Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Retrato de una mentira. por Sombra96

[Reviews - 152]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Antes que nada: PERDONENME!

 

Lamento muchas cosas en mis cortos 16 años pero enserio lamentos dos cosas más que otras:

 

:-) Lamento no haber actualizado ninguno de mis fics antes y lamento aún no haber publicado el one shot de regalo de ShawolDeLee, lo tendré para mañana. Perdoname pero quería hacerlo perfecto para ti!

 

Por otro lado... Mi excusa barata es que acabo de entrar otra vez a la universidad y estoy cuadrando horarios, materias y todas esas cosas por lo que estoy de por más ocupada. Ni hablar que ahora me han de poner a leer a la lata (Mia culpa por haber escogido psicología como carrea) y no tendre mucho tiempo. Pero no voy a fallarles!

 

Por cierto, ya les había comentado que la canción "oficial" del fic es LIFE de... de quien mas? sino mis brillositos SHINee.

 

La letra de la cancion esta toda presente en el cap, asi que si quieren escuchrla: HAGANLO!

 

Graacias por todo y espero aún quieran leer mi poco coherente fic

 

Los amo!

 

EXTRA: Cap dedicado a NEY OTAKU a quien adoro y estuvo de cumpleaños!

“Taemin aplaudió contento mientras escuchaba la suave melodía que su mejor amigo entonaba; su propia voz comenzó a seguir la letra mientras mecía su cuerpo con algo de dificultad debido al resfrió que lo tenía guardando reposo. 

 

.- Amo esa canción, hyung – murmuro con la voz contenida mientras lo observaba embelesado – Si fuera por mí, no dejaría que te detuvieras nunca – los ojos del menor brillaban de forma especial mientras él, con una sonrisa, seguía entonando – Gracias por cantar para mí…” 

 

Aquel recuerdo, aquella voz… “Gracias por cantar para mí”, se repitió en su mente mientras inevitablemente su voz trastabillaba y se desentonaba en la línea final del coro. 

 

Suspiro molesto mientras pasaba una mano por su cabello, queriendo alejar el recuerdo de su mente; pero seguía repitiéndose una y otra vez. La imagen de un Taemin enfermo que le miraba sonriente por estar cantándole aquella canción. 

 

.- Gracias por cantar para mí, hyung – murmuro su hermano con la voz adormilada mientras sus ojos se cerraban y su anormal respiración se hacía un poco más pausada. 

 

Y Jonghyun se maldijo a su mismo por ser de esa forma, por no ser capaz de ver a quien de verdad lo necesitaba. Había estado ahí, entonando aquella canción con la mente puesta en los recuerdos. No era su hermano a quien veía a su lado… No, no lo era. 

 

Ahogo un gruñido mientras con cuidado movía el cuerpo del menor y lo acomodaba para ponerse de pie. Estaba molesto consigo mismo, por no ser capaz de dejar las cosas de lado. Dejo caer su mano en el cabello negro de Jongin y observo la mueca de dolor que se dibujo de forma inmediata en el rostro de su hermano. 

 

.- Taemin – ah – hablo con voz suave mientras seguía acariciando el cabello de su hermano menor, pensando - ¿Por qué me haces esto? ¿Por qué simplemente no puedo ser un buen hermano? – pregunto al aire y suspiro, cansado de no obtener respuestas. 

 

Miro la hora en su celular y camino hacia la puerta en silencio mientras pensaba en lo que tenía que hacer en unas horas. Su mano tomo el picaporte y entonces giro su rostro, clavando su mirada en el cuerpo de su hermano, que se hacía un ovillo sobre la cama mientras ahogaba un gemido de dolor. 

 

Pero no vio eso. No, sus ojos no captaban a Kai. En su mirada estaba un sonriente Lee Taemin que aplaudía mientras lo escuchaba cantar la última línea de la canción. 

