Deidara miro con atención su teléfono, antes de guardarlo cuidadosamente en el bolsillo de su chaqueta, la petición de su hermano no era rara después de todo este trataba de esforzarse para ser lo más eficientemente posible a los ojos de su amante, rio para sí mismo. No importa cuánto Fugaku se esforzara por hacerle entender a Minato que lo considera muy capaz y era el amor de su vida, esté quería demostrarle que era algo más que un compañero de cama y que podía estar a su lado para brindarle ayuda cuando la necesitara, algo verdaderamente tonto porque el vampiro dejo claro desde un principio que lo consideraba su pareja y un igual… pero así era su hermano.
Mientras habría su coche sonrisa del rubio de pelo largo se hizo más amplia al recordar el pequeño incidente en que los atrapo ¿Quién iba decir que los Uchiha, aun los que tienen cara de señor de formal y aburrido con apariencia de ser más frígidos que tempano de hielo, pueden ser más caliente que el infierno? Pobre de su hermano no tenía oportunidad, no con una boca devorando su cuello y una mano dentro de sus pantalones mientras la otra hurgaba bajo su camisa. Todavía podía verlo en su cuarto completamente ruborizado al ser descubierto en esa pocisión tan inadecuada y todo a causa de unos escritos que Minato trajo y entre los cuales se habían traspapelado unos documentos que el pelinegro necesitaba ese mismo día.
El ojos azules mordió sus labios eso lo hacía sentir un poco frustrado, todos en su familia tenían una pareja, menos el… y si entendió bien los que significaba el apareamiento, incluso sus sobrinos prácticamente se habían casado antes que él… ¡Demonios hasta Orochimaru tenía su propio Uchiha acosador! En cambio él lo único que consiguió fue casi ser violado en su adolescencia por un desgraciado que lo drogo. Se pasó la mano por lo cabellos sabía que era nada más la envidia hablando y mientras estaba feliz por su familia no podía evitar pensar que lo estaba dejando de lado, Naruto y Menma tenían sus novios con quien pasar el tiempo y su hermano mayor un trabajo y un jefe muy ardiente al cual satisfacer en todos los aspectos ¡Dios porque no funcionaron las cosas con Sasori! ¡Si tan sólo el beso hubiera sido como lo esperaba!...Pero no se podía hacer nada a pesar de haberse dado otra oportunidad no había química entre ellos y no es que el pelirrojo no supiera besar ¡todo lo contrario! Sin embargo no fue suficiente el buscaba la pasión desbordada; que cada beso fuera como el ultimo que fuera a dar sobre la tierra, tal vez era culpa de su naturaleza impulsiva o su corazón apasionado... no sabía, pero el asunto es que su relacion con el el pelirrojo no funciono.
Suspiro con desencanto y al detener su coche vio a Obito en las afueras de la casa observándola con el entrecejo fruncido, se bajó y con una sonrisa al ver la expresión tan seria del Uchiha (algo bastante inusual en él) y acercándose preguntó.
— ¿Se puede saber qué es lo que puso esa expresión tan formal en tu cara hum? Es anormal verte sin que sueltes un chiste o comentario divertido hum.
El hombre sonrió suavemente ante el comentario (pero más por la persona quien lo decía) antes de responder— He estado llamando por varios minutos pero al parecer no hay nadie, recibí una llamada del big boss diciéndome que estuviera aquí lo más rápido posible.
—Puedo abrirte si quieres pero es inútil, los chicos andan de romance y probablemente salieron, en cuanto a los demás habitantes de esta casa salieron a la escuela o a trabajar, hum.
— ¿Aun Shin y Sai?
—Hidan los llevo de camino a una librería, ya que uno tuvo que llevar reparar su computador y al otro se le terminaron los lápices de dibujo…pero no creo que sea a ellos a quien esperas.
—Es cierto, sin embargo esperaba encontrar a alguien.
—Pasa y cerciórate por ti mismo, pero te advierto que es en vano.
Dijo el rubio abriendo la puerta y dirigiéndose a la parte de arriba, los criados tampoco estaban ya que habían salido a hacer unas diligencias dejando sola la enorme casa, se puso a revisar en todos lados hasta que sus ojos se posaron en la esquina de una carpeta que sobresalía de debajo de la cama, probablemente en su afán de tener lista las cosas para la reunión que tendría lugar hoy se había quedado leyéndolos hasta que lo venció el sueño. Los reviso y contento se dio vuelta encontrándose de frente con Obito que se había acercado silenciosamente, arrancando un grito del rubio.
