"-EverytimE-"
By:*-Nao_Ran-*
Capitulo Tres:
-GraduacióN-
Todo en la escuela era una revolución, aquella era la última semana que pasaban los alumnos de tercer año en el establecimiento educacional para dar el "Gran Salto" que tenia a la mayoría nerviosos, ansiosos y asustados. Por su parte cada club de la escuela Seigaku organizaba lo que seria sus últimas presentaciones y partidos de exhibición, con los que abandonarían el equipo para siempre: el capitán Tezuka, el sub-capitán Oishi Shyuichirou, Fuji Syusuke, Kikumaru Eiji, Kaoru Kaidoh, Sadaharu Inui y Kawamura Takashi.
Tezuka con ayuda de Oishi y la profesora Ryusaki habían decidido meses antes que el mejor para el puesto de capitán, para el año siguiente seria Momoshiro Takeshi. Aunque el chico de lentes no estaba muy convencido, alegaba que le faltaba carácter, pero era el mejor jugador que tenían, ya que Ryoma era muy pequeño y se iría otra vez a Estados Unidos, es por eso que, desde el mismo día que lo habían acordado Momo había sido entrenado especialmente por Tezuka, pero guardando el secreto del por que, no era bueno decirle aquella noticia... simplemente por que podía alardear.
Estaba todos corriendo por fuera de una de las canchas de tenis calentando para tener partidos de practica, se sentía un ambiente, por lo demás, triste y hasta pesado... casi la mayoría de los titulares del equipo se irían para no regresar más, y los novatos no podían dejar de sentirse frustrados y hasta dolidos por no poder ver mas a esos "genios" que tenían en el equipo.
Tezuka estaba bastante sumergido en sus pensamientos: en que debía dejar todo preparado para que Momo tomara el cargo; en que debía agradecerle a la profesora Ryusaki su ayuda para la beca; en que debía arreglar sus cosas para la Universidad; que le quedaba poco tiempo con Syusuke; en que... Pero repentinamente fue sacado de sus meditaciones al escuchar un estridente chillido proveniente del "Neko" del equipo, con pereza se acerco hasta donde el pelirrojo lloraba, causando la conmoción de todo el equipo... sinceramente, se imagino por que lloraba al escuchar sus sollozos.
-No me quiero ir!!!! Buaaa!!! TTOTT!
-Ya cállate Eiji! -pedía su novio con una gota escapando por su frente, mirando a todos los del equipo, principiantes, intermedios y titúlales con una nerviosa sonrisa.
-Pero Syu-chan!!!! No me quiero ir de aquí!!! No quiero dejar el equipo Buaaaaaaaaaaaaa!!!! -y su llanto se hizo cada vez mas fuerte.
-ya, ya... tranquilo... aun queda una semana completa... si quieres llorar llora el viernes no hoy que es lunes! -él, Oishi Shyuichirou podía jactarse que tenia MUUCHA! Paciencia... pero Tezuka había llegado al lugar y los estaba mirando con una cara de fastidio que llego a congelarle la sangre, debía calmar a Eiji ya!
-Ya... Neko-chan... -esta vez fue Fuji, el "Tensai" del equipo quien se arrodillo hasta quedar a la altura de su mejor amigo para poder hablara de mejor forma, le sonrió ampliamente en el momento en que el pelirrojo lo miro con atención- sabes que a ninguno le gusta la idea de irse del equipo para siempre, pero nos seguiremos viendo, charlando y jugando tenis como ahora... no dejaré de ser tu amigo por que terminemos el instituto y estoy seguro que ninguno de aquí lo hará ... así que, por que mejor no sonríes, feliz te vez mas lindo que llorando Neko-chan -otra vez una sonrisa sincera, al ver como su amigo se secaba las lagrimas y lo miraba entre intrigado y preocupado.
-De veras nos veremos siempre?... con Mamushi, Kawamura, Inui, Momo-chan, tu y el Bochou?
-Claro Neko-chan... somos amigos? No?
-Hai... -asintió moviendo la cabeza de arriba a bajo.
-Los amigos nunca se abandonan.
-Nyaaaaaaaa!!! Fujiko!!! Te quierooooo!!!! -y se tiro a los brazos de su amigo para abrasarlo con efusividad y riendo ampliamente.
Los demás chicos sonrieron con algo de nerviosismo al ver aquella escena, hasta que la voz del capitán los hizo volver a la realidad.
