Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Mi mayor secreto por HarukaWhite7

[Reviews - 35]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Ehmmmmmmm hola a todos!

Se que querrán matarme, y con una justa razón, de no haber actualizado el fic desde hace meses. Pero tengo buenas excusas: la primera era la escuela. Eso de estudiar un posgrado es complicado, y más porque entré a la recta final. Tengan un poco de paciencia, ya estoy de vuelta!!

Agradezco los bonitos comentarios que me han posteado, algunos casi hacen que Naruto sea linchado...No aun, en otro fic querrán hacerlo y que tengo en mente. Es uno que es la contraparte de este y ya después lo publicaré!

Les subo el cap que sigue, espero tener el número 3 en esta semana. Me pondré las pilas para ello!!

Disfrutenlo mucho mucho!!

 

Ni más palabras que decir
Tampoco historias que contar
Lo que un día a mi llegó, hoy ya no está

Ya que el amor nunca se va
Y tan solo pide libertad
Pero el destino decidió una vez más.

 

Había un dicho que decía “Nadie muere de amor”. Pues en esos momentos, Sasuke maldecía a aquel ingenuo que se había atrevido a aseverar eso. Era una vil mentira que nadie podía morir de amor: él estaba muriendo lentamente de eso. Se consumía día a día en aquella soledad mientras aquel, al que amaba, le entregaba todo a otra persona que no era él.

 

A poco tiempo te sentí que eras todo para mi

Y yo no puedo mencionar tu nombre

Y saber que estoy aquí, yo sin tu amor

Yo sin tu amor...

 

Sasuke secó sus lágrimas mientras ahogaba sus sollozos en su almohada ya empapada de tanto llanto. Miró su reflejo en el espejo de su habitación, sintió a su vez tanta lástima de verse así mismo en ese estado tan deplorable: su cabello estaba opaco, sin el característico brillo azabache; su piel pálida y transparente lucía como la de un cadáver; sus ojos estaban rojos e hinchados, sin una luz de vida. El arrogante e indomable Uchiha Sasuke estaba reducido a un ente desolado y destrozado.

 

Yo sin tu amor...
Estaba a punto de ir a buscarte
Y entregar de nuevo el corazón
Yo sin tu amor
Yo sin tu amor
Estaba a punto de recuperarme
Y dejar atrás este dolor
Yo sin tu amor...

 

Después de su huida de la boda de Naruto, no supo qué pasó después. No supo quien fue la persona que lo recogió de aquel lugar en aquella noche tormentosa, jamás se dio cuenta. Volvió en si solo para ver a su preocupado hermano ponerle compresas frías en la frente mientras su esposo le examinaba con gesto de consternación. Su tío Izuna acarreaba cosas mientras su tío Madara gritoneaba a alguien por teléfono. Entendió que ya no estaban en la boda. Entre sollozos y delirios, se dejó llevar por la inconsciencia.

 

No ha sido fácil aceptar que tú ya no regresarás
Como me duele recordar que ya no estás
A poco tiempo te sentí que eras todo para mi
Y yo no puedo mencionar tu nombre
Y saber que estoy aquí, yo sin tu amor
Yo sin tu amor...

 

Ya había pasado cerca de un mes desde la boda y su vida se fue en declive: no se sentía con ánimos de dirigir su empresa, por lo que dejó el puesto a su primo Obito y él se recluyó en su mansión sin que nadie pudiera evitarlo. Día a día se consumía en la más absoluta y dolorosa de las tristezas, llorando todo el día perdiéndose entre los recuerdos que poseía junto a Naruto y que él, pese al daño, se negaba a dejar ir. No recibía a nadie, no quería que ninguna persona lo viera así. Su teléfono se saturó de tantas llamadas, su buzón colapsó de incontables cartas, su correo se bloqueó, más él no respondía.

Yo sin tu amor...
Estaba a punto de ir a buscarte
Y entregar de nuevo el corazón
Yo sin tu amor  
Yo sin tu amor
Estaba  a punto de recuperarme
Y dejar atrás este dolor
Yo sin tu amor...

 

Unos golpes leves en su puerta le sacaron de sus funestos pensamientos, sobresaltándose al instante.

—Sasuke, sé que estás allí y me estás escuchando. Tenemos que hablar.-era Itachi-No puedes seguir haciendo esto. Nos tienes muertos de la preocupación a todos.

—Cielo, ya llevas casi un mes haciendo esto. Por favor, sal.-su madre se escuchaba muy preocupada-Sasuke, por favor.

