Todos los jóvenes se encontraban en el comedor del barco reunidos desde que Mahiru les había dado las noticias de que algo malo había pasado con el chico albino, varios murmullos empezaron a correr. Algunos temían que hubiera alguna clase de enfermedad rondando el barco, pero el hecho de que Hinata les explicará que no era nada de qué preocuparse aligero un poco el ambiente.
_Mikan y yo cuidaremos de Komaeda, no deben temer, nada raro paso.
_ Es un alivio_ Soltó Sonia colocando las manos en su pecho.
_ ¿Seguro que no quieren ayuda? _Fuyuhiko observo a Hinata con expresión preocupada, parecía ser que el yakuza no estaba muy convencido sobre la condición de Komaeda.
_ Descuiden, podemos encargarnos por nuestra cuenta, sigan con los preparativos de la fiesta de llegada...
El castaño desapareció de vista al dirigirse nuevamente a la enfermería. Mikan por su parte luego de aplicar los nutrientes necesarios al cuerpo del chico pálido se dedicó a esperar pacientemente su reacción.
_ Está bien Mikan, puedo hacerme cargo _ Hinata le dedico una pequeña sonrisa tranquilizadora_ Las chicas te necesitan para el armado de la fiesta.
Mikan quería replicar, pero sabía que Hajime tenía más de una habilidad que le hacían capaz de cuidar de Komaeda por su cuenta. Lo cual la hacía sentir un tanto inútil en comparación, pensamiento por el cual arrugo el entrecejo.
_ Relájate, hiciste un buen trabajo.
_ ¿A-ahh? E-enserio lo crees... g-gracias_ Aquellas palabras tranquilizaron un poco más a la enfermera la cual se fue hacia el comedor con un caminar torpe por su propia ansiedad.
Hinata se quedó por su parte observando fijamente a Komaeda. No tardaría mucho en despertar, además que posiblemente se sintiera un poco desorientado de primeras. El castaño suspiró y dejo su cuerpo caer en la silla, no quería que los otros entrarán en paranoia, prefería que siguieran con sus planes antes que solo hicieran alboroto.
Nagito dejó escapar un sonido de incomodidad y abrió lentamente sus ojos, tardo unos segundos en saber dónde estaba y como había llegado allí. Poso sus ojos en Hinata por un momento con una expresión de sorpresa.
_ ¿Hinata-kun? _ Su voz salió rasposa y débil, tanto que Hinata le pareció que le dolía hablar.
_ Está bien, no pasa nada.
_ Creo que es la segunda vez que me despierto observando tu rostro.
_ Supongo que sí, se ha vuelto rutina.
Nagito rio por lo bajo e intento recomponerse sentándose en la cama. Al menos se le notaba mejor que el día anterior a los ojos del castaño. El cual analizaba al chico con detenimiento para saber si estaba del todo bien.
_Realmente no tienes que hacer esto ¿sabes? Sé que te sientes mal, pero en tal caso debería ser yo quien te compense.
_No empieces, estamos en buenos términos ahora_ Hablo con seriedad_ Lo ideal es que te recuperes.
Komaeda frunció el ceño y le dirigió una mirada de tristeza, sentía que no merecía la preocupación del castaño o de ninguna otra persona, tampoco se sentía digno de recibir su perdón. Aun así, lo que más le inquietaba era no poder entender porque su amigo hacía todo esto, no entendía del todo lo que era tener un vínculo con alguien. Las personas a su alrededor se alejaban o morían, por lo que ser solitario era normal para él.
No es como si le molestará la preocupación de Hinata, pero no estaba del todo acostumbrado, lo hacía sentir un poco raro y mal, consideraba que debería preocuparse por otras cosas.
_ De acuerdo... harán una fiesta ¿verdad?
_ Si, puedes venir cuando te sientas mejor...
El albino miro el techo perdido en sus pensamientos, era más probable que se quedará en una esquina comiendo que estar en el centro del baile o las charlas.
_Creo que seguiré durmiendo, gracias Hinata-kun.
_ Llámame si necesitas algo.
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Mikan caminaba de un lado a otro con preocupación, a la vez que Mahiru colgaba serpentinas con Hiyoko.
_DEJA DE MOVERTE TANTO CERDA ASQUEROSA, ME ESTÁS FASTIDIANDO.
_ L-lo siento_ Chilló la enfermera_ E-es solo que estoy p-preocupada.
