Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Retrato de una mentira. por Sombra96

[Reviews - 152]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

No tengo cara para venir por aquí pero espero no me odien.


Les traigo el segundo cap de este fic y bueno... Vayan haciendo sus propias hipotesis. 


¡Quien se acerque más a la idea obtendra un premio! =)


En serio lamento no haber subido esto antes, espero me perdonen y me sigan dando su amor.


Gracias por todo.


Y a leer!

“.- ¡Hyung! ¡Taemin hyung! – le llamo efusivo él mas chico mientras él seguía moviéndose al ritmo de la música, dejando que su cuerpo se dirigiese solo - ¡Hyung! – volvió a gritar él más pequeño, logrando al fin que se detuviese. 

.- ¿Qué sucede? – le pregunto ofuscado mientras detenía la canción, molesto por haber sido interrumpido en la que consideraba la actividad perfecta.

Frente a él estaba los hermanos menores de sus mejores amigos. Él menor lucía nervioso mientras le miraba y la chica tenía las mejillas sonrojadas por la vergüenza. Era la viva imagen de su hermano mayor y era por eso que se le hacía tan adorable.

.- Lo lamento, hyung – se disculpo él menor mientras hacia una reverencia y se adelantaba unos pasos – Pero es que necesitamos su ayuda, es urgente y pues solo pudimos pensar en hyung.

Él otro sonrió mientras se dejaba caer al suelo y miraba directamente al hermano menor de su mejor amigo: .- ¿En que puedo ayudarles?

.- Bueno, una vez Jonghyun hyung dijo que eras perfecto en todo lo que tenía que ver con el baile y el escenario. Y nosotros realmente queremos entrar en un academia para después hacer audiciones y… - él menor paro para tomar aire y le miro con vergüenza - ¿Quería saber si nos ayudabas a conseguir un nombre artístico a cada uno, hyung? – le pidió inflando el pecho y con las mejillas realmente sonrojadas. Muy distinto a lo que era su hermano mientras la pequeña se encogía a su lado, nerviosa.

.- Se que no deberíamos de pedir esto, oppa pero realmente queremos ent…

.- Está bien – fue todo lo que dijo mientras se ponía de pie y dejaba caer su mano en el hombro del pequeño – Tu nombre será Kai, ¿entendido?

.- Kai – murmuro, saboreándolo – ¡Me gusta, hyung!

.- ¿Y el mío, oppa? - pregunto ella mientras le miraba con los ojos brillantes, Taemin solo sonrió mientras le despeinaba el cabello.

.- El tuyo será Sulli, ¿te gusta?

La menor se limito a asentir emocionada mientras efusivamente le abrazaba: .- Gracias, muchas gracias, oppa.

.- Nunca olvidaremos esto, hyung – asintió el menor mientras hacia una reverencia.” 

.- ¡Omo! Así que tú eres el chico que ha venido por transferencia – le asalto la chica mientras dejaba caer su mochila en su puesto; la joven tenía una sonrisa bonita y se le hacía ligeramente conocida – Soy Choi Seol Ri pero mis amigos me llaman Sulli.

Él solo le dio una sonrisa cortes. Así que de ahí la conocía. La pequeña Seol Ri, ya no guardaba mayor parecido con sus hermanos, ahora era la imagen de su madre.

.- ¡Omo! Tu rostro se me hace conocido, oppa – murmuro ella pensativa, detallándolo minuciosamente – Pero no recuerdo donde lo he visto…

Él solo sonrío con mayor fuerza, contento de ponerla a pensar, en que la chica escarbase sus recuerdos. No tardaría en relacionarlo, en que su propia mente diese la alerta. Mientras tanto, aquello sería bastante interesante.

.- Soy Lee SangMi – se presento con una pequeña reverencia – Espero podamos hacernos cercanos.

.- ¡Eres un encanto! – Rió divertida ella mientras se prendía de su brazo y lo llevaba al otro extremo del aula – Kai, mira a nuestro nuevo compañero.

Alto, así era ese chico; que sentado en un rincón del aula; hojeaba una revista. Incluso era un poco más alto que él y aunque simple vista no se notaba el parecido; para él, que se consideraba un experto; estaba ahí. En la comisura de los labios, en el borde de los ojos, en la manera casual de moverse. La elegancia Kim.

.- Soy Kim Jang In pero me dicen Kai – él alto hizo una reverencia – Espero podamos cuidarnos mutuamente en él futuro.

Asintió a sus palabras y dejo caer su mano en él hombro del otro, como lo había hecho la primera vez que lo había visto, casi nueve años atrás y como lo hacía siempre que lo veía.

