Luego de que Seung Hyun terminara de ordenar y limpiar su gran casa, suspiró aliviado.
“Finalmente podré disciplinar a Jiyong ya que tengo el resto del día libre”
Sonrió de lado mientras lavaba sus manos en el lavamanos del baño.
-Debo preparar un almuerzo sencillo y rápido- se sintió ansioso por ir a ver qué estaba haciendo su mascota, por lo que una vez que secó sus manos, se apresuró en salir dirigiéndose hacia la cocina para comenzar a preparar el almuerzo.
Sólo demoró unos minutos ya que creyó conveniente preparar un sándwich sólo para el pelinegro debido a que estaba tan pensativo ideando cómo hacer enojar y llorar a Jiyong que su apetito se había esfumado.
Tomó una bandeja colocando el sándwich, una servilleta y un vaso de jugo, el cual decidió escoger uno de plástico por si Jiyong le daba otro ataque y lograba romper uno de sus más costosos vasos provocando que su enojo fuera tanto que seguramente lo violaría.
“Aunque… no sería mala idea. Sus gemidos me siguen excitando como aquella vez”
Sonrió de lado pero suspiró y negando ya que no quería recordar su amargo pasado por lo que finalmente salió de la cocina para ir hacia la habitación de su mascota.
Antes de llegar, recordó que debía llevarle sábanas nuevas y algo que un conocido le había regalado a modo de broma, el cual quería apreciar cómo reaccionaría el pelinegro al verla.
Una vez que llegó y se detuvo frente a la puerta, sacó la llave de su pantalón y con cuidado, la abrió.
Ingresó y divisó a Jiyong acostado en la cama, de lado, cubierto por algo que el peliplateado no llegaba a divisar.
-Es hora de almorzar, GD-
Pero el pelinegro no reaccionó, por lo que notó que estaba completamente dormido.
Con tranquilidad ya que no sabía cómo reaccionaría su mascota al ser despertado, Seung Hyun dejó la bandeja con lo demás que había traído sobre el sofá y se acercó a Jiyong notando una serena expresión al dormir.
Sintió curiosidad en saber cómo reaccionaría al ser tocado, por lo que deslizó su mano acariciando sólo con su dedo índice, el rostro de Jiyong quien rápidamente dio un molesto quejido, frunciendo el ceño.
“Hasta durmiendo es arisco”
Rió y desvió su vista hacia la tela que cubría la mitad del cuerpo del pelinegro notando que se había cubierto con una holgada y grande camiseta sin mangas de color rosa pastel, el cual tenía un conocido estampado para Seung Hyun.
“Esa es de mi época de adolescente…”
Frunció el ceño ya que creyó haber tirado esa prenda hace años cuando su madre había limpiado toda su antigua casa en Seúl al haberse separado de su difunto padre.
Miró hacia el único armario que tenía la habitación y notó que una de los cajones estaba mal cerrado.
“¿Por qué lo habrá conservado y dejado en ese lugar? Si le dije que la arrojara a la basura ya que era un maldito y pésimo recuerdo…”
Miró con odio a Jiyong y decidió despertarlo sacudiendo sin delicadeza su brazo logrando que el pelinegro abriera sus ojos, asustado.
-¿Qué mierda haces? ¡Suéltame mmh aah d-duele- se quejó al sentir su larga cabellera siendo tironeada con fuerza.
-Ten respeto a tu amo, estúpido perro- jala sus cabellos hacia él para susurrarle en un tono amenazante a Jiyong quien se tensó.
Al soltarlo provocando que el pelinegro rebotara en la cama y jadeara ante la agresividad, Seung Hyun suspiró.
-Te he llamado dos veces y tú seguías durmiendo. A la tercera, te violaba- lo mira enojado.
-¿Q-Qué quieres… a-amo?- intentó enfrentar aquella fría mirada pero no pudo resistirlo, por lo que desvió su vista.
-Te he preparado tu almuerzo, así que levántate y come- caminó hacia el sofá para tomar las sábanas y la sorpresa para Jiyong, sin que la notara aún, mientras le señala la bandeja.
Mordiendo su labio inferior, Jiyong no estaba seguro si levantarse.
-¿Qué esperas? ¿Qué te cargue como una estúpida doncella? Ve, siéntate allí y come- se acerca a él nuevamente observándolo detenidamente.
Jiyong se puso de pie, con cuidado ya que siempre solía enredarse un poco con la pesada y molesta cadena y caminó hacia el sofá mientras que el peliplateado observaba que su mascota tenía puesta su camiseta y no la estaba usando de manta como había creído, logrando que quedara como un corto vestido.
