Choi Minho tomó una mala decisión, pero fue demasiado tarde cuando se dio cuenta de ello. Felizmente casado, y dueño de su propia clínica veterinaria, se interpuso de forma impulsiva en el camino de Lee Taemin, un asesino a sueldo que estaba a punto de hacer su trabajo, ganándose con ello la peor lección de su vida. Roto y despojado de todo lo que tenía sentido para él, se refugió en lo poco que le quedó para recuperar la normalidad de su vida y reunir las piezas de su propia existencia, hasta que el destino lo obligó a reencontrarse con su letal cazador, y enfrentarse en una nueva colisión con resultados sofocantes.

“Yo te quebré, tú me destruiste”

2min

Taemin llora ocultando su rostro, sintiéndose despreciable, manipulador y extremadamente solo como para soportarlo. Minho lo mira a los ojos, sereno y contemplativo, secando sus lágrimas y acomodando su cabello fuera de su rostro. Taemin levanta sus cristalizados ojos hacia el moreno, temblando lo besa torpemente, y le pide, que por favor, le haga sentir que vale algo. Minho sonríe, lo observa y limpia una lágrima que rueda por la mejilla del menor.

“Te haría el amor ahora mismo, justo como me lo estás pidiendo. Te haría el amor cada maldita noche, si me dejaras, pero no sería lo correcto, porque tú tienes el corazón roto, y yo, Taemin… no quiero ser el clavo que saca otro.”

¿Has pensado alguna vez en lo último que le dirías a la persona que amas?

Le dije que lo odiaba.
Lo último que le dije fue que lo odiaba.
Minho...
Ahora... dime qué hacer.