Paso un mes y los gemelos que ya se sentían bastante seguros para movilizarse solos por la ciudad, decidieron pasear y buscar a la vez un trabajo, ya qué aunque a Menma por un momento le había divertido la idea de provocar a Kakashi con el Icha Icha leyéndolo por “ casualidad” en cualquier lugar donde él tuviera que pasar, no tuvo la oportunidad de probarla con la llegada repentina del dueño de la casa y la eterna presencia de su padre, así que aburrido y cansado de esperar sin hacer nada decidió que trabajar era una excelente ocurrencia, así no tendrían que pedirle dinero a su padre cada vez que quisieran comprarse algo, podría pedírselo a Orochimaru…pero sinceramente, no quería molestar a otro portador alfa sobre todo estando en su territorio ( Se había dado cuenta de que su anfitrión lo era, cuando tropezó accidentalmente con éste al salir de su habitación, el vampiro olía diferente después del baño) al parecer el olor a cadáver no era permanente ¿Tal vez una medida de protección? sin embargo el inconfundible olor a incienso seguía ahí y alguna flor rara que no había olido nunca, un día cuando le tuviera más confianza le preguntaría porque rayos todos los portadores tenían un aroma relacionado con flores.
Su primera parada fue en el barrio japonés caminaron por un rato, hasta que se detuvieron ante una enorme multitud qué se congregaba ante uno de sus múltiples restaurantes, no sabían que pensar sobre ello hasta que una chica con aire amable les dio un vaso que parecía contener una especie de sopa, fue amor al primer sorbo en cuanto Naruto lo probo, no así para Menma que seguía prefiriendo la barbacoa de pollo, no obstante teniendo en cuenta que el primer amor de su hermano menor era la comida no se sorprendió cuando éste se inscribió de inmediato, al enterarse que todo la conmoción se debía a que el local estaba celebrando un concurso el cual consistía en comer todo el ramen que pudieran y cuyo primer premio, era poder comer gratis en el restaurante por alrededor de un mes… todo el ramen que quisieran.
Cincuenta dólares más pobres después, observo en silencio a su gemelo sentado en la mesa junto con los otros participante del evento esperando a que éste diera inicio, un par de chicos llamaron su atención al parecer eran amigos de uno de los concursantes por lo que decían, acercandose para poder escucharlos mejor.
— En serio Shikamaru ¿Por qué tenemos que asistir a éste restaurante para ver ganar a Chouji por tercera vez consecutiva? No necesita tu apoyo, mira a sus contrincantes ninguno tiene oportunidad especialmente ese rubio delgado de ahí.
—No seas fastidiosa Ino estamos aquí porque Chouji es nuestro amigo y tenemos qué darle nuestro apoyo.
—Lo necesitara ese gordo va a perder, se enfrenta a mi hermano.
Ambos jóvenes se voltearon para ver al impertinente que hablo de forma tan despectivo sobre su amigo, la rubia parpadeo en cuanto vio al hombre era una copia exacta del muchacho que estaba sentado en la mesa del concurso, el primero en hablar fue el pelo castaño, pensando para sus adentros “éste tipo parece muy problemático, no quisiera defender a Chouji pero que se le va hacer”.
—Lo dices con mucha seguridad no conoces a mi amigo, nunca ha perdido un concurso que se trate de comida.
— Y tú no conoces a mi hermano, el y mi padre eran el terror en los concursos de la feria de mi pueblo, si alguien es capaz de comerse un bistec de dos kilos con todo y sus guarniciones de una sentada en menos de una hora, esos eran ellos.
— ¿Ese muchacho delgado? ¡No hay manera de que eso sea posible!— Replicó indignada la chica rubia, fijando su atención en su amigo en el podio, gritando luego a todo pulmón— ¡Chouji es mejor que ganes te estoy brindando todo mi apoyo si pierdes no te voy a perdonar!
—… ¿Toque una fibra sensible?
