Les tomo una semana a los Namizake empezar adaptarse a la vida en su nuevo hogar, estaban en el exterior conociendo la ciudad, escuchando con atención las indicaciones del guía que les asigno Orochimaru, por lo que no se enteraron de la llegada de los nuevos habitantes de la mansión, los cuales se dirigieron de inmediato a la habitación que les había sido destinada, el grupo parecía bastante normal, sino fuera por dos cosas, todos tenían los cabellos plateados, desde el más joven hasta el más viejo y eran bastante atractivos, uno de ellos gruño tirándose en un sofá y comenzó a quejarse.
— ¡Fuking Shit! ¡Estoy agotado del maldito viaje me duele la espalda por estar sentado tantas horas! ¡Y cuando al fin llegamos, todos vamos a compartir la misma habitación! Vieron el tamaño de ésta casa, el amigo de nuestro alfa bien nos podía haber asignado una habitación a cada uno ¡Pero no! ¡Estamos atrapados como ratas en su nido!
—Ma, ma, deja de quejarte Hidan somos lobos y acostumbramos vivir en manada, además si no te has dados cuenta hay cuatro puertas, deduzco que tres son habitaciones y uno el baño, así que con el sofá cama en él que estás sentado suman cuatro, estaremos más que cómodos—replicó un hombre cuyo rostro estaba oculto por un tapa bocas, apartando su atención del libro que estaba leyendo— ...por otra parte conociéndote puedo afirmar que éste cuarto es más grande que ese agujero de ratas al que le dices apartamento.
— ¡No te metas conmigo Kakashi! ¡Es lo mejor que consigo con mi puto sueldo! ¡No soy un genio de &%$# como tú! ¡ i Mi salario de mecánico, no da para algo mejor, sobre todo cuando tratas de ahorrar un poco de dinero!...Me quedo con el sofá cama, la televisión gigante ésta aquí, además se siente más cómodo que la litera donde dormía.
— Estoy seguro que sí, apuesto que tenías uno de esos colchones, cuyo relleno se sale por todas partes y uno de sus resortes que tratan de clavarse en tu hígado, pero donde dormirá cada quién, no te toca a ti decirlo en ausencia de Jiraya es papá quien toma las decisiones.
—Ya dejen de pelear ustedes dos, Kakashi comportante recuerda que Hidan es cien años menor que tú, es apenas un cachorro, una de las habitaciones tiene doble cama esa será para Kabuto y Kimimaro, tú e Hidan pueden tomar la habitación que más les guste yo dormiré afuera.
— ¿Hay algún motivo para ello padre?
—Ninguno en particular, sucede que arriba se alojan dos cachorros de zorro, son alfas según me advirtió tu abuelo, no quiero que ocurra una pelea, esta noche hay luna roja y las ansias de encontrar pareja se disparan y todo macho es visto como rival, eso va especialmente para ti Kakashi qué eres el mayor y aún no has podido encontrar compañera, tu lobo interno podría salirse de control—indico un hombre de unos cuarenta años de edad el cual se llamaba Sakumo.
—… ¿Porque la advertencia va para mí y no para Hidan? Es él que puede causar problemas.
—Debido hijo mío, a que el sigue bajo mi mando y el de tu abuelo como alfas de la manada, tu ya estás en la edad de tener tu propia pareja y territorio.
— ¡Escuchaste eso espantapájaros ésta diciendo que soy más confiable que tú!
— Lo que dijo, es que a diferencia de ti que solo tienes que encontrar una chica y “desahogarte” Kakashi necesita establecerse y no estar tonteando por todos lados con humanos.
— ¡Eso no es lo que escuche, cuatro ojos!
Sakumo entorno los ojos, la manada necesitaba desesperadamente de una hembra y pronto, los enfrentamientos constantes de testosterona por probar quien era el más macho no le estaban haciendo bien al grupo, tal vez con una chica presente se comportarían mejor, un “deja de comportarte como un idiota eres muy ruidoso” salió de la boca del miembro más joven de la manada Kimimaro, él y Kabuto se dirigieron a poner sus cosas en la habitación que les toco y por las exclamaciones que escucharon estaba encantados con ella…tal vez había oportunidad para su manada después de todo sólo tal vez, suspirando les dijo a los dos varones en la sala.
—Como sea, iré a tomar un baño…no se pongan a pelear entre ustedes mientras no estoy ¿Entendieron?
— No hay problema viejo, solo no te acabes el agua caliente.
