ChanYeol estiró sus largas piernas y se acomodó suavemente en el incómodo asiento del aeropuerto. Dirigió su mirada al frente, entreteniéndose al ver la gente pasar con equipaje de distinto tamaño. Sin poder evitarlo, sus párpados se hicieron un poco pesados; entonces, acomodó ligeramente su cabeza sobre la que se hallaba en su hombro.
Enterró su nariz en el sedoso cabello del mayor y aspiró el delicioso aroma a almendras. ChanYeol pestañeó intentando alejar el sueño de él y poder permanecer consciente. A su lado, BaekHyun había cedido ante Morfeo hacía buen rato, pero a ChanYeol no le importaba. El menor apretó sus ojos con fuerza y levantó su cabeza para apreciar las facciones de BaekHyun con detenimiento.
Ama ver a BaekHyun dormir. De hecho, ChanYeol ama cualquier cosa que BaekHyun hiciera, ChanYeol ama cualquier cosa que tenga que ver con BaekHyun y finalmente, ama a BaekHyun, principalmente. Una sonrisa boba adorno sus labios, mientras recorría con la mirada las finas facciones del mayor.
-Vuelo 627 con destino a Estados Unidos, Filadelfia; por favor, regístrense en el puerto de abordaje 5.-Se escuchó por el altoparlante de la terminal del aeropuerto. ChanYeol suspiró y se dispuso a despertar a Baek.
-Ya podemos abordar, BaekHyunnie.- Susurró el menor dándole pequeñas caricias al mayor en las mejillas. Entre sueños, Baek se revolvió y apretó la mano de ChanYeol con la cual tenía sus dedos entrelazados. Chan le dio un besito en la frente a BaekHyun al mismo tiempo que terminaba de despertar.-Ya podemos abordar.-Repitió cuándo BaekHyun se reincorporó en el asiento.
-¿En serio?-Cuestionó, su voz sonaba adormecida aún.- Muero por dormir.- ChanYeol sólo asintió, soltando una risa. Una risa que le refresco el alma a BaekHyun. El mayor rió con él y levantó la mirada hacia el frente; de soslayo observó las dos enormes maletas de equipaje que le pertenecían.
ChanYeol captó la dirección de la mirada de BaekHyun, y sintió el impulso de apretarle la mano para alejar esos pensamientos de Baek, y que sólo pensara en él. Pero eso era egoísta y lo único que más deseaba en el mundo era que BaekHyun fuera feliz.
-Aún puedes arrepentirte.- Soltó rápidamente mirando hacia el frente y conteniendo las ganas de llorar.-Aún puedes quedarte y yo lo entenderé. Este es tu hogar después de todo.-
-ChanYeol.-Llamó serio el mayor cortándole. ChanYeol giró su rostro e inmediatamente Baek le tomó una mejilla con su mano.- Mi hogar será dónde tú estés. Hace años fui tonto y un completo imbécil por dejarte ir sin decirte cómo me sentía. No quiero una vida sin ti, porque una vida sin ti, no tiene razón.-Recitó el mayor observando cómo los ojos de ChanYeol se aguaban, sin darse cuenta que estaba en el mismo estado.
Hace años, al graduarse del instituto, ChanYeol decidió convertirse en médico. Le dieron una beca para ir al extranjero a pesar de poder pagar la universidad. El menor aceptó la beca y empezó a planear su viaje al exterior. ChanYeol pensó que sí BaekHyun llegará a la terminal el día que abordaría el avión y lo detuviera, él se quedaría. Por él.
Pero no sucedió.
BaekHyun nunca le pidió que se quedara y ChanYeol se fue. BaekHyun sabía lo mucho que le gustaba ChanYeol en ese entonces, pero no tenía el valor de confesarse y verlo partir al extranjero. Entonces, BaekHyun guardó sus sentimientos y decidió esperar por ChanYeol; prometiéndose que cuando concluyera sus estudios y el menor regresara, le diría lo mucho que lo quería.
Pero no todo fue miel sobre hojuelas.
El primer mes sin ChanYeol, BaekHyun andaba en el limbo. Antes disfrutaba salir con sus amigos, con ChanYeol; pero cada día, inconscientemente rechazaba las invitaciones, las rechazaba porque sabía que ChanYeol no estaría. No estaría ChanYeol susurrándole al oído, no estaría ChanYeol tomándolo de la cintura disimuladamente, no estaría el ChanYeol que le gustaba mucho. Él quería a morir a sus amigos y disfrutaba con ellos, pero la ausencia de ChanYeol era abrumante.