— ¡Ah, no me asustes por lo menos has ruido cuando caminas, todos ustedes vampiros son tan silenciosos!
—Se supone que somos depredadores, nuestra presa no debe escucharnos acercarse.
—Pero los amigos sí, o les causaran un ataque cardiaco, hum…
— ¿Qué?
— ¿Sucede algo? Normalmente ya hubieras sacado relucir a Tobi… ¿Es algo relacionado con la bruja que tenías por mujer?
—Ella ya no es nada de mi incumbencia, prefiero que el gran jefe se encargué de ella.
—Oye bobo—Señalo el ojos azules dando un ligeros toquecitos al pecho de vampiro justo sobre su corazón—deja de sufrir por esa mujerzuela, estoy seguro que si abres esto aquí encontraras miles de mujeres dispuestas a hacer lo posible por conquistarte.
El vampiro tomo la mano del, hombre joven y lo miro a los ojos preguntándole.
—Te dije que estoy interesado en ti ¿Cuándo me tomaras en serio?
—Lo dices por despecho Obito ¡Cielos no sé qué te pasado estos últimos días estas demasiado formal!
El pelinegro gruño, había sentido el olor del zorro sobre su Deidara hace un tiempo y había odiado cada segundo de ello, quería darle el tiempo al ojos azules para que pudieran se conocerse mejor, pero la posibilidad de perderlo le enfurecía normalmente no mostraba esta parte de sí mismo pero…con fuerza tomo la cintura del macho más joven y la apretó contra su cuerpo para gran sobresalto de éste, quien vio la cara del varón acercarse a la suya y decirle.
— Lo digo muy en serio, no bromeo cuando se trata de relaciones.
— ¡Oye ya es suficiente con el juego, suelta!—Repuso el rubio tratando inútilmente de empujar al otro hombre lejos de si, aun sorprendido por la cantidad de músculos que podía sentir bajo el traje del Uchiha, como alguien tan fuerte podía tomarlo con tal delicadeza y aun así ser tan dominante y poderoso era un misterio, uno que no quería averiguar trato más difícil de alejar al azabache y exclamo airado— ¡Oye te dije que me dejaras ir, hum!
— Y si no quiero.
Labios se acercaron peligrosamente a los suyos y casi podía sentir el aliento cálido y el aroma masculino y embriagador del vampiro, con los ojos muy abiertos Deidara con pánico trato de alejarse casi podía sentir las bocas tocándose e involuntariamente cerro los parpados en espera del beso; cuando de repente un estruendo en la parte de abajo hizo separarse al vampiro con un gruñido y arranco un suspiro de alivio del rubio quien sentía las piernas un poco temblorosas y débiles, ambos se dirigieron de inmediato hacías abajo quedándose petrificados al ver una enorme criatura agazapada en el suelo llevando lo que parecía ser una persona inconsciente en su lomo, acompañado de los dos sangre pura y Naruto, los tres pisando cuidadosamente los vidrios rotos de la mesa de la sala, el enorme ser al parecer muy asustado de moverse por temer romper más cosas. El rubio corrió a su sobrino y con cuidado le ayudo a llevar al convaleciente a una habitación, pensando que después de esto quería una explicación del porqué un monstruo destrozo la sala de estar de orochimaru y quien era el moribundo (eso le parecía por el estado de debilidad del hombre) ¡Y debía ser muy buena!
En otro lugar en una habitación de apariencia sencilla Shikamaru bostezo, pensando que era hora de dormir, rastrear, borrar y alterar los archivos de todo lo relacionado con Naruto y sus amigos así como revisar la información guardada en los archivos de varias empresas militares así como de algunos gobiernos no era tarea fácil…bueno si lo era sólo que resultaba muy tardado y tomo varios días, casi estuvo a punto de reír al ver cómo es que hacía el potente computador para evitar ser descubierto era ridículamente sencillo y complicado a la vez, un dispositivo cambiaba la dirección IP de manera aleatoria cada veinte segundos escogiendo al azar en miles de billones de códigos posibles por si no bastara la señal remota que mandaba la conexión a la computador parecía estar conectada directamente con el cable de fibra óptica que llevaba la información a nivel mundial, el cual podía cambiar manualmente si deseaba a la red de satélites en el espacio.
