Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Atrapando tu alma. por Ameno

[Reviews - 402]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Capi# 63

Naruto empuño fuertemente las manos mientras miraba al frente a él ¡Esto era injusto, totalmente injusto! ¿Cómo se supone que podía luchar en igualdad de condiciones, cuando fue tomado por sorpresa!

—Concéntrate niño.

El rubio dirigió la vista molesto al dueño de la voz grave, desviándola nuevamente al ver al hombre sin camisa solo para perderse ser atrapada por el otro cuerpo masculino excesivamente definido también con el torso descubierto y maldijo al zorro dentro de él y su manera de tomar ventaja y tratar de robarle la concentración a su pareja ya que resulto ser un arma de doble filo, su calor no estaba sirviendo para distraer a su novio pero si para causarle una poderosa excitación que se extendía por su cuerpo quemando cada fibra de su ser, no pudiendo contenerse ante la oleada de calor que recorrió su cuerpo el adolecente se quito la camisa quedándose sólo en los pantalones deportivos, provocando una carcajada del vampiro más viejo quien repuso dando la vuelta y alejándose de ellos.

—No saldrá nada por el día de hoy ya lo veo, Itachi ayuda a tu pareja y trata llegar algún acuerdo con el zorro, en cuanto a ti pequeño te aconsejo que hagas lo posible por fusionarte con tu bestia interna no puedes dejar que el ande soltando feromonas por el aire, incitando a tu novio a tomarte delante de todos, para demostrar que le perteneces.

Ruborizándose ante la crudeza del comentario  el ojos azules protestó fuertemente.

— ¡No es mi culpa, ni siquiera sé lo que sucede estábamos iniciando la fusión cuando se detuvo!No tengo la culpa de que no tenga la misma habilidad que Menma— Señalo el  jovencito viendo con un puchero a su hermano que parecía ir bien en su entrenamiento—¡Además que tipo de entrenamiento es bailar?

—Uno que necesitaran, aparte sólo ese chiquillo parece estarlo haciendo bien—lo regaño Madara señalando a Minato y a su propio hijo quienes bailaban con gracia a pesar del profundo rubor  que cubría el rostro del hombre.

— ¡Es diferente ellos no están medio desnudos!

— ¿Qué deseas ver a tu padre desnudo?

— ¡Déjalos en paz de una vez Madara! ¿Aparte que pretendes, que Menma y Naruto queden embarazados con la mirada?

El aludido giro la cabeza divertido para ver a Orochimaru con las cejas fruncidas, casi podía verlo echando humo, pero había sido así desde el comienzo del experimento.

—Es un entrenamiento de acoplamiento para que no se distraigan cuando peleen como compañeros, aunque este es un método un poco más extremo que nuestras danzas tradicionales—Comento Kurama.

— ¿Y que se suponen que hagan con eso, hacer el amor con la ropa puesta?

Exclamo con enojo el antiguo, provocando que el imperator soltara una carcajada sensual ante su comentario y señalara.

—No es por eso, simplemente estoy tratando de que puedan luchar bien juntos, sin distraerse por otras cosas.

—Jiraya y yo hemos luchado bien juntos y nunca hemos tenido que hacer algo así.

Suprimiendo los celos y la furia que lo asalto por breves instante, el sangre pura aclaro— Eso es debido a que ustedes no son compañeros predestinados, las parejas acopladas, especialmente las recientes tienden a tener un intenso necesidad de contacto físico.

—Creí que se aplacaba después de la luna de miel.

—Ma, eso es una mentira más grande que un edificio de cincuenta pisos, permiso para que yo y Menma nos vayamos, nuestra situación es un poco incomoda aquí.

Intervino Kakashi con una expresión de sufrimiento en la cara, ante lo cual el imperator asintió con la cabeza entornando los ojos al verlos salir como un bólido a sus habitaciones, suspirando cuando sintió la mirada recriminatoria del dragón sobre él.

—¿Qué les diste?

—Nada.

—Es algo natural—Intervino el pelirrojo (más por aclarar el mal entendido que por alguna remota e impensable intención de ayudar al vampiro de más edad) —Los zorros jóvenes, tienen golpes esporádicos de calor después de su primer celo que varían en intensidad según su poder y el de sus parejas, dependiendo de la fuerza de voluntad de ésta, si no llega a detenérseles pueden terminar apareándose a la vista de todos.

