Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Dios maldiga a los rubios por niky-cham

[Reviews - 378]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Bueno, aquí estoy, cumpliendo lo que había prometido, les traigo una conty que seguro todos estaban esperando con muchas ansias. Quizás con retraso, pero hecha con mucho (mucho) amor <3
Muchas gracias a las personas que comentan y me apoyan en cada actu, una vez mas he contestado sus comentarios, asi que espero puedan leerlos nuevamente.
Bueno, esta vez si que no les doy la larga, ya se que quieren ir directo al grano. Disfruten :)

Capítulo 27: Pasión y entrega.

Apenas pudo notar cuando Sasuke le sostuvo entre sus brazos. Un vértigo amistoso le sobrevino, solo atino a abrazar el cuello del moreno y hundir su nariz en la misma curvatura.

—Me voy a caer, —musito. Sasuke solo una risa.

—Claro que no, jamás te dejaría caer. —Tomo impulso para hacer saltar al rubio de sus brazos. Cual gato el blondo se erizo por completo y volvió a asirse de los brazos del mayor. Sasuke volvió a reír, y aunque Naruto lo negara, también le había hecho gracia. En el fondo se sentía completamente seguro entre esos brazos.

Sasuke le soltó sobre el mullido colchón. Así, húmedos como estaban, el mayor se acomodó sobre su cuerpo y termino de mojar la cama. A Naruto lejos de molestarle la sensación de humedad, le encantaba, sus pieles frías por el roció no secado, clamaba por abrigo, una calidez que solo la pasión podría alcanzar.

Apresurado, el moreno busco los labios del menor. Naruto le recibió gustoso, le encantaba aquella forma de besar que tenía Sasuke, y es que era húmeda y cálida, tierna, pero a la vez apasionada. Le gustaba como el mayor con una juguetona sonrisa le mordía el borde de su labio inferior, jalaba un poco, y jamás le hacía daño. En medio de dichos actos Sasuke busco mas allá de su boca, las manos curioseaban todo su cuerpo sin ningún reparo, recorriendo ciertas zonas con rapidez, de pronto disminuían su ritmo, entreteniéndose en el camino con los traviesos pezones del menor.

—Me encantas, —confeso el moreno. Ya estaba más que encendido, sentía la opresión de su miembro pulsando dolorosamente por están dentro de su rubio. Pero no, no cedería ante sus más bajos instintos, no sin antes haber preparado a su amor.

Impulsando por la fuerza del deseo bajo lentamente hasta la zona más erógena del blondo, descubrió gustoso una matita de vellos púbicos rubios, su experticia le hizo saber que Naruto lo había cortado de manera perfecta, especialmente para él. Nada pudo encenderle más que eso. Con maestría metió su cabeza entre las piernas del menor, noto que Naruto se tensaba, mas no hizo nada por detenerle. Con una sonrisa prosiguió su trabajo, ubico su boca cerca de aquel dulce lugar y deposito un beso rápido en dicha entrada.

—No te muevas, —Indico. Tan pronto Naruto hubo asentido, con su rubor que le llegaba hasta el cuello, Sasuke decidió seguir.

Pensó que Naruto se negaría, pero fue todo lo contrario, tan pronto paseo su lengua sobre la humedad entrada del menor, este comenzó a demostrarle el buen trabajo que hacía, con unos gemidos agudos y encantadores. Animo para Sasuke, que emocionado continuo hasta que sin remedio el menor se corrió, manchándole parte del cabello.

—¡Lo siento! —Exclamo rápidamente el rubio. Sasuke negó con la cabeza y sonrió.

—Tendré que castigarte. —Guiño un ojo, citando cierto conocido cliché del sexo.

Sasuke era hábil. Naruto pudo notarlo cuando el mayor decidió alimentar su boca con nuevos dulces, e insaciable paseo sus dientes sobre los enrojecidos pezones del menor, pero no desatendió la entrada del mismo, ¡claro que no! Con su mano libre comenzó a pasear los dedos sobre esta, provocando de vez en cuando, pulsando con ellos la dulce entrada, mas no llegando a insertar ninguno.

Naruto por su parte vivía una disyuntiva, entre lo bien que se sentía y lo inútil que estaba siendo. Quería hacer algo por Sasuke, había estado preparándose mentalmente para ese momento, sin embargo, sentía que el hambre del moreno no le permite hacer más que estar allí recostado, dejándose tocar por las veloces manos del mayor.

—Sasuke, Sasuke, —llamo en desespero, y noto que eso encendía al pelinegro.

—Mi nombre suena tan bien cuando tú lo pronuncias, —comento el mayor.

—Déjame hacer más por ti Sasuke. —Aprovecho el rubio. Sasuke le observo sin comprender a que se refería. Aquel tiempo de pausa, fue justo lo que Naruto necesitaba.

Impulsado por sus ganas de satisfacer al moreno, detuvo las manos del mayor, pego sus pechos en una candente cercanía, y se animó a recorrer el cuerpo de Sasuke a base de besos y mordiscos. Un gruñido casi gutural, le indico lo gustoso que se encontraba el contrario. Naruto en ese momento descubrió que le gustaban esas reacciones, y quería más. Animado por las respuestas de su amante, dirigió sus dulces y vírgenes labios hasta el viril miembro del mayor. Erecto y húmedo, pulsaba ansioso de ser atendido, y Naruto tenía todas las intenciones de hacerlo.

—Naruto, —llamo Sasuke, abrumado por el placer. De tan solo ver el rostro de su rubio tan cerca de su intimidad sentía que podía acabar con todo en tan solo un instante, y empotrar al blondo contra cada uno de los rincones en esa habitación.