 

Un Lee Taemin de 12 años que se había resfriado. Un niño sonriente e inocente. La última vez que había cantado… 

 

Jong ahogo un sollozo mientras sacudía su cabeza pero la imagen seguía ahí. Taemin, mirándolo con una sonrisa. Taemin, sentado en su cama y rodeado de sus cosas. Taemin… Y la última vez que había visto a su mejor amigo. 

 

.- Todo lo que quiero es a ti… En mi vida - Jong entono con voz suave las últimas palabras de la canción favorita de su mejor amigo; lo último que le había dicho – Vuelves en cada canción, Taemin – ah. 

 

 

Key cerró el grifo mientras su mano aún temblaba, horrorizado por lo que había visto esa mañana en la puerta de su apartamento. Ahogo un gemido de miedo mientras trataba de poner su mente en orden pero seguía reproduciendo una y otra vez la escena. Kai en la acera, completamente ensangrentado. 

 

Con la mano aún temblando se llevo las dos pastillas a la boca y de un solo trago se las tomo. Necesitaba calmarse, necesitaba permanecer fuerte porque Kai los necesitaba. 

 

Sentía en parte que esa era su forma de redimirse por sus acciones pasadas, acciones descuidadas que había llevado a la muerte de su pequeño amigo. Key ahogo un suspiro mientras pensaba en Kai, en que podría haberle pasado, en que… 

 

.- Gracias por cuidar de mi hermano, Key – Jong le miro con el rostro reflejando el cansancio – Se que has hecho ya mucho por Jongin pero necesito salir y quería saber, ¿si podías llevarlo a mi apartamento? 

 

Key alzó una ceja, sin poder comprender del todo a su amigo, que le miraba esperando una respuesta. ¿Acaso podría ser que…? ¿Jonghyun era así de cruel hasta con su propio hermano? 

 

.- No puedes estar hablando en serio – rió con ironía mientras lo observaba estupefacto - ¿En serio vas a irte? – gruño cruzando sus brazos a la altura de su pecho mientras trataba de controlar su ira creciente. 

 

.- Tengo cosas que hacer – fue la respuesta del más bajo. 

 

Y Key le miro totalmente sorprendido, sin poder creérselo: .- ¿Vas a dejar a tu hermano así? Casi se muere y, ¿aún así tienes cosas más importantes? Nunca pensé que fueras así, Jong – le espetó molesto mientras comenzaba a zapatear con fuerza. 

 

.- No es algo que pueda controlar aunque quisiera – se alzó de hombros, consciente de que estaba mostrando una faceta falsa de sí mismo. La verdad era que estaba demasiado asustado y no podía quedarse ahí, viendo como todo volvía  derrumbarse – Solo te estoy pidiendo de que lo lleves a mi apartamento, no sabía que era mucho para ti. 

 

.- ¡No se trata de eso, estúpido! – le grito, ahora fuera de sí – Se trata de tu hermano, Jonghyun. ¡Tu maldito hermano! 

 

.- Y-yo… - la voz del mayor se quebró un poco, pensando en lo que iba a decir sería demasiado pero era la verdad, era la verdad – Kai nunca ha sido mi hermano, aunque lleve mi sangre. 

 

Y entonces sintió un fuerte dolor en su ojo derecho mientras retrocedía sorprendido por el repentino golpe que la diva le había propinado. 

 

.- Nunca vuelvas a decir algo tan horrible, Jonghyun – le espetó con voz seseante – Él es tu hermano, lo es.  

 

.- Bueno, es algo que me ha tocado asumir a mi manera – trato de cortar la discusión mientras comenzaba a sentir los pinchazos de un incipiente dolor de cabeza – Así que me voy… 

 

.- ¿Qué pretendes con todo esto, Kim Jonghyun? – le detuvo mientras sentía su propia voz romperse, sin poder entender la frialdad del otro. 

 

.- No pretendo nada, Kim Kibum – fue su respuesta, con voz fría mientras clavaba sus ojos en los felinos, esperando – Solo espero que seas capaz de llevar a Jongin al apartamento, cuidare de él después. 