— Mujeres y sus dietas, pero ya va a empezar el concurso—Comentó Shikamaru sin ganas de hablar más, era lógicamente imposible que alguien tan flaco, en comparación con su mejor amigo, comiera más que éste…pero la seguridad del otro resultaba inquietante, con cierta curiosidad miro como la otra copia idéntica del que qué tenía al lado, comía sin detenerse uno tras otro los platos de fideos, un apetito así no era normal ¿Qué, acaso ese chico tenía un estomago más grande que el resto de los humanos? Sin poder creerlo vio con el rubio ganó por el margen escaso de un plato, pero ganó, entorno de inmediato los ojos en cuanto vio a su amiga avanzar hacia el ganador, que venía hacia ellos mostrando con alegría el cupón que lo acreditaba como tal a su gemelo— Por favor Ino no seas una molestia no nos pongas en ridículo.
— ¡Molestia! ¡Dices que soy molesta!
—Es lo que dije no es necesario que lo repitas.
— ¡Como te atreves a decir eso! ¡Estoy indignada, sabes lo que tiene que sufrir una mujer para verse hermosa para impresionarlos a ustedes insensibles! ¡Tenemos que privarnos de comer las cosas que nos gustan, ir al gimnasio a diario y sobre todo hacer dieta para mantenernos delgadas! ¡Y éste llega aquí come más que Chouji y mira lo delgado que ésta, es injusto!
— ¡Oye no es para que exageres no estoy tan delgado!—diciendo esto Naruto se levanto la camisa dejando ver el torso esbelto con el pecho y los abdominales tonificados pero no en demasía.
— ¡Y para colmo tienes cintura, no es justo!
—Muy bien ya entendimos tu punto eres pariente de Andrej Pejic pero con músculos, ahora bájate la camisa aspirante a modelo de pasarela.
— ¡Hey, no soy modelo de ninguna cosa y no conozco a ese tal Andrés pellejo!
Shikamaru lo miro por un instante antes de echarse a reír—Bueno eso confirma mis sospechas de que ustedes no son de aquí, creo que me caes bien acabas de insultar a la modelo más amada por Ino, tienes suerte que éste despotricando sobre lo cruel qué es el destino y no te haya prestado atención ¿Y de donde son ustedes? Por lo que dijo tu hermano y por el acento que tienen, suena como si fueran de algún pueblo de Norteamérica.
—Si somos norteamericanos ¿Qué fue lo que les dijiste Menma?
—Dije que su gordo amigo iba a perder contra ti.
— Te advierto por tu bien que dejes de insultar a Chouji, son ese tipo de comentarios despectivos soltados a la ligera, los que más lastiman y ofenden, o fastidian… y en el caso de mi amigo te garantizara un buen golpe, en vista de que pareces una chica, pero no lo eres.
— ¿En serio no tienes algo mejor que decirme? Ese comentario no resulta conmigo, vengo escuchando que parezco una chica desde el jardín de infancia, toda mi familia es así incluyendo a mi padre.
— ¡Oh, vamos Menma ya deja de buscar pelea! Además mi amigo Chouji viene de una familia de sumos en Japón, todos desde su padre, tíos abuelos y hermanos tienen la misma constitución física.
Antes de que el gemelo mayor pudiera añadir algo sobre ese comentario, Ino salió de su trance sobre maldecir al mundo y su injustica y tomando a Naruto por la camiseta exclamo exaltada.
— ¡Dime que por lo menos tu papá esta "llenito" por comer tanto! ¡Dime que no soy tan desafortunada!
— Déjame desilusionarte— contradijo Menma totalmente divertido, sacando su celular para que viera la foto que sacaron en la última excursión— aquí están mi padre y mi tío.
Shikamaru se asomo por curiosidad (más bien para saber por cuánto tiempo tendría que soportar las quejas de su amiga) indicando—ustedes provienen de una familia de modelos de genero medio ambiguo ¿No es así? por lo menos no están anoréxicos y se les ven los músculos—en eso se les unió Chouji que vio la imagen y luego a Ino, el pelo castaño asintió con la cabeza y guiñando un ojo tomaron a cada uno de los gemelos, por el cuello arrastrandolos los más rapido posible fuera del local cuando estuvieron seguros de estar lo suficientemente lejos se sentaron en los asientos de un restaurante al aire libre, el peli castaño se reclino en el respaldo y comento viendo pasar las nubes —Demonios apenas los hemos conocido por cinco minutos y ya hicieron enfadar a Ino como nunca antes había visto, ustedes representan un montón de dificultades.