Una vena empezó a temblar en la frente del aludido, dirigiéndole una mirada reprobatoria a los ojos violeta, su lenguaje dejaba mucho que desear, moviendo la cabeza con resignación, se dirigió al baño escuchando aprobatoriamente el sonido de un libro golpeando algo duro, seguido de un ¡Auch!
Él ultimo en ducharse fue el enmascarado, dándole la oportunidad a los más jóvenes de hacerlo primero, para que estos descansaran del largo viaje, se había dormido en la bañera leyendo su libro favorito, por lo qué la casa estaba tan silenciosa, que cuando los rubios estuvieron de regreso de su paseo de reconocimiento, no notaron la presencia de los recién llegados, mientras Minato se fue a la cocina los gemelos y Deidara se encaminaban a sus habitaciones para tomar un baño.
El sabroso olor de la carne friéndose despertó al líder de los lobos qué atraído por el aroma se dirigió a la cocina, paso unos minutos tratando de recordar donde había visto al rubio con delantal rosa, sonriendo de inmediato, con voz cargada de diversión comentó apoyándose en la puerta.
— Sabes Minato eres el único lo suficientemente hombre para poder llevar esa cosa sin sentir que menoscaba su masculinidad.
El aludido volteo para ver quién hablaba exclamando luego de hacer memoria— ¡Sakumo, me tomaste por sorpresa! ¿Tu familia ya ésta aquí? No me di cuenta cuando llegaron.
— Desde hace cuatro horas, están tan cansados que desplomaron literalmente como rocas sobre sus camas, dudo que haya fuerza humana que los despierte.
— Eso significa que tendré que cocinar más carne ¿Ninguno se ha hecho vegetariano aún, verdad?
— Y dudo qué lo hagan alguna vez, aparte, tengo dos…no tres jóvenes qué están en crecimiento, comerán el doble.
— Y yo que pensaba que no volvería a cocinar tanto, es bueno qué Orochimaru sea tan previsor tengo toneladas de comida en el frigorífico.
—¿Ya no le dices abuelo al señor Orochimaru?
—Es difícil nombrar así a alguien que se ve como si fuera mi hermano.
Mientras los dos adultos intercambiaban impresiones, la luna roja surgió de entre las nubes, dejándose ver en el cielo nocturno, un aroma muy diferente al de la comida abrumaron los sentidos del hombre acostado en la tina cuyos ojos brillaron rojos al percibirlo levantándose como si estuviera en trance, escurriendo agua por todo el piso cuando salió del baño y camino por la sala, lanzándole un gruñido bajo y gutural de advertencia al joven lobo en el sofá, el cual maldijo encogiéndose para no parecer una amenaza o competencia, cuando el alfa se dio cuenta de que éste no representaba ningun desafio a su autoridad, se encamino hacia el lugar de donde provenía tan encantadora esencia, subió sin darse cuenta las escaleras y abrió la puerta detrás de la que se ocultaba la tentadora fragancia, dentro una preciosa criatura grito algo que no alcanzo a discernir, demasiado enfocado en las feromonas en el aire, de repente vio salir corriendo de detrás de una puerta a alguien exactamente igual, con la diferencia que unas lindas orejitas de zorro de color azul coronaban la rubia cabeza y una cola asomaba por debajo de la toalla, garras de Kakashi se crisparon enseñando los colmillos, ambos eran una pareja potencial; poderosos, sanos, fuertes, fértiles y sobre todo hermosos y con olor provocativo, la cola del lobo se alzo orgullosa a la vez que soltó un gruñido complacido, entre tanto su mirada se torno más bestial observando con deseo a los dos rubios semi-desnudos, fue lo último que vio antes de quedar sin sentido tendido en el suelo, luego de recibir un tremendo golpe en su cráneo.
Lo había sucedido era esto, cuando el hombre lobo abrió la puerta Naruto estaba dentro de la habitación en bóxers, gritando a los cuatro vientos ¡Pervertido! En cuanto vio a un desconocido en completo estado de desnudez, dejando ver la enorme “excitación” que se alzaba dura y erguida entre sus piernas, a su grito acudieron su tio y luego su padre que golpeo en la cabeza sin pensarlo al intruso que estaba en el cuarto de sus hijos con la sartén que tenía en la mano, Deidara tuvo que agarrarlo por la cintura para que no terminara matando al desafortunado hombre lobo, por su parte Sakumo cargaba a su hijo y lo llevo a uno de los sofás que estaban en la parte de abajo, tapándolo con su camisa y maldiciendo en silencio a su padre por haber omitido decirle que los niños eran portadores alfa no machos, como había creído en un principio.