Él pelinegro alzo entonces los ojos mientras lo detallaba con más calma y él le dedico una sonrisa tranquila, notando el destello del recuerdo en sus ojos. Había reconocido en él algo del chico tímido de años atrás, al que le gritaba “hyung” mientras lo perseguía calle arriba.

.- ¿Cierto que SangMi oppa tiene parecido a alguien que conocemos, Kai? – pregunto la chica mientras lo soltaba y se situaba al lado del otro, mirándolo nuevamente con aire pensativo – Pero no puedo descifrarlo…

.- Se parece a un viejo compañero de nuestros hermanos, Sulli – fue la respuesta escueta del otro – A la extraña obsesión de mi hyung pero es diferente el aire en él, así que…

.- De repente me siento estudiado – soltó con aire divertido, tratando de distraer la atención pero los ojos del alto relampaguearon frente al gesto. Había menospreciado la mente de Kai.

.- Lo lamento, oppa – se disculpo la chica con una reverencia – Es irrespetuoso hacer eso, lo siento.

Él le enredo el cabello en gesto conciliatorio, como lo hacía cuando era pequeña y a él le recordaba tanto a su hermano inalcanzable: .- ¿Por qué mejor no me muestran sus pasos? – Les reto con voz seria – Se dice que realmente se llega a conocer a alguien cuando lo ves bailar.

La chica asintió y corrió hacia el equipo de sonido que estaba junto a la puerta del aula mientras él alto se quedaba con él, mirándolo fijamente. Estudiándolo.

.- ¿Sucede algo, Kai – ssi? – le pregunto amable, forzando una sonrisa pero él otro negó.

Y lo supo en ese momento.

Debía de tener cuidado, Kai iba a ser una verdadera molestia en el futuro.

Tendría que ver como deshacerse de él.

.- Llegas tarde, Jong – le gruño Key cuando, con paso apresurado, llego a su sitio de reunión, en la cafetería de siempre, en la mesa de siempre – Has sido tú el que nos ha citado aquí desesperado y aun así te das el lujo de llegar tarde.

.- En serio lo lamento, chicos – murmuro mientras recuperaba el aliento y se dejaba caer al lado de la diva – Pero el tiempo se me paso volando y no me di cuenta.

Key no dijo nada mientras se cruzaba de brazos en un gesto indignado, bastante propio de él. Minho en cambio se alzó de hombros con despreocupación y le dio un sorbo a su malteada, reflejando desinterés ante todo.

Jong suspiro, decidiéndose en el fondo si decía lo que quería, lo llevaba guardando dentro de sí durante tanto tiempo. Ahora tenía la excusa perfecta para enfrentar el tema… Era hora, luego de siete largos años, era hora.

.- Chicos yo… Yo conocía a alguien que…

.- Que se parece a él – soltó Minho de golpe, con la voz tambaleante y una expresión indescifrable en su siempre inmutable rostro - ¿Eso es lo que querías decirnos, hyung? ¿Qué conociste a ese chico? ¿Él que se parece tanto a… a…?

.-  A Taemin – hablo con la seriedad, notando el temblor en el cuerpo del alto y la tensión en el de Key - ¿Por qué te cuesta pronunciar tanto su nombre? Era nuestro amigo, era nuestro hermano…

.- Pero está muerto – Key cerró los ojos, sosteniendo dentro de si las lágrimas y reuniendo coraje – Está muerto, Jonghyun y así se va a quedar siempre. Así que olvídalo de una vez. Deja en paz su memoria.

El más bajo sintió la ira inundarlo casi al mismo tiempo que las lágrimas comenzaban a acumularse en sus ojos. Dolía escuchar como hablaban, dolía ver como se negaban. Le lastimaba ver que el recuerdo de alguien tan especial para él, hacía tanto daño. Porque Taemin era demasiado importante pero su solo nombre abría heridas, no dejaba que cicatrizasen.

.- Él no está muerto…

.- Ahora te has vuelto loco, Kim Jonghyun – Key suspiro entre ofuscado y resignado mientras Minho seguía con la vista clavada en la mesa, con su mente trabajando a mil por hora.

.- Prefiero estar loco a vivir negando algo inevitable, Kim Kibum – gruño Jong con ira contenida, incapaz de mirar al otro a la cara.

Y el silencio se instaló entre los tres. La gente termino de comer a su alrededor y pronto nuevas personas llegaron, Jong trago fuerte.