—… ¿Cuánto crees que le tome a Ino calmarse?—pregunto el Akimichi.
— No sé, de solo pensarlo me aburro, es difícil de creer que es mitad inglesa con ese carácter que se gasta ¿En que estaban pensando al enfadarla ustedes dos? Ella quiere ser modelo y se resiente de inmediato cuando ve que algunos tienen un metabolismo mejor que el suyo.
— ¡No es nuestra culpa! Ella fue la que se abalanzo sobre mí diciendo tonterías de porque estaba tan delgado y otras cosas— intervino el menor de los zorros quedándose en silencio de repente.
— ¿Eh, que sucede hermanito?
—Es que me di cuenta de una cosa… ¿Y…quién se suponen que son ustedes?
—¿Eso importa ahora?— indico el pelo-castaño sin moverse de su sitio— creo que para el caso podríamos ser amigos de la infancia y seguiría sin importar, pero si necesitas una presentación formal, yo me llamo Shikamaru Nara, mi amigo de ahí que ésta revisando la tablas con los precios Chouji Akimichi y la “loca” de hace unos momentos Ino Yamanaka .
— ¿Siempre se pone de ese modo?
—Todos y cada uno de los días de su vida, se vuelve muy cansado si piensas en ello… ¿Ustedes también tienen ascendencia japonesa al igual que nosotros verdad? Aun con esa fuerte apariencia occidental
—Lo dices por nuestros nombres, genio perezoso.
— ¡Menma! Lo siento él siempre es así cuando conoce a alguien nuevo ¿Y entonces? Lo supiste fue por nuestros inconfundibles nombres Norteamericanos.
—…Algo así ¿Y a que se supone que vinieron al barrio japonés?
—Estamos de paseo y de paso buscando un trabajo de medio tiempo.
Los jóvenes siguieron conversando entretenidos hasta la llegada de la chica que más calmada se unió a ellos, dando como resultado que Naruto terminara trabajando de mesero junto a Shikamaru, en la pastelería “Rosa de cristal glaseado” Menma en un restaurante situado a unas calles más haya la cual que pertenecía a unos amigos de los padres de Chouji, los habían puesto a prueba por una semana pero era evidente por la forma de desenvolverse de los dos que tenían bastante experiencia atendiendo clientes aún del tipo difícil, así que obtuvieron el trabajo de inmediato sin ningún problema y lo que condujo al menor de los rubios a conocer a un cliente que pronto se volvería muy especial para él.
En otro lugar un joven de apariencia atractiva e impresionante, se sento en un sillon y sonriendo de medio lado dijo.
— ¿Cómo éstas Ouji-nisan?
—Deja de molestar Sasuke.
— No, la expresión que pones cuando digo eso es incalculable.
— Estas mal de la vista no hago ninguna.
— Una de las comisuras de tu boca tiembla imperceptiblemente, en tu caso es como si hicieras la cara más grande de disgusto.
— Es tu impresión.
—No lo es, pero por otra parte ¿QUE ES LO QUE TE MOLESTA TANTO?— replicó con una voz profunda y estremecedora el joven vampiro— Somos sangre pura nuestro abuelo tiene bajo su control a los demás clanes de vampiros, el es el Rey de todos ellos, somos príncipes de nacimiento y por derecho propio.
—Tal vez, pero después de tanto tiempo ser llamado de esa manera llega a hastiarte, por otro lado veo que tu voz ha mejorado a puesto que ahora puedes lograr que las mujeres caigan rendidas a tu pies con solo dirigirles una palabra…PERO DEBERIAS SABER MEJOR HERMANITO NO SOY QUIEN PARA CAER INTIMIDADO O FASCINADO POR ELLA—Indico el azabache dejando ver uno de sus ojos cuya coloración se había tornado roja con patrones intrincados en el iris
— Y NO LO INTENTO…sólo tengo curiosidad de saber qué es lo que te incomoda tanto, somos lo que somos estamos por encima de todos los demás seres en éste mundo, tanto que las demás criaturas caen de rodillas ante nosotros.