En la conmoción no se dio cuenta, qué todos lo habían seguido y que los miembros de su grupo habían salido afuera para ver de qué se trataba todo el alboroto, por lo cual se vio rodeado de un padre furioso y un montón de curiosos, entre tanto los gemelos que habían aprovechado la confusión para ponerse unas camisetas desmangada y unos shorts bajaron de inmediato sentándose en unos de los sofás, Menma golpeo disimuladamente la rodilla de Naruto señalando la cara del varón inconsciente, ya que habían visto “la otra parte de él” en todo su esplendor no encontraba ninguna razon para no verle el rostro, no se podía negar qué el hombre era muy guapo, la nariz recta, los labios delgados, los pómulos altos combinados con un mentón fuerte, pero no excesivamente pronunciado y la cicatriz en su ojo izquierdo, le daban un aire de masculinidad innegable, el mayor de los gemelos miro descaradamente el cuerpo de su “atacante” musculoso y definido de hombros anchos y abdomen marcado con las piernas musculosas y torneadas, la voz contrita de Sakumo evitó qué siguieran comiéndose con la vista a un desmayado Kakashi, fijando su atención en el padre de los chicos.
— Siento lo que paso Minato, al parecer mi padre menciono que tus niños eran alfas, pero no cual tipo de alfas.
— ¡¿Se supone que esa es una excusa, para que un hombre completamente desnudo entre en el cuarto de mis hijos, e intente violarlos!?
—Mi hijo, jamás intentaría violar a nadie, estoy seguro que ni siquiera era consciente de lo que pasaba, su lobo interior debe haberse hecho cargo al sentir las feromonas en el aire, como canidos somos compatibles así que debe haberse sentido atraído, portadores son raros, un premio porque garantizan crías de sangre pura ya sean de la especie de la “madre” o la de su pareja, es imposible para un alfa resistirse.
— ¿Y eso debe importarme? Porque déjame decirte que solo me estás dando motivos, para sacar de otro sartenazo a tu hijo de su miseria ¿Aparte, si eso es verdad porque no te afecto a ti su aroma?
—Porqué estoy consciente, a diferencia de otros lobos, los blancos tenemos control absoluto sobre nuestro instinto animal…la mayoría…
— ¡Shits! ¡No pueden dejar de nombrarme, no soy el que esta inconsciente en un sofá totalmente desnudo tapado con solo una camisa, por tratar de irrumpir en el cuarto de un par de lindas rubias!
— Iba a decir la mayoría de las veces, no saltes a conclusiones hasta que termine Hidan— replico el líder alfa sonriendo ante la mirada de desconfianza, antes de añadir— tú sigues tus instintos estés como lobo o no, así que me atengo a que tienes el de supervivencia mucho más desarrollado qué el de mi hijo.
—¡Ey!— Grito el interpelado, provocando risas de los jóvenes Namizake y del clan lobo, el grupo de muchachos intercambiaron miradas curiosas, para ese momento Minato había perdido la paciencia y volvió a inquirir con la voz más calmada que pudo articular.
— Eso no explica porque tu hijo entro al cuarto de mis hijos completamente desnudo y a medio transformarse.
—Deduzco que estaba dormido y los olio y su parte animal se hizo cargo, ésta en la edad de tener una compañera y formar su propia familia, pero no ha tenidos suerte hasta ahora.
— ¡Oi! ¡Oi! Lamento interrumpir pero en apoyo a lo que dice él jefe, cuando paso por la sala Kakashi estaba el maldito modo de, si te mueves te mato ¡Maldita sea que el exhibicionista de ahí me dio una advertencia que me arrancaba el cuello si me interponía en su camino!
Un quejido hizo que todos fijaran su atención en el hombre lobo el cual hizo el ademán de levantarse, exclamando—¿Qué paso? Siento que me golpearon con un bate, la cabeza me da punzadas de dolor…¿Aparte cual es esa fragancia tan increíble?— dijo abriendo los ojos para encontrarse con un par de hermosos rubios y las respuesta a su pregunta, les dio un vistazo y luego se miro a sí mismo, sintiéndose avergonzado de inmediato, no solo no estaba presentable estaba como su madre lo trajo al mundo y mostrando más de lo debido…¿Y estaba tapado con la camisa de su padre?