Con ochenta de RAM y más de 40 terabytes de espacio para guardar información y sin poder averiguar qué tipo de procesador tarjeta gráfica o de video utilizaba la computadora era muy potente, por no decir el sistema operativo extremadamente intuitivo y fácil de usar… lo único desconcertante era el dispositivo de enfriado, vamos esperaba un sofisticado sistema de enfriamiento cuya tecnología se basara en nitrógeno líquido… ¿Pero un cristal? El cual por cierto venía metido en una caja con la advertencia de: “No se habrá, más que en casos de necesidad” ¿?
El chico conecto el puerto al pc y levanto la tapa de la caja segundos después la temperatura de esté empezó a bajar a velocidades desconcertantes…al igual que en la habitación el joven entorno los ojos: por supuesto magia y cuando se trataba de ella la lógica se iba al garete, ha esta alturas debería estar acostumbrado; estaba ayudando a su amigo que era un zorro de fuego que estaba de novio con vampiro de sangre pura que estaba emparentado con quien sabe quién de la realeza europea, y cuyo hermano gemelo era un zorro de hielo que estaba saliendo con un hombre lobo y por si no bastara dicho amigo tenía como bisabuelo a un dragón mitad vampiro, con mal carácter y lengua viperina y para ponerle la cereza al pastel el dragón estaba siendo pretendido por el imperator de todos los vampiros el cual de lo que había escuchado tenía poderes nada amistosos, se froto la frente necesitaba un descanso rápido o iba tener un colapso mental, tosió fuertemente apresurándose a desconectar la cosa antes de conseguir un resfriado importante.
Por su parte, un hombre elegante se encontraba sentado en un sillón mirando las luces de la ciudad, el rostro estoico no revelando ni siquiera un poco de la preocupación que sentía, de pronto recibió el mensaje que tanto había estado esperando.
—Abuelo.
—Itachi ¿Y bien?
—Si estaba en ese lugar, su prisión estaba oculta bajo la apariencia de una casa derruida, no decidimos de algunas docenas de criados y tres troll, su estado era bastante lamentable pero Naruto se encargó de brindarle un poco de su energía e lo indujo a un sueño forzado. En estos momentos está siendo atendido por el abuelo de Naruto, su estado era muy malo así que mi zorrito casi gasto el poder de dos colas y aun así su estado era lamentable, Arbalad tuvo que destruir el árbol al cual estaba aprisionado porque en cuanto sentía que el elfo se recuperaba aunque sea un poco absorbía toda la energía que se le había pasado, eso lo hirió un poco pero Naru sello sus heridas.
—…Suena a una planta parasita entonces, debe haber habido toda una foresta ahí abajo.
— ¿La conoces?
—Vi una de esas en mi juventud alimentándose de los restos de un dragón, probablemente uno de los más débiles. Era apenas de un pie de alto pero ya se había drenado toda la magia y fuerza a de la infortunada criatura, a su alrededor había una cantidad antinatural de musgo arbustos y flores diminutas.
— ¿Qué sucedió con ella?
—Trato de aferrarse a mí en cuanto la toqué, por curiosidad intente darle un poco de mi energía… y murió a los pocos segundos.
—Déjame adivinar, en lugar de pasarle energía tu cuerpo absorbió la de ella.
—Sí la planta acentúa la naturaleza de las víctimas con la intención de amplificar sus poderes y así obtener más nutrientes, tratándose de un vampiro los cuales nos alimentamos de la vida misma…
—Trabaja a la inversa.
— ¿Cómo esta, Hashirama?
El sangre pura se asomó al cuarto donde estaban Naruto y Dan, tanto éste último como Tsunade parecían bastante preocupados por el elfo, la médico limpiando el cuerpo de éste con un toalla húmeda lavando la madera y el polvo del cuerpo maltrecho, mordiéndose los labios hasta hacerlos sangrar era como ver a alguien salido de un campo de concentración o padeciendo el caso más agudo de anorexia, ambos zorros dando su energía para restaurar su vigor y mantenerlo dormido y calmado al enfermo pero el hecho es que era un elfo y ninguno de ellos sabía cómo atenderlo como se debía.
—No te mentiré esta grave, pero Naruto y su abuelo están haciendo todo lo posible para que se recupere, sin tan sólo…
— ¡Que es este desastre! ¡Oye pajarraco eres un poco grande para estar dentro de una casa, no crees!
—Cachorro de lobo mide tus palabras, no hice esto a propósito.
— Fuking shit tienes mejor educación que yo, debes perteneces a uno de esos vampiros estirados.
— ¿Qué fue eso Itachi?
—Nada, un deslenguado animal que acaba de llegar está molestando a Arbalad.
