Era el momento en que el verano caluroso había terminado para comenzar a darle paso a los signos evidentes del otoño.
Rick y Davis habían salido de picnic por el parque así que, mientras caminaban por una avenida arbolada, bajo un par de farolas, Rick abrió la boca y miró al cielo, diciendo:
"El día está hermoso".
"Así es."
Los árboles seguían teniendo follaje, pero los colores habían cambiado considerablemente. Además, cada vez que caminaban, escuchaban un crujido porque las hojas habían caído por aquí y por allá.
"Siento que se parece al del mar."
"Sí, tienes razón. Fue divertido, ¿No?"
Rick y Davis fueron a varios lugares desde que comenzaron a salir en primavera. Visitaron el zoológico, el jardín botánico y, en el verano, fueron al mar, las montañas, los ríos y los lagos. Salieron a la ciudad y comieron mucho. Fueron al parque de diversiones y a un parque acuático por lo que el auto de Davis (una camioneta negra y gruesa que Rick llamaba "el Davis mayor"), que estaba en el garaje, había estado muy activo últimamente.
"Pero, en el mar..."
Por alguna razón, el Davis que había estado sonriendo hasta hace un momento ahora pareció ponerse de un terrible mal humor. Hasta arrugó la parte que estaba entre sus cejas. Rick pensó "¿Odia ir al mar?" Por un momento, pero pronto se dio cuenta de la causa verdadera:
"Ah, tal vez... Davis, ¿Todavía estás preocupado por lo que pasó con ese hombre?"
"Por supuesto que sí."
Rick dejó caer su cola mientras miraba las arrugas en su frente. Cuando fueron a nadar al mar, Rick comenzó a recibir un montón de palabras extrañas de un hombre bestia de tamaño mediano. Era más como una broma que como una manera de coquetear, pero ciertamente dio miedo y fue desagradable. Después de todo y aunque había recibido ayuda de Davis, al parecer el oso tenía una memoria muy buena para ese tipo de eventualidades.
"Bueno, pero ya pasó."
Davis seguramente sabía que lo que había sucedido en el pasado no se podía borrar, así que simplemente tenían que pasar la página. Por muy lamentable y terrible que fuera. Sin embargo, desde entonces y cuando iban a lugares muy concurridos, Davis no dejaba a Rick solo ni una sola vez. Se pegaba firmemente a un lado y le tomaba de la mano si existía la posibilidad.
"También voy a protegerte si comienzan a decirte cosas sucias, Davis."
Rick intentó eliminar la tensión del momento. Extendió sus manos y movió su cuerpo ágilmente para que pareciera como si fuera un hombre muy musculoso. Entonces, cuando sacudió su cuerpo de lado a lado y dijo "Diré algo como: Cállate tú, no molestes a mi hombre", como esperaba, Davis estalló en carcajadas.
"Jajaja, Rick..."
Después de reír por un momento, Davis se sostuvo la boca y trató de decirle algo. Sin embargo, Rick hizo un movimiento para bloquearlo:
"¡Salgamos mucho en otoño para hacer recuerdos agradables!"
Cambió la historia un poco a la fuerza. Davis probablemente lo sabía, pero después de todo lo que había pasado, se tragó las palabras de queja una por una y asintió. Rick sonrió, pensando que le gustaba mucho cuando lograba distraerlo de los malos pensamientos.
"Estoy deseando que llegue, porque es divertido ir a cualquier parte con Rick".
Rick no tuvo más remedio que reírse ante Davis, quien continuaba hablando con una increíble y ya muy conocida franqueza. Después de rascarse la cabeza por un rato y de avergonzarse lo suficiente como para ponerse rojo, Rick señaló la canasta de Davis.
"... Ah. Por cierto, hoy fue nuestra primera salida de otoño así que hice un sándwich especial".
Al escuchar las palabras de Rick, Davis levantó la canasta en su mano y ladeó su cuello ligeramente.
"¿Sándwich especial?"
"Tiene queso y salmón ahumado"
"¡Oh!"
"Traje un sandwich de pollo, un sándwich de croquetas de calabaza y uno de atún."
"Genial".
"Y de postre ¡Castañas con crema!"
"¡Todo se ve delicioso!"