-A Correr! -ordeno, y al instante todos estaban corriendo, menos él, Oishi, Eiji y Fuji que aun estaban tirados en el suelo riendo, espectáculo para nada aceptado, por ese par de novios celosos, que no hacían nada por ocultar su molestia. El Neko y Syusuke los miraron, rompiendo en más estruendosas carcajadas. Era gracioso ver aquellos rostros, siempre tan serios, molestos por una simple demostración de cariño entre los dos Mejores Amigos del Mundo.
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La tarde y los días siguientes pasaron con una rapidez casi impresionante, las clases eran escasas y generalmente esos últimos días los alumnos se despedían unos a otros.
Y finalmente el viernes llego... junto con la alegría de algunos y la tristeza de otros, como Eiji que, ahora si no paraba de llorar. Ya habían tocado el timbre que indicaba que debían salir de clases, pero esta vez para siempre.
Todos estaban tristes, eso incluía al capitán, que obviamente no lo demostraba en lo absoluto... pero el mar de lagrimas ocurrió cuando, por ultima vez Tezuka los mando a las duchas luego de terminar el entrenamiento, abrazándose todos, algunos llorando, e incluso mamushi dejaba escapar un par de lagrimas de emoción.
Los titulares se despidieron con el compromiso de visitar el club de tenis el siguiente año, y los principiantes e intermedios haciendo la promesa de que no dejaría mal el nombre de Seigaku en los campeonatos futuros. Así finalmente el día termino, dando paso rápidamente al sábado por la mañana, la ceremonia de Graduación.
Oishi, Tezuka y Fuji fueron los mejores de su promoción, siendo premiados con diplomas y una foto de honor, en el mural de la escuela durante un par de años mas, además de ser reconocidos como los mejores deportistas que hubiera tenido la escuela en mas de 15 años.
Al salir, desgraciadamente para Tezuka y Fuji se les hizo imposible celebrar su término de instituto juntos, ya que el menor debía irse con su familia. Cosa que hizo sin ningún tipo de ganas.
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Al llegar a su casa, Fuji vio como en la sala estaban sus abuelos, sus tíos, unos primos y sus hermanos esperando que llegara junto a sus padres...y aquello lo alegro, hacia mucho tiempo que no compartía con ellos y el fastidio por no estar con su novio disminuyo ante eso, ya podría estar con él en el baile de la noche... ese día se la pasaría con su familia, después de todo, esas ocasiones se daban muy pocas veces en el año.
Eran cerca de las tres de la tarde, cuando su padre -quien no cabía mas de felicidad y orgullo- les pidió a todos los familiares y a su hijo Syusuke que salieran al jardín, ya que tenia un importante anuncio que dar, a lo que todos aceptaron.
-Bueno, les pedí que saliéramos por que hay algo que quiero darle a mi hijo... -dijo el señor Fuji, abrazando a sus hijo por el cuello- y quiero que todos lo vean.
-Esto hijo -prosiguió su madre- es un premio por todos tus años de esfuerzo en la escuela, por ser uno de los mejores en instituto y en tu club de Tenis... tu padre y yo estamos muy orgullosos de ti y de todo lo que has logrado hasta ahora.
Syusuke nunca se espero algo así por parte de su familia, era verdad que su madre era la única que le decía ese tipo de cosas, su padre, que casi nunca estaba con él, alardeaba de ser un "excelente padre" al tener un hijo tan Ejemplar como Syusuke, siempre dejando de lado a Yuuta... pero semejante espectáculo y en frente de todos era exagerado. Su padre continúo con el discurso hasta llegar a la parte importante.
-Bueno querido hijo, espero que este regalo te guste! Y que lo cuides... por que bastante caro me costo. -la puerta eléctrica de la cochera comenzó a alzarse lentamente, todos estaban expectantes, incluso Syusuke que no tenia idea de que era lo que su padre quería darle... hasta que poco a poco comenzó a verse "algo" de color azul-petróleo brillante.
-Es...
-Una...
-Moto... -termino casi en un susurro al ver frente a él lo que siempre, desde niño quiso, una Motocicleta Nueva.
-Este hijo, es un regalo de toda la familia, aunque no estuve muy de acuerdo -siguió su madre- pero espero que te guste. -finalizo con una sonrisa tomando la mano de su hijo varón mayor, que no quitaba su vista anonado de esa "maquina" que siempre soñó tener.