 

Key asintió con una risa sarcástica mientras abandonaba la cocina y le pasaba por lado, dándole un leve empujón. 

 

.- Entiendo – fue lo único capaz de decir, sin querer discutir con él otro, mucho menos teniendo a Kai en su habitación – Pero quiero que antes me respondas algo… 

 

Jong soltó un gruñido mientras miraba su reloj de muñeca, esperando poder acabar con eso a tiempo. 

 

.- ¿Quién era Lee Taemin para ti? – la pregunto del otro fue hecha con voz segura, como si no conociese de quien se hablaba pero sus ojos se mostraban cristalinos, reflejando la tempestad de su interior – Dímelo, Kim Jonghyun… ¿Quién era Lee Taemin? 

 

.- ¿Acaso te has olvidado de él? – respondió con otra pregunta, sin querer dar verdaderamente una respuesta, sabiendo que al otro no le gustaría – Deja de preguntar estupideces, Key. No tengo tiempo para tus juegos de niños. 

 

.- ¡Entonces deja tu de comportarte como un niño egoísta, Jonghyun! – Le espetó mordaz, sin poder controlarse – No permitas más que un maldito muerto controle tu vida. 

 

.- Ese muerto, Key – hablo lo más calmado posible, sopesando sus propias palabras – Ese muerto era tu amigo, era mi amigo… 

 

Él otro trago grueso, mientras mordía sus labios, sin saber cómo contestar pero haciéndolo aún así: .- Eso fue hace mucho tiempo, éramos niños inmaduros y no conocíamos lo que era la amistad. Ya ni siquiera recuerdo como lucía o que lo hacía especial. 

 

.- ¿Se te olvido que le enseñaste a bailar? ¿Se te olvido como te decía? ¿O cómo se escondía tras tu cuerpo cuando algo lo asustaba? ¿Se te olvido su extraña manía con la leche de plátano? ¿Se te olvido todo eso, Key? – él otro solo gruño en respuesta y él más bajo tomo aire – Dímelo. 

 

Key negó con la cabeza, sin poder contestar sin ponerse a llorar en ese mismo momento. Por supuesto que no había olvidado nada, nunca podría si quiera pensar en esa posibilidad. Pero había descubierto que era más fácil fingir que quedarse estancado en algo que nunca volvería. 

 

Taemin estaba muerto y así se quedaría siempre. 

 

Alzó los ojos, dispuesto a dar la cara a las palabras cargadas de resentimiento de Jonghyun y entonces lo vio… Kai estaba de pie en la puerta de su habitación, sosteniéndose con esfuerzo mientras los observaba discutir. Las lágrimas brillaban en sus ojos y Key lo lamento por él, por lo que estaba por escuchar. 

 

.- No lo he olvidado, Jonghyun pero de nada me sirve tampoco recordarlo, no me trae nada – tomo aire y trato de calmarse con esfuerzo – Ahora responde, ¿Quién es Lee Taemin? 

 

Jong clavó su mirada en el suelo, estaba siendo sincero, después de todo. 

 

.- Lee Taemin era mi mejor amigo… Era mi único hermano. 

 

 

 

Minho masajeo sus sienes por séptima vez en esa hora mientras observaba al hombre salir de la habitación de Jongin con un rostro serio, había ido a buscarlo y le había rogado para que revisara al menor. Para que hiciese lo que él no pudo hacer en un primer momento. 

 

Key se levantó de un salto de su lugar, esperando palabras de aliento de parte del médico, esperando que le confirmase que no debía preocuparse mucho. 

 

.- Hicieron muy bien en buscarme inmediatamente – les dijo con voz pausada aquel hombre mayor, con canas incipientes y un aspecto respetable – Tus acciones fueron oportuna, joven Choi pero lo mejor que pueden hacer por él en este momento es llevarlo a un hospital. 