“Pese a que la lleva puesta por encima de las cadenas, ¿por qué se ve tan jodidamente sexy?”
No pudo evitar sentirse atraído por sus largas y bellas piernas que aunque estuviera delgado, eran sensuales y tentadoras.
El pelinegro se sentó y una vez que se colocó la bandeja en su regazo, casi se devora todo el sándwich de dos bocados si no fuera porque Seung Hyun se acercó a él para detenerlo.
-No sabes ni comer. Hazlo despacio si no quieres vomitar todo luego y ensucies el lugar porque juro que te haré comer tu propia vomitada- frunce el ceño.
Jiyong hizo una mueca mientras bebía un poco del jugo y decidió hacer un descanso para continuar comiendo lento como el peliplateado le ordenó.
Elevando una ceja ante su sumiso comportamiento, Seung Hyun no le quitaba la vista de encima.
-¿Dónde encontraste esa mierda?- le señala la rosada camiseta.
-Lo encontré en el armario- lo mira con cierto nerviosismo.
-¿Y quién te ordenó que lo hicieras?-
-T-Tenía frío y como l-las sábanas no estaban, b-busqué algo p-para cubrirmmmh- jadeó pero del leve dolor que le dio en su cuero cabelludo ya que Seung Hyun había tironeado de su cabellos.
-Que sea la última vez que haces algo por tu cuenta sin que te lo ordene, ¿de acuerdo?- se acerca a su rostro dedicándole una mirada seria.
-S-Sí…-
El peliplateado frunció el ceño tironeando nuevamente de los cabellos de Jiyong para que elevara más su mentón.
-A-Amo…- terminó su frase al entender la brusca reacción de Seung Hyun para que lo llamara de esa manera.
-Por ser tus primeras horas aquí, estás aprendiendo cómo debes de llamarme. Buen perro- susurrando en su oído, sonríe de lado y decide lamer la oreja de un tenso Jiyong quien jadeó al sentir una mordida.
Liberando sus cabellos, Seung Hyun decidió relajarse un poco por lo que fue hacia el baño para comprobar que todo estuviera en orden.
Al notar que no había nada extraño ni roto, regresó y vio cómo Jiyong terminaba su sándwich comiéndolo lentamente mientras que lamía sus dedos de una manera que logró tentar al peliplateado.
-Una vez que termines todo, coloca tú las sábanas- ordena sentándose al borde de la cama, mirando atentamente a Jiyong.
Sin responder, el pelinegro terminó de beber el jugo y al haber acabado de comer, dejó la bandeja a un lado del suelo para luego mirar a Seung Hyun.
-¿Qué me ves? Te he dado una orden, GD- se pone de pie esperando a que su mascota lo obedeciera.
Pero Jiyong seguía sentado, pensativo, mirándolo provocando que el peliplateado se acercara nuevamente a él.
-¿Qué mierda te suce…-
No pudo terminar de hablar debido a que Jiyong se puso de pie rápidamente, sosteniendo su larga cadena para intentar ahorcar a Seung Hyun quien fue más rápido y logró colocar una mano en su cuello para evitar ser asfixiado con facilidad.
Ahora un furioso Seung Hyun tomó la cadena y la tironeó lejos de su cuello provocando casi liberarse.
-Con que quieres matarme, ¿eh? M-Maldito perro- gruñe aplicando un poco más de fuerza logrando liberarse para luego ahorcar con sus propias manos a Jiyong.
-Aaahg mmh n-no- asustado, se aferró de las manos del peliplateado quien sentía su ira aumentar cada vez más.
“Primero lo de la camiseta y su pasado, ahora esto. Realmente a este pedazo de mierda le han lavado completamente el cerebro”
Lo miraba pero su vista estaba cegada por la ira hasta que escuchó un sollozo.
-L-Lo siento a-amo- susurró con poco aliento dedicándole a Seung Hyun una mirada completamente roja y su rostro estaba húmedo por las lágrimas, producto del miedo que le produjo aquella expresión en el mayor.
Eso provocó que el peliplateado lo soltara, sorprendiéndose de él mismo.
“Es la primera vez que pierdo la cordura de esta forma… el resentimiento que tengo con él debe de ser mucho como para cegarme así”
Miró cómo un asustado pelinegro yacía de rodillas en el suelo, intentando recuperar la respiración.
-¿Por qué atacaste a tu amo?-
Jiyong no respondía, sólo tosía y jadeaba.
-Responde, pedazo de mierda- gruñe apretando con fuerza su mandíbula para evitar golpear al pelinegro.
-N-No lo sé…- respondía mirando al suelo.
