Muy bien.
Aquí vamos. Hora de partida: 8:30 am
Plan “A”: Seducción.
Sostengo el plato detrás de mi cuerpo para mantenerlo oculto de mi victi… si, victima, es mi víctima, me acerco por detrás con el mayor sigilo posible para que no me escuche y cuando estoy a su lado por fin le hablo.
-Drey-Lo llamo y levanta la cabeza junto las orejas demostrándome que me presta su mayor atención-Esto es para ti-Digo sonriendo y lo más amable que puedo colocando el plato lleno de carnes rojas asadas, otras a la plancha y otras cocidas, una gran variedad de la carne que a Drey mas le gusta, me alejo un poco para darle espacio y veo como se levanta desde el rincón donde está en medio del pasillo, baja el hocico, huele la carne pero parece que también huele mis intenciones por lo que me mira ¿Molesto? Bufa y… ¡Orina la carne para después salir corriendo!
-¡¡Mezquino!!-Le grito mientras corro detrás de él pero logra ganarme… es un maldito lobo claro que va a ganar cada salto que da mientras corre cubre dos metros-¡¡Te atrapare!!-
Plan “B”: Atraparlo.
Hora: 10:45 am
La misma situación de la ultima vez, me acerco por detrás con sigilo pero ahora no tengo ningún plato de comida para que descaradamente la orine y me haga perder todo mi esfuerzo y quemadas mientras cocinaba esa mal nacida carne, sujeto con fuerza el collar junto a la correa para, en el momento justo, tomarlo por el cuello y no dejarlo ir… debería de ser así de decidido con Daika.
Me abalanzo sobre él pero el maldito perro súper desarrollado sabía que estaba detrás de él por lo que se aparta en el último segundo para que yo entierre mi cara en el jardín del patio. Levanto el rostro y escupo el pedazo de grama que se metió en mi boca para ver a Drey sentado frente a mi meneando la cola muy feliz junto una expresión idéntica en su rostro lobuno, estoy seguro de que si fuera un ser humano estaría riendo a carcajadas.
-Esto no se acabara aquí… me oyes, aunque sea lo último que haga-Aulló de una forma… ¿Burlona? ¡Maldito animal! Y de nuevo emprendió una carrera fuera de mi vista, ese maldito, no debí entrenarlo tan bien.
Plan “C”: Al carajo los planes, lo atrapare.
Hora: 12:00 pm
Corro detrás de él por toda mi “pequeña” casa pero de verdad no logro darle alcance, llevo más de una hora en esto, entra en el comedor y yo, con un increíble esfuerzo, llego hasta ahí, ese animal me ha hecho correr ¡Todo! Incluyendo el “pequeño” terreno lleno de arboles, matorrales, barro y lodo.
Entro en el comedor jadeando en busca de aire y toso un poco por culpa del cigarrillo que en exceso me está matando, sudo terriblemente y la delgada camisa blanca se me pega en el cuerpo, el short que cargo me llega por debajo de la rodilla y como siempre supe que correría como un desquiciado para lograr atrapar a mi “amada” mascota tengo unos buenos zapatos deportivos, miro a mi alrededor buscándolo y lo encuentro rápidamente, está en todo el medio del comedor viéndome con esa expresión que demuestra superioridad ¿Quién se cree? Yo soy su dueño.
-Drey-Hablo fuerte para que sepa que no es un juego, a raíz de los años siempre hemos tenido este problema-Ven acá-Hago un gesto con el dedo que en una situación normal sería una orden que él acataría inmediatamente pero este caso es malditamente particular, veo como me ignora-Drey-Vuelvo a llamarlo pero de pronto empieza a correr hacia mí y yo me preparo para, de alguna u otra manera, por fin atraparlo pero me hace una finta (me elude) y como si se tratara de un imbécil caigo al piso de boca, ya no aguanto-¡¡Maldito animal!!-Le grito a su figura que se pierde de nuevo con la distancia-¡¡Te juro que hoy te daré tu maldito baño!! ¡¡No puedes huirle al agua por siempre!! ¡¡DREY!!
Hora: 1:00 pm
Que se joda, no voy a seguir con eso.