 

Key le miro preocupado: .- ¿Acaso es tan grave su condición? – temía esa respuesta, temía escuchar algo irremediable. 

 

.- Me temo que no puedo diagnosticarle de forma correcta estando fuera del hospital. Solo puedo decirles que parece haber sangrado interno y tiene por lo menos dos costillas rotas y la cadera dislocada. 

 

Minho negó mientras enterraba su rostro entre sus manos, sin poder asimilar que aquello le estaba pasando a Kai. A quien había terminado por cuidar como un hermano pequeño; a quien, ciertamente, quería mucho. 

 

.- Entiendo, Sunbae – logro murmurar con esfuerzo. 

 

.- Además… Es necesario que se le realicen algunas pruebas especiales, Minho – ah – le hablo él hombre con suavidad, no queriendo indagar demasiado en un tema tan delicado como ese con uno de sus estudiantes de facultad. 

 

.- ¿A qué se refiere con pruebas especiales, Minho? – le pregunto Key con la voz a penas en un hilo, con un mal presentimiento en la boca de su estomago. 

 

Minho negó mientras volvía a procesar la información. Pruebas especiales… A Kai. No, aquello no pudo pasarle al menor. Ya era demasiado. 

 

.- Me refiero, joven Kim. A que presumo que hubo abuso sexual – le explico con lastima él hombre mientras los ojos felinos de Key se inundaban en lágrimas y ahogaba un grito horrorizado en su garganta – El joven presenta marcas y heridas típicas de un asalto sexual violento, por lo que se le deben practicar algunos exámenes y debemos asegurarnos de que no haya mayor daño interno que unas fracturas y golpes. 

 

Minho asintió con dificultad mientras se ponía de pie y comenzaba a dar vueltas por toda la sala, triturando la información en su mente y creando puntos de donde partir. 

 

.- ¿Hay algo que podamos hacer por él en este momento? – pregunto Key, sintiéndose atrapado entre esas paredes. 

 

.- Por el momento, hay que dejarlo descansar. Me preocupa más que su salud física, su estabilidad emocional después de este suceso. 

 

.- ¿A qué se refiere? 

 

.- Kai presenta un caso de amnesia post traumática debido a la magnitud de la situación. No deben presionarlo con preguntas y mucho menos insinuaciones directas pues pueden ocasionar que su mente se bloquee por completo. Su propio cerebro ha bloqueado todo recuerdo por la simple acción de protegerse. Lo más seguro es que los recuerdos lleguen de forma esporádica y abra momentos en los que, debido a ciertos estímulos, Kai se verá aprisionado por su mente y tendrá ataques de pánico. 

 

 

 

.- ¡¿A dónde crees que vas, Lee?! – Rugió con voz potente mientras lo observaba caminar hacia la puerta de la habitación – Tu y yo aún no terminamos nuestra charla. 

 

Él castaño gruño mientras se daba la vuelta y clavaba sus ojos en los del otro, con un gesto furioso mientras su puño se cerraba en la cadena de su bolso. 

 

.- Tengo cosas que hacer, ya te lo había dicho – su voz broto en un tono filoso mientras mantenía su postura defensiva – He faltado al resto de mis clases por tu petición pero aún tengo “compromisos” más importantes que seguir aquí contigo. 

 

Los ojos del hombre se entrecerraron con ira mientras en pocas zancadas alcanzaba la altura del castaño y aprisionaba su cuerpo contra la pared. 

 

.- ¿Qué has dicho, Taemin – ah? – pregunto con su boca pegada al oído del menor mientras dejaba caer su pesado aliento, provocándole un temblor nervioso - ¿Quieres que te recuerde todo lo que te he brindado? Todo el apoyo y amor que te he dado sin obtener nada a cambio. 

 

.- N-no tienes que recordármelo, se perfectamente cuanto me has ayudado – murmuro con la voz en un hilo, sin poder controlarse. 

