AL FINAL
Capítulo Uno
Frente a frente
Por Anako Hiten
“Nuevamente estoy frente a ti
Nuevamente te ríes de mí
Mi alma no es de acero
Mi corazón no es de piedra
Salvarte del abismo es lo que más quiero
Arriesgando mi vida sea como sea”
En aquel gran claro, pudo ver al muchacho de azulados cabellos y piel de porcelana, luciendo el mismo frío rostro de siempre, pero con un visible vacío en sus ojos de ébano. Su cuerpo, muy bien desarrollado, le hacía ver un par de años mayor, y sus ropas eran casi las mismas que llevaba desde su último encuentro, cuatro años atrás. Era la segunda vez que le veía desde que partió con Orochimaru.
— Usuratonkachi¿has venido a buscarme otra vez? — le preguntó acercándosele a paso lento— ¿No tienes acaso una vida que llevar?
El rubio no apartaba sus ojos azules de los negros que le observaban con arrogancia.
— ¿Tanto me necesitas, que no puedes vivir sin verme?
— Sí… te necesito, Sasuke… más de seis años…y ya no puedo… estoy demasiado--
— ¡Cállate! —le gritó el moreno deteniéndose a lo lejos— ¡Sólo me necesitas porque crees que si me llevas de vuelta a Konoha te verán como un héroe! De seguro que toda la aldea te odia¿verdad¿Ya has comenzado a matar, Naruto?
El Uzumaki apretó sus puños con fuerza, apartando su vista de Uchiha. Era cierto, la aldea entera le dio la espalda por un arrebato violento del Kyuubi, que se apoderó enteramente de su cuerpo y alma durante un entrenamiento con Kakashi, donde casi le quita la vida a su maestro. Al enterarse todo el pueblo, muy pocos se le acercaban, y Kakashi estuvo en coma por largo tiempo. Luego de tanto rechazo, cada vez que le provocaban, alguien salía lastimado, pero era incapaz de recordar lo que ocurría.
— Sé que soy un monstruo, que no valgo nada… pero Sasuke… sé que aún puedo recuperarte, si logro salvar a mi mejor amigo, sabré que no soy un inútil…
A una velocidad impredecible, Sasuke se colocó cara a cara con el rubio, quedando a escasos centímetros el uno del otro. Naruto continuó hablando, con su afónica voz demarcada por la tristeza, y volviendo su mirada a la de su antiguo mejor amigo.
— Solamente vivo ahora para ayudarte a obtener lo que quieras… sólo el viento puede incrementar el poder del fuego…
— ¿Así que eso quieres? —una sonrisa cínica se dibujó en los labios del moreno— No Naruto, no necesito de ti. ¿Cuándo comprenderás que no eres necesario para nadie?
— ¡BASTA SASUKE¡Te estoy ofreciendo mi vida y mi poder para que lo utilices, así como el maldito de Orochimaru lo está haciendo contigo!
— No pienso perder ni un instante más de mi tiempo con un gusano patético como tú— le espetó Sasuke con dureza— Lo mejor es que desaparezcas¡das lástima!
En un parpadeo, el Uchiha desapareció. Intentando con todas sus fuerzas retener las lágrimas, no pudo y se quebró en su misma posición.
— Ya basta… ¿por qué me ha tocado vivir esto a mí¿Por qué encerraron a este maldito zorro en mi interior¡¡¡¡ES LO PEOR QUE ME PUDO HABER PASADO!!!!
— ¡Kakashi-sensei¡Sensei! —corría acercándosele una joven de cabellos rosados— Sensei… ¿volvió a huir?
El jounin de cabellos plateados asintió, estaba muy preocupado por Naruto.
— ¿Cree que se haya ido para siempre? La última vez que regresó…
— Sakura— dijo el maestro con voz muy seria— Deberías poder entenderlo. Ya Naruto no está bien, el Kyuubi le ha hecho mucho daño, tanto a nivel físico como mental… no creo que podamos hacer más por él…
— ¿Quiere decir que lo va a dejar así¿Van a seguir persiguiéndolo? —preguntó Sakura retorciéndose las manos en la falda.
— Hasta tú lo has abandonado, Sakura, eso fue lo que más le dolió. Yo quise hablarle, pero no quiere verme, piensa que va a lastimarme de nuevo.
Sakura bajó la cabeza, llena de vergüenza: sí, era cierto, abandonó a Naruto por temor a ser lastimada. Su estúpido egoísmo la alejó de un amigo que siempre se preocupaba por ella.
— Lo he buscado, no está. Seguramente salió de la aldea para buscar por su propia cuenta a Sasuke— dijo Kakashi leyendo una nota que parecía ser de la Hokage— Sakura, si ves a Naruto no le rehúyas, lo más seguro es que será la última vez que lo veas— añadió con tristeza, y desapareció con una nube de humo. La pelirrosa quedó pensando, no entendía lo que quería decir Kakashi con que sería la última vez que viera a Naruto… a menos que fueran a matarlo.
— No, Kakashi-sensei no mataría a Naruto… ¿o sí?
A veces mentir era muy doloroso; eso pensaba el Uchiha al desaparecer frente a Naruto. Tuvo que hacerlo, no podía soportar verlo así, y todo por su culpa. Vaya amigo que era. Sin embargo, no podía permitir que sus sentimientos interfirieran en aquel momento, ya todo estaba preparado para su gran venganza, y esperaba cumplirla más allá del cien por ciento.
— Naruto, volveré a tu lado… imagino que serás lo único que tendré al regresar a Konoha…
Dejó de pensar, activó su Sharingan y avanzó rápidamente hacia el este, en la búsqueda de su objetivo final.