MISION FACIL Y VERDADES INCOMODAS
Hades abrió los ojos de golpe y vio a su hermano viéndolo con esos ojos azules directo a los suyos, sonreía igual que cuando estaba por hacer una broma, y se sentía invadido en su espacio al tenerlo tan cerca.
-¿Por qué estás aquí?, apártate que estas demasiado cerca.
-Lo siento pero pensé que como tú no puedes salir yo podía entrar a conversar contigo.
-Que inesperado, de hecho yo pensaba mandarte llamar, y ahora que estas aquí puedo decirte lo que pensé anoche.
Estaba sorprendido y creyó que solo fue in incidente extraño y siguió su plan sin ser evidente en nada.
-¿Y de qué quieres hablar conmigo Hades?
-Quería proponerte que saliéramos hasta que se pusiera el sol, así podemos hacer algo los dos. –Las palabras de Hades eran un sueño, no creía lo que su hermano decía. –tú puedes decidir lo que hacemos, ¿Qué me dices hermano?
-¿Perdón? –Comenzó a divagar y no termino de escuchar, pero se moría de la felicidad al ver que todo sería más fácil de lo que creyó. –claro hermano te veré al atardecer si es lo que quieres yo te diré lo que haremos mas tarde.
Hades envió un mensaje al inframundo comunicando que no regresaría ese día como planeo y quizá se quedaría un tiempo en el Olimpo. No sospechaba nada de lo que sus queridos espectros hicieron en su ausencia de un día y como tenia completa confianza en ellos no pensó que podía ser mala idea.
-----------INFRAMUNDO-----------
Todos los que estuvieron es la fiesta se habían percatado que se pasaron en la hora, y algunos en las copas, ya que unas cuantas escenas nada buenas se veían en algunas partes del lugar de lo sucedido y otras sus respectivos puestos, la que más impacto dio fue una muy inesperada, y que ni los mismos jueces esperaban de ellos mismos. De un rincón salió Radamantys sin camisa y solo en calzoncillos, al darse cuanta dio un grito que despertó a sus hermanos.
-¡POR MIL DEMONIOS QUE ME PASO!
Aiacos estaba dormido sobre una mesa, despertó viendo a su hermano y después de caer en cuenta de lo que veía se apresuro a ver el lugar, pero lo que vio en un espejo no le agrado en nada. Estaba desnudo y cerca del Myu en iguales condiciones.
-¡Pero que hice!
Minos se asusto con los gritos que se escucharon, al despertar por completo vio el lugar, estaba en una cama desnudo y cuando creyó estar solo vio que a su lado unos cabellos plata se asomaban de la sabana, la levanto y solo pudo dejar escapar un grito.
-¡NO ME DEBI BURLAR DEL IDIOTA DE RADAMANTYS!
-¿Pero qué gritos son esos?... ¡ha!... ¡Minos!
-¡ha! ¡Lune!
-¿Minos?
-¿Lune?
Ambos dejaron escapar un suspiro aliviados.
-Menos mal que eres tú
-----------OLIMPO-----------
Hades estaba despierto sentado en una silla frente a un escritorio leyendo un libro, le parecía interesante el ingenio humano al crear esas historias extrañas, tanto que mandaba traer libros escritos por humanos y hoja tras hoja los leía incansable.
-No sé qué gusto le hayas a las tonterías humanas, por cierto ¿Qué lees?
-Pues leo un libro, acaso no vez. –Aunque fuera sorprendente Hades tenía su lado pícaro y socarrón. -No son tonterías, al menos ellos ocupan su tiempo en algo productivo, cosa dudo mucho tú hagas.
Lo volvía loco escuchar hablar así a hades, eso era lo que le gustaba, que hablara igual que él pero a su estilo jugando con los demás, lo veía como una forma más elegante pero hiriente de insultar.
-Es enserio la pregunta, ya sé que es un libro.
-Se llama “El perfume historia de un asesino”
-“Que interesante”, pero ya se va a poner el sol, quieres que te diga que quiero que hagamos.
-Claro te escucho.
Le dijo que se vieran en los escalones del área principal donde ya tenía todo preparado, solo le pidió estar dispuesto a no reclamar y atenerse a lo que pasara. Hades sabía que su hermano quería hacerle algo, por lo que llevo ropa con la cual correr sin sentirse atrapado.
Llego pronto al lugar y vio un blanco a distancia, su hermano lo esperaba recargado en un arco y jugando con una flecha, lo saludo y de sorpresa se sintió invadido de nuevo, no le gustaba que se acercaran tanto a él.
-Al fin, o acaso pensabas que algo te pasaría.
-No lo sé, quizá, quien sabe, posiblemente... –se contenía todo lo que podía, deseaba despedazarlo por provocarlo así, cada movimiento de esos dulces labios lo enloquecían, quería que fueran suyos, pero no como aquella vez.
-----------FLASBACK-----------
Era un secreto que lo hacía feliz, jamás imagino que entre ellos se hallara quien robo su corazón, desde que lo rescato de las garras de su malvado padre Cronos, no pudo evitar sentirse extraño, esa fina piel, sus ojos plateados como la luna, ese cabello negro como la misma noche, todo en el era perfecto.
Aquella noche después de proclamarse gobernantes absolutos celebraron todos juntos, pero su mirada seguía frenéticamente a aquel que lo hechizo desde que lo vio, aun no tenían donde quedarse, más que unas habitaciones que quedaron intactas, por ser tan pocas ambos como en un sueño se quedaron juntos, no lo podía creer, solo le faltaba saber cómo llamarle, la batalla les impido conocerse debidamente, pero, ya no era pretexto alguno.
-¿Qué es lo que ves?
-Nada, solo que pienso en muchas cosas.
-¿Qué cosas?
-Pues, como en lo que será de nosotros
-Nosotros podemos hacer lo que deseemos ¿o no…?
-Hades, ese es mi nombre.
Hades, aun mas misterio envolviendo a ese ser que era digno de ser llamado divino. Durmieron juntos aquella noche, uno no sospechando de lo que pasaba y el otro disfrutando de la cercanía.
-Debo hacer algo, ¿Pero qué?, no quiero que se despierte… tal vez si solo…
Se acerco a su rostro, tierno como un ángel, su respiración lenta y cálida a pesar lo frio de su piel lo llamaban, y finalmente lo hiso, puso sus labios sobre los de él en un tierno y secreto beso que marco todo, el dueño de los labios no se percato por la profundidad de su sueño. Se enredo en esos brazos y permaneció toda la noche abrazado a aquel ángel que deseaba fuera solo de él y nadie más.
-----------FIN DEL FLASBAK-----------
-A ¿claro?
Debía apresurarse a buscar la forma de que todo se volviera realidad, y el regreso de su hermano al mundo de los muertos le daría tiempo de pensar en algo calmada mente.
Y finalmente supo que había algo que haría quedara atado a él por la eternidad, Hades no se negaría con eso, y era lo mejor, ya que aunque él no lo quisiera no se podría negar, era algo muy importante, y no tomaría la decisión a la ligera, y si lo presionaba a responder rápido seria más divertido para él mismo.