Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

YOUTHFUL HATSUKOI [ACTU 28 DE JULIO DE 2013] por Naty Yokozawa

[Reviews - 2]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del fanfic:

Los personajes no nos pertenecen, son de la autora Shungiku Nakamura, nosotras solo los tomamos prestados para crear historias salidas de nuestras lindas y desquiciadas cabecitas para nada sádicas. Gracias por leer este humilde trabajo, una pasión compartida.




¿Cómo surgió esta historia?

  Ok, les explico de a que va. Mi amada kaedekamijou, -ravenK en amor yaoi- prácticamente todos la conocen tiene este fic completamente hermoso y divino, sin igual denominado "Junjou Rebel", entonces un día me dije tan inspirada como emocionada por sus historias "¿Por qué no hago un fic de la misma temática, pero con Sekaiichi Hatsukoi? Ok, primero debía verle un nombre. "YOUTHFUL HATSUKOI", que significa literalmente "PRIMER AMOR JUVENIL".

Luego dije... pero tengo tantos fics pendientes (de los cuales, a los que me leen les digo: lo prometo, no soy mujer de dejar cosas a medias, menos si las amo con todas las fuerzas de mi alma), en fin, pedí ayuda por facebook a ver si alguien se apiadaba de mí, en realidad solo pregunté si alguien me apoyaría (leería) un fic mpreg hecho por mi.
  ACLARO, ESTE ES EL PRIMER FIC MPREG QUE HAGO.   No esperaba que alguien me dijera: "YO TE AYUDO".   Pero no solo me lo dijeron, sino que estas personitas maravillosas son escritoras maravillosas y con experiencia, son mis escritoras favoritas, entonces morí de felicidad, fui a nirvana ida y vuelta y me dije ¿Qué estoy esperando? Y así comenzó esta odisea xD, perdón si los aburrí.









ADVERTENCIAS: ESTE FIC CONTIENE MPREG, ROMANCE, DRAMA, ETC (¿?)


---------------> Los pensamientos van en cursiva entre comillas.




MUCHAS GRACIAS A QUIENES HACEN REALIDAD ESTE FIC:



Fransela_r -o Butterflyblue- (Carolina Rojas) y Mayura Garay Mantilla
[colaboradoras directas de este fic, mis maravillosas betas, ayudan escribiendo, corrigiendo, etc.]




Las amo chicas, son mi inspiración y es un honor trabajar con ustedes.




Laura Puente (kaedekamijou autora de "Junjou Rebel") AMOR MIO, GRACIAS POR HACER QUE NACIERA ESTA HISTORIA, ERES FUENTE DE MI SABIDURÍA (?) gracias a ti, surgió la idea original. Te amo. 







Y GRACIAS A TODOS LOS QUE ME LEEN Y COMENTAN, POR AYUDAR A CONTINUAR CON ESTE PROYECTO.

 

 

~.~.~.~.~.~.~.~.~.~

Notas del capitulo:

En cuanto a los nuevos personajes, ¿Desean conocerlos, tanto físicamente como sus personalidades?

Quisiera saber para poder mostrarles las fichas de los personajes nuevos que aparecerán, (absoluta creación mía)

Sus respuestas, comentarios y deseos son muy importantes para mí y el desarrollo de la historia.

 

Gracias por pasar y leer.

Espero vernos pronto, si así lo desean.

 

 

 

 

Él quiso quedarse un minuto más, él desea poder cambiar de lugar con él y anhela con todas las fuerzas de su joven alma tan siquiera una segunda y última oportunidad, para remendar sus errores. Una oportunidad para verlo, para abrazarlo y gritarle cuanto lo ama. Porque nunca quiso lastimarlo y jamás se imaginó que las consecuencias de sus actos terminarían de aquella manera.



Más que nunca deseó no ser el estúpido joven incrédulo, inocente y enamoradizo que era porque aquel sentimiento llevó a la persona más importante de su vida hacia la fatalidad.



Y deseó más que ninguna otra cosa y por sobre todas las demás recuperarlo, aunque ello significase perderlo para siempre. Aunque el único lugar que conservare en su vida fuera la de mejor amigo.






