Estaba tan nervioso que no quería ni bajarme del Jeep. Me sudaban las manos y mi estomago, generaba unos ruidos tan extraños que temí hacer el ridiculo si me presentaba de esa forma frente a los padres de Thor.
“¿Vamos?” –me pregunto
“¿Por qué no lo dejamos para otro día?” --trate de persuadirlo
Sonrió al escucharme dudar tanto, tambien se acerco y acariciando mi mejilla con su mano, confeso que él se encontraba nervioso. En sencillas palabras me dijo que era la primera vez que sus padres se involucraban formalmente en su relación sentimental. Le mire con alegría porque por un segundo pensé que él desistiría de esta reunión y regresariamos a mi casa como si nunca hubiese pasado nada.
“… Estoy nervioso pero sé que ellos te amaran” –repuso mientras me besaba y su mano se movia a mi nuca para evitar que me apartara
Sus besos son algo que roban cualquier atisbo de razón, provocan que me entregue a lo desconocido y que mi suerte, se la lleve el viento. Con dudas, mis manos viajan a su rostro para tambien sujetarlo con algo de posesión o desesperación, cualquier sea el caso, estoy muriendo de los nervios y por primera vez, sus labios comienzan a tranquilizarme.
Su cuerpo se removió de su asiento y se acerco un poco mas, para atraerme hacia él con su otro brazo rodeando mi cintura, ahí estabamos los dos casi escondidos del mundo en el garage de su enorme casa.
Jadee en su boca pero no se aparto, al contrario, practicamente lo tenía sobre mi. Sus manos se transformaron en crueles instrumentos quirurgicos que buscaban apartar la ropa que cubría mi espalda. Deje que lo hiciera pero tambien me resistia, porque despues de todo… tenía miedo. Cansado de una batalla sin éxito, cambio de tactica y tomo mi cadera, con fuerza practicamente me arrastro hacia su regazo y me obligo que me sentara a horcajadas sobre él. TERRIBLE MAL IDEA.
Otra vez jadee en medio de su beso posesivo pero esta vez, sus manos si lograron extirpar mi ropa dejandome desnudo de la mitad superior del cuerpo. DIOS MIO. La calefacción del Jeep estaba apagada pero yo sentía que estaba en su maximo funcionamiento, de seguro que tenía la cara roja y una expresión de terror mezclada con amor.
“… Eres tan dulce mi pequeño Loki… eres tan lindo… eres tan tierno… eres tan sexy con esos ojos verdes y tu cabello negro desordenado… tu boquita… tu piel… si, tu piel tan blanca como la nieve, libre de cualquier marca que indique que alguien se hubiese atrevido profanarla” –susurro sobre mi oído para terminar atacando mi cuello como si fuese un vampiro .
Abrí los ojos de par en par, ¿él sabe que yo…?, agache la mirada ya sintiendome apenado de que a mi edad, no hubiese tenido esa clase de experiencia que todo el mundo, creo yo, ya ha tenido.
“Delicioso” –comento con voz ronca sobre mi piel
“Thor” –lo llame y logre que me observara atento
“… Si te preguntas cuanta experiencia tengo en esto, te dire que no es la suficiente para evitar sorprenderme al tenerte asi… estoy seguro que juntos aprenderemos todo lo que es necesario saber sobre el amor” --sonrió y volvio a besarme logrando distraerme
¿Por qué mis brazos se alojaron alrededor de su cuello?, ¿por qué de pronto me parecía tan comodo estar asi con él?, ¿por qué una parte de mi necesitaba esto?... ¿cómo pude vivir sin él?... ¿cómo?
“Te amo, ¿lo sabes verdad?” –pregunto mientras tocaba mi cintura casi como si quisiera memorizar su forma
“Lo sé” –respondí logrando que esbozara aquella sonrisa tan segura de si misma
“… Esto ya es un pecado” –contuvo su risa y acerco su rostro hacia mi pecho, trate de reclinarme hacia atrás pero su mano en mi nuca me impidio alejarme tan siquiera un centimetro, practicamente en seguida experimente la humedad calida de su boca sobre uno de mis pezones.