_ Tranquila_ La calmó Sonia_ Estoy segura que Hinata podrá cuidar de Komaeda.
_Bueno, la señorita Sonia tiene razón, es el único que logra lidiar con el rarito_ Soda entrecerró los ojos a la vez que hablaba.
_N-no es eso... e-es solo que...s-su condición empeorará s-si no llegamos a tierra firme pronto podría descompensarse y...
_ Lo dices como si estuviera enfermo.
Mikan se sobresaltó en el lugar y empezó a sudar frío.
_N-no dije n-nada, lo siento, lo siento...
Peko la miro fijamente al igual que el mafioso.
_ Espera ahí, ¿acaso nos están ocultando algo? _La voz de Fuyuhiko altero más a la chica quien se echó a llorar.
_ C-cálmate Kuzuryu, seguro es un malentendido_ La princesa tranquilizo a Mikan_ No tenemos secretos entre amigos.
El llanto de Tsumiki aumento.
_ ALGUIEN CALLE A ESA ZORRA.
_ E-es s-solo que...n-no quiero m-mentirles y que me odien.
_ ¿Mentirnos? _ El impostor definitivo entró en escena acompañado por Mitarai.
En pocos minutos todos los jóvenes estaban alrededor de la chica que lloraba y se disculpaba sin cesar.
_ Por favor, cálmate y explícanos que ocurre, De lo contrario no podremos ayudarte_ Mahiru sonrió a Mikan y está solo se quedó temblando en el lugar mirando hacia todos lados.
_ E-es que no sé si Hinata quiera... que lo diga.
_ Vamos, somos un grupo, tenemos que confiar los unos en los otros.
_ Estoy de acuerdo con la princesa de la oscuridad_ Gundham habló_ La desconfianza será lo que nos arrastre al noveno círculo del infierno donde no nos esperan más que los tormentos de miles de demonios sedientos de sangre, así que habla mujer.
La enfermera tomó aire pensando en que se arrepentiría de lo que diría, pero tan solo deseaba dejar de ser el centro de atención, al fin y al cabo, no es como que Hinata le dijera que no pudieran saberlo.
_ E-es que N-Nagito está muy enfermo. B-bueno sus análisis de sangre no lucen bien y está débil, por l-lo que sería i-ideal llevarlo a un hospital cuando lleguemos.
_ ¿Es algo grave acaso?
_ Que va, Komaeda es un exagerado seguro no es más que una gripe.
_ Basta Soda, es nuestro compañero también. Por favor, continua Mikan..._ La princesa puso una expresión seria.
_ N-no es una gripe... bueno es más bien un linfoma avanzado...l-lo siento si no puedo d-decirles muchos detalles, pero creo que nunca s-se lo ha tratado c-correctamente.
_ Ven, es solo un linfoma. Espera ¿qué es eso...? _ El chico de pelo fucsia seguía sin entender que ocurría a su alrededor.
_ U-un tipo de cáncer que afecta l-los ganglios linfáticos, pero si no se trata p-puede extenderse a otras zonas del cuerpo.
Un silencio sepulcral se hizo presente en la sala. Los pasos de Hinata llegando fue lo único que lo rompió, el castaño no tardo en entender que algo malo había pasado desde el momento en que todos los ojos de sus compañeros se posaron en él.
Mikan ocultándose entre sus amigas, las miradas de preocupación e irritación. Sin duda algo había hecho la enfermera para convertir el ambiente festivo en lo más cercano a un funeral.
_ ¿Qué les dijiste? _ La voz salió fría y monótona. Podía sentir como la parte de Izuru tomaba más lugar a medida que los segundos pasaban.
_ H-Hinata, ¿es cierto lo que dijo Mikan? ¿Qué Komaeda está enfermo?
_ Por supuesto que no, señorita Sonia, debe ser solo una mala broma... ¿no Hinata?
_ ¿No hay probabilidades de que sea mentira?, quiero decir es Komaeda_ Akane soltó aquellas palabras con cierta duda.
_ Eh Hinata, ese tonto está bien ¿verdad? _ Fuyuhiko fue quien habló esta vez.
Silencio, eso fue todo lo que se oyó.
_ Por favor di algo.
_ Ibuki no se siente bien en este momento, este ambiente es muy oscuro_ La cantante lo observaba inquieta.
_ Hinata..._ Mitarai susurró observándolo con una mirada triste.
Nadie noto el cambio del castaño en ese momento, todos estaban demasiado inquietos para comprender que algo andaba muy mal. Pero bastaba con ver sus ojos para notar la frialdad y la indiferencia propias de Kamukura.