—No hay que ser tan engreído Sasuke somos fuertes pero eso no impide que puedan haber otros con una cantidad de poder similar al nuestro…además pensé que te cansaste de que las mujeres besaran tus pies, después de tantos años.
—SOY UN VAMPIRO ¿COMO VOY A RECHAZAR UNA PRESA? Hablando de eso ¿Quieres ir a “cazar” esta noche en la discoteca?
— No ésta vez Sasuke, creo que saldré a caminar.
— ¿A ésta hora? Son como las dos de la tarde.
— No veo porque no, no voy a ponerme a brillar como si fuera un hadita resplandeciente salida del closet, si me da el sol.
— Y tampoco a deshacerte en llamas, pero aquí los rayos ultravioleta del sol son muy fuertes y nuestra piel no es precisamente la más resistente.
— Entonces sería una vergüenza que después tantos años de existir no hubiéramos desarrollado un bloqueador lo suficientemente efectivo…aun no puedo creer que sea uno de los artículos no relacionados directamente con nuestra empresa más solicitado.
--Los humanos tienen prioridades muy extrañas—Interrumpió un hombre qué entraba repentinamente a la sala, éste aparentaba unos cuarenta años de rostro atractivo y expresión severa.
—Padre—exclamaron los jóvenes inclinando su cabeza de forma respetuosa ante él— Deberías hacerle caso a tu hermano, Itachi, caminar ahí a plena luz día puede ser contra producente, tenemos la ventaja de ser puros lo que hace que nuestra piel sea resistente a la luz solar como si fuéramos seres humanos pero no hay que abusar.
—No te preocupes al contrario de los desafortunados qué padecen Xerodermia y a los Wildbloods que dieron origen a la creencia que la luz del sol nos afecta al punto de que nos caemos a pedazos, soy más cuidadoso, además todos aquí son más pálidos que yo, creo que escuche a Marta decir en su idioma “Otro hombre inmensamente guapo pero pálido como muerto, ¿Porque todos aquí son blanco leche? Ya parecen yucas peladas”
—… ¿Y se puede saber que es una yuca?
—Ni idea.
— Es una especie de raíz, no importa debe ser algún regionalismo—intervino Fugaku— no me interesa si le parecemos fantasmas, mientras permanezca con la boca cerrada sobre lo que sucede aquí; la contrate porque es una mujer eficiente y me la recomendaron como ama de llaves.
— ¿Sondeaste su mente verdad padre?— comento el menor de los azabaches.
—Sólo por si acaso, no me gusta hacerlo pero no voy a arriesgar vuestra seguridad por nada, afortunadamente lo único que piensa es que aquí recibe un salario magnífico y no quiere perderlo por nada del mundo… y por favor Sasuke, Itachi, no duerman “comando” es una dama de 45 años, no necesita ver algunas cosas no “aptas” cuando entre en su habitación para limpiar.
Ambos chicos contuvieron las ganas de entornar los ojos, siendo Sasuke el primero en replicar — Entonces que no entre sin tocar y no se llevara ningún espectáculo que no quiera ver.
—No comprenden, el problema es que le guste demasiado, no quiero borrarle la memoria como lo hice con Giselle, hace 120 años, la chica estaba tan desesperada que intentaba meterse al cuarto de tu hermano a cada momento.
— ¡Ah! La chica francesa, era una verdadera mujerzuela, siempre entraba a nuestras habitaciones cuando alguno de nosotros se bañaba o sabía que algunos estaban a punto de levantarse.
—Sí y ustedes actuaron de forma tan infantil, incluyéndote Itachi.
El aludido sonrió avergonzado, era cierto que lo había hecho provocar a la joven había sido su diversión en ese momento, ver la mirada en el rostro de la muchacha mientras ésta no podía hacer otra cosa qué observar cómo se vestía, o en contadas ocasiones utilizarla como ayuda de cámara para que le llevara las toallas cuando terminaba de bañarse, más que infantil fue cruel y él lo sabía, tal vez era un poco de resentimiento contra la humanidad lo que le hizo comportarse de esa forma, algo de los que no había podido deshacerse en ese tiempo.
