16. INVIERNO
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-Mami, vamos a hacer un muñeco de nieve.
Taiga vio como su pequeño Terry corría de un lado para el otro y él ya estaba agotado. Había dejado la empresa a cargo de la directiva por unas semanas mientras ayudaba a Tezuka y Leo con el muevo bebé. Había nacido una hermosa niña, piel clara como su madre y cabello azulado como su padre. La habían llamado Himeko y tal como decía su nombre, era toda una princesa.
El asunto es que por tanto ir de aquí para allá, es que Taiga había quedado agotado.
No así Terry que parecía que con el frio del invierno se había activado. Claro, ahora su bebé de casi dos años sí podía disfrutar de las diferentes estaciones del año y al parecer, igual que su hermano mayor, era algo reacio al calor, por lo que con la llegada del frío invierno su niño dormido por el sol había vuelto a nacer.
-¿Qué tal si vamos por papá y que nos acompañe a jugar? -preguntó esperanzado, así Daiki se haría cargo de su bebé mientras él descansaba un poco.
-No quiero -dijo el niño arrugando el entrecejo- quiero ir sólo con mamá a hacer un muñeco de nieve.
-Oh, que divertido -dijeron desde la entrada.
-¡Leo!
El pequeño corrió torpemente moviendo de más sus piernitas hasta llegar donde su hermano que lo alzó en el aire haciéndolo reír.
-Ve a dormir un rato, papá, yo iré con Leo a pasear un rato mientras Tezuka y Hime duermen.
-No te preocupes, tú también estas cansado.
-Papá, por favor, Himeko no despierta en la noche como lo hacía Terry y es tan callada que si no se quejara a veces creería que es muda.
Y es que era verdad, su nieta era la cosa más calmada que había.
-Bien, vayan a disfrutar de la nieve, peor abríguense, no quiero tener que estar cuidándoles la fiebre.
-Tranquilo -dijo caminando con Terry a la habitación para abrigarlo, en cuanto volvió a la sala para despedirse de su papa, Taiga estaba dormido en el sillón-. No hables, Terry, o mamá se despertará.
Terry se tapó la boca para hacer caso a su hermano y vio como Leo fue por una manta para cubrir a mami que estaba dormido. Cuando su hermano hubiera tapado a Taiga fue con él y lo cargó en brazos para salir de casa, pero entonces en la puerta estaba entrando su padre.
-¿Y ustedes? -preguntó Daiki besando las mejillas de su bebé y desordenando los cabellos de Leo.
-Mamá está durmiendo.
-Está cansado, así que llevaré a Terry a jugar con la nieve.
-Sí, tu papá no es bueno con el clima de invierno.
-Te lo encargamos entonces -dijo Leo saliendo de la casa.
Daiki caminó a la sala y efectivamente, su esposo estaba dormido, sonrió de lado al recordar la infinidad de veces que esto había pasado. Taiga era nulo para el frio del invierno, a pesar de que uno de sus deportes favoritos fuera el snowboard. Quizás con los años las cosas cambiaban.
Se sentó junto a Taiga y lo acomodó de tal forma que quedara apoyado en su pecho, se tapó junto a él y prendió la tv en volumen bajo para no despertar a su pareja, viendo como el sol frio de invierno entraba por la ventana para iluminar con sus últimos rayos del día.
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.Fin