—Sasuke, por favor, no hiciste una locura, ¿verdad?-su tío Izuna se escuchaba histérico-¿nos escuchas? ¡¿Sasuke?!

—¡Se acabó! ¡Sasuke! ¡Sabes que respeto tu privacidad y esta es tu casa…!-no le gustó para nada el tono de su tío Madara-¡…pero soy tu tío, me vale un cuerno y entraré porque se me da la jodida gana!

—¡Madi, espera!

—¡¡Madi nada!!

Atónito, vio como su puerta caía inerte producto de una firme patada, cortesía de su tío Madara, y éste bajaba su pierna ante la mirada sorprendida y resignada de algunos. Un golpe se escuchó y los presentes vieron a Obito abanicar a Kakuzu el cual estaba en el suelo con Hidan dándole palmadas en la cara.

—¡No se muera, Kakuzu-senpai! ¡¡Despierte!!

—La puerta…tan cara…se arruinó…todo ese dinero…

—No seas dramático, vejestorio, ni era tu puerta.

Itachi se apresuró a entrar a la habitación de su hermano y al verle se tapó el rostro en gesto de consternación. Sasuke ocultó su cara entre sus piernas, eso era lo que menos quería: que le vieran y sintieran lástima por él. Escuchó a su hermano acercarse y al sentirlo a su lado trató de alejarse.

—Váyanse, Itachi.

—Ni lo sueñes, Sasuke, al menos yo no me voy a ir.

—¡¿Acaso no entienden que no quiero ver a nadie?!- alzó su rostro fulminando a su hermano con su mirada-¡Déjenme en paz! ¡No entienden mi dolor! ¡Quiero que se…!

No pudo continuar debido a que Itachi le dio la bofetada de su vida. Incrédulo, sostuvo su mejilla enrojecida mientras veía a Itachi sacudirse entre espasmos y lágrimas. Una parte de él dolió demasiado: odiaba ver a Itachi llorar. Era una cosa que no soportaba.

—Estúpido hermano menor, ¿Qué no entiendo tu dolor? ¡¿Qué no lo entiendo?! ¡¿Sabes acaso lo que yo estoy sufriendo ahora por no poder hacer nada por ti?! ¡¿Tienes idea del dolor que siento al saber todo lo que estás pasando y yo no lo puedo evitar?! ¡¿Sabes de las noches que no he podido dormir pensando en que tal vez hayas cometido una locura a raíz de todo esto?! ¡¿Lo sabes?! ¡¡Cada maldito día después de esa boda temo porque me lleguen con la noticia de que te dejaste morir porque no lo pudiste soportar!!-Itachi cayó de rodillas -¡¡Maldición, Sasuke!! ¡¡Odio verte de esta manera!! ¡¡Me siento el peor hermano del mundo por no haber podido evitar el que ahora te encuentres así!! ¡¡Debí haber evitado el que hayas seguido adelante con esa estupidez, debí haberte llevado muy lejos impidiéndote ir a esa absurda boda y ver como Naruto se casaba!! ¡¡Todo esto es mi culpa!! ¡¡Si tan solo me hubiese armado de más valor…!!

—L-Lo siento, I-Itachi, no es culpa tuya.-Sasuke se sentía el peor gusano por hacerlo llorar, no era bueno para él-N-No lo es.

Trató de ir hacia él, pero se encontraba tan débil que lo único que alcanzó fue a caer de la cama. No tenía fuerzas para levantarse. Casi no se había alimentado durante todo su encierro, se sorprendía como era que seguía despierto. Sintió unos cálidos brazos envolverlo y un aroma que lo comenzó a relajar. Se recargó en aquel cálido pecho cerrando sus ojos ante las caricias que le daban a su cabello. Quería sentirse protegido, consolado, quería que alguien le ayudase a sobrepasar todo.

—Al menos esta vez, déjame ayudarte a llevar esa pesada carga. Ya no estás solo.

—Nii-san, duele tanto…

—Ototo-baka.

Sus sollozos nuevamente reanudaron y aquel llanto brotó. Sasuke dejó salir su sufrimiento entre los brazos de su hermano mientras este era mudo testigo derramando silenciosas lágrimas, maldecía en sus pensamientos a Naruto por causarle tanto dolor a su adorado hermanito. Si era necesario, se llevaría a Sasuke lejos, donde jamás pudiese verlo de nueva cuenta.

