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You Gave Me A Home por KuroAshi_ZxS

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Notas del capitulo:

Los personajes de Marvel y sus historias no me pertenecen.

¡Hola a todos! Como prometí, volví a actualizar lo antes posible. Lamento de antemano lo corto de este capítulo, pero debido a que el siguiente será más largo, espero me disculpen. Se debe principalmente a cierta parte de la trama que no podía ir junto a lo que ocurrirá ahora jaja

Saludos especiales a: Dai-99, wandarogersstark y Shofi21 ¡Muchas gracias por comentar!

Disculpen las posibles faltas de ortografía. 

“Stephen… ¿qué? ¡Eso es imposible!”

Steve rio amargamente, cubriendo su rostro con sus manos, claramente frustrado. Si era consigo mismo o con ambos, no era algo que pudiera saber con seguridad “Te pasaste los meses posteriores a la batalla hablando de su sacrificio, de lo genial y valiente que era. Que romperías tu compromiso con Pepper cuando pudieras traerla de regreso. De lo mucho que querías que el también volviera”

Tony se quedó sin palabras, acercándose lentamente a su líder. Colocó una mano en su hombro, incapaz de hablar, pero deseando con toda su fuerza conocer la verdad tras aquel comentario. Se mantuvo así durante unos minutos, hasta que Steve volvió a dirigirle la palabra “quería reparar mis errores, Tony, que fueras feliz luego de años luchando como un héroe. Por una ocasión, necesitaba…” hizo una pausa, quitando su mano y mirándole directamente a los ojos “Tenía que estar a la altura”

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“Tenía que estar a la altura” repitió Steve, con la voz entrecortada por el dolor “no iba a permitir que tu fueras quién se sacrificara”

“¿Qué…? Yo…no puedo entenderlo” murmuró el castaño, sin quitar aún la mano de su hombro, sino que más bien acercándose más a su cuerpo.

“Strange dijo que solo en un universo ganábamos contra Thanos. Y para ello él se sacrificó. Creyó que se trataba de ti”

Tony frunció el ceño, dándose cuenta con creciente horror, que no era el único que había pensado en esa probabilidad. Nunca le había preguntado al doctor si aquello era cierto, no sentía el valor suficiente como para enfrentarse a él. Pero era lo más obvio, el único camino que Stephen había encontrado para salvar a todos de ese infierno. Una vida por millones, como había mencionado Steve.

Lo entendía, era razonable. Pero no podía dejar de molestarte la idea que Strange hubiera entregado la Gema del Tiempo solo para ello. Odiaba que alguien más, decidiera sobre sus opciones de vida y muerte. Y eso también se aplicaba a cierto hombre testarudo que se encontraba frente a él en esos momentos.

“Querías protegerme…evitar que yo tuviera ese final…”

“Exactamente” con un suspiro, Steve finalmente le enfrentó, mirándole directamente a los ojos “pensé en el plan de Strange, en lo que esperaba para el futuro. Y yo no pude más que intentar cambiarlo. Sé que quizás él no se diera cuenta de la otra cara de la moneda, de que tu merecías tener la oportunidad de vivir. Yo dejé de hacerlo hace mucho, y si había alguien imprescindible en el equipo, es bastante natural tener mi final como Vengador enfrentándome a Thanos”

Oh, dios, eso era aún más horrible de lo que había imaginado. Creía que la decisión que había tomado Steve en esos momentos había sido valiente y estúpida a partes iguales: salvar a la humanidad, sin esperar nada a cambio. Pero nunca se le había pasado por la cabeza que fuera para darle otra oportunidad a él, una que podría lograr con el Hechicero Supremo.

Sí, era verdad que había roto con Pepper. La amaba, de todo corazón, y era una de las personas más importantes de su vida, pero los sentimientos que albergaba hacia ella se habían transformado en un lazo fraternal. Se odiaría toda su vida su una mujer fantástica como ella, se comprometiera en un matrimonio vacío, y sufriera por su causa. Y estaba muy feliz, realmente contento, que durante esos meses hubiera encontrado consuelo en un hombre como Happy.

Pero Stephen…aquella era una suposición totalmente errónea de parte de su anterior líder, pero no por ello menos justificada. Tenía razón para creer que se había enamorado, dado que durante las pocas ocasiones en que habían estado juntos, al menos desde su regreso a la Tierra, había alardeado del doctor y sus cualidades. Por aquel entonces se encontraba demasiado agradecido con él por salvar su vida, y sabía perfectamente que lo había hecho para cabrear a Steve. Aún el odio y el rencor se encontraban presentes, y en vez de optar por la vía sana y hablar con el chico, había intentado hacerle la vida imposible.

Por ello se arrepentía tanto de sus inmaduras acciones que, en cierto sentido, habían catapultado al soldado hacia su propia muerte.