— No te preocupes dormiré con la puerta cerrada con llave, ahora si me disculpas voy a pasear un rato…aunque padre creo que eso también se aplica para ti creo que en estos momentos a ella ésta interesada en verte más a ti tipo “comando”
—No seas irrespetuoso hijo, te llevo cuatrocientos años eres fuerte muy fuerte, pero a pesar de eso hay poderes que solo llegan con la edad no importa que seas un genio o no, en mi corazón sólo hay lugar para tu madre ella fue y sigue siendo perfecta y espero encontrarla, tengo muchas esperanzas de localizarla ahora— replico el hombre levantando un medallón bastante antiguo con una piedra roja en el centro— ha empezado a relucir como una gema, quiere decir que ésta en este país en algún lugar.
Los dos sangre pura más jóvenes permanecieron en silencio, no dispuestos a romper la ilusión de su padre no estaban en la edad de creer en cuentos de hadas aunque ellos mismos eran criaturas de la ficción, tal vez eso les hubiera causado alguna emoción cuando eran pequeños ¿Pero ahora? Itachi movió la cabeza no era tiempo de pensar en ello, podrían ser solo las esperanzas de su padre los que le hacían ver refulgir a la gema, con suavidad se despidió fijándose en su hermano, aun había un brillo en su ojos probablemente quería conocer a la persona que lo dio a luz, una curiosidad natural en cualquier ser viviente…pero dadas las circunstancias las cosas probablemente serían muy diferentes a como éste se las imaginaba.
Los vampiros eran rápidos cuando lo deseaban, también caminantes incansables cuando estaba abstraídos y eso le paso al mayor de los cuervos cuando levanto las vista estaba en un lugar que no reconoció pero un olor dulce y delicioso golpeo su nariz haciéndolo sonreír ¿Cuánto hacía que no percibía el olor puro y sin tacha de una virgen entrada en los 17 años? Había perdido la cuenta y personalmente le resultaba un poco morboso el tener que morder el cuello de un adolescente de 15 años o menos para probar ese sabor adictivo, la sangre sabía mejor cuando estaba en la plenitud de la juventud, un dulce licor que calentaba todo el cuerpo con decisión se aventuro en el local, sentándose junto a una de las mesas contemplando al responsable de exudar tan increíble fragancia.
Naruto hizo una mueca sintiendo la punzada de dolor en su dedo, mientras recogía los últimos trozos del vaso de vidrio, tenía una astilla clavada y no podía sacarla porque el local estaba abarrotado, desde la semana que empezó a trabajar allí muchas chicas llegaron a visitarlo atraídas por el guapo “maître camarero” que las atendía con una gran sonrisa y una habilidad sin igual, el apodo le había dado risa al rubio, ya que no era el único mesero del local y estaba lejos de ser el maestro de nadie, fue una de las chicas entusiastas que insistió en darle su número de teléfono la que sin querer hizo caer el vaso de agua a su lado haciendo que se rompiera, la mirada de satisfacción en la cara del muchacho que la acompañaba al ver que se había herido no resultaba muy agradable, así que después de levantar el ultimo fragmento del suelo levanto la vista, en busca de un nuevo comensal al que atender.
Decir que lo que vio era impactante era un eufemismo de los grandes, el hombre joven sentado en la parte más apartada de la tienda, llamaba la atención aun sin pretenderlo, guapo, pálido, alto, de larga cabellera negra y con un cuerpo bastante definido que se deja traslucir la camisa abierta hasta el pecho y los pantalones un poco apretados calzando unas botas negras, en resumen el hombre era guapo y elegante con ganas, río suavemente bueno ahí estaba uno de eso ejemplares masculinos por los que cualquiera dudaría de su sexualidad era un fortuna que él jamás hubiera pensado mucho en ello, con una sonrisa se acerco al cliente y tendiéndole una carta con el menú bromeo fiel a su naturaleza impulsiva e incapaz de ayudarse a sí mismo.