De reojo vio a Shisui y a los demás debatiéndose entre entrar o no. Con un gesto les negó y pidió que se fuesen: él manejaría las cosas. Todos se fueron retirando, excepto Izuna y Shisui. Solo se alejaron un poco, de modo que Sasuke no pudiera verlos. Le tomó casi media hora hacer que Sasuke se calmara, por lo que ahora sollozaba levemente.

—Vaya, está cada vez más grande.-Sasuke sintió a su sobrino no nato moverse-Será como tú, nii-san.

—Será más bien como tú, me hace tener antojos de tomates a cada rato.-rio levemente secándose las lágrimas-Todo va a estar bien, Sasuke.

—Nada va a estar bien, Itachi. Me siento tan vacío.

—No digas eso, tonto, sé que esto va a ser difícil…pero no imposible.

—Maldición, Itachi, ¿Cómo me pides eso? ¿Cómo voy a seguir adelante…sin él?-musitó con miedo y dolor-¿Por qué tuve que enamorarme de ese dobe?

—Podrás hacerlo, Sasuke, sobre todo tú lo harás. Nadie se muere de amor, hermano.

—¿Y qué estaba haciendo yo? ¿Bebiendo margaritas?

—Vas a lograrlo, y el primer paso para lograr eso es salir de esta casa: te vienes a la mansión principal.

Itachi se levantó y ayudó a Sasuke a levantarse, ya que este parecía no tener fuerzas. Sospechó que no se había alimentado correctamente, y el hecho de sentirlo más delgado y débil junto con su aspecto se lo confirmaban. Salieron de la habitación y Shisui de inmediato se acercó a ambos para cargar a su cuñado al verlo tambalearse. Itachi le indicó con una mirada que no hiciese preguntas. Shisui asintió y se alejó con su cuñado en brazos mientras Itachi se quedaba detrás con Ino y Sakura.

—¿Él estará bien, Itachi-san?

—Será difícil pero lo estará, Ino. Después de todo-los tres miraron la habitación con un aire de pena-un amor como el que mi hermano sentía por él no muere de la noche a la mañana.

Los tres contemplaron las fotografías por la habitación, mismas que silenciosamente contaban la historia de dos amigos cuyo final no era un “felices por siempre”.

.

.

Había pasado casi una semana desde que dejó su casa y ahora vivía en casa de sus padres. Su situación levemente había mejorado: su mismo estrés le hacía mal alimentarse y estar deprimido. Su familia y amigos trataban de distraerlo de diversas maneras, sin lograrlo en muchas ocasiones. Su padre no le permitió regresar al trabajo hasta que se hubiese restablecido por completo, lo cual creía, no sería pronto. Debían hacer algo o lo perderían para siempre.

Después de una charla algo tensa, decidieron que debía buscar ayuda debido a que lo notaban más delgado y decaído. A regañadientes aceptó ir al psicólogo, aunque no quería hacerlo: su carácter orgulloso no se lo permitía. Itachi le acompañó junto con Shisui y su pequeño Haruka, todo con el fin de que no se escapase de la cita.

Entró al consultorio cuando la secretaria se lo indicó. Una vez dentro se sorprendió al ver de quien se trataba.

—¿No se supone que los psicólogos tienen como norma no atender a familiares ni a conocidos?

—La tienen, pero se hacen excepciones cuando la situación lo amerita.-la cara de Sasori permaneció imperturbable-Simplemente no me pude negar cuando Itachi y Deidara prácticamente me lo imploraron.

—No tenían que haberlo hecho.

—Lo hicieron porque te aprecian y porque se preocupan por ti.- Sasori le indicó que se recostara en aquel sillón-Porque ellos no quieren verte sufrir.

—Sinceramente no sé cómo seguir con todo esto.

—Ya diste el primer paso, Sasuke, y por eso estás aquí. Piensa en que tu situación es como si te hubieses caído en un profundo agujero. Puedes salir de ese agujero, pero tus miedos y tus emociones no te permiten ver elementos importantes que pueden ayudarte a salir de allí.

—Suena tan fácil…

—Suena fácil y así es: solo debes salir de esa bruma para que puedas verlo.

—Sé a dónde va a ir todo esto.-se recargó Sasuke en el sillón cerrando sus ojos-Comienza con esto, Sasori, no creo que te sorprendas a lo que te pueda decir.

—¿Qué sentiste cuando Naruto te dijo que se iba a casar?

