateado asintió con entusiasmo– ¿Sabes? Lo había notado en el entrenamiento antes, pero ahora me doy cuenta que me quedé corto… eres anormalmente alto para ser un omega -dijo Shishido espontáneamente.

 

Chotaro se sonrojó y bajó la cabeza avergonzado. Sabía que era anormalmente alto para ser un omega, era el más alto de su equipo y de su colegio, eso lo cohibía mucho, era de echo mucho más alto que muchos alfas.

 

-Eh, lo siento… eso fue brusco -le dijo Shishido dándose cuenta de su torpeza.

 

-No pasa nada, no dijo nada que no fuera cierto -dijo Chotaro en voz baja inclinándose para recoger las bolsas de la compra que se le habían caído, el alfa de inmediato se inclinó a ayudarlo con estas.

 

-Te queda bien -le dijo Shishido-. Tu altura me gusta, digo todo tú eres muy lindo -le dijo de forma brusca. Chotaro lo miró impresionado y con la boca abierta, nadie jamás le había dicho que era lindo, amable sí, ¿lindo? Sólo sus amigos omegas, pero nunca un alfa, la mayoría se asustaban cuando veían un omega que era más alto que ellos. No importaba cuanto Chotaro se esforzaba en ser un buen omega nadie quería a un omega que era más alto que un alfa- ¿Qué? -reclamó Shishido incomodo al ver la cara de asombro del alfa- No me dirás que es la primera vez que alguien te dice que eres lindo -dijo frunciendo en entrecejo-. Venga, que con ese lindo cabello y esos lindos ojos te lo han de decir todo el rato -le dijo con brusquedad Shishido, sintiéndose estúpido por la cantidad de veces que le estaba diciendo lindo, pero es que era la palabra que mejor lo describía. Al ver la cara del omega sonrojada entendió que sí era la primera vez que alguien se lo decía- ¿Vives rodeado de gente ciega? -reclamó- ¿Cómo nadie se va a dar cuenta de lo lindo que eres? -reclamó frunciendo el entrecejo enojado- Eres el omega más lindo que he visto nunca -aseguró molesto, aunque interiormente se sentía estúpido, existían mil sinónimos, pero era como si sólo pudiera decirle lindo al alto omega que tenía enfrente.

 

-Pero… ¿Pero mi altura no te asusta? -preguntó Chotaro tímidamente.

 

-¿Por qué habría de asustarme que seas más alto que yo? -preguntó Shishido mirándolo sin entender por qué de la pregunta. Chotaro sonrió con emoción y le hiso una reverencia al alfa tomando las bolsas suyas que este aun sostenía.

 

-Arigato, sempai –susurró con una sonrisa tonta.

 

-Deja eso -retuvo Shishido con cara malhumorada las bolsas-, yo las llevo -aseguró-. Seré más bajito que tú, pero sigo siendo un alfa -dijo de pronto con una sonrisa y Chotaro se asombró de que este supiera sonreír, pero antes de darse cuenta los músculos de su cara se habían movido solos, devolviéndole la sonrisa a Shishido y asintiendo.

 

-Volvía a mi casa -contó Chotaro.

 

-Te acompaño entonces, ahora soy tu compañero de equipo después de todo -le dijo.

 

-Hai, sempai.

 

-Shishido -le corrigió.

 

-¿Qué? -preguntó Chotaro confundido.

 

-Shishido, puedes llamarme Shishido -le repitió. Los ojitos de Chotaro brillaron y asintió.

 

-Hai, Shishido-san -asintió el peli plateado.

 

***


Yagyuu Hiroshi fulminó con su mirada al peli plata de cabello largo y ojos azules que estaba a su lado. Masaharu Niou ni siquiera tuvo la decencia de parecer avergonzado mientras esperaban sentados en silencio a sus padres, en dos asientos al fondo de la pared de la comisaria. Debido a su edad y a que uno de ellos era un omega no los habían metido en una celda… ni siquiera los había esposados, pero ahí estaban, esperando a sus padres y todo por la culpa de ese omega raro de los cojones.