—Okey no quiero ver a mis nietos haciendo un espectáculo porno en la vía pública, personalmente no quiero verlos en ningún lado.

— ¿Si es así, porque papá y el señor Fugaku lo están haciendo?—Inquirió Naruto conteniendo las ganas de frotarse fuertemente contra Itachi para incitarlo a hacerle el amor, a la vez que maldecía al zorro pervertido en su interior.

—Sólo porque es divertido, aparte compartimos tiempo de calidad con ustedes.

Señalo el Uchiha besando a Minato en la frente, quien hizo una mueca, pensando el chico entrecerró los ojos ante esta respuesta y observo a Sasuke que estaba con los brazos y las piernas cruzadas y el ceño fruncido, mientras Haku bailaba con su papi, los dos riendo cantarinamente mientras lo hacían.

— ¿Y entonces porque el teme no bailo con Haku, cuando se lo pidió? ¡Eso fue grosero!

-¡Maldito dobe no seas imbécil, no voy a ponerme en evidencia de esta manera! ¡Seria más grosero si lo tocara en este estado! ¡Maldición porque tenía que llevar eso puesto! -Pensó el aludido extremadamente irritado ( y desesperado) tratando de de calmar el creciente problema, entre sus  piernas algo que la apretadísima maya de ballet utilizada por el joven dragón de hielo no le permitía. La tela se aferraba como una segunda piel a cada músculo y curva del cuerpo agraciado y flexible la camiseta haciendo relucir el ya de por si agraciado talle  del portador de cabellera oscura, que parcia ajeno totalmente a lo que su vestimenta pudiera causar en los demás, por un momento los ojos de Sasuke parpadearon rojo pensando que los otros también eran testigos de ese espectáculo cuando la pesada mano de un macho muchos más viejo y fuerte lo dejo calvado en su sitio y escucho la voz dentro de su cabeza que le advertía.

-Tranquilo tigre no hagas una escena, sólo eres tu el que mira con perversión lo que lleva mi querido sobrino fíjate en los demás y  te darás cuenta que sólo tu quedaras en ridículo si haces una estupidez.

— ¡Pero me está provocando abuelo, mira cómo va vestido!

—No digas tal sandez muchacho y mucho menos se la menciones a él o quedara muy decepcionado de ti.

— ¡Pero es demasiado apretado, puedo ver todo!

—Se supone que es ropa de ballet tiene que amoldarse al cuerpo para permitir la mayor flexibilidad posible, aparte pequeño nieto de los presentes eres el único que lo ve con lujuria ninguno de los  otros está tratando de ocultar una erección.

—Igual considero que su traje es muy revelador.

—Deja de actuar como un idiota muchacho, él no lo lleva con esa intención y lo insultaras si siquiera lo sugieres, para los rusos el ballet es un orgullo y esas ropas se llevan con honor  con llevando mucho trabajo duro y esfuerzo, no lujuria y deseo como los que te invaden a ti.

—No puedo evitar ser hombre y que él me guste.

—No, pero puedes evitar ser un majadero, a mi  Oro me rechazo de inmediato cuando le pedí un baile con la excusa de hacer una demostración, en cambio tu rechazaste la oportunidad de  danzar con el bebé dragón porque careces del control de tu cuerpo, eso es lamentable en un Uchiha.

El pelinegro apretó los puños luego de recibir esa severa patada a su orgullo, no le gustaba que le dijeran como hacer las cosas menos si estaba relacionado en su vida amorosa (sobre todo porque el otro hombre había echo un desastre de la suya) e hizo lo único que se le vino a la mente para dominar la excitación y recordó el entrenamiento de Óbito, segundos después las imágenes perturbadoras del alter ego del hombre clavando con lapiceros manzanas y piñas, hicieron tranquilizar al vampiro quien se levanto y acercándose a su tío y su primo, le solicito a este ultimo un baile(sin decir palabras)  inclinándose con la elegancia y refinamiento  aprendido de antaño ante las sonrisas de su hermano, padre y abuelo que solo sonrieron más ampliamente al ver la mirada amenazador que les envío éste.

