-Creo que usted lo está malinterpretan…-
-A ti no te hablé. Explícame, Jiyong…- fulmina con la mirada al extraño y vuelve a mirar al rubio con tristeza.
Jiyong frunció el ceño y se puso de pie mirando a su amigo.
-¿Puedes esperarme afuera, Bae?-
-Claro, bro- pese a la situación, el moreno sonrió y salió rápidamente de la habitación ya que la mirada de odio del castaño le daba un poco de miedo.
-Ji…-
-Siéntate, Seung- le indica que se sentara en el sofá.
“¿Va a dejarme?”
Con nervios, obedeció al menor y lo miraba casi sin parpadear mientras que Jiyong se colocaba en frente a él con los brazos cruzados.
-El hombre que acabas de ver es mi amigo de la infancia. Se llama Dong Young Bae- lo mira serio.
-¿Y qué hacían abrazados? ¿Por qué sonreían tan naturales? ¿Por qué él estaba con el torso desnu…-
-¿Desconfías de mí?- interrumpe el rubio.
-N-No pero desde que te comenté que mi primera novia jugó conmigo, tengo miedo de que me dejes… ahora que estoy perdidamente enamorado de ti, Ji- suspira frustrado, desviando su vista.
-Eres un idiota, Seung- se toca la sien.
El castaño miró a su lado al sentir que Jiyong se sentaba junto a él.
-Estábamos abrazados porque le comenté de mi relación contigo y me felicitó. Además, es normal sonreír tan natural con un amigo que quieres tanto como si fuera tu hermano de sangre. YoungBae es un amor de persona, cuando lo conozcas mejor te darás cuenta- suspira.
-¿Y por qué estaba con el torso desnudo?- no pudo evitar fruncir el ceño.
-Porque tenía una cita por primera vez en años y con un joven en un lugar elegante. Por lo que recurrió a mí para que lo vistiera adecuadamente ya que suele vestirse informal-
-Entiendo…-
“¿Y la tarjeta que te ha dado?”
No se animó a preguntar por lo que comenzó a jugar con sus dedos, nervioso.
-Y además vino porque le pedí algo por lo cual, me llenó de preguntas por teléfono y optó por venir aquí para preguntarme mejor sobre mi pareja. Luego de confirmar que íbamos en serio, me entregó esto- le extiende la tarjeta que Seung había visto mientras espiaba.
El castaño la tomó y notó un nombre en italiano con una tipografía muy elegante y por debajo de aquel título, estaba el nombre de Jiyong y el suyo. Miró a Jiyong sin comprender.
-Es una reservación especial para un restaurante italiano. Se lo pedí a YoungBae ya que su amigo trabaja allí y tiene mejor acceso en reservarlas a último momento. De esta manera, podremos ir festejar nuestro primer mes de novios- comenta con un leve sonrojo en sus mejillas.
-Soy un idiota, lo siento tanto Ji por malinterpretar todo- toma el rostro del rubio acariciando las mejillas con sus pulgares.
-Lo eres y mucho- hace un adorable puchero.
-¿Me perdonas?- lo mira como si de un cachorro se tratara logrando que Jiyong riera.
-Sólo si me respondes una pregunta-
-Claro, dime-
-¿Estabas celoso?-
-S-Sí, es la primera vez que me sucede… ahora comprendo cómo te sientes, Yongie- confiesa suspirando frustrado.
Jiyong sonrió y enredó sus brazos alrededor del cuello del castaño para acortar la poca distancia que había entre ellos y así unir sus bocas en un beso tímido al principio que luego se tornó completamente apasionado.
Sus lenguas jugaban dentro de la boca del mayor de manera desesperada mientras que jadeos ahogados salían de ambas bocas ante la intensidad del beso.
“No me es suficiente, mi cuerpo pide la calidez de Jiyong”
Seung sintió ganas de más, por lo que deslizó una de sus manos sobre la espalda del rubio bajando hacia la zona de sus glúteos del cual se encargó de capturar una nalga y masajearla a su antojo.
-Mmh S-Seung-
-No los quiero interrumpir pero es hora de abrir- sonríe la madre de Jiyong quien estaba parada frente a la puerta mirando cómo arreglar la cerradura rota.
Ambos hombres se asustaron al escuchar la voz de la señora y se separaron completamente rojos de la vergüenza.
-Y-Yo… madre, lo sient…-
-No te disculpes, Yongie. Ya sé de su relación y no me enoja… bueno, tal vez un poquito porque me lo han ocultado… pero sólo quería que supieran que entrará gente aquí y al estar la puerta rota los pueden ver- mira a ambos riendo al notar a su hijo y al castaño cohibidos.
