El corazón de un hombre
VI
Lance llego quince minutos antes de lo acordado, aunque quedó en llegar treinta minutos antes de las diez termino llegando a las nueve, la razón por la que llegó temprano fue porque no logro conciliar el sueño, cuando cerraba los ojos lo primero que aparecía era la cara de Keith y luego como si se tratara de una obra en su mete se veía así mismo con Keith haciendo cosas salvajes. Se dio una bofetada al pensar en eso. Entro a la escuela arrastrado sus pies, durmió mal, su espalda le dolía y su cabeza era un montón de ideas vagas agrupadas.
Pese a que era fin de semana la reja estaba abierta, pegado en la reja se leía un letrero anunciando la competencia entre ambas escuelas, vio a un profesor sentado en una banca dormitando, vio a algunos estudiantes paseando por los alrededores, supuso que estaban ahí para ver el evento, camino todo el trayecto y al llegar a la cancha principal cerca de la pista se encontró con Shiro junto a él estaba Koran quien llevaba ropa deportiva, lucía bastante gracioso mientras realizaba unos estiramientos. Shiro tenía una carpeta en la mano que ojeaba sin mucho interés.
- ¡Hey! - Lance saludo al mayor.
- Buenos días, Lance- asintió Shiro al verlo llegar, cerro la carpeta y la tomo entre sus manos -Llegas temprano.
- Si, bueno, pensé que alguien ya debió haber llegado- miro a todas partes para ver si se encontraba alguien más además de Shiro y Koran.
- Allura ya casi llega- respondió Shiro -Pidge y Hunk supongo llegaran a la hora acordada.
Lance noto que Shiro no mencionó a Keith, imagino que quizá lo habia olvidado, pero aun así preguntó curioso.
- ¿Y Keith?
Shiro lo miro de reojo, ciertamente esperaba que Lance preguntara por el omega. Lo supuso ya que tenía la sospecha de que esos dos tenían algo, prefirió no preguntar, el ya cargaba con sus propios problemas amorosos.
- No va a venir- dijo si más. Espero la reacción de Lance
- ¿Por qué? - preguntó el moreno ante la respuesta de Shiro. Esperaba, aunque sea ver de lejos a Keith, además estaba curioso por saber qué es lo que haría para el evento ya que nadie salvo Shiro y Koran lo sabían.
- Dijo que no está interesado, tampoco obligado asistir, antes de venir fui a su apartamento, pero ni siquiera me abrió la puerta- respondió observando como Koran hacia calentamientos.
- Eso es malo- dijo Koran deteniéndose -Ese chico Keith, ahora nos falta uno, es talentoso, pero incluso los más virtuosos si no saben trabajar en equipo no llegaran muy lejos- dijo un tanto indignado.
-Matt no podrá venir, dijo que Pidge está muy emocionada- comento Shiro.
Lance miro sus pies pensado en Keith y que pese a todo quería ver su cara. Realmente quería ver esa cara. Lo deseaba más de lo que estaba dispuesto a admitir.
- Quizá si lo voy a buscar el venga- Lance dijo eso sin darse que lo había dicho, solo lo estaba pensando. Se quedó callado inmediatamente después de percatarse que dijo lo que pensaba.
Shiro lo miro y asintió, Koran parecía un tanto interesado.
Shiro lo miro con una sonrisa.
- ¿Como sabes dónde vive? - enarco las cejas fingiendo sorpresa. El hecho de que Lance se ofreciera en ir a buscar a Keith solo afirmaba sus sospechas.
Lance balbuceo algo que no logro ni entender él mismo.
- ¡Ah! - soltó un grito nervioso.
Shiro seguía mirándolo con sus ojos fijos con un deje de burla.
- Oh...
- Un día- improviso -Un día tuve que llevarle unas tareas- asintió -Y fue que supe donde vive, detrás de la escuela ¡En los edificios!