Me siento en una de las bancas del comedor tomándome como tres litros de agua de lo deshidratada que quede después de todas esas malditas burlas de mi mascota, de alguna manera tengo que lograr bañarlo, antes era más sencillo, era pequeño y no daba tanta resistencia pero desde que creció se convirtió en una tarea titánica poder bañarlo, es estúpido porque muy bien sabe nadar el maldito animal, no le tiene ninguna fobia al agua pero detesta que lo bañen y yo nunca le enseñe eso, yo soy muy aseado pero Drey no, él prefiere quedarse mugre por siempre. Suspiro y observo mi alrededor, logro captar por el rabillo del ojo ese castaño que hace que mi corazón se detenga, hace tres días que llegamos Dom y yo, las cosas entre Daika y yo no fueron más allá que unos meros saludos de cortesía, quiero abrazarlo pero sin razón aparente solo lograría espantarlo y de verdad no quiero que me tema más de lo que recuerdo.
Me pierdo en mis pensamientos, me hizo muy feliz el hecho de que aun estuviese durmiendo en mi habitación pero como ya volví se fue a otra, tuve que tragarme las ganas de decirle que se quedara, sigo buscando una manera de poner en funcionamiento mi plan para hacerlo feliz. No me logro percatar de cuando el mismísimo Daika se me acerca y me habla.
-Kai-Salgo de mis pensamientos para escuchar su dulce voz… ¿Desde cuándo soy tan meloso? Tiene las manos sobre las rodillas flexionándose un poco hacia adelante, cerca de mí, veo ese hermoso tinte rojizo en sus mejillas y no sé cómo cada vez me enamoro mas-¿Qué estabas haciendo con Drey?-Me pregunta y yo le doy espacio para que se siente a mi lado.
-Trato de atraparlo para poder bañarlo-Voy directo al punto, aunque me encante estar cerca de él puede que sea una mala influencia por lo que aunque a mí mismo me duela prefiero que se mantenga lejos del “monstruo” y que este a salvo. Estúpido ¿No?
Ríe por un momento ya que le exprese mi punto como si se tratara de una información confidencial del Estado. Su risa es tan linda que yo mismo me encuentro sonriendo.
-¿Puedo ayudarte?-Me pregunta con un rostro tan esperanzado que no puedo negarme, no puedo decirle que “no” a esos ojos.
-Claro-Nos levantamos de la banca para ir a buscar a Drey pero lo veo caminando cerca de donde estamos.
-Drey-Lo llama muy dulcemente y… ese maldito viene hacia el castaño rápidamente mientras mueve la cola como a 1000 revoluciones por minuto, Daika se agacha y acaricia el pelaje-¡Listo!-Me dice sonriendo, siento que tengo un tic en la ceja, aunque por fin lo hayamos atrapado esto me hace ver como si fuera un imbécil, tengo toda la mañana tratando de atraparlo y Daika lo llama y es como si ya no odiara que lo bañen.
-Traidor-Mascullo para que solo el can me escuche-Me las pagaras-
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Caminamos fuera del comedor hacia el patio para bañar a Drey, camina mientras lo acaricio ¡Por fin! Al fin tengo una razón para poder acércame a Kai y poder hablarle, estoy muy nervioso, quiero hablarle, que me hable y pasar todos los días que pueda con él, esto es muy difícil, solo caminar a su lado hace que tenga una sonrisa tonta tatuada a los labios, no logro quitarla, estuve esperando como loco este momento.
Llegamos hasta donde están los utensilios para el baño del lobo y yo lo sostengo mientras lo acaricio, me lame la cara y Kai empieza a mojar su cuerpo para poder untarle el shampo, de pronto, Drey voltea y toma la manguera con el hocico y da una rápida vuelta alrededor de Kai para… abro la boca sorprendido al ver como Drey logro enredar a Kai y tumbarlo al suelo, rio un poco por eso pero Kai me ve con cara de pocos amigos y me comienza a mojar, trato de agarrar la manguera para mojarlo a él también pero es difícil… No sabía que ayudar a bañar a Drey me iba a conceder un momento tan divertido.
Jugamos un gran rato mojándonos como un par de niños pequeños, no puedo evitar mirar como la ropa se le pega, por lo que se quita la camisa y me deja sus ver su trabajado pecho y abdominales aun con esas cicatrices y el tatuaje… no me da miedo, me parece sexy… muy sexy, nunca había escuchado reír tanto a Kai, su cabello mojado y el hecho de que ambos estemos en el suelo rodando como tontos hace que me sonroje feliz de poder compartir un momento lindo con mi amado.
