POV Romeo
-Tranquilo no pasara nada, confía en mi abre los ojos –
-E-Esta bien… - espero estar haciendo lo correcto.
Abrí los ojos y… hoooo por dios que era eso, estaba en el cielo, en pleno paraíso, Natsu estaba en frente de mi, desnudo, obviamente no vi hacia abajo o si no, no podría despegar mi vista de allí, además él era alto, así que se extrañaría si yo volteara a ver hacia abajo, no es que lo quisiera ver, solo me daba nervios, mi respiración se acelero y por alguna extraña razón no le podía quitar la vista a Natsu, o más bien a su cuerpo, ¿Qué no han visto su cuerpo? Es perfecto, todo en su lugar y con el tamaño correcto, sin duda Natsu era genial, despertaba en mi un deseo de siempre estar con él, y de verlo así como esta en estos momentos siempre, supongo que así se siente tener admiración por alguien, si debe ser eso, así que esto es respeto hacia la persona en quien aspiras ser, pero esto de vez en cuando se siente algo… no se… ¿raro? Ah no sé.
-¿Vistes que no paso nada? – me pregunta Natsu sacándome de mis pensamientos.
-S-Si… - ¿Por qué estoy tan nervioso?
-¿Estás bien? –
-S-Si… claro que si – respondí rápido y con la respiración acelerada, nunca antes me había sentido así.
-Oye estas rojo, ¿Seguro que te sientes bien? – Dijo agachándose a mi altura, cosa que me puso más nervioso, tenía su rostro cerca del mío… ¿Y como que rojo? ¿Yo estaba rojo? ¿Por qué estaba rojo?
-S-Si tranquilo… de-debe ser por el vapor del agua… - idiota, ¿Cómo pude decir eso?
-Pero si no esta ascendida el agua caliente – Joder es cierto… ¿Qué pasa Romeo? Tú no eres así.
No respondí, agache la mirada y pff… fue un error, vi la postura en la que Natsu estaba, agachado en el suelo, sosteniéndose con las puntas de las plantas de sus pies, tenía las piernas abiertas, de seguro que si alguien estuviera atrás de él podría ver todo su trasero abierto…. Y su entrada también… ¿En qué piensas Romeo? No puedes pensar eso de Natsu-ni, que vergüenza me doy… Ho… otra cosa en la que no me había fijado…
-¿Cómo diablos lo tiene tan grande? – susurre sin darme cuenta, al hacerlo veo su pene, que sin estar erecto tenía muy buen tamaño, sin fijarme paso la vista al mío y… “decepción”… el mío no era ni la cuarta parte del que tenia Natsu.
Reaccione, estaba viendo sus partes intimas un gran tiempo, Natsu de seguro se dio cuenta, y lo peor es que no había dicho ni una palabra, de seguro si que se dio cuenta.
Lo mire a la cara con vergüenza, ¡Estaba sonrojado! Aww que lindo… ¿Qué? ¿Cómo que lindo? Bu…bueno… no hay nada de malo en que yo piense que Natsu-ni sea buen mozo, los hombres de vez en cuando se dicen esas cosas ¿no? El caso es que Natsu-ni me estaba viendo fijamente y con esos ojos tan profundos que él tenía, además con ese sonrojo, me ponía mucho más nervioso ¿Cómo diablos puedo ponerme más nervioso de lo que ya estoy? Esto es brujería…
-Ro-Romeo – me llama, me tenso, me asusto, lo miro a los ojos y este estaba sonriendo cálidamente.
-¿Si? – pregunto asustado.
-¿Así que lo tengo grande, he? - ¿He? ¡Me escuchooo! Joder…
-N-N-No, es lo que piensas… yo no… no estaba viéndote, o bueno si, pe-pero solo un segundo…. Si un segundo, solo pase mi vista sin darme cuenta y… y vi esa cosota… aunque no está mal… e-está muy bien, muy, muy bien, a cualquiera le gustaría… cla-claro menos a mí, no estoy diciendo que no me guste… aunque no me gusta, me refiero a…
-Suficiente Romeo – Dijo aguantando las ganas de reírse. Sé que hice el ridículo, más vergüenza me dio y sé que mi cara estaba completamente roja ya que sentía lo caliente que estaba – aun eres un niño, seguro que cuando crezcas se te hace mas y mas grade – me explicaba mientras hacía señas con sus manos en “mas y mas grande” eso me hizo reír.