“No eres imprescindible, nadie de este equipo lo es ni nunca lo será. Esa fue una de las primeras cosas que aprendí contigo, y me siento horrible al entender que tú nunca te sentiste de la misma manera” si había una buena ocasión para sincerarse, esa era aquella. Durante meses había evitado conversar con Steve, y aunque ya había jodido de sobremanera su vida, presentándose en su casa sin la más mínima idea de lo que se enfrentaba, al menos le debía eso “siempre pensé que estar a tu lado me convertía en una mejor persona. Nunca tuviste miedo de ponerte a mi altura o apoyarme. Seguiste tus ideales hasta el final, diste tanto por nosotros, que nadie podrá pagártelo nunca. Ninguna otra persona podría haber sacado adelante al equipo. Y por esos mismos lazos te pregunto ¿crees que de no ser así te habríamos abandonado?”

Steve guardó silencio durante unos segundos, sin duda meditando profundamente sus palabras “¿La lucha contra Thanos aún no ha terminado, eh?”

“No, en eso tienes razón” sentía un horrible desprecio hacia sí mismo, e incluso hacia sus amigos. Todos habían dado sus máximos esfuerzos por encontrarle, sin siquiera detenerse a pensar que su líder podría encontrarse mucho más a gusto en esta vida que en la anterior “pero eso es solo la mitad de la verdad. Es cierto que te necesitamos, que era el único capaz de mantenernos unidos y guiarnos hacia la victoria, pero también eres parte de nuestra familia. Ninguno quiere perderte para siempre, pero si es necesario…te dejaremos en paz”

Esta vez fue su turno de estabilizar a Steve, rodeando su espalda con un brazo, guiándolo con cuidado hacia el sofá. Su cuerpo temblaba de manera casi incontrolable, y no necesitaba ser un genio para darse cuenta que la situación lo estaba superando. Era demasiado para asimilar, pues seguro nunca pensó tener la oportunidad de volver a verlos.

Le sorprendía que hasta ese momento el chico no hubiera colapsado, considerando el enorme dilema al que se enfrentaba.

“Escucha, no tienes que responder ahora, incluso si ya sabes lo que quieres hacer” Tony movió su mano por la espalda de Steve, masajeando los tensos músculos, aunque no estaba muy seguro de lo que estaba haciendo. Solo deseaba poder calmar un poco a su líder, antes que sufriera un verdadero ataque de pánico “el portal por el que vinimos se abrirá en cuatro días. Hasta entonces…hasta ese momento puedes decidir. Nadie te culpará si eliges a tu hija, es obvio que ella te necesita” y armándose de valor por última vez, Tony susurró en voz baja, notoriamente avergonzado por el lío que había creado “No estoy enamorado de Stephen, ni es una posibilidad real. Somos demasiado parecidos. Por eso lo siento…nunca quise que te hicieras una idea equivocada, cuando en realidad me estaba comportando como un idiota contigo. Lo lamento”

“Aun así no me arrepiento, sigo pensando que te merecías esa oportunidad. Solo…disculpa si te he incomodado con mis suposiciones” Steve le regalo una pequeña y tímida sonrisa, pero luego la compresión brilló en su mirada “Momento… ¿mi hija…?”

“Claro, Mary ¿no es así? Ella me dijo que su madre murió, y yo lamento tu pérdida. Debió ser una mujer extraordinaria, para que la hayas elegido” Tony en esos momentos estaba balbuceando, claramente nervioso y molesto a la vez. Sabía que de nada servía estar celoso de una mujer a quién no podría haber conocido, pero además de la Agente Carter, nadie había cubierto la expectativa de una pareja para el Capitán América. Ni siquiera su sobrina, Sharon.

Para su desconcierto, en vez de molestarse o aceptar sus palabras, Steve estalló en fuertes carcajadas, sosteniendo su estómago mientras intentaba recuperar el aliento “Mary…ella no…” negó repetidas veces con la cabeza “su madre era una mujer extraordinaria, en eso tienes totalmente la razón. Pero no soy su padre, soy su tío. Mary es mi sobrina, aunque eso no significa que la quiera como si no fuera mi propia hija”

Tony abrió su boca, sin saber que decir ante tamaña revelación. Ahora ciertos detalles tenían sentido, como el hecho que la pequeña llamara a Steve por su nombre y no por algún otro apelativo “¿No leíste nada sobre mí, verdad? Viniste hasta aquí en medio de otra de sus precipitadas decisiones”

“¿Tan obvio es?”

“Demasiado” tras lograr calmar su risa, Steve volvió a sonreír, palmeando el sofá, indicando que tomara asiento a su lado “permíteme contarte como ha sido mi vida durante los últimos veintisiete años…”

Y eso hizo. Durante casi dos horas, relató con lujo de detalles su vida como Frank Adler.