—Dile a Arbalad que lo ignore y que lleve a Óbito al lugar para que haga limpieza y que no deje rastros.
—Está bien…¿Cómo están las cosas por halla?
—Lentas pero la información obtenida es muy valiosa, espero poder averiguar pronto quien está detrás de los monstruos.
—Habrá que encargarse de los militares primero.
—He dado los primeros pasos para eso, haciendo rodar un par de cabezas…aunque no sea el termina adecuado, mis cabilderos harán el resto así como espero que ese niño humano haga su trabajo, después de todo en el mundo humano todos se arrodillan ante el dios dinero, son los enemigos de nuestro mundo el que me preocupa.
—Entiendo.
—Itachi si las cosas no cambian dentro de unos minutos, llévate a tu chico; ha hecho todo lo que ha podido Hashirama es fuerte. Sino murió por esa planta parásita que se lo ha estado comiendo por tanto tiempo no morirá ahora que lo han librado de ella, puedes decirle que estoy agradecido por el servicio que me ha prestado.
El cuervo hizo una mueca ante el comentario excesivamente formal sabiendo que su abuelo consideraba que tenía una deuda con su pareja y que a este como a todos los Uchiha no le gustaba deberle nada a nadie, por lo que le respondió.
-—Dudo que retroceda en su empeño de verlo mejorar aunque sea un poco…y abuelo él lo hizo sin esperar nada a cambio no considera que estas en deuda con él y probablemente no se sienta cómodo recibiendo un favor tuyo.
—Yo lo considero así y es lo único que importa, algún día le pagare el favor.
El joven movió la cabeza un poco contrariado y volvió su atención hacia abajo donde Shin y Sai miraban asombrados a la majestuosa criatura, Obito hacía tiempo que había interrumpido la conversación entre Arbalad e Hidan y escuchaba con faz muy seria lo dicho por el grifo, segundos después ambos desaparecieron haciendo sonreír al sangre pura, puede que no fuera de la familia real pero el vampiro seguía siendo un black y la mayoría de las veces ejecutaba sus obligaciones aun antes que se las ordenaran. Sus ojos se posaron en el cuarto donde los dos sanadores y su compañero trataban arduamente de estabilizar al elfo, Tsunade estaba haciéndole una larga trenza al peli-castaño y se preguntó si era maldad de su parte el querer reír cuando la situación era tan grave, suspiro habría sido más fácil cortar la cabellera del varón pero el grifo les advirtió que no la cortaran totalmente explicando que sería como quitarles las hojas a una planta o la corona a un rey…el vampiro sospechaba que era más bien por vanidad pero teniendo en cuenta qué no sabía nada sobre esa especie no podía aventurar nada.
Madara miro su mano moviendo con impaciencia los dedos, tal vez era hora de pagarle una visita rápida al par de “huéspedes especiales” que estaba cómodamente “alojados” en un hotel cercano bastaría sólo un vistazo para ver cómo la pasaban. Un gemido en la cama del lado le hizo reconsiderar su decisión por el momento lo más importante era averiguar lo que había en la mente de la cría con suavidad paso la mano por el pelo del niño y se sentó al lado de la cama cerro los ojos pasándose la mano por los cabellos, ojos azules se abrieron y miraron al macho a su lado y una risa de niña pequeña festiva y antinatural broto de sus labios atrayendo la atención de esté le tomo el mentón al chico e inquirió ¿Se puede saber quién realmente eres tú?
Labios rojos de blancos dientes y largos colmillos se curvaron en una sonrisa maliciosa en respuesta a la pregunta del imperator, un brillo enfermizo inundo sus ojos y se lanzó hacia el macho con la intención de a iniciar un juego lúdico, solo para que su acción detenida por una mano fuerte y cuando miro con rabia hacia quien había osado impedirlo choco de frente con un par de ojos amarillos y un rostro pálido que le resultaba extrañamente familiar. Orochimaru estudio al muchacho que volvió a caer dormido en unos segundos, por más que le disgustara la idea Madara tenía razón no importaba que tan fuerte era el Uchiha no podía hacer esto sólo, no se trataba de cuan poderoso era el vampiro sino que tanto podía resistirse a los avances del joven portador, había tenido que sujetarle la mano a éste antes de que acariciara la virilidad del hombre mayor y lo besara descaradamente…sin embargo no era lo que le sorprendido, lo que lo había llenado de temor y preocupación es que por unos segundos, por breves instantes había creído ver los ojos del odio mismo.