-A-Aun así… es grande – dije con algo de pena pero erala verdad.
-Bueno eso es porque soy más grande que tú –
-Bueno yo tengo 17 y tú apenas… 14 ¿No? –
- Sí… pero aun así… ese tamaño no es normal – decía sin despegarle la visa al miembro de Natsu-ni.
-¿He?... Bu-Bueno… recuerda que tengo 17 años… a eso súmale los 7 años que no estuve… tendría 23… -
-Serian 24 – seguía siendo el mismo, jejeje no sabía ni sumar algo tan simple.
-Bueno… el caso es que no te preocupes por el tamaño, ya crecerá, además… así se te ve tierno, dijo y con su mano agarro mi pene sosteniéndolo por un momento. Joder… sentí una corriente eléctrica por todo mi cuerpo.
-Ho… jojo, está creciendo – dijo algo sobresaltado pero sin quitarme las manos de mi miembro, joder que se me estaba poniendo erecto, y de paso que ni siquiera me podía mover, la mano de Natsu-ni me hizo esto - ¿Vez? No lo tienes tan mal – dijo cuando ya lo tenía totalmente erecto, me moría de la vergüenza, baje la cabeza completamente apenado, pensara que soy un pervertido que apenas lo tocan ya se calienta - ¿Pasa algo? – me pregunta con tono preocupado.
-Pe-Perdón… -
-¿Por qué te disculpas? – no quería responderle, daba mucha pena, vi como sonreía y se pon ia de pie.
-No te avergüences por esto Romeo, a todos les pasa, hasta a mi – levante la cabeza al escuchar eso – es mas para que veas que estoy diciendo la verdad – dijo agarrado su pene – ten, tócame para que veas cómo se me pone - ¿Queeeeeee? ¿Tocárselo? ¿Está loco? Cuando me di cuenta ya mi mano estaba en el miembro de Natsu ¿Dios que me pasa el corazón se me saldrá?
Estuve un par de segundos allí, agarrando su pene con mi mano, me daba pena y miedo hacer otro movimiento por lo que vaya a pensar Natsu, estaba concentrado en mis pensamientos cuando de repente sentí que el miembro de Natsu se alargaba y endurecía en mi mano, me quede estático, perplejo, mucho más cuando llego a su máxima erección… ¿Cuánto puede medir eso? Creo que ni mi papá le llega al tamaño de Natsu, lo sé porque cuando era más chico me bañaba con mi papá todos los días.
-¿Vez? Te lo dije, basta con las solo tocarlo por unos momentos y ya se te pone duro, así que no te sientas avergonzado – me dijo y comprendí…
Pero aun así no le podía despegar la vista a su miembro, lo tenía justamente en frente de mí, en el momento en que se puso erecto su punta casi me llegaba a la barbilla, creo que la distancia que me separa de su miembro es de 1 cm.
-Romeo – me llama y miro hacia arriba para ver su cara –creo que ya puedes quitar la mano – sido riendo y viendo hacia otro lado, yo no se que me pasaba, porque escuche perfectamente lo que me dijo, pero no despegaba mi mano de su miembro, al cabo de segundos reacciones y quite la mano rápido.
-Perdón, perdón, perdón, perdón, perdón…
-Ya… ya, tranquilo, mejor vamos a bañarnos –
Qué vergüenza, detrás de Natsu había un espejo de cuerpo completo y cuando el se movió para abrir el grifo del agua fue que me di de cuenta, si lo hubiera detectado antes, de seguro y hubiera visto por detrás cuando estaba agacha… no, no, no, no pienses en eso, que horror, yo jamás había pensado esto.
El agua comenzó a caer encima de Natsu y de mi, era refrescante. Ver las gotas de agua recorrer el cuerpo de Natsu me provocaba envidia, si lo sé, que loco lo que pienso pero era verdad, vi como con sus manos se restregaba la cara al mismo instante que los músculos de sus brazos se tensaban cada vez que ejercía fuerza marcando sus músculos bien formados, quería tocarlos… aunque sería extraño que se lo pidiera.