Entre tanto Sakumo que había estado observando todo, se acerco a Jiraya que estaba reclinado en una de las paredes y pregunto sonriendo con diversión ante el espectáculo raro y carente de la belicosidad a la que supuestamente estaba destinado.

— ¿No se ve divertido papá, por que no le pides al señor Orochimaru que baile contigo?

—Aparte de que tengo 800 pares de pies ¿Le deseas la muerte a tu padre, hijo? Mi viejo amigo ya le dio un no a ese imperator, si yo pidiera algo como eso mis tripas aparecerian en algún lugar a la vera del camino.

—¡Papá exageras!- El peli-plateado se río fuertemente ante lo dicho por su progenitor y miro, el portafolio que cargaba su laptops, USB y las grandes cantidades de papeles que correspondía a su trabajo. Por su parte Madara observaba todo desinteresado chequeando su teléfono con frecuencia cosa que le permitió a  Izuna acercarse y observar encima del hombro inquiriendo, al ver la imagen del compañero animal de su hermano, dormitando en una jaula de hierro, comento.

— Siempre me asombro cada vez que lo veo, Muí aun no puede creer que alguien como tú pueda tener un compañero animal como ese ¿Pero por que está encerrado en una caja?

—He decidió traer a Arbalad aquí, pero no puedo dejar que venga por sus propios medios; así que viene en un avión privado.

—Ya me puedo imaginar como se debe sentir un grifo orgulloso, ser encerrado en un cajón metálico pudiendo volar.

—Pensé dejarlo libre dentro de la sección de carga, pero llamaría mucho la atención y no importa cuan fieles sean mis hombres, la curiosidad humana lo es más; dudo que alguno resistiera la tentación de tomarse una foto con él y mostrársela a sus amigos.

—Lo peor de todo, es que  puede de suceder, pero sigo pensando qué debe ser duro para él, que coarten su libertad de esa manera.

— Ni me lo digas, pero no es algo que no podemos cambiar, es imposible montarme en él y volar más de 16000 kilómetros sin llamar la atención.

Señalo el hombre desviando su atención al antiguo que seguía mirando exceptivo a sus nietos bailar, ante lo cual Izuna contuvo las ganas de darle unas palmadas en el hombro a su hermano las muestras de lastima o compresión, no eran bienvenidas por el vampiro orgulloso que los dos últimos días parecía traer algo entre manos, algo que no tenía que ver con recuperar a su compañero o meditar estrategias para utilizar en la guerra que se avecinaba.

Como presagios de la situación que se avecinaba dos hombres miraban los resultados de su reciente misión discutiendo entre sí, los entresijos de ella mientras observan a las figuras monstruosas descansando en un hangar.

—Fue un ataque perfecto, la misión fue un éxito, si las cosas son así siempre;  el país tendrá cualquier guerra ganada.

—Sin embargo algo te molesta.

—No me fio de esas criaturas, ver como varios soldados enemigos se apuñalan entre ellos, o a si mismos es perturbador ¿Qué certeza tenemos de que no utilizarán ese poder en nosotros y no terminaremos sacándonos los ojos como hicieron esos malditos terroristas?

Danzo observo a las criaturas en silencio, antes de decir.

—Ninguna, pero podemos estar seguros que no harán nada por alguna razón, le tienen miedo al chico de los cazadores de monstruos y utilizaremos eso a nuestra ventaja, por lo menos hasta que el chip de control este terminado.

—Confías en ese chico.

—Tanto como en ti y lo mismo que tu lo haces en mi.

— ¿Crees que nos traicionara pronto?

—Esperemos que no hasta que podamos enfrentarlo y derrotarlo con las mismas armas que nos dio.

—Me pregunto si sabrá que sospechamos que es monstruo.

—Roguemos que sea tan arrogante y joven como parece, para darse cuenta que paso por encima de una de las reglas más básicas, un monstruo sólo le teme a otro mucho más grande.

—Tendremos que agradecerle a ese anciano por su comentario, nos alerto a tiempo.

