Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Golpes de la realidad por Samantha0507

[Reviews - 227]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Este es HimuIzu, es us proceso de perdón.

Himuro sintió que el pecho se le apretaba, no podía creer lo que sus ojos veían, alejó el teléfono de su cuerpo, tratando de respirar, de que el aire volviera a sus pulmones, podía escuchar la voz de su hermano, pero solo podía fijar la vista en las personas que hablaban en la puerta de su casa.

 

Hyuga acariciaba la mejilla de Shun, mientras este sonreía, casi podría jurar que le decía amor.

 

Himuro sintió la necesidad de acercase, pero simplemente había perdido las fuerzas para hacerlo, el recuerdo de Shun y el otro caminando por las calles, besando, siendo una pareja feliz.

 

—Shun…— la voz salía débil, quería gritar, quería exigirle al moreno que se alejara de su pareja, pero nada, simplemente había perdido toda fuerza, ni el mismo comprendía como podía continuar respirando.

 

Hyuga se acercó al pelinegro, rodeándolo, en un abrazo, para Himuro fue visible su pequeño hijo, que reposaba en los brazos de Shun, su pequeño, el fruto del amor que ambos se profesaban, estaba justo en medio,  notándose sumamente cómodo cerca del cuerpo del antiguo capitán de Seirin.

 

Miles de dudas, de preguntas daban vueltas en la cabeza de Tatsuya, sintiéndose engañado, desde que Shun se había embarazado había omitido la existencia de Hyuga, pero eso no significaba que Shun cortara relación con él, incluso podía jurar que el de lentes había ido al hospital a conocer a su hijo.

 

Se sobó las manos, sentía el estómago apretado y realmente era como si todo su cuerpo doliera.

 

Espero que Shun entrara a la casa, para acercarse, trató de lucir calmado, pero sus manos temblaban tanto que no era capaz de poner la llave en la cerradura,  se pasó la mano por el rostro, respiró tranquilamente y entró a la casa.

 

—Estoy de vuelta…—Shun se giró con el niño en los brazos, tenía una sonrisa en los labios, la que desapareció al notar el semblante que traía Tatsuya.

 

—Amor ¿paso algo con Kise o el bebé? —Shun dejó al niño en su sillita y se acercó preocupado a su pareja. — Tatsu, háblame, ¿te sientes mal? Llamaré a Midorima. — Shun se giró sobre si mismo, pero Himuro le tomó el brazo y lo detuvo.

 

—los vi…—Shun lo miró realmente confundido, es que no podía entender a qué se refería. —te comportas con él como si nada hubiese pasado, no logrando entenderlo, lo amabas.

 

—Tatsu…

 

—Es que, fue tu amigo, tu compañero en la cancha, es un hombre sano, tuviste la oportunidad de estar con él y te quedaste conmigo, Shun yo no…—Shun le tomó el rostro y lo miró a los ojos, los ojos de Shun terminaron por calmar a Tatsuya, quien simplemente aceptó dócilmente como su pareja lo llevaba a la sala.

 

—Si Tatsu, me comunico con Hyuga relativamente seguido, es mi amigo, fue mi compañero y fuimos pareja, pero ante todo eso te elegí a ti simplemente por eso, es tan difícil que lo comprendas, que entiendas que aunque los años pasen, no cambiaré mi elección.

 

—Eso es lo que no logro entender Shun, me elegiste, aun cuando habías logrado estar con la persona que amabas, es eso lo que no logro comprender.

 

—Esto no es reciente, ¿Tanto te preguntas que fue lo que paso?¿qué cambio?

 

—Cada noche, simplemente me pregunto cada día, si realmente no te arrepientes de que sea yo el que se encuentre hoy a tu lado.

 

Shun lo miró apenado, odiaba recordar lo que había hecho, recordar todo lo que había provocado, pero lo justo era que Tatsuya supiera la verdad, era que entendiera como el mismo se había dado cuenta de con quien quería estar.

 

—El día de la cita, cuando me quedaría en tu casa, fue ese el día donde todo de alguna manera comenzó.

 

Shun se cambió de camisa por tercera vez, ese día era su primera cita durante todo el día, esa noche se quedaría en la casa de Tatsuya.

 

Se miró al espejo y se sonrojo pensando en cómo se vería su cuerpo junto con el de Tatsuya, pensando en cómo con los días se había dado cuenta de lo diferente que era el moreno, un hombre atento y gentil, varonil, un hombre en todo uso de la palabra, cualquier persona se habría enamorado de él, pero fue en este último pensamiento que la mente de Shun se detuvo, Tatsuya podía tener a la persona que quisiera, era un casanova sin intentarlo si quiera, pero ahora estaba él, que aunque lo intentaba no atraía a nadie, que a pesar de estar por años enamorado de Hyuga, el otro ni siquiera lo había mirado, entonces ¿cómo Tatsuya estaría interesado en él? De un momento a otro todo el entusiasmo que sentía abandonó su cuerpo.