-Si- coloco su mano en el hombro del moreno - ¿Solo eso?
Lance se puso nervioso.
- Si...- balbuceo -Solo eso, ya sabes, soy el delegado de la clase.
- ¿En serio? - se cruzó de brazos Shiro ante la propuesta de Lance -Supongo que está bien.
-Si, supongo...- se encogió de hombros Lance.
Shiro miro la hora en su móvil.
- Tienes exactamente cuarenta minutos ¿Crees que puedas hacerlo?
- ¡Por supuesto! Lo traeré arrastrado de ser necesario- acto seguido salió de la escuela rumbo a los edificios de apartamentos para estudiantes.
- ¿Crees que logre traerlo? - Koran dejo de hacer sus calentamientos.
- Si, lo traerá- sonrió para sí mismo.
- ¿Como estas tan seguro? - preguntó Koran ante la seguridad con la que hablaba Shiro.
-Intuición- arqueo las cejas mirando al profesor.
Koran peino si bigote con sus dedos y asentía ante lo evidente.
- Así debe ser- asentía el hombre de cabello naranja.
Lance caminaba soltando suspiros, sus pasos eran lentos a propósito con su pulgar golpeaba su frente, deslizo su mano por toda su cara y volvió a soltar un suspiro, esta vez fue largo para luego respirar hondo, se detuvo a pensar un rato, se cruzó de brazos.
- Keith- dijo con voz apagada. Se apoyo contra la pared y miro al cielo. Tenía claro que entre él y el pelinegro había algo más, algo que debido a su necedad no quería ver, y esa vez en él baño, cuando tenía a Keith acorralado contra el lavamanos sintió la necesidad de decirle algo, algo que ni el mismo se imaginaba que podía decir o que en algún momento tuviera ese impulso por decirlo, esa necesidad por dejarlo salir de su garganta con desesperación, recordó el beso que compartió con Keith, sus labios eran suaves y carnosos, poseía una pequeña boquita rosada y su interior húmedo y cálido solo provocaban que quisiera arrojarlo en el suelo y tomarlo de todas las formas posibles, sus hormonas le estaban jugando una broma de mal gusto y junto a todo eso estaba el exquisito aroma que desprendía Keith, un aroma delicioso, dulce que provocaba en el reacciones que no entendía del todo. Volvió a suspirar.
- Keith...
Sacudió su cabeza en un intento de que Keith no fuera partícipe de estos y el rostro del chico se esfumara rápido de su mente, siguió todo el trayecto hasta llegar al edificio de apartamentos, vio desde lo lejos la ventana de apartamento de Keith, estaba cubierta con una cortina blanca que se movía por el aire, supuso que Keith debía estar dentro así que subió por las escaleras con paso apresurado sus manos le sudaban, entre lo que caminaba noto que el tiempo se le fue ya que se sumergió en sus pensamientos, llegó al piso, contó las puertas y llego hasta la de Keith, lo supo al verla y recordó cuando estuvo dentro con el chico, trago saliva nervioso, después de todo no fue una buena idea que haya venido, reunió todo el valor que tenía dando una respiración profunda, golpeo la puerta dos veces seguidas, permaneció quieto pero ansioso esperando a ser lo suficiente afortunado como para que el omega le abriera la puerta al instante, eso no paso, solo se escuchó el sonido de los autos ir y venir, el aire contra sus oídos y el ruido de la música en el piso de abajo, volvió a golpear, esta vez con insistencia.
- ¡Keith, abre la puerta! - exigió ante la nula respuesta -Soy yo, Lance, ábreme la puerta.
Nada, de no ser porque días atrás estuvo dentro se ese lugar juraría que nadie vivía ahí, miro a sus costados, supuso que debería preguntar a algún vecino, camino hasta llegar a la puerta de al lado justo cuando estaba por llamar a la puerta vio a Keith caminando por el pasillo dirigiéndose a su apartamento, el omega no lo vio, saco la llave de su bolsillo, llevaba consigo bolsas de compra y vestía ropa casual, se quedó observando como abría la puerta, Keith aun no notaba su presencia, se detuvo antes de girar la llave para abrir, alzó la vista y vio a Lance que lo miraba sorprendido.