_ ¿Y que si está enfermo? ¿Acaso cambiará algo, el hecho de que va a morir?
_ ¿Hajime? _ Peko le habló, sintiendo como el aura oscura del chico aumentaba.
_ ¿Serán buenos compañeros con él por lástima? Vaya que hipócrita. En fin, si está enfermo posiblemente le queden 1 o 2 años más, no lo sé. No es normal que alguien con linfoma y demencia frontotemporal viva tanto como él, supongo que es por su suerte.
_ Entonces es cierto...Hinata ¿Por qué no nos dijiste nada? _ La pelirroja comenzaba a irritarse con el chico, pero intento mantenerse calmada.
_ ¿Para qué? Si él no quiso decírselos es su problema, además eso no cambiaría nada. Como dije si lo hiciera solo sería por la triste hipocresía.
_ ¡¿A quién le dices hipócritas?!_ Soda grito_ ¡Si, tu eres el que lo está cuidando cuando todo el juego nos dijiste que era peligroso y que nos salvarías de su malicia!
Hinata solo miro el suelo en silencio, sabía que esto le llegaría tarde o temprano, pero en ese instante solo quería terminar con todo. Culpa, egoísmo, amistad... no importaba la razón en ese instante, la decisión ya estaba tomada.
_ No puedes tratarnos tan mal, tú solo te acercas porque te sientes culpable_ Kazuichi seguía hablando notablemente molesto_ sé honesto Hinata, nunca te importo, menos aún luego de lo que dijo sobre que eras del curso de reserva.
....
_ Hinata-kun..._ La voz rasposa y débil del albino hizo que todos dieran un brinco hacia atrás, salvo Hinata quien se mantenía estático.
_ ¿Qué haces aquí? _ Hajime sonó demasiado serio, no estaba de humor para más explicaciones.
_ No pude evitar oír su conversación_ La voz se fue apagando cada vez más_ Supongo que solo causo problemas. Je je, realmente la basura como yo debería morir de una vez...
_ Komaeda no estás bien, vete a tu cuarto.
El aura de Hajime era densa pero aun así no fue lo suficiente para que el albino cediera.
_ No puedes detener lo inevitable, yo te lo dije_ No había más que una sonrisa falsa en su rostro lo que hacía todo aún más tenso_ Lamento todos los problemas que les he causado... estoy siendo honesto, por estás cosas quería morir...
_ K-komaeda tranquilo no tienes porque...
_ Al contrario, princesa... si tengo que hacerlo, disculparme ante todos es lo menos que puedo hacer. Así que lo lamento... está bien si me odian, es más que entendible, pero lo que más lamento es ser una carga para mi amigo...y para todos ustedes.
Aquellas palabras hicieron que Hinata regresará a la realidad, todo había ido a peor, ahora Nagito se culparía de todo esté desastre y posiblemente se cerrará en sí mismo.
"Debí decirles a los otros, ¿porque tenía que ser tan engreído para creer que podría con algo tan delicado por mi cuenta?" Se reprochaba mentalmente a la vez que intentaba buscar por una solución para el problema, el cual no hacía más que empeorar.
_Nagito está bien, te perdonamos_ Fuyuhiko habló con sinceridad_ No eres el único que cometió desastres ¿sabes? Todo estará bien.
_ ¿Eh? Realmente crees que eso bastara, que ingenuo...
Hinata contempló junto con sus compañeros como los ojos del chico se volvían una espiral de locura, sabían lo que significaba y lo que vendría. En aquel estado Komaeda podría decir o hacer cualquier cosa sin pensarlo. Era su peor lado y por aquella discusión acababa de aflorar una vez más.
_ ¡Tú, no entiendes nada Kuzuryu! ¡Esta horrible desesperación se acabará cuando mi vida terminé! Justo ahora.
Fueron tan solo segundos, Hinata solo vio como sacaba aquella jeringa para dirigirla a su propio cuello, si el aire llegaba a su torrente sanguíneo él iba a ...
Apenas un centímetro fue la distancia que le resto a la aguja para cumplir con el fatal destino, cuando Hinata utilizo sus talentos para detener el brazo sano del chico y luego fue seguido de Nidai y Akane quienes lo sostuvieron para que no se hiciera daño.