Onew no tardaría en llegar y podría notar el ambiente entre los tres. La ira contenida al mismo tiempo que el dolor acumulado en medio de los tres. Una bomba de tiempo a punto de estallar.

.- Onew esta por llegar y no es bueno que entre nosotros discutamos por algo tan insignificante, Jonghyun – murmuro Key, como si se tratase de una orden – No queremos que Onew haga preguntas, ¿verdad?

Y tal como si hubiese sido una predicción, él otro apareció en la puerta del local, con una de sus enormes sonrisas en su rostro.

Onew cruzo la puerta del local con la misma gran sonrisa en sus labios mientras distinguía a los otros en un rincón apartado del lugar. Su sonrisa disminuyo un poco pero no se detuvo hasta llegar a ellos.

.- Lamento la tardanza, chicos. Pero tuve un problema – dijo cuándo se ganó la atención de los tres, aunque podía notar la mirada de Key un tanto perdida y Minho lucía más tenso de lo normal – Espero no les moleste que haya traído un amigo. Es que es nuevo y todo eso…

.- No te preocupes, Hyung – Jong le respondió con una sonrisa mientras lo invitaba a sentarse. Tratando de que el ambiente se mostrara normal, cordial.

Tener a alguien más ahí a parte de Onew ayudaría, no les permitiría pensar en eso… En él.

Y él castaño los alcanzo con una sonrisa mientras se detenía al lado de Onew. Minho se sentó derecho y Key bajo la mirada mientras Jong sonreía de forma tambaleante. Aquello ya era demasiado.

.- Él es Lee SangMi, viene de intercambio y como apenas conoce  alguien pues…

.- Nos conocimos esta mañana – le interrumpió Jonghyun, formando su mejor sonrisa fingida – Lamento haberte abandonado de esa forma pero tuve un contratiempo y…

.- No se preocupe, hyung – el castaño le miro con una sonrisa tranquila pero sus afilados ojos no paraban de detallarlo – Encontré el camino por mí mismo sin ningún problema.

.- Aun así, déjame hacer algo para compensarte – se adelantó, tratando de sonar amable, sin embargo su interior era un caos – Siéntate y pide lo que quieras, corre por mi cuenta.

Aquel chico, su rostro, sus ojos, su voz… Todo él. Era como se había imaginado miles de veces a Taemin si aún estuviese con ellos. Ese había sido siempre su deseo, verlo crecer, ver como se hacía un hombre a su lado. Y ahora, ese chico. Lee SangMi era como verlo, observar lo que siempre quiso para su mejor amigo.

.- ¡Oh! Verdad – Onew sonrío de forma deslumbrante mientras miraba detenidamente al Key – Feliz cumpleaños, Key – ssi. No pude encontrarte antes así que…

.- Muchas gracias, Hyung – fue todo lo que dijo, sin mirarlo, sin si quiera respirar.

Jonghyun suspiro mientras se corría un poco y dejaba que el castaño se sentase mientras Onew tomaba lugar junto a Minho, que se ferraba a la mesa casi con pánico.

.- Hey… Chicos. No sean descorteses y preséntense – les hablo con suavidad, queriendo sacarlos de su propio trance.

Pero ninguno de los dos dijo algo, en cambio, Key apretó sus labios hasta volverlos una fina línea mientras Minho dejaba que su cabello cubriese sus ojos. Onew suspiro con cansancio mientras el castaño formaba en sus labios una pequeña sonrisa de satisfacción. Eso era justo lo que quería.

.- Soy Lee SangMi, tengo 19 años y estoy estudiando artes escénicas – murmuró con voz cantarina – Por favor cuiden de mí y hagámonos cercanos en el futuro – e hizo un pequeña inclinación.

Pero aun así ninguno hizo un movimiento.

.- Yo soy Jonghyun, estudio mercadeo internacional – comenzó con voz temblorosa el mayor – Él es Key, estudia diseño de modas y él es Min, estudia medicina. Espero podamos hacernos cercanos y…

Fue en ese momento en que Key no pudo soportarlo más y se levantó de un salto, con un nudo en su garganta y miles de imágenes bombardeando su cabeza.

.- Necesito salir de aquí – fue todo lo que dijo mientras – literalmente – saltaba sus cuerpos y salía de la mesa – Vámonos Min – dijo con autoridad y el otro se limitó a obedecer, sin poder pensar bien – Hablamos después. Y un gusto en conocerte, Lee.

Y sin dar tiempo para más comenzó a caminar hacia la salida de la abarrotada cafetería. Minho solo lo siguió, sin decir nada y sin mirar a nadie.