- ¡Keith! - grito Lance cuando sus miradas se cruzaron.
Keith soltó un grito ahogado e intento entrar, pero tal y como la última vez Lance lo sujeto metiéndose con él al apartamento, sus bolsas de compra cayeron, Keith resbaló cayendo en el suelo, Lance logro apoyarse de la pared para mantenerse firme.
- Keith...
El pelinegro cayo sentado en el suelo, sus compras se desparramaron y un frasco se rompió, Keith al verlo se levantó para limpiarlo.
- Vete- musitó tomando el cristal entre sus dedos -Ya hablé con Shiro- dijo sin mirarlo.
- Oh, bueno- rezongo Lance -Vine hasta aquí para llevarte así que no quiero que me digas "No" y punto.
- Ya dije que no- boto el cristal en el bote de basura. No imagino que Lance vendría a su casa.
- ¿Por favor?
- No es no- tomo un trapo para limpiar el líquido del frasco roto -Ahora vete.
Tras lo dicho Keith esperaba que Lance se fuera sin más, en vez de eso Lance se reclinó contra la pared cruzándose de brazos, su mirada estaba fija en Keith y como este limpiaba el suelo.
- Te pagaré eso- dijo Lance sacando su cartera del bolsillo en su pantalón -Y luego vendrás conmigo.
- ¡Basta! - grito Keith retorciendo él trapo entre sus manos. Le molestaba la forma en la que hablaba Lance, con un deje de arrogancia al decir que iría con él - ¡No iré a ninguna parte contigo!
-Vengo por que Shiro me pidió si podría venir a buscarte y que quizá aceptarías, te necesita en el equipo.
- Es solo una tonta competencia- Keith se cruzó de brazos.
- ¡Todos están emocionados! - Lance bajo la voz al notar que estaba casi gritando, Keith lograba enojarlo -Hunk, Pidge y Allura, incluso Koran, tu eres el único que lo arruina todo- lo señaló con su dedo.
- Deja de molestar y solo vete, no iré.
Lance se dirigió a Keith quedando frente a este, Keith retrocedió un poco al sentir la cercanía del moreno.
- Déjame en paz...
- ¿Por qué?
- ¡Porque quiero que te vayas!
- Pues no me iré.
Keith soltó un gruñido enojado. Lance lo miro de reojo, Keith estaba haciendo un puchero, como si estuviera apuntó de hacer un berrinche, se río en sus adentros ya que esa cara lo hacía ver lindo, su sonrisa se esfumo cuando se dio cuenta que pensaba que Keith es lindo.
- Maldición- mascullo.
- ¡Que te vayas! - insistió Keith.
Lance fingió no oírlo.
Harto de la actitud del alfa estaba dispuesto a sacarlo a patadas de ser necesario, no sabía cómo, pero debía lograr que este se fuera o de lo contrario terminaría por salir él de su propio apartamento.
- No insistas...- dijo tratando de tomar a Lance por el brazo para sacarlo, como si el moreno supiera sus movimientos lo sujeto contra él, al sentirse atrapado por los brazos de Lance, Keith intento liberarse dando ligeros empujones, el contacto entre ellos lo hacía sentirse abrumado, su cuerpo lo sentía débil y blando, el cuerpo de Lance tan cerca del suyo lograba que una oleada de sensaciones llegaran a él, se aferró a Lance cuando sintió todo su cuerpo estremecerse si lo soltaba probablemente caería al suelo.
Lance lo sujetaba con fuerza hacia él, lo mantenía cerca de su pecho inclinándose un poco para lograr atrapar los labios de Keith, el omega al ser más pequeño cabía perfectamente entre sus brazos y el cuerpo delicado se amoldaba al suyo, por un momento pensó en lo fascinante que era eso y un pensamiento fugaz paso por su cabeza.