“NO” –dije cerrando los ojos con fuerza al tiempo que mis manos se aferraban a sus hombros de tal forma, que de seguro le dejaría la piel roja con aquel contacto
No me escucho, no se detuvo, jugo todo lo que quiso en aquella zona hasta que comenzo a subir hasta mi cuello en donde mordio mi piel para despues besar con calma, casi con ternura. Cerrar los ojos no era mejor que verle haciendo aquello, peor aun cuando me mantenía tan cerca de él como el interior de un auto fuese posible.
“Eres mío” –susurro y se movió hasta el otro lado de mi cuello y volvio a repetir la misma acción.
Jadee ante aquel dolor y despues, frente aquella atención amorosa, si, él debía de tener demasiada experiencia en cuanto a lo sexual. ¿Cuántas relaciones ha tenido?, ¿con cuantos se ha acostado?... ¿cómo puedo complacerlo?
“Vamos a los asientos de atrás” –repuso como una orden
“Thor yo…” –no me dejo hablar porque inmediatamente aclaro que nuestra primera vez no sería en un auto ni ahora, tan solo quería bajar la incomodidad de su entrepierna antes de entrar a su casa.
Despues de movernos, despues de sentir mi cara tan acalorada, sencillamente nos observamos en silencio casi como si hubiesemos perdido la vida, para morir en paz al tenernos cerca el uno del otro.
“No me atrevo a tocarme porque si me bajo los pantalones, te juro que terminare por hacerte el amor” –dijo acompañado de una mirada realmente segura y sincera
Lo quiero, lo quiero porque por sobre todo, él me entiende. Sabe lo que significa para mi este tema y por sobre todo, si es con él. Le sonreí antes de abrazarlo con todo mi amor, odiaría que algo nos separara, odiaría dar una mala impresión a sus padres, odiaría que el mundo terminase sin que pueda estar entre sus brazos en una cama algún día.
“No es la mejor forma de calmarme pero… no puedo estar lejos de ti” —susurro mientras besaba mi mejilla y sencillamente, me abrazaba con todas sus fuerzas
“Gracias”
“¿Por ser genial?” –bromeo y volvió a besarme con cariño
“Si, por ser genial” –sonreí casi al borde de las lagrimas, despues termine escondiendo mi rostro entre su cuello y su hombro, como un modo de sentirme protegido a su lado
Asi nos quedamos por largos minutos hasta que logramos superar la tensión sexual y volver a ser nosotros otra vez. Cuando se aparto de mi, movio la cabeza de forma negativa y graciosa, no sabía que pasaba pero me lo aclaro diciendome: “Lo lamento… pero tendras que cubrir tu cuello, amor”
Al mirarme al espejo, era claro que mi piel estaba enrojecida a cada lado de mi cuello, que vergüenza. Le mire con el ceño fruncido y él levanto ambas manos en señal de rendición y paz.
“En mi defensa dire que eres irresistible”
Una vez en la puerta principal, suspire nervioso de ver a dos padres con una clara mirada analitica y por sobre todo, que con ello, encontrasen mas defectos de los que yo soy conciente que tengo. Thor me tomo de la mano y cuando la llave logro abrir la puerta, él tan solo dijo: “Ya estoy en casa”
Me guió por el pasillo en donde las paredes estaban cubiertas de fotos familiares, en verdad Thor tenia una enorme familia, todo lo contrario a la mía.
Cuando llegamos a sala, una mujer se puso de pie dejando que su vestido largo llegase hasta el suelo, su largo cabello rubio acompañaba un rostro muy diferente del como me lo imagine. Sonrió y regañando en un tono amable a su hijo por la tardanza, nos dijo que nos lavaramos las manos porque la cena estaba listo.
La disposición de la mesa estaba asignada por autoridad, el padre a la cabeza, la madre a su derecha, Thor a su izquierda, yo al lado de mi novio y en frente de mi, Frandal su primo que vivía con la familia.
Nadie pregunto nada sobre mi, mas bien todos hablaban de cosas cotidianas y por sobre todo, de la organización de las vacaciones, aun cuando para eso, faltase mucho. La verdad, me relaje al no sentirme presionado, nadie cuestionaba que era y que pretendía al estar con Thor. Disfrute de la conversación aun cuando no dije mucho, siempre prefiero escuchar cuando estoy con personas que recien conozco.
Thor tomo mi mano entre la suya y a nadie, parecia molestarle aquello. Le mire y el tambien lo hizo, secretamente me guiño un ojo y yo sonreí. Tal vez, vistar a su familia, era una de las mejores ideas que ha tenido.
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