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Rio como nunca lo he hecho por jugar a mojarme junto con Daika, nunca había visto esta actividad tan graciosa, en cualquier otro momento lo habría visto tonto pero es con Daika con quien estoy compartiendo, así que, ese simple hecho hace que sea perfecto, no había notado lo hermoso que se ve su cabello, rostro, sonrisa, todo, brillando por la puesta de sol detrás de él, hace que tenga un brillo celestial alrededor ¿Cuánto tiempo llevamos en esto que ya llego el crepúsculo? Rodamos por el suelo, ya totalmente empapados y riendo, nos detenemos justo cuando yo estoy sobre él, reímos un poco más pero luego poco a poco las risas se van apagando hasta que llega un momento donde estamos en silencio y nos vemos a los ojos fijamente, siento como me pierdo en esas piscinas chocolate. Sí solo sus ojos logran hechizarme… no quiero imaginarme lo que me causaría el resto de su precioso cuerpo.
Sigo viendo sus ojos y poco a poco me acerco más, su aliento sobre mi rostro, el mío sobre el suyo, formamos pequeñas nubes de vapor, de pronto sus ojos parecen que brillan mas… estamos a un mísero cabello de darnos un beso, sus labios rozan los míos y… ¿Qué estoy haciendo? Parpadeo varias veces y empiezo a alejarme, no puedo hacerle esto, no de nuevo, merece algo mejor.
-Se está haciendo tarde-Me levanto y camino hacia Drey para terminar de bañarlo, no puedo voltear para ver a Daika. Imbécil. Te lo juraste, debes hacerlo feliz, no lo arruines. Termino de bañarlo 10 minutos después y cuando doy vuelta Daika sigue ahí, me ve y sonríe un poco para desplazar la incomodidad de hace un rato, ya casi el sol se oculta por lo que Drey se va corriendo a seguramente ensuciarse de nuevo y yo tomo valor para sentarme al lado de mi pequeño amor-¿No te parece lindo el crepúsculo?-Digo lo primero que se ve viene a la mente golpeándome mentalmente después por hacer dicho algo tan estúpido.
-Si-Comenta bajo-Es muy lindo-Un silencio incomodo se cierne sobre nosotros y no sé qué decir para disculparme de casi haberlo besado-¿Y… desde cuando Drey odia bañarse?-
Rio un poco por los recuerdos que se me vienen a la mente.
-Desde que tiene conciencia supongo pero es estúpido cuando tiene que nadar lo hace muy bien… simplemente detesta bañarse-
-¿No sabes si fue por un trauma o algo?-
-No-Apelo ahora mucho más tranquilo ya que tenemos una conversación-Lo críe desde pequeño y nunca se ha ahogado ni nada-
-Yo si le tengo miedo-Miro fijamente a Daika que tomo sus piernas y se abraza a ellas mientras jugaba con sus dedos-Una vez cuando estaba pequeño en el orfanato caí a la piscina y casi me ahogo… desde ese día no me gusta y nunca aprendí a nadar.
-¿De verdad no sabes?-Levanto el brazo e inconscientemente masajeo su espalda, Daika me mira y niega con la cabeza, se me viene una idea tonta pero si así podre pasar tiempo con él y ayudarlo a superar un miedo que así sea-Puede enseñarte si quieras-Me ofrezco y él me mira con ojos sorprendidos.
-¿De verdad?-
-Claro-Afirmo-Si tú quieres por supuesto.
-Sí, sí quiero-
Nos levantamos de donde estamos y caminamos hacia la gran piscina olímpica que el viejo por puro capricho mando a construir, dada la hora la piscina ya está cerrada y nadie vendrá aquí por lo que no debemos preocuparnos por terceras compañías, yo ya estoy sin camisa por lo que de una sola vez me adentro a sentir el agua fría surcando mis músculos ya oscureció y las luces que están debajo de la piscina se encienden creando un ambiente tranquilo, el resto del lugar solo está iluminado por la luna… no me había dado cuenta de que en cierto punto esto es como romántico. Salgo a la superficie para ver a Daika sentado en el borde de la piscina con solo las piernas mojándose.
-Vamos-Le extiendo una mano y sonrió alegre, él se nota nervioso pero asiente y tímidamente quita su camisa… fue un grave error que hiciera eso, su pecho precioso, enmarcado sutilmente, cremoso, suave… adictivo, siento una punzada en mi miembro y me controlo, NO, olvídate de eso, no lo vas a tocar en ese sentido, no lo vas a hacer, idiota, tienes que enseñarle a nadar, idiota, olvídate de tocarlo.