— ¿Ha que debo el honor que un príncipe vampiro, venga a visitarnos en ésta humilde cafetería a plena luz día?
Ese comentario le arranco al Uchiha una carcajada sensual agradable que hacían estremecer a cualquiera desde los dedos del pie hasta la punta del cabello ¡Dios estaba encantado, ese pequeño descarado en su inocencia se atrevía a preguntarle eso y era la primera vez que lo veía! Con una sonrisa maliciosa comento.
— Salí de mi cripta atraído por un olor exquisito y delicioso.
— ¡Oh! ¿Y se puede saber cuál de las delicias de nuestro menú lo atrajo más?—pregunto el rubio divertido de que en lugar de molestarse el otro le siguiera el juego, soltando un ¡Ay! De dolor cuando sin percatarse apoyo la mano en la mesa, provocando qué se abriera la herida en su dedo haciéndolo sangrar, la reacción del vampiro fue rápida con cuidado tomo la mano y observo la herida antes de llevarla a su boca y succionar un poco de la sangre, sorprendiendo al ojos azules, que estaba a punto de caer de rodillas pensado que algo debía estar mal en él ¡Era solo un dedo por dios! Pero la sensación de la lengua tocando con suavidad la lesión había hecho que se estremeciera, no entendía de donde había surgido la necesidad repentina de tocarse a sí mismo ahí delante de él para que lo viera, avergonzado ante el pensamiento el chico retiro con brusquedad el dedo de la boca del vampiro, diciendo en un tono serio y triste (se sentía un poco sucio al sentir la erección en su pantalones)— creo que es eso es anti-higiénico deme dos minutos por favor , mandare a alguien para que lo atienda como corresponde.
Extrañado ante el tono melancólico ocupado por el rubio, el peli-negro asintió y tan pronto como el chico se dio la vuelta sus ojos se tornaron rojos frunciendo el entrecejo, era la primera vez que tenía interés en leer la mente de un ser humano y no podía, algo demasiado curioso para omitir… ese muchacho… ese muchacho posiblemente no era totalmente humano, por más que se viera y oliera como uno…pero su sangre tenía un sabor diferente, sin embargo algo algún agente externo (estaba seguro de ello) le impedía obtener la información que estaba oculta en ésta…tendría que replantearse su estrategia para atrapar a su presa, hace mucho tiempo que no veía esa vergüenza en el rostro de otra persona, el rubor cándido y triste de la pureza llorando perdida entre las neblinas de la lujuria, que solo las alma inocentes poseen, suspiro ante los pensamientos demasiado confusos y sombríos observando al nuevo camarero que venía a atenderlo, conteniendo una risa al darse cuenta que tal vez en verdad se veía algo gótico, cuanto éste dijo.
— Vestir tan oscuro llama mucho la atención de día, al contrario los colores claros hacen pasar desapercibidas a las personas, el negro no es un buen color para ocultarse, la luz del sol hace resaltar más la oscuridad.
—Tal vez no estoy tratando de esconderme y solo muestro lo que soy, en cuanto a lo otro no le temo a ninguna, ni a la luz ni a la oscuridad.
Shino Abúrame se quedó en silencio, generalmente la personas se ponían nerviosos con su manera hablar y se limitaban a pedir apresuradamente lo que deseaban del menú ¿En qué problemas se estaba metido su compañero de trabajo? Éste tipo era peligroso y algo le dijo que era mejor no meterse con él.
Entre tanto Naruto trataba de liberarse de su “pequeño” problema se sentía un poco enfermo de sí mismo por estar haciendo esto, el hombre era un total desconocido del cual no sabía siquiera el nombre y aquí estaba tocándose con desesperación y ansiedad, por solo el hecho de que éste había chupado el dedo en que se había cortado, su juventud e inexperiencia le hicieron terminar rápido, mirando luego su imagen en el espejo profundamente avergonzado, no podía verle la cara a esa persona nuevamente no por ahora por lo menos, lo único que deseaba hacer era ocultarse y que se lo tragara la tierra, con su suspiro se dirigió de nuevo a hacer sus labores tratando sobremanera que su atención no se fijara de nuevo, en el llamativo hombre.