—…Honestamente, me quería morir.-Sasuke sintió un nudo en la garganta y unas lágrimas rodar por sus mejillas. Iba a limpiarse con la manga de su suéter cuando vio a Sasori indicarle la caja con pañuelos que estaba adelante-Sentí como si el mundo se me viniese encima en ese momento. Todo aquel plan que había imaginado junto a él se había ido a la basura. Toda una vida…

—¿Nunca pensaste en hablar con Naruto acerca de cómo te sentías?

—Nunca. No después de que jamás tuve contestación de las cartas que le envié.

—¿Le enviaste cartas?-Sasori le miró incrédulo-¿Hace cuánto fue eso?

—Fue durante todo el tiempo que estuve fuera del país. Le envié muchas cartas, tantas que ya perdí la cuenta.-musitó melancólico-Jamás las contestó. Hasta el muy bastardo se atrevió a usar el contenido de una de ellas como su vals de bodas.

—No profundicemos ahora eso. Volvamos al asunto principal: no hablaste con Naruto en persona acerca de como te sentías.-anotó Sasori haciendo una nota mental a la vez-¿Por qué seguiste adelante? ¿Por qué aceptaste ser su padrino de bodas sabiendo que te lastimaba ese hecho?

—No lo sé. No lo sé y me arrepiento tanto.-ahogó un sollozo-Fui un estúpido. Por no fallarle… Pude haberme negado pero no lo hice…

—No te martirices con eso, Sasuke, el pasado es pasado y no lo puedes cambiar. -A Sasori se le hacía difícil puesto que conocía a ambos y sabía por lo que estaba pasando el menor- Todo pasa por algo.

—No hui, pude haberlo hecho y no lo hice. Simplemente me quedé a observar como un idiota mientras él se casaba.

—Dime algo, Sasuke, ¿de qué te hubiese servido huir?

—No lo sé, Sasori, no sé. Tal vez así no pudiese verlo y con eso se soluciona todo.-musitó secando sus lágrimas-Eso hubiese sido lo mejor.

—Bien, supongamos que te hubieses ido. ¿Qué seguiría?

—Comenzaría de cero. En otro lugar…

—Sasuke, esa ni tú te la crees.-Sasori le miró fijamente- Porque únicamente estarías huyendo, de manera muy cobarde. Huirías de Naruto, cuando esa no es la solución.

—¿Qué hago entonces? ¿Me quedo y lo veo ser feliz mientras yo me hundo?

—No es así, Sasuke, porque tu vida no termina únicamente porque Naruto ya no forma parte de ella como tú lo habías imaginado. Es doloroso y difícil superar esto, Sasuke, esto es similar a un duelo mortuorio.-Sasuke le miró con duda-Es como cuando muere alguien muy querido para ti: en este caso murieron tus sueños y metas que tenías junto a él. No te pido que seas masoquista, pero que aceptes este duelo y lo superes. Naruto no es el único en el mundo.

—Hm, entonces solo busco a alguien y listo.-Sasuke miró a Sasori no muy convencido-¿Aplicar la vieja confiable?

—No, Sasuke,  no se trata de eso. Eres una persona muy valiosa, con virtudes y defectos como todo ser humano, y mereces a alguien que te ame y valore por todo lo que vales. No mereces ser el plato de segunda mesa de nadie ni ser aquel que lo utilice. ¿Qué quiero decir con esto? Que no debes olvidar a Naruto utilizando a alguien bajo la tonta frase de “Un clavo saca a otro clavo”. Eso es lo más bajo que puedes hacer: nadie merece ser el paño de lágrimas de nadie. Si vas a superar a Naruto, lo harás por tu fuerza de voluntad.

—Eso lo sé, además, no me siento con la suficiente fuerza ni con los ánimos como para estar con alguien.-se despeinó sus cabellos en un ademán de frustración-No quiero saber nada del amor por ahora. Pero, demonios, no puedo olvidar todo. Prácticamente es una vida con Naruto: pasamos momentos únicos y llevamos juntos toda nuestra vida.

—No te cierres a las posibilidades: ahora piensas eso porque estás deprimido y decepcionado. Dale tiempo al tiempo para sanar tus heridas. Por otro lado, es imposible que lo olvides: ese Naruto es tan cabeza hueca y terco que no descansará hasta tener una explicación si llegases a hacer eso. Además, no digo que cortes toda relación: él fue tu amigo primero. El simple hecho de que entre ustedes no hubo algo más no implica que su amistad se pierda totalmente.