Giro su cabeza en todos direcciones, el rubor subiendo a su mejillas, estaba desnudo delante de un montón de desconocidos, su familia no importaba, pero si los gemelos de aroma provocativo y el rubio amenazante de la sartén que lo observaba con un aire asesino ¿Y... esa era una chica? poniendo sus manos al frente para cubrir sus genitales, aventurándose a preguntar con voz vacilante.
— ¿Papá?
— ¿Se supone qué debo creer ese acto, de qué no se acuerda de nada?— replicó Minato bastante indignado.
— Es tu decisión pero yo no me apresuraría a juzgar sin conocer los hechos.
El mayor de los rubios se quedo reflexionando durante un rato antes de responder— Escucha estoy demasiado, ofuscado y enfadado debido a que un hombre desnudo decidió irrumpir en el cuarto de mis hijos adolescentes así que no me puedes pedir que sea objetivo con dicho hombre por más que él sea tu hijo, así que dejaremos las presentaciones y saludos para mañana, si me disculpas voy a preparar la cena, agradecería que mantuvieras mientras tanto un ojo puesto sobre tu hijo para evitar otros incidentes, Naruto Menma vayan arriba yo les llevare la comida.
— Sí, papá.
— Y Menma,
— ¿Sí papá?
— Mañana le enviaras un mensaje, agradeciéndole a tu abuelo por la cadena que te mando, no quiero saber lo que hubiera pasado si tu olor y calor hubiera sido disminuido en gran medida por el dije que llevas en el cuello.
Los chicos sabiendo mejor que nadie que estos no eran momentos para discutir con su padre se dirigieron a su habitación, Sakumo también decidió ir a su habitación tenía que curar la herida en la cabeza de Kakashi seguido de cerca por Kabuto y Kimimaro, incapaz de contenerse por más tiempo Deidara comento.
— Y yo que pensaba que nuestra estancia en ésta casa iba ser tranquila hum, no han pasado ni dos semanas y ya un hombre trato de atacar sexualmente a mis sobrinos y casi murió asesinado por mi hermano mayor hum...creo que vivir aquí va a ser entretenido en más de un sentido.
—¡ La #$%& %&#@! ¡Eres un chico y yo que creía que eras una chica de pecho plano!
— ¡Si, soy un hombre! ¿Tienes algún problema con eso? Hum.
— No maldita sea, tienes cara de ángel, se ve que es de familia, porque tus sobrinos están muy buenos también.
—Así qué opinas eso hum ¿Te gustaría que se lo comunicara a mi hermano?
— No gracias, estarán muy guapas y olerán de forma seductora, pero a diferencia del tonto desnudo, no tengo interés en enfrentarme al demonio del delantal rosa y aura asesina, no soy suicida.
Riendo suavemente el rubio de pelo largo le tendió la mano— Creo que a pesar de tu boca me caes bien y podemos ser amigos, me llamo Deidara, Deidara Namizake.
— Bueno yo soy Hidan y en cuanto a mi apellido no tengo, mis padres y toda mi familia murió así que no lo sé, pero pertenezco a ésta manada desde que me adoptaron, así que puedes decir que soy un Hatake.
—Bueno entonces Hidan Hatake aunque me gustaría quedarme más tiempo conversando contigo, no puedo, debo ir a la cocina para asegurarme qué mi hermano sobre-protector no envenene “por accidente” el plato de tu amigo.
—Te aseguro que te lo va agradecer, sin embargo y ha toda esta puta conmoción ¿Dónde rayos están el lobo viejo y el vampiro decrepito, dueño de la casa?
— Salieron hace tres días y no sabemos por qué o a donde, pero si fuera tú yo no llamaría vampiro decrepito a nuestro anfitrión, bien aparenta la edad de mi hermano.
— ¡Holy shit! Y se supone que es más viejo que el viejo, vaya noticia… en fin te dejo con tus quehaceres tengo que reponerme de la impresión y aprovechar para molestar a Kakashi es una rara oportunidad para fastidiar al señor perfecto.
Deidara rió de buen humor, ignorando la forma de hablar de su nuevo amigo dirigiéndose a la cocina, a calmar un padre extremadamente irritado, los niños estaban bien y aparte de un susto no paso nada grave y el hombre aunque no era de su tipo, era bastante joven y atractivo, si hubiera sido un tipo viejo, feo gordo y calvo con malas intenciones, él mismo hubiera ayudado a Minato a despellejarlo vivo y deshacerse del cadáver, de ningún modo permitiría qué nadie dañara a sus sobrinos.