Una sonrisa gatuna se instauro en los labios traviesos de quien se encontrará dominando en dicho momento. Naruto de un solo bocado engullo el enorme miembro, y con suerte de principiante hizo enloquecer a Sasuke de tan solo una lamida. La imagen era más que excitante, los labios húmedos y rosados del blondo, rodeaban aquel pedazo de carne, su lengua pasaba a recorrerlo de vez en cuando, rozando la extensión con osadía, bebía rápidamente las gotas de líquido pre-seminal que el moreno era incapaz de contener, y dejaba escapar de vez en cuando.

—¡Suficiente! —Detuvo Sasuke. Lo inminente estaba a punto de suceder, pero no quería que fuera de esa manera, él deseaba eyacular dentro de Naruto, y para eso solo había una opción, preparar a su virgen compañero.

Habilidoso invirtió posiciones, dejando nuevamente el cuerpo del menor contra el colchón. Esa era la mejor posición. Ilusionado por la posibilidad de que su doncel alguna vez decidiera entregarse, siempre cargaba un pequeño estuche con lubricante y condones, apresurado estiro sus manos hasta el bolso y dio con el preciado objeto tan pronto abrió la cremallera.

—Perdóname, —susurro en el oído de su rubio, justo antes de que dos húmedos dedos ingresaran en la virginal cavidad y erizan la piel del menor. Sabía que Naruto estaba tenso, y eso no mejoraba el estado de ninguno de los dos. —Relájate cielo. No quiero hacerte daño. —

—Pero duele. —Intervino el menor. Ya una pequeña lagrimilla escapaba de sus ojos azules. En general Naruto era muy valiente, pero no por eso sentía menos dolor.

La respiración agitada de Sasuke se compaso al oír esas palabras. Estaba siendo demasiado ansioso. Retiro uno de los dedos, y apunta de besos calmo el dolor de su doncel. Con la mano libre dedicaba acaloradas caricias al miembro del menor, que poco a poco empezaba a despertar, mientras los gemidos de dolor mutaban en candentes jadeos.

—Voy a poner otro, ¿bien? —Recibió el asentimiento de su rubio, y eso dio pie para que continuara.

Sasuke fue tierno y comprensivo. Tan dulce que Naruto logro comprender el término “Hacer el amor”. Y es que el moreno le trataba con tal calidez y cuidado, que no había otro vocablo para definirlo, le estaban haciendo el amor, y eso le encantaba.

De a poco olvido el dolor que habían significado los primeros dígitos, ahora tenía tres dedos dentro de sí, y muy de vez en cuando se colaba un cuarto. Debo reconocer que si le gustaba.

—Estoy listo Sasuke. —Musito acalorado. Sus brazos envolvieron el cuello del mayor, mientras este se cómo daba en sus piernas abiertas y pacientemente ingresaba en su cuerpo. Un gemido agudo escapo de sus labios, se sentía bien, pero a la vez era doloroso.

—Estas tan caliente. —Sasuke se aferró al cuerpo del menor, sintiéndolo pequeño y delicado. Recordatorio de que debía ser cuidadoso. Nunca se había movido tan lento y con tanta consideración, pero ahora era así, y estaba orgulloso por su auto control. ¿Quién no perdería la cabeza con ese cuerpo de ángel?

—Me gusta, se siente bien. Sasuke. —Era como si Naruto le estuviera poniendo a prueba. Era difícil controlarse después de oír esas palabras.

Midiendo sus acciones, pero a la vez presuroso por más, comenzó a enterrarse con mayor profundidad, más rápido, más excitante. A Naruto pareció agradarle, y eso solo fue impulso para continuar.

—Dime, ¿te gusta? —Consulto pegado al oído del rubio. Su aliento Cálido choco los tímpanos del menor, y un jadeo gustoso escapo de aquellos labios. Sasuke aprovecho la posición para mordisquear su lóbulo.

—Me gusta, —respondió el doncel. Su orgullo como varón aumento más, si eso era posible.

—Naruto, Naruto, Naruto, —repitió en cada una de sus embestidas. Como respuesta obtuvo agudos gemidos, deliciosos y adorables.

Las cosas se encendieron aún más. Sasuke sabía que el final estaba próximo, así que abrazo el cuerpo menudo de su acompañante con sumo cuidado, sostuvo su cintura hasta que en una sola embestida estallo de placer. La humedad entre sus cuerpos le indico que Naruto también había terminado, y tan pronto como cayeron lánguidos sobre las sabanas, sus respiraciones aceleradas comenzaron a pausar.

Sasuke sonrió alejándose un poco, quito su miembro del interior con el objeto de retirar el condón, que poco a poco empezaba a hacerse incomodo, le hizo un nudo y lo lanzo descuidadamente a algún rincón de la habitación, ya se encargaría luego de limpiarlo. Observo los ojos azules de Naruto, su rubio también estaba sonriendo y eso le hacía sentir aún más completo. Beso los cálidos labios del rubio, esta vez con una castidad casi desconocida.

Lo amaba, eso ya era seguro. Naruto había llegado a su vida calmando tantas heridas como un bálsamo, en el momento que más pensaba hundirse, allí estaba él, observándole con sus ojos azules, esperando que cada vez diera más de sí, y finalmente saliera de ese oyó llamado depresión, en el que probablemente se hallara metido después de tantas decepciones.

—Te amo, —confeso, para sorpresa del rubio. Quien dejó pasar la impresión y sonrió adorable, luego besos sus labios.

—Y yo a ti. —

Notas finales:

Gracias por llegar hasta aquí, espero que les haya gustado.
No olviden dejarme sus comentarios, que les pareció el capitulo o que esperan que venga después de esto, hay varios acontecimientos en el tintero, así que díganme nomas, sus deseos son ordenes <3


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).