Viernes por la mañana.
Entre al aula deshabitada, en esa clase todos llegaban tarde incluso el maestro, era una mañana apacible, como si nada fuera a salir mal, pero…
-Sí lo sé, al rato te veo…- dijo una voz conocida.
-Ash, eres tú-se quejo Lina.
-Si tanto te molesto, solo vete, nadie te obliga a estar aquí.
-Lo sé, oye sobre lo de la cafetería…-a esto respondí con un “¿hum?”
-Escucha, yo no sabía sobre lo que sentías y pues me siento un poco…-quería que se dejara de habladurías y fuera al punto.
-al grano Lina-le dije fríamente.
-Está bien, yo lo siento y no diré nada.
-¿Asi como casi lo dices en la cafetería?
- ¡Escúchame…para mi es casi imposible! creer que tu Carter Woods Stevenson, sea capaz de tener sentimientos, incluso capaz de estar enamorado-me enoje por su comentario.
-¡Y ahora tu escúchame…tu no escuchaste nada, jamás escuchaste nada, para ti, yo no estoy enamorado de nadie, no hay ningún secreto que guardar, y lo de la cafetería nunca paso ¿de acuerdo?-se sorprendió un poco, pero luego se tranquilizo.
-de acuerdo, pero no me pidas que no me imagine yaoi con ustedes dos- me dijo sacando sus cosa y el aula comenzó a llenarse de gente. La primera clase de los viernes, siempre me toca con Lina, y tengo que soportarla, no me importa que sea amiga de mi hermano, no soporto a las personas, y mucho menos las que gritan y siempre buscan pelea como ella, pero EL es diferente, El es único, El me cae bien, a Él lo amo, así con toda la palabra, me acostado mucho aceptarlo, pero después de tres años con el mismo sentimiento, al final me termine rindiendo, ¿se preguntan quién es, cierto? Pero no, no les diré de quien se trata, porque puede que vayan de chismosos.
La clase siguió aburrida como siempre, yo seguía haciendo garabatos y sin pensarlo dibuje un estúpido corazón, no es que odiara el amor, es solo que me han enseñado que siempre estarás solo, que todo es temporal, y que incluso la vida también se va, todo se va cuando mueres, y es por eso que no debes de aferrarte a nada, porque si lo haces nunca aceptaras la muerte y no descansaras en paz.
Pocos minutos después de que la maestra comenzara a escribir, me llego una nota:
Perdón, en serio, no me gusta ser odiada y menos por ti, terminaría destrozada D:
Esa chica, aparte de molesta, de egocéntrica, de escandalosa, de pedófila, de pervertida, de acosadora y de “discreta” es muy insistente.
Si, si, ya deja de molestar :|
Le conteste.
:D gracias.
Mi mañana se había arruinado gracias a ella, me recordó cosa que no quería recordar. Después de varios minutos de estar haciendo rayones en mi libreta la primera clase termino. Camine rápido a mi otra clase.
La sala estaba vacía para mi suerte, torcí mi cuello y masajeé mis hombros, me sentía cansado.
-que puntual- dijo otra voz familiar, y un poco gangosa, porque cierta persona pervertida lo golpeo contra la frente de Clyde y al pobre Harry se le rompió la nariz, es un brabucón de lo peor, pero tiene su punto débil. La nariz.
-Harry…-lo mire desganado.
-Carter…-le respondió imitándome.
-tengo sueño-dije chocando mi mejilla contra la banca.
-no se nota-dijo sarcástico.
La sala comenzó a llenarse con algunos alumnos.
-hola chicos- Llego León.
-holi-dijo Harry.
-hola-dije desganado.
-¿Qué te pasa Carter? te ves tan…-me pregunto León.
-tiene sueño-dijo Harry.
-con qué es eso ¿a qué hora te dormiste?- quizá León pereciera grosero y peleonero a simple vista, pero él era amable y feliz, o más bien tonto, demasiado tonto, pero…pero…
-el estúpido de Thomas, se la paso molesto con migo y con Lina todo el día, por lo que paso en la cafetería, no me dejo dormir ese maldito.
-no le digas así a tu hermano, que no ves que lo haces sentir mal, yo siempre le dijo a Harry que lo quiero.
-y debería dejar de hacerlo- se metió Harry.
-¿por qué? Si eres mi hermano menor-Harry se sonrojo, en efecto Harry era el menor, por 11 meses León era el mayor -Los hermanos mayores deben de proteger a sus hermanitos- decía León sacando una paleta.
-pero ni yo, ni Thomas necesitamos ayuda “fraternal” bro…- dijo Harry.
-¿por qué?-pregunto León, yo solo los veía.
-porque es tonto- decía Harry.
-hablando de tontos…mira ahí va Clyde…y se ve demasiado feliz-dije mirando del otro lado de la ventana, se encontraba Clyde hablando emocionado con Lina.
-ahhhh…-suspiro Harry-…al fin algo de acción.
Pronuncio para luego ir tras el, solo se vieron las espalda parecidas de dos “mastodontes” bien fornidos, Harry más pequeño que León, cabello rizado y color dorado, León más alto pero menos musculoso, cabello castaño rojizo y de igual manera rizado, ambos guapos y grandes atletas pero un poco tontos…ok muy tontos, salvo Harry quien es muy listo en matemáticas.
Ambos iban de tras de aquel tonto…tan tonto, aun no sé cómo puede gustarle a mi hermano.