-Y que estas esperando! Ve a verla de cerca! -su hermano lo empujo, con lo que salio del embobamiento, se acerco lentamente hasta su nuevo vehiculo y toco el asiento de cuero delicadamente, como si temiera que fuera un sueño.
-"Mi...motocicleta" -pensó feliz, tenia unos ahorros y si trabaja medio tiempo durante un año, podría él mismo comprarse una, pero esto... ese regalo, era el mejor que pudo haber recibido en toda su vida.
Miro hacia el tablero, que traía el velocímetro en millas, y a un lado otro más, que marcaba la potencia del motor cuando fuera usada. Al repasar otra vez por aquellos relojes se percato de que las llaves estaban puestas y sin poder retener su emoción se monto en su motocicleta y sintió el suave olor a nuevo del metal, del cuero, de la fibra de vidrio. Miro la llanta delantera, tenia "Goodgear" impresa en ella, y rápidamente pensó como seria quemar aquellas llantas en el pavimento, su lado sádico y adicto a lo emocionante y peligroso golpeo fuertemente su mente. Tenia que conducir lo mas rápido posible aquella maquina, en ese mismo instante.
Giro la llave rápidamente, hasta que las luces del tablero y los focos -potentes, por lo demás- de la motocicleta se encendieron, puso sus manos en el acelerador y lo giro suavemente... su vehiculo sonaba como un gatito hambriento, pero de velocidad, volvió a repetir la acción, esta vez mas violento, y el sonido fue esta vez como un león atacando a su presa. Apago el motor y se bajo de ella, retrocedió junto con su regalo lentamente, bajo las miradas expectantes y sonrientes de sus familiares, hasta llegar a la calle. Miro a sus padres absolutamente emocionado.
-Iré a dar una vuelta... -dijo mientras se subía otra vez, encendiendo el motor en el acto.
-Espera!! -grito Yuuta antes de que su hermano partiera, Syusuke lo miro entre sorprendido y enfadado, ya no podía aguantar las ganas de probarla!- te falta el casco! -dijo recuperando el aliento luego de correr a la casa, subir hasta su habitación, sacar el casto del armario y volver a bajar para entregárselo a su hermano, quien sonrió... el casco era bastante lindo, del mismo color que su motocicleta y con las iniciales "F.S" en plateado.
-Gracias Yuuta, prometo que cuando vuelva serás al primero al que lleve. -sonrió y luego colocándose el casco, volvió a acelerar, soltando el freno y arrancando, lentamente, estaba en un lugar residencial, esperaría hasta la carretera para descargar su emoción y éxtasis.
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Sentir el viento sobre sus manos, entrando por debajo de su barbilla, frió, rápido, era todo lo que se había imaginado. Había entrado a la autopista hacia escasos 5 minutos y disfrutaba cada segundo como el último, y lo único en que podía pensar era que quería ir aun más rápido. Acelero hasta 100 Km/hr, se acercaba el desvió para entrar a la cuidad de nuevo, y desgraciadamente, no podía viajar mucho, había dicho que solo era "una vuelta".
Bajo la velocidad al entrar en una de las calles principales de la cuidad, luego, pensó en un mirador que hacia poco tiempo había descubierto junto a Tezuka. -"Tezuka" - pensó, ni se había acordado de él en toda la tarde. Decidió que cuando llegara al mirador, lo llamaría.
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Estaba mirando la puesta de sol, que recién comenzaba, los leves tonos amarillos del cielo, y las pocas nubes lograron tranquilizar su "éxtasis" producido por la velocidad de su motocicleta, recordó cuando fue la primera vez que se subió a una de esas maquinas, su primo Itachi, el rebelde de la familia, la "oveja negra", le dejo montar en la suya cuando tenia 14 años, y si de antes le gustaban, desde ese día amo a las motocicletas.
Dejo de recordar al percatarse de que aun tenía su móvil entre sus manos, busco el primer número de la lista y espero a que le contestaran.
-"Hola"
-Amor... como estas?
-"Bien"
-mmm, te extraño sabes? -dijo sonriendo, sentado aún sobre su regalo.
-"... -guardo silencio, estaba su hermano mayor frente a él, así que disimuladamente se alejo lo suficiente para que no escucharan su conversación.- yo también".
-quien esta contigo?
-"Mis padres han llegado hace poco, estoy con ellos ahora"
-ah! Que bien, me alegro mucho por ti, hace tiempo que no los veías.
-"si" -dijo sin importarle realmente.