"Es como si hubiera nacido para mi"
Keith gimoteo al notar como el beso se volvía más apasionado y que Lance lo empujaba hasta la cama, soltó un quejido, si terminaban en la cama lo harían, lo harían como todas esas veces, pero su cuerpo respondía de forma abrumadora, su cuerpo lo traicionada e inconsciente se acoplaba a los deseos del alfa, cuando sintió la cama contra sus pantorrillas y que estaba por ser arrojado a esta en un intento desesperado por liberarse del agarre mordió el labio de Lance, Lance lo libero del beso y lo tomo de la cara, Keith vio como los labios del moreno se pintaban de carmín por la sangre, por un instante pensó que Lance lo golpearía, pero en vez de eso Lance lo sujeto con más fuerza besándolo de nuevo, en su paladar saboreó el metálico de la sangre salada, la lengua de Lance le invadía por completo, las manos lo recorrían la espalda llegando hasta sus muslos, se removió al percatarse que Lance apretaba suavemente su trasero, dio un respingo asustado. Finalmente Lance se separó dejando a Keith consternado.
Se quedó parado mirando a Keith sin decir nada, mantuvo su mirada absorta en la figura del omega, Keith jadeaba tratando de armonizar su respiración. Lance limpio con su pulgar la sangre.
- ¿No iras? - preguntó con los ojos aun fijos en Keith.
El pelinegro desvío la mirada.
- No....- respondió en voz baja.
Lance asintió como si de antemano ya supiera la respuesta de Keith.
- Bien- se dispuso a marcharse abriendo la puerta, salió sin mirar atrás y sin preguntar nada.
Tras Lance marcharse del apartamento Keith se deslizó hasta caer al suelo sentado, su cuerpo empezó a sentirse como la última vez que estuvo con Lance y el beso que compartieron fue demasiado para él, no se imaginó que se encontraría a Lance en la puerta de su apartamento, mucho menos que terminarían besándose como la otra vez, toco con sus dedos su boca acariciando sus labios, pensó nuevamente en Lance y que lo más seguro era que ya se había ido, se encogió escondiendo su cara entre sus rodillas confundido por los sentimientos que en su interior florecían, se abrazó así mismo en un intento de reconfortarse, sino fuera por los supresores pensaría que entró en celo, se estremeció de sólo pensarlo, entrar en celo solo porque se había besuqueado con un alfa, suspiro soltando un quejido lastimero, se quedó en esa posición por unos minutos hasta que se levantó, abrió la puerta solo para asegurarse de que Lance se fue, ahí estaba Lance reclinado contra el barandal mirando al horizonte, el sol iluminaba su piel morena y la suave brisa movía si flequillo contra su cara, su piel parecía brillar, Keith retrocedió ante el pensamiento de que Lance le parecía atractivo.
Lance giro su rostro para verlo, le sonrió.
Keith supo que lo estaba esperando.
- Vamos.
Keith no dijo nada. No se imaginó que él siguiera ahí, muy en él fondo deseo que al abrir la puerta Lance estuviera ahí esperándolo, aquello no fue más que un pensamiento fugaz, no creyó ni por un instante que el alfa estuviera realmente ahí.
- Yo...- prefirió omitir él contacto visual, suficiente tuvo al verlo ya -Voy a cambiarme de ropa.
- Esta bien, te espero.
Lance espero paciente al chico, minutos después Keith apareció con ropa deportiva y una mochila.
- Yo seré el nadador- dijo con la mirada baja.
- Lo harás bien- el moreno dijo eso para animarlo -No sabias que nadabas, Allura será quien corra los cien metros.
- No es como si debieras saberlo.
Pidge y Hunk llegaron al mismo tiempo, ambos pasaron a la tienda para comprar comida.