Menma entre tanto, estaba encerrado en el cuarto de baño, el colgante atenuó su situación pero no suprimía que estuviera en calor y hubiera una luna de apareamiento afuera, mordiendo sus labios para no ser oído por su hermano que estaba en la otra habitación revisando la computadora, tomo su miembro y empezó a acariciarlo lentamente para luego tomar un ritmo más rápido al imaginar, al hombre hermoso desnudo y erecto que irrumpió en su habitación, nunca nadie le provoco tales sensaciones, ni siquiera con su novia cuando se besaban y tocaban el uno al otro, sin embargo nunca paso a algo más serio e intimo, nunca hubo la motivación necesaria para ir más allá, su liberación llego con un gemido sordo su cuerpo temblando por la oleada intensa de placer sexual que lo invadió, al terminara miro con desagrado el liquido blancuzco en su mano lavándola con rapidez.
Cuando salió del cuarto vio a su hermano menor navegando en las páginas que contenían información sobre la ciudad donde estaban, a veces se preguntaba porque la gente los confundía, eran iguales físicamente pero mientras Naruto era dulce e ingenuo, el era más astuto osado y de naturaleza más sensual… o quizás estar en celo afectaba su modo de pensar, en cambio a su hermanito no parecía afectarlo tanto , se tiro en la cama, ya era un adulto pero tal parecía que su padre y su tío no se daban cuenta de ello y a diferencia de su gemelo, no estaba conformé con la situación…sin embargo a pesar de todo no podía negar una cosa, hoy fue un día interesante y los que seguirían a continuación prometían serlo mucho más con la compañía de ese sexi lobo nudista, cerró los ojos la cena tardaría en estar lista una pequeña siesta le vendría bien mientras esperaba.
Por causalidad del destino ese mismo día, varias horas antes y a miles de kilómetros de distancia, un joven caminaba por los pasillos de la enorme residencia Uchiha. La antigua mansión mezcla de gusto ingles japonés se erguía perdida y orgullosa entre el bosque, suprimió un gemido de impaciencia bajo su acostumbrada mascara de indiferencia, cuando por enésima vez en el día vio a uno de los criados arrodillarse y decir con una mezcla de admiración y temor "ouji-sama" ser llamado príncipe todos los días no era de su gusto (y lo había tenido que escuchar cada vez que tropezaba con uno de los sirvientes por los últimos diez años) con voz fría e imperativa preguntó.
— ¿Dónde se encuentra, mi abuelo?
—Ou-sama lo espera en los jardines, su alteza.
El joven increíblemente guapo de piel pálida y larga cabellera negra se dirigió al lugar indicado, viendo a su abuelo meditando tranquilamente vestido con una Yukata azul justo en la entrada del amplio y hermoso jardín, espero pacientemente hasta que éste abrió los ojos y le pregunto.
— ¿Así que piensas abandonarme tan pronto Itachi?
Sentándose respetuosamente respondió— He prolongado mi estancia aquí, cinco años más de lo previsto, no creo que sea tan pronto.
— Quieres escapar de ésta casa y dejarme sólo con mi aburrimiento.
— Podrías venir conmigo y estar con nosotros un tiempo abuelo, ambos sabemos qué odias tanto como yo esas ropas que llevas puestas, tu estilo siempre ha sido más occidental.
Los ojos del hombre brillaron traviesamente antes de responder— Sí alguno de los sirvientes pudiera escucharte, se sentiría escandalizado de la forma de hablar de su príncipe.
— Entonces es bueno que no puedan hacerlo.
— Éste anciano se sentirá muy sólo sin ti ¿Lo sabes niño?
— Abuelo tu y yo sabemos que ésas lejos de parecer tan viejo como quieres aseverar—Divertido ante la respuesta el hombre miro el lago, la larga cabellera ondulada meciéndose con el viento, los ojos negros fijos en la superficie de cristal en la que se reflejaban el cielo los arboles y las flores.
—Puede ser—concedió al fin el hombre cumpliendo con los ojos de su nieto— Pero una cosa es la edad que aparento y otra la que tengo, a veces la posición que ocupo pesa un poco sobre mis hombros sobre todo porque estoy sólo.
El cuervo lo estudio con detenimiento antes de preguntar— ¿Abuelo porque no lo buscaste? Ya sabes a nuestra abuela.