-Kai-Me llama y yo salgo de mi pelea mental por el temor que se escuchaba reflejado en su voz-Tengo miedo-Por ese hecho me olvido de todo lo carnal y sonrió suavemente, me concentro en hacer este momento perfecto.
-No temas-Me acerco mas a la cornisa y tomo su cadera para acercarlo más al agua, Daika totalmente nervioso pone sus manos en mis hombros y forcejea un poco.
-¿Y si me ahogo?-Me pregunta con un miedo desbordante.
-No pasara-Trato de calmarlo.
-¡¿Cómo están tan seguro?!-
-Porque nunca dejare que pase eso-Digo demasiado serio y muy tarde me percato de que parte de mis sentimientos salieron a la luz con ese simple comentario-No temas-Valiéndome madres, me concentro en Daika y solo en Daika-Ven-Lo jalo para que se adentre en el agua y por acto reflejo Daika enreda sus piernas en mi cadera y me abraza por los hombros, no pienso en bajas pasiones porque siento el temblor que tiene en el cuerpo y en este momento solo quiero alejar sus miedos-Relájate-Le susurro al oído, su temblor sigue pero poco a poco se va calmando.
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Que no me hable al iodo por favor, son demasiadas cosas juntas, me aferro a su cuerpo, he querido hacer esto desde que llego pero el hecho de que este metido hasta el cuello en una maldita piscina hace que no disfrute para nada estar con Kai, solo estoy concentrado en no ahogarme, sus susurros de calma logran su cometido y cierro los ojos, estar en sus fuertes brazos me hace sentir seguro, escondo mi cara en su cuello y me relajo, de pronto siento como la mano que reposa en mi espalda comienza a hacer movimientos circulares, totalmente confortables, suspiro calmado, me separo un poco y abro los ojos… cuando lo hago encuentro su rostro a centímetros del mío pero Kai tiene una sonrisa tan tranquila que solo me dan ganas de querer abrazarlo, besarlo… Lo amo tanto. Amo el hecho de que pueda llegar a ser tan delicado y atento conmigo, tratándome como si estuviese hecho de cristal y no dejándome caer.
-Kai… yo-Recuerdo lo que me dijo Eian, de que tenía que tomar las cosas con calma y no acelerarme porque podría perder mi oportunidad, quería decirle que lo amaba pero eso tendrá que esperar, primero haré otra cosa que también es importante-Quería disculparme.
-¿Por qué?-Me pregunta ladeando su cabeza tan tiernamente que me acerco y lo abrazo de nuevo, escondiendo nuevamente mi cara en su cuello.
-Por lo que te dije aquella vez.
-Ahh…-Me responde dándome a entender que ya sabes de qué estoy hablando-Daika ya te dije que…-
-No, de verdad, discúlpame, no medí mis palabras y lo dije sin pensar, de verdad nunca quise llamarte así… perdóname, por favor-Trato de decirlo lo más sincero que puedo, necesito que me perdone por ser un idiota y llamarlo de esa horrible manera, por favor, perdóname.
-No tengo nada que perdonarte-Contesta tranquilo y comienza a darnos vueltas calmadas en el agua-Es normal que reaccionaras así… estaba lastimando a la persona que querías, es normal-Con esas palabras recuerdo el hecho de que Kai aun cree que estoy enamorado de Carlo ¡No!
-¡No!-Me separo para verlo a los ojos y notar el tinte triste que tienen-Yo me equivoque…-Me sonrojo porque es muy penoso decirle esto a Kai-Confundí la admiración con amor-Recuerdo lo que me dijo Eian sobre mis verdaderos sentimientos y trato de no tartamudear ante lo que diré-Yo no estoy enamorado de Carlo-Trago saliva nervioso y la expresión de Kai pasa de sorprendida a sonreírme de nuevo tranquilo.