Jong soltó una risa nerviosa mientras rascaba su cabeza, sin saber que decir.

.- ¿He hecho algo que los ha incomodado? – pregunto el más joven mientras lo miraba inquisitivo.

.- Por supuesto que no – respondió lo más rápido que pudo, negando con sus manos – Es solo que Key es un tanto arisco cuando conoce a la gente y Min, bueno… Min parece una estatua que come y respira, así que no te preocupes. Así son ellos con normalidad, ¿no, Onew hyung? – le pregunto al otro, tratando de hacer una conversación ligera.

Él mayor asintió con una sonrisa, sintiéndose mal por dentro. Sabía porque había sido esa reacción tan brusca y sabía que para el castaño aquello era, ciertamente, muy divertido: .- Por supuesto, SangMi – le dijo – Son como tú cuando alguien trata de quitarte un dulce – le dijo tratando de sonar divertido.

Él menor asintió con una sonrisa mientras la camarera se acercaba y Jong suspiro, buscando en su mente algo de que hablar.

.- Quisiera una leche de plátano – pido con un puchero el joven y Jong lo miro sorprendido. Esa bebida, ese gesto; no era posible - ¿Y usted que quiere, hyung? – le pregunto entonces con una sonrisa avergonzada, tal y como hacia…

Jong sacudió su cabeza, alejando pensamientos raros: .- Yo quiero una malteada de chocolate.

Iba ser un rato largo.

Jong se había – literalmente – escapado; pero tras aquel encuentro con ese chico se había sentido indefenso, durante esos minutos en los que hablaron se sintió transportado a otros momentos, a recuerdos específicos. Ese chico tenía incluso las mismas manías, los mismos gestos.

Había sido como una tortura lenta y silenciosa que lo había obligado a levantarse y sacar una excusa que nadie creería, había sentido esa necesidad.

Era algo que su interior le pedía, quería y necesitaba ir a ese lugar.

Justo a las afueras de la ciudad, en la zona dedicada a los niños, en la lista de la letra L.

Ahí, ese lugar.

Se arrodillo sin decir algo mientras clavaba sus ojos en las letras perfectamente talladas y en la fotografía bajo ellas, un niño de cabello negro y sonrisa inocente.

Un recuerdo triste.

“Lee Taemin

18 de Julio de 1993 - 28 de Julio 2005” 

Dejo caer su mirada durante unos segundos, pensando en todo y en nada al mismo tiempo. Aquel chico lo había confundido, por un momento no pudo evitar relacionarlo, mezclar su imagen con la de quien había sido su mejor amigo.

.- Lamento no haber venido antes, Tae – ssi – murmuro mientras limpiaba la lapida con su propia mano – He estado un poco ocupado con la universidad y todo eso, espero entiendas.

Y se quedo en silencio, sin saber que hacer o decir. Estaba acostumbrado de parar ahí y quedarse en silencio, observando la foto delicada del menor que sonreía desde la que era su última morada.

.- Soy un mal hyung, ¿No es así Tae? No había venido en poco más de un mes y te saco la excusa de la universidad -murmuro mientras se rascaba el cuello y dejaba escapar una risa nerviosa – Lo cierto es que… Lo cierto es que te extraño mucho y ya no se que hacer para aminorar un poco el dolor.

Sus ojos detallaron entonces lo desolada que se veía la pequeña tumba, rodeada de otras que eran cubiertas por flores y regalos. La pequeña tumba estaba vacía, cubierta por el olvido.

Solo él… Él era él único que la había visitado durante esos largos siete años.

No había nadie más. Porque su pequeño amigo no tenía a nadie más excepto a ellos.

Key se negaba a hablar de él; como si nunca hubiese existido; y Minho huía al tema; alegando que eso era solo parte de su pasado. Aunque tampoco fuese algo fácil de lidiar para él, Taemin había sido la primera persona a quien había considerado su hermano, aún cuando tenía dos.

.- Debes sentirte muy solo aquí, pequeño – murmuro sin saber ya que decir pero sin tener la intención de marcharse – La semana que viene, una vez salga de los exámenes vendré a visitarte, ¿te parece? Te traeré un gran ramo de rosas blancas, tus favoritas.

De nuevo, lo único que se escucho por el amplio y abierto espacio fue el sonido del viento meciendo las hojas de los árboles. Jong suspiro y se resigno, no podía evitar sentirse a gusto en ese lugar.

