POV GRAY
Todo estaba perdido, o al menos eso fue lo que pensé pero cundo vi a Erza levantarse con toda su fuerza supe que sería muy cobarde rendirme sin pelear.
-¡Gray! ¡Natsu! Es solo una ilusión.- Con espada en mano voló hacia él y de un solo despliegue de su magia rompió la ilusión que muy idiota había hecho.- Nada de esto es real.- Todo volvió a la normalidad.
-¡Malditos!- Viéndose acorralado salió volando a todo lo que dada ¡Estaba huyendo! El muy desgraciado se iba después de no conseguir nada, ni Nirvana ni lo más importante a Natsu.
-No te dejare escapar.- Natsu estaba por seguir a Erza que había salido detrás de ella, pero se detuvo al ver como caía producto de todo el dolor y esfuerzo que hasta ese momento había hecho.- ¡Gray! ¿Estás bien?- Evitando que cayera y me hiciera más daño del que ya tenía Natsu me sujeto fuertemente.
-Tranquilo, estoy bien.- Me incorpore teniendo en mente solo un objetivo ¡Atrapar a ese hijo de perra! No iba a permitir que ese bastardo se escapara, no sin antes hacerle pagar por todo lo que hizo, además si él se iba había posibilidad de que regresa por Natsu, y eso en definitiva no lo puedo permitir.- Ven tenemos que ayudar a Erza.- Ella era fuerte, pero es de un demonio del que estamos hablando.
-¿Estás loco? Ve como te encuentras y aun así quieres ir por el.- Trataba de detenerme sentándome en el suelo mientras me explicaba el por qué yo no podía ir tras el.- Estas muy herido.
-¿No lo entiendes? Ella no va a poder sola, y si lo dejamos nada de lo que hemos hecho valdrá la pena.- ¿De verdad no lo entendía? ¿O no lo quería entender? Fuera cual fuera la razón, cada segundo que perdíamos discutiendo era muy valioso.
-¡Maldición Gray! Apenas y puedes pararte ¿Y quieres pelear? No te dejare, no dejare que te hagan más daño.
-Natsu, escucha.-Con mis manos tome su hermoso rostro para perderme en su ojos verdes.- Nada, y escúchalo bien, NADA de lo que paso fue tu culpa. Yo decidí sacrificarme porque te amo ¿Si? Porque tú, eres lo más valioso que tengo, y nunca me perdonaría si te hicieran daña sabiendo que lo pude evitar, así que por favor.- Me fui acercando a él hasta que nuestros labios se rosaron. – Deja que te proteja.- Lo bese tiernamente siendo correspondido con la misma dulzura. Cuando me separe de él aproveche que seguía perdido en el beso que le di, y recogí mi espada y Salí aunque él me grito que no lo hiciera.
Corriendo Sali del centro pude visualizar no muy lejos de ahí la pelea de Erza contra el demonio, y si era honesto la cosas se veían bastante mal para ella, pues con mucha dificultar lograba esquivar sus ataques de magia negra.
-¡Erza!- Volando muy rápido Natsu se unió a ella complicándole las cosas al imbécil de Midnight, y obviamente yo no me iba a quedar atrás así que atacando desde el suelo lanzaba todos mis ataque ayudándolos pues no tenía planeado dejárselos solo a ellos ¡de por si era difícil!
-¡Natsu!- El salió volando cuando recibió un puñetazo verdaderamente brutal. Ignorando todo corrí a donde él había caído.- Natsu…-De su boca salía un hilo de sangre mientras su respiración era pesada y forzosa.
-E-estoy bien, tu solo quédate aquí.- No estaba bien, la parte donde había recibido el puñetazo se estaba poniendo morado con tonalidades negras ¡Lo había golpeado con magia oscura! Como pude se puso de pie y voló sin rumbó hasta donde se encontraban peleando una ya casi inexistente Erza que al igual que Natsu estaba siendo golpeada cada vez con más intensidad por la magia de Midnight.