 

.- Te estoy ayudando en este estúpido jueguito del gato y el ratón que has armado, lo mínimo que merezco es un poco de tu atención… Taemin – ah – Y sus manos apretaron con fuerza el cuerpo del otro, que se limito a soltar un quejido suave. 

 

Él menor negó con esfuerzo mientras tragaba saliva imperceptiblemente, el miedo recorría sus venas y a pesar de todo el tiempo que había pasado, no terminaba por acostumbrarse. 

 

.- Ahora, mi bebe – murmuro con suavidad contra sus labios con una sonrisa retorcida en su rostro pulcro – Vamos a terminar nuestra  charla y luego podrás irte a donde quieras. 

 

Y él solo pudo asentir. Ya no tenía miedo, ahora solo podía sentir pánico. 

 

.- De acuerdo, appa… 

 

 

 

Jonghyun miro por cuarta vez la hora en su reloj de muñeca mientras comenzaba a mover de forma inconsciente su pierna derecha, a su alrededor todos se movían de un lado a otro mientras él esperaba ahí sentado. 

 

.- Ya puede seguir, joven Kim – le informo un joven de uniforme sin levantar la vista de sus documentos en ningún momento – Mi teniente puedo recibirlo ya, así que siga por el pasillo, ya conoce usted la oficina – le informo con voz neutral mientras Jonghyun se levantaba de un salto, nervioso. 

 

Avanzo por ese pasillo que ya le era tan conocido, sin poder despegar de su mente el recuerdo de la última vez que había visto a Taemin. En su mente seguía tarareando de forma inconsciente aquella canción que tanto le gustaba al menor. 

 

Saludo con una reverencia a todo el que se cruzaba en su camino mientras avanzaba hacia la última puerta de la derecha. Conocía el camino porque lo habían recorrido cientos de veces él y Joon, incluso a veces él solo. Era; podía decirse; incluso parte de una rutina que había mantenido con el paso de los años. 

 

Se detuvo entonces frente a la puerta y tomo aire mientras giraba el picaporte y entraba en la espaciosa oficina. Él imponente hombre tras el escritorio le miro con seriedad, teniendo una ligera idea del porque de su presencia. 

 

.- Joven Kim, llevaba tiempo sin verlo – fueron las primeras palabras que le dirigió el hombre mientras él hacia una ligera reverencia – Supongo que el motivo de su visita es el mismo de todas las veces, ¿me equivoco? 

 

Jonghyun negó mientras se adentraba en la habitación y soltaba el aire, preparándose para hablar. La imagen de Taemin recostado en su habitación, con resfriado; regreso a su mente, al igual que aquella canción… Su mejor amigo había desaparecido apenas un día después de que lo había visto y aunque había repetido la escena miles de veces… 

 

Solo esa mañana lo noto, algo que se le había pasado durante años y que podría llegar a ser relevante. 

 

.- He recordado algo más. 

 

 

 

Sulli se sacudió la cola de caballo mientras timbraba con suavidad en el apartamento que Kai compartía con Jonghyun. No podía mantener ninguna parte de su cuerpo en una postura debido a la preocupación. A pesar de las palabras algo tambaleantes que su amigo había murmurado por teléfono, sabía que había algo más… Algo que se escapaba a su comprensión. 

 

.- Quédate un momento quieta, Sulli – murmuro con suavidad él castaño que parecía más interesado en el pasillo que en cualquier otra cosa. 

 

.- Lo siento, oppa pero no puedo evitarlo – murmuro apenada mientras la puerta comenzaba abrirse y tras ella aparecía el rostro siempre serio de su hermano mayor - ¡Min oppa! – le saludo efusiva mientras ensanchaba su sonrisa, dejando momentáneamente de lado su preocupación. Si su hermano estaba ahí, Kai estaría bien. 