-¿Cómo que no lo sabes?- frunce el ceño.
-Es u-una reacción de i-instinto q-que tengo- lo mira con miedo.
-Tu estúpido instinto sólo debes de aplicarlo con los que realmente te han tratado peor y no conmigo que debes de agradecerme por haber tenido, aún, paciencia contigo maldito perro inservible-
Le dedicó una mirada con tanto desprecio que Jiyong no pudo evitar fruncir el ceño, haciendo un puchero.
-Te lo dejaré pasar por ser tu primer día aquí pero si vuelves a atacar a tu amo, te torturaré de una manera que llorarás pidiendo que te mate. ¿Lo entiendes?- mintió sólo para ver su reacción.
-Sí… amo…-
Seung Hyun suspiró.
-Ahora levántate y pon las sábanas limpias- ordena.
Al pelinegro le costó pararse porque su cuerpo temblaba, por lo que Seung Hyun lo tomó del brazo ayudándolo provocando que Jiyong se aferrara a él para evitar caerse.
“Realmente está temblando del miedo”
Lo observaba atento mientras que Jiyong sólo intentaba recuperar fuerzas para moverse.
-Deja de perder el tiempo y cumple con la orden que te acabo de da…-
No pudo terminar de hablar que Jiyong lo besó muy cerca de sus labios.
“¿Y eso?”
El peliplateado no pudo evitar asombrarse y más al notar que su mascota intentaba besarlo más pero sólo se quedó quieto casi uniendo sus bocas.
-¿Qué intentas hacer, GD?- lo observaba sin comprender esa nueva e inesperada reacción.
-No sé… mi cuerpo r-reaccionó solmmmh-
El peliplateado lo tomó de su nuca para poder besarlo de manera agresiva sintiendo cómo Jiyong se estremecía.
“¿Será que tiene un acto reflejo debido a que inconscientemente su cuerpo me recuerda?”
Pensativo, deshizo el beso mordiendo el labio inferior de un pelinegro que jadeaba bajo.
-Si no te lo ordeno, no debes de besarme. ¿Entendido?- no pudo evitar apretar un poco la zona de la nuca que aún mantenía sujetado.
Jiyong asintió y gimoteó al sentir ser liberado con rudeza.
-Ahora haz la cama de una maldita vez- alejándose de Jiyong, el peliplateado buscó la sorpresa que tenía para su mascota para luego guardársela en el bolsillo de su pantalón.
Volteó a verlo y pudo apreciar cómo el pelinegro tomaba una parte de la sábana y la extendía torpemente sobre el colchón. Pero lo que Seung Hyun menos notaba era cómo su mascota intentaba acomodar la sábana, sino que no pudo evitar ver cómo la camiseta que llevaba puesta se levantaba ante cada movimiento logrando que se aprecie su pequeño trasero.
“Me incita a jugar un poco con él”
Sonriendo de lado, se acercó a Jiyong mientras metía la mano en su bolsillo para tomar lo que había guardado.
El pelinegro no se dio cuenta debido a que estaba luchando con colocar el sobrante de tela por debajo del colchón, por lo que Seung Hyun aprovechó para sacar su sorpresa, sujetar la cadera de Jiyong y finalmente introducir aquel objeto.
-Aah d-duele mmh s-suéltame- forcejeó con el peliplateado pero éste logró inmovilizarlo tomándolo del brazo, tirándolo hacia atrás, provocando que su pecho quede sobre la cama y se mantuviera de pie con su trasero expuesto.
-Este es un juguete especial para perros como tú. Si te quedas quieto, no lo meteré completo. Sólo la punta logró entrar y si desobedeces, te violaré con este pene de juguete- ríe comenzando a mover en círculos el oscuro juguete.
El pelinegro mordió su labio inferior mientras se aferraba con su única mano libre, a la sábana.
-Antes de que te metiera esto, vi que estabas duro. ¿Acaso el ser ahorcado te excitó? ¿O fue el beso?- sacaba y metía la punta con rapidez.
Pero Jiyong no respondió por lo que el peliplateado frunció el ceño.
-Si no me respondes, te lo meteré hasta el fondo y agrandaré tu agujero metiendo mi pene también- amenaza susurrándole cerca del oído del pelinegro quien jadeó al sentir el aliento caliente sobre su piel.
-E-El mmh beso- logra girar su rostro mirándolo levemente sonrojado y con el ceño fruncido ante la molestia que sentía tener aquel frío juguete en su interior.
Seung Hyun chasqueó su lengua ante lo sensual que su mascota se veía, por lo que soltó el brazo de Jiyong y quitó el juguete provocando que un agudo jadeo saliera de la boca del pelinegro.