El séptimo mes sin ChanYeol, BaekHyun se dio cuenta que lo quería. Había retomado el salir con sus amigos, no tan asiduamente como antes pero más desde que ChanYeol se había ido; se había dado cuenta que estar solo le daba mucho tiempo para pensar y para hundirse en una miseria invisible pero patente. Se dio cuenta que quería a ChanYeol un día que estaban en el cine y, a su lado pudo ver a Kris besando a Tao, y por un momento él se imaginó a ChanYeol y a él en los lugares de sus amigos.
Observó con una envidia espantosa como concluían el beso y se deslizaban ligeramente en sus asientos. Tao acercó su rostro a Kris, el cual lo recibió tomándole una mejilla con su mano y uniendo sus labios en un beso profundo. BaekHyun dirigió su mirada al frente, y la imagen de ChanYeol y suya compartiendo un beso le llenó el corazón.
Al año y dos meses sin ChanYeol, BaekHyun se dio cuenta que estaba enamorado de él. BaekHyun se dio cuenta que estaba profunda y perdidamente enamorado de su amigo cuando TaeMin Hyung se le confesó y le pidió salir con él. Baek no era una persona grosera, pero en el momento que TaeMin intentó besarlo, no pudo evitar responder de manera algo brusca, apartándolo de él y diciendo una y otra vez que lo sentía, pero que estaba enamorado de alguien más.
No lo pensó, sólo lo dijo. Y cuando recapacitó en sus palabras, solo en su habitación, el rostro sonriente de ChanYeol aparecía en su mente. BaekHyun sólo se había imaginado estar con ChanYeol, no podía concebir la idea de imaginarse con otro hombre que no fuera él. A Baek se le encogió un poco el corazón, y desde ese día empezó a extrañar más a ChanYeol.
Un año, nueve meses, diecisiete días, dieciocho horas, cinco minutos y unos cuantos segundos después de la partida de ChanYeol a América, BaekHyun se dio cuenta que ama a ChanYeol. Fue un poco inesperado, pero a Baek no le desagrado para nada el descubrimiento. Fue una tarde, en la cual recogía su habitación y mirando las fotos de sus amigos lo supo. ChanYeol aparecía en casi todas e incluso había fotos sólo de él. Lo supo con sólo mirar la sonrisa de ChanYeol.
Ese día, Byun BaekHyun lloró hasta dormirse.
Al día siguiente, sintió que algo apretaba su pecho. La necesidad por ChanYeol comenzaba a tomar forma. Y al día siguiente fue igual, y el siguiente también. Al quinto día, tomó su celular y marcó al de ChanYeol. No solía llamarlo por su cuenta porque el menor podía estar ocupado, prefería que él le llamara cuando tuviera un momento libre. Pero no lo resistió. Tenía que escuchar la voz de ChanYeol o enloquecería.
Cuando el menor contestó, hablaron un rato, rieron y BaekHyun sintió que su alma se relajaba. Pero cuando cortaron la llamada, Baek se dio cuenta de que necesitaba más que una simple llamada. Necesitaba a ChanYeol devuelta con él. Pero no tenía ni la más remota idea de cómo hacerlo.
Los días pasaban y el joven Byun se devanaba el cerebro pensando, para al final no obtener ninguna idea y comenzar a deprimirse. Entonces, Baek comenzó a llorar silenciosamente por las esquinas. Estaba taciturno, desolado y triste. BaekHyun sólo bajaba sus defensas con Tao y KyungSoo. KyungSoo lo consolaba diciendo que todo estaría bien; pero él no sabía.
Él no podía tener idea cómo se sentía estar sin la persona que amas, porque cuando KyungSoo se fuera al apartamento que compartía con Kai, y en sus brazos y entre besos, olvidaría las cosas feas de la vida. BaekHyun no tenía eso. Sin embargo, Tao adoptó desde el inicio una postura excepcionalmente distinta a la de KyungSoo.
Tao solía reclamarle a BaekHyun. Solía reclamarle que llorando no haría que ChanYeol regresara, que saltándose comidas no haría que ChanYeol tomara un avión de regreso a Corea y olvidara todo por lo que había luchado hasta ahora. Qué debió haber detenido a ChanYeol cuando pudo.