Fue un poco deprimente escuchar la relación que sostenía con su madre, tan parecida a lo que había ocurrido con Howard. Y el suicidio de Diane, su hermana…era terrible.

Steve en algún momento preparó café y emparedados para ambos, y mientras él iba al baño, cogió un álbum de fotografías. Buena parte de ellas eran de su sobrina y los gatos, pero muchas de ellas eran de él junto a Diane cuando aún eran niños “Me alegro ver que tuviste una infancia normal, al menos” recorrió con la punta de sus dedos una de las imágenes, sonriendo al notar la expresión feliz que este había tenido, abrazado a su fallecido padre “supongo que no tendrás problemas ahora con las referencias a la cultura pop”

“No, ninguna. Soy un experto” el tono de orgullo en su voz le hizo sonreír, contento al menos de saber que Steve ya no se sentía fuera de aquel siglo, sino que lo abrazaba, haciéndolo suyo “Tú… ¿vendrás a visitarme? Al menos hasta que deban regresar… Aunque no me gustaría imponer, sé que debes estar ocupado” alzó ambas manos, mirándole nervioso, como si temiera haber sobrepasado algún límite con esa pregunta.

“Por supuesto que no, será un placer” vio como el chico jugaba con sus manos, aún más nervioso que antes. Algo le molestaba, pero no era capaz de determinar la causa exacta “Steve… ¿ocurre algo?”

“Me gustaría que guiaras a Mary, que hablaras con ella. No conozco a nadie más competente que tú para ayudarla, ambos son genios, y yo no sé tanto…como para asimilar los enormes cambios con los que debe estar luchando” Steve mordió su labio inferior, gesto que no escapó de la mirada del castaño

“Claro, pero no creo que tu sobrina quiera escucharme” Tony bufó, recordando los eventos de esa mañana “creo que no le caigo bien”

Su líder alzó ambas cejas, claramente intrigando “¿por qué lo dices?”

“bueno…” pensó durante unos instantes si sería bueno relatar aquel episodio, pero conociendo a Steve, no dejaría pasar su comentario “ella puede o no haberme tratado de idiota…”

El soldado llevó ambas manos a su rostro, gimiendo por la consternación “le dije que no debía juzgar sin antes conocerte. Lo lamento mucho, Tony, fue mi culpa” señalo con un dedo tembloroso un estante, desde donde era visible una hoja de papel. Curioso, se puso de pie, mientras Steve seguís hablando “le dije que eras alguien que creí que me odiaba por los errores que cometí, y debido al tiempo en que estuvo viviendo fuera de casa, tiende a ser muy sobreprotectora con mis relaciones”

“Eso explicaría el modo en que reaccionó al verme” tomó con cuidado el papel, abriendo los ojos cómicamente, al darse cuenta que era un dibujo sorprendentemente exacto de sí mismo. Sabía por su padre que su líder solía dibujar, pero cuando le había conocido y tras su breve instancia en la Torre Avengers, nunca le vio portar algún cuaderno, salvo la pequeña libreta en que anotaba todas las referencias sobre la cultura pop que llamaban su atención. Creyó que era solo un pasatiempo más, pero al parecer se había equivocado.

Una carpeta, escondida tras unos gruesos libros de matemáticas, llamó su atención. Ignoró la advertencia de Steve demasiado tarde, pues nuevos bocetos cayeron a sus pies antes que pudiera atraparlos. Se puso de rodillas, notando aún más sorprendido que muchos eran sobre él.

Pero uno en particular llamó su atención “Steve…es bellísimo…” sus rasgos, su sonrisa torcida, el brillo maniaco en su mirada cuando inventaba, su ropa rota y cubierta de grasa de motor. Era particularmente íntimo, delicado: la mirada de un artista bajo su fachada, mostrando a su yo inventor, a ese que no muchos veían y su verdadera persona, la que se escondía tras las máscaras. Esa faceta que pocos intentaban conocer.

Entonces una idea asaltó su mente, logrando que su corazón latiera desbocado “¿es así cómo me ves?” como toda respuesta, el rubio se acercó a él, agachándose a su lado. Pronto, sus rostros estuvieron lo suficientemente cerca, como para hacerse una idea de la respuesta del chico “Steve ¿esto significa…?”

Notas finales:

Espero les haya gustado, cualquier duda pueden dejarla en comentarios. Nuevamente pido disculpas por lo corto del cap, pero espero volver el sabado (o el domingo, todo depende de si tengo tiempo para entrar al pc y actualizar), pero no pasará de esa fecha.

Por cierto, una pregunta algo tonta ¿alguien conoce sobre rol Stony? Lo mencionó una lectora hace algún tiempo, diciendo que podía intentar, pero no conozco si existe algún grupo en Facebook o si alguien lo ha intentado y podría guiarme un poco. De verdad lo agradecería.

Nos vemos en la próxima ¡cuídense mucho!


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