Sin poder resistirse, el peliplateado jaló los cabellos de Jiyong y mientras apegada su cuerpo al de él, lo besó de manera agresiva y tan salvaje que su mascota jadeaba ahogado pero sin deshacer el beso, al contrario, más movía su lengua para sentir la de Seung Hyun.
“Si no me detengo ahora, me dejaré llevar fácilmente y es lo que no quiero”
Iba a separarse de Jiyong pero sintió cómo éste lentamente refregaba su trasero contra su pelvis.
“Ahora sí puedo asegurar que no está bajo el efecto de ninguna droga pero… ¿por qué hace esto si era un perro agresivo e intocable?”
Al escuchar el teléfono de la casa sonar, soltó su oscuro cabello y notó cómo Jiyong se estremecía deshaciendo el beso por falta de aire, jadeando ahogado mientras que un hilo de saliva recorría la comisura de sus labios.
-Debo retirarme pero te dejaré el juguete para que te entretengas mientras yo no estoy, GD- ríe al notar cómo el pelinegro intentó hablar pero él lo detuvo dándole una lenta y excitante lamida en donde el hilo de saliva se había esparcido.
Mientras enderezaba su cuerpo, recordó algo que hizo que mirara por encima del armario.
“Allí hay una cámara oculta. Será interesante ver lo que mi mascota hará”
Sonrió de lado y antes de retirarse, apretó una de las nalgas de Jiyong quien jadeó mientras que intentaba ponerse de pie.
-Te ayudaré- toma parte de la cadena y le da un fuerte jalón hacia él provocando que un quejoso Jiyong lograra pararse pero cayendo de espaldas sobre el pecho del peliplateado quien lo volteó sin cuidado para que quedara frente a él y mirando hacia la zona de la entrepierna de Jiyong, pudo divisar mejor aquel erecto miembro por sobre la tela de su camiseta pero lo que más admiró fueron los tatuajes en sus muslos.
“Recuerdo ese ‘INHALE’ y ‘EXHALE’ a la perfección. Él se los hizo unos días antes de que experimentáramos el placer físico”
Suspiró intentando no recordar más y al ver al pelinegro, éste lo observaba atento.
-Más te vale comportarte si no quieres ser castigado, GD- advierte separándose de él mientras tomaba la bandeja y así podía irse.
Jiyong asintió.
-Vendré a darte la cena-
“Seguramente el que está llamándome ahora es YoungBae porque quiere hablar para saber sobre Jiyong y no quiero que venga aquí, por lo que tendré que ir a su departamento”
Suspiró ya que no quería salir y caminó hacia la puerta.
-Sí, a-amo…- respondió con nervios y mordiendo su labio inferior ya que estaba conteniendo el dolor de su erección.
Seung Hyun le dedicó una última mirada salvaje antes de salir logrando que Jiyong tocara su entrepierna, estirando la tela hacia abajo. Y sonriendo satisfecho al dejarlo en ese estado, salió cerrando la puerta con llave.
Al escuchar nuevamente el teléfono sonar, frunció el ceño y se apresuró en ir a dejar la bandeja en la cocina y atender antes de perder la paciencia ya que sabía que YoungBae le insistiría con el llamado hasta comunicarse con él.
**
Una vez que tocó el timbre, la puerta se abrió casi al instante logrando que el rubio vistiendo un jean azul rasgado y una camiseta negra con estampado de AC DC, se hiciera presente.
-Buenas tardes, Seung- le sonríe dándole acceso para que pasara.
-Buenas tardes, Bae- dio un gran suspiro una vez que ingresó hacia el living.
El rubio le indicó a su amigo que se sentara en donde quisiera.
-¿Quieres algo de beber?-
-Vayamos al grano. ¿De qué quieres hablarme?- le dedica una mirada tan seria que YoungBae se tensó.
-Ya sabes de qué quiero hablar, Seung-
-Entonces pregunta lo que quieras que si tengo ganas, te responderé-
YoungBae rodó los ojos ante el comportamiento del peliplateado.
-Al menos déjame traer algo para beber y estar más cómodos. ¿Quieres una cerveza?-
-Está bien- suspiró y el rubio fue rápidamente hacia la cocina volviendo con dos latas.
-Ten- sonriéndole nuevamente, le entrega una mientras se sentaba a su lado.
Seung Hyun agradeció y abrieron la lata bebiéndola al mismo tiempo.
-Siempre tenemos esa costumbre de abrirla y beber al mismo tiempo- ríe el rubio.
-Es verdad- sonríe de lado Seung Hyun mientras miraba atento a su amigo.