—No le debemos nada a nadie, ya está muerto en vida de todos modos— Comento Danzo el cual odiaba pensar siquiera que estaba en deuda con otro aparte de sí mismo, separándose con disgusto de la pantalla y apretando el vial dado por el lich. Desde que había mandado la muestra al laboratorio y obtuvo los resultados de las pruebas lo tenía guardado en su bolsillo, era la tentación encerrada dentro de un frasco de cristal, una de apariencia viscosa y desagradable.

— ¿Qué encuentras tan divertido Horaz?

—Sólo me preguntaba, si nuestro amable esclavista ya bebió el regalo.

—¿Qué contenía?

—Nada, sólo una pócima que recuerdo de mis días como humano, le añadí unos efectos secundarios pero no se notaran hasta mucho tiempo después o bajo las condiciones necesarias.

—¿Qué es?

—Paciencia  Augen Tausend* si sale como yo quiero (y no tengo ninguna duda que lo hará) es algo que disfrutaras de ver con todos tus ojos.

El cerebro flotante observo por unos segundos la sonrisa macabra y maligna del mago no muerto, e intercambió un vistazo con el pulpo que se encogió de hombros. Su compañero forzado era el menos fuerte de los tres pero su bipolaridad lo hacia el más impredecible y con las ideas más locas, si él decía que iba a ser divertido probablemente lo seria.

El desuellamentes cerró el libro que estaba leyendo estrepitosamente y señalo— Espero que lo que hagas valga la pena, no sabes lo que deseo arrancar la cabeza de esos humanos.

El lich solo lo miro con un brillo en los ojos y se dio la vuelta, refunfuñando en voz alta (en lugar del coloquio telepático que estaba teniendo con sus compañeros de habitación) para que fuera captado por las cámaras de seguridad.

—¡Por lo menos podrían darnos una cama más grande! ¡Seré un muerto vivo pero mis  huesos pueden sentir dolor!

 

Días después y en un lugar muy diferente, un varón alto de complexión fuerte y musculosa; se miraba al espejo mientras sus manos con garras de dedos largos y agiles jugueteaban  perezosamente con un sobre, mientras el imperator estudiaba cuidadosamente la imagen frente al espejo. La mujer qué atendía al caballero sacudió el traje impecable acariciando los hombros anchos mientras presionaba fuertemente los pechos contra la espalda de su amo, quien no le prestó atención a ese detalle indiferente a los intentos de la hembra por seducirlo, era buena en lo que hacía y útil por eso le dejaba salirse con las suya en sus intentos desesperados y ridículos de llevarlo a la cama, permaneciendo impasible cuando escucho la voz embelesada y cargada de deseo cuando esta le dijo.

—Luce espléndido mi señor, hace tiempo que no me llamaba ¿Cómo cien años tal vez? No sabe la emoción que sentí al saber que requería mis servicios, mi señor.

— ¿Esa es la última vez que requerí de tus talentos  Freiya?

—Si mi señor,  en la última reunión del consejo a la asistió

—Veo que no has cambiado tu modo de vestir.

—No entiendo que quiere decir, siempre me he vestido así me siento más cómoda de esta manera.

— ¿En serio?- Se burlo el vampiro echándole un vistazo escéptico a la camisa transparente, que dejaba ver los senos y los pezones así como a la falda corta y apretada del mismo material, que transparentaba las minúsculas pantis de la mujer.

—Así es mi señor.

Madara contuvo las ganas de entornar lo ojos al ver la mujer apretar las piernas jurando que podía escuchar el sonido de la excitación mojando la minúscula y delgada tela, pensó en Orochimaru vistiendo algo similar y movió la cabeza en negación él se vería mejor desnudo sin ninguna prenda que arruinara ese divino exterior la piel expuesta para lamerla y besarla, parándose frente a la mujer y tomándola por la barbilla en un gesto puramente intimidante, pero que parecía lograr el efecto contrario en la joven le advirtió.

—Cambia de ropa cuando estés cerca de mí y requiera tus servicios o pensaran que eres una prostituta.

—Mientras sea de su agrado amo, no me importa lo que piensen los demás.

—Creo que no me has entendido, no quiero que mis subordinados lleguen a la conclusión que requiero de “ciertos servicios” no necesito a los hijos, hijas o nietos de los nobles haciendo cola a mi puerta ofreciéndome su “ayuda” para saciar mis deseos carnales ¿Comprendido?

