Resumen:

Resumen

 

Sesshoumaru e Inuyasha se quedan completamente solos en la época Sengoku, después de la muerte de sus esposas y de la partida de sus hijas. Sin un propósito ahora, Sesshoumaru invita al hanyou a que conozca y participe del cuidado de las tierras de su padre, lo que implica para el menor, un cambio drástico al tener que ingresar a la aristocracia youkai y sus normas.

En esta travesía, el yoki de Sesshoumaru y su cordura se pondrán al límite al estar en cercanía con Inuyasha, y mucho más, cuando se entera que otros youkai le proponen al menor la solicitud de emparejamiento.

 

−       Los humanos son frágiles y efímeros.  La sangre inuyokai perdura por varios siglos en el mundo y usted debe pensar en un ser que comparta esa longevidad con usted…  Tanto usted como Inuyasha tuvieron descendientes, las señoritas son seres fuertes, pero una criatura con su sangre pura y la mitad de Inuyasha, puede dar como resultado un mitad bestia fuerte o incluso, un inuyokai completo. 

 

¿Podrá controlar su instinto? O ¿tienen razón las palabras de su sirviente Jaken?

 

Nota: Fic con una secuencia alternativa de la serie Hanyo no Yashahime.

Sesshoumaru X Inuyasha

Resumen:

Koga adopta en su manada al medio demonio llamado Inuyasha, hijo híbrido de uno de los demonios más grandes y peligrosos, con el fin de tenerlo a su lado para proteger a los suyos. 

 

El tiempo pasa y este recompensa su actuar pero los tiempos están cada vez peor, la comida es poca, la necesidad de unir a las manadas es inminente, los demonios están buscando sangre y no es seguro que Inuyasha sea capaz de protegerlos siempre. 

 

¿Qué podría hacer para que el semi-demonio jamás los dejé?

 

Resumen:

Cuando sientes que esa persona en frente es la cuál esta destinado a enamorarte no te importa su estatus social, familia, raza, edad, linaje, apariencia, fuerza, dinero, género o sí tiene tú misma sangre. 

Lo único que importante es que te ame a ti y a nadie más. Y nada ni nadie podía cambiar eso . 

 

Resumen:

Gracias a una invocación, Inuyasha es transportado a otro mundo. Dicho mundo es parecido a los vídeo juegos populares que ha visto, pero al llegar se da cuenta de que se han equivocado pues el Rey Demonio necesitaba de una mujer y todo para concebir a los temidos Príncipes de la Calamidad. Por fallas técnicas, Inuyasha es obligado a engendrar a los futuros destructores del dominio humano y durante el transcurso del tiempo, Inuyasha se da cuenta de que tal vez no es tan malo ser la Madre de los Príncipes de la Calamidad.

|Historia SesshInu|

Resumen: En la antigüedad las altas clases decían ser diferentes al resto solo por el hecho de ser de sangre azul... 
 
Dicha condición se daba gracias a que las relaciones maritales se daban entre familiares, porque según la nobleza y la aristocracia. 
 
¿Quien mejor para ser tu pareja que alguien de tu propia familia? 
 
Sesshomaru era consciente que en la sociedad youkai, las relaciones entre familiares eran bien vistas, algo similar sucedía con las relaciones entre el mismo sexo debido a los distintos tipos de seres que existían, al menos en la casta de los Ino youkai. 
 
Pero... lo que nunca imagino ni en sus más locos pensamientos era que su yoki escogeria a su pareja destina la misma noche en que esta ultima llego al mundo. 
 
Solo basto una mirada para saberlo...
 
Saber que su pequeño hermano sería para únicamente suyo.
 

Resumen:

Tanabata. La fiesta que celebra el encuentro entre Orihime (Vega) y Hikoboshi (Altair). La Vía láctea, un río hecho de estrellas que cruza el cielo, separa a estos amantes, y sólo se les permite verse una vez al año, el séptimo día del séptimo mes lunar del calendario lunisolar. Ya que las estrellas sólo aparecen de noche y sin la luna. Sin embago, ¿esto puede significar lo mismo para la raza Y?kai?

  SessInu.

Resumen:

El tiempo lo cura todo, ¿Cierto?. Después de tanto tiempo, el príncipe decide volver al bosque a enfrentar su pasado para así poder vivir en paz su presente y tal vez, dar un paso hacia su futuro de la mano de un solitario demonio.

Los personajes no me pertenecen, créditos a su autor.

Saga ''El Bosque: Segunda parte.''

 

Resumen:

— ¿Qué ganas con hacer esto? — preguntó Inuyasha con su tono de voz sonando adolorida.

 

—He esperado mucho tiempo para esto. Verte sufrir por lo que me hiciste, tú y esa sacerdotisa. Por desgracia, ella ya no está— contemplo a Inuyasha, con una mirada en sus ojos como si recordara algo— ¿Sientes la impotencia y el dolor?

Resumen:

Hace quinientos años atrás, se dice que en las cordilleras más profundas de esta región habitaba un temible demonio. Quienes aseguran haberlo visto lo describen como una criatura despiadada, con la apariencia de un perro gigante, de pelaje blanco como la nieve y ojos rojos, tan rojos como la sangre fresca.

Muchos dicen que se trataba de una bestia poseedora de una ira incontenible, no discriminaba entre humanos o demonios a la hora de masacrar a quienes merodearan sus terrenos.

 

Nadie nunca supo el nombre de la criatura, y nadie nunca necesitó saberlo. Su sola mención era augurio de tragedias y desgracias, todo ser vivo simplemente anhelaba jamás contar con la mala fortuna de verse en su camino.

 

 

Transcurrieron doscientos años de absoluta paz, sin embargo, durante una noche la ira del demonio parece haber despertado repentinamente, amenazando la vida de cada criatura en la región. Aparentemente, lo único que mantiene al demonio en calma ha desaparecido.

 

Él no quiere asesinar, no quiere masacrar, sólo quiere de regreso lo que es suyo.

Resumen:

Inu Yasha es un chico que ha vivido toda su vida en un circo, aprendiendo más de un oficio en el transcurso de los años, viviendo con Kouga tras la muerte de su madre. Quien le dio un collar de perlas blancas que se dividían por una especie de colmillos del mismo color cada cinco piedras…

“no puedo evitar que ocurra, este collar te ayudara a mantenerte vivo… solo espero no caigas. No me odies cariño mío; tus ojos lloraran lágrimas de sangre, tu corazón pedirá clemencia… no debes flaquear, no te dejes vencer mi pequeño y amado Inu Yasha…”