Comencé a sobarme el cuerpo, ya que si me lo quedaba mirando todo el tiempo sin hacer nada seria sospechoso, aun así no le quite la vista de encima, cerro el grifo del agua y tomo el jabón restregándolo por todo su cuerpo mientras que se llenaba de pequeñas burbujas.
-Romeo –
-¿S-Si? –
-¿Me pasarías el jabón por la espalda? Es que no llego –
-Está bien – ¡Tocare su espalda! Aww.
Me dio el jabón y me dio la espalda para luego agacharse y ponerse a mi altura, tal cual como lo había hecho antes, vi toda su espalda, su trasero, ¡Su entradaaa! Con el paso del tiempo la erección que tenía se había disminuido un poco pero con esto creo que se me volverá a poner duro.
Me concentre para no ver su trasero de nuevo, agarre el jabón lo humedecí y lo comencé a frotar por el cuerpo de Natsu-ni, valla tenía una piel muy suave… los músculos de su espalda estaban bien ubicados, pase mis dos menos por su gran espalda, quise abrazarme a ella y quedarme ahí hasta dormirme. Pase como 5 minutos sobándole la espalda o más bien la mitad de arriba, si bajo me encontrare con su trasero y no sé qué valla a ser… pase el jabón por sus hombros, eran perfectos, mis ojos se deleitaban al ver ese cuerpo de tan cerca, movía mis manos lo más lento que podía, no quería terminar de tocar su espalda.
Mi vista paso por el espejo que estaba en frente y quede congelado por un momento, mis mejillas estaban rojas a no más poder, pero eso no fue lo que me detuvo, Natsu estaba de piernas abiertas, su miembro guindando y todo su cuerpo estaba algo tenso por la presión que ejercía esa posición, trague grueso ya que si no lo hacia se me saldría la saliva, aparte inmediatamente mi vista y me dedique a seguir con mi trabajo en la espalda de Natsu-ni.
-Listo Romeo gracias – dijo y se puso de pie… ¡NOOOOOOO! – ven dame – me dijo extendiendo su mano para que le diera el jabón, pero no se lo di, quería seguir sobándole el cuerpo -¿Romeo? – dijo al ver que yo no me movía ni respondía, de hecho me aferre al jabón que tenía en mis manos.
-Y-Yo… quiero enjabonarte el cuerpo – por más raro que sonara lo quería hacer.
-Pero yo puedo solo –
-Pero yo quiero hacerlo – respondí de inmediato
-No creo que sea buena idea – dijo y paso su vista a mi entrepierna, yo también baje la vista y mi miembro estaba erecto de nuevo.
-Por favor – dije prácticamente en suplica, quería hacerlo y lo iba a hacer.
-Está bien, pero después me toca a mí –
-¿He? –
-Como que ¿he?, si tú me enjabonas a mi yo te enjabono a ti, sino, no hay trato –
-E-Esta bien –
Me acerque a Natsu-ni contento e iba dispuesto a enjabonarlo desde arriba, pero aunque me alce hasta con las puntas de los pies no llegue a tocar su pecho, Natsu-ni se estaba riendo, es más, yo sabía que se había quedado allí parado para ver cómo me esforzaba a llegarle, me enfade y él supo que me enfade al ver mi cara, aun seguía riendo y negando con su cabeza se agacho y se sentó en el piso, luego de eso se acostó.
-¿Así si alcanzas? –
-Tampoco tenías que exagerar, no soy tan enano –
-Ya, no te enfades es para que estés mas cómodo –
-Mentiroso – sé que me quería molestar y lo hizo.