 

Todo había empezado cuando Yagyuu estaba saliendo del Starbuck luego de haberse tomado un café, al salir había encontrado a Niou peleando con dos betas, su tonto instinto alfa había salido a defender a su futuro compañero de equipo y él, el serio y caballeroso Hiroshi que jamás se metía en un lio, había acabado envuelto en una pelea a puñetazos, espalda a espalda con Niou, defendiéndose de cuatro betas, pues dos más habían salido de cristo sabía dónde. Él y Masaharu se las habían arreglado para ganar, pero había llegado la policía y los habían detenido a los 6 por alteración a la paz. De hecho Yagyuu estaba bastante impresionado de que no lo hubiesen metido a una celda, se entendía de Niou porque era un omega, pero a él nada le salvaba el culo de una, simplemente Niou se había agarrado a su mano cuando entraron en la patrulla y no la había soltado en todo el rato, y lo policías los habían dejado en paz junto al chico que mascaba goma tranquilamente.

 

-Mis padres me van a matar -gruñó Yagyuu en voz baja, tratando de zafar su mano de la del extraño omega sin ningún éxito-. Esto quedará en mi expediente.

 

-No quedará en tu expediente, relájate -le aseguró tranquilamente el otro chico.

 

-Claro que sí.

 

-No, no lo hará -sonrió Masaharu lo más tranquilamente de mundo. Yagyuu miró al omega como si este fuera estúpido, cuando el comisario, el que estaba a cargo de la comisaria se acercó a ellos, Yagyu tragó saliva, pero Masaharu sólo se levantó de un salto y se arrojó sobre el hombre- ¡Hola, papá! -sonrió.

 

-¿Masa-chan te estas metiendo de nuevo en líos? -le increpó el serio hombre acariciando el cabello de su hijo y revisándolo en buscas de golpes- ¿Te hicieron daño? -preguntó.

 

-Para nada, eran cuatro contra mí, pero Yagyuu-kun llegó y me salvó -señaló al Alfa-. Nos conocimos en el partido de Alfas vs Omega que tuvimos los titulares de Rikkaidai y los de Seigaku antes de fusionarnos -le contó a su padre.

 

-Ah, sí, ya me habías contado -asintió acercándose al alfa que se levantó tensamente, esperando… no sabía que esperaba en realidad-. Gracias por salvar a mi hijo, Masa es mi único hijo y si le pasara algo no sé qué haría -le tendió la mano a un impresionado Yagyuu que sólo pudo parpadear y estrecharle su mano-. Será mejor que vayan a casa cada uno, está haciéndose tarde -les indicó- y no se metan en más líos, que sólo me dan papeleo que hacer –gruñó.

 

-Te veo en la noche, papá -se despidió Niou tomando la mano de Yagyuu y arrastrándolo fuera de la comisaria-. Ves, te dije que no quedaría en tu expediente.

 

-Pero… pero ¿Cómo es posible? -preguntó confundido el de lentes y cabellos violetas.

 

-¿Cómo es posible qué? ¿Qué sea hijo del comisario? -rompió a reír- Pues veras, todo empieza cuando mi papá, conoció a mi mamá y entonces…

 

-¡Oh, cállate! -le fulminó Yagyu con la mirada al ver que el otro se estaba burlando de él, sólo consiguiendo hacer reír a Niou mientras caminaban por la calle.

 

***

Oshitari Yuushi maldijo su mala suerte, en silencio, mientras estaba sentado esperando que el show del circo al que sus padres le hubieran hecho llevar a su hermana pequeña comenzara. Las luces se apagaron y Yuushi sonrió, el espectáculo estaba a punto de comenzar, mientras más rápido comenzara y se acabara más rápido podría devolver a la pequeña peste a sus padres y recuperar su preciado tiempo libre.

 

El espectáculo, aunque no quisiera admitirlo, fue divertido, sobre todo la parte de los trapecistas, esa parte fue hermosa.

 

-Venga, volvamos a casa -le indicó a su hermanita levantándose y dándole su mano.

 

-¡Quiero conocer a trapecista-sama! -exigió la mocosa que sólo tenía seis años.

