La idea es interesante. Tiene un no sé qué muy atractivo y que no me soltó hasta al final. Igual, la mayoría de las historias cortas que leo me gustan. Sí, la tuya también.

La charla con el tatarabuelo, definitivamente, me gustó. Sin embargo, el texto podría verse mejor. Habría que corregir la puntuación y la raya de diálogo y ¿por qué están en negrita los diálogos? Curioso. Me resulta hasta más complicado ponerlos así.

Bueno, tampoco me la quiero dar de critica. Pero si te lo digo, es porque tu historia vale la pena. Sino me callo y no diga nada. Suerte.  

Ah, Yoru. Pero mirá que sádica. Quién lo diría.

Nah, tiene onda la historia. Me parece que es un poco redundante. Pero no está mal. El ambiente es propio de los vampiros. Londres, lluvia, neblina, calles laberínticas, un asesino serial. Sí, sí. Puedo imaginármelo. Otro tema que tengo pendiente. Sería el último de mi saga. Si es que logro terminarlo. ¿No leíste a Anne Rice? Es mejor que Crepúsculo. Por lejos.

Anyway. La Iglesia es demasiado ortodoxa y no es nada sano eso de la castidad. Quizá todo te conduzca el infierno. Corromper el alma es fácil. O eso dicen. De cualquier forma, estoy en contra de la hipocresia. Así que si Abel quería caer en los placeres de la carne, bien por él. Un beso.

Bueno, te comento mi sábado hasta ahora: sigo encerrada en mi pieza estudiando. Aunque, a veces, para distraerme, entro aca y busco algo para leer. Es curioso. Porque mi distracción de leer, es leer. Soy tan nerd (?)

Igual, me encantó ir al indice y ver este fic (casi nunca encuentro nada). Y yo que tenía ganas de leer más de vos. ¡Qué sorpresa! ¿Te dije cuánto me gusta este tipo de narración y las historias de amor-amistad? ¿No? Te lo digo ahora: me encantan. Porque es complicado, tan terriblemente complicado, que me atrae muchísimo. Además, siempre envidie la amistad entre los hombres. Tan sinceros, auténticos, ni histéricos, ni falsos. Los tipos son unos genios.

Ahora, volviendo a tu fic, me gustó mucho. La narración es fluida, envolvente, ¿simpática? ¡Se me hizo tan corta! Aunque es mejor así. Me gustan las cosas directas. En pocas palabras: muy buen capítulo. También escuché el tema y no está mal. No es mi onda. Pero me agrada la idea de que esto sea un Songfic. Así conozco nueva música. Amo la música.

Pero (¿por qué siempre pongo un "pero"?, God...) encontré un error. Sí, tenía que decirlo. Se conocen desde los diez, tienen más de nueve años de amistad ¿y el pibe tiene 15? Lo sé, soy un fastidio. Tan jodidamente atenta a los detalles. Capaz me confundo. No sé. No importa. Porque me gustan mucho tus ideas. Aunque sigo sosteniendo que hay cosas que se podrían mejorar en cuanto a puntuación y demás. Si querés (si no te molesta, sobre todo) me ofrezco como beta. Incluso podés mandarme a la mierda que igual yo voy a seguir leyéndote.

Así que nada, esperaré el próximo capítulo. ¿Vas a subirlo más tarde? Ah, re emocionada la chabona. De nuevo, otro beso, Yoru :3

Me ha pasado, más de una vez, el querer transmitir algo y no poder hacerlo. Ya sea porque el mensaje no tiene sentido para el otro o porque entendió cualquiera.

Me parece que hay algo en tu escrito que no veo o no siento. No está mal. Pero no puedo decir mucho más. Entiendo la idea. Y aun así no la completo. Tampoco sé si es tu caso. Pero, a veces, es mejor no escribir con las emociones tan a flor de piel. También me ha pasado. Supongo que si después de un tiempo, podés volver a recrear lo que sentís, sería una especie de ¿avance, progreso? Algo así. Al menos, eso creo.

Dejar a alguien es difícil. Si está muerto, no hay marcha atrás. Pero si sabés que hay una posibilidad (basta decir o hacer algo) de estar con él... Sí, quizá es más difícil. Cada uno lo asumirá como pueda. Tampoco tengo mucho que decir. Es muy personal. Besos. 

Creo que esta historia no la había leido. Está preciosa. Es excelente.

Conmigo siempre me pasa. Pero raramente con otros. Le puse un punto final a tu historia antes de terminarla. No me preguntes por qué. Pero luego de leer "yo soy el más imbécil entre los imbéciles por dejarte ir veinte años atrás", sonreí y me dije a mí misma "ya está, es genial". Tardé un toque en seguir leyendo. No quería hacerlo. Pero seguí. Porque esta es tu historia y quería saber el final que vos elegiste. Y, por supuesto, fue perfecto.

El tango es meláncolico. Buenos Aires a veces también lo es. Sobre todo los días de lluvia. Se tiñe de gris, se desdibuja. Pero me saca una sonrisa enorme. Al igual que tu historia y su final trágico. La elección del tango es muy buena. Además, me encanta ver un referente nuestro por acá. Vamos, ni siquiera las argentinas escriben en argentino. No entiendo por qué. Gracias, che. Tampoc sé por qué lo digo.

Por otro lado, leí muchas historias de travestis (no acá). Y lo común en todas ellas era la escasa edad de las protagonistas. Llevan una vida dura, o eso escribían. Y parece comprensible. Uno no ve travestis laburando en oficinas, en hospitales, en locales. No. Por lo general, se las ve en la calle, regateando algo de amor que ni siquiera es amor. Parece que no tuvieran otra opción. No sé si hay muchas más. Y no poder elegir es terrible.