- ¿Y Lance? - Hunk mordía un pan que compró.
- ¿Donde esta? - Pidge abrió una lata de refresco.
- Fue a buscar a Keith- respondió Shiro.
- Oh...- dijo Pidge con una sonrisa maliciosa.
- ¿Y Allura? - preguntó Hunk mirando sin entender la cara de Pidge. La chica parecía saber algo que él no entendía del todo.
- Llamo para decir que está atrapada en el tráfico.
- Así que solo será un preguntas y respuestas además de algunos deportes...- Hunk abrió un paquete de galletas -Yo no soy bueno para los deportes.
- Yo tampoco- se encogió de hombros Pidge -Pero he visto que Keith si y también Lance, supongo que tú también.
- No creo realmente ser bueno en los deportes, he estado practicando.
- Así es- intervino Koran -Hemos practicado para esto desde el mes pasado, así que no podemos perder.
- Es solo algo amistoso- aclaro Shiro ante el instinto competitivo del profesor -Se lleva haciendo desde hace años, ya que ambos directores son amigos lo hacen para competir de forma amistosa entre ellos.
Pidge vio la hora en su reloj de muñeca.
- ¿A las diez empieza todo?
- Si- asintió Shiro -A las diez ya debe estar todo listo y los estudiantes vendrán.
- Espera- interrumpió Hunk - ¿Seremos solo nosotros?
-No- cruzó los brazos Shiro -Vendrán también a vernos, Allura y yo repartimos volantes.
- No, no, no- Hunk se puso nervioso -Yo no soy bueno con el público.
Allura llego corriendo. Se detuvo antes de estrellarse con la espalda de Hunk. Llevaba su cabello atado en un moño y vestía un traje blanco de deportes, dejo su mochila a un lado de ella, respiro para tratar de normalizar su respiración.
-Lo siento- dijo entre jadeos -El tráfico esta terrible- seco el sudor de su frente con un pañuelo que saco de su bolso.
-Llegas a tiempo- Pidge le ofrecía una botella de agua.
-Gracias- la tomo la chica y bebió de esta.
Allura se acercó a Shiro que conversaba con Koran.
- ¿Y Lance? - preguntó la joven.
-Fue por Keith- respondió al ver la cara preocupada de la chica.
- Solo faltan diez minutos- mostró su móvil a Shiro con la hora en este.
Un cuchicheo que se hizo más y más alto llamo la atención de todos. Allura dirigió su mirada para observar entre la muchedumbre, junto con Shiro, Pidge, Hunk y Koran vio llegar a un grupo de jóvenes, por el uniforme purpura con franjas rosa anaranjado se trataba del colegio Galra, ese uniforme es inconfundible.
- Buenos días- saludo un joven alto de largo cabello blanco.
-Lotor...- mascullo Allura.
Junto a Lotor estaban Acxa, Zethrid, Ezor y Narti, sus compañeras con las que haría equipo.
Allura los miro con disgusto mientras Shiro los saludo con tono cordial.
- Buenos días- correspondió el saludo del joven.
- ¿Así que este es la escuela de todos? - dijo con tono un tanto burlón una joven alta.
- Deja ya Ezor- le reprochó la más bajita del grupo.
- No lo dije para burlarme Acxa- le sonrió la chica alta.
- Venimos a ganar- sonrió ampliamente la más alta y robusta de todas.
- Apoyo a Zethrid- asintió sonriente Ezor.
Acxa solo se cruzó de brazos sin decir más.
Narti parecía desinteresada.
- He traído a las mejores estudiantes, harán equipo conmigo- dijo Lotor con un deje de arrogancia en sus palabras.
Las chicas a su lado sonrieron.
- Parece que no están todos sus compañeros, les falta uno- dijo Ezor mirando con una sonrisita a Pidge, Hunk y Allura.
Allura miro preocupada a Shiro.
