-Entonces, no hay nada interesante en tu perfil ¿Por qué crees que deberías ser parte de la familia Sion?- preguntó Kakashi con cansancio, solo podía pensar en porque debía dirigir las entrevistas de la estúpida idea de Fugaku, es decir, ¡Estaba en vacaciones! Además, la gente que había entrevistaba el siguiente siempre era peor que el anterior, no podía entenderlo, pero este chico rubio si que se había llevado el Oscar al peor candidato del día.
-Bueno, yo, ya sabe, soy muy bueno consiguiendo historias que nadie logra, soy muy perseverante, jamás me rindo, no incumplo a mi palabra- sudó frío- sé que no tengo experiencia, ni las mejores calificaciones, pero créame que en la acción soy muy bueno.
- ¿Cómo sabes que en la acción eres bueno? Después de todo, te has graduado hace poco, no has tenido trabajo en tu campo, y posiblemente la calificación de campo en tu universidad no debe ser buena- intuyo, e inmediatamente supo que había acertado por la cara de frustración del rubio
- Créame, estoy hecho para esto, es lo único que tengo- y de repente un silencio abrumador inundo la sala. La entrevista había llegado a un punto muerto, por lo demás, Kakashi ya intuía que sus próximas preguntas tendrían desastrosas respuestas, que no eran necesario desgastarse en vano- Apueste por mí, en serio tengo el potencial y la perseverancia, le prometo ser el mejor, es más, obtendré el puesto de trabajo completo y llevaré a esta empresa a otro nivel- se apresuró a decir Naruto.
-Muy lindas tus palabras, pero sin acción uno no es nada, el nunca rendirse solo lo demuestra si estas en algo que te exige rendirte, pero la realidad es que no has estado en nada, pese a que tengas una personalidad muy extrovertida, amable y perseverante, con eso…- se quedó callado inmediatamente, de repente la imagen de un viejo amigo paso por su cabeza, y sintió como si el muchacho de al frente de pronto fuese su querido amigo.
-Kakashi-san- hablo Yamato tratando de captar la atención de nuevo
Apueste por mí, de repente paso esas palabras mencionadas un par de minutos antes, una personalidad que no se rinde… Tal vez, solo tal vez, si su amigo querido triunfo, este chico si podría tener potencial.
-Estas contratado- hablo rápidamente Kakashi mientras esbozaba una sonrisa que casi no se veía por la bufanda que tapaba media cara, después de todo ¿Qué podría perder? Si el muchacho fracasaba sería una menos, pero había algo más allá, si fracasaba ese sería el hecho que dará la razón a un incertidumbre que había tenido por años, gente como él solo estaría destinado al fracaso por vivir de falsas ilusiones, pero si triunfaba, entonces sabría que se había equivocado toda su vida y que su ego había sido su propio asesino de tan dolorosa vida que había decidido llevar, el chico rubio no lo sabía, pero la apuesta que haría por él podría sanar su corazón sea cual fuese su resultado- pero te advierto, los pasantes tienen un mes, yo te daré una semana para ver ese potencial que tanto dices, sino, yo mismo me encargaré de echarte ¿te gusta esa apuesta Naruto? - El rubio asintió con rapidez exagerada- bien, ya puedes irte.
- No se arrepentirá de esto, ¡Se lo juro! - Naruto salió casi corriendo de la sala hasta llega donde estaban los demás aplicantes, sonrió, no necesitaba esperar a que todos pasaran, ya le habían dicho que había sido contratado. Con mucha felicidad le comentó lo sucedido a la secretaria rubia, quien le dijo que a su celular tendría los datos que necesitaba para empezar a trabajar el lunes sin falta. Salió del edificio diciendo – Cualquiera, cualquiera, cualquiera- mientras todos los observaban como si de un lunático se tratase.
Moría de ganas de ver la expresión de su madre cuando le contara, tal vez abriría la boca que muchos mosquitos entrarían por ella, o pondría los ojos blancos y se quedaría paralizada, o se desmayaría de la emoción que no despertaría por días. Y claro recibiría un gran -Felicitaciones hijo, sabía que tenías potencial – o algo por el estilo, prácticamente voló del edificio a la casa, ese podría ser considerado uno de los mejores días de su vida.
-¡Estoy en casa! – entro eufórico - ¿Dónde estás mamá? – pero no recibió ni un solo sonido, pensó que tal vez había salido a comer algo. Entro a la habitación que ambos compartían y se acostó en la cama, estaba seguro que tenía una sonrisa de bobo, pero no lo podía evitar. Se hizo de medio lado y pudo observar que sobre la cama de su mamá había una nota, ni corto ni perezoso se levantó como resorte a ver dicha nota.
“ Hijo mío, estoy segura que has fracasado en la entrevista y que por tal no has conseguido trabajo, sin embargo, como tu madre soy altamente benevolente a darte otra oportunidad, tienes un mes para conseguir un trabajo estable en tu campo y con buena paga, pero también como madre debo enseñarte valiosas lecciones, debes aprender a velar por ti mismo y tomar responsabilidad de la vida, eso implica pagar los servicios, tu comida, el arriendo, el transporte y objetos de uso personal por este mes, sin ninguna ayuda de mi parte. Esto fue una gran idea de mi nuevo amante, mientras, este mes estaré con él en su casa en la playa, ha decidido invitare ¿Puedes creerlo? Tal vez, si todo sale bien, aunque fracases, podríamos tener un futuro brillante. Por favor no veas esto como algo malo, mi corazón siempre pertenecerá a tu padre, no lo dudes pues jamás podré enamorarme de nuevo, pero, también debo vivir con astucia por ambos así signifique hacer sacrificios…
Con amor, mamá”
Naruto re leyó una y otra vez la nota, era cierto que su madre había tenido amantes ocasionales con los que siempre buscaba estabilidad, con el fin de que él y ella tuviesen una vida mejor pese a que no los amara pero él iba creciendo y a medida que sus amantes se enteraban que tenía un hijo de 20 años, con el que vivía y sin ningún futuro…bueno, se desprendían como podían de ella, hasta que llego este señor, no recordaba bien su cara, pero sabía que tenía el cabello negro, no le gustaba para nada.
-Y ¿ahora qué haré?