-Ya entendí tu mirada, así que comenzaré… ¿quién es ese chico de anoche y por qué te empeñaste en comprarlo a tan alto precio?-
-Aún no puedo decirte quién es y he pagado por él por una buena razón- bebe otro sorbo.
-¿Al menos puedo saber la razón?- bebe también.
Seung Hyun pareció pensarlo un momento y suspiró.
-Si te la digo, no estarás de acuerdo y me molestarás todos los malditos días-
YoungBae frunció el ceño sin comprender.
-¿Lo utilizarás para placer sexual?-
El peliplateado elevó una ceja.
-¿Me crees cara de pervertido?-
-Jamás te he visto en esa faceta, por lo que no sé- termina de beber la lata debido a la seria mirada que su amigo le dedicó.
“A decir verdad, sólo iba a torturarlo hasta hacerlo llorar pero aún sigo atraído físicamente a Jiyong y por lo visto, él también”
No pudo evitar recordar el reciente comportamiento de su mascota al besarlo sin su permiso y frotarse contra él siendo que es agresivo.
Pensativo, terminó de beber toda la cerveza.
-Aquí el único gran pervertido entre los tres es Seungri y un poco tú al babear por su trasero- decidió desviar el tema.
-¿Tan obvio soy?- no pudo evitar sentirse avergonzado, olvidándose completamente de quién era el extraño pelinegro.
-Demasiado mi querido amigo- sonríe de lado al notarlo levemente sonrojado y palmea su espalda.
-Pero él te desea a ti, Seung- lo mira desanimado.
-Pero yo no. Así que sigue luchando por hacerlo tuyo, Bae-
YoungBae suspiró cabizbajo y el peliplateado suspiró al ver lo indeciso que era su amigo, por lo que decidió mostrarle su lata de cerveza vacía.
-Ya que venido a visitarte, bebamos y comamos algo. ¿No crees?-
-Sólo si tú pides comida- sonríe ya que sabía que siempre el peliplateado se encargaba de llamar a su delivery de confianza.
-Qué amigo interesado que tengo- bromea mientras que el rubio se ponía de pie.
-Obvio, mi amigo es millonario y ya que lo invito a beber de mis cervezas, él debe de pagar por un delicioso y costoso sushi de alta calidad-
Ambos rieron.
-Ya ve a traer otra cerveza que muero de sed- le hace un gesto con la mano para que se retire mientras sacaba su celular del bolsillo de su pantalón para pedir sushi.
YoungBae rió y se fue en busca de más bebidas.
**
-Mi hermoso, sexy y tentador Seung hyung- abraza al peliplateado quien rápidamente lo empujó.
-¿Me quieres decir qué mierda haces aquí, Seungri?- frunce el ceño y más al notar al castaño levemente sonrojado, claro signo de que estaba ebrio pero hasta el momento podía hablar con normalidad.
-Yo lo invité… lo siento, Seung- se lamenta ya que el peliplateado había cambiado la cara y estaba completamente enojado.
-¿Por qué lo hiciste?- frunció el ceño.
-Porque quería que pasáramos la noche los tres juntos, como antes- sonríe.
“Claro y yo nací ayer… seguramente quiere emborrachar a Seungri para poder estar con él”
Miró a su rubio amigo.
“Aunque no es mala idea así deja de molestarme de una vez”
Sonrió de lado provocando que YoungBae sintiera escalofríos.
-¡Me encanta esa expresión!- mordiendo su labio inferior, Seungri intentó acercarse nuevamente al peliplateado pero no contaba con que éste lograra tomarlo del mentón, atrayéndolo más a su rostro.
-Haremos un juego, pequeño panda- miró de reojo el ceño fruncido de YoungBae.
-¿Un juego?- se sonrojó.
-Sí. ¿Tú quieres estar conmigo esta noche?-
-¡Sí!-
-Bueno, entonces si logras beber ocho latas de cerveza de corrido y puedes mantenerte en pie por cinco minutos, te follaré-
-¡Seung hyung! ¿Cómo puedes hacer ese tipo de jueg…-
-Silencio YoungBae- su voz salió tan ronca y seria que logró que un alterado rubio se quedara quieto y en silencio.
Seung Hyun sonrió de lado.
-¿Aceptas?- mira a Seungri quien mordía su labio inferior ante el deseo de poder estar con él y finalmente soltó su mentón.
-¡Lo haré!- se separó del peliplateado para abrir la primera lata de cerveza.
**
-¿Te encuentras bien, Ri?- un preocupado rubio se sentó al lado del menor quien había llegado a su quinta lata de cerveza pero no creería poder ser capaz de continuar.