 

 

*.*.*.*.*.*.*.*.*.*.*.*.












- ¡Haru chan! ¡Por aquí! – saludándolo con una mano en alto, lo llamaba el joven de cabellos rubios y ojos almendrados de entre la multitud de personas conglomeradas fuera de las puertas de abordaje donde cada quien esperaba ansioso a sus seres queridos recién llegados de algún viaje de vacaciones o quizá uno muy largo, mientras otros se despedían en medio de las lágrimas y mil emociones revueltas que dejaban detrás las separaciones sin importar si fuera a corto o largo plazo. – Déjame ayudarte. – una sonrisa de oreja a oreja se dibujó en su angelical rostro en cuanto logró divisar a su recepcionista.



- ¡Kaaaaai! – y literalmente lo echó boca para arriba, quedando el asechado debajo del primer aludido pese al detalle que el rubio lo sobrepasaba por 20 centímetros y el castaño recién llegado pesara menos, al final pudo más la emoción del recién llegado.


- ¡Ouch! –


- Ha pasado bastante tiempo. – la evidente alegría lo superaba y se dejaba evidenciar en el tono de su voz.


- Sí, pequeño… ¿Pero sabes? Me gustaría poder respirar… -


- ¡Hey! ¡No soy pequeño! ¡Acabo de cumplir 20 años, ayer! ¿Lo sabías? Y he crecido un poco, además – protestó en un dulce puchero dejando notar las finas y hermosas facciones de sus rostro, dejando deslumbrado sin saberlo a su interlocutor –



- Eh, sí, fui el primero en saludarte ¿Recuerdas? Ah, el segundo, claro luego de Onodera chichi… Ahora ¿Puedo respirar? – el castaño deshizo su efusivo abrazo.


- ¡¡¡Mira Amy!!!! ¡Kyaaaaa! ¡Son novios! ¡Y ni siquiera se avergüenzan de demostrar su amor en público! ¡Son taaan lindos! – una chica completamente desconocida tomaba fotos a diestra y siniestra desde su iphone 4 cuando otra chica se acercó a la que estaba delante de nosotros y se le unió en su celebración con chillidos y ojos de fan girl



- ¡No somos novios! – al muchacho ojiesmeralda se le subieron todos los tipos de colores rojo a su pálido y fino rostro, tomado completamente por sorpresa avergonzado en el acto y dándose cuenta de todas sus reacciones hasta el momento. – Lo siento… Yo…. Yo….


- Chicas, ¿Podrían darnos un poco de privacidad? No lo veo desde hace cuatro años y realmente deseo poder recibirlo como se debe, ni si imaginan cuanto lo he extrañado. – la voz completamente seductora del rubio salió sin mucho esfuerzo dejando ver el brillo de sus ojos almendrados y dejando con un hilo de baba a ambas fujoshis, con un pie al otro lado del paraíso. Formaban un perfecto cuadro, aun sin removerse ninguno de los dos del frio piso de la entrada del aeropuerto.


- ¿Eh? – fue entonces cuando Kai lo tomo desprevenido de la mejilla cubriendo su rostro y besándolo del otro lado, aunque pareciera que de perfil lo besaba directamente en los labios. La escena era por demás bella y culpable de más de una hemorragia desde aquella posición.


- ¡¡¡¡Nyaaaaaaaaaaaa!!!! –


- Jane, mejor démosles privacidad ¿No te parece? –


- Si, que lindos, ah espérame. – unas cuantas fotos más, y con un leve pesar se retiraron “disimuladamente” de la escena flotando en sus nubes ilusionadas.





- ¡KAI! – se separó de él, poniéndose de pie trastabillando por el apuro.


- ¿Qué? Si fue un beso inocente entre primos, en la mejilla nada más. –

- ¡Estás loco! ¡Y borra esa sonrisa! Si fuéramos primos de verdad –


- Jajajaja… eres tan lindo. –


- ¡Ya deja de jugar! Vamos, te ayudo a levantarte. –


- No estoy jugando. – terminó de decir en cuanto lo ayudó a ponerse de pie y éste momentáneamente se encontró con su rostro a escasos centímetros incomodándolo por unos segundos fugaces en que clavaron sus miradas una en la de otro. Uno rendidamente enamorado, el otro completamente ajeno al sentimiento provocado en su amigo.