— ¿Así que tu padre te conto sobre eso? No tengo el tipo de amor de Fugaku capaz de esperar y buscar incansablemente por años a Mikoto, además tenía a mi cargo un recién nacido al que proteger esa mi prioridad y era más engreído e ignorante en aquel tiempo, esperé que me buscara, como cualquier otro hubiera buscado a su señor, amante y padre de su hijo, pero olvide que mi Gabriel nunca fue como cualquiera, que era mi compañero mi pareja destinada, cuando me di cuenta de mi error, lo busque frenéticamente por años, pero jamás lo encontré así que deduzco ésta muerto.
— Mi padre no entiende porque aceptaste su muerte tan fácilmente.
—Lleva mi marca, a no ser que tenga una voluntad de hierro y una terquedad incalculable, debería estar consumiéndose en deseo por mí y buscándome... es eso o que hubiera otros motivos por los que no le afectara, creo que lo que pasa con mi hijo es que en secreto desea saber cómo era su verdadera madre, no es de extrañar con el fiasco que resultó ser esa mujer— los ojos del vampiro parpadearon en rojo y una expresión cruel apareció en su rostro a la vez que sus colmillos se alargaron.
—No debes enfurecerte, vas envejecer si lo haces.
El hombre rió ante lo dicho por su nieto, calmándose de inmediato antes de comentar con diversión— aparento 45 años, teniendo en cuenta la edad que tengo creo que está bien.
—Debería ser menos.
— Debería— coincidió el otro—pero no me arrepiento de haber utilizado esos 18 años de la manera que lo hice, lo único que me molesta es no haber llegado a tiempo, para evitar lo que paso con tu padre y contigo.
— No es algo que alguien pudiera prever, ni siquiera tú, lo importante es que logramos proteger a Sasuke.
— Si, tienes que mandarme ese niño pronto, necesita entrenar, pasar abrazado a la pierna de su padre no le hará bien.
— Es preferible que tú vengas con nosotros, la última vez que vi a mi hermanito tonto, tenía un ego más grande que él mismo, moriría aplastado bajo este si escucha a cada momento el “Ouji-sama Ouji-sama”.
En ese momento como si se tratara de una maldición ambos escucharon una voz femenina muy melódica que dijo colocando una bandeja con una tetera un par de tazas de té y unos dulces.
—Ou-sama Ouji-sama, aquí ésta su té.
Una carcajada resonó en la cabeza del joven, qué miro a su abuelo qué se veía muy serio y no había despegado los labios, ignorando la dulce mirada de la joven mujer tomo la taza de té en cuanto se retiro y bebió un sorbo.
—Creo que es mejor que hablemos, en lugar de comunicarnos por telepatía es necesario que te acostumbres a ocupar esa voz tuya, tendrás que utilizarla mucho de ahora en adelante—indicó el hombre mayor—por otra parte de la forma tan intensa que nos vemos mis sirvientes deben creer que estamos disgustados— luego de probar su té añadió, mirando a su nieto—… le gustas a Kaoru.
—Me di cuenta, pero no puedo corresponder a sus sentimientos, es humana, la he visto crecer desde qué era niña, la idea de llevarla a mi cama ésta fuera de lugar, sentiría que me estoy acostando con mi hermana pequeña.
— Somos vampiros eso no importa, hace cien años tu hermano y tu no dudaban en estar a la vez con una hermosa doncella.
—Como dijiste fue hace cien años, he madurado desde entonces, además siempre fuimos cuidadosos y borrábamos la memoria de nuestras víctimas.
—No todas.
—… No todas, ella dijo que no quería olvidar la noche más maravillosa que tuvo en su vida.
— Una bella y joven viuda cuyo octogenario esposo murió en la noche de bodas, supongo que ser amada por dos hombres jóvenes y hermosos, fue la cosa más increíble qué experimento jamás, no es extraño que no quisiera olvidarlos.
— Abuelo tengo que irme.
— Escapas siempre que hablo sobre el amor, cuando llegue tu momento no te importara quién o que se interponga en tu camino, destruirás los obstáculos y te apoderaras de esa persona sin pensar en las consecuencias, el verdadero amor para un vampiro no es algo efímero, es tan largo como nuestras vidas, tan apasionado como una llama y una obsesión qué carcome nuestras entrañas, es lo que le paso a tu padre con Mikoto y a mí con Gabriel.