El castaño le quito la jeringa y observo con tristeza la escena frente a él, sus amigos aterrados, la fiesta arruinada y Nagito diciendo cosas sin sentido con lágrimas en sus ojos repletos de locura, mientras que Akane y Nidai lo sostenían a pesar de que no debían hacer mucho esfuerzo.
_ ¿Por qué? ¿Por qué me obligas a estar vivo? ¿Tanto me odias? _ La risa desquiciada y las lágrimas que no paraban de brotar solo fueron una punzada más directo al pecho de Hinata.
_ Komaeda te lo dije, no te dejaré morir. Tienes que cumplir tu sueño ¿lo olvidas?... poder pasar tiempo con las personas que amas, tener amigos...
La risa seca del albino le calo en lo más hondo de su corazón.
_ Es que no lo has entendido, tanto talento tienes ahora pero aún no lo has entendido. Que todas las personas que amo mueren, Hinata-kun. No hay esperanza en eso... y mientras esté vivo eso afectará a todos los que se acerquen. NO HAY NADA DE ESPERANZA EN MÍ...ES SOLO UNA MENTIRA, SOLO HAY MUERTE Y DESESPERACI“N.
Pocas veces habían visto a Komaeda gritar de esa forma, por su llanto y su voz quebrada Hinata supo que estaba en medio de una crisis. Se maldecía por eso, por no decirle a nadie y creer con soberbia que podría ayudar a un chico roto y enfermo, que lo único que le pidió fue su amistad. No que lo salvarán.
"Soy un idiota, un egoísta...lo siento tanto"
Solo estaba forzándolo a vivir, ni siquiera sabía si él lo deseaba. A pesar de que para Hinata el suicidio no era una opción, pensó que no había vivido ni la mitad de las cosas que Komaeda, no entendía del todo su dolor. Pero aun así no quería que muera, quería que viera otras opciones, que pudiera escoger, entonces allí le daría la libertad de hacer lo que deseará.
Porque no era solo la culpa de haber jodido el Neo World y a Komaeda en el proceso, el deseaba que el albino pudiera sentirse feliz, por una vez en su vida, vivir sin temer que todos los que ama mueran. Era posible, él sabía que una vida así existía entre millones de posibilidades, pero necesitaba darle más apoyo y ayuda, solo no bastaba...
Hinata observo como Mikan le inyectaba un sedante y era llevado nuevamente a su cama, posiblemente la fiesta se cancelaría, todos estaban muy cansados y alterados por la situación.
Su reflexión y el ver la escena lo ayudo a comprender que no podía salvar a todo el mundo, aún si quisiera, la decisión no era suya. No podía obligar a Komaeda a amarse y vivir, pero podía ayudarlo a ver otros caminos, a confiar y pedir apoyo... si aún luego de eso el deseaba matarse, Hinata no debía detenerlo, aún si le dolía en el alma. No era su decisión.
En cuanto llegarán a tierra firme iría por ayuda, mientras tanto actuaría como un amigo y se disculparía con los demás por lo que paso.
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_Está bien, no seas capullo_ Fuyuhiko habló.
_ Te perdonamos_ Sonia sonrió a la vez que los demás asentían con la cabeza, por fortuna todo se estaba calmando.
_ Sabes Hinata, entendemos que quieres ayudar a Komaeda, pero pudiste habérnoslo dicho_ Mahiru lo dijo con un tono de regaño.
_ YAHOOO Ibuki puede cantarle una canción para que se sienta mejor.
_ Por favor, no_ Dijeron todos al unísono.
_ Todo está bien, Hajime. Sabemos que Komaeda es difícil de tratar, pero también es nuestro compañero, ayudaremos a que se sienta mucho mejor.
Mitarai sonrió ante las palabras del impostor definitivo, el estar en un grupo de ese tipo lo hacía sentir feliz.
_Tiene razón, Hinata_ Dijo el animador con timidez_ No tienes que hacer esto por tu cuenta, cuidaremos de Komaeda también.
El castaño sonrió con alivio, pensaba que si hubiera empezado por ahí se hubiera ahorrado el desastre.
_ Sé que Komaeda no quiere ser salvado _ Habló_ Y sé que es alguien difícil de tratar, pero creo que es porque él cree que la vida no vale la pena y que ya no hay esperanza o futuro. Sería bueno mostrarle que lo hay, que hay cosas por las que merece la pena estar vivo.
_ Entonces ese demonio solo necesita motivación. Je je, no hay problema, invocaré mis fuerzas espectrales para hacer un conjuro que lo protegerá de la muerte, de esa manera no tendrá de que preocuparse.