 

.- ¿Qué haces aquí, Seol Ri? – le pregunto con voz indiferente, pero no la estaba mirando a ella. Sus ojos estaban clavados en él castaño que mantenía una sonrisa cordial en su rostro. 

 

.- Vinimos a ver como esta Kai – ssi – se le adelantó a responder el otro mientras hacía contacto visual con su hermano. Sulli se sintió repentinamente desplazada – Estamos preocupados por él. 

 

.- Bueno, pues él esta dormido en este momento y no creo que… 

 

.- Oppa, vamos – le pidió mientras achicaba sus ojos y hacía un puchero tierno pero Minho no la miro en ningún momento – Solo queremos verlo por un momento y asegurarnos que esta bien. 

 

Y entonces, como si estuviese viendo una película frente a él, una sucesión de recuerdos. Aquella voz dulce y aquel gesto inocente hicieron estragos de nuevo.  

 

.- Por favor, hyung – murmuro él castaño con voz suave mientras hacia él también un puchero con sus labios. 

 

Minho miro al frente, tratando de controlar el ladito de su corazón desbocado y se hizo aún lado. Se sentía completamente desarmado, nunca había podido negarle nada, mucho menos cuando hacia aquella monería infantil. 

 

Pero él chico frente a él no era Taemin… Nunca sería Taemin. 

 

 

 

Onew sacudió el polvo mientras trataba de avanzar por la oscura habitación con la caja entre sus brazos. Trastabilló cerca de la puerta y evitó soltar un grito de dolor debido al pinchazo que se extendió por toda su pierna. Volvió a tomar aire y con el menor silencio salió del abandonado escondrijo. 

 

Una brillante sonrisa se formo en su rostro al verse fuera de aquel cuarto perdido en la oscuridad y cubierto con toneladas de polvo. Apretó con más fuerza la caja en sus manos y rió con una expresión alegre mientras pegaba pequeños saltos. 

 

Camino hasta su habitación mientras observaba que nadie estuviese a su alrededor y observase furtivamente lo que hacia. Si se enteraban que había tomado la caja… 

 

Negó con su cabeza sin perder su sonrisa y se encerró en su habitación mientras dejaba caer el objeto de cartón que rugió por el golpe y en cuestión de segundos se desbarato completa. 

 

.- Veamos que tenemos aquí – murmuro bajo mientras se sentaba en el suelo y comenzaba a pasar sus manos por los objetos ya roídos por el paso del tiempo, amarillentos y; prácticamente; deshechos. 

 

Observo con atención cada uno de los objetos mientras decidía cual sería de ayuda y cual no. Sus ojos pasaron por cada recuerdo que había sido guardado y su corazón no pudo evitar encogerse al comprobar el verdadero valor de cada una de esas cosas. 

 

Había una vida ahí guardada, miles de momentos que habían sido pulcramente guardados en una habitación sin salida. Condenados al olvido del que él ahora los rescataba. El problema era que desconocía si con ello hacía un bien o en cambio, como lo deseaba su amigo, hiciese demasiado daño. 

 

Un daño que podría nunca ser reparado. 

 

Onew suspiró mientras pensaba en ello, con una fotografía vieja en su mano. ¿Qué era lo que quería? ¿Cuál era el verdadero fin de todo eso? Habían montado aquel juego, habían ideado cada paso pero estaba seguro que ni él otro era plenamente consciente de su poder, de cómo influía en ellos. Para él solo era una diversión, una manera de… 

 

Lee Taemin tenía en sus manos las vidas de tres personas y podía lastimar a mucha más gente con cualquiera de sus decisiones. 

 

Y lo peor, tenía el corazón repleto de odio. 

 

 

Key trato de acallar sus gruñidos mientras los observaba desde la cocina del apartamento, con los ojos entrecerrados. Aquello no estaba bien, no era posible… 

 

Minho permanecía sentado con los ojos clavados en la venta de la sala, con el corazón latiéndole demasiado rápido para ser normal. Sentía demasiadas cosas dentro de si. 