-Pensamos decirte en unos días pero no encontrábamos la manera por miedo a que nos rechaces-
-Jamás haría algo como eso. Eres mi hijo y te apoyo en todo. Además, Seung Hyun pese a que me has roto la cerradura, me caes muy bien. Eres un buen hombre para mi lindo Yongie-
Jiyong sonrió ante el pensamiento de su madre.
-¡Lo siento mucho! Ya mismo iré a comprar una cerradura nueva y llamaré a un cerrajero- se disculpa y nervioso, sacó su billetera.
-Ni se te ocurra, Seung Hyun- frunce el ceño.
-Pero es para pagar el daño que he hecho- la mira sin comprender.
-Sólo estaba bromeando diciéndote lo de romper la cerradura. De por sí, estaba a punto de romperse pero no te preocupes que YoungBae sabe arreglar este tipo de cosas y debo aprovechar que está aquí ahora-
-¿Segura que no necesita dinero?-
-Muy segura. Utiliza ese dinero para comprar algo lindo para mi hijo ahora que tendrán una cita- sonríe.
-Pero lo será en la noche cuando termine de trabajar- interviene el rubio.
-¿No lo has entendido, Yongie? Te dejo el día libre para que salgas con tu novio-
Tanto Jiyong como el castaño la miraron asombrados.
-Así que vístete elegante, Yongie para tener una bella cita. No los interrumpiré más, iré a abrir-
-¡Muchas gracias madre!- sonríe el rubio completamente emocionado.
-Muchas gracias- hace una leve reverencia el castaño mientras la señora sonreía completamente feliz de ver a su hijo en pareja mientras se retiraba del lugar.
Jiyong miró al castaño y lo abrazó besando sus labios de manera rápida.
-Será mejor que vayas a tu casa para arreglarte… aunque viéndote cómo te luce ese hermoso saco turquesa, la camisa blanca y el pantalón negro, sólo debo cambiarme para combinar con mi precioso novio- mira de pies a cabeza al mayor mordiendo su labio inferior.
Seung Hyun no pudo evitar sonreír de lado y besó los labios del rubio.
-Vistas como te vistas, siempre te verás hermoso y sexy ante mis ojos Yongie- acaricia sus rubios cabellos mientras que el menor lo abrazaba.
-Tienes razón. Entonces, ¿me esperarás hasta que me cambie?- lo mira admirando los adorables hoyuelos que se le habían formado ya que Seung no dejaba de sonreír.
-No, me iré a mi departamento para ver que Yongie tenga todo lo necesario mientras no esté-
-Oh, cierto. De acuerdo, entonces… ¿nos vemos en una hora?-
-¿Tanto tardarás?- ríe al notar el adorable puchero de su novio.
-Es que quiero estar hermoso para ti, Hyunnie- ronronea acariciando el pecho del castaño mientras le depositaba un beso en su cuello.
-Pero ya te he dicho que lo eres-
-¡Pero yo quiero quedar muy hermoso, sensual y perfumado para ti!-
“Actúa como un bello niño”
Seung rió divertido ante la manera en la que Jiyong se veía.
-De acuerdo, tú ganas pero no vayas tan provocador…-
-¿Por qué no?- frunce el ceño.
-Porque no quiero que otras personas vean lo sexy que eres- hace un puchero.
-Pero esas personas sólo mirarán y admirarán mi cuerpo mientras sentirán envidia de ti porque ya le pertenezco a un hermoso y sensual profesor- le guiña un ojo, sonriendo coqueto.
-Lo sé pero no quiero…-
-¿Te pone celoso de sólo pensarlo?- ríe divertido mientras juega con su dedo índice haciendo círculos sobre el pecho del mayor.
-Sí y además hay otro problema- suspira.
-¿Cuál?- lo mira sin comprender.
-Que lograrás excitarme y no podré comer calmado sin pensar en hacerte el amor de mil maneras- muerde su labio inferior y captura la cintura del rubio apegándolo más a su cuerpo.
-¿Y qué tiene de malo? Tú logras excitarme siempre y como puedo, aguanto hasta que estamos solos mmh- no pudo evitar jadear ya que Seung frotaba ambas pelvis.
-Entonces vamos a tener que buscar un hotel cerca para pasar la noche luego de cenar- susurra ronco sobre su oído.
-Está bien por mi aah- gimió bajo al sentir las caricias del castaño.
Nuevamente comenzaron a acariciarse íntimamente olvidando el lugar en donde estaban hasta que escucharon un gruñido que cada vez se oía más cerca de ellos.
Seung suspiró y se separó del rubio quien sonreía divertido. Volteó a ver al dueño de aquellos gruñidos.
-Ya me retiro. No le haré nada a tu dueño, Ai… por ahora- susurra lo último cerca del menor mientras lamía su oreja y retomaba su vista al gato gruñón.