Me arrodille en el suelo y comencé a enjabonar su cuerpo, pase mis manos por su torso, pecho, pase mis dedos delicadamente por los pezones de este, de reojo vi como Natsu-ni hacia una mueca, ¿Le habrá gustado? O quizás fue que lo lastime… decidí no volverlo a hacer por si acaso, me dirigí hacia los abdominales y fue glorioso, sentir como mis manos se resbalaban por esas partes curvas y suaves cada vez que las pasaba me aceleraban el corazón, al llegar a sus caderas frenaba, abajo se encontraba su miembro y me daba pena, así que en vez de seguir bajando subí de nuevo a su pecho, no me quejaba, me gustaba bastante poder masajear aquellas partes superiores, estaba feliz, creo que hasta estaba sonriendo en ese momento, vi el rostro de Natsu-ni y tenía los ojos cerrado, bien… así podía trabajar mejor.
Me dolían un poco las piernas por estar en esa posición, así que busque de acomodarme para que no me dolieran tanto, pero pusiera como me pusiera ninguna pose era cómoda para masajear el cuerpo de Natsu-ni como la anterior, pero si me ponía así me dolería otra vez las piernas.
Encontré una, me levante y me coloque encima de Natsu-ni, para ser mas precisos, me puse de pie y al estar por encima del cuerpo de Natsu me volví a arrodillar, así era un poco mejor, el peso estaba en mis rodillas y no en mis piernas, al estar así y ver que estaba cómodo me di la vuelta, ahora solo me concentre en restregar con mis manos el abdomen de Natsu-ni de arriba hacia abajo (Autor: Romeo estaba en la posición 69 aunque no lo sabía)
Estaba un poco cansado de tocar las mismas partes, no es que me dejaran de gustar, todo lo contrario mientras más las tocaba más me gustaban, pero tener ese pedazo de carne allí en frente era difícil… quería tocarlo pero me daba pena, era el miembro de Natsu-ni, la parte más sagrada de un hombre, papá me lo había dicho muchas veces, “un hombre sin miembro no es hombre, por eso es la parte más sagrada de nosotros”… deje el miedo a un lado y me llene de valor, me estire un poco para no perder la posición en la que estaba, sabía que si me movía seguiría en la misma pero algo mas incomodo, así que me estire, puede que mi trasero se haiga parado un poquito… o mucho, pero no importa, Natsu-ni tenía los ojos cerrado. Agarre su miembro con una mano y lo comencé a masajear lentamente de arriba hacia abajo.
-¿Ro-Romeo? – ¡Mierda! Abrió los ojos – ¿Qué haces? –
-E-Es que esta parte aun no la enjabono –
-S-Si pero no deberá… ¡Ah! ¿Po-Po-Porque esta así? -
-¿A-Así como? –
-Joder cierra las piernas – dijo y coloco su mano en mi trasero tapando algo al mismo tiempo que apartaba la vista
-¿Pe-Pero que pasa? ¿Por qué las debería de cerr…? – ¡Mierdaaaa! Me exalte, deje de tocar el miembro de Natsu-ni y junte mis dos manos para tapar mi entrada al mismo tiempo que Natsu-ni quitaba la suya, ya veo, en esta posición dejo todo expuesto ahí atrás…
-Cre-Creo que ya deberías de dejarme de enjabonar Rome…
-No – interrumpí enseguida – yo… yo quiero seguir –
-Pero…
-Por favor Natsu-ni –
-E-Esta bien –
-¡Gracias! – me alegre y sonreí, esta vez sin pena ni nada comencé a frotar el miembro de Natsu con las dos manos…-
-O…Oye… n-no tan rápido… - dijo con voz entrecortada, pero prácticamente no le hice caso, le baje un poco a la velocidad pero seguía haciéndolo con la misma intensidad.