- Los demás vienen en camino- respondió Shiro ante el comentario de Ezor.
- Oh, bueno- se acomodó la joven a lado de Acxa.
- Faltan ya cinco minutos.
Lotor miro la hora ante el comentario de Acxa.
-Se están tardando- soltó una risita Ezor.
- Qué más da, de todos modos ganaremos- dijo con seguridad Zethrid.
- Esto no me está gustando- se quejó Hunk escondiéndose detrás de Pidge. Aunque eso no servía de mucho.
- Parece ser que son buenas- dijo Pidge asombrada por el quinteto frente a ella.
- No me gusta- se acobardo Hunk.
Lance y Keith aparecieron entre el montón de estudiantes agrupados para ver a los jóvenes de la famosa escuela Galra.
- Lance llegas tarde- dijo Hunk aun detrás de Pidge.
- Nos perdimos en el camino- se excusó Lance.
- ¿Que te paso en el labio? - preguntó Pidge al notar la hinchazón en el labio de Lance.
Keith se puso notablemente nervioso.
- Me caí- respondió Lance sin más.
- Eso parece una mordida- Hunk se acercó para mirar más de cerca -Si, es una mordida.
Pidge soltó una risita.
- ¿Quién te mordió? - interrogo curiosa la chica.
- Me caí...
- No, ya dinos- le dio un golpecito en el hombro.
- Keith- llamo Shiro al pelinegro que parecía ansioso por las preguntas de la chica de lentes a Lance. -Keith.
- ¿Ah?
- Tu estarás en natación- dijo el mayor - ¿Trajiste tu ropa?
- Si, si la traje- respondió más interesado en la conversación de Pidge, Hunk y Lance.
- Me alegra que Lance lograra traerte, parece que se cayó o lo mordieron.
Keith avergonzado se sonrojo.
- Fue una fea caída entonces.
-Diez en punto- anuncio Koran.
- Entonces empecemos- dijo Lotor seguro de su victoria, su rostro mostraba una amplia sonrisa.
-Lo primero será una carrera de cien metros- explico Shiro leyendo el cronograma del evento en sus manos -Será entre Allura y Ezor.
Allura acomodo su cabello, Ezor se acercó a ella dando ligeros saltitos, parecía divertirse y al mismo tiempo estar segura de su que ganaría, eso molestaba a Allura, sobre todo porque notaba un cierto desdén en la cara sonriente de Ezor. La chica es una alfa y ella solo una beta, si se esforzaba lograría ganar, entrenó mucho para la carrera.
Ezor extendió su mano para saludarla.
- Que gane la mejor.
Allura desconcertante acepto el saludo de su rival.
- Si, que gane la mejor- sintió un deseo competitivo nacer en ella. Deseaba ganar.
Ambas chicas se pusieron en sus posiciones en la pista.
Todos se agruparon en las bancas, tantos estudiantes como profesores.
- ¿Crees que Allura gane? - preguntó Hunk a Pidge.
Pidge se apoyaba sobre una banca.
- No sé...
La carrera inició, Ezor llevaba una clara ventaja hacia Allura, la morena aumento su velocidad, pero las largas piernas de Ezor solo lograban aumentar la distancia. Ya era claro para todos quien obtendría la victoria
"Solo cien metros"
Para su mala suerte sin mucho esfuerzo por su parte la victoria por una gran ventaja fue para el colegio Galra gracias a Ezor, la chica sonreía y sus compañeros la felicitaban.
- ¡Viste Acxa!
Acxa sonrió ante el triunfo de su compañera.
Allura camino hasta llegar junto a los demás.
- Lo hiciste bien- la animo Pidge.
-No lo suficiente- se sentía decepcionada. Paso desde el mes pasado entrenado y simplemente perdió así de fácil. La frustración crispo su bonita cara.
- Fue una buena carrera- Ezor se paró frente a Allura con su rostro sonriente.
- Si, lo fue- Allura también sonrió.