-Sabes amor, te tengo un súper notición!!! -casi grito emocionado, él seria la primera persona ajena a su familia que supiera acerca de su "nuevo regalo".
-"Que paso? Hablaste con tus padres?" -un extraño sentimiento se apodero del frió ex-capitán de Seigaku.
-No!, eso no!!... es algo demasiado genial!! Estoy tan feliz!! Amor!! Te juro que podría saltar de lo feliz que estoy!!
Tezuka nunca había escuchado ese tono de voz en Syusuke, podía imaginarse vagamente la sonrisa que tendría por esa reacción, pero de seguro era mucho más grande.
-"Que paso Suke?"
-Mis padres me han regalado una motocicleta! Me entiendes? Una motocicleta!!! Y ahora estoy montado sobre ella!!!
-"Una que?" -¿acaso había escuchado bien?
-Hay amor!! Una motocicleta! Y es hermosa!! Es suave, suena como un gatito, es tan rápida... dios! Estoy demasiado feliz!!
-"Y me estas llamando conduciendo esa cosa?" -Pregunto, Syusuke era capas de hacer eso.
-No! Como crees? Y además! No es "esa cosa" es una Honda CBR 1000 RR! Azul-petróleo!
-"Una que cosa?"
-Es una Motocicleta marca Honda!... mmm... me entiendes verdad?
-"Para nada" -no tenia idea a lo que se refería el ojiazul.
-bien, a ver... ¿recuerdas la revista de motocicletas que lleve hace como un mes a la escuela?
-"si"
-¿ recuerdas esa motocicleta roja escarlata, que te dije que deseaba y que moría por tener?
-.. -guardo silencio unos segundo, tratando se recordar, aunque sea vagamente lo que le estaba pidiendo- "...creo que si".
-Pues es esa!!! Es que te juro que no lo podía creer cuando mi padre abrió la puerta del garaje y apareció esta maravilla. Ha sido el regalo mas lindo que me han hecho, aun no puedo creer que sea mía, y que ya la conduje!!
-"ya la probaste?"
-si, y fue mucho mejor que en mis sueños.
-"mm... que bien por ti"
-.. -estaba tan feliz que no noto el tono sarcástico que utilizo el chico de lentes al decir aquello, así que continuo- y bueno, me preguntaba si quieres que te recoja para ir al baile esta noche? Hoy no pudimos hablar mucho.
-"No te preocupes, yo paso por ti, sabes que no me gustan esas cosas"
-que cosas? -no estaba entendiendo muy bien.
-"de seguro vendrías a buscarme en tu nuevo regalo no? Pues sabes que prefiero algo con cuatro ruedas en vez de dos"
-pero si mi moto es la mejor? ¿Por qué no te gusta!?
-"por que no quiero. A que hora paso por ti?"
-no se, a la hora que quieras -eso era lo que precisamente no le gustaba de su novio, tan tradicional! No le gustaba la aventura, ni mucho menos la adrenalina, Tezuka adoraba tener el control de todo, pero si salían juntos en su motocicleta, el de lentes no podría controlar nada.
-"a las nueve estoy en tu casa. Trata de estar listo a esa hora por favor"
-Si, trataré.
-"Solo esperare 5 minutos"
-pues espéralos entonces. Nos vemos después. -no espero la respuesta del otro lado, por que siempre tenia que ser así? Por que "Mitsu" no podía estar feliz por él.
Miro su móvil, eran ya las 6 de la tarde y tenia que llegar a su casa, cambiarse de ropa, comer algo, arreglarse y esperar a su novio para ir al baile de graduación. Apago el aparato, lo gurdo en su pantalón, tomo su casco y lo puso sobre su cabeza, mientras sonreía.
-Una vuelta mas... y vuelvo a casa.
La tentación era mucha, debía experimentar la adrenalina otra vez, sentir el viento en su cuerpo pegándole con fuerza, Tezuka podía esperar, él y su motocicleta no.
Encendió el tablero digital al momento en que giro las llaves para partir, espero que las luces se encendieran, piso el embrague y acelero un poco, otro poco mas y soltó el freno, desliándose por la calle a 40 Km./hr primeramente, luego iría mas rápido.