—Sí mi amo ¡Mi intención nunca fue humillarlo!

— ¿Humillado? No comprendes, me resultan indiferentes tanto tu, como tus intenciones, sólo no quiero que las locas fantasías que  tienes en la cabeza transciendan fuera de ella y lleguen a oídos externos, no tengo tiempo para lidiar con una chiquilla menor que mis nietos. Ahora vete y agradece a tu excelente trabajo con mi cabello, el que no te mate por tu atrevimiento.

La joven se inclino profundamente, su ropa interior húmeda por el intercambio entre ella y el varón marchándose de inmediato, mientras el vampiro murmuraba viendo la invitación.

—Bien extraño, veamos si tienes con que sustentar tu boca al dirigirte a mí.

El imperator miro por última vez el trabajo de la estilista, el cabello naturalmente indómito, estaba manejable y algo alisado y atado con un lazo, mientras caí por la espalda del esmoquin gris oscuro hecho a la medida; los únicos accesorios que adornaban a este eran un par de gemelos en las solapas del traje y el reloj fino de oro blanco, con un gesto de suficiencia se coloco los guante y tomo la invitación mirándola con cierto desdén aunque ligeramente interesado en conocer al remitente de la misma.

 

— ¡Dios pero que  hermoso te vez! ¡Tienes unos ojos bellísimos! ¿Usas lentes de contacto? ¡Y las sombras de tus ojos que atrevido color! ¡ME ENCATA! ¡Luces precioso! ¿Estás seguro que no tienes novio lindo? ¡Me ofrezco sin dudar!

Aturdido por la efusividad y el parloteo del personaje junto a él,  Orochimaru miro sorprendido al  esteticista con la camisa negra y pajarita color verde esmeralda con  jeans ajustados y el pelo cortado de los lados, él cual se levantaba en un copete estrafalario y ridículo qué le hacía recordar, por alguna razón  a una gallina de cuello desnudo (tanto por el peinado como por el continuo cacareo) y miro a su asistente personal quien sonrió valientemente para nada desalentado, por la mirada de muerte que le dirigió el presidente de la compañía India.

Este se había llevado una sorpresa cuando lo conoció, siempre creyó que la negativa de la cabeza de las empresas para viajar a Europa; porque seguramente era un viejito terco y cascarrabias así que al encontrarse con  un tipo relativamente joven aunque algo andrógino, se encontró sin saber que decir; pero simplemente no podía  hacer oídos sordos a las peticiones de su jefe de hacer lo posible para ganar para su compañía los favores de la corporación extranjera. Aunque no muy conocida la rama más oculta de Naga negociaba con joyas  de gran valor que se apreciaban mucho en el mercado negro por su rareza y antigüedad desdé diamantes hasta perlas gigantescas de extraño color rojo traslucido, gruesas laminas de oro puro o telas tejidas con hilos de oro y plata, o los cuadros y estatuas ricamente pintados adornados de metales y piedras preciosas. Esta rama se llamaba Maya y cada cinco años  los objetos que ponía en subasta eran tan fastuosas que el nombre de ilusión no podía ser más adecuado, sólo otra compañía exponía sus tesoros de igual antigüedad y valor y definitivamente su jefe le temía a los que dirigían ese consorcio.

El ayudante miro nuevamente al empresario  que debía escoltar y se froto el cuello, su empleador no tenia suerte, era inequívoco que no había nada peor para un homofóbico acérrimo que el padecer una erección al ver a otro hombre y eso es lo que había logrado el representante de dicha empresa hace cinco años y eso que era la primera vez que lo veía, bueno tuvo la misma experiencia cuando conoció al otro enviado de dicha compañía y por las  apariencias a su jefe le sucedería lo mismo con la cabeza  de la corporación “Naga”, no es extraño que después de esas experiencias el hombre se negara a conocer a nadie. El pudo sentir algo similar y el endurecimiento no profesional de ciertas aéreas cuando los vio, pero a diferencia de éste (aunque no lo dijera en voz alta por miedo a perder su empleo) no tenía problemas con eso ya que era bisexual  y se permitía apreciar la belleza tanto masculina como femenina, pero el problema no era ese ¡El problema es que su demonio de un maquillista le estaba espantando un socio bastante anhelado por su empresa, con su interminable y molesta cachara, con irritación miro al excéntrico hombre y le reprendió.