Bueno, ciertamente Davis tenía los ojos brillantes.
"Los sándwiches de Rick siempre están deliciosos."
"Muchas gracias."
"No solo los sándwiches, todo lo que haces siempre es muy rico ¡Eres increíble!"
"Jajajaja, basta."
Mientras escucha las palabras de Davis, que repetía "realmente delicioso" o "todo es delicioso." como un niño, Rick pisoteaba las hojas caídas de los árboles. Los honestos cumplidos de Davis lo picaban como si fueran las alas de un pájaro haciendo tictac en su piel. En otras palabras, en realidad se sentía muy feliz con todo eso.
"Si tienes algo que quieras comer, por favor dímelo en cualquier momento. ¡Oh! ¿Cuándo es el cumpleaños de Davis? Quiero hacer un pastel para celebrarlo".
Davis, que pensó sería feliz con eso, hizo una mueca delicada por alguna razón.
"¿Mi cumpleaños?"
"Si, tu cumpleaños".
"Mi cumpleaños fue... El mes pasado."
"¿¡Eh!?"
Le sorprendió tanto escucharlo que de repente lanzó una voz muy estúpida. Al verlo, Davis se puso un poco incómodo.
"¿Me dijiste?"
"No lo hice."
"¡Eso está mal!"
Rick, que abrió los ojos por un momento, negó con la cabeza rápidamente.
"¿Por qué está mal?"
"Bueno, porque es el cumpleaños de mi novio."
Rick movió su pie para pisar el suelo en el acto, como si estuviera muy, muy enojado con Davis por no decirle algo así. Las hojas y las ramitas que aplastó hicieron mucho ruido.
"¡El cumpleaños de un novio es importante!"
"¿Tú crees?"
La atmósfera le gritaba que Davis no entendía por qué Rick estaba tan indignado al respecto. Eso también era irritante y frustrante así que Rick movió sus labios para volverlo a regañar:
"¡Es un evento importante!"
Rick apretó el puño hacia Davis, quien pareció todavía considerablemente confundido.
"¿Es así?"
Para Rick, Davis era su primer pareja. En otras palabras, nunca había experimentado la importancia de asistir al "cumpleaños de un novio". Era algo que quería hacer, una forma de demostrarle que lo amaba.
"¡Y no me dijiste nada! ¡Lo peor es que no fue ayer ni la semana pasada, sino el mes pasado!"
"Lo siento. No pensé que fuera algo tan importante".
"¡Pues lo es!"
Una hoja cayó sobre la cabeza de Rick, que seguía gritando. Después de mover las orejas y quitársela de encima con más brusquedad de la necesaria, se volvió hacia Davis-san y gritó: "¡Te haré una fiesta de cumpleaños!"
"¿En serio?"
"Ha pasado un tiempo, pero estoy seguro de que todavía puedo hacer algo grandioso para ti. Déjame mostrarte".
Davis se llevó la mano a la barbilla y dijo: "Si es así, entonces yo también quiero celebrarte. ¿Cuándo es el cumpleaños de Rick?"
"¿Yo? Oh, pues es la semana que viene."
Davis aplaudió y dijo "¡OK!" Muy alto cuando anunció la fecha, que se acercaba inesperadamente.
"¡Voy a festejar tu cumpleaños!"
"¡Festejaré el de Davis también!"
Davis asintió con una mirada más seria de lo habitual.
"¡Yo te celebraré grandiosamente!"
"¡Mi celebración será mil veces más grandiosa!"
"¡Lo que yo voy a hacer ya es grandioso aunque no lo puedas ver!"
"¡Lo mío es tan grandioso que quiero que se repita incluso aunque no a pasado!"
Sintieron que la dirección de la conversación había cambiado considerablemente pero, por alguna razón, los dos hombres ya tenían un fuego ardiente en el pecho.
"¡Hagamos una batalla decisiva de cumpleaños para ver cual es la mejor!"
La tensión corrió entre ellos.
"¡Pues muy bien!"
El aire otoñal era cálido cuando Rick y Davis extendieron sus manos de la nada, apretándose y estrechándose los dedos. Mirándose el uno al otro en la carretera bordeada de árboles donde bailaban las hojas caídas.