_ Aprecio eso, Gundham... también creo que no podemos forzarlo a vivir, pero quizá encuentre su propio motivo con nuestra ayuda y si no... no podemos decir que no lo hemos intentado.
_ No digas más_ Hanamura sonrió pícaramente_ La comida es un gran motivo para disfrutar la vida, seguro que eso ayudará mucho a motivarlo.
_ Estoy muy de acuerdo con eso_ Akane sonrió.
_ Gracias chicos, realmente son los mejores amigos que hay.
Todos sonrieron con satisfacción y hablaron entre ellos animadamente, una vez más la esperanza por un nuevo futuro surgía.
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_Komaeda...
_ ¿H-hmm? H-Hinata-kun...esto debería dejar de ser algo tan habitual.
Los ojos de Nagito se movían con pesadez, se levantó con mucho esfuerzo quedando sentado con las piernas estiradas en su cama, sus movimientos aun así eran algo torpes.
_ ¿Te molesta verme al despertar?
_ N-no...realmente no. Me da algo de serenidad_ La voz apagada y triste hizo que Hinata frunciera el ceño.
_ Está bien, nadie se molestó contigo, sé que estás pasando un mal momento y lo siento de verdad, no era mi intención hacerte sentir tan mal. Soy solo un egoísta que intento forzarte a vivir por culpa.
_ E-está bien, Hinata- kun nunca quise causarles tantos problemas... tu solo actúas como cualquier amigo lo haría. Soy yo el que no sabe ser buen amigo contigo...
_ No te culpes, creo que ya te has castigado suficiente, como dije nadie está molesto contigo y no vamos a juzgarte por lo que paso, no tienes por qué ser tan duro, nada cambiará que te hagas daño.
El albino miro el suelo, sus ojos estaban vidriosos y Hinata no tardó en notarlo.
_ Hinata-kun, estoy asustado. Ya no quiero que nadie más muera, ya no quiero esta maldición... todo lo que deseo es serenidad...
Hajime se sentó a los pies de la cama con una mirada comprensiva.
_ Solo eh logrado lastimar a todos los que me rodean, por eso nunca me importo si alguien me odiaba, nunca podrían odiarme tanto como yo por todo el daño que hice desde que nací.
Nagito empezó a llorar, verlo en aquel estado para Hajime era algo sumamente extraño y conmovedor en cierto punto, siempre lo observo como una persona fuerte y quizá por eso presenciar cómo se quebraba emocionalmente le causaba un nudo en el estómago. Tal vez fuera por los medicamentos en su sangre o el shock de lo ocurrido anteriormente, pero en aquel momento sentía que podía ver los pensamientos más profundos del chico y no sabría si sería capaz de llegar a hacerlo nuevamente una vez que estuviera en todos sus sentidos.
_Komaeda, no te culpes... no elegiste tu suerte. Sé que por eso le tienes miedo a tu talento, y por eso siempre deseaste controlarlo, aun si eso significaba hacer cosas malas para que no te tomara desprevenido.
_ Je... Eres demasiado amable... eso no quita que sea un asesino aún si es por accidente o no. Siempre te envidie Hinata.
_ ¿A mí?
_ Porque a pesar de no tener ningún talento, eras muy amado...
Hajime respiró hondo, era una de las tantas cosas que lo perseguiría hasta la muerte, jamás supo lo que tenía hasta que lo perdió, tenía libertad y amigos, pero aun así se sentía insatisfecho.
_ No tienes nada que envidiar, solo fui un idiota.
_ Tal vez, pero no morirías solo... tenías lo que siempre eh anhelado, amor. Y aun así no necesitaste la esperanza de un talento... estaba tan molesto contigo. Aunque no era realmente contigo...
Tardo unos segundos en entender que se estaba disculpando por lo que paso a partir del cuarto juicio.
_ Está bien, no estoy enojado_ Sonrió posando su mano en la esponjosa cabellera por impulso, pero la quito rápidamente por miedo a incomodarlo.
_ Creo que.... Aún sin tener ningún talento, eres muy esperanzador, Hinata-kun.
_ Está bien, no tienes que atormentarte más, todo irá bien lo prometo.
El llanto retomó a los ojos del peli-nube, su cuerpo temblaba y era obvio que los medicamentos lo habían debilitado más de lo normal.
