Prov. Ichiru
-Mira Zero-le dije mostrándole al gato justo cuando entraba a la casa-¿No es lindo? Acabo de comprarlo.
-En verdad nunca cambiarás...- me respondió sacudiendo mi cabello.
-¿Donde estuviste toda la mañana?
-¿Acaso no te lo dije?-preguntó sorprendido-Conseguí un trabajo de medio tiempo durante las vacaciones y empecé esta semana, pero pero en la mañana te vi tan cansado que preferí dejarte dormir tranquilo.
-Te oí antes de que te fueras y escuché que hablabas por teléfono con alguien, una chica para ser más exactos-en ese momento no había conseguido controlar mis celos y terminé haciendo lo que más temía.
-Era Yuuki, es amiga mía y estamos trabajando juntos; pensaba presentártela desde que llegaste pero salió y por eso no pudiste conocerla.
Evadí su mirada e intentaba ocultar el hecho de que no le creía porque sabía que si lo notaba comenzaría a hacerme preguntas que no podría contestar o haría alguna tontería.
-Ichiru-me dijo muy serio-Tengo algo que decirte, yo...
Sonó mi teléfono y le pedí a Zero que esperara a que atendiera y después hablaríamos de lo que quisiera.
-Ho... Hola Takuma ¿Cómo estás?-pregunté nervioso.
-Solo quería saber que tal vas con el gato.
-Pues seguí tus indicaciones pero aún no he podido escoger un nombre, es lo único que me falta por hacer.
-¿Y cómo que nombres se te han ocurrido? A lo mejor puedo ayudarte a elegir el mejor...
La conversación continuó así por casi una hora,, intentando descubrir como llamar al gato. No sé si estaba distraído por Takuma o simplemente por todo lo que había pasado antes pero no podía concentrarme, hablar con él era difícil; me daban muchos nervios y comenzaba a tartamudear y él solo me respondía
-Eres tan tierno Ichiru...
Finalmente nuestra llamada terminó y volví a donde mi hermano se encontraba.
-¿Quién era?-me preguntó.
-Era Takuma-sonreí y él me vio sin entender de que hablaba-El chico de la tienda de mascotas, es muy amble y se ofreció para ayudarme con cualquier duda que tuviera sobre como cuidar al gato. Él me convenció de traerlo, al parecer desde el principio notó que lo amaba...
Sin siquiera darme cuenta comencé a hablar sobre él, pero era solo porque en verdad sentía que se parecía mucho a Zero y quería encontrar alguna diferencia.
-Me alegra que este feliz-me dijo después de un rato.
-¿Qué era lo que querías decirme?-pregunté.
-Nada importante-respondió.
-¿Seguro?
-Sí, ya hasta lo olvidé-dijo en tono indiferente-Voy a preparar la comida.
Fue extraño, él nunca me trata así; incluso si está enojado o triste conmigo es tierno... ¿Qué tendrá?
Prov. Zero
Es justo lo que dije Yuuki, Ichiru solo se deja llevar por mi, realmente no hay nada más que eso; por eso ahora que conoció a ese chico se enamoró de él sin siquiera conocerlo; porque realmente solo me ve como lo que soy, su hermano.
¿Pero por qué tenía la misma mirada que cuando dijo que le gustaba? ¿Será que realmente lo sentía pero estar alejado de mi le sirvió para olvidar sus sentimientos?
-¿Zero...?
-Dime-respondí indiferente.
-¿Te ocurre algo?-preguntó triste.
-Nada.
-Zero...-me abrazó por la espalda-No me tratas así. Tu no eres de esa manera... Siempre eres cálido conmigo, eres muy tierno y dulce. No dejes de serlo ¡Por favor!-dijo casi suplicando.
Voltee a verlo directamente a los ojos, se veía confundido y preocupado; apoyé mi frente sobre la suya y lo tomé de las mejillas.
El impulso de besarlo me invadió, estar así con él siempre me hacía actuar sin pensarlo, su tierno rostro tan cerca del mio causaba miles de sensaciones dentro de mi.
Ichiru se sonrojaba más a cada momento, podía sentir su respiración agitada y los rápidos latidos de su corazón.
Decidí no ponerlo más nervioso y lo abracé tan fuerte como me era posible, recargué su cabeza en mi pecho y apoyé mi barbilla sobre su cabeza.
-Lo siento, prometo que nunca más volveré a ser así. Perdóname por favor. No tenía ni idea de lo que estaba haciendo-respondí.
Me rodeo por la cintura, su corazón aún estaba acelerado; podía sentir el calor de su rostro a causa del sonrojo y un ligero temblor que recorría todo su cuerpo.
-¡Te quiero Zero! ¡No quiero perderte por nada del mundo!-levantó la mirada y acercó su rostro al mio; sentí que esto ya había pasado, sabía lo que se acercaba y no intenté evitarlo...
Mi hermano juntó sus labios con los míos, esos cálidos y suaves labios que ya antes había probado y que deseaba besar desde que volvió a mi; cada segundo que pasaba hacía que necesitara más de él.
Introduje mi lengua a su boca, él dio un pequeño salto cuando lo hice y se sonrojó aún más, pero permitió que me encontrara con su lengua.
Sabía que no tenía mucha experiencia en estas cosas así que lo fui guiando lentamente. Ichiru estaba tenso, podía sentirlo, comencé a acariciar lentamente su cabello para tranquilizarlo y poco a poco fue perdiendo tensión.
Justo cuando ambos estábamos disfrutándolo más me di cuenta de lo que pasaba "Él es mi hermano, no deberíamos estar haciendo esto".
Lo solté y salí corriendo de la casa sin saber a donde ir.
-¡Zero! ¡Espera!-lo oí gritar pero seguí corriendo sin atender a su suplica.