- Esto… -


- ¿Nos vamos? “es mejor así” se intentó convencer por milésima vez


- Si, eh, acabo de notar que mis padres no han venido a buscarme. –


- Haru… como decirte esto… - es cierto, estaba reuniendo las fuerzas necesarias para poder decírselo, y encontrar una manera correcta pero el tiempo no me había alcanzado para cuando finalmente nos encontramos.


- ¿Eh? –




How can I decide what’s right
when you’re clouding up my mind
I can’t win your losing fight all the time
How can I ever own what’s mine
when you’re always taking sides.







- Kai, Está sonando tu celular... “decode de paramore, no has cambiado de tono ni de gustos Kai"

- Ah, si… discúlpame. – estaba tan nervioso e ido de mí que no le preste atención al número.



— ¿Hola? –


— Hola…. – miré instintivamente a Haru, suspiré sin querer y me di media vuelta.


- ¿Qué pasó? –


Es Ritsu chichi…. – durante un rato el rubio se mantuvo con el semblante serio, dedicándose solo a escuchar lo que le decían del otro lado.



- ….. Ya veo, por favor mantenme al tanto, si puedes ve a casa dentro de un rato, para llevarme un cambio de ropa ¿Va? Sucede que pasaré directo allí y de seguro me quedaré a dormir…. –


Claro… ¿Estás con él? –


- …. -


Ya veo… como me gustaría verlo… De seguro él no querrá verme ¿No? -


- No hay noticias. –


Entiendo. – el sincero sentir desde el otro lado del teléfono se hizo más que evidente y… doloroso, después de todo, se trataba de su hermano, y esos sí que son para toda la vida.


- Nos vemos. – fue todo lo que dijo y sin ninguna otra contestación del otro lado más que una corta despedida, ambos colgaron.








- ¿Era Sora verdad? – el castaño bajó automáticamente su rostro compungido, el rastro de su dolor era tan palpable que por más que intentara guardar su pesar, los sentimientos se desbordaban a través de su delicada voz.


- ¿Cómo…? – y nuevamente levantó la mirada hacia su amigo.


- ¿Cómo está? Espero que bien. – su sonrisa fingida fue la que más emociones produjeron dentro del pecho del rubio.


- Él… - si tan solo supieras, pensó el rubio, pero prefirió callar, no sería el que creara cizaña entre su mejor amigo y su hermano, pese a su propio corazón roto por el desamor provocado y resguardado con íntimo recelo en el único lugar donde siempre había estado y se había quedado; en su corazón. -… está bien, aunque te ha extrañado también, ustedes dos nunca pudieron resolver el problema que surgió en aquel entonces ¿Verdad? –


- ¿Eh? ¿Tu sabías…? –


- Haru, han pasado cuatro años desde que no se hablan, te has ido sin despedirte de él, créeme que no fui el último en enterarme. –


- Eso… si, era de esperarse. –


- Perdóname… -


- ¿Eh? ¿Por qué? –


- Creo te he recordado algo muy doloroso, después de todo, perdiste a un buen amigo en él…- "Haru ¿en serio sigues creyendo que nadie se ha enterado de tus sentimientos por él? Sigues siendo tan inocente e incrédulo como siempre. No quiero verte más en este estado". – Deberías hablar con él, solucionar sus problemas. - hazlo porque…


- Yo… no sé si pueda hacer eso. – el rubio tomo de sus manos para luego abrazarlo en un agradable y necesario confort, él solo quería lo mejor para el castaño.


- Tú puedes, si es lo que quieres. Yo solo quiero verte feliz. – “porque te amo… aunque nunca pueda decírtelo”.