Ojalá el narrador hubiese tenido más valor. Pudo haberla salvado de esa vida. Darle el cariño que realmente necesitaba, junto con la aceptación. Igual, me encantó la historia. No es un tema tratado en esta página. Te felicito por hacer algo diferente. Otro beso.

Me gustó mucho. Es romántico. Pero de un modo diferente a todo lo cursi que se ve por acá.

Creo que el dolor a veces nos inspira. Nos vuelve creativos. Después de todo, hay que canalizarlo por algún lado, ¿no? El arte, la escritura, la música.

Me encanta la música. Realmente, la siento. Y tu historia también me llegó. Además las palabras no sobran. Tiene la cantidad justa. Y eso no es tan fácil de encontrar últimamente. Saludos.

Sintético y simple, decís. Vaya, no sé. Una chica me dijo una vez "hay belleza en la economía de las palabras". Y sí, si está bien redactado, es así. Además, la idea me parece diferente y la doble personalidad le da cierta complejidad.

Igual, yo también soy una en el trabajo, otra en la facultad, otra los domingos a la tarde. Porque el entorno que me rodea es distinto y la gente es distinta. Supongo que el dilema está en ocultar una de esas personalidades. Sinceramente, debe ser triste no vivir tu sexualidad con plenitud. Y aun así, entiendo a quienes se esconden de los prejuicios y la censura de los demás. Ojalá él y Galatea puedan mostrarse tal cual son al estar juntos. Sentirse libres uno al lado del otro.

Me gustó la historia. No tratan mucho este tema por acá. Yo tengo una pendiente desde hace meses. Ahí, incompleta, muerta de risa. Desde que leí a Naty Menstrual, recordé la crudeza del mundo de los travestis. No sé cómo decirlo. Mi protagonista era demasiado irreal.

En fin, qué lindo ver que tengas cierta constancia al escribir. Porque ya me enganché con tus historias. Así que veo tu nombre y leo. Por otro lado, es la primera vez que dudo acerca de la continuación. Me encantan los one-shot. Y este está muy lindo. Pero no sé qué decir esta vez. Quizá, ¿un capítulo con el punto de vista del otro protagonista? Un beso, Yoru.

Primero que nada, no creo que seas un desastre. Todo esto se trata de gustos Y a mí me gusta como escribís. De hecho, hay ciertas cosas que no dejaría pasar en otros autores. Pero en vos sí. Porque tus historias son muy dulces. Vale la pena leerlas. Quizá sólo yo te deje reviews. Y quizá ese sea el único medio en el que te basás para saber si sos buena escribiendo. Pero no lo hagas. Es ridículo. Los reviews siempre escasean. Y, la mayoría de las veces (sobre todo con el fandom), la cantidad de reviews es inversamente proporcional a la calidad del fic. Mis autoras favoritas (las de antes y ahora) tienen muy pocos reviews. Y para mí son maravillosas, diferentes, frescas. Para los gustos hay colores, Yoru. No te preocupes por el resto. Lo que importa es que vos disfrutes escribiendo.

Volviendo a esta historia, me gustó mucho. Al principio pensé que Layla era hombre. Es que más de una vez hice eso de narrar como si fuera mujer y después revelar que era hombre. Sin embargo, me gustó aun más saber que no lo era. La historia de la madre cobra sentido a lo largo de la trama. Uno entiende porque se habló primero de ella. Me parece que es un personaje relevante, también. Ella y todo lo que la rodea.

No sé por qué me parece que faltó un poquito más de desarrollo en la relación de Caleb y Yin. Entiendo lo de los amores de verano, la libertad latente en Yin, el deseo de escapar, la necesidad de un cambio, la similitud con su madre... Sí, pero siento que faltó algo. No sé qué todavía. Tal vez Caleb tenía la respuesta. No lo sé. Yo soy de historias cortas, narro momentos. Así que no soy la mejor buscando conexiones y hablando del pasado de mis personajes. Por eso no entiendo qué faltó acá. Pero en líneas generales tiene sentido.

Yo tengo algo con el mar. Así que me gustó mucho el ambiente en el que planteaste tu historia. Hay cosas que me recuerdan a mí. Otras no tanto. Y está bueno saber que actualizas de vez en cuando. Ahora sigo con tu Songfic. Un beso, Yoru.

Awww~ Me muero de la ternura y un poquito, poquiiiito de pena con este final. Se sufre cuando se quiere, es parte, sin duda. Pero estas cosas me parten. ¿Cómo no contarle a todo el mundo lo feliz que sos al lado de otra persona? Pobre Daniel, pobre.

A todo esto, me encantó el nombre. Más que "Colores primarios". Ojo, no leí la otra historia. Porque, supuestamente, había que leer esta y eso hago. Me encantó el título, como te dije. 

Es un gusto saber que está terminada además. No soy de seguir historias largas. Pero esta se me hizo muy amena. Ya voy por el capítulo 4 y ni cuenta. Te felicito por la narración, va un buen ritmo, la verdad. Voy a seguir leyendo entonces. 

Ok. Acá, tengo que decir algo. Colgadísimo el comentario del jefe. Es decir, ¿qué le importa? Es su vida privada, qué se mete. Mientras no afecte su rendimiento laboral.

Entiendo, quizás, si el lugar es chico. Yo labure en un lugar muy grande, donde había putos y tortas e, incluso, una chica que se cambio de sexo. Y a nadie le importaba. No hace a tu trabajo y ningún jefe cuestionó nada. Sería ridículo. Enfin. 

Igual, tu punto es, justamente, el contrario, imagino. Me parece que querés demostrar que tanto en la familia, como en tu trabajo, tu sexualidad no puede llegar a ser un problema. Al revéz, el problema es ocultarla. 

El que tiene prejuicios es Julián, no Dani. Dos casos distintos. Bueno, sigo leyendo.