-Bueno… ahora solo tienes que encontrar al verdadero amor de tu vida-Sus palabras hicieron que mi corazón comenzara a palpitar como loco, idiota, ya encontré al amor de mi vida-Ya que estamos en este tema y yo no volveré a tomarte como esclavo… discúlpame por eso-Mira el agua mientras hace una mueca con la boca-Hace dos mese era un total inmaduro… aun lo sigo siendo pero ya no tanto por lo que… ¿Podemos comenzar de nuevo? Claro, si tú quieres, por supuesto-Al escuchar esas palabras no puedo controlar la sonrisa que se forma en mi cara por la felicidad de tener una nueva oportunidad, comenzando desde cero para así poder hacer que me ame.
-¡Claro!-Le respondo sin poder controlar la sonrisa junto al sonrojo surcando mi rostro.
-Mucho gusto-Saca como puede su mano y la coloca frente a mi-Me llamo Kai soy un asesino profesional mal encarado y grosero ¿Y usted?
-Me llamo Daika y soy un chico… ¿Normal?-No sé cómo presentarme así, todo es tan nuevo, gracias por esta nueva oportunidad-Es un placer conocerte-Recuerdo rápidamente las normas de cortesía que me enseño Anna mientras estrechamos nuestras manos.
-No-Dice serio viéndome a los ojos-El placer es totalmente mío-Le da la vuelta a mi mano y la toma sutilmente para dejar un pequeño y suave beso en mis nudillo… estoy seguro de que mi corazón se va a salir de mi pecho, mi rostro arde y ¡Dios! Su sonrisa hace que trague saliva y mire fijamente al agua para ocultar un poco mi sonrojo-Sigamos-Lo escucho y subo la mirada-A este paso nunca voy a poder enseñarte a nadar.
Me va soltando poco a poco y yo me sujeto de sus brazos para no hundirme, creo que mi temor está reflejado en mi rostro porque Kai dejar escapar una pequeña risilla.
-Relájate… recuerda que estoy aquí y no dejare que te lastimes.
Pasamos mucho tiempo en el agua, aprendí solo un poco porque aun tenía que alejar mis miedos pero estando con Kai eso se hizo muy sencillo me pedía que cerrara los ojos, que sintiera como el agua fluía a mi alrededor, cuando me pedía que loa abriera el estaba frente a mí y en realidad todo me pareció un sueño, un hermoso y sutil sueño, siempre me decía que cuando tuviese miedo me abrazara a él por lo que pase la mayor parte de la practica encaramado a su cuerpo como koala. Salimos de la piscina muy tarde en la noche, creo que hasta nos perdimos de la cena pero no tenía hambre no sentía nada de eso, en mi mente solo estábamos Kai y yo danzando en el agua tranquila de la piscina.
-Entonces… ¿Podemos ser amigos?-Pregunte después de un rato de haber salido de la piscina, estamos sentados en el borde junto con unos paños secándonos.
-Si-Me responde tranquilo-En realidad tu eres parte de la familia por lo que yo vendría siendo tu hermano mayor que cometió incesto… pero eso depende de ti ¿Quieres que seamos amigos o hermanos?
No me hace falta analizarlo, entre hermanos tendría un poco mas de dificultad para lograr que seamos amantes pero entre amigos creo que es más sencillo.
-Amigos-
-Seremos amigos, entonces-
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-¡Dios!-Grito como desquiciado al sentir el consolador-vibrador en mi trasero volviéndome loco, maldición, no logro controlarme, esa maldita droga que me dio en el vaso cuando cenamos me está haciendo demasiado efecto, no quiero parecer una puta, aunque no es como si pudiera hacer mucho, con mis piernas vestidas de medias de nylon negras que me llegan hasta el muslo, mis brazos cubiertos por el mismo material, una maldita tanga negra y unos tacones de aguja rojos, no sé en qué momento me vistió de esa manera ¡Pervertido!-L-Lu-Trate de llamarlo pero la voz no me sale, siento como el consolador toca mi próstata y me arqueo pero sin lograr mucho por esas malditas cadenas que me sujetan a la mesa de metal… en estos momentos me alegro de que la mazmorra tenga paredes anti-sonido.
-Que sexy Yun… debería ser un delito tener esa mirada-Me habla al odio y yo solo logro gemir alto, abro un poco mis ojos semi cerrados y trato de detallarlo, lleva un maldito short de látex negro que me deja ver la totalidad de su descomunal virilidad excitada, unas botas de combate militar, unos guantes sin dedos igualmente de combate y un collar de púas en el cuello… eso junto al hecho de que su cuerpo está totalmente desarrollado y trabajado hace que sea un sueño húmedo increíble para cualquier persona pero para mí no, ya no lo hago tanto aun lo odio. Maldito amante del sadismo.