—Francés deja en paz a nuestro importante invitado, lo he traído aquí porque necesita de tus manos expertas para que le arregles el pelo, no para escuchar tu boca imparable.

— ¡¿Darle un arreglo?!... Oh precioso es la primara vez que voy a decir esto, pero no necesitas nada de eso, aun si caminaras desnudo por la calle luciría ¡Fabuloso!

—Pues no necesito verme fabuloso, sólo verme presentable y preferiría que no vuelvas a mencionar lo de desnudo, no necesito que llegue a oídos de cierto  macho insufrible, ya de por si es insoportable lidiar con sus continuos acosos.

Esto último lo dijo el dragón en voz muy baja, pero lo suficiente para el entrometido esteticista lo escuchara y dijera.

—¿Así que hay un hombre tras usted? Sabía que era demasiado bueno para ser cierto, el encontrar un hombre hermoso y soltero estos días es misión imposible ¡Aaaah! ¿Es guapo?

—Como un maldito vampiro, solo que extremadamente atlético—Respondió ya excesivamente irritado el ojos dorados.

— ¡Okey bello, quédate en mis manos, prometo que si tu vampiro no podía quitarte las manos de encima, ahora no podrá evitar arrancarte la ropa y hacerte el amor!

—Preferiría que lograras el efecto contrario.

—Lo siento,  ero no es algo que pueda hacer iría contra mi buena reputación.

El antiguo hizo un gesto de disgusto y se miro al espejo, tal vez algún día le preguntaría a su hijo de donde venia el mito de que los vampiro no podían reflejarse en ellos. Tenía una buena teoría sobre el por qué, pero quería confirmarla y aunque estaba seguro de que Madara podría darle una excelente y detallada respuesta prefería evitarlo, sólo esperaba que irse al otro lado del continente lo librara de su molesta presencia por un tiempo.

 

Entre tanto en un castillo, un joven se encontraba en los mismos menesteres que los dos hombres mayores, alisando el traje con una vanidad y distinción innegable. Sonrió ante la imagen frente al espejo y le pregunto a su criado.

— ¿Crees que estoy listo?

—Señor creo que es excesivo los cuidados que tomo, no sabemos si va a venir siquiera, es un ser impredecible, puede ser que se haya irritado y decidió no venir.

—Vendrá estoy seguro e picado su curiosidad…¿Además porque me tomas? Estuve averiguando en los aeropuertos ya fuera públicos o privados  la llegada de un avión procedente de Australia con un hombre que coincidiera con la descripción que di ¿Y adivina qué? Llego hace seis horas.

— Aun así considero que es inmensamente arriesgado.

— Eso lo hace más divertido.

—Pero existe una fuerte posibilidad de que…

— ¡Ya basta! ¡No arruines mi diversión con tus temores de m***! ¡E pasado toda mi vida escuchando hablar de él y viendo ese cuadro en la pared, tengo el derecho a conocerlo, sin interferencias de nadie, ni siquiera de…! Mira no me molestes más y mejor ve a ultimar los detalles de la fiesta.

—Si mi señor.

—Hiroha ¿No le mencionaste a nadie sobre la recepción verdad?

—A nadie que pudiera soltar la lengua sobre nuestro invitado, joven amo.

—Bien.

 

Comento satisfecho Toneri, pasándose la lengua por los labios esperaba que esta noche fuera muy entretenida ¡Oh si, extraordinariamente entretenida!

Notas finales:

Bien amigas y amigos me lamento por la demora en actualizar este capítulo y el lastimoso aviso que me tomare unos dias vacaciones asi que no podre publicar esta historia por unas semanas.

Pero necesito un descanso de la escritura para poder volver a retomarla con mas fuerza.

Les agradezco por su compresion y les deseo a todos: 

 

 ¡ UNA FELIZ NAVIDAD Y UN PROSPERO AÑO NUEVO!

Pd: Publicare  inmediante despues de este, un fic navideño, espero  lo disfruten! ;)


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).