Hajime no pensó mucho en la situación, si su amigo estaba pasando por una crisis lo mejor que podía hacer era acompañarlo y darle apoyo. Por eso mismo se acercó y abrazó con fuerza al lloroso chico. Tal vez no lo recordaría si volvía a caer dormido, creería que era un sueño al despertar. Pero no le importaba, una parte de él sentía que era lo mejor que podía hacer en ese momento.
_Hinata-kun...
_ No te preocupes, nada malo pasará, no temas.
_ E-eso no lo sabes.
_ Estaré contigo, no solo yo, también todos tus compañeros... estamos preocupados por ti.
_ N-no entiendo... ¿por qué me abrazas? No lo merezco...
Hinata sentía los brazos a su alrededor, parecía que no quisiera soltarse de él, era obvio que lo que decía no era lo mismo que lo que sentía.
_ Solo cálmate, si necesitas desahogarte está bien. Está bien llorar, no es tan bueno si has aguantado bastante.
_Hinata ....
Las palabras fueron interrumpidas por lágrimas y congoja, el llanto que se oyó a continuación fue doloroso, cargado de angustia y una profunda tristeza que había estado contenida por años. Hinata solo cerró los ojos. Komaeda era alguien que no conocía del todo, tenía tantas facetas y capas protectoras que parecía un enigma. Pero ahora entendía que las heridas en su interior jamás cicatrizaron del todo, solo fueron taponadas y reprimidas en lo más profundo de su ser.
Cuando el llanto cargado de dolor cesó, los brazos de Nagito dejaron ir el cuerpo de Hajime y lo observo fijamente con una expresión de alivio y gratitud.
_ No recordaba la última vez que alguien me había abrazado...
_ ¿Te encuentras bien?
_ Eso creo... lamento que me veas de esta forma tan patética.
_ Al contrario, me hace sentir que confías más en mi al dejarme ver esta parte de ti.
_ Claro que confío en ti.
Nagito sonrió, era una sonrisa verdadera.
_ Pero por favor ya no te sientas culpable de todas las desgracias.
_ No sé si pueda prometer eso...
_ No pienses que lo que ocurre es por tu suerte, aunque sé que siempre te has sentido atormentado por ella. Solo piensa en tu deseo, tu felicidad...tu esperanza.
Nagito asintió algo inseguro, no quería molestar a Hinata, pero a su vez disfrutaba la sensación de ser querido y protegido por él. Aunque el temor de que algo horrible le pase a él o a alguno de sus compañeros persistía.
_ Komaeda, si te dijera que puedo hacer algo con tu suerte. ¿me creerías?
_ ¿Eh? ¿Puedes hacer algo con eso?
_ Puedo bloquear tu mala suerte, de esa forma estarás tranquilo.
_ No puedo pedirte eso... no quiero depender de esa forma de ti, sería una molestia.
_ No es una molestia para mí.
Los ojos grises con toques verdes brillaron y Hinata supo lo que tenía que hacer. Aunque en algún punto estaba ocultando cierta parte importante de lo que dijo.
El peliblanco se durmió luego de un rato, para Hajime las emociones pueden ser abrumadoras en algunos casos. Ahora solo quedaba un asunto del cual ocuparse, la suerte.
Era cierto que se prometió a sí mismo no ser un salvador, pero si le decía a Nagito que su suerte no le afectaría sería un gran avance para que confiara un poco más en las personas, sin creer que morirían por eso. Haría las cosas más fáciles para sus compañeros también.
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Hinata se recostó en su cama con los ojos cerrados dejándose llevar por el sonido del mar proveniente del exterior, sus pensamientos se movieron a la deriva mientras analizaba todas las posibilidades para detener la suerte de Komaeda.
Era complicado, si cancelaba la mala suerte, en cuanto se alejará todo recaería drásticamente como una deuda de muchos años. Si bloqueaba ambas ocurriría lo mismo y si dejaba la mala suerte actuar a libre albedrío no sabría lo que pasaría. Era un fenómeno difícil de controlar.
"Cualquier fenómeno se puede controlar si manejas las variables"
¿Variable? ¿Realmente debía oír el lado de Kamukura? Bueno era sin duda el más racional para él.
"Si manejas la mala suerte, si tú eres quien la causa como si fuera un experimento controlable, entonces solo la buena suerte llegará"
Causar la mala suerte, sin que Nagito supiera, ¿serviría?
"Si controlas esa variable, los resultados serían más predecibles, y aburridos. Solo deberías asegurarte de no superar el punto de quiebre de Komaeda".
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