- ¿Dónde nos encontramos?- pregunta antes de que el castaño caminara hacia la puerta de la habitación.
-En la esquina de mi departamento ya que debemos tomar un taxi, ¿te parece bien?-
-Sí. Entonces nos vemos en una hora, Hyunnie- sonríe y se acerca al mayor besando sus labios de manera dulce.
-Nos vemos, Yongie- embelesado por la hermosa sonrisa de su novio, se despide saliendo con una gran sonrisa marcada en su rostro.
Jiyong se sonrojó levemente y miró a su mascota quien se había sentado sobre el sofá mirando a su dueño con seriedad.
-No tienes que ser malo con él, Ai. Es un hombre maravilloso- sonríe y al notar que el gato maulló bajo, lo acarició con suavidad.
Al salir de la habitación del rubio, Seung recordó que YoungBae seguía allí. Él estaba conversando con la madre de Jiyong y al ver al mayor acercarse, se tensó.
“Debo disculparme con él por mi estúpido malentendido”
-Te quiero pedir disculpas por lo de recién- se acercó al moreno e hizo una leve reverencia.
-Descuide, no me conocías por lo que era normal que actúe así- sonríe aún nervioso.
-Pero realmente lo siento, ¿podrías perdonar a este profesor idiota?- suspira y Bae rió.
-Está bien, lo perdono- extiende su mano.
Seung lo miraba sin comprender.
-Soy Dong Young Bae, es un gusto conocerlo-
-Mucho gusto, YoungBae, soy Choi Seung Hyun- estrechan sus manos mientras que el moreno sonreía de una manera tan pura que sus ojos se formaban unas lindas medias lunas.
“Tiene una sonrisa angelical”
-¿Quiere tomar un café conmigo? Yo invito-
-No, debo irme. Por cierto, YoungBae… ¿cuántos años tienes?-
-Veintisiete, igual que Jiyong-
-Entonces no me hables tan formal, me hace sentir viejo. A menos que seas uno de mis alumnos- bromea.
-De acuerdo, discúlpame Seung Hyun-
-Ahora sí-
Ambos sonrieron mientras que el moreno le pidió un café a la madre de Jiyong.
-Debo irme. Te veré en otra ocasión, Young Bae-
-Está bien. Que tenga una excelente cita con Jiyong-
-Gracias-
Seung se despide de Bae, luego de la madre de Jiyong para ir a su departamento ya que sentía la necesidad de preparar algo para su novio antes de encontrarse.
**
“¡OH POR DIOS! SE VE TAN SEXY”
La mente de Seung gritaba descontrolado al divisar a Jiyong caminando hacia el punto de encuentro vistiendo un pantalón negro ajustado, camisa blanca y un saco color rosa. Su rubia cabellera estaba peinado de manera elegante logrando que se viera completamente hermoso. El mayor juraba que cada paso que Jiyong daba, brillaba.
No pudo evitar morder su labio inferior ya que sintió ganas de cancelar la cena y llevarlo a su departamento porque era lo más cerca que tenía para hacerle el amor… pero como dijo Jiyong anteriormente, debía contenerse…
-Finalmente llegas, Yongie. Menos mal que nos veríamos en una hora… has tardado casi dos- ríe.
-Es que no encontraba este saco ya que quería estar vestido similar a mi novio- hace un adorable puchero mientras se miraba su rosada prenda.
-Se te ve precioso. No, mejor dicho, te ves hermoso… mi preciada obra de arte- susurra cerca de los labios del rubio para luego depositarle un beso fugaz.
-Gracias, Hyunnie- levemente sonrojado, le sonríe.
-Tomemos un taxi ya que quiero llegar antes-
-¿Por qué? Aún falta una hora para ir al restaurante-
-Es que hice una reservación por teléfono en un hotel que está cerca de donde iremos a cenar y necesito confirmarlo personalmente al igual que un pequeño regalo que añadí-
-¿Un regalo? ¿Qué es?- lo mira ansioso por saber.
-Prefiero que esperes para no arruinarlo. Debes de ser paciente por unas cuantas horas, Ji-
-D-De acuerdo intentaré esperar…- sonrojado, esperaron por un taxi que para su suerte, divisaron uno a lo lejos.
**
Luego de que Seung confirmara la habitación de un elegante hotel, se dirigieron hacia el restaurante que para su suerte estaba a una cuadra y media.
Antes de ingresar, se podía notar desde afuera lo lujoso que era.
-¿Cómo conseguiste dinero para reservar un lugar como este?- pregunta el castaño mientras ingresaban y observaba el restaurante maravillado ante la elegancia y unos cuadros que decoraban el lugar.
-Ahorros. ¿Y tú de dónde conseguiste el dinero para pagar tan lujoso hotel?- sonríe al notar cómo Seung miraba los cuadros tan entusiasmado.