- Gracias, Kai… eres muy importante para mí. Eres mi mejor amigo. – los chicos deshicieron casi sin querer el abrazo y se sonrieron, uno con una tranquilidad hallada, ahora la sonrisa forzada era de aquel que poseía un amor no correspondido desde su niñez.


- Vamos. Los chicos te están esperando. –


- Adivinaré, ¿Una fiesta sorpresa? –

- Jajaja, finge sorpresa. –


- Lo haré. – entonces lo recordó. – Oye, Kai… estabas a punto de decirme algo sobre mi papá antes de contestar el celular… -


- Eso… - realmente lo colocaba en una situación difícil, pero finalmente este momento había llegado, sabía que aquello no sería fácil para el ojiesmeralda y cada vez que este estuviera mal él también lo haría, más sin embargo le correspondía a él siempre conservar las fuerzas para poder sostener a Haru, quien por fuera podría aparentar ser muy fuerte, pero era el más débil de todos.








*.*.*.*.*.*.*.*.*.*.










- Exageras Takano-san. – esa costumbre suya de llamarlo por su apellido no se había perdido a través de los años, aunque en algunas ocasiones como en la intimidad lograse poder desinhibirse un poco más, cada detalle suyo, cada característica suya, hasta su carácter difícil y los mil defectos que pudiese tener eran el conjunto de toda su persona, persona que era en su totalidad objeto de su devoción.


- Ritsu, u obedeces o te castigaré de formas que ni te imaginas. – y el castaño sabía de sobra la seriedad en las amenazas de su esposo.


- No te atreverías. – ni siquiera tenía las fuerzas que se requería para regañarlo apropiadamente, en cuanto intentó levantarse siquiera puso los dos pies en el suelo cuando sintió un fuerte mareo y de no ser por el pelinegro que lo sostuvo de inmediato entre sus brazos, había caído de bruces dándose de pleno contra el suelo.


- Sabes que sí, llamaré al médico, no estás nada bien. – con sumo cuidado y una tierna delicadeza recostó al castaño en la cama. – Y de aquí no te vas hasta que te autoricen y estés completamente bien. –


- Pero yo… -


- No cambias tu testarudez por nada del mundo eh Onodera. – el ojiazul que cruzó en esos instantes la puerta de su habitación venía acompañado esta vez de un hombre de aproximadamente cuarenta años aparentados de facciones hermosas en verdad, ojos almendrados y cabellos castaño rubio, en verdad ya había pasado los cincuenta pero nadie apostaría a ello debido a su conservada figura y atractiva e imponente presencia. – Hazle caso a Masamune. –


- Yokozawa-san, Kirishima-san… gracias por regresar. –


- Y todavía con formalidades, déjate de tonterías, ya hace tiempo que nos llamas por nuestros nombres. –


- Es cierto, es que fueron tantos años que ya se me hizo una vieja costumbre. Pero ayer se quedaron todo el día, deberían ir a descansar –


- No te preocupes por nosotros, Ritsu… mi lindo osito estaba tan preocupado por ti que también nos quedamos por la noche e intercambiamos un solo turno con Masamune, cuando cayó dormido claro, aunque fuese solo por media hora, no quería apartarse de ti por un segundo siquiera, ya sabes en caso de asesinos seriales o asteroides… -


- ¡¿A quién llamas osito, imbécil!? Deja de molestarme, es muy temprano para eso… -

- Con que solo te gusta por las noches eh… ¡Ouch! ¿Por qué el codazo? –

- Aprende a comportarte. –

- Yokozawa, Zen… muchas gracias en verdad, no sabríamos que hacer sin su apoyo. – esta vez fue el pelinegro quien habló

- Tssk, no seas exagerado, no tienes por qué agradecer, para algo tienen que servir los amigos… ah los demás acaban de irse, como estabas dormido, tan solo decidieron no molestarte.-



- Todos han estado con nosotros, Takano tiene razón… significa mucho para nosotros su presencia. – su sonrisa se mantenía aunque sincera, débil y cansada. Resulta impresionante como hasta los más terribles pesares aligeran su peso si puedes soportarlos con las personas que te aman y saben demostrártelo. – Y ¿Sora? ¿No estaba con ustedes? – la cara de Yokozawa se descompuso por un instante pero se recompuso rápidamente para no hacerse notar, sin embargo fue el otro quien respondió.