- Oh, ahora la siguiente eres tú- dijo dirigiendo a Acxa quien hacía unos calentamientos.
- Si- se incorporó la chica.
- Pero no hay de qué preocuparse- poso sus manos sobre sus caderas mirando por el rabillo del ojo a Keith -Es un omega, vas a ganar.
- No estoy tan segura- Acxa miro a Keith, el pelinegro conversaba con Shiro y parecía quejarse -Tengo entendido que es bueno.
- ¿Que puede hacer un simple omega?
- Aunque sea un omega yo no soy mejor, solo soy un beta- dijo ajustando su cabello -No soy como tú que eres un alfa.
-La siguiente será una carrera de natación cincuenta metros estilo libre- anuncio Shiro -La piscina es semi olímpica, está al otro lado se la pista de carreras.
- Ganarás- animo Ezor a Acxa -Eres buena en esto.
-Iremos a la piscina- dijo Zethrid.
- Vamos.
Ezor camino junto a Acxa, le decía algo animada alentándola.
- Es solo un omega- decía en tono mordaz.
Keith mantenía el ceño fruncido.
- Serás tú el siguiente- Shiro camino a su lado.
- Si, lo sé- Keith no deseaba participar -No ganare- se quejó.
- ¿Como lo sabes? - preguntó Shiro al oír un tono resignado en las palabras.
- Es un beta- dijo dirigiendo su mirada al color en que señalaba el rango de Acxa - ¿Vez? no hay manera de que gane.
Shiro lo miro preocupado, la negatividad que irradiaba lejos de disgustarle le dejaba un mal sabor de boca.
- ¿Sabes por qué no ganarás? - dijo mirando el agua en la piscina.
Keith no respondió.
- Porque te has hecho la idea de que no ganarás, solo inténtalo.
Por su parte Lance conversaba con Allura, el chico estaba realmente contento junto a ella.
- Pero tu estas enojado por algo más.
- Iré a cambiarme de ropa- Keith tomo su mochila y entró a los vestidores.
- Supongo que ya casi es hora- Ezor le paso su bolso a Acxa.
Acxa lo aceptó y al igual que Keith camino a los vestidores.
Mientras se cambiaba de ropa su cuerpo lo sintió más caliente, como si hiciera mucho calor, abochornado se desvistió para ponerse su traje de nadador. Se miro al espejo y se vio así mismo, su rostro ruborizado y parecía cansado, deseaba tanto irse lo más pronto posible, no debió haber venido, no luego de todo lo ocurrido, su cuerpo lo sentía extraño como todas esas veces, sabía que luego de besarse con Lance todo en él empezó a sentirse caliente.
- ¿Estoy en celo?
Rápidamente reviso en su mochila con la esperanza de encontrar los supresores, por más que busco y saco todo dentro no los encontró.
- No, no, no....- miro a todas partes. Oía el bullicio fuera. Quería irse, pero ya no le quedaba de otras más que quedarse -Solo termino y me iré, puedo aguantarlo- metió todo dentro de su mochila para salir y tratar de que todo fuera rápido, no le importaba si ganaba o perdía, solo quería irse lo más pronto posible.
Al salir vio como Acxa que colocaba el gorro se piscina sobre su cabeza, la chica no le tomo importancia.
Keith hizo lo mismo poniéndose su gorro. Soltó un quejido.
- Traes mala cara- dijo Acxa al verlo - ¿No te sientes bien?
- No es nada.
- Tu cara está muy roja.
Acxa no lo noto, una beta no podía olerlo, Keith liberaba lentamente feromonas. Ella sin más que decirle se adelantó, se detuvo antes de abrir la puerta.
- Si no te sientes bien solo dilo, los omegas no son muy resistentes ¿Por qué no pides un cambio?
- No soy débil- dijo con su respiración un tanto agitada.
Ambos salieron de los vestidores.