 

Sulli estaba quieta frente a su hermano, moviendo su cabeza al ritmo de una canción insonora mientras movía sus pies de un lado al otro; un gesto infantil que siempre había sido propio de ella. 

 

Y él… Key gruño al clavar sus ojos en él joven castaño que estaba sentado junto a Minho y observaba todo en silencio, con un rostro imperturbable pero la mirada cargada de emoción.   

 

Key apretó con fuerza el vaso entre sus manos y mordió su labio mientras se daba a vuelta. Sin querer pensar mucho en todo y en nada al mismo tiempo. Estaba molesto por la actitud cruel de Jonghyun, estaba molesto por lo ocurrido con Kai pero más que molesto, estaba asustado… Estaba asustado de ver como la señales se repetían frente a sus ojos, como parecía perder a alguien que quería otra vez. 

 

Sin embargo, tenía un enredo de emociones al pensar en Lee SangMi y que este estaba sentado a metros de él, que… 

 

.- Por favor, permíteme estar a tu lado. Para regresarte todo el amor que yo he recibido – la voz del chico inundo la sala con fuerza y Key detuvo cada uno de sus pensamientos mientras lo escuchaba cantar. 

 

.- Esa canción – murmuro por lo bajo, sintiendo repentinamente ganas de llorar. 

 

.- Antes de que esta vida termine… – siguió cantando él castaño, que observaba fijamente a Minho, que había comenzado a respirar de forma agitada y mantenía los ojos fuertemente cerrados. 

 

.- ¡Qué bonita canción, oppa! – le alabo Sulli con voz animada mientras movía un poco más rápido sus pies - ¿Dónde la has escuchado? 

 

Él castaño solo se alzó de hombros y detuvo la armonía mientras mantenía en sus labios una sonrisa tranquila. Y se quedo el resto del momento en silencio, ladeando ligeramente su cabeza y entonando la canción dentro de su mente. 

 

Le encantaba jugar de esa manera… 

 

 

 

Cerró la puerta del baño con fuerza mientras trataba de controlarse. El aire parecía no querer pasar por sus pulmones y sentía que estaba por darle un infarto. 

 

Todo daba vueltas y Minho no sabía qué hacer. No se había sentido así desde mucho tiempo atrás; se había entrenado a sí mismo para controlar cada aspecto de sí mismo, para nunca dejarse dominar por sus emociones. 

 

Había aprendido que ama era algo sobrevalorado y que no debía mostrarse débil nunca. Durante siete años la vida había sido una tortura constante y tras miles de caídas, Choi Minho aprendió a que debía ser alguien insensible… 

 

Pero aquello ya era demasiado. A ver escuchado su voz en una garganta ajena simplemente había sido devastador para sí mismo, para su autocontrol y para su corazón dormido. 

 

.- N-no es cierto – murmuro para sí mismo con la voz entrecortada mientras trataba de tomar aire – N-no era su voz, solo lo imagine… N-no es cierto. 

 

Su mano se aferro a la cadena que siempre colgaba de su cuello, aquella T que brillaba mientras sentía que las vueltas que daba todo se intensificaban. 

 

Camino torpe hasta el lavamanos y abrió la llave, dejando correr el agua como siempre que se sentía mal hacia… Dejaba que el agua se llevase su eterna tristeza, su dolor profundo. 

 

.- ¿P-porque p-porque no funciona? – murmuro con la voz entrecortada mientras apretaba con más fuerza – Funciona p-por favor… 

 

“Hyung, me gusta esa canción”, la voz resonó dentro de su cabeza como un martilleo mientras el aire lo abandonaba definitivamente. Alzo los ojos y los clavo en su reflejo del espejo. 

 

Choi Minho de 13 años estaba frente a él. Con el cabello despeinado, el pecho subiéndole de forma descontrolada y con los ojos inundados en lágrimas que no había derramado en siete años. 

