LOS PLANES DE MINATO
Ciudad de Konoha
Padre por favor déjame ir en busca de Naru… por favor – rogaba el omega a su padre quien se encontraba sentado en su silla mirando con reproche a su hijo.
Cállate de una maldita vez Deidara – ordeno molesto Minato – de una vez te digo que si sales sin mi autorización que casa, te ira muy mal y lo sabes muy bien... ahora regresa a tus labores y déjame seguir trabajando – exclamo el alfa regresando su atención a varios papeles que había en el escritorio del rubio.
Si padre – contesto resignado el omega, al salir de la oficina de su padre sus lágrimas salieron sin control llorando en silencio al no saber donde se encontraba su hermanito “Naru chan por favor espero donde quiera que estés, te encuentres bien” pidió internamente el omega caminando a su habitación a realizar sus labores según su padre que eran arreglar las flores de su recamara.
Pueblo de Konoha
Como paso esto se preguntaban todas las personas de ahí al ver como todos los integrantes del dichoso patrullaje se encontraban muertos Minato sama debe ayudarnos, esto es un completo desastre sugirió un beta al sentir temor por esa bestia que los estaba asechando.
Debemos guardar la calma y estar todos unidos para no ser presa fácil de ese monstruo o lo que sea hablo Kakashi al ver como los aldeanos se culpaban unos a otros yo mismo hablaré con Minato sama para saber cómo nos ayudara exclamó seguro el alfa, los aldeanos solo asistieron en silencio ya que creían en su líder.
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Sasuke se encontraba observando al omega que dormía plácidamente, se acercó hasta tocar las hebras doradas, sus manos se fueron deslizando por el menudo cuerpo, sus fosas nasales se intensificaron al sentir el aroma que Naru dejaba salir por sus celos, el alfa ya no pudo soportar al llamado de su omega y se lanzó al rubio ocasionando que el menor despertara.
¡Ahaaaa! – dejo salir un grito de susto el omega al sentir un peso extra en su encima – no... haaa... yo... ahaa – el omega ya no pudo decir más al ser callado por un beso demandante, Sasuke sin perder tiempo comenzó a retirar las mantas para exponer el cuerpo desnudo del rubio, comenzó a besar los labios rojos de Naru con más ansías, parecía como si quisiera devorarlo.
“No puedo contenerme con este omega, siento una atracción inmensa hacía él, algo no está bien” se dijo mentalmente el azabache mientras su miembro ya erecto le pedía a gritos ingresar dentro de su omega, el alfa ni lo pensó más e ingreso de una sola estocada en la entrada de Naruto quien soltó un gemidito de placer y dolor.
Naruto al estar en su primer celos solo se dejo llevar, su omega le decía que todo estaba bien que era su alfa o eso pensaron ambos, el alfa sangre pura no dejaba de embestirlo con fuerza, parecía como si lo quisiera partir en dos.
Mi omega... solo mío – hablo con su voz demandante el alfa sin dejar de penetrar a su omega, sabía que estaba a punto de llegar al final cosa que aprovecho para intensificar sus penetraciones, el omega solo se dedicaba a gemir y dejo salir un fuerte gritito al sentir como ese nudo se hinchaba en su interior.
El azabache sin contemplación alguna se anudo en su omega, por alguna extraña razón quería preñarlo, quería que ese omega sea la madre de sus cachorros por esa razón aprovecharía el celo de Naru ya que los omegas eran muy fértiles en esa época.
Naruto respiraba agitado pero se exalto al sentir los colmillos del alfa clavarse en su cuello, sabía que ahora pertenecía por completo a ese alfa y por alguna extraña razón eso le gustaba, ambos por el cansancio se dejaron llevar por el sueño.
Horas más tarde Sasuke fue abriendo sus oscuros ojos al escuchar varias pisadas, sonrió de medio lado al saber quiénes eran y que buscaban en ese lugar – que idiotas, se tardaron bastante – susurró a la nada mientras se ponía de pie para comenzar a vestirse, una vez listo se puso de cuclillas y deposito un beso en los rojos labios del omega.