Debido a la distancia Lance no logró ver del todo bien la cara de Keith, solo supuso que el chico debía estar haciendo algún tipo de puchero.
- Tengo entendido que Keith es bueno- dijo Pidge que se encontraba a lado de Lance. Ella prestaba atención a todo.
- ¿En serio? -preguntó fingiendo desinterés. No deseaba hacer obvios sus sentimientos, pese a que en su interior ardía por estar con Keith. Ese pequeño omega que se la vivía haciendo caras de enojo.
- Oh si, Matt me lo dijo, por eso Shiro lo quería en el equipo y que debido a su mal comportamiento fue sacado del equipo escolar de natación.
Lance asintió como analizando todo. No sabía sobre eso ¿Por qué no sabía sobre eso? Tras pensar en eso un poco más se dio cuenta que su relación con Keith era superficial en muchos sentidos, era consciente de que existía una gran conexión entre ambos, pero no existía un vínculo aparte de la atracción física.
- En parte es para demostrar que el aún es capaz de regresar al equipo, Shiro quiere mostrar eso ¿Vez al hombre de ahí?
Lance observó a un hombre un poco calvo y con lentes de sol que miraba fijamente la piscina.
- Si- respondió aun divagando entre sus pensamientos. Pensar en que su relación con Keith era frívola le puso de malas.
- Es el entrenador del equipo de natación, Shiro lo invito, Matt me contó todo, Keith le dio un puñetazo y por eso fue sacado, pero si el gana esto el entrenador está dispuesto a aceptarlo de nuevo.
- Entonces él tiene que ganar- Lance ahora parecía bastante interesado, Pidge noto eso, después de todo solo Lance y Keith eran los únicos que no lo notaban.
- Ahora pareces interesado- río bajito la castaña -Él te interesa ¿Verdad?
Lance hizo una mueca, le daba la impresión de que la chica lograba ver atrás vez de él y eso no le gustaba del todo. Le hacía sentir vulnerable e incómodo.
-Es obvio.
- ¿Que es obvio? - cuestiono un tanto indignado ante los comentarios de su amiga, sobre todo porque ella parecía sospechar.
- Que te gusta Keith.
Lance se crispo al oír la afirmación de la chica, rápidamente negó con la mano y soltó una risa falsa.
- Es más- la chica señalo la herida en su labio -Él te mordió ¿Se besaron?
Lance retrocedió por mero instinto, sabía que Pidge es una chica inteligente y analítica, ella siempre parecía saberlo todo de alguna manera, pero que supiera sobre su extraña relación con Keith le provocaba un nerviosismo abrumador.
- No estamos saliendo si es a lo que te refieres- dijo desanimado. Escondió sus manos entre los bolsillos de su chaqueta.
-Ya veo.
- De hecho...- ladeó la cabeza incomodo, si ella ya lo sabía de alguna manera que más daba decirle todo de una vez, además que decirle a alguien lograría hacer la carga menos pensada -Él y yo ya henos tenido sexo- la última palabra la dijo en un tono tan bajo que casi fue un murmuro.
- Ah...- Pidge enarco las cejas sorprendida. Sospechaba que algo pasaba entre su amigo y el omega problemático mas no imaginaba que las cosas entre ellos fueran tan lejos.
- Varias veces- rasco su cabeza avergonzado.
- Ya- alzo su mano para detener al chico, se paró de puntillas y apretó la mejilla de este -Entonces ve y díselo.
Lance río entre dientes.
-No lo conoces, es la persona más testaruda que puedas conocer, pasa de estar tranquilo a querer golpearte en unos segundos y luego simplemente parece extrañamente dócil y obediente ¡Ah! Pero si te descuidas te muerde el labio justo cuando piensas que toda ira bien- hecho su cabeza para atrás soltando una risa casi amarga.
- Yo pienso- Pidge rasco su barbilla -Que si le dices lo que sientes de forma honesta él también lo dirá.