—¿Cómo voy a poder verlo solamente como un amigo cuando sé que no es así?

—Tomará tiempo, pero lo vas a lograr.-Sasori le sonrió-Eres un Uchiha y si algo tienen es que cuando se proponen algo lo logran. Allí tienes a tu hermano: necio y terco como una mula conquistó a su marido.

—Eso no cuenta: Shisui estaba enamorado de él desde que eran niños.

—El hecho es que Shisui le gana como por casi trece años a Itachi.

—Sasori, ¿Por qué el amor duele tanto?

—Sasuke, el amor no lastima, no daña, no duele. En el corazón nadie manda, nadie elije a quien amar. El amor es como si caminaras en un laberinto: hay caminos que no nos dejan avanzar, y hay otros que nos permiten avanzar ciertos tramos hasta toparnos con una pared que nos impedirá en definitiva el paso. Muchas personas se rinden y se quedan en el camino, y otros perseveran hasta encontrar la ruta adecuada. El amor no duele, somos nosotros quienes nos generamos ese dolor cuando no aceptamos nuestra realidad.

“No digo que tu camino sea fácil: es un camino muy difícil. Vas a tropezar, vas a caer y te lastimarás. Vas a querer darte por vencido pero tienes que ser muy fuerte para poder sacar todo esto…Y ya veo lo primero que vas a hacer. Bueno, lo segundo: lo primero ya lo hiciste.

—¿Qué hice?

—Dejaste tu aislamiento, Sasuke, el quedarte solo con esos pensamientos y recuerdos no era sano. Únicamente te estarías martirizando pensando en todas esas cosas que pudieron haber sucedido y no lo serán. El apoyo familiar y de amigos es muy importante. Y el hecho de que Naruto no esté aquí es aun mejor: necesitabas poner por lo pronto tierra de por medio, y este tiempo te servirá un poco.

—Naruto volverá en poco tiempo, ¿Qué haré después?- pensó en todo lo que podría pasar para cuando el rubio volviera, y francamente no se sentía lo suficientemente fuerte como para enfrentarlo sin desmoronarse-No quiero verlo por ahora.

—Puedes mantener tu distancia ahora, salir de viaje, distraerte con otros asuntos, pero es algo que no puedes evadir por siempre.-Sasori dejó su libreta-Tarde o temprano tendrás que verlo y enfrentarlo. No podrás evitar a Naruto, porque él te buscará, y con tus negativas más se encaprichará.

Sasori tenía razón: no podía simplemente huir como un cobarde. Eso no habla bien de él. Él era Uchiha Sasuke, y no iba a dejarse vencer. Pese a todo lo iba a lograr, aunque iba a sufrir mucho como lo predijo el pelirrojo: no era un camino fácil.

Casi un mes pasó desde que asistía con Sasori y veía un buen avance en él. Podía hablar del tema de Naruto sin quebrarse o ponerse sentimental, cosa que su familia agradecía. Le había servido mucho irse de viaje a Europa, para concretar una serie de negocios en una de las sedes de allá. No había tenido noticias de Naruto y francamente lo agradecía: poner tierra de por medio sería lo mejor por el momento…aunque sospechaba mucho que su familia tenía mucho que ver en esa parte. No había roto relación con los padres del rubio: ellos lo habían apoyado mucho y deseaban que fuera feliz, aunque no escapaban comentarios de la pelirroja diciendo que él quería que fuese su yerno. Todo pintaba ir para bien, solo debía ser paciente y esperar.

El tiempo siempre era el mejor consejero.

.

Un par de semanas

.

Sasuke se encontraba escondido en su habitación llorando silenciosamente y observando con pánico el objeto que sus temblorosas manos sostenían. Esto no podía estar pasándole a él. No podía creerlo. Todo lo que había avanzado ahora se había desplomado frente a él. Su vida dio un giro y no para bien. Esto no debió suceder.

Positivo

“—Sasuke, quiero que me seas sincero con esta pregunta que voy a hacerte…¿Nunca tuviste nada que ver con Naruto? Me refiero a que si su amistad no pasó a ser algo más.”

“—Sasori…Hay…Hay algo que debo confesarte…”

Estaba esperando un hijo. Y el padre era nada más y nada menos que Naruto.

Notas finales:

¿Qué les pareció el capítulo?

Solo les puedo decir que a partir de aquí inicia el drama. 

Ya se habrán de imaginar lo que el cap 3 va a tratar.

Prepárense para ello!

Nos leeremos en estos días!

:D


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).