-S-Shí esshtoy bien- abrió la sexta lata intentando beber pero sus reflejos ya fallaban.
-Bien, haz perdido Seungri por lo que ya se me hizo tarde y debo irme- sonriendo de lado, Seung Hyun se puso de pie largando el humo del último cigarrillo que estaba fumando, el cual decidió apagarlo en el cenicero que su amigo le había prestado.
-¡Pero sho no he acabadsssh- sintió su cabeza dar vueltas logrando que todo su cuerpo cayera sobre el cuerpo de YoungBae.
-Me lo agradeces luego, Bae- le guiña un ojo, sonriéndole de lado.
-No soy de esa clase de personas que se aprovecha de su amigo mientras está ebrio y durmiendo- frunció el ceño.
-Entonces te perderás la oportunidad de oro de follar ese lindo y gran trasero- comentó mientras se colocaba su abrigo.
YoungBae pareció pensarlo.
-Me iré. Te veré luego- caminó solo hacia la puerta ya que el rubio estaba sosteniendo a Seungri.
-¿Manejarás en ese estado?- lo mira preocupado.
-No he traído mi vehículo. Me iré como vine aquí, en taxi-
-De acuerdo- suspiró aliviado.
-Adiós Bae. Que tengas una noche ardiente- sonríe de lado y mientras el rubio lo saludaba pensativo, finalmente salió del departamento.
YoungBae suspiró acariciando el rostro de un durmiente castaño quien jadeó ante la caricia y sin poder evitarlo, el rubio le dio un dulce beso en los labios.
-Vamos a la cama, Ri- susurró con ternura provocando que el menor se aferraba a su cuello besándolo torpemente.
-Vamosssh y hagámossshló mmh te quiero mussssho hyung mmh- comenzó a roncar suavemente mientras que YoungBae lo cargaba en brazos, con algo de dificultad ya que Seungri era más alto que él y un poco pesado.
Mientras se hacía una batalla mental entre decidir si ser amable o hacerle caso a Seung Hyun, el rubio se dirigió con el menor hacia su habitación…
**
Como no tenía ganas de cocinar ya que debía admitir que se sentía un poco mareado de tanto haber bebido, Seung Hyun regresó a su casa con un poco de sushi y una pequeña botella con sake para alimentar al pelinegro.
Pero antes de ir a verlo, sintió curiosidad por saber qué hizo en todo el día. Por lo que rápidamente fue hacia su habitación a cambiarse de ropa y vestir uno de sus pijamas mientras encendía su laptop, ingresando al sitio donde podía ver las cámaras de seguridad.
-Veamos qué estuvo haciendo mi mascota rebelde- sonríe de lado escogiendo la cámara de la habitación en donde Jiyong estaba.
La imagen se hizo visible y Seung Hyun adelantó las partes en donde el pelinegro dormía o se iba al baño.
-Oh, vaya- detuvo el video notando que a las ocho de la noche, Jiyong se había desnudando y llevado el pene de plástico a la cama mientras se recostaba apoyando su espalda contra el cabecero y abría lo más que podía sus piernas.
En la imagen se notaba que el pelinegro hacía todo su esfuerzo por meterse el juguete pero no entraba, por lo que se lo llevó a la boca para ensalivarlo bien y luego introducírselo lentamente.
-¿Tendrá habilitado el sonido?- ansioso y sintiendo una fuerte punzada en su zona baja, comprobó si podía escucharlo.
“-Aaaah mmmh m-maldición mmh-“ gemía desesperado mientras comenzaba a masturbarse.
-Jamás creí que sin haber acabado el día, vería algo así- mordió su labio inferior evitando tocarse debido a que su miembro pedía ser atendido.
-Escuchemos un poco más…-
“-Mmmh aaah n-no entra mmh aaaah a-amo-“
-¿Me está llamando a mí?- se sorprendió y subió más el volumen ya que no podía creer lo que sus oídos escuchaban.
“-Aaah amo mmh aaah AAAAAH-“dio un grito agudo de placer mientras se corría sobre su mano sin dejar de tocar su miembro.
Al notar que Jiyong se había quitado el juguete, dejándolo a un lado mientras que se recostaba mejor boca arriba jadeando para recuperarse de su orgasmo, un Seung Hyun silencioso continuó viendo la grabación hasta llegar al tiempo actual.
-Se lo ve inquieto… ¿me habrá oído entrar a la casa?- entrecerró sus ojos para poder apreciar mejor lo que Jiyong intentaba hacer.