Nos veremos más tarde Naru – murmuró para salir de esa cueva dejando todo cubierto, de un salto ya estaba arriba y ahí escucho los ruidos de pisadas más fuertes y las voces de varios alfas y betas.
Bien ya es hora – se dijo para sí mismo el azabache antes de transformarse en un enorme lobo de pelaje negro con una marca blanca como rayo – nunca debieron venir – soltó un rugido fuerte que se escuchó en todo el bosque así asustando a todos los que buscaban ahí.
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Maldición que rayos fue ese sonido – dijo un alarmado Shikamaru observando a todas las direcciones pero solo veía los enormes arboles nada más, pero todo estaba en absoluto silencio algo no está bien manténganse alertas ordeno el alfa colocándose en postura de ataque.
¿Qué fue eso? – pregunto un asustado beta al escuchar un ruido entre los matorrales – ¡ahaaaa! – grito fuerte alertando a los demás quienes se sorprendieron de ver como un pequeño conejito saltaba hacía ellos, todos comenzaron a reír pero su calma duro poco al ver con espanto como un enorme lobo se los lanzó a una velocidad increíble.
Sasuke sin dejarles respirar comenzó a romperles el cuello, los pobres alfas solo trataban de salvar sus vidas, ellos sabían muy bien que tratar de enfrentarse con un sangre pura era una locura, por más que sean muchos sabían que para ese alfa de sangre pura ellos no eran nada.
Los betas corrían por salvar sus vidas mientras observaban como sus compañeros alfas eran decapitados sin compasión por ese alfa, lanzaron un grito de puro horror al ver como Sasuke iba hacia ellos.
¡Corrannnnnn! – grito un beta desesperado al ver al pura sangre encontrarlos, el lobo los fue destrozando uno por uno sin contemplación – I-Ino... corre – anunció como pudo el beta sujetando con toda sus fuerzas al gran alfa, la beta rubia corrió con toda sus fuerzas hacía la ciudad.
Sasuke al terminar con todos dejo su transformación y fue al pequeño río que había y comenzó a lavar su cuerpo “debo hacer una pequeña visita al líder de Konoha” pensó el azabache saliendo del agua para sujetar su ropa, vio que estaba manchada de sangré, sin descaro comenzó a caminar desnudo por el bosque.
Unos minutos ya se encontraba abajo del bosque, aparto los arbustos e ingreso dentro la cueva, volvió a cubrirlo y camino hasta llegar donde se encontraba su omega ya despierto, Naru se sobresalto al ver al azabache en ese estado, sus mejillas se colorearon al ver el cuerpo tan dotado del alfa.
Ja... ¿te gusta lo que ves? – pregunto con descaro el azabache caminando en dirección del rubio quien solo se cubrió su cuerpo con las mantas, debido a que el omega recién había despertado y no había tenido tiempo de colocarse algo o mejor dicho no tenía que ponerse.
No... no te... te acerques – pronunció inaudible el omega al sentir la respiración del alfa en su cuello además que todo su cuerpo comenzó a reaccionar a la cercanía del azabache, sus feromonas se desprendieron así llamando inconscientemente al alfa.
Eres un omega muy interesante, en vez de tenerme miedo te excitas – susurró en el oído de Naru para morderlo mientras sus manos iban deslizando las mantas que cubría al omega – tu aroma me llama porque eres mío – pronuncio antes de besarlo con intensidad.
Naru solo se dejo llevar y correspondió al beso demandante, sus brazos fueron subiendo hasta rodear el pálido cuello del alfa quien sonrió de medio lado al ver como su omega reaccionaba a sus caricias, Sasuke en un rápido movimiento recostó al rubio para colocarse encima del omega quien como reflejo abrió sus piernas así facilitando al pura sangre.
Eres el mejor omega – alago el azabache al sentir la entrada de su omega ya lubricada, el alfa no sabia y no entendía el significado de muchas cosas, al estar encerrado por tanto tiempo en ese espantoso lugar, sabía que un omega con su alfa debían aparearse para dar nacimiento a un cachorro donde este los alimentaria para sobrevivir, parecía espantoso pero eso el azabache no sabía, había vivido toda su vida viendo como muchos se alimentaban de sus crías.