 

Su amigo era feliz, eso era lo que debía importarle, Hyuga y Mibuchi eran felices y nada más debía importarle.

 

Miró la hora, aún era temprano, cuando su teléfono comenzó a sonar, por un segundo temió que fuera Himuro, pero muy lejos de lo que pudo prever era Hyuga quien lo llamaba.

 

—Hyuga…

 

—Shun, ¿estas ocupado? — la voz del de lentes se escuchaba extraña, como si quisiera llorar. —necesito, creo que necesito un buen amigo ahora.

 

Shun no supo que decir, simplemente omitió todo y corrió en dirección de su amigo, olvidando a Tatsuya en el proceso.

 

Shun llegó en el menor tiempo que pudo a la casa de su amigo, para encontrarse con todo el cuarto destruido y un Hyuga sumergido en dolor y tristeza.

 

Fueron segundo, Junpei simplemente rodeo el cuerpo de Shun, encontrando sus labios en el proceso, en un beso frío y doloroso.

 

Shun se sintió en las nubes, Hyuga por primera vez le estaba dando la atención que el tanto buscaba.

 

Ambos continuaron en el juego previo, quitándose poco a poco la ropa, pero toda la emoción de Shun se vio apagada, cuando un suave “Reo” salió de los labios de su amante.

 

El de lentes repitió el nombre del que fuera su pareja por todo este tiempo una y otra vez, mientras embestía el cuerpo de Shun, hasta que ambos llegaron a su límite, corriéndose en un fuerte espasmo.

 

Shun simplemente había llamado a Himuro, solo en ese minuto había recordado su cita, aunque sentía el alma rota, Hyuga solo lo había buscado como un reemplazo, como un cualquiera con el que desfogar sus ganas, pero si eso era lo que podía tener de la persona que amaba, se conformaría.

 

Shun había corrido a los brazos de Tatsuya cada vez que se acostaba con Hyuga, se iba devastado, dolido, amaba a un hombre que solo lo usaba, cada vez que este lo llamaba Reo, un poco de su corazón se hacía trisas, le dolía el alma, pero si había notado como el actuar de Himuro había cambiado.

 

Hyuga solo lo había buscado para sexo, pero de un día para otra le propuso que vivieran juntos, Shun estaba sentado en la cama, con el pecho apretado, con el alma adormecida.

 

—¿Vivir juntos?¿cómo amigos?

 

—No, como pareja. — Hyuga le tomó las manos y lo miró. — sé que me quieres Shun, creo que siempre lo he sabido, no puedo decir que me encuentro enamorado de ti, pero quiero que lo intentemos, que si no tienes a nadie, nos demos esa oportunidad, esa posibilidad de ser una pareja, quizá en el futuro seamos una familia.

 

—Pero, pensé que tú y Mibuchi.

 

—Reo va a casarse, está comprometido en matrimonio, no me lo dijo y su familia está realmente molesta de que se entrometiera conmigo.

 

—Hyuga…

 

—Creo que es mejor que me llames Junpei de ahora en adelante.

 

Shun entendía que está era la única oportunidad que tendría de estar cerca de la persona que amaba, está era la única forma que tenía para poder ser quien pasara su vida junto a Hyuga, pero aun con eso en la cabeza, no sentía la felicidad que tanto esperaba.

 

Fue a casa de Himuro y simplemente se sentaron en la sala a conversar, pero Shun pudo notar como el gesto de Tatsuya cambiaba por sus palabras. —Hyuga me pidió que me mude con él y le dije que sí.

 

Shun se acomodó en silencio, entre los brazos de Tatsuya, se quedaron juntos, pegados, sintiéndose el uno al otro, Shun sabía que eso era una despedida, pero no quería alejarse esos brazos, del lugar que lo unía con la única persona que lo había elegido como primera opción.

 

Kagami había sido el primero en reaccionar—¿Pero estabas con mi hermano? —Shun no fue capaz de mirar a los ojos de Kagami, ni a ninguno de los miembros de Seirin, se sentía como la peor basura de él mundo y era su culpa.

 

Las semanas siguieron pasando, pero Shun no podía sonreír, no podía sentirse feliz, la imagen de Tatsuya, la forma en la que lo tocaba, cada parte de su piel extrañaba al antiguo capitán de Yosen.

 

—Te enamoraste, no es así Shun. —Junpei se sentó junto a Shun y lo miró a los ojos. —puedo verlo en tus ojos, lo quieres a él, creo que es minuto de dejar esta locura, no puedes estar conmigo solo por el pasado, por el amor que me tuviste alguna vez.

 

—Yo te amo, está es mi oportunidad, es la primera vez que puedo tener algo maravilloso con quien amo.

 

—Vamos Shun eso no es verdad, ¿realmente me amas? ¿Realmente piensas en mí? — Shun tenía su rostro cubierto de lágrimas, no decía palabras, así que Junpei simplemente contestó por ambos.