-Tal vez tenga hambre y espera a ser alimenta…-
Hizo silencio al notar cómo el pelinegro que estaba mirando hacia la ventana, caminaba hacia la cama recostándose boca arriba mientras levantaba su camiseta hasta la altura de su pecho, mordiéndola para que se mantuviera sobre su pecho y no tocara su erecto miembro.
-¿Lo hará otra vez? Comienzo a pensar que realmente es un perro en celo-
“Además, Yang me hubiera dicho que se comportaba así pero no, sólo ha dicho que era imposible tocarlo porque atacaba pero yo aunque no lo follé, lo hice…”
“-Mmmh aaah a-amo mmh-“ gimió mientras que con una de sus manos tomaba el pene de plástico para lamerlo y meterlo un poco en su interior mientras que con su mano libre, se masturbaba lento.
Seung Hyun sintió un excitante calor recorrer por toda su espina dorsal al escuchar aquel gemido llamarlo, por lo que apagó su laptop y tomó el sushi que había comprado para Jiyong junto a la pequeña botella con sake que le habían entregado gratis.
-Es hora de alimentar a mi mascota- sonrió de lado mientras rápidamente salía de su habitación.
Cada pasado que hacía, su cuerpo se sentía ansioso por lo que una vez que llegó al dormitorio donde Jiyong estaba, sacó su llave del bolsillo de la camisa de su pijama y abrió rápidamente la puerta.
Prendió la luz y notó cómo Jiyong se quitaba rápidamente el juguete de su ano provocando que diera un jadeo corriéndose de improvisto al ver la penetrante mirada del peliplateado.
-Veo que el juguete para mi mascota ha servido muy bien-
El pelinegro no respondió mientras deslizaba su mano hacia su vientre para intentar limpiarse por lo que ahora sus dos manos estaban cubiertas por su esencia.
-Te traje la cena, GD- le muestra el sushi junto con la pequeña botella de sake provocando que Jiyong intentara ponerse de pie con claras intenciones de tomar la botella pero Seung Hyun frunció el ceño.
-Siéntate en la cama- ordena.
-Pero quiero beber sake-
-¿Qué desobediencia es esa? ¿Quién es el amo aquí?- lo mira serio.
-L-Lo siento a-amo…- obedece sentándose en la cama mirando con deseo aquella pequeña botella.
“Su voz se escucha tan distinta a diferencia de cuando se toca llamándome con deseo”
Observó sus manos.
-Si quieres comer y beber, límpiate las manos-
Jiyong intentó ponerse de pie para lavarse en el baño pero el peliplateado se lo impidió.
-Busca una forma de limpiarte sin ir al lavamanos-
Frunciendo el ceño, Jiyong decidió lamer sus manos saboreando su propia esencia.
El peliplateado lo observó detenidamente mientras recordaba cómo Jiyong se daba placer en sus horas de ausencia.
Al notar que sus manos estaban limpias, Seung Hyun le entregó el sushi y el sake.
Jiyong rápidamente abrió la pequeña botella bebiendo la mitad para luego dar un jadeo al sentir su garganta quemar.
-¿Eres de beber alcohol más que comer?- sintió curiosidad de preguntar.
-Desde que soy una mascota, sólo bebo y fumo ya que la comida allí era un asco- iba a beber el resto de la botella pero Seung Hyun lo detuvo.
-Si no quieres vomitar, come lentamente el sushi-
Frunciendo el ceño no muy conforme, Jiyong decidió probar aquella costosa comida logrando que sus pupilas brillaran ante la deliciosa comida.
-¿Te gusta?-
-Sí, es la primera vez que lo pruebo- continuó comiendo.
“Mentiroso. Solía ser nuestra comida favorita”
Sintió su enojo apoderarse nuevamente de él logrando que Jiyong lo notara y sintiera su cuerpo temblar.
-¿Te has divertido mucho con ese juguete?- le señala el pene de plástico que yacía del otro lado de la cama.
Jiyong casi se atora, por lo que intentó beber sake pero el peliplateado fue más rápido y se lo quitó.
-¡Dámelo!- lo mira serio.
-¿A quién le hablas así?- jaló de su cadena provocando que Jiyong jadeara ante el repentino y brusco tirón.
Intentó sostener la bandeja de sushi con fuerza para que no callera nada a la cama.
-Noto que el no poder beber alcohol te altera. Vaya perro desobediente. ¿Quieres beber?-
El pelinegro lo miró y asintió conteniendo sus ganas de atacarlo para quitarle la botella.
-Entonces muéstrame cómo te entretienes con el juguete que te di y si logras correrte sin mi permiso, te follaré- sonríe de lado al ver la expresión de enojo en Jiyong y decidió soltarlo.