El alfa salió de sus pensamientos al sentir como el omega se restregaba a su cuerpo, sin perder más tiempo ingreso de una en el cálido interior del rubio, cegados por su naturaleza se dejaron llevar, Naruto no conocía el significado de tener relaciones con un alfa ni que era tener un destinado.
Debido a que siempre estuvo encerrado en las cuatro paredes de su habitación y en la ignorancia no sabía nada, solo sabía que un omega debía siempre obedecer al alfa en todo, bueno eso le había dicho Minato a su hijo, ahora que Sasuke había marcado a Naruto el omega pensaba que Uchiha Sasuke era su dueño y que lo pertenecía por completo, que debía obedecerlo en todo.
El azabache no dejaba de penetrar al omega quien solo gemía sin saber las consecuencias que traería con estos actos pero eso llegaría muy tarde, Naruto salió de sus pensamientos al sentir nuevamente ese gran nudo ingresar en su interior “a este paso me acostumbrare” se dijo internamente el omega al sentir la esencia del alfa llenarlo en su interior.
Sasuke se acostó de lado abrazando al omega, por alguna extraña razón sentía que debía protegerlo además que tenerlo así en sus brazos sentía una calidez en su pecho “solo me sentí de esta forma cuando mamá me abrazaba” pensó con melancolía el azabache cerrando sus ojos para tratar de olvidar esos recuerdos que lo atormentaban cada noche.
Ciudad de Konoha
Una agitada Ino llegaba corriendo a la cuidad, no descanso para nada y corrió en dirección a la residencia de líder de Konoha, una vez llego anuncio su llegada y fue inmediatamente guiada hasta la oficina del alfa rubio.
Habla de una buena vez Ino – ordeno irritado el rubio al ver a su inútil beta recuperar el aliento – que hables te dije maldición – grito ya más colérico el rubio al no tener información de su grupo e hijo menor.
Minato sama todo el grupo murió... no pudimos encontrara a su hijo, nos ataco un alfa pura sangre – contó rápido la rubia al ver la cara irritada de su líder.
Ya veo... puedes retirarte – ordenó con seriedad el alfa, Ino rápido salió de ahí porque conocía muy bien al alfa por esa razón no estaba dispuesta a arriesgar su amada vida.
Malditos Uchiha – pronunció con rencor – ja ja ja muy bien, quieren guerra, pues guerra la tendrán – murmuró para sí mismo Minato – esta vez esos asquerosos Uchiha no arruinaran mi plan, creo que es hora de aceptar la ayuda de Raza Sabaku no – mencionó con una sonrisa desagradable el rubio mientras a su mente venia los recuerdos con el otro alfa.
************ Flash back ************
¿Quieres unir fuerzas conmigo Raza? – le interrogue al maldito alfa de pelo rojo y ojos negros – ¿cuál es la maldita condición?, porque no creo que sea gratis ¿no? – pregunte con burla al maldito alfa de Suna.
Me conoces perfectamente Minato – me respondió con descaro el muy asqueroso – solo tengo una y es que mi hijo se case con tu bello hijo – me dijo sin descaro alguno, este maldito asqueroso acaso quería que dejara a la luz de mis ojos, eso nunca.
No... Deidara es muy importante para mí – le dije tajante y sin esperar su asquerosa respuesta estaba dispuesto a retirarme pero sus últimas palabras me detuvieron.
Yo no hablo de Deidara... me refiero a tu otro hijo, al más pequeño – me respondió con esa típica sonrisa que tanto odio, así que quiere a Naru bueno eso es otra historia.
Lo pensaré – fue mi corta respuesta, después de todo dejar que Naruto se casará con el hijo de Raza no estaría nada mal, pero debo buscar mis beneficios propios respecto a todo esto.
************ Fin Flash back ************
Creó que es momento de aceptar el trato de Raza... después de todo nadie sabe de la desaparición de Naru – hablo para sí mismo el alfa saliendo de su oficina para hacer el trato con el alfa de Suna, sin saber que tal vez nada le saldría como él quería.
Continuara...................................................