El miembro de Natsu-ni ya estaba completamente erecto, fue mucho más rápido de lo normal, digo, como antes tardo mas en ponerse así, y además que ahora estaba algo caliente y ¿palpitante? Baje la cabeza y vi el mío, el cual estaba de la misma forma, me preocupe un poco pero seguí frotando el miembro de Natsu, pude notar como el abdomen y pecho de Natsu-ni se movían un poco más rápido, así que agache mi cabeza para ver por el medio de entre nuestros dos abdómenes si Natsu-ni estaba bien, claro que estaba bien solo que… solo que ahora estaba muy rojo, creo que hasta igual que yo, y su vista estaba fija en… en… hoo, ¿Pero que hace viendo mi trasero? Deje de verlo y mire al frente asustado, lo miraba de reojo de vez en cuando y seguía con su mirada allí. No le di mucha importancia, creo que después de un rato ya dejaría de verme y cerraría los ojos de nuevo, volví a su miembro y quise jugar un rato ahí, lo tenía agarrado con una mano y con el dedo pulgar hundí la punta hacia abajo, escuche una especie de quejido de Natsu-ni pero no me importo y lo seguí haciendo, ya llevaba varios segundos haciendo eso cuando veo un liquido transparente salir de la punta del pene de Natsu-ni, veo como sale y resbala por todo su miembro, se veía que todavía había más allí adentro, así que con una mano agarre el miembro desde abajo y ejerciendo algo de fuerza lo apreté y deslice mi mano hacia arriba sin disminuir la fuerza, vi como el liquido seguía saliendo y cuando llegue a la punta lo volví a hacer, no salió mas, al parecer ya lo había sacado todo, fue divertido, parecía una pistola de agua, escuche varios suspiros cuando hacia el acto anterior, pero por alguna razón no quería voltear a verlo…
Agarre el liquido que había salido del miembro de Natsu-ni y lo volví a poner en la punta de su miembro, y con el dedo índice comencé a regar aquel liquito por toda la punta de su miembro, era divertido, al hacer eso la piel de su pene se hundía con facilidad, parecía un malvavisco, solo que un poco rosadito, hablando de eso, mientras pasaba el tiempo he podido notar que la punta del pene de Natsu-ni se ha puesto más roja y su miembro más duro y mas latente… sin mencionar lo caliente que esta, me acerque un poco al miembro para verlo mejor, se le podía notar alguna venas que tenía el miembro, pero no eran desagradables, creo que hasta lo hacían lucir mucho mejor y hasta daban más ganas de tocarlo, pase mi vista a la punta y efectivamente cada vez estaba más roja, me acerque mas para saber a que olía, olfatee un poco y el olor que capte fue el del jabón… me decepcione un poco quería saber a que olía natural, solté un gran suspiro y al hacerlo vi como Natsu-ni se quejo esta vez con más fuerza en la voz al mismo tiempo que echaba su cabeza para atrás, alzo sus piernas mientras que se apoyaba en el suelo con las plantas de sus pies, una vez ya un poco subidas las abrió, también vi como este último se apoyaba en sus codos y alzaba la vista…
-Romeo – llamo con algo de dificultad – si no paras de hacer esto no aguantare – dijo jadeando.
-¿No aguantaras que Natsu-ni? –
-¿Tú qué crees enano? Aunque yo sea un Dragon Slayer no puedo aguantar tanto… -
-Pe-Pero… no entiendo de qué hablas Natsu-ni –
-Déjalo así… será mejor que salgamos del baño – dijo y comenzó a pararse, antes de que pudiera hacerlo pegue mi cuerpo al suyo haciendo presión hacia abajo y atrayéndolo al suelo -¿Qué haces? –
-Yo quiero seguir – dije decidido.
-¿Cómo? ¿Qué no te das cuenta de lo que estás haciendo? –
-Por favor solo un ratito mas –
-Si me quedo solo un ratito mas te arrepentirás de haber hecho esto Romeo –
-Claro que no… esto es muy divertido –
-¿Divertido? –
-Si… la punta de tu pene parece un malvavisco – dije sonriendo
-¿Un… Un malvavisco? ¡Eso no es comida como para que lo estés llamando malvavisco! –
-Pe-Pero es muy esponjo sito–
-Cállate Romeo… ah, por Dios… solo trata de no tocarme tan rápido, ¿Entendido? –
-¡Sí! – dije alegre
-Y trata no sacar mucho el trasero, es peligroso –
-¿Uh? ¿Peligroso porque?