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Sus abuelos, tíos y primos pequeños ya se había marchado de su casa a eso de las 8 de la noche, faltaban unos 10 minutos para que Tezuka lo pasara a recoger y estaba sentado en uno de los sillones personales la sala, con el casco de su motocicleta entre sus manos, admirándolo, parecía como si no fuera suyo, volvió a suspirar con la sonrisa que lo acompañaba desde la tarde, pensó que parecía un idiota al hacerlo tanto, pero ¡dios! ¡Cuánto quería esa moto!
-Parece que te a gustado mucho tu regalo no? Nii-san?
-.. -desvió la mirada hacia su hermano, de pie frente a él- gustarme?... para nada. Me ha encantado. -sonrió de nuevo sinceramente.
-Aunque no lo creas, yo acompañe a papá a comprarla, saque una de tus revistas de motocicletas y como ya sabia cual te gustaba fuimos juntos.
-Por eso un día me preguntaste cual me gustaba mas... eres un mal hermano, como no me dijiste!
-Era una sorpresa Nii-san, no podía perderme la cara que pusiste cuando la viste hoy.
-Pues, era lo ultimo que me esperaba recibir... me siento, muy feliz Yuuta, de verdad.
-Me alegro Nii-san, esa era la idea.
Guardaron silencio unos minutos, a pesar de que Yuuta nunca pudo ganarle a su hermano en el tenis, ya había superado esa etapa de resentimiento hacia él, por culpa de la poca atención que su padre le mostraba. Sabia que Syusuke odiaba tanto como él las diferencias y comparaciones, por eso, mucho tiempo atrás, decidió ser amigo de su hermano, no rival ni mucho menos enemigo, y verlo así de contento, también lo ponía feliz.
-Y a que hora te vas a tu baile?
-mmm... no sé, vendrán por mi. -dijo sin dejar de sonreírle.
-Ah... y vas con pareja o solo?? -lo miro un tanto indeciso... ¿decirle o no?-...no, solo, allá me encontrare con los del equipo. -se levanto, iría a su habitación, había olvidado su móvil, las llaves y dinero. Suspiro pesado, siempre se le olvidaban esas cosas.
-Pues te ves muy bien con ese traje... -acoto Yuuta desde donde estaba- de seguro que sales con novia esta noche.
-No lo creo Yuuta, no lo creo... -subió las escaleras hasta entrar a su habitaron, se miro al espejo y vio que aquel traje -pantalón y chaqueta a juego- de color gris oscuro y la camisa blanco invierno, sujetada por una corbata negra y unos zapatos de vestir nuevos, le hacían ver mas atractivo de lo que era, llevaba el cabello un poco mas corto, y no muy peinado, con una caída casual... de seguro que la chiquilla que moría por él en el instituto no lo dejaría solo en toda la noche, y tendría que aguantar la cara de fastidio de Tezuka por eso. Aun así sonrió, -"no todos los días uno se pone traje"- pensó, -"además... es mi ultimo día en la escuela"-. Se recostó en su cama, mientras esperaba a que su novio llegara, si es que lo hacia, y si no, montaría su regalo y saldría por ahí, hasta donde el combustible le alcanzara, y para volver... se las arreglaría, tal vez y no tendría apuro en regresar.
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-Pásalo muy bien hijo, diviértete mucho y saluda a tus amigos de mi parte.
-Si mamá, yo los saludo.
-Tezuka-kun ¿tú lo traerás de regreso verdad?
-Si señora Fuji, no se preocupe. -contesto cortésmente a la madre de su "amigo".
-Pues me quedo mas tranquila así, Syusuke quería ir en su motocicleta, pero yo no quería, esas cosas son peligrosas. -dijo tomando la mano de su hijo, quien sonrió pesadamente.
-No son peligrosas si sabes conducirlas madre. Bueno, ya nos vamos, llegaremos tarde si seguimos así. -abrazo a su madre, y a su hermano e inconcientemente tomo la mano Tezuka para sacarlo de su casa. Tal vez nadie reparo en ello, solo... tal vez.
Fuji se paro en seco al ver el coche fuera de su casa, se giro hasta su novio y lo miro interrogante.
-¿De quien es? -pregunto apuntando el coche plateado, ultimo modelo.
-Mío. -respondió saliendo a la calle y abriendo la puerta del copiloto.
-¿Cómo que tuyo? Que yo sepa, tú no tienes coche.
-Si no me hubieras cortado el teléfono esta tarde podría haberte dicho que mis padres me regalaron este auto.
-Aah... -dijo mirando a su novio, y volvió a sonreír como siempre- me alegro mucho, esta muy lindo.