BaekHyun se llenaba de coraje al oír a Tao, porque sabía que tenía razón. Tenía tanta razón que dolía. Pero un día una idea vino a él. La única solución. Viajaría a Estados Unidos para confesarse a ChanYeol. Al día siguiente, Baek fue al banco y abrió una cuenta de ahorro.
El matrimonio Byun era acomodado, le pagaban la universidad a su hijo y le daban dinero para sus necesidades. Pero para ir a América, BaekHyun necesitaba más dinero. A escondidas consiguió un trabajo en una tienda de regalos, y gracias a su atractivo las ganancias de aquel lugar habían aumentado.
El tiempo siguió su curso, y, con el dinero que le habían dado sus padres y familiares en su graduación de la universidad, casi se veía en el avión rumbo a América.
Pero la sorpresa fue en realidad, encontrarse a ChanYeol en el auditorio, ataviado con un traje negro y camisa blanca, que lo hacían ver increíblemente guapo. BaekHyun no lo resistió, corrió hacia él con lágrimas en los ojos y lo abrazo; ChanYeol le correspondió inmediatamente, apretándolo contra su cuerpo, buscando combinarse con él.
El día siguiente a su graduación, ChanYeol lo invitó a un coqueto restaurante de la zona. BaekHyun casi se muere de la emoción, e inmediatamente se convirtió en un manojo de nervios al darse cuenta que por estar ahorrando para ir a buscar a ChanYeol, tenía varias piezas de ropa muy gastadas. Sus papás se lo habían dicho y sus amigos también, pero él no había visto nada malo, hasta que quiso de verdad lucir perfecto. Perfecto para ChanYeol.
A su rescate salió KyungSoo, prestándole unas prendas que recién había adquirido. Apenado, BaekHyun las tomó y le prometió que se las pagaría una vez fuera al banco y retirara dinero. KyungSoo frunció el ceño y le dijo que no le diera importancia, mientras que Tao le dio un zape en la cabeza diciéndole que una amistad era mucho más valiosa que una camisa y un par de pantalones, KyungSoo asintió con una sonrisa maternal. Baek se sintió extasiado y los abrazó fuertemente.
BaekHyun jamás olvidará ese día. Ese día se dio cuenta que vivía por ChanYeol. Al salir del restaurante, fueron a un parque y jugaron como niños. En un punto, ChanYeol empezó a perseguir a Baek y al atraparlo se tropezó y cayeron ambos a la tierra. BaekHyun encima de ChanYeol. Y el mayor no lo resistió, acercó su boca a la de ChanYeol y lo besó.
El menor lo sostuvo desesperadamente de cualquier parte de su cuerpo, buscando asegurarse que todo eso estaba pasando, que no era otro sueño, que BaekHyun lo estaba besando porque lo ama. Y Baek lo besó con tal devoción que a ChanYeol no le quedaron dudas de que todo era real y que en cada movimiento de los labios del mayor, estaba impreso su amor.
A las ocho de la mañana con veintiséis minutos, al día siguiente, BaekHyun se despertó desnudo en la cama del hotel donde el menor se hospedaba. ChanYeol, a su lado era magnifico. Su desnudez era escultural y Baek no pudo creer que ayer en la noche hizo el amor con ese hombre. Suavemente el mayor se subió sobre un desprevenido ChanYeol, y le dio besos mariposa hasta despertarlo.
Tres semanas después de la llegada de ChanYeol, este le dijo a BaekHyun que luego de terminar la licenciatura en medicina, le habían ofrecido quedarse y tomar la especialización para convertirse en cirujano. ChanYeol lo besó, sin dejarlo hablar y le dijo que rechazaría la oferta para estudiar en Corea y poder permanecer a su lado. BaekHyun sólo negó y le dijo que lo llevara con él.
Baek sabía que ChanYeol se quedaba en un apartamento cerca de la universidad, y él tenía la fe de que podrían arreglarse los dos ahí. Además, BaekHyun tenía título de traductor, incluso sería fácil conseguir empleo. ChanYeol puso muchos peros, no quería que Baek dejara su hogar; pero aun así no podía ocultar la sonrisa brillante que se había formado en sus labios.