-Luci…-De verdad no puedo hablar, no me sale la voz.
-¿Qué pasa? ¿Quieres que te quite esto?-Toma el consolador y en vez de quitarlo lo adentra mas en mi cuerpo moviéndolo en busca de mi punto dulce.
-¡N-no!-Lo mueve hasta el fondo y ya no puedo… quiero correrme pero su mano sobre mi miembro bloquea la salida y no puedo, por mucha que quiera no puedo correrme, el dolor se une al placer y mi respiración excitada no me deja respirar por lo que debo abrir la boca el problema son los hilillos de saliva que se me escapan por la comisura de los labios-¡Lucifer!-
-¿Aun puedes hablar mí querido Yun?-No puedo responderle, mi cabeza cae a la mesa y trato de mover las manos pero son éxito por las ataduras-Lleguemos a un trato, te dejare correrte pero primero debes usar esto-Me enseña el circulo de silicona blanco que tiene en la mano y sin esperar mi aprobación lo pone en mi pene obstruyendo toda eyaculación posible, me quejo porque tengo más de una hora con el consolador en el trasero y me quiero correr para liberar la presión que me mata.
Lucifer abre las cadenas que sostienen mis piernas y me ordena que me ponga a cuatro patas, con mucha dificultad dada las ataduras que aun tengo en mis muñecas, logro colocarme en la posición que me exige, toma mis nalgas con sus manos y las abre mas mientras empuja el consolador, yo grito y comienzo a llorar, no de dolor sino de placer, de pronto me quita el aparato y me siento vacio.
-Abre las piernas, Yun-Sin oponer resistencia obedezco, quiero acabar con esto de una vez por todas-Que linda mascota-Bufo porque odio cuando me llama así, tenemos este juego enfermizo desde hace años y aun me molesta la forma en la que me manipulo para lograr esto, nunca debí recurrir a él, sabia la fama que tenia, las personas siempre me decían que no lo buscara pero no les hice caso y ahora sé muy bien porque, subo mi rostro y veo por sobre mi hombro el tatuaje de Dragón que tiene que comienza desde la esquina inferior derecha de su cadera, da una vuelta alrededor de su cuerpo, se abre en la espalda y termina en el cuello, nunca debí recurrir a un asesino como él-No sabes lo lindo que se ve tu hoyito desde aquí Yun-
-Enfermo-Mascullo-Termina de una vez.
-No, no, no, no-Mueve su dedos índice junto a sus palabras-No debes hablarle así a tu amo, lo sabes muy bien Yun-Por el rabillo del ojo veo como camina y se acerca a mi cuello para morderme hasta hacerme sangrar mientras sus dedos aprietan mis pezones maltratados de las malditas pinzas que me quito hace poco-¿Quién es tu amo Yun? Si no lo dices te meteré el consolador y me iré, no volveré hasta mañana… o hasta que te recuerde, sabes que soy muy olvidadizo-Ante la amenaza me veo en la horrenda situación de tener que acceder a sus demandas.
-So…-No me sale ¡Nunca debí buscarlo!-Soy tuyo-
-Eso no me dice nada, dime ¿A quién le perteneces?-Sigue buscando humillarme.
-A ti-
-¿Y quién soy yo?
-A ti…-Las lagrimas se me escapan-Lucifer… el Dragón Imperial.
-Que linda mascota-Dice para entrar y embestirme hasta lograr que me corra aun teniendo el anillo de silicón en el pene.
°°°°°°
-¿Puedes seguir enseñándome mañana?-
-Si… pero después del medio día en la mañana voy a ir hacer ejercicio con Dom-Le digo mis limitaciones y Daika no parece molesto por eso, simplemente asiente y sonríe.
-Hasta mañana-Se detiene en la puerta que supongo es su nueva habitación, un poco alejada de la mía, me extiende la mano para hacer una despedida rápida pero yo tengo otras intenciones, la tomo y hago lo mismo que en la piscina.
-Hasta mañana, Kisa-Le digo lo último en ruso que según se aun no aprende y me despido para irme a mi habitación y de seguro darle un montón de explicaciones a mi compadre que no me ha visto desde el medio día, estoy seguro que me va a molestar ese desgraciado, pero para mi sorpresa no estaba en mi habitación ¿Dónde estará?
CONTINUARA…