 

-Venga, Saku, no des la lata y volvamos a casa -le pidió Yuushi calmada y seriamente.

 

-¡Que quiero conocer a trapecista –sama! -gritó la niña y luego de hacer una pataleta Yuushi Oshitari se vio caminando con su hermanita de la mano a ver si les dejaban conocer a la linda trapecista que había impresionado a la chiquilla. Para su sorpresa cuando preguntó le dijeron que no había problemas y su hermanita saltó de entusiasmo mientras los guiaban hacia los carromatos.

 

-Nara -llamaron a la puerta de uno de los carromatos que servían de camerino-, ¿Tienes tiempo para conocer a una niña? -preguntó el hombre desde el otro lado de la puerta, con Yuushi y Sakura- Es tu fan.

 

Sakura estaba que casi se salía de su piel, mientras Yuushi esperaba tranquilamente, sólo un poco más y sería libre.

La puerta se abrió y la hermosa trapecista de cabellos violeta casi negro y largos se asomo en ella.

 

-Hola -saludó al hombre y a los dos chicos con una sonrisa amable.

 

-Nara, estos dos chicos te quieren conocer -le informó el amable hombre.

 

-Muchas gracias por recibirnos, señora -le dijo Yuushi muy bien educado-. Mi hermana Sakura quedó impresionada con usted y quería conocerle -le informó poniendo una mano sobre la cabecita de su hermana que miraba a la trapecista con estrellitas saliendo de sus ojos.

 

-Hola, bonita -le saludó maternalmente Nara a la chica-. Pasen -sonrió abriendo la puerta para dejarlos entrar, Sakura pasó primero con la trapecista y Yuushi lo hiso al último mirando el pequeño camerino hasta que se topó con el chico conejo… digo, acróbata del partido alfas vs omega. Gakuto Mukahi.

 

-Mi hijo Gakuto -presentó Nara al chico que miraba a Oshitari con la boca abierta.

 

-Ya nos conocemos -dijo Yuushi recuperándose rápidamente. Nara los miró con curiosidad.

 

-¿De dónde? –preguntó amablemente.

 

-De Seigaku Academy -le respondió Gakuto al fin sacudiendo la cabeza.

 

-Oh, qué bien -sonrió Nara antes de volverse hacia Sakura para entablar una conversación con la entusiasta chiquilla.

 

-Gakuto, por que no vas y traes un par de refrescos para Sakura y su hermano -le pidió a su hijo que saltó al suelo pues estaba sentado sobre una mesa.

 

-Hai, mamá -dijo el chico.

 

-¿Lo podrías acompañar, Yuushi-san? -le preguntó la amable mujer.

 

-Claro -dijo después de mirar a su hermanita que estaba pegada como lapa a Nara. Gakuto y él salieron juntos del carromato hacia uno de los candyland del circo.

 

-Lamento lo de mi hermanita, es un poquito caprichuda. Es la única chica y para colmo omega de mi casa así que ya te lo podrás imaginar -comentó Yushi.

 

-Está bien, a mamá le encantan los niños y sólo me tiene a mí, por eso trabaja aquí -le dijo Gakuto encogiéndose de hombros.

 

-¿Vives aquí? -preguntó Yushi.

 

-Nop -negó Gakuto-, aunque casi, pasamos mucho tiempo aquí entre los ensayos de mamá y los show, pero tenemos un pequeño apartamento a unas cuadras de aquí, mamá quería que tuviéramos nuestro propio lugar cuando yo empecé a crecer -dijo tranquilamente.

 

-¿Y tu papá? -preguntó Yushi antes de darse cuenta.

 

-No tengo, nos abandonó -dijo Gakuto mirándolo a la defensiva, su mamá era genial y si decía algo indebido le rompería la cara al alfa.

 

-Pues tremendo tonto, él se lo pierde. Se nota que tu mamá es una buena mujer, y aunque tu eres un payaso… eres lindo -le dijo Yushi.

 

Gakuto miró al alfa parpadeando confuso, por un lado se sentía alagado y por el otro quería estrangular al alfa. Yuushi le miró y sonrió, y al final Gakuto le devolvió la sonrisa negando con la cabeza.