- Le dije que fuera a descansar, se fue hace una hora. De seguro regresará la tarde. –

- Ya veo… - se sentía una atmósfera un poco distinta. Para apaciguar aquel incomodo silencio, Takafumi se acercó hasta Ritsu del otro lado de la cama, sentándose en un sillón cercano.


- ¿Cómo te sientes? – no le importó demostrar un poco de blandura, sobre todo para con él, quien luego de Masamune y quizá hasta mucho más que él se había convertido en un amigo muy cercano, tanto que decir que en el presente eran como hermanos sería poco decir.

- Cansado. Pero me mata este lugar, tan solo quiero irme a casa… -

- Estarás bien, pero deja de ser caprichoso, primero está tu bienestar, y no estarás aquí para siempre. –

- Lo sé… - suspiró profundamente. - Pero justo tenía que ser hoy. – pillando la intención en sus palabras, Takano, Kirishima y él se miraron entre sí.

- ¿Qué…? – comenzó a especular tardíamente el ojiesmeralda para cuando…








- ¡Papá! – con un poco más de cuidado que lo había hecho anteriormente con su amigo, un castaño ansioso había entrado como alma que traía el diablo a la habitación y abrazado a Ritsu con esa firmeza que se había hecho más fuerte durante los cuatro años de su ausencia.

- ¡¿Haru?! ¡¿Qué…?! Pensé que regresabas hasta en la noche…. Y aun así…. ¡Takano Masamune! – solo lo llamaba así cuando…

- ¡Yo no fui! ¿Por qué te enojas ahora conmigo? –

- No te enojes con papá fue Kai el que me dijo… - y el mencionado entró acto seguido a la habitación con las manos entrecruzadas entre sí en señal de perdón.

- Misericordia… - murmuró – Y gracias por cubrirme eh Haru, con amigos como tú no necesito de enemigos… -

- A mí no me culpen de su perfecta habilidad de permanecer con la boca cerrada heredada de su padre, eh. –

- ¡Takafumi! ¡Papá! – protestaron al mismo tiempo los dos rubios, sintiéndose atacados por nada.

- No te preocupes Kai, estás bien.-

- Pero si era yo… -susurró el pelinegro sentado a su lado.

- Haru, perdóname por no haberte ido a buscar del aeropuerto. ¡Takano, debiste haberte ido! –

- ¡Yo no lo sabía! Me enteré hace unos minutos nada más! –

- Papá, ya no te preocupes por esas cosas. – con cariño le tomó de las manos luego de haber limpiado unas inevitables lágrimas de alegría que recorrían por las mejillas del castaño mayor, quien ahora no podía dejar de sonreír tras volver a ver a su hijo después de todo el tiempo que pasaron separados durante los estudios secundarios en Inglaterra de éste, poseían unos lazos verdaderamente fuertes. - ¿Cómo estás? ¿Qué pasó? Incluso Kai no quiso decirme nada -



- Nosotros los dejamos a solas para que hablen, mientras hablo con estos dos. – añadió prudentemente Yokozawa. – Estaremos en la cafetería por cualquier cosa. – y luego de él, salieron sus dos amores uno tras otro, ambos como niños que acabaron de recibir un reto y estuvieran a punto de recibir su castigo.



Una piadosa mentira es aquella “mentira blanca” para no dañar a nuestros seres queridos, pero… ¿Quién dice qué es lo correcto y qué no? Y sobre todo… ¿Cómo podemos medir cuales son las penas que les dolerá menos a aquellos que amamos? Lo único que queremos es protegerlos. Pero por querer protegerlos terminamos dañándolos aún más.






CONTINUARÁ---------------------

 

 

Notas finales:

Tengan paciencia, aunque pueda parecer muy confuso.... se hará más difícil de comprender (?) mentira xD ya entenderán poco a poco de a como va, y gracias por su elección, espero no decepcionarlos.


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).