.- Hoy es el cumpleaños de Kibum, estaba más hermoso que nunca. Te sentirías orgulloso de tu umma, si lo hubieras visto – dejo escapar las palabras mientras una sonrisa tranquila se instalaba en sus labios – Minho ha comenzado sus practicas y dicen que es uno de los mejores. Estoy seguro de que será grande en su carrera, le ha puesto mucho empeño. Y tu hermano ha prometido venir en unas semanas, dice que el trabajo lo ha tenido muy ocupado, ya sabes como el, ¿no? – de pronto no tenía nada que decir, nada que agregarle a la lapida, ya no había temas ni respuestas, suspiro - Todos te extrañamos, Taemin… Todos.

Taemin había muerto pero nunca lo había abandonado. Ni a él ni a los demás, aunque estos lo negaran. Su recuerdo, su imagen y todo lo que había despertado, vivía en ellos.

.- Aún no puedo creer que estés muerto, Tae – murmuro mientras soltaba una risa nostálgica – Aún me niego a creerlo. 

“.- No creo que él niño deba de verlo, Joven Lee – opino el hombre enfundado en su uniforme de policía mientras los guiaba por el largo y lúgubre pasillo de la morgue – Aún es muy joven para vivir una experiencia como esta.

Él otro solo suspiro mientras le daba una mirada de reojo: .- Si hay alguien que conocía a mi hermano este chico, así que estoy seguro de que será de gran ayuda para su investigación – hablo con voz clara  - Además, es imposible no involucrarlo en este asunto, oficial. Después de todo, esta diciendo que debo negar la muerte de su mejor amigo.

Él hombre solo los miro un momento y asintió sin poder hacer más mientras llegaban a la gran puerta de hierro. La abrió con un suave empujón y los dejó pasar.

Era un cuarto enorme, con las paredes pintadas de un gris opaco y con el aire frio, casi helado al extremo. Junto a una mesa los esperaba un hombre mayor, con bata blanca y gafas.

.- ¿Son ustedes quienes van a identificar el cuerpo? – les pregunto mientras ponía su pesada mano en la sabana blanca que cubría un bulto sobre aquella mesa. Jong tomo aire, tratando de buscar fuerzas.

Cuando la sabana cayó al suelo Jong cerro los ojos e inflo el pecho, no era posible. ¡No lo era! Ese chico, ese cuerpo sobre esa mesa no era su mejor amigo. No era su hermano.

.- Lo identificamos por la cicatriz en su hombro derecho y por las placas dentales – comenzó a hablar él hombre mientras pasaba hojas y hojas – Su cuerpo fue quemado en una parcialidad casi total, sus huellas fueron removidas, se determino que fue víctima de abuso e identificamos la causa de muerte como asfixia… - siguió hablando él hombre. Con voz fría y desinteresada, como si ese cuerpo no fuera un ser humano, un niño. Su mejor amigo.

Sus manos cubrieron sus orejas y él se hizo un ovillo en el suelo, negándolo. No era Taemin. Nunca lo sería.

.- ¡Jong! ¡Jong! – Él joven se hinco a su lado, tratando de despegar sus manos de sus orejas – Por favor, Jonghyun. No debía haberte traído, lo siento.

.- No es él, Hyung – murmuro con la voz rota – No es Taemin.”

(...)

Notas finales:

Gracias por leer y comentar (si lo hacen).


Vuelvo a pedirles disculpas por la demora y todo eso pero este es el fic que más dolores de cabeza me saca, siempre pensando en como continuar el misterio y no desvelar tanto porque son los primeros capitulos. En realidad este cap lo escribe tres veces hasta conseguir esto. Uff! Espero entiendan.


Muchas gracias nuevamente. Y denme mucho amor!


=)


Piensen cosas malas y hagan cosas sucias. O.o


Sombra96


PD:¿Alguein sabe porque AmorYaoi no me daja subir imagenes?


Adelanto. *.*


"Jong se dejo caer en la silla con poca elegancia, clavando sus ojos en el recorte de periódico que tenía frente a él. Sus ojos detallaron cada uno de las palabras mientras sus dedos acariciaban la imagen del articulo.


.- “Menor encontrado muerto” – murmuro mientras lo re leía pero de un momento a otro soltó el pequeño pedazo de papel, frágil ya por el tiempo de haber estado guardado.


Jong suspiro frustrado y volvió a guardarlo en la caja, llena de recortes documentos, hojas llenas de hipótesis y anotaciones con letra dispareja. Había pasado años recogiendo información, buscando pistas en donde no había nada.


.- Prometía que lo iba a resolver pero cada día estoy mas lejos – se dijo a si mismo mientras su frente chocaba contra el escritorio – No eras tú. No lo eras, Taemin."


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).