Entonces ambos decidieron irse juntos una vez las vacaciones del menor concluyeran y tuviera que volver a la universidad. También aprovecharon el tiempo para tener al día los papeles de BaekHyun y que estuviera legalmente en Estados Unidos. Cuando los amigos de ambos se enteraron, los felicitaron y quedaron en hacerles una fiesta de despedida, pero por pedido de BaekHyun no los acompañarían al aeropuerto.
Una semana faltaba para que ambos viajaran a Estados Unidos cuando fueron al aeropuerto a comprar los billetes. BaekHyun siempre recordará ese día. Nunca olvidará que de regreso, pasaron por el parque dónde se besaron por primera vez. Una vez ahí, se sentaron en los columpios, hablando tonterías, hasta que sucedió. ChanYeol detuvo su columpio y Baek se detuvo con él, entonces, ChanYeol sacó una cajita del interior de su chaqueta y la abrió.
BaekHyun no necesitó que el menor lo dijera. “Cásate conmigo”, se leía en sus ojos, ilusionados, esperanzados; Baek no pensó, porque semanas antes había empezado a soñar con ChanYeol y él, unidos de por vida, viviendo en una casa modesta y con un jardín sencillo. BaekHyun siempre recordará ese día, porque representaba el verdadero inicio de su eterna historia con ChanYeol.
Y ahí estaban. A punto de abordar una nueva vida. Una vida juntos.
Con las manos aún en el rostro de ChanYeol, lo atrajo para besarlo con suavidad. Calmándole, relajándole; una lágrima se deslizo por una mejilla de ChanYeol, que fue recibida por los dedos del mayor. Cuando terminó el beso, BaekHyun abrazó con fuerza a ChanYeol.
-No llores, por favor.-Suplicó contra su oreja.-Quiero que sonrías como siempre lo haces.-ChanYeol sonrió asintiendo, para tomar la mano de Baek y besar su dedo anular izquierdo dónde brillaba alegre la alianza que él mismo le había entregado.- Yo estoy aquí porque quiero estar contigo. Hace años, casi te perdí y lo pasé horrible; no estoy dispuesto a cometer el mismo error dos veces. No estoy dispuesto a que te vayas solo esta vez. Quiero estar contigo el resto de mi vida.-Lo tomó del rostro, mirándolo a los ojos.-Te amo Park ChanYeol, eres lo más importante en mi vida.-Un par de lágrimas más se deslizaron y Baek las besó diligente.
Los sentimientos jugaron dentro del pecho del menor, el cual sin resistirlo, besó profundamente a BaekHyun, tomándolo de la cintura, acercándolo a él. Ante el ímpetu del beso de Chan, Baek le pasó los brazos por el cuello; no le importó que el beso subiera a medida de tono, no le importó porque era ChanYeol. Siempre sintió envidia de Tao y KyungSoo que cuando salían con Kris y Kai, podían tomarse de las manos, abrazarse e incluso besarse. Él no lo podía hacer porque Chan no estaba con él. Ahora, planeaba recuperar todo el tiempo que perdieron. BaekHyun quería hacer de todo con ChanYeol.
-Segunda llamada para el vuelo 627 con destino a Estados Unidos, Filadelfia; por favor, regístrense en el puerto de abordaje 5.- La voz del altoparlante, rompió la atmósfera romántica que tenía la pareja. Ambos se separaron un poco y pegaron sus frentes. Se miraron directamente a los ojos, perdiéndose en la felicidad dibujada con un brillo resplandeciente en ellos.
-Vamos.-Dijo Baek, luego de darle un pequeño beso en los labios a ChanYeol.-Es la segunda llamada; no podemos perder los billetes.-Declaró poniéndose en pie, tomando de la mano al menor, incitándolo a levantarse. ChanYeol se puso en pie con una sonrisa tierna en los labios y se colgó la maleta de manigueta donde cargaba las cosas necesarias que había traído para su estadía en Seúl.
Entonces, Chan tomó con su mano libre, una de las maletas del mayor. Baek lo imitó. Al llegar a la puerta de embarque, luego de registrar el equipaje del mayor, al ser maletas grandes no podían llevarlas con ellos, una azafata revisó los billetes de ambos y les permitió seguir adelante.
BaekHyun ni siquiera miró atrás. No tenía necesidad. Lo único que necesitaba es a ChanYeol, y lo tenía tomado de la mano a su lado.
Después de todo, BaekHyun sólo tiene ojos para ChanYeol.