-Gracias... y sube, que ya vamos retrasados.
Sin mas Fuji subió donde correspondía, abrochándose el cinturón y mirando el interior del vehiculo, el tapiz de los asientos era de una suave tela color grafito, el tablero era negro, pudo ver la radio, con disco compacto, con vidrios eléctricos y con una ventanilla en el techo. Sin decir nada espero a que el mayor se subiera en el, cuando lo hizo, encendió enseguida el motor, y luego de quitar el freno y soltar con lentitud el embrague, acelero lentamente y el automóvil -aun sin matricula- se deslizo por la calle, hasta salir de la zona residencial, con un rumbo fijo: la "Seisho Gakuen", mas conocida como Seigaku.
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El tímido sonido de la radio apenas y se escuchaba, los dos únicos ocupantes de aquel flamante y nuevo coche permanecían en silencio, desde que habían salido de la casa de Fuji, quien por su parte, no dejaba de pensar en su "maquina". Era verdad, se estaba obsesionando, y se daba cuenta de aquello pero, no podía dejar de pensar, de querer estar sobre ella en vez de estar sentado en ese auto, con el novio con más mal humor del mundo. Y sonrió, otra vez estaba exagerando.
-De que te ríes? -pregunto Tezuka sin quitar los ojos de la vía.
-De nada, idioteces mías. -contesto, también sin quitar su mirara del paisaje que se mostraba por la ventana.
-Y podría saber por que estas molesto?
-No estoy molesto, eres tú el que lo esta.
-No, no lo estoy...
-Amor.. -Dijo girándose para encararlo- solo mírate en el espejo y ve la cara que tienes.
Tezuka miro por el espejo retrovisor y vio su cara de fastidio... como siempre, Fuji tenia razón, y eso lo enojaba aun más. Saberse descubierto siempre por él... generalmente le crispaba los nervios.
-No estoy molesto... solo preocupado. -dijo, sin quitar la vista del frente, como siempre.
-Por que?
-Sabes perfectamente por que.
-No lo entiendo... -dijo volviendo su vista al paisaje-... Por que no puedes ponerte feliz con lo que a mi me hace feliz? -su voz sonaba triste y Tezuka odiaba eso.
-No se trata de eso Suke... sabes la razón por la que me preocupo, sabes por que no me gustan las motocicletas.
-Lo sé amor, pero... no significa que "eso" me ocurra a mí también.
-...- Tezuka guardo silencio, se preocupo de mirar a ambos lados de la vía, para poder virar con tranquilidad, se acercaban a la escuela, solo faltaban un par de calles.
Lo que quedaba de camino fue todo silencio, Tezuka entro en los estacionamientos de la escuela, y buscando un lugar, aparco el nuevo auto de su propiedad. Apago el motor y se quedo ahí, quieto, Syusuke se sacaba el cinturón de seguridad para bajar cuando la mano del mayor lo detuvo.
-Que pasa? -pregunto sorprendido.
-Suke... -y sin mas lo apego a su cuerpo en un fuerte abrazo.
Fuji comprendió el por que de aquel abrazo tan sorpresivo y solo se dedico a devolverlo con la misma intensidad.
-Te amo demasiado, y no puedo dejar de tener miedo... recordar todo eso, saber que podrías pasar por lo mismo, no puedo evitarlo Suke... -susurro en el odio del menor, con nostalgia y temor.
-Tranquilo amor, se conducir una motocicleta desde los 14, se que para ti fue difícil eso que paso con tu tío y tu primo pero... seré prudente, se lo prometí a mamá y te lo prometo a ti también. Te amo y pretendo pasar toda mi vida contigo hasta que seamos viejitos y tengamos a una enfermera que nos cuide. -dijo separándose para mirarlo con esa sonrisa que derretía su apático corazón, esos brillantes ojos azules como el mar, los amaba mas que cualquier cosa.
-Solo... ten cuidado.
-Lo tendré amor, lo tendré... -sin esperar mas, tomo el rostro del mayor para besarlo con dulzura, tratando de transmitirle tranquilidad, la misma que él sentía. -Te amo.
-Yo también -respondió el mayor al separarse.
-Ya vamos, que de seguro los demás ya nos están esperando.
-Esta bien.
Salieron del auto, Tezuka le puso la alarma, y siguieron su camino ambos muy cerca, se aproximaban al gimnasio donde la música estaba tan fuerte que desde su lugar se podía escuchar.
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