-Natsu.-Sin poder evitarlo observe con terror como Midnight batía a Natsu de golpes.- Detente…-Me sentía inútil, Erza ya había caído, ahora solo quedábamos Natsu y yo.- Para.- Me quede helado cuando de la nada la espada de Natsu había volado hasta donde yo estaba ¡Lo había desarmado! Estaba indefenso y lo peor es que él era sostenido del cuello de manera dolorosa.- No…
-Es tu fin Natsu Dragneel, al fin mi venganza será consumada.- En su mano reunió magia dispuesto a atravesar su corazón con su mano.
-¡No!- Con mi mano izquierda tome mi espada mientras que con la derecha tomaba la espada de Natsu, y aunque al principio me costó trabajo manejarla pues no era de mi magia, me supe adaptar gracias al vinculo que él y yo compartíamos. Con ambas espadas desplegué mis alas aceptando el hecho de que las perdería después de esto, pero yo estaba dispuesto a pagar el precio ¡Todo por el bien de Natsu! Soportando un inmenso dolor que recorría una y otra vez mi cuerpo volé como hacia un tiempo no lo hacía, y sin bacilar lo atravesé con las dos espadas aprovechando de que él estaba distraído dejándolo sin posibilidad de evitarlo.
-¿C-como?-Sus ojos se abrieron al ver como de su pecho salían dos espadas cortándolo.-Se supone que tu…-Escupió sangre a la vez que soltaba a Natsu.
-Gray, tu…No.-No soporte mas y solté la espadas mientras mi alas se volvían negras dejando de responderme logando que cayera al suelo.- ¡Gray!-Natsu al ver que caía se lanzo por mi sujetándome solo a unos cuantos metros antes de tocar el suelo.- Gray, tus alas…-Empezó a llorar a la vez que se lamentaba.
-T-tranquilo.-Varios espasmos recorrían mi cuerpo mientras sentía dolor causado no solo por mis heridas físicas, sino también por las heridas emocionales.
-¿Por qué Gray? ¿Por qué?- Me tenía entre sus brazos con la mitad de mi cuerpo en su regazo mientras mis alas, reposaban igual en sus brazos.
-No podía permitir que te hicieran daño.- No me arrepentía de nada.
-Lo siento.- Me abrazo fuertemente mientras lloraba inconsolablemente.
-¡Natsu-san, Gray-san!- Wendy llego corriendo y al ver mi alas ella también empezó a llorar.- Gray…-san.
-Tranquila Wendy.- Trate de sonreí pero no podía. Aun en shock toco mis alas.
-Gray-san.- Con su magia fue disminuyendo mi dolor pero no importaba cuando intentara el color de mis alas era definitivo ¡Las había perdido!
-Malditas escorias…-Todos nos paralizamos al escucharlo. De pie y visiblemente al borde de la muerte Midnight.- Esto no es el final.- Sus dientes rechinaron y Natsu se puso en frente de nosotros protegiéndonos.-Puede que no te haya matado pero me llevare lo que más amas.- Tras decir eso se lanzo contra mí, y ni Wendy ni Natsu pudieron evitarlo.
-¡Gray!
-¡Gray-san!
En cámara lenta todo paso ate mis ojos, el se lanzo con todo contra mi atravesando con su mano mi pecho, justo en mi corazón, después su rostro se acerco al mío para dedicarme una sonrisa de burla al verse lograr su cometido, pero esa sonrisa se esfumo cuando envuelto en llamas Natsu lo alejo terminando con su existencia de una vez por todas.
-Gray.-La herida de mi pecho sangraba y como era de esperarse se llenaba de magia negra la cual se extendía como veneno por todo mi cuerpo.- Resiste Gray.- Ya no podía moverme, mis ojos se cerraban y me costaba mucho abrirlos ¡Estaba muriendo! Eso ya era inevitable.- ¡Wendy!
-Natsu-san, Gray-san…-Negó con su cabeza varias veces.
-¡No! Me niego, tú no puedes morir.- Espesas lágrimas recorrían su rostro.- No me puedes dejar.
-Lo siento Natsu.- Con toda mi fuerza toque su rostro y me acerque a él plantándole mi último beso.- Te amo…-Todo se volvió oscuro, al fin la muerte me había alcanzado separándome de mi amor, pero como ellos recitaría mi última oración, pues este no era el final…