 

El Choi Minho de 13 años que había perdido a su mejor amigo se mostraba ante él, como si él tiempo nunca hubiese pasado. Como si aún estuviese estancado en ese momento. Justo cuando había perdido a Taemin, su pequeño y amado Taemin.  

 

“Minho lo atrajo en un abrazo apretado mientras aspiraba el olor a frutillas que desprendía de su cabello. 

 

.- Hyung – murmuro el menor con risa mientras se soltaba y lo miraba sonrojado – Casi me ahogas, hyung – le dijo divertido mientras hacia un puchero. 

 

Él más alto ahogo una risa y despeino con su mano el corte de hongo del menor, que inflo sus mejillas y aumento su puchero mientras le miraba refunfuñando. 

 

.- ¿Estas molesto conmigo, Minnie? – le pregunto ahora un poco temeroso de que fuese positiva la respuesta, su mano apretó inconscientemente la pequeña cajita que descansaba en su bolsillo, donde la cadena que pensaba regalar de cumpleaños estaba guardada. 

 

Él menor negó ahora con una sonrisa y enredó sus manos en el cuello del alto mientras reía libremente: .- Nunca podría enojarme con hyung – murmuro sonrojado entre risas – Lo quiero mucho.”  

 

Ese Choi Minho estaba ahí… Había estado ahí siempre. 

 

Y esas lágrimas que se habían formado, esas que llevaban tanto tiempo sin aparecer, se deslizaron por sus mejillas como si el tiempo no hubiese pasado, como si esos años no hubiesen transcurrido. 

 

Porque él seguía siendo el mismo niño asustado y su corazón; magullado por el dolor; seguía amándolo. 

 

Lee Taemin había sido su primer amor, ese amor infantil que es libre de limitaciones y se entrega de forma inocente. Ese que nunca se olvida… 

 

Y siguió llorando mientras caía al suelo y el agua seguía corriendo. Las lágrimas siguieron bajando, siete años de tristeza escondida y retenida. 

 

No, él tiempo no había pasado por su corazón. Ni un solo minuto, ni un solo día… 

 

Lee Taemin seguía ahí. Completamente intacto. 

 

(...)

Notas finales:

Grcias por llegar hasta el final y quererme un poco aún! Cierto que todavía me quieren?! CIERTOOOO?

 

Eh! En fin, en serio gracias por leere y si comentan, pues gracias tambien.

 

Hago este fic con todo el amor del mundo y trato realmente que quede bien para ustedes. Una cantidad de incoherencias que me imagino y acomodo para darles algo decente. 

 

Por otro lado le repito a ShawolDeLee que no me odie, no mucho por lo menos. Para mañana tengo su one shot de regalo y que espero que le guste!

 

A quienes dejan sus hipotesis recuerden que siempre hay premio y al comentario 99 (si lo alcanzamos con este cap) le TENGO DOBLE PREMIO!

 

Yuju!

 

Gracias de nuevo y no olviden comentar que hacen mi día más feliz!

 

Piensen cosas malas y hagan cosas sucias. o.O

 

Sombra96

 

PD: Vieron el nuevo MV de BoA.... Taemin estaba ASDHJJKDGJFJASFGJKSGFKJGJFJF O.O

 

Adelanto.

 

"Le miro en silencio, tratando de que su corazón no se emocionase con su sola presencia. Aquello no estaba bien, se suponía que no debía sentir eso. No después de tanto, no con todo con lo que él le había hecho.

 

No podía, no debía… No quería volver a sentir aquello.

 

Sin embargo, no podía evitarlo tampoco. Porque ahí estaba. Había estado intacto durante todos esos años, aunque él se lo había negado a sí mismo. Aquello solo causaba más daño.

 

.- ¿P-por qué? – pregunto para sí mismo mientras no dejaba de observarlo, molesto – Querido corazón… ¿Por qué siempre él?

 

Y Minho, a solo unos metros, sonrió con suavidad."


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).