Jiyong mordió su labio inferior ante la impotencia de no poder beber tranquilamente.
-¿Qué esperas? Entonces me iré- le quita el sushi y se para logrando que Jiyong se desesperara.
-No…- intentó agarrarlo del brazo pero Seung Hyun lo esquivó.
-Si lo quieres, ya sabes qué hacer GD- sonrió de lado y más al ver cómo su mascota se quitaba su camiseta dejándola a un lado de la cama mientras tomaba el juguete.
El peliplateado caminó hacia el sofá para dejar la comida allí menos el sake que decidió tenerlo en la mano.
Mientras tanto Jiyong, se acomodó de la misma manera en la que Seung Hyun lo había visto en el video y luego de ensalivar bien el juguete, se lo llevó a su ano.
Seung Hyun se quedó parado en frente a la cama teniendo una buena imagen de cómo el pelinegro abría más sus piernas al meter y sacar sólo la punta del juguete mientras se masturbaba.
“Es increíble que lo haga sólo para beber”
Su mirada era tan penetrante y llena de deseo ante los ojos de Jiyong quien sintió su interior palpitar mientras metía un poco más el juguete.
-Aah mmh mmh- se desesperó, por lo que cerró sus ojos para sentir mejor el contacto.
-Deja salir más tu voz, GD- ordenó en un tono tan ronco que el pelinegro sintió todo su cuerpo temblar.
-Aaah mmh a-amo aaah aah-
-Así me has llamado desesperado mientras jugabas con tu trasero, ¿no?- sonríe de lado mientras se acercaba a un lado de la cama, notando que Jiyong abría sus ojos dedicándole una mirada llena de pasión.
-No-
-¿No?- frunce el ceño al escuchar a Jiyong reír burlón.
-Llamaba a otro que casi fue mi amo pero me trataba mejor que tú mmh- lo desafía con la mirada provocando que Seung Hyun sintiera su ira apoderarse de él.
“Eso no puede ser posible. Sólo está intentando hacerme enojar”
Se acercó a Jiyong riendo de una manera que hizo sentir escalofríos en el pelinegro.
-Te trataré mejor y ayudaré a mi patética mascota- tomó la mano de Jiyong que sostenía el juguete para empujar con fuerza hacia adentro logrando que el pene de plástico ingresara hasta el fondo tocando el punto dulce del pelinegro.
-Amo aaaaah mmh- sin poder evitarlo, se corrió provocando que Seung Hyun riera burlón.
-No te he ordenado que te corrieras- al notar el cuerpo exhausto de Jiyong, le quitó el juguete sin delicadeza.
-L-Lo mmh siento mmh- intentaba recuperar la respiración.
-Sabes lo que significa, ¿verdad?- sin darle tiempo a recuperarse, jaló el cuerpo del pelinegro para que quedara boca abajo, en cuatro.
-N-No quiero- intentó voltearse pero el peliplateado sujetó con fuerza su cadera.
“Es un mentiroso. Se niega pero sé que lo quiere, de lo contrario, haría más fuerza… lucharía más por liberarse de mí”
-Si me dices la verdad, lo pensaré… ¿en quién pensabas mientras jugabas con tu trasero?-
El pelinegro giró su rostro encontrándose con la seria mirada de Seung Hyun.
-En ti… a-amo- mordió su labio inferior provocando que el peliplateado frunciera el ceño.
-Fuiste un mentiroso, por lo que tendrás un castigo- destapó la botella de sake y derramó una parte sobre el ano de Jiyong.
-N-No mmmh- jadeó ante el tibio líquido y apoyó su rostro sobre su brazo que ahora se aferraba al cabecero de la cama.
“Ya no puedo contenerme”
Chasqueó su lengua y rápidamente se bajó el pantalón de su pijama hasta por debajo de su trasero, liberando su erecto miembro el cual derramó el resto del sake sobre él.
-Más te vale no volver a mentirme, GD. Pero por esta vez, haré una excepción y tu amo será bueno contigo- abrió sus nalgas mientras lo penetraba lentamente, con cuidado, entrando hasta el fondo.
-Aaah mmmh mmh- gimió intentando callase mordiendo su brazo pero las certeras y lentas embestidas que Seung Hyun le estaba dando, lograban que sus gritos se hicieran más fuertes y desesperados.
El peliplateado clavó sus uñas en el trasero de Jiyong comenzando a aumentar sus penetraciones, sintiéndose bien por primera vez en años.
“Dije que iba a contenerme y no follarlo aún pero mi cuerpo reacciona a su calor. Es imposible detenerme ahora”