 

—No me amas, sé que amas a Mibuchi

 

—Reo es mi mundo y nadie va a llenar ese espacio en mucho tiempo, no quiero obligarte a que sufras la vida siendo un plato de segunda mesa, no te puedo ofrecer nada además de esto, no te puedo ofrecer mi amor y mucho menos mi corazón Shun, eso ya lo tiene Reo, pero puedo asegurarte que esa persona en la que estás pensando en este minuto, es quien verdaderamente llena tú vida y creo que de verdad debes ir con él.

 

—¿Tú que harás?

 

—Yo…—Junpei se quitó las gafas y agregó. — olvidar, pensar, mejorar, no puedo vivir con el recuerdo de Reo para siempre, él debe hacer su vida con el hombre que realmente le conviene y aunque me duele decirlo, ese no soy yo. — se quedó pensativo, mirando a la nada. — Reo es un hombre de buenos sentimientos, con un futuro prometedor, será feliz y eso es lo que más espero.

 

Shun comenzó a llorar, recordando a Himuro, recordando a Reo, incluso pensando en Hyuga y sus palabras, todos ellos eran adultos y buenas personas, él era el único que a pesar de todo, seguía siendo un crio mal criado.

 

—Yo iré con Tatsuya…

 

Hyuga besó la frente de Shun, en un gesto simplemente paternal. —Si las cosas no salen bien, siempre podrás venir aquí, siempre tendrás una casa, no tengas miedo.

 

—Gracias…

 

 

—Salí en dirección a tú casa, fue cuando te encontré, cuando vi que habías intentado…—Shun lloraba.

 

—Siempre creí que Hyuga era una persona cruel, pero veo que solo lo estaba juzgando. — Tatsuya estaba sorprendido, a pesar de todo, pero aún tenía dudas. —Shun quiero que seas honesto conmigo, solo respóndeme con honestidad, ¿lo amas? ¿Aún amas a Hyuga?

 

Shun lo miró con los ojos llenos de lágrimas. — Lo amo. — Dijo en un jadeo, mientras Himuro apretaba los puños, con desesperación. — lo amo como un hermano, él me hizo entender que estaba confundiendo las cosas y le estaré completamente agradecido todos los días de mi vida, pero con el único que quiero pasar el resto de mis días es contigo, sé que nunca podrás confiar en mí y sé que tienes miedo de que me vaya, pero aunque no quieras creerme me quedaré, estaré aquí y esperare que puedas confiar en que te amo.

 

—Shun…

 

—Yo, cuando escuche a Hyuga pensé que era un poco tonto creer que alguien estaría mucho tiempo en tu corazón, que solo una persona ocuparía ese lugar, pero ahora sé lo que es sentirse de esa forma, yo, para mí ahora no hay nadie, excepto tú Himuro Tatsuya y pasaran años, décadas y seguirás siendo tú.

 

—Shun…

 

— Me elegiste primero, me miraste cuando nadie lo hacía, me diste tú amor desinteresado y estuve a punto de perderte, por ahora soy capaz de dar mi vida si eso me asegurara que nunca te veré llorar por mi culpa. — Shun le acarició la mejilla de Tatsuya, mientras su pequeño movía sus manos, para luego llevarlas a su boca. — me diste el regalo más hermoso del mundo, pero hay noches, tardes, días completos en los que no estás aquí y el recuerdo de cómo te encontré, de la sangre, de que poco a poco te ibas, aún recuerdo que sentí que simplemente tu vida se iba en cada respiro, todos esos días, pienso y terminó llamando a Hyuga, a Kuroko, últimamente hasta a Aomine, tratando de sacar de mi cabeza todas esas estúpidas ideas de que algo pudo pasarte.

 

—Shun te lo prometí…

 

—Y yo me prometí, que nunca en mi vida te haría sufrir y justo ahora no lo haces. —Shun junto con las manos de Tatsuya y agregó. — si te hace sentir más tranquilo, si eso evitara tú malestar, dejaré de ver a Hyuga, dejaré de llamarlo, puedo hacer eso por tu felicidad.

 

—No, no hagas eso. — Tatsuya se dio cuenta del semblante triste de su pareja, Shun se sentía culpable por todo lo que había pasado. — soy un idiota en creer que me engañas, solo no quiero que un día te vayas de mi lado, no podría vivir si no estuvieras a mi lado.

 

— Tonto Tatsu, no hay nada en este mundo que me aleje de tu lado.

 

Ambas se dieron un suave beso en los labios, algo tranquilo, lento, pero repleto de sentimientos.

 

Shun fue a preparar la cena y simplemente preguntó. — Shun es decir que Hyuga viene seguido a casa.

 

—En realidad, pero hoy era especial, incluso trajo pastel. — Shun puso los trozos en la mesa.

 

—¿Celebraba algo? —Himuro sentía una real curiosidad.

 

—Si. —Shun le miró con una sonrisa en los labios. —Mibuchi está embarazado, Hyuga y Mibuchi serán padres.

 

Tatsuya sonrió entendiendo, ese era su mundo y su final feliz.

Notas finales:

Gracias 


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).