-Tú solo hazme caso –
-Bueno… está bien –
Contento me devolví al miembro de Natsu-ni y agarrándolo lo movía hacia todas partes, hasta parecía un micrófono, acerque mi boca y comencé a jugar que cantaba en el, claro que no cante, solo cantaba la canción sin voz, Natsu-ni aun tenía las piernas abiertas y seguía apoyado en sus codos, lo mire un instante y estaba mirando hacia un lado, se veía lindo con las mejillas rojas, seguí cantando en su pene, sin querer toso y escupo justamente en su punta, veo a ver si Natsu-ni lo sintió y al parecer no, me alegre un poco, y con cuidado agarro un poco de agua y le quito el poquito de silaba que le hecho, ahora que veo mejor agarre más agua y se la eche de lleno al miembro de Natsu…
-Friaaa – se quejo
-Pero si estaba tibia… -
-No lo vuelvas a hacer – asentí y preste toda mi atención a su miembro.
Le eche el agua porque ya no lo quería sentir tan resbaloso, ahora era mucho mejor agarrarlo aunque algo de dificultad daba al querer deslizar la mano pero así era mejor, en un descuido mientras estaba “cantando” mis labios rosaron por unos segundos la punta del pene de Natsu-ni… joo valla que estaba caliente, al parecer no lo sentía con mis manos, porque tal vez de tanto tocarlo se me pego la temperatura sin darme cuenta… además era muy suavecito… quería volver a intentarlo así que me acerque a la punta del miembro, Natsu-ni me dijo que no lo tocara tan rápido, con así que lo haré lento, pase mi dedo por su punta y lo hundí un poco y si aún seguía siendo tan esponjo cito como ates, bien aquí voy… despacito y lento para que Natsu-ni no se enfade, pase mi lengua lo más lento y fuerte posible por la punta de su miembro…
-Agr… - escuche, vi como sus piernas temblaron un poco y como apretó sus ojos.
No le di mucha importancia, me gusto lo que había hecho no sabía como un malvavisco pero si era tan esponjo cito como uno, esta vez volví a hacerlo, puse la lengua por encima de la punta y la pase por todo el alrededor varias veces muy lentamente, no tenía que ir rápido, era genial, deje de hacer eso para pasar a cerrar mi boca en la punta del miembro de Natsu-ni mientras tenía esa pequeña parte dentro de mi boca la comencé a majasear con la lengua, fue divertido, al sacarla de mi boca estaba llena de salida, se me hizo la boca agua tan rápido tan solo tener la puntita denote de mi boca, estaba feliz, baje la cabeza para ver a Natsu y… este tenía la mano en la boca, estaba muy, muy rojo y sus ojos en blanco…
-¿Estás bien Natsu? –
-…S-Si… - dijo casi sin poder hablar.
-¿Seguro? – asintió…
No le creí pero si le decía algo de seguro y diría que ya tenemos que salir del baño y aun no quiero, esta vez haría algo mejor, agarre el miembro con una mano y abrí bien grande la boca, introduje el miembro de Natsu-ni en mi boca, cuando vi que ya no podía mas pare, ¡Joder que ni siquiera le llegue a la mitad! Pero no me importo cerré la boca dejando encerrado en ella lo que pude agarrar de su miembro, pegue su miembro a mi encía y del otro lado le pegue la lengua, no le deje espacio y comencé a succionar, era como comer una chupeta pero sin sabor pero mucho más divertido, sentía como su pene se estrujaba y palpitaba en mi boca, de hecho sentía como estaba de caliente, me gustaba mucho, es como comerse un pan residen sacadito de hornear, sin darme cuenta lo comencé a succionar muy seguido y muy rápido, y hasta lo sacaba y metía de mi boca, me gusto muchísimo, sentía como mi miembro me comenzaba a doler un poco, pero no le pare, solo lo vi un segundo de reojo y vi que estaba botando un hilo de liquido transparente que caía en el abdomen de Natsu, en otras circunstancias había detenido cualquier cosa que estuviera haciendo, pero esto… esto no, Natsu-ni me había dado permiso de esto hoy y tal vez nunca lo volvería a hacer.
-¡Para Romeo! – Grito Natsu me asusto tanto que pare de una vez – ya no puedo mas dijo y se lanzo encima de mí, - te advertí que te arrepentirías de esto… espero de verdad que no lo hagas –
-¿Na-Natsu-ni?