 

-Vaya, parece que somos tal para cual, deberíamos hacer un duo de payasos aquí ¿No crees? -le preguntó Gakuto haciendo reír a Yuushi, algo que pocos conseguían.

 

-Nada mejor que un omega con sentido del humor -le guiñó un ojo el chico de cabellos azules.

 

-Nada mejor que un alfa con sentido del humor –asintió Gakuto y ambos se sintieron un poco más cómodos el uno con el otro, mientras iban por los refrescos.

 

***

Momoshiro acaba de llegar a la pista para entrenar cuando vio a un chico bastante rápido corriendo en ella.

 

-uhmm… No está nada mal –aprobó cuando el chico llegó a la meta y se detuvo a tomar agua fue entonces que lo reconoció- Oh, Kamio-kun ¿No? -preguntó acercándose con una sonrisa. El pelirrojo levantó la cabeza mirando al alfa.

 

-Ahhh, el chico al que Ryoma le dio una paliza -comentó Kamio. A Momoshiro le salió una venita.

 

-Momoshiro Takeshi, puedes llamarme Momo -le respondió con los dientes apretados. Kamio ladeó la cabeza mirándolo con curiosidad.

 

-No te sientas mal por haber perdido contra Ryoma, él y Kintaro son los genios de nuestro equipo -le consoló-, la mitad de nosotros a perdido contra ellos, la otra  mitad aun no los ha enfrentado, sólo Yukimura los a aplastado a los dos -le animó.

 

-Eres pésimo consolando -rompió a reír Momoshiro. Kamio Akira le sonrió de vuelta.

 

-Eso de que todos los omegas tenemos talento innato para consolar… es falso -le dijo como si le contara un secreto.

 

-Ya veo -asintió Momo divertido-. Nunca te había visto aquí -le comentó, él siempre usaba la misma pista para entrenar.

 

-Soy nuevo en el barrio -le respondió mientras Momoshiro empezaba a calentar-, mis padres se acaban de mudar a una casa cerca aquí y es la primera vez que uso esta pista ¿Tu vienes mucho? -le preguntó.

 

-Sip, esa es mi casa -le señaló una de las casas que se podía ver desde la pista-. Así que siempre vengo aquí a correr un poco y entrenar -le respondió.

 

-Vaya, pues casi somos vecinos, nosotros nos mudamos ahí -le señaló Kamio una casa al otro extremo.

 

-Mismo colegio, mismo vecindario… una indirecta del cielo -bromeo Momoshiro. Kamio sonrió.

 

-Ya te gustaría tener tanta suerte -rio- ¿Corremos un rato juntos? -le preguntó el pelirrojo.

 

-No estaría mal -aceptó el pelinegro asintiendo. Estuvieron un rato corriendo juntos aunque más bien iban trotando sin prisa mientras platicaban, Kamio le contaba del equipo Omega y Momoshiro le contaba del equipo Alfa. Pronto comenzó a anochecer y la hora de la cena se acercaba para ambos chicos.

 

-Ya tengo que irme -dijo Kamio deteniéndose y tomando su toalla para limpiarse el sudor.

 

-Eh…  ¿Te parece si nos vemos aquí de nuevo para entrenar mañana? -preguntó Momoshiro nervioso, tratando de aparentar calma… sin ningún éxito.

 

Kamio sonrió, se le hacía tierno el gran alfa.

 

-Vale, es una cita, te veo aquí a las tres y nos echamos una carrera -se despidió con la mano encaminándose a su casa.

 

-¿Cita? -preguntó Momoshiro desconcertado, parado en el mismo sitio con cara de tonto, hasta que al fin las palabras procesaron en su celebro y se sonrojó-. Baka -masculló dirigiéndose a su casa.

 

Continuará…

 

 

 

Notas finales:

Bueno aqui un nuevo capitulo espero lo disfruten ^^ En el proximo toca el turno a: KenyaxHikaru, TachibanaxChitosexIbu y KunimitsuxFujixRyoma ^^

 


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