-Soy profesor desde hace seis años, por lo que he ahorrado para una ocasión especial- mira al rubio, admirándolo de la misma manera que miraba las obras de arte y le sonríe.
Caminaron unos pasos donde un hombre casi alto como Seung, de cabello negro, algo largo, vistiendo un elegante traje negro, los esperaba para corroborar la reservación.
-Buenas noches caballeros, mi nombre es Kang Dae Sung y si tienen algún problema háganmelo saber- al ver los nombre de la invitación, sonrió amplio.
-Muchas gracias, señor Kang- sonríe amable el castaño.
-¿Kwon Ji Yong? ¿Usted es el amigo de Dong Young Bae?- mira al rubio.
-Así es-
-Él me ha pedido a mí para que le hiciera la reservación el día de hoy. Por lo que me comentó, pidió que cambiara el lugar de la mesa a último minuto. Así que su mesa está subiendo las escaleras, al final del pasillo. Es una de nuestras mejores mesas V.I.P- comenta sin dejar de sonreír.
“Otro hombre con una sonrisa bella y parece un ángel… aunque no se compara con la de mi Yongie que logra acelerar mi corazón”
No pudo evitar pensar Seung Hyun y sonrió.
-¿Hay que pagar extra por ser una mesa V.I.P?- pregunta con temor el rubio ya que no estaba seguro de poder pagarlo.
-No se preocupe. Tómelo como un regalo por parte de su amigo-
-¿De verdad? ¡Gracias!- sonríe Jiyong aunque aún estaba asombrado por el regalo de su amigo.
-No es nada. Que disfruten la cena-
-Gracias- responden al unísono y caminaron hacia las escaleras.
-Tenías razón con respecto a YoungBae… no cualquier amigo paga algo como esto- comenta el castaño mientras terminaban de subir las escaleras.
-Te he dicho que es un amor como persona. Seguramente este regalo fue porque sabe que estamos verdaderamente enamorados y que vamos enserio, de lo contrario no hubiera hecho esto-
Sonríen y mientras caminaban hacia la mesa, Jiyong no pudo evitar asombrarse ya que la mesa que Bae decidió reservar, era con una hermosa vista a la ciudad.
-¡Es hermoso!- dice Jiyong mientras se sentaba.
-Muy bello, además estamos acompañados por las luces de la Luna y las estrellas- se sienta en frente al rubio y mira lo hermosa que estaba la noche.
No pudo evitar mirar directamente a Jiyong logrando que se sonroje.
-¿Qué tengo?-
-Eres la pieza que completa esta maravillosa vista, Yongie-
El rubio se sonrojó a más no poder mientras no pudo evitar morder su labio inferior.
-L-Lo mismo digo. Tu bella y penetrante mirada se combina a la perfección con esta serena noche… como una obra de arte-
“Contrólate, Seung. No lo comas a besos ahora… espera sólo un poco más”
-Gracias, Ji-
Sin dejar de sonreír, apareció un mozo con una botella de Champagne sirviéndolo en ambas copas que ya había sobre la mesa.
Tomó el pedido de ambos y se retiró dejándolos solos nuevamente en su burbuja de amor.
Seung Hyun tomó su copa y el rubio imitó la acción.
-Por nuestro amor y porque quiero pasar el resto de mi vida contigo, Yongie- acerca su copa a la de Jiyong chocándola de manera suave.
-Te amo- dijeron al unísono contemplando la mirada del otro de manera amorosa y mientras se tomaban de las manos, bebieron un sorbo del dulce Champagne.
**
-Qué bien comí- suspira Jiyong ante lo satisfecho que estaba luego de una deliciosa cena.
-Estuvo exquisito, como este Champagne- sonríe de lado mientras volvía a servir ambas copas. Era la tercera botella que habían pedido y ya podían sentir el efecto del alcohol correr por sus venas.
-¡Ahora pidamos el postre!-
-No-
-¿Por qué no?- frunce el ceño.
“Porque el postre serás tú y planeo probar cada parte de tu erótico cuerpo”
-Porque el postre lo quiero comer contigo en la cama de la habitación que reservé- mira al menor sonrojado y le guiña un ojo.
-Pero realmente quiero comer algo dulce antes de… eso- susurra con timidez lo último.
-Comeremos algo dulce antes, Yongie- sonríe de lado y al terminar de beber su copa de Champagne, se levantó con algo de torpeza.
-¿A dónde vas?-
-A dónde vamos querrás decir… iremos al hotel, ya quiero comer el postre… ¿vamos?- extiende su mano para que el rubio se sujete de ella.
-V-Vamos- mordió su labio inferior ya que presentía que algo tramaba Seung Hyun y la sucia idea que se le cruzaba en la mente lo excitaba…