Itachi noto sus intentos y decidió que lo dejaría calmarse, cualquier otro se hubiera lanzado a sus pies de inmediato rogando por él, en cambió éste niño se le resistía y valoraba eso una presa difícil causaba un mayor placer al cazador al ser atrapada, en cuanto termino de tomar el capuchino y el pastel (los vampiros pueden comer como cualquier ser humano, pero no los sustenta los únicos nutrientes qué pueden absorber están en la sangre) se coloco detrás de Naruto sin que esta se diera cuenta y dijo.
—Siento si lo que hice te incomodo, no quise hacerte sentir mal.
Sobre saltándose por la voz a su espaldas, el joven siguió sirviendo los pedidos del grupo de chicos que miraban con algo cercano a l abstracción al desconocido tras suyo y respondió sin atreverse a mirarlo.
—No, todo lo contrario, mis disculpas por dejarlo tan abruptamente sin embargo tenía algo urgente que hacer, espero que eso no lo haga desistir de visitar éste local…Señor.
El vampiro enarco una ceja, el jovencito era bastante hábil para disimular pero lo delataban sus orejas rojas...o quizá simplemente se sentía avergonzado para intentar verlo a la cara— Volveré éste lugar tiene algo verdaderamente delicioso en el menú, pero me haces sentir como un hombre viejo casado y con hijos cuando dices señor, preferiría que me llamaras Itachi, tal vez la próxima vez me digas tu nombre.
—…Naruto mi nombre es Naruto—indico éste sin voltearse todavía.
Mirando complacido el cuello del chico el peli-negro replico—Entonces nos veremos otro día Naruto—resistiendo las ganas de voltear para observar cual era el motivo de que las chicas hubieran empezado a mirar totalmente arrobadas, evito caer de rodillas en cuanto lo escucho salir ¡Dios eso fue, increíblemente agotador! De regreso a su casa horas más tarde Menma notando la mirada perdida en el rostro de su hermano pregunto sin ambages.
— ¿Qué pasa contigo? Te ves bastante mortificado.
— Nada.
— Eso no lo creo, somos gemelos así que sé que te sucede algo, así que suéltalo.
— Yo…yo… es demasiado vergonzoso para decirlo—suspiro ante de mirar la cara de escepticismo de su hermano y replicar exasperado.
— Llego un cliente bastante guapo hoy a la cafetería y…
— ¿Te hiciste una paja?
— ¡Menma, no seas tan directo! ¿Y cómo lo sabes?
—Olvidas que somos gemelos te conozco demasiado bien, al igual que tu a mí y a no ser que sea pornografía, ningún hombre se queda viento por treinta minutos la misma página Wed y tú lo hiciste después de que regrese del baño el día en que vimos al lobo exhibicionista, aparte involuntariamente pude sentir que tú te encontrabas algo más excitado que de costumbre, además tú eres tan despistado que nunca le dices guapo a nadie, ese tipo debió ser muy atractivo para dejarte semejante impresión ¿Y qué te hizo para dejarte en ese estado?
—Le hizo el amor a mi dedo—exclamo el chico antes de taparse la cara con la almohada lo que provoco que su hermano mayor lo viera fijamente y dijera abalanzándose sobre él para quitársela.
—¡Ah no, ahora me cuentas qué quieres decir con eso!—l Mientras los gemelos hablaban en su habitación, unos ojos rojos brillaron entre las sombras, mirando fijamente la casa de manera inexpresiva, Itachi había seguido el aroma del rubio desde la cafetería para enterarse donde vivía éste, pero algo no estaba bien podía oler un cubil de lobos aquí y algo más preocupante el olor de otro vampiro, uno bastante viejo, probablemente el dueño de la mansión, esto era sospechoso pensaba que serían los únicos vampiros en éste sitio y en su lugar se encontraba con otro y para colmo un antiguo, lanzándole una última mirada a la enorme vivienda para memorizar su ubicación, se adentro en la oscuridad de la noche sin dejar rastros, tenía algunas cosas importantes qué averiguar.